Capítulo 2. Para comprender los Derechos Humanos en el aula

El derecho a una nacionalidad
Declaración Universal de Derechos Humanos, Art. 15
1. Toda persona tiene derecho a una nacionalidad.
2. A nadie se privará arbitrariamente de su nacionalidad ni del
derecho a cambiar de nacionalidad.
Convención de Derechos del Niño, Art. 7
1. El niño será inscrito inmediatamente después de su nacimiento
y tendrá derecho desde que nace a un nombre, a adquirir
una nacionalidad y, en la medida de lo posible, a conocer a
sus padres y a ser cuidado por ellos.
(...)
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, Art. 24
2. Todo niño será inscrito inmediatamente después de su nacimiento
y deberá tener un nombre.
Todo niño tiene derecho a adquirir una nacionalidad.
En un mundo organizado políticamente, de manera casi exclusiva, en países,
es decir, en estados-naciones, carecer de una nacionalidad significaría sin
duda una desventaja. Por una
parte, una persona en esa condición
quedaría irremediablemente
privada de derechos
políticos (elegir y ser electo a
cargos públicos, por ejemplo),
pero también se le vedaría el acceso
a los programas de salud,
educación, etc., que los estados
están obligados a proveer a los
ciudadanos. Asimismo, tendría
muchísimas dificultades para
desplazarse de un país a otro.
Por ello, tener una nacionalidad
es un derecho humano de gran
importancia.
75
Manual
de Educación
en Derechos Humanos