Dionisio Cisneros el Atila del Tuy

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Y
A NÉCD O TAS D EL TU De Aviones, juegos y aparecidos
Por: Edgar Rivero
Pampero, luego y hacia la derecha nuestro destino.
A lo largo de la ruta, como suele suceder en todo
e niño solía avistar los aviones que sobre los Valles del Tuy, se pueden ver personas vendiendo
volaban los cielos de mi pueblo, Santa las frutas según la temporada: mangos de todo tipo,
DTeresa del Tuy, era una de mis grandes mamón, cotoperí, ciruelas, etc. Recuerdo esas tardes
distracciones de chico (aún no he perdido esa en casa de un amigo de mi padre donde
distracción), los observaba con mucha atención, sobre acostumbraban reunirse a tocar sus guitarras y
todo las avionetas que hacían piruetas, incluso hasta llenar el ambiente con el sonido de viejos boleros,
llegué a ver biplanos, esas aeronaves que me mientras los chicos jugábamos a nuestros juegos, una
recordaban mucho a las historias de la 1ra Guerra vez descubrimos un tesoro: una caja llena de
Mundial donde sobresalía el famoso Barón Rojo gurrufios, imagínense nuestro asombro.
(Manfred Von Richthofen). Los boleros se mezclaban muy a menudo con el
Mi familia viajaba frecuentemente los fines de sonido de los motores de las avionetas que rozaban
semana hacía Ocumare del Tuy, esto porque tenemos los techos de las casas, me distraía muy fácilmente
muchos familiares en esa zona, íbamos sobre todo a viéndolos, hasta contaba los aviones que descendían
Santa Bárbara, parroquia perteneciente al Municipio muy cerca, mi padre me dijo que había un aeropuerto
Lander y hacía La Mata, caserío ubicado vía Cúa, mis cerca y a veces de regreso nos llevaba a ver los
padres se reunían con los familiares y visitaban a viejas aviones aterrizar en dicho aeropuerto, es el
amistades, algo que no puedo olvidar era ese olor Aeropuerto Metropolitano, el primer aeropuerto
característico nada más al llegar a la encrucijada de privado del país y uno de las más importantes
Ocumare, el olor que embriaga al visitante, el del Ron fundado a mediados de los años 70.