07.05.2013 Views

Descargar - Fundación Foro Jovellanos del Principado de Asturias.

Descargar - Fundación Foro Jovellanos del Principado de Asturias.

Descargar - Fundación Foro Jovellanos del Principado de Asturias.

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

20<br />

Agustín Guzmán Sancho<br />

El pupilaje daría a <strong>Jovellanos</strong> gran<strong>de</strong>s quebra<strong>de</strong>ros <strong>de</strong> cabeza.<br />

Muerto su hermano Francisco <strong>de</strong> Paula, que fue quien <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el primer<br />

momento se encargó particularmente <strong><strong>de</strong>l</strong> cuidado <strong>de</strong> la niña17, don Gaspar<br />

llevó a cabo una buena inversión <strong><strong>de</strong>l</strong> dinero <strong>de</strong> su pupila en fincas, con el<br />

consentimiento <strong><strong>de</strong>l</strong> párroco. No obstante el Doctoral dio contraor<strong>de</strong>n a su<br />

apo<strong>de</strong>rado, Sr. Braña, para que no firmase las cuentas que se le presentaban<br />

y que había hallado conformes. Pero don Gaspar, esclavo <strong>de</strong> la formalidad,<br />

obligó a firmar a Braña como se hizo, acordó y extendió. Des<strong>de</strong> entonces<br />

Inguanzo, a quien calificaba Somoza <strong>de</strong> “genio, agrio, áspero y <strong>de</strong>spechado<br />

por no haber tenido consigo el arca <strong>de</strong> las tres llaves; rígido, duro y frenético,<br />

como todo asturiano montañés finítimo <strong><strong>de</strong>l</strong> cántabro”, escribía contra el<br />

Informe <strong>de</strong> la Ley Agraria y se convirtió en uno <strong>de</strong> los perseguidores <strong>de</strong> don<br />

Gaspar18. Por el contrario, la pupila habría <strong>de</strong> reconocer siempre su eterno<br />

agra<strong>de</strong>cimiento a los <strong>Jovellanos</strong>. Es más, en su vejez aún los recordaría con<br />

cariño. Tenemos <strong>de</strong> ello el testimonio <strong>de</strong> su propio nieto: Quien estas líneas<br />

escribe ha oído <strong>de</strong> labios <strong>de</strong> la misma pupila <strong>de</strong> <strong>Jovellanos</strong>, frases <strong>de</strong> admiración y<br />

respeto consagradas a la memoria <strong>de</strong> aquel varón insigne, y a la <strong>de</strong> sus hermanos y<br />

parientes, principalmente don Francisco <strong>de</strong> Paula, y su esposa doña Gertrudis, don<br />

Baltasar González <strong>de</strong> Cienfuegos, doña Antonia Argüelles y otros entre quienes<br />

vivió, recibiendo <strong>de</strong> todos ellos, palabras constantes <strong>de</strong> su entrañable amor y afecto19. Las relaciones <strong>de</strong> la joven con los <strong>Jovellanos</strong> <strong>de</strong>bieron ser, en efecto,<br />

muy cariñosas si tenemos en cuenta que Francisco <strong>de</strong> Paula y Gertrudis <strong><strong>de</strong>l</strong><br />

Busto <strong>de</strong>seaban ardientemente tener <strong>de</strong>scen<strong>de</strong>ncia; en una <strong>de</strong> las cartas <strong>de</strong><br />

Francisco <strong>de</strong> Paula a su hermano le dice que su esposa había cogido la flor<br />

<strong><strong>de</strong>l</strong> agua. Esta tradición consistía en beber, tras la noche <strong>de</strong> San Juan, el agua<br />

<strong>de</strong> una fuente antes que ninguna otra persona. De esta manera la mujer<br />

lograba quedar en cinta. La niña habría <strong>de</strong> llenar, pues, aquel vacío <strong>de</strong> hijos.<br />

Por otra parte, sabemos por <strong>Jovellanos</strong> que aquella niña, a la que llamaba con<br />

17 Según carta <strong>de</strong> <strong>Jovellanos</strong> a José Antonio Caballero, fechada en el Castillo <strong>de</strong> Bellver el<br />

17 <strong>de</strong> abril <strong>de</strong> 1805. (Carta 1.450. T. IV <strong>de</strong> las Obras completas. Edición <strong><strong>de</strong>l</strong> profesor Caso<br />

González; pág. 186).<br />

18 A pesar <strong>de</strong> la conducta irreprochable <strong>de</strong> <strong>Jovellanos</strong>, que incluso llega a invitar al Doctoral<br />

a su casa para que resida el tiempo que hiciera falta mientras se arreglaban las cuentas <strong>de</strong><br />

la pupila, a lo que se negaría el orgulloso prebendado, figurará Inguanzo como ofendido<br />

en la <strong><strong>de</strong>l</strong>ación anónima por la que se <strong>de</strong>nunció a <strong>Jovellanos</strong> a la Inquisición. En el prólogo<br />

a la obra antes citada <strong>de</strong> Huici Miranda, sigue diciendo Somoza hablando <strong>de</strong> Inguanzo:<br />

“escribió un libro, ruidoso en su tiempo, intitulado El dominio sagrado <strong>de</strong> la Iglesia en sus bienes<br />

temporales (Cádiz 1813, y Salamanca 1820-1823; dos tomos en 4). En él refuta el Informe<br />

<strong>de</strong> <strong>Jovellanos</strong> sobre la Ley Agraria, y el Tratado <strong>de</strong> Amortización <strong>de</strong> Campomanes.<br />

Asturianos los tres, se nota enseguida <strong>de</strong> qué lado cae la intransigencia, inspirada siempre<br />

por el imperativo categórico, que no quiere doblegarse jamás ante ningún razonamiento”.<br />

19 Las Amarguras <strong>de</strong> <strong>Jovellanos</strong>. Gijón, 1889, pág. 66.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!