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MÉTODOS PARA LA DESINFECCIÓN DE LOS ...

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Capítulo 1.1.5. — Métodos para la desinfección de los establecimientos de acuicultura<br />

como norma, deben neutralizarse todos los desinfectantes antes de su vertido en el medio ambiental<br />

que las rodea. Además, como los criaderos de moluscos están ubicados en agua marina, también deben<br />

eliminarse con cuidado los compuestos que se forman durante la desinfección del agua marina<br />

(oxidantes residuales).<br />

Se considera que no es práctica la desinfección de los huevos y fases larvarias para la mayoría de los<br />

sistemas de moluscos. Además hay poca información sobre procedimientos específicos de desinfección<br />

para los patógenos de los moluscos (i.e. Marteilia spp., Haplosporidium spp., Bonamia spp., Perkinsus<br />

spp., iridovirus y niveles patógenos de los microbios marinos) o el agua marina. Por tanto, los<br />

desinfectantes y las concentraciones dependen de los patógenos de que se trate y de la esterilización del<br />

agua marina. Pueden considerarse tres fases en la desinfección de los criaderos:<br />

a) pre-tratamiento del agua entrante, v.g. filtros (1,0 y 0,22 µm) o desinfección química (véase la<br />

sección B.2.) = protección de las existencias de moluscos;<br />

b) tratamiento dentro de las instalaciones (especialmente los sistemas de reciclado) = protección de<br />

las existencias de moluscos;<br />

c) tratamiento del agua entrante = protección del entorno.<br />

2. <strong>DE</strong>SINFECTANTES * − TUBERÍAS Y TANQUES<br />

Se recomienda encarecidamente la desinfección de las tuberías y los tanques; la frecuencia de la<br />

desinfección variará de acuerdo con el volumen de producción de existencias de moluscos. Las<br />

concentraciones grandes de moluscos deberían ser sometidas a rotación entre tanques desinfectados<br />

tan a menudo como resulte práctico, y/o mantenerse en agua marina que haya sido desinfectada con<br />

ozono (véase la sección B.3.a) o con cloro (véase la sección B.3.b) y, a continuación, neutralizada.<br />

Debería colocarse en tanques previamente desinfectados cada nuevo lote de moluscos introducido en<br />

la instalación.<br />

Puesto que la presencia de materia orgánica reducirá el poder de desinfección de la mayoría de los<br />

desinfectantes, se recomienda el filtrado del agua entrante (véase la sección B.1.a). Además, deben<br />

limpiarse concienzudamente todas las superficies antes de la desinfección. El detergente utilizado debe<br />

ser compatible con el desinfectante y uno y otro deben ser compatibles con la superficie tratada (v.g.<br />

las soluciones yodóforas son, por lo común, acídicas, por lo que no se pueden utilizar con sobre el<br />

cemento, que es alcalino). Debe asegurarse que los desechos resultantes del lavado son desinfectados<br />

antes de su eliminación. Es preciso cubrir por completo las superficies, v.g., usando un aspersor o<br />

empapador de de alta presión. Se ha de llevar ropa protectora adecuada mientras se trabaja con<br />

cualquier desinfectante (véase la sección A.1).<br />

También se recomienda el secado (diario) al aire o el secado con calor de las tuberías, tanques y otro<br />

equipamiento (v.g. bombonas para el cultivo de algas), además de la desinfección de todas sus<br />

superficies, (especialmente en los casos de brotes de enfermedades de etiología desconocida).<br />

a) El cloro normalmente se aplica como hipoclorito sódico (Chlorox®, la lejía casera, etc.). Se llenan<br />

todas las tuberías con 50 mg de cloro/litro (= 50 partes por millón [ppm]). Se deja expuesto un<br />

tiempo de al menos 30 minutos antes de aclarar con agua marina limpia. Esa solución es efectiva<br />

contra la mayoría de los agentes microbianos y los protozoos labirintúlidos. El agua marina<br />

clorada debe neutralizarse antes de antes de liberarla desde la instalación en que se encuentra. Se<br />

consigue una neutralización óptima filtrándola con carbón vegetal activo (elimina el exceso de<br />

cloro y cloraminas). También pueden usarse agentes reductores como el tiosulfato de sodio o la<br />

aireación (que no eliminan las cloraminas tóxicas).<br />

* Está comprobado que los productos especificados son satisfactorios para los fines indicados; eso no implica que otros<br />

productos no puedan ser igualmente satisfactorios.<br />

Manual de pruebas de diagnóstico para los animales acuáticos 2006 57

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