ESCAPULARIO Junio 2021

OREMOS CON ARTE
Esther del Val
Bailarinas, de Degas:
Una silueta apenas delimitada, unos trazos sin definir, unos toques de azul
intenso, un bosquejo preparatorio convertido en obra maestra.
Una pequeña bailarina se prepara para el instante preciso tras largas horas
de esfuerzo y sacrificio. Un pintor que trabaja hasta el límite para captar la
inmediatez de un momento, la pausa del movimiento en la danza.
Gracias Señor por enseñarme a ser paciente, a esperar el instante preciso, a
esforzarme y entregarme cada momento de cada día.
Enséñame a no rendirme, a tropezar con las piedras del camino, a ensayar
cada movimiento, cada pirueta, sin llegar a caer, a no pasar de puntillas
por el sendero de los demás. A encontrarte, Señor, en cada allegro, en cada
arabesco, a sentirte en cada compás, en cada armonía, en el ritmo vertiginoso
de nuestra vida.
Ayúdame a ser paciente, a no pasar de la primera a la quinta posición sin
dominar cada una de ellas, a conseguir el contrapunto entre la energía y la
sutileza, el equilibrio entre fuerza y fragilidad; a aprender a bailar en grupo
como uno solo, a aprender a orar en unión con mis hermanos.
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