Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
IC Magazine: Has vuelto a tus orígenes con el<br />
teatro clásico, y nada mas y nada menos que con<br />
Cyrano de Bergerac. ¿Cómo has recibido este<br />
papel? ¿Qué has tenido que hacer para afrontar<br />
este reto?<br />
José Luis Gil: Descubrí a Cyrano hace<br />
muchísimos años, cuando era un adolescente<br />
y estaba estudiando arte dramático. Es un<br />
personaje que me enamoró, pero nunca pensé<br />
que pudiera llegar a interpretarlo ya que mi<br />
vida profesional se ha desarrollado por otros<br />
caminos interpretativos. Es como cuando tienes<br />
una película o personaje favorito, pues Cyrano<br />
es mi obra favorita con un personaje que me<br />
parece absoltumante precioso y brillante. Y<br />
a estas alturas, se cumple mi deseo de poder<br />
interpretarlo. Así que lo he recibido con mucho<br />
cariño y mucha ilusión, pero también asumiendo<br />
todas las dificultades ya que hay que practicar el<br />
esgrima o desentrañar el verso de una manera<br />
fluída para que guste a todo el mundo y lo<br />
disfrute tanto como nosotros interpretándolo.<br />
IC M.: ¿Eres tan romántico como tu personaje<br />
de Cyrano? ¿Te has visto en alguna ocasión en la<br />
misma tesitura que Cyrano, teniendo que ayudar<br />
a un amigo a conseguir una chica sacrificándote<br />
tú?<br />
J.L.G.: (Risas) Al descurbir a Cyrano tan joven,<br />
seguramente en ese momento es muy posible<br />
que en esa preadolescencia ya me hubiera<br />
fijado en alguna chica cinco anos mayor que<br />
yo y que ella a su vez estuviera enamorada de<br />
otro cinco años mayor también. Así que era<br />
un imposible pero me permitía echar algún<br />
garabato pensando en ella. Y eso al final, es una<br />
manera de ser Cyrano. Por supuesto, debido<br />
a la nariz estaba totalmente censurado por<br />
mí mismo a la hora de hacerle llegar cualquier<br />
indicio que le hiciera sospechar que me gustara<br />
o que me había enamorado. Aunque Cyrano lo<br />
hace de una manera más madura, pero también<br />
es esclavo de algo tan de moda como lo es el<br />
aspecto físico. Un hombre brillante en todos los<br />
sentidos, -es músico, dramaturgo, astrólogo y<br />
un maravilloso cadete reconocido y temido- y a<br />
veces, hasta pendenciero. Pero a la hora de ver<br />
la obra, te das cuenta de que el motor de su vida<br />
es un amor no correspondido que no se atrevió<br />
a confesar a nadie.<br />
IC M.: Con todos los trabajos que tienes en tu<br />
carrera, ¿te molesta que la mayoría de la gente te<br />
conozca como Juan Cuesta, Enrique Pastor, o “el<br />
que dobló al padre de Nemo/Buzz Lightyear”…?<br />
J.L.G.: No me molesta en absoluto porque son<br />
referentes de mi carrera, unos en doblaje y<br />
otros en televisión. Gracias a ellos, estoy ahora<br />
haciendo Cyrano. Y antes de eso, “Si la cosa<br />
funciona” de Woody Allen, o “Fuga” de Jordi<br />
Galcerán, etc… Antes de los personajes de Juan<br />
Cuesta o Enrique Pastor era doblador, locutor,<br />
actor desde los 13 años donde nadie venía<br />
a ofrecerme ninguna obra de teatro. Estuve<br />
muchísimos años haciendo otras cosas en las<br />
que me ha ido muy bien, pero donde surge todo<br />
es en un fenómeno mediático como “Aquí no<br />
hay quien viva” o “La que se avecina”. Puede<br />
tener una parte incómoda como cuando sales<br />
del teatro y te llaman Cuesta en vez de José<br />
Luis (risas), pero entiendo que te ven todos<br />
los dias en la televisión y es lo primero que les<br />
viene a la cabeza. Eso sí, cada vez más gente<br />
joven se acerca sabiendo donde he trabajado y<br />
queriendo que les firme dvds de películas que<br />
han sido referentes de su niñez. Por lo tanto, les<br />
estoy muy agradecido a esos personajes, porque<br />
si te ponen en el escaparate y vuelves a hacer<br />
proyectos como Cyrano, disfrutas cada noche en<br />
el escenario.<br />
IC M.: Has hecho teatro, doblaje, cine, television,<br />
direccion de cortometrajes… ¿te falta algo por<br />
probar?<br />
J.L.G.: Ahora mismo no tengo grandes<br />
inquietudes, dirigí un cortometraje con muy<br />
pocos medios simplemente porque había<br />
escrito un guión y para estar metido en<br />
un cajón preferí hacerlo realidad. También<br />
tengo algún otro vídeo que he escrito y que<br />
posiblemente me decida a hacerlo algún día por<br />
la misma razón. Para que deje de ser papel y<br />
pueda contar esa historia que a mi me apeteció<br />
escribir en su momento y que por algún motivo<br />
me remueve algo. De hecho, yo no tenía en<br />
mente hacer la obra de Cyrano, siempre pensé<br />
que disfrutaría muchísimo viendo como otras<br />
personas lo interpretarían. Pero finalmente,<br />
gracias a Ana Ruiz y a Alberto Castrillo Ferrer<br />
y a toda la gente que se unió a la produccion,<br />
hemos podido cumplir el sueño. Pero más<br />
allá de eso, no tengo más pretensiones en<br />
ninguno de los medios porque no quiero más<br />
frustaciones de las que la propia vida y la propia<br />
profesión te da todos los días. Quiero que lo<br />
que se me presenta a nivel de trabajo, sea la<br />
mayor oferta posible para poder elegir algo<br />
que me guste y disfrutarlo al máximo. Y por<br />
ahora, es salir al escenario y pasármelo bien<br />
disfrutando lo que haga, que afortunadamente<br />
ahora estoy en ello tanto con la serie de<br />
televisión como con el teatro.<br />
IC M.: ¿Crees que la gente joven se siente atraída<br />
por obras teatrales tan clásicas como Cyrano de<br />
Bergerac? ¿Es exigente el público español?<br />
J.L.G.: La gente que viene a ver esta obra es<br />
gente de casi todas las edades, y hay bastante<br />
gente joven, aunque al ser en verso es probable<br />
que se le tenga un poco de miedo. Pero lo único<br />
que hace el verso es dimensionar la palabra