ESTRENO: HAPPY FEET - DirecTV

Jean-Pierre y Luc Dardenne luego de el estreno de El Niño.Déborah Françoisen El Niño.La fugaz felicidad de Igor y su padre en La Promesa.ciertos tipos humanos vinculados a la clase trabajadora, que seríafundamental a la hora de elegir los temas e historias que poblaríansu universo en la ficción.Gracias a su segundo largometraje, La Promesa (1996) –películasobre la tensa y utilitaria relación entre un explotador de inmigrantesafricanos en Bélgica y su hijo adolescente– presentado en la Quincenade Realizadores durante el Festival de Cannes, y especialmentecon Rosetta –cinta sobre los permanentes quiebres laborales deuna muchacha y la conflictiva relación con su madre alcohólica– seconsolidaron entre los cineastas más importantes de la Europa actual.Ambas películas, similares en propósito y en factura, deslumbraronpor su falta de pretensiones, por su opción hacia conflictos pequeñosy posibles y por poblar sus historias de personajes alejados de losbeneficios socioculturales de la Europa globalizada.Se trató en buena medida de retratos humanos feroces, de personajesdominados totalmente por sus incontrolables caudales interiores,generalmente ásperos, poco empáticos y, lo que puede ser unatentado al gusto dominante, impredecibles en su comportamiento.El río Mouse como eje dramático. Émilie Dequenneen Rosetta.Realismo y controlSin embargo, aun tomando en cuenta la poderosa atracción queparece haber ejercido en ellos el formato documental, a la luz de lasoltura extrema que aparentan sus películas de ficción, ellas no son,aunque lo parezcan, una continuación lógica de su trabajo previo.13