07.05.2013 Views

Descargar pdf - Diputación Provincial de Almería

Descargar pdf - Diputación Provincial de Almería

Descargar pdf - Diputación Provincial de Almería

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

18<br />

Francisco López Moya<br />

sabe, pero tu generación o la <strong>de</strong> tus hijos o nietos pue<strong>de</strong>n recuperar<br />

algún día nuestras tierras.<br />

¿A qué se refería, a otro levantamiento?<br />

—Las cosas <strong>de</strong> valor que no po<strong>de</strong>mos llevarnos se quedarán en<br />

la cuadra.<br />

Soraya lo miró extrañada.<br />

—¿En la cuadra?<br />

—Sí, bajo el pesebre <strong>de</strong>l fondo, el <strong>de</strong>l rincón. Debajo hay un<br />

hueco. Allí he guardado lo que no po<strong>de</strong>mos llevarnos y lo he vuelto<br />

a tapar. Para que no levante sospechas he refregado con estiércol<br />

la obra nueva —se <strong>de</strong>tuvo un momento. Soraya, impresionada por<br />

las confi<strong>de</strong>ncias <strong>de</strong> su padre, sobre todo sorprendida por ser ella<br />

la <strong>de</strong>positaria <strong>de</strong> los secretos <strong>de</strong> la familia y no su hermano que era<br />

dos años menor, no pudo reaccionar y se quedó callada—. Por ese<br />

mismo motivo <strong>de</strong>jaremos una llave escondida en el huerto. De eso<br />

te encargarás tú.<br />

En un momento supo el lugar en el que la enterraría.<br />

—Espera un momento —dijo su progenitor levantándose y<br />

saliendo <strong>de</strong> la estancia.<br />

La joven, todavía sobrecogida por aquella responsabilidad,<br />

apoyó la cabeza sobre el respaldo <strong>de</strong>l diván y levantó la vista hacia<br />

el techo. Lo habría visto miles <strong>de</strong> veces, pero hasta ese momento<br />

no reparó con tanto <strong>de</strong>talle en que el espacio que había entre los<br />

ma<strong>de</strong>ros estaba ocupado por unas cañas perpendiculares que iban<br />

atadas a otra maestra, más gruesa que las <strong>de</strong>más. La labor artesanal<br />

era perfecta, como lo era su efectividad en las lluvias <strong>de</strong> los otoños<br />

y primaveras. La cal <strong>de</strong> las pare<strong>de</strong>s aumentaba la poca claridad <strong>de</strong> la<br />

estancia. Si su padre tardaba mucho en volver tendría que encen<strong>de</strong>r<br />

el candil <strong>de</strong> aceite que colgaba <strong>de</strong>l gancho <strong>de</strong> alambre, que,<br />

amarrado a uno <strong>de</strong> los ma<strong>de</strong>ros centrales, quedaba a media altura.<br />

Pensativa aún, dirigió la vista hacia la ventana, el crepúsculo<br />

iba apagando el rojo vivo <strong>de</strong>l diván y sintió una gran congoja. Qué<br />

mala suerte había tenido. Durante los tres años que había durado<br />

la guerra, sus sueños se fueron apagando. La muerte <strong>de</strong> su madre,<br />

natural hasta cierto punto, hubiera podido superarla, pero la<br />

<strong>de</strong>saparición <strong>de</strong> su prometido terminó por hundirla en la miseria.<br />

¿Qué más podía pasarle?, se preguntó entonces <strong>de</strong>sesperada. Ahora<br />

lo sabía. Acababa <strong>de</strong> cumplir diecinueve años y no tenía ni casa ni<br />

bienes. Por si fuera poco, se había convertido en la responsable

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!