Confesión Diaria de Fe - Christian Word Ministries

Bendecido sea el Señor, mi alma, y todo lo que en ella hay bendice Tu
Santo Nombre!
Bendecido sea el Señor, mi alma, no se olvida de ninguno de sus
beneficios:
Él es quien perdón a toda nuestras iniquidades,
Él es quien sana todas nuestras enfermedades.
El fue herido por nuestras transgresiones,
El fue demolido por nuestras iniquidades;
El castigo por nuestra paz fue sobre El,
Y por sus llagas somos nosotros curados.
Isaías 53:5 NKJV
El diariamente nos bendice (Salmo 68:19b) El nacer de nuevo, y ser
llenos de su Espíritu es un milagro, la mayoría de nosotros no tenemos
problema para creer el milagro de Salvación en nuestros corazones, pero
el mismo Dios que te salvo, también envió la palabra y te sano, muy a
menudo tenemos problemas para creer esta verdad en el presente. Hemos
visto muy seguido, que cuando alguien hace la invitación a orar por
alguien, el Señor nos invita a orar en el espíritu por un momento antes de
ofrecer una oración de sanidad. Yo creo que las razones que tenemos que
entender que algunas enfermedades son el resultado de otros problemas,
y el Señor muy seguido revela la raíz de la causa del problema y cuando
nosotros abordamos desde la raíz, el síntoma desaparece y no vuelve a
regresar. Nosotros tenemos escrituras que nos guían tal es el caso en
Romanos 8:26. Por ejemplo de una raíz, se ha dicho que la diabetes,
muchas ocasión puede ser causada o activada por un impacto emocional,
tales como una muerte repentina de algún familiar, alguna herida,
pérdida financiera, algo que nos impacta emocionalmente.
Leamos la siguiente escritura como si fuera una declaración y seamos
bendecidos por cuanto Dios nos ama y como El ha hecho provisión a
través de su Palabra para nuestros problemas, no importando lo que éstos
sean o qué tan difíciles sean de resolver.
En el principio, era la Palabra, y la Palabra estaba en Dios, y la Palabra
era Dios. Por siempre, Oh Dios, Tu Palabra ha sido establecida en los
cielos, su fidelidad permanece en todas las generaciones. El (Dios) envió
su Palabra y los sanos, y los liberó de toda destrucción. Así que la
Palabra que sale de la boca; no volverá vacía, pero cumplirá lo que ha
dicho, y lo prosperará para lo cual fue enviada. Y El (la Palabra) orada en
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