Ideas 20190526

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Página SIETE Domingo 26 de mayo de 2 019
EUROCÁMARA
Fe d e ra l i s m o
Emmanuel Macron: Una UE
coordinada y poderosa
5
ideas
l Macron quiere que la UE ocupe un lugar más nítido en el escenario mundial, ya sea a través
de la lucha contra gigantes de la red global, o en la competencia comercial con EEUU y China.
Para Emmanuel Macron,
Viktor Orbán es un excelente
oponente. Para Macron,
el húngaro es el representante
de un nacionalismo
ciego. Desde ese punto de vista,
Orbán no está en la escala de la derecha,
en términos franceses, sino
en el extremo.
Macron habla y escribe sobre
cómo convertir a Europa en algo
grande, para lo que propone que
los jefes políticos y los ciudadanos
abran sus mentes. Los escritos
y discursos de Macron se
concentran en Europa y no en el
organismo supranacional.
Escenificó sus discursos simbólicamente,
por ejemplo, en la
Acrópolis de Atenas o en la Universidad
de la Sorbona de París.
Recientemente publicó un artículo
de debate en 30 diarios europeos,
lo que refuerza la imagen
de Emmanuel Macron como una
variante contemporánea de Napoleón.
El proyecto, se dice que fue
cuidadosamente elaborado, tiene
el título de Renovación de Europa
y contiene tres ambiciones:
libertad, protección y progreso.
Macron quiere que la UE ocupe
un lugar más nítido en el escenario
mundial, ya sea a través de
la lucha contra gigantes de la red
global, como Google o Facebook,
o en la competencia comercial
con Estados Unidos y
China. Quiere proteger a los ciudadanos
socialmente con salarios
mínimos garantizados.
En otras áreas tiene propuestas
para una policía común de
fronteras y, algo muy importante,
más cooperación en el rubro
de defensa y seguridad, que implicaría
en el tiempo un remplazo
de la OTAN por una fuerza europea
propia.
Hay que recordar que Francia es
uno de los poseedores del arma
atómica, lo que podría convertirlo
en el paraguas nuclear de Europa.
Esa tesitura fue muy combatida
por los ingleses que confían más
en la alianza con EEUU.
Hasta ahora, Macron no ha logrado
el apoyo de los países
miembros de la UE para exigir
impuestos a los gigantes de la
red, tampoco para un presupuesto
común en la zona euro y
mucho menos para una defensa
común, pues, sigue habiendo
atlantistas incluso sin la presencia
del Reino Unido. Bálticos y
Carlos
D e cke r- M o l i n a
Pe r i o d i sta
boliviano
radicado en
Suecia
“Ma -
cron también
sabe
que la dinámica
de la
UE cambiará
cuando
los británicos
finalmente
se
vayan. Sobre
todo en
el Consejo
de Ministros
y en las
cumbres de
los Jefes de
Estado y de
G obierno”.
AFP
EmmanuelM a c ro n
u • 41 años, presidente
francés desde mayo de 2017.
u • Su partido A Marche
(En Marcha) junto con su socio
Modem, tiene el 61% de los escaños
en la Asamblea Nacional
Francesa. No tiene un sistema
electoral proporcional.
u • En la última encuesta
sobre las elecciones de la UE,
En Marche es la favorita del
23% de los votantes. El Frente
Nacional (cambio el nombre
por Convergencia Nacional)
de Marine Le Pens, tiene
22%.
polacos y rumanos creen más en
la ayuda bélica de EEUU.
El presidente francés siembra
y espera que el tiempo hable por
él. Sus allegados señalan que es
un hombre con paciencia.
Otro de sus propósitos, el
más interesante, es contar con
eurodiputados elegidos de las
listas de partidos transnacionales,
lo que permitiría que los
votantes suecos podrían emitir
su voto por candidatos de otros
países europeos. El proyecto
Macron fue rechazado por el
Parlamento Europeo, pero hay
una cimiente que ha provocado
un debate transversal en el cont
i n e n t e.
Macron y su grupo En Marcha
han decidido implementar el
proyecto por cuenta propia. En
Francia hay ciudadanos extranjeros
entre los candidatos al Europarlamento.
El debate electoral
continental, sin duda, se habría
vuelto más interesante si
En Marcha hubiera existido como
una alternativa europea para
los liberales de todo el continente,
muy castigados por el
electorado local.
Ello habría implicado también
listas transnacionales socialistas,
los verdes europeos.
Los ultranacionalistas probablemente
habrían conseguido
una lista común, pero, es más
difícil juntar la familia extremista
porque sus proyectos no
son convergentes.
Emmanuel Macron también
sabe que la dinámica de la UE
cambiará cuando los británicos
finalmente se vayan. Sobre todo
en el Consejo de Ministros y en
las cumbres de los Jefes de Estado
y de Gobierno. Reino Unido
es o ha sido un socio con exigencias
y condiciones, algunos estados
miembros consideran a
Londres como la cabeza de
puente de Estados Unidos.
Un experto me relató la historia
de los “frenos a la movilidad
ciudadana”. Cuando iban a ser
incorporados los expaíses comunistas,
éstos habían pedido
frenos a la movilidad para evitar
que “su inteligencia” los deje
por mejores salarios en países
más desarrollados de la Unión.
Fueron los ingleses que se opusieron.
Pasado el tiempo los ingleses,
vía Cameron, plantearon
los “frenos ”para evitar la inmigración
y el “dumping social”.
Los primeros en oponerse fueron
los excomunistas; además,
Reino Unido pretendía 30 años
de freno a una de las cuatro libertades.
En una última reunión llegaron
al acuerdo de siete años de
frenos, intentando convencer a
los ingleses, pero Cameron decidió
por el plebiscito que aún no
se soluciona porque el resultado
no fue el esperado por el gobierno.
Por eso la salida de Reino Unido
puede ser decisiva para la
aceptación de las propuestas de
Macron, no solo porque el oponente
más conspicuo al federalismo
de la Unión ha sido Reino
Unido, sino porque la UE ha tenido
que dar muchas concesiones
y dádivas orgánicas.
Otro experto señaló en un seminario
que “existe un riesgo
de mayor fragmentación con el
proyecto de Macron”.
El presidente francés es plenamente
consciente de que la
política que plantea no es aceptada
por todos. Por lo tanto,
quiere obtener el visto bueno
de los votantes. De todos modos,
Macron piensa que un grupo
de países pueda avanzar con
anticipación, por ejemplo, en la
cooperación para la defensa y
seguridad.
Macron considera que la UE
tiene dos divisiones, una pertenece
a la zona euro y la otra está
fuera de la moneda (Suecia, por
ejemplo) ello le hace suponer
que puede haber otra división
entre una Europa con una política
económica y de defensa común
y otra fuera de ambos rub
ro s .