03.10.2018 Views

arlt 300

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

ROBERTO ARt-T<br />

ra atrás con el sombrero en la mano y al llegar al final del<br />

pasillo exclama:) ¡Pueden despellejarlo tranquilamente,<br />

que yo no diré palabra! Quien mal anda mal acaba.<br />

\<br />

ESCENA IV<br />

TRESCIENTOS MILLONES<br />

Rocambole, la Sirvienta, Compadre Vulcano y la<br />

Cenicienta.<br />

Rocambole: Bueno..., ahora que estamos solos vamos<br />

a conversar, amigo Vulcano. ¿Dónde está tu legítima<br />

esposa?<br />

•<br />

Vulcano: En la cárcel.<br />

Rocambole: ¿Tus hijos?<br />

Vulcano: En presidio.<br />

Rocambole: ¿De manera que toda la familia veraneando?<br />

Vives más tranquilo y solitario que un canónigo.<br />

Los parientes no te molestan.<br />

.<br />

Vulcano: Ni la policía tampoco. Me he regenerado,<br />

vivo, y os juro, señor Rocambole, que no hay satisfacción<br />

más grande que vivir honradamente. (Volviéndose<br />

a la Sirvienta.,) ¿Así que usted es la esposa de<br />

este digno caballero? ¡Qué orgullo debe de ensanchar<br />

su corazón de matrona virtuosa al tener por marido<br />

a tan grande hombre!<br />

Sirvienta: ¡Cállese! (Vulcano intenta dar un paso más<br />

adelante.)<br />

Rocambole: Queridito..., como te muevas otra vez te<br />

86

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!