Listín Diario 15-01-2022
https://listindiario.com/
https://listindiario.com/
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
SÁBADO <strong>15</strong> DE ENERO DE <strong>2022</strong> THE NEW YORK TIMES INTERNATIONAL WEEKLY<br />
7<br />
CIENCIA Y TECNOLOGÍA<br />
Desafío en el Ártico:<br />
avistar osos polares<br />
Por EMILY ANTHES<br />
Desde un helicóptero puede ser<br />
difícil divisar un oso polar contra<br />
la tundra helada. Así que cuando<br />
el biólogo Jon Aars se dirige a sus<br />
viajes anuales de investigación,<br />
busca destellos de movimiento o<br />
variaciones sutiles de color —el<br />
tono ligeramente amarillento del<br />
pelaje de los osos contra la nieve<br />
blanca.<br />
“También muy a menudo ves las<br />
huellas antes de ver al oso”, dijo<br />
Aars.<br />
Aars es uno de una larga lista de<br />
investigadores de osos polares del<br />
Instituto Polar Noruego, que tiene<br />
un puesto de avanzada en Svalbard,<br />
un archipiélago ártico. El<br />
instituto ha realizado los viajes de<br />
campo anuales desde 1987.<br />
A lo largo de las décadas, estos<br />
viajes de investigación han arrojado<br />
luz sobre la biología y la ecología<br />
de los osos y, en los últimos<br />
años, han ayudado a los científicos<br />
a hacer seguimiento de cómo están<br />
lidiando los animales con el cambio<br />
climático. Los rápidos cambios<br />
de hábitat ya están afectando su<br />
comportamiento; con el hielo marino<br />
retrocediendo rápidamente,<br />
algunos de los osos ahora tienen<br />
que nadar largas distancias para<br />
encontrar lugares donde hacer su<br />
guarida. Pero hasta ahora, los osos<br />
parecen robustos, dijo Aars. Si eso<br />
cambia, estos viajes ayudarán a<br />
descubrir problemas temprano.<br />
Los viajes a menudo se realizan<br />
en la primavera, cuando las osas<br />
emergen de las guaridas con oseznos<br />
nuevos y el hielo es lo suficientemente<br />
sólido como para respaldar<br />
la investigación. “Si tienes un<br />
helicóptero y aterrizas en el hielo<br />
y está delgado, corres el riesgo de<br />
tener un accidente”, dijo Aars.<br />
Una vez en el aire, el equipo —<br />
que generalmente incluye dos<br />
biólogos, un veterinario, un piloto<br />
y un mecánico— comienza a escudriñar<br />
el paisaje en busca de osos.<br />
Cuando los investigadores divisan<br />
uno, le disparan un dardo tranquilizante<br />
desde el aire. Toma unos<br />
minutos para que el oso caiga inconsciente.<br />
Científicos examinan osos polares después de sedarlos. El cambio<br />
climático afecta su comportamiento, dicen los expertos.<br />
Los investigadores aterrizan y<br />
se ponen a trabajar. Tapan los ojos<br />
del oso con un trozo de tela para<br />
protegerlo de los feroces rayos del<br />
sol y sacan equipo para monitorear<br />
su ritmo cardíaco, niveles de<br />
oxígeno en la sangre y temperatura<br />
corporal. Toman una variedad<br />
de medidas físicas: la longitud del<br />
animal, su contorno y el tamaño de<br />
su cráneo. También examinan sus<br />
dientes, lo que puede brindar un<br />
buen cálculo de su edad. También<br />
se pesan a las osas, una maniobra<br />
delicada que requiere levantarlas<br />
en el aire en una camilla sujeta a<br />
dos básculas de resorte. (Los machos<br />
son demasiado pesados para<br />
la maniobra).<br />
Luego toman muestras de sangre,<br />
piel y grasa, y meten la muestra<br />
de sangre en un bolsillo para que no<br />
se congele. De vuelta en el laboratorio,<br />
estas muestras ayudarán a los<br />
científicos a responder todo tipo de<br />
preguntas sobre la vida del animal:<br />
¿Qué está comiendo? (A veces, un<br />
oso está cubierto de sangre cuando<br />
los investigadores lo hallan, señal<br />
de que acaba de comerse una foca).<br />
FOTOGRAFÍAS POR ANNA FILIPOVA PARA THE NEW YORK TIMES<br />
¿Tiene parásitos? ¿Ha estado expuesto<br />
a muchos contaminantes?<br />
También pueden extraer ADN de<br />
estas muestras para aprender más<br />
sobre la genética de la población local<br />
de osos polares.<br />
Algunas de las osas reciben collares<br />
satelitales, que rastrean su<br />
ubicación y actividad.<br />
Antes de terminar, los investigadores<br />
dan a los osos varias marcas<br />
de identificación, agregando una<br />
etiqueta en la oreja, implantando<br />
un microchip detrás de la oreja y<br />
tatuando un número dentro del<br />
labio. Pero también agregan una<br />
marca más temporal, pintando<br />
un número en la espalda de cada<br />
oso. El número, que desaparecerá<br />
cuando el oso mude su pelaje, evita<br />
que los científicos lo capturen dos<br />
veces en la misma temporada de<br />
campo.<br />
Todo el proceso tarda alrededor<br />
de una hora. Cuando los investigadores<br />
terminan, el veterinario administra<br />
un medicamento para revertir<br />
el sedante. A veces los investigadores<br />
esperan a que el oso se<br />
despierte, para asegurarse de que<br />
esté bien. Mantienen la distancia,<br />
pero Aars no teme a los osos cuando<br />
se despiertan. “No es como si el<br />
oso estuviera diciendo, ‘Ok, quiero<br />
matar a ese tipo’”, dijo. “Creo que es<br />
más como sentir si está bien y probablemente<br />
tener un poco de dolor<br />
de cabeza”.<br />
Pruebas para detectar trastornos fallan<br />
Por SARAH KLIFF<br />
y AATISH BHATIA<br />
Después de un año de tratamientos<br />
de fertilidad, Yael Geller<br />
estaba emocionada cuando se enteró<br />
de que estaba embarazada<br />
en noviembre de 2020. Pero unas<br />
semanas después, la llamaron del<br />
consultorio de su médico. Un análisis<br />
de sangre prenatal indicó que<br />
su feto podría tener el síndrome de<br />
Prader-Willi, un trastorno que ofrece<br />
pocas posibilidades de vivir de<br />
forma independiente en la adultez.<br />
Geller, de 32 años, lloró cuando le<br />
dijo a su esposo que podrían estar<br />
enfrentando una decisión sobre interrumpir<br />
su embarazo.<br />
Al día siguiente, los médicos utilizaron<br />
una aguja larga y dolorosa<br />
para extraer un pedacito de su placenta.<br />
Fue sometido a exámenes y<br />
mostró que el resultado inicial era<br />
incorrecto. Ahora tiene un bebé de<br />
6 meses que no muestra señales del<br />
trastorno genético.<br />
Geller había caído presa de una<br />
promesa que hizo Silicon Valley<br />
a las mujeres embarazadas: que<br />
unos cuantos tubos de su sangre,<br />
extraídos en el primer trimestre,<br />
pueden permitir a empresas detectar<br />
problemas graves de desarrollo<br />
en el ADN del feto con gran precisión.<br />
En poco más de una década, las<br />
pruebas han pasado de ser experimentos<br />
de laboratorio a una industria<br />
que atiende a más de un tercio<br />
de las mujeres embarazadas en Estados<br />
Unidos, atrayendo a importantes<br />
empresas como Labcorp y<br />
Quest Diagnostics al negocio, junto<br />
con muchas empresas de arranque.<br />
Las pruebas inicialmente buscaban<br />
síndrome de Down y funcionaron<br />
muy bien. Pero a medida que los<br />
fabricantes intentaron superar a su<br />
competencia, comenzaron a ofrecer<br />
tamizajes adicionales en busca<br />
de problemas cada vez más raros.<br />
La prueba de detección, conocida<br />
como prueba prenatal no invasiva<br />
o NIPT, tiene un desempeño mucho<br />
peor cuando busca trastornos<br />
menos comunes. La mayoría es<br />
causada por pequeños fragmentos<br />
faltantes de cromosomas llamados<br />
microdeleciones.<br />
Para evaluar las pruebas más<br />
nuevas, The New York Times entrevistó<br />
a investigadores y combinó<br />
datos de múltiples estudios para<br />
producir las mejores estimaciones<br />
de qué tan bien funcionan las cinco<br />
pruebas de microdeleción más comunes.<br />
El análisis mostró que los resultados<br />
positivos en esas pruebas son<br />
incorrectos alrededor del 85 por<br />
ciento de las veces.<br />
Después de que se les presentó el<br />
CASEY STEFFENS PARA THE NEW YORK TIMES<br />
reporte de The Times, media docena<br />
de empresas de pruebas prenatales<br />
rechazaron las solicitudes de<br />
entrevistas. Emitieron declaraciones<br />
escritas que decían que los pacientes<br />
siempre deben revisar los<br />
resultados con un médico y advirtieron<br />
que las pruebas no están destinadas<br />
a diagnosticar, sino a identificar<br />
a pacientes de alto riesgo que<br />
necesitan pruebas adicionales.<br />
Yael Geller, recibió un<br />
resultado de una prueba<br />
prenatal falso positivo, con su<br />
hijo en su casa.<br />
Cuando Cloey Canida, de 25 años,<br />
obtuvo un resultado positivo de la<br />
prueba Harmony de Roche, la hoja<br />
de resultados decía que su hija tenía<br />
una probabilidad “superior a<br />
99/100” de nacer con el síndrome de<br />
Patau, un trastorno genético al que<br />
los bebés a menudo no sobreviven<br />
más de una semana.<br />
Su ginecólogo trató de tranquilizarla,<br />
citando datos independientes<br />
que muestran que para una mujer<br />
de su edad, el 93 por ciento de los<br />
positivos resultan ser incorrectos.<br />
Después de gastar US$1 mil 200 en<br />
pruebas de seguimiento, se enteró<br />
de que su embarazo era saludable.<br />
“Ojalá nos hubieran informado<br />
de la tasa de falsos positivos antes<br />
de que aceptara la prueba”, dijo.<br />
“No me dieron ninguna información<br />
sobre eso”.