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La historia
comienza...
taller de relato breve
aprendizaje y práctica
desarrollo del pensamiento fabulador
técnicas narrativas
aspectos estilísticos de la creación literaria
intercambio crítico de los participantes
desarrollo de una conciencia analítica
una sesión semanal (2 horas)
cupos limitados: máximo 15 talleristas
Mayor información e inscripciones:
lecturaecuador@yahoo.com
Teléfono: 2 546 026
Tamayo y Baquerizo (esquina)
Julio 2012 ROCINANTE 1 R

CONTENIDO
Julio 2012
Portada
Ilustración de la cubierta
de El pirata del Guayas,
de Luna de bolsillo
Prometheus
Ridley Scott, director de
Blade Runner y Alien,
regresa a la conjugación
de terror y ciencia ficción
R 2 ROCINANTE
28
ESPECIAL
Ray Bradbury
El primer autor de ciencia ficción que fue
«tomado en serio» por la academia
NOVEDADES
La fiera consecuente
Reciente poemario de Margarita Laso
Rocío Madriñán
Y su nueva policial: Pasiones secretas
LIBRO DEL MES
El pirata del Guayas
Tal vez la primera novela escrita en
Ecuador, una joya literaria
Philip Roth
Conozca al estadounidense que acaba
de ganar el Príncipe de Asturias
El Libertador
La vida heroica y trágica de Simón
Bolívar alimenta los libros
Un oficio en extinción
Los libreros tradicionales son cada vez
más difíciles de encontrar
CHE GUEVARA
Apuntes filosóficos
El libro de reflexiones teóricas
del líder revolucionario
www.revistarocinante.com
23
26
14
68
44
50
ROCINANTE es una publicación de la Campaña Nacional Eugenio Espejo por el Libro y la Lectura,
que es una iniciativa ciudadana que busca mejorar el comportamiento lector de los ecuatorianos.
Se maneja mediante la autogestión y a través de la asociación con diversas entidades.
Sus líneas básicas de acción son la edición y distribución masiva de libros, la capacitación a
mediadores de lectura, la difusión de la literatura nacional en el extranjero y la reflexión teórica
sobre el tema de la lectura. u DIRECCIÓN GENERAL: Iván Égüez. u REDACCIÓN: Andrés
Cadena. u DISEÑO: Luis Ochoa. u IMPRESIÓN: Grafitext u © CORPORACIÓN EUGENIO ES-
PEJO POR EL LIBRO Y LA CULTURA. El Heraldo 244 y Juan de Alcántara. Teléfono: 243 2980.
u DERECHOS RESERVADOS.
4
54
Julio 2012

El pirata del Guayas
R
EDITORIAL
Entre las profundas satisfacciones
que me ha deparado
la Campaña de Lectura Eugenio
Espejo, está la de haber podido
llevar, por primera vez, obras que,
perteneciéndonos de algún modo,
no habían sido editadas para los lectores
ecuatorianos. Tal el caso de La
mula ciega, hermosa novela del manabita
Osvaldo Castro, que tenía ediciones
españolas y mexicanas; de Mi tío Atahualpa, esa novela
quiteñísima de Paulo de Carvalho Neto; de El país de los
ciegos, de H. G. Wells, ambientada en los Andes ecuatoriales;
y de Las Encantadas, de Herman Melville sobre las Galápagos,
autor nada menos que de ese monumento literario
llamado Moby Dick, llevado también al cine, y de Bartleby, el
amanuense de escribanía que cuando le encomendaban un
trabajo decía «prefiero no hacerlo».
Hoy el regocijo va de la mano de El pirata del Guayas, escrita
en 1855 por Manuel Bilbao y cuya edición primigenia
ha sido descubierta por el joven escritor ecuatoriano Esteban
Mayorga en la biblioteca de la Universidad de Harvard. Una
novela de aventura, ambientada en la colonia penal de Galápagos
y en Guayaquil; entretenida, apta para cualquier lector,
con temas de discusión permanente y, sobre todo, con el
contexto histórico que permite tener un retrato del Ecuador de
ese entonces, un país en ciernes donde los piratas son más
que una alegoría viva hasta el presente.
Y a propósito de Guayaquil: este año también tendrá su
Feria del Libro. ¿Lo sabía usted? Pues váyalo sabiendo, aunque
al decir de uno de sus actuales escritores, Leonardo Valencia,
el puerto aún sigue inédito. R
I.É.
Redacción: Director: Iván Égüez • Redacción: Andrés Cadena
• Diseño: Luis Ochoa • Fotografía: Dominique Riofrío
Colaboradores de este número: Esteban Mayorga •
Leonardo Valencia • Pamela Rovayo • Lucía Lemos • Juan
Fernando Jaramillo • Juan Cruz
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ROCINANTE 3

ESPECIAL
R
4 ROCINANTE
BRADBURY
Raymond Bradbury
(1920-2012)
Entre la poesía
y la ciencia ficción
Julio 2012

Ray Bradbury fue un escritor
estadounidense cuyas
obras no carecen ni de originalidad
ni de rasgos poéticos,
pero que seduce sobre todo
por su entrega casi exclusiva
a la ciencia ficción, mezclando
los géneros, describiendo
la vida de seres simples pero
sicológicamente muy estudiados,
oponiéndose así a los
«corredores de estrellas y exploradores
del tiempo». Tal
vez sea esta la causa por la
que los amantes del género
lo han rechazado. Basta con
leer sus dos libros más conocidos
(Crónicas marcianas,
de 1950, y Fahrenheit 451,
de 1953), para advertir en
él a un gran escritor
que, discreta
y pudorosamente,
descubre las
llagas de un mundo que, no
por ignorarlo, deja de estar
enfermo.
En Fahrenheit 451, Bradbury
escribió una breve
novela intimista, en la que
lo único que importa es la
evolución moral del protagonista.
Pero el autor no se
engaña: si este mundo que
rechaza los libros e impone la
imagen televisiva es de naturaleza
fascista o stalineana,
la sociedad marginada de
los «hombres-libros» no lo es
menos, y solo aguarda el momento
oportuno para volver
a tomar el poder.
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ROCINANTE 5

ESPECIAL
n Jorge Luis Borges
R 6 ROCINANTE
BRADBURY
Crónicas
marcianas
Por su carácter de anticipación
de un porvenir posible
o probable, el Somnium
Astronomicum —de Kepler,
siglo XVII— prefigura, si no
me equivoco, el nuevo género
narrativo que los americanos
del Norte denominan science-fiction
o scientifiction 1 y
del que son admirable ejemplo
estas Crónicas.
Su tema es la conquista y
colonización del planeta. Esta
ardua empresa de los hombres
futuros parece destinada
a la época, pero Ray Bradbury
ha preferido (sin proponérselo,
tal vez, y por secreta inspiración
de su genio) un tono
elegíaco. Los marcianos, que
al principio del libro son espantosos,
merecen su piedad
cuando la aniquilación los alcanza.
Vencen los hombres
y el autor no se alegra de su
victoria. Anuncia con tristeza
y con desengaño la futura
expansión del linaje humano
sobre el planeta rojo —que su
profecía nos revela como un
desierto de vaga arena azul,
con ruinas de ciudades ajedrezadas
y ocasos amarillos
y antiguos barcos para andar
por la arena—.
Otros autores estampan
una fecha venidera y no les
creemos, porque sabemos
que se trata de una convención
literaria; Bradbury escribe
2004 y sentimos la
gravitación, la fatiga, la vasta
y vaga acumulación del
pasado —el dark backward
and abysm of Time del verso
de Shakespeare—. Ya el Renacimiento
observó, por boca
de Giordano Bruno y de Bacon,
que los verdaderos antiguos
somos nosotros y no los
hombres del Génesis o de Homero.
¿Qué ha hecho este hombre
de Illinois, me pregunto,
al cerrar las páginas de su libro,
para que episodios de la
conquista de otro planeta me
pueblen de terror y de soledad?
¿Cómo pueden tocarme estas
fantasías, y de una manera
tan íntima? Toda literatura
(me atrevo a contestar) es
simbólica; hay unas pocas
experiencias fundamentales
y es indiferente que un es-
Julio 2012

critor, para transmitirlas, recurra
a lo «fantástico» o a lo
«real», a Macbeth o a Raskolnikov,
a la invasión de Bélgica
en agosto de 1914 o a una
invasión de Marte. ¿Qué importa
la novela, o novelería,
de la science fiction? En este
libro de apariencia fantasmagórica,
Bradbury ha puesto
sus largos domingos vacíos,
su tedio americano, su soledad,
como los puso Sinclair
Lewis en Main Street.
Acaso «La tercera expedición»
es la historia más alar-
mante de este volumen. Su
horror (sospecho) es metafísico;
la incertidumbre sobre
la identidad de los huéspedes
del capitán John Black
insinúa incómodamente que
tampoco sabemos quiénes somos
ni cómo es, para Dios,
nuestra cara. Quiero asimismo
destacar el episodio titulado
«El marciano», que
encierra una patética variación
del mito de Proteo.
Hacia 1909 leí, con fascinada
angustia, en el crepúsculo
de una casa grande que ya
no existe, Los primeros hombres
en la Luna, de Wells.
Por virtud de estas Crónicas
de concepción y ejecución
muy diversa, me ha sido dado
revivir, en los últimos días
del otoño de 1954, aquellos
deleitables terrores. R
(Del prólogo a la edición de
Crónicas marcianas de Ediciones
Minotauro, Buenos Aires,1955)
1 Sciencefiction es un monstruo verbal en que se amalgaman el adjetivo scientific y el
nombre sustantivo fiction. Jocosamente, el idioma español suele recurrir a formaciones
análogas; Marcelo del Mazo habló de las orquestas de gríngaros (gringos + zíngaros) y
Paul Groussac de las japonecedades que obstruían el museo de los Goncourt.
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ESPECIAL
n Ray Bradbury
n Ray Bradbury
R 8 ROCINANTE
BRADBURY
Las palabras y yo
Un testimonio del autor a partir de la escritura
de su libro El vino del estío
Como la mayoría de mis
libros y cuentos, El vino del
estío fue una sorpresa. Gracias
a Dios, era bastante joven
como escritor cuando empecé
a entender la índole de
semejantes sorpresas. Hasta
entonces, como todo aprendiz,
pensaba que se podía dar
vida a una idea a fuerza de
golpes, bofetadas y latigazos.
Bajo un tratamiento así, por
supuesto, toda idea decente
dobla las patas, se echa boca
arriba, fija los ojos en la eternidad,
y muere.
Fue entonces con gran
alivio que, con algo más de
veinte años, di de pronto con
un simple proceso de asociación
de palabras. Todas las
mañanas me levantaba, iba
hasta el escritorio y escribía
cualquier palabra o serie de
palabras que me pasaran por
la cabeza.
Luego me alzaba en armas
contra el mundo, o a su favor,
y ponía una variedad de personajes
a sopesar la palabra
y enseñarme qué significaba
en mi vida. Una o dos horas
más tarde, para mi asombro,
había concluido un nuevo
cuento. Era una sorpresa
total y encantadora. Pronto
descubrí que tendría que trabajar
así el resto de mi vida.
Primero me hurgaba la
mente en busca de palabras
que describieran mis pesadillas
personales, mis miedos
Julio 2012

«Yo me pasaba la vida acumulando imágenes,
almacenándolas, y olvidándolas luego. (...)
Tenía que retroceder en el tiempo, usando como
catalizador las palabras, para abrir los recuerdos»
nocturnos y mi infancia, y
a partir de ellas modelaba
una historia. Luego echaba
una larga mirada a los verdes
manzanos y la vieja casa
donde había nacido, y a la
casa de al lado donde vivían
mis abuelos, y a todos los
prados de mis primeros ve-
ranos, y me ponía a probar
palabras para eso.
Lo que hay en El vino del
estío, el vino que se hace con
diente de león, es un ramo de
dientes de león de aquellos
años. La metáfora del vino,
que aparece en esas páginas
una y otra vez, es maravillo-
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ESPECIAL
samente apropiada. Yo me
pasaba la vida acumulando
imágenes, almacenándolas,
y olvidándolas luego. De
alguna manera tenía que
retroceder en el tiempo,
usando como catalizador
las palabras, para abrir los
recuerdos y ver qué tenían
para ofrecer.
Así que de los veinticuatro
a los treinta y seis años
apenas pasó un día en que
no me echara a caminar
por una reminiscencia de la
hierba de mis abuelos en el
norte de Illinois, esperando
tropezar con algún petardo
medio quemado, un juguete
herrumbroso o un fragmento
de carta escrita por un yo
más joven con la esperanza
de contactar con la persona
mayor que sería y recordarle
su pasado, su vida, su gente,
sus alegrías y sus torrenciales
penas. (…)
Por el camino, asociando
palabras, choqué con viejas
y sinceras amistades. En mi
infancia en Arizona tomé
prestado a mi amigo John
Huff y lo despaché a Creen
Town, en el este, para poder
despedirme de él como era
debido.
Por el camino me senté a
desayunar, almorzar y cenar
R 10 ROCINANTE
BRADBURY
con los hacía tiempo muertos
y los muy queridos. Pues yo
fui un chico que quería de veras
a sus padres, sus abuelos
y su hermano, por más que
ese hermano «le escurriera
el bulto».
Por el camino me encontré
en el sótano, triturando uvas
en la prensa de mi padre, o
en el porche, la noche del Día
de la Independencia, ayudando
a mi tío Bion a cargar y
disparar un doméstico cañón
de hojalata.
Descubrí entonces que estaba
sorprendido. Nadie me
había dicho que me sorprendiera,
debo añadir. Di con las
viejas y mejores formas de
escribir a través de la ignorancia
y la experimentación,
y me sobresalté cuando de
los arbustos saltaron verdades,
como perdices antes del
disparo. Entré en la creatividad
a tientas, ciego como
cualquier niño que aprende a
ver y andar. Aprendí a dejar
que mis sentidos y mi Pasado
me dijeran todo aquello que
de algún modo era verdad. R
(fragmento de «De este lado
de Bizancio: El vino del estío»,
en Zen en el arte de escribir,
1974)
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Fahrenheit 451:
despertar el pensamiento
Guy Montag es un bombero
que vive en una sociedad
aislada, donde los libros han
sido prohibidos por un gobierno
que teme el pensamiento
independiente de la gente.
La tarea de los bomberos es
quemar cualquier libro a la
vista o las colecciones de libros
que han sido reportadas
por informantes. La gente en
esta sociedad, incluyendo la
esposa de Montag, están embelesados
de complacencia y
obtienen la información a través
de pantallas gigantes de
televisión. Una vez que Montag
se enamora de Clarisse,
Escena de la película
de Truffaut
una bibliómana, empieza a
leer libros confiscados. A través
de esta relación, empieza
a cuestionar las motivaciones
del gobierno detrás de la quema
de libros. Pronto, Montag
es descubierto y, entonces,
debe decidir si regresa a su
trabajo o si huye, a sabiendas
de las consecuencias que enfrentaría
si fuera capturado.
Clarisse empieza el irreversible
cambio en la vida
de Montag con una simple
pregunta: «¿Leyó alguna
vez alguno de los libros que
quema?». La duda empieza a
gestarse en el personaje, y al
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ROCINANTE 11

ESPECIAL
final su respuesta no puede
ser más reveladora: «—Piensas
demasiadas cosas —dijo
Montag, incómodo». Pensar
demasiado puede ser percibido,
en efecto, como algo
negativo. La sociedad en la
que ambos viven hace mucho
que ha entrado en un
profundo letargo; hace falta
despertar en los demás la
capacidad de pensamiento.
Tal como el mismo Sócrates
se comparaba con un tábano
R 12 ROCINANTE
BRADBURY
Fahrenheit de Françoise
Truffaut
Elenco: Julie Christie (Linda
y Clarisse); Oscar Werner
(Montag); Cyril Cusack (el
Capitán); Bee Duffell (la
mujer-libro); Gillian Lewis
(la locutora de televisión);
Jeremy Spenser (el hombre
de la manzana).
Oscar Werner y Julie
Christie, en el filme de
Truffaut, basado en la
novela de Bradbury
que picaba y despertaba a la
polis, Clarisse se convierte
en ese tábano para Montag,
es ella quien lo despierta.
(Fragmentos de http://www.
ciencia-ficcion.com)
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CUENTO
n Ray Bradbury
La costa
Marte era una costa distante y los hombres cayeron en
olas sobre ella. Cada ola era distinta y cada ola más fuerte.
La primera ola trajo consigo a hombres acostumbrados a los
espacios, el frío y la soledad; cazadores de lobos y pastores
de ganado, flacos, con rostros descarnados por los años, ojos
como cabezas de clavos y manos codiciosas y ásperas como
guantes viejos. Marte no pudo contra ellos, pues venían de
llanuras y praderas tan inmensas como los campos marcianos.
Llegaron, poblaron el desierto y animaron a los que querían
seguirlos. Pusieron cristales en los marcos vacíos de las ventanas,
y luces detrás de los cristales.
Esos fueron los primeros hombres.
Nadie ignoraba quiénes serían las primeras mujeres.
Los segundos hombres debieran de haber salido de otros
países, con otros idiomas y otras ideas. Pero los cohetes eran
norteamericanos y los hombres eran norteamericanos y siguieron
siéndolo, mientras Europa, Asia, Sudamérica y Australia
contemplaban aquellos fuegos de artificio que los dejaban
atrás. Casi todos los países estaban hundidos en la guerra o en
la idea de la guerra.
Los segundos hombres fueron, pues, también estadounidenses.
Salieron de las viviendas colectivas y de los trenes
subterráneos, y después de toda una vida de hacinamiento en
los tubos, latas y cajas de Nueva York, hallaron paz y tranquilidad
junto a los hombres de las regiones áridas, acostumbrados
al silencio.
Y entre estos segundos hombres había algunos que tenían un
brillo raro en los ojos y parecían encaminarse hacia Dios...
R
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ROCINANTE 13

EL LIBRO
La Campaña de Lectura realiza una publicación
especial en el mes de Guayaquil: una novela de
1855 con la historia de unos reos en Galápagos,
que decidieron escapar y convertirse en piratas
C
R 14 ROCINANTE
DEL MES
Un hallazgo
literario
Cuando se piensa en
las primeras novelas ecuatorianas,
es casi inevitable
nombrar La emancipada, de
Miguel Riofrío, publicada en
1863, seguida de cerca por
Cumandá, de Juan León Mera,
de 1879.
¿Pero qué diríamos, sin embargo,
de una novela de 1855,
escrita en el país, cuya trama
y personajes son ecuatorianos,
y que refleja un período
especialmente convulso para
el Ecuador naciente? Claro,
la novela, titulada El pirata
del Guayas, del autor nacido
en Chile Manuel Bilbao, ha
pasado casi desapercibida en
nuestra historiografía literaria,
por no llevar la firma
de un ecuatoriano de nacimiento,
pese a que tuvo tres
ediciones (la última, en 1904).
Pero sin duda que pertenece
a las letras de nuestra tradición.
Con tal hallazgo dio hace
poco Esteban Mayorga, escritor
ecuatoriano que, durante
la investigación para su tesis
de doctorado en EEUU —que
versa sobre las Galápagos y
su presencia en la literatura
mundial—, encontró en
la Biblioteca de Harvard el
original de esta novela (que
es, además, de ágil lectura y
escrita con innegable talento).
Mayorga ha prologado la
edición de la obra que ahora
publica, en una suerte de «primicia
histórica», la Campaña
de Lectura Eugenio Espejo,
para beneficio del público
lector y de los estudiosos e
interesados en la literatura
escrita en Ecuador.
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El pirata del Guayas
n Esteban Mayorga
Manuel Bilbao nació en
Chile, en 1827, pero vivió en
Guayaquil y estuvo escondido
por seis meses en 1854, tiempo
que aprovechó para informarse
acerca de las hazañas
de un recluso ecuatoriano de
apellido Briones. Las aventuras
de este son la principal
base de El pirata del Guayas,
fundamentalmente tomadas
del proceso criminal que tenía
lugar en Guayaquil.
Cuando Bilbao escribió su
texto el país, como muchos
otros del continente, aún no
estaba integrado sino que
sufría un proceso inacabado
de organización republicana,
la cual no llegaría a consolidarse
sino hasta mucho después.
En el momento en que
Bilbao llegó al Ecuador, recién
había decaído cierto temor de
que Juan José Flores volviera
del exilio para sacar del poder
a José María Urbina, algo
que Flores intentó en varias
ocasiones sin éxito después
de que se lo defenestrara en
1845. Se rumoreaba que nuestro
primer presidente ya había
incluso reunido los hombres
suficientes para tal propósito,
y que era solamente una cuestión
de días para la invasión.
Por este motivo la novela de
aventuras, la figura del ban-
dido, así como aquella del
pirata, son el formato ideal
para capturar el contexto histórico-político
por el cual el
país estaba atravesando.
Debido a los estremecimientos
nacionales en las naciones
latinoamericanas, el pirata ya
no era considerado necesariamente
un fugitivo salteador
de los mares, sino también
una suerte de héroe que presentaba
un camino de acción
y violencia con fines nobles
—no olvidemos que durante
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ROCINANTE 15

EL LIBRO
las guerras de Independencia
muchos piratas se adhirieron
a uno u otro bando—, alterno
a la argumentación política y
su poder supremo basado primariamente
en ideas y conceptos
de poca ejecución. El
pirata en sí muestra la ausencia
de fronteras y, por ende,
una supuesta libertad absoluta
a partir de la independencia
del virreinato, la cual
se dio, así como las gestas
piráticas, por medio de la
fuerza. Dado que la política
era la preocupación más prevalente
en la época, prácticamente
todos los textos escritos
durante ella en nuestro continente
tenían que lidiar, de un
modo u otro, con la construcción
del Estado-nación después
de la independencia.
Se trata de «ficciones fundacionales»
—término acuñado
por Doris Sommer en su
libro Ficciones Fundacionales.
Las novelas nacionales de
América Latina— que pretenden
representar el momento
inicial de la constitución de los
países recién independizados.
Muchos de estos textos proponían
vías para estabilizar la
nación en formación, según la
ideología del hombre de letras
que los escribiera y el aparato
político, social y económico al
que pertenecía; e intentaban
formular modelos narrativos
R 16 ROCINANTE
DEL MES
para presentar los problemas
de las nuevas repúblicas. Esta
novela no solo es importante
porque presenta dicho modelo
narrativo nacional, aunque de
forma marginal e irreverente
pues en ella prima la ruptura
y no la cohesión; sino también
por su fecha de aparición
pues, al parecer, podría ser la
primera escrita en el Ecuador,
aunque no por un ecuatoriano,
postulándose antes
de La Emancipada, de Miguel
Riofrío, que es de 1863.
Fechas, géneros y autores
no importan tanto como el
texto en sí, y por eso mismo
asombra la contemporaneidad
de algunos de los temas
de El pirata del Guayas, desde
el cuestionamiento a la pena
de muerte hasta la búsqueda
de un modelo moderno para
la reforma del sistema que la
apadrina. Pero la obra también
es significativa porque
evidencia el conocido conflicto
de la «civilización» contra la
«barbarie», que tanto preocupaba
a nuestros intelectuales
al fundar la nación. La preocupación
central de muchos era
que Latinoamérica era «bárbara»
en esencia, y la única
forma de cambiarla para llegar
a la modernidad era por
medio de la inserción de instituciones
«civilizadas» en la
sociedad (fueran estas educa-
Julio 2012

tivas, militares, comerciales,
etc.); y el sistema penitenciario
no era ninguna excepción.
A todo esto se suma la prosa
romántica típica del melodrama
y del período al que
pertenece el texto, ágil, abundante
en diálogos no obstante
las complejas reflexiones
que plantean sus personajes.
A pesar de tales condiciones,
esta novela corta no se
ha vuelto a editar desde hace
más de un siglo y es prácticamente
desconocida en el
ámbito académico, no se diga
en la comunidad pública y
el lector convencional; por este
motivo la presente edición,
de la Campaña Nacional Eugenio
Espejo por el Libro y la
Lectura, es fidedigna y se encuentra
actualizada a los criterios
contemporáneos tanto
en la ortografía como en la
puntuación.
La historia que se cuenta
ocurrió realmente y es, además
de deliciosa, inverosímil,
y por este motivo, así como
por su importancia contextual
y su actualidad, su reimpresión
se hace necesaria. Si
el reo representaba al Ecuador
antes del primer grito de
independencia, el pirata venía
a ser el país ya emancipado
pero falto de dirección
y, por ello mismo, destinado
al fracaso. En efecto, el pirata
de esta novela consigue mucho
más por medio de la razón
justamente argumentada
que a través del crimen y la
intimidación. Bilbao sugiere
una lógica bien articulada a
partir de una historia irracional,
algo que puede aplicarse
a nuestros tiempos con relativa
facilidad. R
Las aventuras de piratas se relacionan con un clima social convulso
(fragmentos del prólogo)
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ROCINANTE 17

AUTOR
n Leonardo Valencia
R 18 ROCINANTE
REFLEXIÓN
Puerto inédito
Una panorámica del paisaje editorial
guayaquileño en la actualidad
La carencia editorial en
Guayaquil se muerde la cola.
Que no hay lectores, y si los
hay prefieren leer libros extranjeros
porque no se consiguen
los nacionales. Que no
hay librerías, y si las hay resulta
que una sola editorial
española —ver Anagrama
en Mr. Books— tiene tantos
estantes como toda la literatura
ecuatoriana, por lo que
insisto: ¿cuándo los libros locales
tendrán buena exposición
en librerías? Que no hay
prensa cultural, y si la hay
solo reseña libros extranjeros
(criticar autores del propio
país requiere tanto audacia
como cortesía: se trata
de que los libros se discutan).
Que no hay libros, y si los hay
están publicados en colecciones
que nadie ve ni consigue
ni sabe dónde conseguir. Que
no hay bibliotecas, y si las
hay, me refiero a la Biblioteca
Municipal, el curioso lector
descubrirá esa inasible
sensación de «míralo pero no
lo toques».
El problema se seguirá
mordiendo la cola si aparece
quien advierte que sí se publican
libros sobre Guayaquil.
No se trata de eso, sino de publicar
libros sin más, sin cobrar
a los autores el costo de
la publicación y, sobre todo,
con la certeza de que el libro
no entrará en ese anonimato
de lo publicado y no distribuido.
Menos aún en este
puerto que, paradójicamente,
en vez de exportar libros sigue
inédito pero sí consume
los importados.
Hacerse una idea de la cultura
literaria de Guayaquil es
misión imposible. No hay libros
para el lector común. Es
un campo para lectores nada
comunes, pero esto precisamente
es lo más común de las
culturas minoritarias. No hay,
por lo tanto, una vida literaria
guayaquileña o ecuatoriana:
sus lectores y autores
son fantasmas de artículos
ocasionales en revistas inhallables,
o deambulan en breve
por Facebook y Twitter, creyendo
que tienen el mundo a
la mano pero ellos (sus libros)
no están al alcance de nadie.
En resumen, una subcultura
Julio 2012

cifrada, vaporosa y endogámica.
En breve: inédita.
Volviendo al papel, hay clásicos
de la literatura ecuatoriana
que no deben ser leídos
en ediciones estudiantiles
—me disculpará la editorial
Libresa, que mucho hace por
llegar a los estudiantes— pero
tampoco en tochos de obras
completas ribeteadas de oro.
Se debería ofrecer, por licitaciones
rigurosas, la posibilidad
de subvencionar determinados
proyectos a editoriales
independientes comprándoles
un porcentaje de libros,
así como eliminar impuestos
al papel para libros editados
en el país, dar descuentos especiales
en envíos postales y,
sobre todo, favorecer la distribución
a librerías.
Los libros no llegan a ustedes,
inalcanzables y queridos
y a veces comodones
lectores, aunque los escrito-
res guayaquileños escriban y
publiquen. Más bien dejarán
de escribir o se quedarán inéditos
porque nadie los aprecia
hasta que se mueran, y
a veces ni siquiera eso, porque
ser reconocidos les toma
dos o tres generaciones. Muchos
de esos escritores publicarán
fuera del país, o simplemente
se irán, primero a
Quito —donde descubrirán
que el asunto no está mucho
mejor— y luego todos terminarán
marchándose del país
o se desvanecerán. Quizá entonces
se habrán convertido
en escritores extranjeros y
volverán etéreos en forma de
e-book, para consumo de unos
cuantos happy few que no
hacen una cultura literaria y
editorial realmente viva. R
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ROCINANTE 19

REPORTAJE
Entre vitrales,
una biblioteca con
rostro humano
Ubicada en el subsuelo de
la Torre B, se encuentra la
Biblioteca de la Universidad
Andina Simón Bolívar. El silencio,
la belleza de los vitrales,
la variada colección de
arte religioso y el alineamiento
de miles de libros conforman
el área más concurrida
R 20 ROCINANTE
En la Universidad Andina la biblioteca se
encuentra en constante actualización
por los estudiantes desde las
primeras horas hasta el cierre
de sus puertas.
Recorriendo cada área,
pendiente de las novedades o
requerimientos, está un personaje
de mirada reflexiva;
en su rostro se dibuja una
sonrisa al recibirnos, se tra-
Julio 2012

ta del bibliotecólogo Enrique
Abad. «El libre acceso a una
biblioteca de calidad debe
estar contemplado como un
derecho fundamental del
ser humano». Esta ha sido
su consigna y principal motivación,
desde los tiempos
en que como pasante estuvo
a cargo de la sección de Archivos
y Registros de diario
El Comercio, hasta hoy, en
su labor de Director de la
Biblioteca de la Universidad
Andina y Presidente de la
Asociación Nacional de Bibliotecarios:
«Es preocupante el estereotipo
que la mayoría de
gente tiene acerca de quien
labora en una biblioteca: nos
imaginan como personas de
actitud avinagrada y escaso
interés por el usuario, lo cual
es penoso; en Ecuador, desconocemos
que la Bibliotecología
es una profesión que
requiere estudios específicos
de alto nivel.»
Afirma que en nuestro
medio, quienes están en las
bibliotecas son gente de preparación
casi empírica, debido
a que el sistema educativo
formal, no considera a la Bibliotecología
como una carrera
de gran potencial, como la
consideran en países vecinos
como Colombia: «Especialmente
en Bogotá, esta es una
profesión bien remunerada y
tiene gran acogida entre los
estudiantes universitarios».
Dieciséis años al frente de
la biblioteca lo han llenado
de experiencia y ánimo para
seguir asumiendo retos. «La
modernización del sistema
operativo ha sido determinante
para nosotros, todos
los libros, y registros sonoros
que dispone esta biblioteca,
resultado de investigaciones
en diferentes partes de América,
han sido digitalizados,
evitando así el deterioro de
material invaluable. Al iniciar
el proceso de digitalización,
el personal llevaba años
laborando en medio de las
dificultades que implica tener
un registro creciente de
libros, mayor concurrencia
y pocas manos para hacerse
cargo de tanto trabajo; a pesar
de ello, al implementar el
sistema digital muchos de los
bibliotecarios eran reacios a
este cambio, pues creían que
la computadora iba a reemplazar
su capacidad laboral.
Al cabo de un tiempo, descubrieron
que no hay máquina
que pueda reemplazar el trabajo
de una persona, lo facilita
pero jamás lo desplaza,
Julio 2012 R
ROCINANTE 21

REPORTAJE
Enrique Abad, director de la Biblioteca de la Universidad Andina Simón Bolívar
porque toda biblioteca debe
tener un rostro humano».
Una biblioteca que se mantiene
al margen de la tecnología,
por una u otra razón,
pone en grave riesgo el patrimonio
con el que cuenta;
es por eso que esta biblioteca
apuesta por la innovación
tecnológica: «Nuestra actual
configuración de software
es la más utilizada en las mejores
bibliotecas de América
Latina, por su eficiencia, precisión
y facilidad de acceso»,
asevera Abad.
A pesar de los avances, el
director manifiesta su preocupación
por que Ecuador
R 22 ROCINANTE
carece de una nueva generación
de bibliotecarios cuya
preparación les permita
continuar los proyectos trazados;
por ello, a corto plazo
la Universidad Andina contará
con seminarios y talleres
de Bibliotecología, con
la participación de expertos
y académicos de las mejores
universidades del mundo, lo
cual permitirá enriquecer los
conocimientos de los participantes
en posgrados de carreras
afines, que a lo mejor
opten por dedicarse a este
oficio, que encabeza la lista
de las grandes carreras del
futuro. (PR) R
Julio 2012

Foto de Martina Valarezo
LIBRO
DE POESÍA
La fiera consecuente
El nuevo poemario de Margarita Laso
El tiempo es el mejor
sensor y es implacable albacea
que separa al poeta de
su obra. Después de algunos
años sostenida en el silencio,
se publica La fiera consecuente.
Materia acerada, lacerada
y macerada por su autora,
hoy pudo salir límpida, con
las garras sumergidas en el
brillo de la palabra.
Las tres partes que conforman
este libro están hechas
con la fuerza y la sensualidad
del animal que llevamos en el
instinto y con la sabiduría y la
reflexión que siempre fusionó
la poesía de Margarita Laso.
Ella vincula el naturalismo
con la filosofía, la violencia
con la pausa. La soledad, lo
que no puede asirse y lo que
no tiene remedio. Emoción y
pasión, esas dosis, aquí aparecen
mordidas y remordidas
con palabras. Con ellas se
debe dominar a la fiera que
habita el poema. Por ellas deberá
salir de su escondite.
Julio 2012 R
ROCINANTE 23

LIBRO DE POESÍA
POEMAS
Pez espino
me traes este pez lleno de púas
si fuera de lana un pez
en que caben dedo desdén deseo
recordaría los cardos que contienen encarnes
pero es un pez espino
cuyas cerdas son una amenaza
una ponzoña
un pez espléndido en su vitrina
un pez con franjas de colores vívidos vivientes
esos que saltan —como peces mismo—
y tóxicos salpican
flecos espinas tajos en la boca
y embriagan de verlos tan bellos
tan riesgosos
vestido de cerdas este pez que traes
no pide que lo toquen no es cachorro no es crianza
no alimenta el viejo instinto materno —táctil
mas si lo mordiera si ansiosamente lo mordiera
moriríamos ambos de asco
y convulsión.
El panal
te llama mi cerebro
un conjunto de celdillas hexagonales
un prisma que filtra el polen que te trae
todos los nexos son de cera
en este bosque geométrico
un panal es un hotel
y aquí el murmullo de obreras infértiles
a ciertas horas
alojamiento de otras abejas felpudas
zumbido que no se aleja
R
24 ROCINANTE
Julio 2012

mareado por los cánticos
te urge mi cerebro
enjambre ausente
ahora espero las larvas del alba
los paneles orientales de tus alas
tus lomos velludos que rozan y cepillan
te nombra mi cerebro
un panal es un hotel
un panal es un nido
con tu dulce y tu aguja
abre los ojos en este castillo
tengo lágrimas de cera
tengo el cuello cargado de hexágonos vacíos.
El grabado de la portada, de autoría de la artista Paula Barragán
Julio 2012 R
ROCINANTE 25

LIBRO
R 26 ROCINANTE
NOVEDAD
Pasiones secretas
n Lucía Lemos
La escritora ecuatoriana Rocío
Madriñán presenta una nueva
novela policial
A los tres años de la
publicación de su anterior
novela, Rocío Madriñán nos
presenta su nueva obra, Pasiones
secretas, siguiendo el
mismo estilo de novela policial
y continuando la saga de
su personaje, Sánchez Montalvo.
Esta vez, ya no es más
Inspector Jefe de Policía sino
que actúa como investigador
privado y tiene una rivalidad
con el nuevo inspector, un
hombre sin mucha cultura
y con el afán de resolver los
casos de la manera más rápida
y fácil posible.
Pasiones secretas mantiene
la estructura clásica del
género: un asesinato que
rompe con el orden de una sociedad,
el cadáver del chofer
de una embajada; un investigador
(Sánchez Montalvo), su
ayudante —también conocido
en otras novelas de Madriñán,
el Omoto Guamán—,
los sospechosos, los testigos,
la búsqueda de motivos y la
voz narrativa, omnisciente,
que va relatando no solo los
acontecimientos sino lo que
piensan, deducen y analizan
los personajes dentro de su
conciencia.
Todo esto, narrado con excelente
manejo del lenguaje,
conocimiento de la sicología
de los seres humanos, tiempo
y espacio construidos con la
habilidad propia de una escritora
con trayectoria, y que
aportan para que los lectores
se mantengan atados a la
trama sin poder despegarse
de ella.
Algo importante de destacar
en la novela es la
modalidad de contar otras
historias dentro de la historia
central. La vida de Rosa, uno
de los personajes, le da un
colorido especial y nos ubica
en la situación de la embajada,
a la vez que juega con
el tiempo, trasladándonos a
décadas antes del suceso investigado:
Según los recuerdos de
Rosa, era una india vieja que
tenía impregnada hasta en
su alma el olor de las cebo-
Julio 2012

llas. Esta buena mujer trató
de hacer de la infancia de
Rosa algo menos trágico de
lo que era.
Los flashbacks atraviesan
toda la novela por medio de
los recuerdos de algunos de
los personajes:
María no se equivocaba.
Sucedió diez años atrás durante
una hermosa tarde de
verano.
Aquel día su padre había
llegado muy malhumorado.
Sánchez no entendía, pues
apenas contaba con seis años
de edad, si estaba furioso
porque regresaba muy temprano
a la casa o porque aún
no estaba listo el almuerzo.
Es destacable la presencia
de Quito. Podemos recorrer
junto con la voz narrativa lugares
de nuestra ciudad, tal
como es, ni bella ni fea, no se
utilizan muchos adjetivos ni
se trata el tema de forma superlativa.
Solo Quito:
Los chalets se alineaban a
lo largo de varias cuadras,
dando la impresión de estar
sometidas a una especie de
disciplina militar. En esa parte
de la ciudad, las enormes
faldas del volcán Pichincha
se asentaban suavemente,
produciendo en el terreno
apenas una ligera inclinación.
Se podía decir que era
una de las zonas más planas
de la irregular faz capitalina
constituida por pequeñas
elevaciones que sucedían a
colinas y a montes más altos.
Hay párrafos en los que encontramos
intertextualidad,
como cuando se mencionan
investigadores clásicos de la
literatura policial, Sherlock
Holmes, Philip Marlove, entre
otros.
Una historia que puede
suceder en Quito, Santiago,
Bogotá o México. Nítida en
su construcción sintáctica
y propia de una gran experiencia
novelística. Pasiones
secretas tendrá un puesto en
la narrativa policial ecuatoriana.
R
Julio 2012 R
ROCINANTE 27

PALABRAS
R
28 ROCINANTE
DE CINE
Prometheus
Un viaje galáctico al terror
Ridley Scott aborda los antecedentes
de Alien en su nueva cinta
Julio 2012

n Juan F. Jaramillo
Treinta años después de dejar su
marca en la cultura popular con Alien
(1979), Ridley Scott retorna a la ciencia
ficción, género para el que dirigió también
otro clásico: Blade Runner (1982).
Ahora, con su nuevo filme, Prometheus,
apuesta por esa grandilocuencia
visual y aquella dosificada dosis de
suspenso del Alien original. El filme
termina convirtiéndose en una genuina
cinta de horror, capaz de estremecer a
la audiencia y dejar más de una butaca
rasgada.
Pero Prometheus es más show que
contenido. Ese no sería un problema si
la película no se tomase su pseudociencia
tan en serio.
La cinta, protagonizada por Noomi
Rapace y Michael Fassbender, aborda
temas tan complejos como el origen de
la humanidad y se desvía decididamente
del darwinismo, pero con respuestas
poco satisfactorias.
La protagonista,
interpretada por
Noomi Rapace
Julio 2012 R
ROCINANTE 29

PALABRAS
Charlize Theron
hace de una
burócrata que
supervisa la
misión con
frialdad
R 30 ROCINANTE
DE CINE
Prometheus está concebida como
la historia previa a Alien, en donde
Sigourney Weaver interpretaba a Ripley,
uno de los personajes femeninos
más fuertes y emblemáticos del cine. El
guiño a la protagonista de este filme,
Noomi Rapace, es obvio, ya que la actriz
sueca interpretó a Lisbeth Salander en
la trilogía Milenio original y creó otra
heroína inolvidable del celuloide.
Rapace esta vez encarna a Elizabeth
Shaw, una científica vulnerable, pero
con una enorme capacidad de supervivencia,
como lo demuestra la secuencia
más impactante de esta cinta, que tiene
que ver con una máquina que realiza cirugías.
Shaw es una perfecta heredera
de Ripley aunque, en la narrativa de la
historia, la antecede.
Shaw es parte de un grupo de científicos
que, tras encontrar claves en
distintas culturas de la Tierra sobre una
visita interplanetaria, concluye que la
humanidad fue creada por extraterrestres
y que éstos dejaron un mapa con
la respectiva invitación. Así es como la
Julio 2012

nave Prometheus, unos 100 años en el
futuro, arriba a un planeta árido y con
vientos huracanados, donde descubren
que los extraterrestres no son tan amigables
como ellos pensaban.
Al igual que en el Alien original, la
nave Prometheus también tiene un robot
humanoide, David, interpretado por
Fassbender. David es tan perverso como
la computadora HAL de 2001, una
odisea en el espacio, pero con los manerismos
de Peter O’Toole en Lawrence de
Arabia. Al igual que Shaw, Fassbender
es uno de los deleites de este filme
Charlize Theron interpreta a Meredith
Vickers, una burócrata que supervisa
la misión con frialdad y un nulo interés
científico y, dado el desenlace de la trama,
es la más acertada del grupo.
Los científicos, como suele ser el caso
en Hollywood, son sumamente torpes y
Michael
Fassbender
interpreta a
un robot
humanoide
Julio 2012 R
ROCINANTE 31

PALABRAS
FICHA TÉCNICA
Prometheus
Director: Ridley Scott
Elenco: Noomi Rapace,
Michael Fassbender,
Charlize Theron, Logan
Marshall-Green, Idris
Elba, Guy Pearce
Duración:
122 minutos
R 32 ROCINANTE
DE CINE
poco profesionales durante su exploración
de una cueva con pruebas de
vida extraterrestre. Si uno ha visto
Alien, ya sabe qué tipo de extraterrestres.
La noción del alienígena malvado
era común en las novelas de ciencia
ficción en tiempos de la Guerra Fría
y conforme se acercaba el fin de la
Unión Soviética, el cine se llenó de
extraterrestres más amigables como
E.T. Scott definitivamente recurre a
una mentalidad de los 70 para elaborar
esta obra, incluso las preguntas
del filme parecen estar más enmarcadas
en aquella época.
A diferencia de otras películas clásicas
de ciencia ficción, Prometheus
no parece estar interesada en hacer
un comentario sobre el presente. Es
terror puro y duro; vacío, pero magistralmente
ejecutado. R
Julio 2012

CRÓNICA
Norman Manea
n Juan Cruz
cree que hay que
mirar cómo se ríeen
el
Mediterráneo
Me encontré con Norman
Manea, el excelente escritor
rumano, cuando salía de mi
entrevista en un hotel cercano
a la Feria del Libro con
Claudio Magris, el escritor
italiano.
Magris me dijo, como
Fuentes meses atrás, que no
entendía nada, que todo le
resultaba oscuro, que estábamos
atravesando la cuarta
guerra mundial, una guerra
económica, de poderes
económicos enfrentados, pero
que era optimista a largo
plazo.
Le dije a Manea que quería
saber su opinión. Él tenía
sobre la mesa su libro último,
La guarida, publicado por
Tusquets, en el que traza su
memoria de lo que fue vivir
en el exilio tras la traumática
experiencia de la dictadura
de Ceaucescu, que dio lugar
a tantos disimulos y a traicio-
nes tan imborrables. Pero no
me habló del libro, me habló
enseguida de lo que había dicho
su amigo Magris.
Él cree que, en efecto, se
entienden pocas cosas, pero
algunas sí sabe. Sabe,
por ejemplo, que si estos territorios
mediterráneos
(España, Italia, Grecia..., le
añadí Portugal, y él asintió)
se empeñaran en imponer
la alegría con la que afrontan
el desastre, el contagio
será muy positivo para Europa.
Europa está ahora, me
dijo, vestida con un traje gris
pesado, plúmbeo, triste, insoportable.
El continente, la Unión Europea,
necesita recuperar la
alegría, contagiarse de Grecia,
sobre todo. Me dijo que
todos los que vienen de Grecia
le dicen lo mismo: la
gente va a manifestaciones,
protesta por la desgracia del
Julio 2012 R
ROCINANTE 33 R

CRÓNICA
El escritor rumano Norman Manea
desempleo, pero cuando hay
que reír ríe y esa risa es la
esencia de la civilización
mediterránea, capaz, como
decía Magris que decía Brecht,
de cantar en los tiempos
oscuros...
Pero, me dijo Manea, ¿qué
se creen estos europeos que
es Grecia? ¿Cómo pueden
despreciarla, cómo pueden
decir que la van a dejar fuera
de Europa, si ese es el
origen de Europa? Le conté
que el día anterior había
leído en El País un excelente
artículo de Torreblanca en el
que comparaba la renta per
cápita de los estados pobres
de Estados Unidos con la renta
de los griegos, que están
por encima de Alabama, por
R 34 ROCINANTE
ejemplo, y a nadie se le ocurriría
pensar que Estados
Unidos dejaría caer el Estado
de Alabama. Y entonces él
saltó como impulsado por un
resorte para contarme que
había sabido que el año pasado
el número de traducciones
de literatura extranjera en
Estados Unidos fue el mismo
que las que hubo en Grecia.
Y me preguntó, desafiante y
confiado: Pero ¿qué se cree
Estados Unidos?, ¿que es más
fuerte que Grecia?
Cuando pidió el café nos
atendió una muchacha morena
a la que le pregunté
de dónde era. Es rumana,
se llama Kety, es de origen
greco-macedonio, lleva aquí
ocho años y enseguida trabó
Julio 2012

conversación con su paisano.
Gran maestro del diálogo en
sus libros, Manea demostró
ser, también, un maestro de
la conversación en directo,
pero confieso que no entendí
nada. Cuando nos despedimos
me invitó a su próxima
conferencia en la Royal Literary
Society de Londres,
donde firmará con la pluma
de Dickens. «¡Para un bárbaro
de los Balcanes no es poco
honor!», exclamó. R
Ahora en internet:
* Toda la información
* Toda la publicidad
* Todos los meses
www.revistarocinante.com
Julio 2012 R
ROCINANTE 35

LECTURA
R 36 ROCINANTE
ACTUALIDAD
Novela, masturbación
y ‘gran público’
n Manuel Rodríguez Rivero
Una reflexión sobre la búsqueda
editorial por tener «éxito» entre
los lectores
Hubo un tiempo en que
médicos, curas y demás líderes
de opinión coincidían en
que las novelas, lectura favorita
de las mujeres, eran no
solo perniciosas para la salud
física y moral, sino que
actuaban como auténticos
estímulos de la masturbación.
Miren lo que decía al
respecto el reputado médico
Samuel Auguste Tissot (1728-
1797), famoso, entre otras
cosas, por sus estudios sobre
el onanismo: «La ociosidad,
la inactividad, el quedarse
demasiado tiempo en una
cama blanda, la dieta abundante
con gran cantidad de
especias, sal y vino, los amigos
poco recomendables y los
libros licenciosos son las causas
que más probablemente
conducirán a estos excesos».
En el lenguaje de entonces,
«libros licenciosos» no eran
los pornográficos, sino las
novelas de amor, las mismas
que luego envenenarían los
ocios de Emma Bovary y de
otras malcontentas (incluyendo
a Anna Karénina, que
se entretenía con la lectura
de «novelas inglesas»).
Más tarde, cuando el Romanticismo
fue difuminando
el fulgor de las luces dieciochescas,
la novela inició
una meteórica carrera en el
mercado del libro hasta convertirse
en la reina absoluta
de la edición, la favorita en
las preferencias de los lectores
de todo el planeta. En
España, y según los datos
(siempre mejorables) proporcionados
por el Gremio
de Editores, la novela es el
género preferido por más
del 70% de los lectores. Y,
además, la narrativa es de
lo poco que se vende en las
librerías en estos días en que
la crisis arrecia y la exigua
Julio 2012

Greta Garbo, representando en una película a Anna Karenina
clientela se muestra renuente
a rascarse el bolsillo.
De hecho, algunos editores
tradicionalmente literarios
perciben que su fondo de calidad
no les sirve para mejorar
la cuenta de resultados y se
han lanzado a contratar novelas
y no-ficción ligera (que
antes nunca hubieran publicado)
para intentar llegar
ahora a públicos más amplios,
inventándose nuevas
colecciones y logos que trazan
una frontera simbólica
entre lo de antes y lo nuevo,
como si les avergonzara la
cohabitación de «productos»
tan diferentes.
Bueno, es una opción, pero
eso también está inventado,
solo que corresponde a otro
tipo de planteamientos editoriales.
Claro que en este
sector siempre se ha llevado
el mimetismo: se mira por el
rabillo del ojo lo que parece
que le funciona al vecino y se
copia con más o menos entusiasmo.
Conocí a un «editor»
Julio 2012 R
ROCINANTE 37

LECTURA
a principios de los
noventa (la década
de plomo de la
edición española)
que sostenía que
los que se dedicaban
al métier no
tenían que perder
el tiempo en
inventar nada,
bastaba con que
se limitaran a copiar
lo que otros
vendían. Con más
o menos alevosía y nubes de
tinta, esas nuevas colecciones
son auténticos cajones
de sastre en los que cabe de
todo: desde «best seller literario»
(¿piensan en Marías o en
Dueñas?) a sagas familiares
y memoirs (sic), pasando por
los consabidos thrillers y por
ese invento contemporáneo
que es el cross-over, es decir,
obras que intentan romper
las barreras de la edad
buscando la lectura transgeneracional
y que —para
encontrarles un precedente
histórico de qualité— suelen
emparentar con La isla del
tesoro (aunque crucen los dedos
para que resulten como
Harry Potter).
Leo los argumentos empleados
para promocionar esas
colecciones lanzadas por dis-
R 38 ROCINANTE
ACTUALIDAD
Ha llegado la
«hora del lector»,
convertido
gracias a las
redes sociales
en prescriptor
absoluto de
una época
ilusoriamente
democrática
tintas editoriales y
sorprende su paralelismo
retórico:
el énfasis se pone
en el sentimiento
y la emoción, en
que los libros sean
«inolvidables», en
que gusten «a todos
los públicos» y
en que «no entiendan
ni de edades,
ni de géneros, ni
de modas». Es decir,
la cuadratura del círculo,
solo que ahora a un nivel
más bajo, a ver si hay suerte.
Otros sellos se nutren de
las ficciones de la Red, de
esas «autoeditadas» que sus
autores cuelgan en Amazon
o en cualquier otro rincón
de Internet y se convierten
en repentinos best-sellers
a precio mínimo, aventados
a golpe de red social y
de blog oportunista. Algunos
editores las rastrean,
y si constatan que superan
la prueba de las descargas
(mínimo, tres o cuatro mil),
las contratan para pasarlas
al papel (la consagración),
quizás porque se imaginan
que si su autor/a tiene tantos
seguidores en Twitter y tantos
amiguitos en Facebook
el negocio no puede ir mal.
Julio 2012

Las novelas así re-publicadas
«llegan avaladas por decenas
de miles de ventas en Internet»
o «han revolucionado
el mercado digital», y en los
paratextos de las cubiertas (o
de las fajas) no llevan ya la
frase valorativa (y a menudo
descontextualizada) de un
crítico, sino «lo que los lectores
han dicho» de ellas.
Quién le iba a decir a mi
admirado José María Castellet
que sería justo ahora
cuando iba a llegar definitivamente
la «hora del lector»,
convertido gracias a las redes
sociales en prescriptor
absoluto de una época ilu-
soriamente democrática. De
modo que prepárense porque
se avecina una nueva
avalancha de obras «para el
gran público» a la que habrá
que hacer sitio, aunque solo
sea por un rato: hasta que
sean sustituidas por otras
igualmente intercambiables
y tengan que regresar, derrotadas,
a los almacenes
editoriales. Den por seguro
que a muchas de ellas nos las
encontraremos más pronto
que tarde en los baratillos de
los grandes almacenes. Esas
son las rígidas reglas del
darwinismo libresco y de la
fuga hacia delante. R
Librería en Miami abarrotada de gente a la espera de comprar Harry Potter
Julio 2012 R
ROCINANTE 39

NARRATIVA
R 40 ROCINANTE
ECUATORIANA
El tema del circo
es entrañable
El tema del circo ha sido abordado por más de una
docena de narradores ecuatorianos contemporáneos.
Ahora se suma Ramiro Arias con la novela
corta El gesto del payaso.
En el número 11-12 de la
revista La Bufanda del sol,
de 1977, aparece el primer
cuento de esta zaga: El triple
salto, de Iván Égüez, que
luego daría título a su primer
libro de cuentos, donde hay
varios de circo y de gitanos.
El tema fue abordado en el taller
Tientos y diferencias, de
Quito, y entre los integrantes
de la revista Sicoseo, de Guayaquil.
De ese tiempo son,
entre otros, Ana la pelota humana,
de Raúl Pérez Torres,
Raimundo y la creación del
mundo, y La cabeza hechizada,
de Velasco Mackenzie.
Cuando ya hubo más de una
docena de cuentos sobre el tema,
la Casa de la Cultura de
Guayaquil publicó una antología
titulada Bajo la carpa,
en 1981, donde a más de los
autores nombrados también
constan cuentos de Raúl Vallejo,
Javier Vásconez, Juan
Carlos Josse, Edwin Ulloa,
Abdón Ubidia, Hipólito Alva-
rado, Miguel Castillo Lara,
Guillermo Tenén Ortega.
El año pasado el programa
Quito lee dedicó un tomo al
cuento circense, donde entre
otros se publicaron cuentos
de Eduardo Varas, Huilo
Ruales y un fragmento de la
novela Las reglas del circo,
de Álvaro Samaniego.
Julio 2012

El gesto del payaso
Es una novela corta ambientada
en un circo que
recorre el norte del Perú,
aparentemente pobre y trashumante
como la mayoría y
se transporta en una vieja
camioneta Ford 250, pero
por la cantidad de animales
(elefantes, leones, panteras,
jaguares, perros, monos, caballos,
etc.) y los aparatajes
costosos como el del globo de
la muerte, las motos y monocicletas,
trapecios y jaulas,
más de un extenso elenco de
artistas, se trataría de una
empresa circense grande, de
las que actúan en las capitales.
Dentro del circo se dan los
consabidos dramas humanos,
envidias, amoríos, celos, venganzas,
etc. Es que el mundo
del circo es uno solo, de cualquier
época y cualquier lugar,
pues representa al mundo en
general, al mundo cotidiano
con sus contrapuntos. Desde
que existieron los griegos,
ya nada es nuevo bajo el sol.
El pecado original con que
nacen los autores puede ser
el de la influencia de sus
primeras lecturas, el pecado
venial el de la imitación
de los maestros y el pecado
mortal el de las inocentes
coincidencias. Los temas de
la literatura, en realidad,
no son muchos; el amor, el
poder, la muerte, el bien, el
mal, etc. Lo importante es la
manera de formularlos. El
libro de Ramiro Arias se suma
a esa zaga ya prócer en
nuestra narrativa, y lo hace
con una voz propia, anuncio
de importantes logros por venir.
La anterior presencia de
Ramiro Arias se ha dado en
el cuento y algo de esa huella
aún se conserva en El gesto
del payaso, donde muchos
de los personajes ya entran
«hechos» y no se construyen
en el transcurso de la trama.
Tal el caso del capítulo dedicado
a Heriberto, el cubano,
que no tiene incidencia en
la historia general, pero que
reproducimos aquí para dar
una idea del estilo plácido y
directo en que es contada esta
novela breve.
Como dice la nota en la
contraportada: «es una novela
sobre la vida del circo,
no aquella que percibe el público
y que es tan pródiga en
performance, magia y excepcionalidad,
sino la telaraña
humana en la que viven atrapados
como sometidos a un
estigma sus integrantes».
Julio 2012 R
ROCINANTE 41

OBRA
Heriberto el cubano
n Ramiro Arias
Heriberto el cubano tenía
la sonrisa dibujada en su rostro,
nunca se sacaba las gafas
oscuras porque le gustaba
que pensaran que no tenía
ojos. A los pocos días de estrenar
la lona azul con blanco
reparada con parches, le dijo
al Firulais que se iba a la
ciudad a distraerse en un karaoke.
Pregonaba que si Dios
le dio al hombre voz y cuerdas
vocales era para cantar
y no para los sinsentidos y
extravíos de la vida, peor para
la ira, el grito o el insulto;
Dios bendice el trabajo, pero
ama a los que cantan; el hombre
que no canta va matando
su espíritu, decía deplorando
de alguna manera su juventud,
por no haber sido famoso
con esa voz que los años y el
licor volvieron carrasposa.
Una noche, después de
deambular entre el gentío mirando
las vitrinas y los rótulos
luminosos, entró a un bar que
era famoso por el repertorio
que ofrecía el karaoke. Se
encontraba en una calle larga
y mal iluminada detrás
de un gran hotel. A partir
de las diez de la noche a este
sitio llegaban mujeres para
acompañar a los clientes, el
ambiente se hacía vibrante
y confuso. El alto volumen
R 42 ROCINANTE
LITERAL
de la música no dejaba escuchar
a los que hablaban; el
olor a licor y tabaco predominaba
como preludio del gran
bacanal. La coca y alguna
pastilla se podían consumir,
igual la marihuana, pero con
discreción. Un negro grueso
y musculoso con casaca militar
cacheaba estrictamente
a los que entraban, no fuera
que llevaran algún arma
escondida. Los dueños no deseaban
que volviera a suceder
lo de aquella vez, cuando dos
hombres disputándose por
una portentosa mujer se trenzaron
cuerpo a cuerpo, cada
cual con su cuchillo hasta que
en medio de gritos y quejidos
salieron heridos de muerte,
dejando un reguero de sangre
por el piso. Todo esto dejó
impresionado a Heriberto el
cubano. Luego de que se calmaron
los nervios, bebió y
cantó hasta el amanecer, junto
a su amor secreto y travesti
que recién había llegado a la
ciudad. Con él se veían cada
vez que coincidían con el
arribo del barco a uno de los
tantos lugares que visitaba el
circo en el año. El marinero
era de poco hablar, tenía cara
de hombre rudo. Con pelo corto
y facciones juveniles y con
la barba a medio crecer, pare-
Julio 2012

cía un corsario de mar.
Llevaba un tatuaje en su
brazo que decía: «Amor, no
te peines de noche que se
retrasan los marineros», pensamiento
que ponía a meditar
a Heriberto; tratando de descifrar
su sentido jugueteaban
con las manos a manera de
caricias y reían. Después de
rones y besos se agotaron las
canciones, y los bostezos hicieron
que el marinero pagara
la cuenta, decidieron abandonar
el lugar. Pero la parranda
se vio truncada cuando Heriberto
volvió de la estación
donde el marinero tomó el autobús
que lo llevaría al puerto.
En unas horas su barco partiría
a Marsella. Era la hora del
frío y del viento que soplaba
fuerte en la madrugada. Ni un
taxi pasaba por la calle, peor
un alma a quien pedir auxilio.
De pronto, no se sabe de dónde
surgieron aquella mujer y
los hombres que lo interceptaron
para robarle. Antes de
que uno de ellos le apretara la
garganta para que no gritase;
él se rió, pegó una carcajada
diciéndoles que cómo iban a
robarle si él era como ellos,
del mismo bando, que no llevaba
billetera, que había
sido criado en
barrio
con cantina y billar incluido,
que tenía amigos en la cárcel,
que se sabía todos los boleros
y pasillos que hablan de amores
frustrados y trabajaba en
un circo, que se llevaran todo
pero que no le hicieran daño.
No fue lo último que dijo, ni
la sonoridad de la carcajada
lo que molestó a los asaltantes,
sino que no llevara nada
de valor encima. Antes de
hundirle las cuchilladas en el
vientre que lo dejaron desangrándose
en la acera, él pudo
ver el odio sin sentido en los
ojos del asesino. Sólo después
de unas horas un patrullero,
que por casualidad pasaba por
ahí, lo auxilió y alcanzaron a
llevarlo a un hospital, donde
murió. Apenas recibió la noticia,
el Firulais fue a verlo.
—He querido encontrar a
Dios y no he podido, Frank
—musitó el
cubano antes
de expirar.
Julio 2012 R
ROCINANTE 43

PERSONAJE
R
44 ROCINANTE
HISTÓRICO
El Libertador
Este mes se recuerdan los 229 años del nacimiento
de Simón Bolívar. Entre la copiosa bibliografía que
reconstruye su vida y su trascendental papel
histórico, algunos títulos recomendables están
al alcance de los lectores ecuatorianos
n Juan Manuel de Prada
La figura de Simón Bolívar,
grandiosa y en cierto
modo trágica, clarividente
y a un tiempo utopista, encarna
mejor que ninguna
otra algunos de los más
nobles y ancestrales an-
helos del hombre: la lucha
por la independencia, el
ímpetu de libertad, el sueño
nunca realizado de una
sociedad mejor. Durante
quince años, batalló sin
desmayo azuzado por una
Julio 2012

misma idea: que
las naciones hispanoamericanas
fuesen dueñas de
su destino; pero
nunca consideró
Bolívar la Independencia
como
un fin en sí misma,
sino el cimiento
sobre el que se podría erigir
una hermandad de naciones,
desde México a la Argentina,
integrada en un proyecto
común de cooperación y soberanía
compartida. Logró
erigir dicho cimiento, alcanzando
la independencia para
lo que hoy son seis naciones
hispanoamericanas; y su victoria
restallante en Ayacucho
sería, a la postre, la mecha
encendida que extendería por
todo el continente la pólvora
de la rebelión. Pero nunca
logró coronar su proyecto panamericano,
lo cual enturbia
sus últimos años con los tintes
de la amargura y el fracaso;
el reposo del guerrero fue
también, pues, una reclusión
forzada en ostracismo,
una melancólica renuncia al
sueño que inflamó sus mejores
días. Simón Bolívar, por
lo demás, no fue
un mero hombre
de acción, lo
que en el lenguaje
de la época se
denominaba un
« i n s u r g e n t e » ;
también fue —en
íntima amalgama
con el guerrero—
un hombre de letras, dotado
de un estilo vigoroso que bebía
en los manantiales del
enciclopedismo y la filosofía
racionalista del siglo XVIII,
pero cuyas formulaciones
lograron imponerse sobre
la influencia individualista
de dichas corrientes de pensamiento,
para concebir un
proyecto político en el que el
Estado fuese garante de la
justicia social y el bienestar
de sus ciudadanos. El fracaso
de dicho proyecto lo convierte,
en cierto modo, en mártir
de su propia ambición, en
llama que arde en su propia
hoguera. José Martí lo retrató
pronunciando palabras como
florones de fuego; palabras
que revelan la condición de
América, su anhelo de gloria
y su apetito de progreso, pero
también su triste destino.
Julio 2012 R
ROCINANTE 45

PERSONAJE
Simón Bolívar, heroico en
el campo de batalla, aparece
hoy, ante los ojos del hombre
contemporáneo, mucho más
heroico aun en la hora de su
muerte prematura, cuando
sus logros como guerrero y
estadista se tropiezan con el
escollo de una realidad que
le vuelve la espalda. Seis
naciones lo proclaman hoy Libertador;
pero la inspiración
ecuménica de su proyecto
—en cierto modo tributario
del que Washington, a quien
Bolívar tanta devoción profesaba,
lograría implantar con
mayor fortuna en las tierras
del Norte— sucumbiría ante
las rivalidades personales de
los generales de la revolu-
R 46 ROCINANTE
HISTÓRICO
ción, que no iban a tardar en
degenerar en guerras intestinas
y disgregadoras. Como
tantos idealistas que avizoran
un futuro inédito, Bolívar fue
un creador de rumbos nunca
transitados hasta entonces,
un zahorí que supo dilucidar
e interpretar el sentir colectivo
de todo un continente;
pero esta condición profética,
casi poética (en el sentido
etimológico de la palabra),
que todavía hoy sirve para
explicar la agónica realidad
de Hispanoamérica, murió
pisoteada por los intereses
de banderías y la angostura
o ceguera mental de quienes
entienden la libertad, antes
que como un patrimonio uni-
Simón Bolívar el Libertador
El historiador ecuatoriano
Jorge Núñez rescata una
figura del personaje de Bolívar
cercana a la cotidianidad,
identificada con la cultura latinoamericana,
apasionado por
la libertad de los pueblos pero
también por el baile, que
prefiere las arepas de maíz al
mejor pan de trigo, y el ají a la
pimienta.
Según menciona la editorial
Eskeletra sobre su publicación:
«Este libro nos muestra
a un hombre de voluntad excepcional,
que empeña la
mayor parte de su vida al esfuerzo
de libertar a nuestra
América y que cruza a caballo
por la mayor parte de
la geografía sudamericana,
dirigiendo ejércitos y organizando
repúblicas. También
recupera la imagen del re-
Julio 2012

versal, como una mercancía
sujeta al cambalache y la hipoteca.
Más que el miles gloriosus,
nos interesa hoy el
pensador utópico que sueña
un sistema de gobierno que
garantice «la mayor suma de
felicidad posible, la mayor
seguridad social y la mayor
suma de estabilidad política».
Nos interesa el hombre
que, en su concepción de los
poderes del Estado, añade a
la trinidad establecida por
Montesquieu un cuarto «poder
moral», una suerte de
Areópago que vele por la acción
justa de los otros tres.
Nos interesa el humanista
que clama contra la vigencia
volucionario que sueña con un
mundo mejor, que ansía sacar
a los puebles de la ignorancia y
el atraso, para educarlos en el
conocimiento de sus deberes
y derechos para enrumbarlos
por la senda del progreso. Y
pone a nuestro alcance la profunda
sensibilidad de aquel ser
humano que veneraba a su nodriza
negra, se estremecía ante
la belleza del paisaje o escribía
conmovedoras cartas de amor».
de la esclavitud, que postula
una sociedad igualitaria, que
abomina de las diferencias
raciales y concibe el cultivo
de las artes y las letras como
la mejor vía de redención de
las clases humildes. «Pluguiera
al cielo —escribió en cierta
ocasión— que me hubiera sido
dado propagar la luz de la
verdad y de las ciencias en
todos los espíritus, para que
no nos descarriáramos del
camino de la virtud y no cayésemos
en las sombras del
error y de la ignorancia».
La educación del pueblo fue
su máxima preocupación; la
creación de escuelas y universidades,
su más denodado
afán. Entendía Bolívar que el
Julio 2012 R
ROCINANTE 47

PERSONAJE
hombre no sería plenamente
libre mientras no entendiese
su libertad, mientras no
asumiese sus compromisos,
mientras no apreciase sus
exigencias y sacrificios. Y así
pronunció ante el Congreso
en Angostura: «La educación
popular debe ser el cuidado
primogénito del amor paternal
de este Congreso. Moral
y Luces son los polos de una
República; Moral y Luces son
nuestra primera necesidad».
Creador del panamericanismo
como noción política,
Bolívar propugnó el establecimiento
de una coalición
democrática de Estados americanos
que pudiera oponerse
a las monarquías de la Santa
Alianza, que aspiraban a recuperar
el imperio colonial
R 48 ROCINANTE
HISTÓRICO
Bolívar, de Indalecio
Liévano Aguirre
Un clásico en el tema, escrito
con erudición, que
reconstruye al detalle la vida
del Libertador. Esta biografía
recoge desde la niñez y la
indómita adolescencia de Simón,
hasta su madurez; esto
lleva a comprender la génesis
de allende Atlántico. Pero
dicha cohesión continental
nunca sería del todo posible
si no la animaba un impulso
ético que vinculase por
igual a las élites dirigentes
y a las clases populares. Estas
formulaciones, refutadas
por el devenir de la Historia,
quizá se hayan convertido
en declaraciones retóricas
irrealizables; pero en los escritos
bolivarianos poseen
la fuerza de convicción de
un oráculo. Estremece pensar
lo que podría haber sido
Hispanoamérica, si hubiese
seguido el desdierátum de
su Libertador, aquel patriota
que prefirió avizorar horizontes
antes que fronteras.
Pero no lo siguió y los resultados
los tenemos a la vista.
y la evolución de su pensamiento,
y el desarrollo paralelo de la
circunstancia política que (también)
forjó al personaje. El autor
recrea íntimamente las esperanzas
y sueños de Bolívar, el dolor
que sentía por el pueblo, e incluso
el gran amor de Manuelita
Julio 2012

Fue Miguel de Unamuno quien
acertó a vislumbrar el destino
profundamente quijotesco
de Simón Bolívar. Como Don
Quijote, bien habría podido
repetir Bolívar, en la desazón
de sus años últimos: «No sé lo
que conquisto a fuerza de mis
trabajos». Porque, en efecto,
hay algo de triste desesperanza
en las postrimerías del
héroe que desconfía del destino
de las naciones que su
ahínco personal había hecho
libres. Unamuno imagina a
Bolívar, como a Jesús en el
Huerto de los Olivos, preso de
una suerte de angustia metafísica,
escuchando «la terrible
voz del silencio de las eternas
tinieblas» que le susurra:
«Y todo, ¿para qué?». Los esfuerzo
inútiles, nos enseña el
clásico, sólo engendran me-
Sáenz; a la vez que nos presenta
a maestros, amigos y compañeros
que también influyeron
en la vida del Libertador. Es un
libro que describe de manera
vívida los convulsos 20 años
que duró la carrera política y
militar de Bolívar, lapso en que
obtuvo los más grandes triunfos
y las más amargas decepciones,
siempre envuelto y movido por
la devoción de los pueblos.
lancolía. Quizá sea cierta tan
aciaga sentencia; pero, mientras
dichos esfuerzos arden,
consumidos en la fervorosa
hoguera de sus ideales, su llama
nos alumbra, su calor nos
reconforta, su combustión
nos alimenta. Y todavía hoy,
convertidos en rescoldos que
no se resignan a ser ceniza,
dichos esfuerzos nos siguen
comunicando aquel impulso
de grandeza que los inspiró.
Quizás Bolívar muriese tuberculoso
y melancólico; pero
casi doscientos años después,
su epopeya militar e intelectual
sigue irradiando una
tibieza consoladora.
R
(Del prólogo del libro Simón
Bolívar, de Demetrio Ramos,
ABC)
Julio 2012 R
ROCINANTE 49

ACTUALIDAD
R 50 ROCINANTE
LIBRERÍAS
¿Un oficio
en extinción?
Los libreros son seres aparentemente incompatibles
para los supermercados-librerías y para los e-books
que se consiguen por Internet
La llegada de la versión
2.0 del mundo, la hegemonía
de lo virtual gracias a
las telecomunicaciones y a
la rapidez en que nos movemos,
están cambiando la
manera en que pensamos
y hacemos las cosas. En la
época del libro digital, o de
la cada vez más acostumbrada
venta de libros en
perchas del supermercado (o
en grandes cadenas sosteni-
das casi exclusivamente por
best-sellers), el librero se ha
convertido en un espécimen
en peligro de extinción.
Así lo encuentra el escritor
peruano Iván Thais, quien no
niega comprar regularmente
e-books, o pedirlos físicamente
por Internet; pero para
quien no existe «mejor lugar
para comprar libros que una
librería independiente». En
los últimos años, en todo el
El librero debe saber «leer» en cada cliente sus intereses y capacidades
Julio 2012

La librería Eterna Cadencia, en Buenos Aires
mundo se repite la historia de
las librerías independientes
que deben cerrar sus puertas.
Pero algunas, a decir de
Thais, «aún dan batalla, como
El Virrey de Lima, Eterna
Cadencia en Buenos Aires, o
Metales Pesados en Santiago
de Chile. ¿Cuál es la diferencia
entre estas librerías y
aquellas más grandes, dirigidas
no por libreros sino por
administradores? ¿Y cuál es
la diferencia entre estas y
las librerías virtuales como
Amazon? El librero».
«Cuando muere una librería
independiente —aumenta
Thais—, muere con ella un
oficio que se convertirá pronto
en un anacronismo: el buen
oficio del librero. Porque,
seamos honestos, ¿cuántas
librerías cuentan con un librero
entre su personal? Lo que
los supermercados-librerías
y los cubiles de aeropuerto
contratan son empleados que
saben dar el vuelto, no recomendar
libros. Estos chicos
uniformados, que lo mismo
podrían estar vendiendo salchichas
o libros, teclean en
las computadoras los títulos
o los autores que uno les
pide. A veces, hay que explicarles
que Kafka lleva dos k.
Si se les pide una recomendación,
recitarán qué libro es
el más vendido de la semana.
Exactamente lo mismo que
hace Amazon y sus libreros
virtuales.»
En efecto, se trata de una
des-personalización no solo
en el intercambio comercial
de vender un libro, sino en
la concepción básica de tartar
al objeto-libro, en donde
la lectura real no forma
Julio 2012 R
ROCINANTE 51

ACTUALIDAD
parte de los quehaceres de
los vendedores de cadenas
comerciales libreras ni, obviamente,
en la asistencia
maquinal de Internet.
El autor limeño señala que
ser librero no es un oficio
sencillo: debe saber entenderse
oportunamente con las
distribuidoras y conseguir
mantener una buena oferta
en el fondo disponible, a
través de un acercamiento
profundo a los catálogos y un
olfato sensible para saber el
futuro que tendrá cada título
una vez que llegue al público
lector.
Pero la otra parte del oficio
—que consiste en conectar
básicamente el libro con la
persona— es saber entender
a sus clientes. Para recomendar
efectivamente un título
es necesario hacer un perfil
rápido del comprador, conversar
con él y, tras unos
minutos, encontrar mentalmente
algunos títulos que
podrían ser bien recibidos
R 52 ROCINANTE
LIBRERÍAS
La conocida
librería El Virrey,
en Lima
por él. Thais dice: «El auténtico
librero será incluso más
agresivo. Podrá quitarle de
las manos al lector un libro
que no vale la pena, pero que
se lo han recomendado erróneamente,
y ofrecerle uno
que sí vale. Recuerdo cuando
era estudiante, ahorrando
mis propinas para ir los fines
de semana a El Virrey, donde
Sanseviero jugaba ajedrez
y me recomendaba libros.
También recuerdo a Parra,
de Metales Pesados, metiéndome
en la bolsa un libro que
no le pedí, seguro de que me
gustaría, y no se equivocó:
Vías Revolucionarias, de Richard
Yates, que gracias a él
descubrí antes de que se hiciera
la película. (…) Ese tipo
de anécdotas son imposibles
con los motores de búsqueda
por similitudes de Amazon
o con los empleados que ordenan
pilas de best-sellers.
Estas aventuras literarias
tienen un protagonista, el librero,
que solo existe en su
Julio 2012

hábitat natural: la librería independiente».
Palabras de esperanza
Por otro lado, el periodista
y escritor español Juan
Cruz prefiere dejar de lado
el negativismo que —además
ahora por la crisis— mira las
librerías sin clientes y a los
libreros encarando la desocupación.
En un artículo
titulado «Libreros, la vida va
a ser mejor, no tengan duda»,
expresa: «Volverán los
buenos tiempos de los libros,
se llenarán las librerías, regresarán
los lectores a los
que ahora ahuyentan la crisis
y los agoreros, y vendrán
con esos lectores más libros
exigentes que harán más exquisitas,
y más intensas, las
estanterías».
En todo movimiento cíclico
palpita una cierta trascendencia,
la esperanza de no
terminar de perder lo que no
se quiere perder. Cruz recoge
unas palabras de García
Márquez: «Ahora sé por qué
cuentan cuentos los abuelos»;
y se alegra: «Siempre
habrá cuentos volando, y se
posarán en los libros, en la
mirada de los niños, en los
sueños de los adolescentes,
en el ceño de los adultos, y
sin libros no se podrá vivir
porque sin libros no se puede
vivir». En eso, al menos, tiene
entera razón. R
Un librero debe conversar con los lectores antes de recomendarles títulos
Julio 2012 R
ROCINANTE 53

LIBRO
R
54 ROCINANTE
NOVEDAD
Che Guevara,
entre el fusil y la pluma
Ven la luz en forma de libro los Apuntes filosóficos,
reflexiones teóricas en las que el líder
revolucionario arremete contra los
excesos de la ortodoxia.
Julio 2012

n Mauricio Vicent
Han tenido que pasar ni
más ni menos que 45 años
para que Apuntes filósoficos,
el último gran libro de
reflexión teórica sobre el
marxismo escrito por el Che
Guevara, saliera a la luz. Casi
medio siglo ha tenido que
transcurrir, desde su muerte
en la selva boliviana, para
poder leer estas notas, en
ocasiones ácidas y burlonas,
en las que el líder revolucionario
analiza críticamente la
obra de los clásicos del marxismo-leninismo
y también
de autores que considera
«heterodoxos y revisionistas»
del socialismo.
El volumen, de más de
400 páginas, comienza con
la carta que el Che envió
en 1965 al dirigente histórico
Armando Hart, entonces
ministro de Educación, mientras
esperaba en Tanzania
—tras el fracaso de la guerrilla
de Congo— a entrar
clandestinamente a Bolivia.
«En este largo período de
vacaciones le metí la nariz
a la filosofía, cosa que hace
tiempo pensaba hacer. Me
encontré con la primera dificultad:
en Cuba no hay nada
publicado, si excluimos los
ladrillos soviéticos que tienen
el inconveniente de no dejarte
pensar, ya que el partido
lo hizo por ti y tú solo debes
digerir», escribe el Che. Y
añade con ironía: «Como método,
es lo más antimarxista,
pero además suelen ser muy
malos. La segunda [dificultad],
y no menos importante,
fue mi desconocimiento del
lenguaje filosófico (he luchado
duramente con el maestro
Hegel y en el primer round
me dio dos caídas)».
En muchos de los textos
de Apuntes filosóficos, compilado
por María del Carmen
Ariet, del Centro de Estudios
Che Guevara y editado por
Ocean Press, que fue presentado
en junio en La Habana,
Julio 2012 R
ROCINANTE 55

LIBRO
R 56 ROCINANTE
NOVEDAD
se descubre a un Che en guerra
contra la ortodoxia, como
cuando glosa un pasaje de
Ludwig Feuerbach y el fin de
la filosofía clásica alemana,
de Engels. «Los científicos
—afirma— han hecho aportaciones
valiosas al campo de
la filosofía y de la economía,
pero la base idealista los lleva
por caminos extraviados.
Hay que liquidar el dogmatismo
y abordar los nuevos
problemas que se plantean
con el espíritu abierto a cierto
agnosticismo científico».
La agudeza no significa
que los comentarios
del Che sean los de un
revisionista. En ningún
momento Guevara
se desdice de su visión
del hombre nuevo, ni
de su rechazo a todo
lo que huela a capitalismo.
Estamos ante
un marxista militante
y su lucha es la de
despojar el socialismo
de ataduras doctrinarias
y enfrentarse a las
«tendencias burocráticas
que pretendían
congelar la revolución,
reducirla a un solo país
y aprisionarla en los pasillos
ministeriales», dicho en
palabras de Néstor Kohan.
Su acercamiento teórico a
la economía política es el antecedente
y el complemento
de estos Apuntes filosóficos,
que están divididos en tres
grandes bloques: sus lecturas
de juventud, los cuadernos
escritos en África, Praga y
Cuba (1965-1966) y las notas
de Bolivia (1966-1967). Terminan,
ahora sí, las obras
inéditas del Che 45 años después
de su muerte. R
Julio 2012

(H)OJEARTE
El arte detrás del arte
Una muestra del trabajo previo a la ejecución
escultórica y arquitectónica
Entre la práctica artística,
la arquitectura y la fe es
el título de una muestra muy
peculiar que el Centro Cultural
Metropolitano presenta y
acompaña con la publicación
de un libro. Se trata de una
recopilación de proyectos,
dibujos, bocetos y estudios,
además de pinturas y esculturas,
de Nixon Córdova, un
artista ecuatoriano cuya obra
se encuentra en numerosos
lugares de Quito.
En el libro, el alcalde Augusto
Barrera menciona:
«Con este trabajo, Nixon demuestra
que el arte de no es
mera inspiración, sino, una
actividad que requiere poner
en comunión la destreza con
el espíritu y el virtuosismo del
creador. También nos remite
la muestra al ámbito de los
encargos, aspecto inherente
al trabajo artístico; estos “comitentes”,
corporaciones o
individuos, que contrataban
con los artistas la realización
de una imagen, talla u
obra arquitectónica, han sido
claves en el desarrollo de
nuestro arte desde la época
colonial: cabildo, órdenes re-
ligiosas, cofradías, gremios,
entre otros».
De su parte, la directora del
Centro Cultura, Alicia Loaiza
Ojeda pone en claro la riqueza
de esta muestra: «Pocas
veces nos imaginamos todo
el trabajo que implica la proyección
de una obra de arte
cuyo producto es una escultura
civil o religiosa: desde la
primera idea —por encargo o
desde la creatividad propia—
Julio 2012 R
ROCINANTE 57

(H)OJEARTE
R
58 ROCINANTE
que rescata la memoria y los referentes
propios de la cultura a la que va a representar,
los innumerables bocetos hasta
llegar a la idea —que en sí mismos ya son
una obra de arte—, los cálculos matemáticos
y arquitectónicos, la conformación
de equipos multidisciplinarios en los
cuales el artista se convierte en un
director de escena, la elección de
materiales… elementos todos que
aparecen como necesidades propias
de la academia, de las bellas
artes, diferenciándolos de las prácticas
artesanales y convirtiéndolos,
a cada uno de estos proyectos, en
un desafío creativo».
Sobre el aspecto de los encargos,
el curador de la
muestra, Juan Carlos
León, analiza: «En
la obra de Córdova
se recupera una
manera de asumir el
encargo de manera
artística, alejándose
de una práctica meramente
artesanal;
el artista hace suya
una iniciativa que
El libro recoge
bocetos y estudios
previos a la ejecución
escultórica
y arquitectónica.
Un material
poco conocido.
Julio 2012

nace en una demanda social y termina
siendo moldeada de acuerdo a sus intereses
particulares. El encargo no se
entiende ni se percibe entonces
como una limitación,
sino como un desafío desde
el cual se concibe una
obra; este se manifiesta
en una resistencia a serializar
sus propuestas, en
una suerte de autorreflexión
sobre las formas más convencionales
de representación; lo
cual le permite emplear diferentes
recursos estéticos
en la creación de imágenes
para las obras que
produce, incluso a pesar
de sus temáticas muy afines.
En este sentido,
se vuelve importante
señalar que para
Córdova resulta
relevante contemporizar
prácticas que
en la actualidad son
comprendidas como
maneras desfasadas de
producción artística, ya sea
porque están inscritas de alguna
forma en tradiciones de
larga data en la historia del
arte, o porque los sentidos
que propiciaban en torno al
trabajo del artista han sido
confrontados con otras
prácticas contemporáneas
de creación cultural».
R
Julio 2012 R
ROCINANTE 59

NOVEDAD REVISTA
El nuevo número de Malaidea
busca ser un «homenaje
a aquellas malas ideas,
imprescindibles para
un mundo mejor».
El pensamiento crítico de
Alejandro Moreano
El jueves 14 de junio, en
la Sala Andrés Bello de la Facultad
de Jurisprudencia de
la Universidad Central de
Ecuador, tuvo lugar el lanzamiento
del número 3 de
la revista Malaidea, de circulación
cuatrimestral. La
publicación, de sustancioso
contenido académico y literario,
dedica un dossier al
intelectual ecuatoriano Alejandro
Moreano, con quien se
estableció un conversatorio
en el evento de la presentación.
Allí se vio que, a pesar
del poco tiempo de vida, la
R 60 ROCINANTE
revista goza de una gran acogida
por parte de estudiantes
e investigadores.
El evento reunió a destacados
personajes en el ámbito
de las letras y la academia,
como Luis Macas, el escritor
Francisco Proaño, los académicos
Natalia Sierra, Carol
Murillo, y David Chávez, parte
del Consejo Editorial de
Malaidea.
En la revista, autores como
Michael Handelsman,
Abdón Ubidia, Wladimir Sierra,
Francisco Proaño, entre
otros, aportan con textos so-
Julio 2012

e la obra de Moreano,
además de que el mismo autor
reflexiona alrededor de la
Teología de la Liberación.
Se recoge, por otro lado,
una entrevista con Raquel Sosa,
académica mexicana que
estuvo recientemente en el
país, sobre la obra de Agustín
Cueva. También, se destacan
textos sobre El chulla Romero
y Flores, Pablo Palacio y
Joaquín Gallegos Lara, desde
diversos enfoques teóricos,
entre otros temas. R
Realidad ecuatoriana,
latinoamericana y mundial
La revista Ciencias Sociales, de las
carreras de Sociología y de Política
de la Universidad Central, presentó
recientemente su edición número
33. Desde su fundación, en 1976,
esta publicación busca crear pensamiento
crítico y
contribuir al debate
de los principales
temas y problemas
que vive la sociedad
nacional, regional y
mundial.
Este número recoge
un homenaje a la
memoria y legado
de Agustín Cueva,
e invita a una relectura reflexiva
de su extensa obra. En el tema
central se realiza un profundo
análisis de la situación agraria de
América Latina y de Ecuador, con
investigaciones y aportes de académicos
y expertos en
la materia.
Además, se ofrece un
debate sobre la soberanía,
el Socialismo
del Siglo XXI, y un
análisis del movimiento
Okupa Wall Street,
reseñas de libros y cine,
y más.
Julio 2012 R
ROCINANTE 61

LIBRO NOVEDAD
Mitos, tradiciones y
plantas alucinantes
R 62 ROCINANTE
Se publica póstumamente una larga
investigación de Plutarco Naranjo
El mes pasado, en el marco
de la Semana Andina en
la Universidad Andina Simón
Bolívar se presentó el libro
Mitos, tradiciones y plantas
alucinantes, de Plutarco
Naranjo, en una emotiva ceremonia
que recordó además
el primer mes de fallecimiento
del autor e investigador.
El libro recoge —en una
edición ilustrada a todo
color— algunos mitos esenciales
de las civilizaciones
euroasiáticas, y se adentra en
aquellos de las culturas aborígenes
indoamericanas. El
autor, basándose en conocimientos
científicos actuales,
discurre sobre las maneras
en que las bebidas o las comidas
elaboradas con plantas
psicodélicas o «fantásticas»
producen estados alterados
de conciencia. Habida cuenta
de que fueron las culturas
aborígenes aquellas que descubrieron
dichas plantas, las
utilizaron y profundizaron
en su conocimiento, Naranjo
postula que las imágenes,
ilusiones y alucinaciones que
siguen a su ingesta se vinculan
estrechamente con los
modos de esos pueblos de entender
el mundo y explicarlo.
La conexión entre mitos, le-
Julio 2012

La llamativa edición del libro se realizó
con tapa dura e ilustraciones a todo color
yendas y plantas alucinantes
es así expuesta a lo largo de
páginas a la vez amenas y
eruditas.
La publicación de este libro
culmina el esfuerzo del
autor por poner en manos
del amplio público la exigente
indagación, la reflexión
profunda y la acendrada pasión
que, a la par que sus
investigaciones etnobotánicas,
el conocido científico
ecuatoriano llevó a cabo durante
varios años de estudio
e interés por nuestras culturas
originarias.
En el acto de lanzamiento,
el hijo del autor, Alexis
Naranjo, señaló: «Ciertamen-
te que Mitos, tradiciones y
plantas alucinantes resulta
de un prodigioso trabajo
de acumulación, selección y
depuración, pues mi padre
empezó a escribirlo 50 años
antes, cuando investigó y experimentó
con sustancias
sicoactivas, siguió escribiendo
cuando indagó sobre
plantas y vegetales (elaborando,
junto a mi madre, el
índice de la flora ecuatoriana).
En ese medio siglo le
vimos lleno de bríos y salud,
feliz con cada nuevo ejemplar.
Sabemos que su libro es
una preciosa guía para un
viaje de ida y vuelta, desde
el más acá al más allá». R
Julio 2012 R
ROCINANTE 63

MISCELÁNEA
Corín Tellado
y Vargas Llosa
En junio de 1981 Mario
Vargas Llosa entrevistó
a la exitosa autora de
novelas rosas Corín Tellado
para un programa peruano
de TV. Luego hubo un intercambio
de piropos: doña Corín
dijo que se había sentido
muy cómoda con el escritor
peruano, a quien había leído
y admiraba, porque este
la tomó en serio y la entrevistó
«sin esas ironías y sarcasmos
de las que ya estoy
harta». Por su parte, Vargas
Llosa, terminada la emisión,
declaró que ella «(...) para
bien o para mal, durante
treinta años ha sido la encargada
de satisfacer nuestra
hambre de irrealidad». R
La escritora Corín Tellado
R 64 ROCINANTE
Dos siglos
de ventas sin
marketing
Jane Austen vendió los derechos
de su novella Orgullo
y prejuicio en 120
libras, y dos siglos después
se sigue vendiendo traducida
a muchos idiomas. Para
aprovechar la fama del libro,
la escritora Seth Graham-Smith
tituló una novela
suya como Orgullo y prejuicio
y Zombis, el salto de un
espíritu de comienzos del siglo
XIX al XXI. Se anunció
que harían una edicón gráfica,
que sería traducida y
llevada al cine, pero hasta
ahora ha sido sólo un anuncio
publicitario. R
Julio 2012

MINI
Barthes y los
fantasmas
orientales
CUENTO
Los ricos también lloran,
pero no escriben poesía
A
principios de año Jean-Charles
Curau, responsable de cultura
del Principado de Mónaco, recibió
una carta que contenía la siguiente
pregunta: «¿Podría encontrar un
poeta monegasco que nos representase
en la Olimpiada Cultural de Londres
2012?». Meses más tarde asegura
que la respuesta es no. La poesía monegasca
ha muerto, ha reconocido.
Jeanne Whalen, la periodista de
The Wall Street Journal que firma el
reportaje, interroga a varios vecinos
y, aunque prosaica, su tesis se resume
en que los ricos no escriben poesía.
(vía The Wall Street Journal).
Julio 2012 R
R
La lujosa Mónaco
Venido del universo de las obras
liberadas por herederos, Diario
de mi viaje a China tiene
varios atractivos: es extrañísima,
reveladora y no obedece a un criterio
de autor. Se trata de los apuntes
que tomó Roland Barthes durante
su viaje a China en 1974, junto al
grupo de la revista Tel Quel (Phillip
Sollers, Marcelin Pleynet, Julia
Kristeva) y a su editor y amigo
François Wahl, quien en 2009 criticó
la publicación declarando que
violaba la intimidad de Barthes y
—a causa de lo inacabado de la escritura
(“unwritten text”)— su presumible
voluntad. (Reseña de Sebastián
Olivero sobre el libro de
Roland Barthes Diario de mi viaje
a China.) R
ROCINANTE 65

MISCELÁNEA
Fuentes nunca leyó a Bolaño, pero
La vitalidad fue fundamental
para unir al
Boom como un grupo
de amigos con proyectos
comunes (acogía amigos
en su casa, como José Donoso;
presentaba agentes
literarios a sus pares y vinculaba
a unos con otros; y
luego, cuando era un escritor
consagrado, apoyó a
muchos jóvenes y comentó
sus obras con una curio-
E-books de un ermitaño
Thomas Pynchon
R 66 ROCINANTE
sidad insaciable, aunque no
exenta de fobias, como Roberto
Bolaño, a quien sabe
dios por qué nunca quiso
leer) hasta este momento en
que lamentamos su muerte.
El único gesto, que no pasó
desapercibido, fue que en la
Feria del Libro de Buenos Aires
se presentó sin corbata.
¿Carlos Fuentes sin corbata?
Eso era imposible. Fuentes y
las corbatas de seda italiana
Thomas Pynchon (Long Island,
Nueva York; 8 de mayo
de 1937) es uno de los novelistas
norteamericanos más celebrados
de la actualidad. Se
destaca tanto por su narrativa
compleja y laberíntica como por
su aversión a los medios (sólo se
conoce media docena de fotos
suyas de estudiante y recluta en
la marina). Entre sus novelas se
destacan: El arco iris de gravedad
(1973), Vineland (1990), Mason
y Dixon (1997), Contraluz
(2006), Vicio propio (2009); y un
libro de cuentos titulado Lento
aprendizaje (1984).
Se le considera actualmente
como una de las voces más importantes
del posmodernismo
Julio 2012

en Buenos Aires se quitó la corbata
eran un clásico del Boom literario.
Incluso fue motivo de
una divertida parodia de César
Aira en el congreso de literatura.
Y Vargas Llosa, en
un temprano artículo de 1967
en la revista Caretas, dijo:
«(...) llevaba barba y un paraguas,
botas, una larga casaca
de terciopelo verde con
cuatro pares de botones, y
una corbata que era una llamarada».
R
maximalista. Su novela más
destacada, El arco iris de
gravedad, fue rechazada por
el jurado del Premio Pulitzer
por considerarla obscena, y
ganó el National Book Award;
ajeno a la polémica, el autor
mandó a recoger el premio a
un payaso. A la prosa de Pynchon
la han catalogado de
diversas maneras (paranoica,
histérica, densa) aunque
no le han negado la trascendental
importancia que
tiene en la literatura de fin
de siglo XX. Es citado periódicamente
como candidato al
Premio Nobel de Literatura.
El crítico Harold Bloom citó a
Thomas Pynchon como uno
Carlos Fuentes, en Buenos Aires
de los más grandes novelistas
americanos de su tiempo
junto a Don DeLillo, Philip
Roth y Cormac McCarthy.
Thomas Pynchon era
uno de los poco autores estadounidenses
que se había
resistido a editar sus obras
en formato electrónico, pero
ha claudicado: el mes pasado
Penguin Press anunció que
había llegado a un acuerdo
con el autor de El arco iris de
gravedad para publicar toda
su bibliografía en e-books. Ni
qué decir que Pynchon no ha
realizado ninguna declaración
al respecto. (vía Media
Decoder, The New York Times
y Wikipedia) R
Julio 2012 R
ROCINANTE 67

AUTOR
R 68 ROCINANTE
PREMIADO
Philip Roth retrata lo
serio con humor
El escritor estadounidense ganó recientemente
el Premio Príncipe de Asturias de las Letras
Rara vez un escritor cómico
se ha tomado tan en
serio a sí mismo. Cuando recibió
el Booker en 2011, Philip
Roth se dirigió al canal de televisión
que lo entrevistaba
interpretando el papel de su
vida: el del hombre solitario
obsesionado con su cuento
personal de nunca acabar.
Esta vez había sido acorralado
por la fama literaria. «Este
es un gran honor», concluyó,
después de haber hablado
menos de un minuto, «y es-
toy encantado de aceptarlo».
La cámara enfocó su rostro,
y agregó: «No se puede ser
grave, ¿verdad?».
Ahora, Roth, que camina
hacia los ochenta años, acaba
de obtener el «Príncipe de
Asturias» de las Letras, que
se suma a otros de prestigio:
el National Book Award, en
dos ocasiones; el Hemingway,
el Nabokov, el Faulkner, el
Pulitzer... Todos menos el
Nobel, que posiblemente sea
el único que le importe real-
Julio 2012

mente. Así todo, sigue, con
su pautada producción literaria,
aceptando la máxima
de su amigo Saul Bellow, que
decía que ningún escritor debería
morir mientras tenga
un libro entre manos.
La obsesión por la muerte
le lleva a seguir escribiendo
con el fin probablemente
de exorcizarla. Tras sesenta
años de producción literaria,
desde Goodbye, Columbus
hasta Némesis, la obra que
completa su cuarteto de meditaciones
sombrías sobre
la mortalidad, después de
Elegía, Indignación y La humillación,
suele sentarse en
una mesa de madera en el
estudio de su aireado retiro
de Connecticut oficiando a
veces como un rabino jubilado,
otras simplemente como
el gran hombre de las letras
estadounidenses. Lacónico,
elegante y frío.
El lamento de Portnoy, la
novela que lo catapultó a un
mundo de curiosidad banal
por la tenacidad en colocar
en un primer plano el onanismo,
explicaría esa insistencia
en aislarse del ruido. Roth ha
dedicado su vida a huir del
encasillamiento insistiendo
en que no se pueda etiquetar
a una persona por una
sola experiencia por muy hi-
Nuestra pandilla es una brillante
sátira, en la tradición
de Swift, en la que la política
estadounidense se devela
profundamente
larante que sea. Pero en la
ficción madura de Roth figura,
por orden de aparición,
la identidad sexual del varón
judío-americano y las complejidades
preocupantes de
su relación con el sexo opuesto;
luego vendría la obsesión
por la muerte.
Philip Roth nació en una
familia de segunda generación
de judíos americanos
Julio 2012 R
ROCINANTE 69

AUTOR
En El pecho, un profesor
universitario de repente se
convierte en un pecho de
mujer, de 70 kilos. Una extravagante
alegoría kafkiana
de Newark, Nueva Jersey, en
1933 el año en que Hitler ascendió
al poder en Alemania.
Menor que Norman Mailer,
Gore Vidal, Arthur Miller y
Kurt Vonnegut, alcanzó su
mayoría de edad durante
los cincuenta, en los Estados
Unidos de Eisenhower, junto
a William Styron, John Updike
y Saul Bellow. La suya
fue una generación de jóve-
R 70 ROCINANTE
PREMIADO
nes americanos que querían
rehacer la «gran república»
después de los horrores de la
Segunda Guerra Mundial y
lograrlo, además, a través de
la literatura. Los ha sobrevivido
a todos.
El eco que adquirió su
Nathan Zuckerman de los
setenta, protagonista de cuatro
novelas caracterizadas
por una prosa fácil y fluida,
enriquecida por agudas
observaciones y un ritmo
vertiginoso, eclipsó lo que
vendría más tarde. Operation
Shylock es el ejemplo de
una etapa en la que la producción
no decayó pero sí el
interés popular por las novelas
de Roth. Incluso por El
teatro de Sabbath, aplaudida
por la crítica, con la que ganó,
además, el National Book
Award. Roth volvió a atraer
la atención de todos los lectores,
ya cumplidos los setenta,
con Pastoral americana, una
de sus mejores novelas, en
la que vuelve a sus orígenes
y los años de juventud para
componer un retablo histórico
desde la Depresión a la
década de los sesenta. Tomándose
la temperatura a sí
mismo ha conseguido tomársela
también a América.
(Más en: www.lne.es)
Julio 2012

LIBROS
El lamento de Portnoy
El lamento de Portnoy —también
traducido como El mal de
Portnoy— apareció en 1969 y
fue considerado de inmediato
un escándalo. Ello se debió
en parte a su explícito contenido
sexual, tan abundante como
creativo, y también al hecho de
que tales contenidos encerraban
una especie de diagnóstico
de los varones americanos de la
época. La situación de Portnoy
—su fijación con su madre, sus
dificultades con los miembros
del sexo opuesto, sus ocasionales
accesos de autocompasión
sensiblera— describía y definía
un síndrome con el que
demasiados lectores (varones)
estaban familiarizados. A todo
ello se agrega la condición
de judío de Portnoy, presentada
aquí como una versión más
bien exagerada de la ortodoxia
represiva contra la que claman
inútilmente el libro y el propio
Portnoy. En cierto sentido, esta
novela no cuenta una historia,
más bien refleja una condición.
Portnoy está atrapado en un
mundo que no puede satisfacer
sus estrafalarias y extremadas
fantasías. El lector, sin embargo,
no culpa de ello a Portnoy,
quien, a falta de otra cosa, tiene
al menos momentos de lucidez
sobre su situación. Roth, ade-
más, escribe con gran ingenio y
brillantez. Actualmente, con el aumento
de contenidos sexuales
explícitos que se ha venido produciendo
desde 1960, El lamento
de Portnoy resulta quizá menos
extremado de lo que pareció en
su día; pero la capacidad de la novela,
sino para escandalizar, sí al
menos para causar una profunda
turbación, no ha disminuido.
En último término, la verdadera
fuerza del libro reside en la figura
del propio Portnoy y en la
universalidad de sus complejos y
humillaciones.
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ROCINANTE 71

AUTOR
R 72 ROCINANTE
PREMIADO
La mancha humana
En La mancha humana
Roth reúne dos preocupaciones
comunes —un héroe
que esconde un secreto y
una aventura entre un hombre
mayor y una mujer más
joven— en el personaje de
Coleman Silk, el invicto
boxeador convertido en catedrático
cuya historia vital
narra su vecino Nathan Zuckerman.
Coleman Silk es
vilipendiado por su departamento
de la universidad tras
una falsa acusación de racismo
y se retira a su casa, tras
lo cual descubre la Viagra e
inicia una relación de Faunia,
una sirvienta analfabeta destrozada
por la muerte de sus
hijos y acosada por un ex
marido violento veterano de
Vietnam.
Mediante una serie de analepsis
que nos conducen a su
juventud en el Bronx, descubrimos
que Silk ha estado
ocultando un gran secreto:
es un hombre negro que ha
rechazado el racismo que ha
sufrido por parte de blancos
y negros. La liberación tanto
personal como sexual que experimenta
Silk gracias a la
relación con Faunia resulta
tan sorprendente que Nathan
Zuckerman, quien al principio
se limitaba a ser un mero
observador, entabla amistad
con su vecino.
El libro destaca entre todos
los de Roth por la composición
del personaje femenino.
Si bien por un lado se nos
presenta una ingeniosa investigación
del papel del
escritor e intérprete de los
acontecimientos que cuestiona
la objetividad en un
mundo de emociones, aun
nivel más básico el libro trata
sobre la culpabilidad y los
Julio 2012

secretos, las suposiciones y
las percepciones. Puede que
Coleman Silk parezca el arquetipo
del hombre caído
en desgracia, pero el libro
esconde mucho más que simples
parábolas. Constituye
una astuta visión de la po-
lítica social estadounidense
repleta de juicios, vergüenza
e hipocresía y la mancha que
deja la humanidad en la vida.
Y al final resulta un libro
que, pese a lo categórico de
su planteamiento, posee una
ingente cantidad de matices.
Sueños de papel
Una cita con la literatura desde los sentidos
Con
Juana
Neira
De lunes
a viernes
17h00 a 18h00
www.radiovision.com.ec
91.7 Quito
107.7 Guayaquil
Julio 2012 R
ROCINANTE 73
R

REVISTAS
Imaginaria
La revista de cultura del Gobierno
de la Provincia de Pichincha, Imaginaria,
en su número 10 recoge
variado material sobre la producción
plástica y audiovisual. Muestra
de ello es el dossier del artista visual
y diseñador Ernesto Proaño
Vinueza, quien ha expuesto su obra
en Ecuador, Estados Unidos, Centroamérica
y Asia.
Se destaca también una serie de
entrevistas realizadas por el escritor
Andrés Villalba Becdach a tres cineastas
nacionales: Tania Hermida,
Javier Izquierdo y Mateo Herrera,
quienes repasan sobre sus experiencias
haciendo cine en el país,
desde cómo cada uno conceptualiza
su trabajo, hasta las anécdotas
más y menos formales de su traba-
R 74 ROCINANTE
jo. También se encuentra —entre
muchos otros textos que recogen
manifestaciones diversas de la
cultura en la provincia— una entrevista
con Geovanny Espinosa,
director del documental Tras las
huellas de Alfaro.
Terra incognita
En la última década, las imágenes
de los colibríes, y la relación de la
gente con ellos, ha cambiado, se
ha vuelto mucho más cotidiana y,
por qué no, hasta repetitiva. Eso lo
menciona la edición 76 de Terra incognita,
que recuerda que 12 años
atrás, en su cuarto número se maravillaron
con las inusitadas fotos
del sudafricano Murray Cooper de
los quindes.
Ahora, retoman el trabajo más reciente
de Cooper, que es como
devolverles a los picaflores esa
magia de la fugacidad con la que
siguen brillando en la ciudad.
Julio 2012

Nuestro Patrimonio
La revista del Ministerio Coordinador
de Patrimonio, en su edición
número 33, pone bajo la lupa la conferencia
Río + 20. María Fernanda
Espinosa, la ministra del ramo, señala
que la cumbre «debe constituirse
en un espacio para reafirmar los
principios de desarrollo sostenible y
evaluar el avance de la construcción
de alternativas que recojan propuestas
innovadores que emergen en el
mundo».
La revista, que da cabida a textos
extensos de crónica y análisis, cumple
dos años de vida con el objetivo
de ofrecer a los lectores temas interesantes
sobre los elementos más
importantes de la identidad nacional.
Además del tema central, esta
Foro
El tema central de la revista de la
Universidad Andina Foro, en su
edición número 14, es el Derecho
procesal, y los distintos artículos
dan cuenta de varias preocupaciones
relacionadas con el quehacer
jurisdiccional en diversos ámbitos.
El acceso gratuito a la justicia y a la
tutela efectiva, imparcial y expedita
de los derechos de toda persona
se ha reformulado, sostiene en su
texto Vanesa Aguirre, frente a la
concepción de la anterior Carta Política,
aunque presenta ciertamente
varios retos para jueces y tribunales,
ya que se trata de un derecho
de carácter complejo, que conlleva
edición trae material sobre Flavio
Alfaro, la nueva ruta del tren,
la gastronomía de cierta región de
la costa, la policía patrimonial, entre
otros.
varias exigencias.
Otros autores de esta publicación
académica sobre derecho son Elisa
Lanas, Luís Pásara, Claudia Storini,
y otros.
Julio 2012 R
ROCINANTE 75

LIBROS
R 76 ROCINANTE
NOTICIAS
Novela de la alfarada
La tercera edición de la novela El fuego y la sombra, de Juan
Valdano, que evoca la época de la Restauración, en 1884
n Francisco Proaño Arandi
En esta novela, Valdano
profundiza su mirada en la
encrucijada del pensamiento
prevaleciente en el siglo
XIX, en el estilo de vida de la
época, en esa frontera entre
romanticismo y positivismo,
entre pensamiento conservador
e insurgencia liberal, en
un momento convulso de la
historia ecuatoriana: el año
de 1883, cuando surge la rebelión
contra la dictadura de
Ignacio de Veintemilla. En
los límites de este marco, cobran
vida sus personajes;
y no solo estos, sino un país
todavía fragmentado (lo es
hasta ahora) con todos su matices
internos y externos… El
viaje da pábulo para que el
personaje, en sus sucesivos
monólogos —confiados en su
diario— nos cuente su pasado
y reflexione sobre su presente.
Este, el presente, como un
río a través del cual se desplaza,
es siempre inasible, en su
seno se teje ese crucial maridaje
entre la gravitación del
pretérito, que no podemos
cambiar, y la incertidumbre
propia del futuro. En medio
de todo ello, Moro cavila, se
piensa a sí mismo, se reconoce
como una «pasión insatisfecha»,
no un «hombre para la
muerte» (Heidegger), ni una
«pasión inútil» (Sartre), sino
una pasión insatisfecha
en tránsito siempre de construirse
y reconstruirse, de
avanzar pese a todo… Hay en
la obra un nivel más que le
presta nuevos sentidos: el de
palimpsesto. Porque este libro
remite a otros libros y esta
historia nos conduce a otras
historias. Las claves las da el
propio autor. R
(fragmento)
Julio 2012

Cuentos de Pedro Jorge
Vera, editados en Cuba
La editorial Arte y Literatura
de Cuba ha publicado
recientemente una colección
de los cuentos de Pedro Jorge
Vera bajo el sugerente
título de Diana ha regresado
y otros cuentos, preparada
por el académico y crítico
cubano Emmanuel Tornés
Reyes (Manzanillo, 1948) y el
escritor y académico ecuatoriano
Raúl Serrano Sánchez
(Arenillas, 1962), quienes
estuvieron a cargo de la selección,
el prólogo y las
notas de esta edición que, al
final, ofrece una acuciosa bibliografía
de las primeras
ediciones de las obras de Vera.
La selección incluye los
cuentos más conocidos de
Vera: «Luto eterno», «Un
ataúd abandonado», «Ava
y las palmas» y «¡Jesús ha
vuelto!». Asimismo, dos relatos
magistrales: el uno, «Los
mandamientos de la ley de
Dios», compuesto de diez cuadros
que van desentrañando
la hipocresía de la religión
institucionalizada y, otro, «El
destino», una nouvelle de
suspenso y terror, heredera
del mejor Poe. R
Acoso textual, en Colombia
Bajo el sello Mondadori, en Colombia, se editó la novela Acoso textual,
del ecuatoriano Raúl Vallejo. En ella, el o la protagonista intercambia
correos electrónicos con diversos personajes, y para dirigirse a cada
uno inventa una nueva identidad propia. Así, banano@wam.umd.
edu en ocasiones se presenta como un romántico en busca del amor,
en otras es una posgraduada de Ciencias Políticas que problematiza
las utopías socialistas del siglo XX, o se convierte en un explorador del
placer del sexo virtual. Para cada uno de sus interlocutores cibernéticos
tiene un género, un interés y una personalidad distintos. Es un ser
andrógino como el lenguaje. La novela, publicada en Cuba (2009) y
Argentina (2011), ahora está en las librerías de Colombia. R
Julio 2012 R
ROCINANTE 77

PARA GENTE DE MENTE
Literatura universal: ¿cuánto la conoce?
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
El protagonista de
Fahrenheit 451, de Ray
Bradbury, se llama
El escritor Rodolfo
Fogwill fue de
nacionalidad
¿Qué premio recibió el a) el Planeta- Casa América
mexicano Jorge Volpi en b) el Príncipe de Asturias
meses pasados? c) el Biblioteca Breve
El nombre original
del Arcipreste de
Hita era
El Lazarillo de Tormes
fue escrito por…
El autor peruano José
Carlos Mariátegui trascendió
en el género de
¿Cuál es la obra
insigne de Nicolas
Maquiavelo?
El novelista húngaro
Sandor Márai murió en
el exilio en…
Katherine Mansfiled,
autora importante de
cuentos, fue
¿Cuántos latinoamericanos
han ganado
el Premio Nobel de
Literatura?
R 78 ROCINANTE
a) Sontag
b) Freitag
c) Montag
a) uruguaya
b) argentina
c) inglesa
a) José Ruiz
b) Eduardo Arellano
c) Juan Ruiz
a) Miguel de Cervantes
b) Enrique Núñez
c) un autor desconocido
a) la poesía
b) el ensayo
c) el cuento
a) El traje del rey
b) La dama de picas
c) El príncipe
a) Estados Unidos
b) Italia
c) Bélgica
a) neozelandesa
b) inglesa
c) australiana
a) 6
b) 7
c) 5
Soluciones: 1, c; 2, b; 3, a; 4, c; 5, c; 6, b; 7, c; 8, a; 9, a; 10, a.
Julio 2012

Solapas
novEla
Un pirata
develado
La novela El pirata del Guayas, basada
en sucesos reales, fue publicada
en Ecuador en 1855, y de autoría
del chileno radicado en el país Manuel
Bilbao.
Esta obra, que vendría a ser la primera
novela escrita en el país —anterior
incluso a La emancipada, de Miguel
Riofrío (1863)—, es casi desconocida
por el público lector actual.
Su historia recoge las aventuras de
un grupo de reos confinados a la soledad
de las Galápagos, cómo logran escapar
y cómo llegan a Guayaquil, con
la idea de convertirse en piratas, en
medio de un clima de agitación social.
Una auténtica joya literaria.
campaña
Otros títulos
Varios nuevos libros están al alcance
de los lectores:
Satán en los suburbios
/ Bertrand Russell / Colección
Luna de bolsillo
Los hombres sin
rostro / Modesto Ponce
Maldonado / Colección
Luna de bolsillo
El pirata del Guayas / Manuel Bilbao
/ Colección Luna de bolsillo
Teoría del desencanto
/ Raúl Pérez Torres / Colección
Luna de bolsillo
Julio 2012 R
ROCINANTE 79

Solapas
rElato
Cuentos cotidianos
En Retazos del tiempo, se busca recrear
historias con color local y personajes
comunes. El autor, Jorge Mora Varela,
profesor universitario, ha buscado
reconstruir un ritmo de vida sencillo y
conectado con lo natural, identificado
con la provincia de Carchi, de donde es
originario.
Los relatos están agrupados en
«Identidad», «Historias de vida», «Historias
de amor», «Montañas», «Paisajes»
y «Aventuras de niños».
dErEcho
Ensayo
Paisaje, gente y canto
Nelson Campos Espinoza es el autor de
estos textos, que oscilan entre la narrativa
y la prosa poética. El presidente de la Casa
de la Cultura Núcleo del Chimborazo, señala
que esta obra se destaca por «la nostalgia
por la tierra, por el mundo sin fronteras
de una infancia prófuga de la memoria».
Paisaje, gente y canto / Nelson Campos
Espinoza / CCE Núcleo de Chimborazo
R
80 ROCINANTE
Retazos del tiempo / Jorge
Mora Varela / El Conejo
Temas de jurisprudencia
actual en América Latina
Este libro recoge las principales ponencias
de la Conferencia Continental de la Asociación
de Juristas, que se realizó en la Universidad
Andina Simón Bolívar en 2010, sobre
temas jurídicos que están en pleno debate en
toda Latinoamérica.
Justicia, soberanía, decomcracia e integración
en América / Hernán Rivadeneira
(editor) / UASB y Ediciones La Tierra
Julio 2012

Luna de papel
sobre el tema de la lectura
De próxima publicación:
“Se hace camino al leer”,
de Alga Marina Elizagaray
Julio 2012 R
ROCINANTE 81

CONCURSOS
R 82 ROCINANTE
PRÓXIMOS MESES
ENVÍE SU OBRA
En las próximas semanas se cierra el plazo
para la remisión de manuscritos en varios
concursos. El género de novela se premia en
Ecuador, argentina y méxico.
Premio
Internacional de
cuentos Miguel
de Unamuno
Concurso
Nacional de
Novela
Biblioteca
Municipal de
Guayaquil
Premio
Internacional de
Novela Letra Sur
2012
Premio Playboy/
ediciones B 2012
de Novela
Latinoamericana
Plazo de admisión: 31 de agosto de 2012
Extensión: máximo 10 páginas
Fallo: último cuatrimestre de 2012
Premio: €4000
Más información:
http://www.escritores.org
Plazo de admisión: 15 de agosto de 2012
Extensión: entre 120 y 240 páginas
Fallo: 2 de octubre de 2012
Premio: edición
Más información:
http://www.escritores.org
Plazo de admisión: 20 de agosto de 2012
Extensión: mínimo 150 páginas
Fallo: noviembre de 2012
Premio: 50 000 pesos argentinos
Más información:
http://www.premioletrasur.com.ar/bases.html
Plazo de admisión: 31 de agosto de 2012
Extensión: mínimo 170 páginas
Fallo: 26 de noviembre de 2012
Premio: 50 000 pesos mexicanos
Más información:
Presagios / Freddy Peñafiel /
www.escritores.org
Ediitorail El Conejo
Julio 2012

RHUMOR
¿Dónde pondría usted
la coma?
Lea y analice la siguiente frase:
«Si el hombre supiera realmente
el valor que tiene la mujer andaría en
cuatro patas pidiéndole perdón.»
Análisis Diferencial:
Si usted es mujer, con toda seguridad
colocaría la coma después de la
palabra «mujer», dejando la frase así:
«Si el hombre supiera realmente
el valor que tiene la mujer, andaría
en cuatro patas pidiéndole
perdón.»
Pero si usted es hombre, con toda
seguridad colocaría la coma después
de la palabra «tiene». La frase cambia
y las cosas quedarían así:
«Si el hombre supiera realmente
el valor que tiene, la mujer andaría
en cuatro patas pidiéndole
perdón.»
¡Vea qué importante es una coma!
Curiosa
—Carmen, ¿estás enferma? Te lo
pregunto porque he visto salir a un
médico de tu casa esta mañana.
—Mira, vieja bruja, ayer por la mañana
yo vi salir a un militar de la tuya
y, que yo sepa, no estamos en guerra,
¿verdad?
Avivada
Un «avivado» choca a un ingenuo
que estaba estrenando carro. Para no
tener que pagarle, le dice:
—Fresco, amigo, que no tienes
más que soplar por el escape, y se le
quita el hundido a tu carrito.
Y el «vivo» se va. Al poco rato pasa
otro ingenuo y ve al amigo morado,
de tanto soplar por el escape. Después
de que le cuenta lo que pasó, el
que llega le dice:
—Pero vos sí eres bruto: ¿cómo
te va a funcionar si dejaste todas las
ventanas abiertas, pues?
Un pastusito le dice a otro:
—Oye, Manolo, pásame otro
shampoo.
—Pero si ahí en el baño hay uno.
—Sí, hombre, pero este es para
cabello seco y yo ya me lo he mojado.
Viudas
Se encuentran dos viudas en un
cementerio. Una muy feliz, limpiando
la lápida de su marido y cantando
como loca.
La otra, muy triste, a llanto tendido...
Al rato, la desconsolada mira a la
contenta y le pregunta:
—Ay, señora, ¿cuánto tiempo hace
que enviudó?
—Seis meses —responde en tono
alegre la otra.
—¿Y cómo hace para estar tan feliz,
si yo llevo 3 años y no he podido
superar esta pena?
—¡Ay, mijita!, porque después de
muchos años, es la primera vez que
sé dónde está y al lado de quién está
acostado.
Julio 2012 R
ROCINANTE 83

R
BONIL
84 ROCINANTE
Julio 2012