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Itinerario de la ruta.
La provincia de Burgos es un
conjunto fascinante de gentes,
pueblos y ciudades, monumentos
y espacios naturales. Cuenta con
una serie de comarcas que
determinan su amplia variedad:
las montañas y valles de las
Merindades, los cañones y
desfiladeros del Ebro, la llanada
entre montañas de la Bureba, la
Sierra de la Demanda, los
bosques y campiñas de la Tierra
de Pinares, los Páramos y loras,
las Riberas del Duero y del
Arlanza y, por supuesto, la gran
llanura cerealista (Tierra de
Campos) al oeste... Encrucijada
entre la España verde y la seca,
lugar de encuentro entre los
ecosistemas eurosiberianos y los
mediterráneos, el variado paisaje
de la provincia burgalesa rompe
con el tópico sobre Castilla como
tierra de monótonos paisajes de
llanuras cerealistas. Sus
montañas, valles, cañones,
desfiladeros, peñas, páramos y
llanuras han dado lugar a un
relieve variado y con grandes
contrastes en el paisaje, que se
acompaña de una flora y
una fauna realmente variadas.
BURGOS, PARAÍSO PARA EL CAMINANTE
UNA PROPUESTA DE RUTA A PIE POR EL CAÑÓN DEL EBRO.
Todo ello hace de la provincia de
Burgos un lugar privilegiado para
practicar todo tipo de actividades
en la naturaleza, entre las que se
encuentra el senderismo. Son
cientos las rutas a pie que
pueden realizarse; aquí, por
necesidades de espacio, nos
limitaremos a hablar de una de
ellas. Para las personas que
quieran informarse a fondo,
recomendamos la lectura de los
libros del burgalés Enrique del
Rivero, viajero, periodista y
escritor de varios libros de Rutas
y Paseos por Tierras de Burgos,
publicados por la editorial Sua de
Bilbao, de los que son deudoras
estas notas.
El cañón del río Ebro
Una de las partes más
importantes de nuestra provincia
y que merece ser destacada es la
zona relativa o cercana al río
Ebro, el cual ha
formado, con el transcurso del
tiempo y a través del macizo
calizo de las parameras de la Lora,
un enorme cañón cuya
profundidad alcanza una altura de
mas de 200 metros. Su relieve
junto con su maravillosa fauna y
flora han hecho de esta profunda
garganta una de las más bellas de
la Península Ibérica.
Para iniciar esta caminata tan
especial debemos acudir al
pueblo de Valdelateja (en la
carretera nacional de Burgos a
Santander, N­623, a 60 km de
Burgos, para cruzar desde allí el
río Rudrón y encaminarnos hacia
la iglesia del pueblo, tras la cual
parte el camino que nos llevará
hasta el cañón. Pocos minutos
después de comenzar la ruta
encontraremos la desembocadura
del río Rudrón, afluente del Ebro,
y accederemos al cañón que a lo
largo del tiempo el río que le da
nombre ha ido tallando. La parte
más alta se ve interrumpida por
las Loras donde la vegetación es
escasa y, por el contrario, en la
Rincones del cañón del Ebro.
parte más cercana al lecho,
encontraremos una vegetación
abundante, de bosques mixtos,
que se aprovecha de la escasa
pendiente. Atravesando el fondo
de la garganta, llegaremos a un
puente hecho con troncos y
tablas que facilitará nuestro
acceso hacia la otra parte del río
donde encontraremos una central
eléctrica que sigue aprovechando
la fuerza del agua para obtener
energía.
A continuación seguiremos por
una vereda que hará que
ascendamos por la vertiente del
cañón donde podremos
comprobar como el río se va
estrechando hasta que lleguemos
a Pesquera del Ebro, donde de
nuevo el río recupera su anchura
natural y donde las pendientes se
suavizan. De este pueblo hay que
destacar su notable arquitectura,
reflejada en casonas como es el
caso de la casona de los Escalada
o la de los Giles. Más tarde
atravesamos el río por un puente
medieval espléndido y
accedemos al valle de Zamanzas
a través de un sendero bien
señalizado. Pronto la senda nos
conduce a otro camino que nos
servirá para acceder a otro pueblo
como es Cortiguera, un lugar
abandonado hasta hace unos
pocos años y que posee
numerosas casas blasonadas. A
partir de aquí seguiremos nuestro
camino a través de un sendero
que nos guiará de nuevo al borde
superior del cañón. Al llegar a
una bifurcación marcada con un
mojón debemos tomar el camino
de la derecha que nos llevará a
través de un pronunciado
descenso de retorno a Valdelateja
Datos Útiles:
­Época recomendable: todo el
año.
­Dificultad: media­alta.
­Distancia y Tiempo: 15 Km. y
cinco horas y media.
­Interés: paisaje, arte, fauna y
flora.
Redactores: Marta Castilla
Cofeccionadores: Pablo Torres y
Jana Sendino