Director: Agustín Lacalle Redactor Jefe: Daniele Levi Administración: Belén González Colaboradores: Andrés Romero, Alvaro Sol<strong>de</strong>vila, Coquín Artero, David Gutiérrez, David Hurtado, Eduardo Hidalgo, Elena P. Rumpler, Elias Vida, Elisa Guerra, El Investigador, Fernando Cau<strong>de</strong>villa, Gato, Gonzalo Belchi Cruzado, Green Light, Ignasi Peña, Isidro Marín Gutiérrez, Javier Marín, José Manuel Menén<strong>de</strong>z, J. Antonio Martín, Juan Carlos Ruiz, Leandro Gado, Luis Hidalgo, Noucetta Kehdi, Ph&Ec, Raúl <strong>de</strong>l Pino, Ronald Glas, Santiago Sixto Sánchez, Verónica Pérez Rumpler, Wernard Bruining Redacción y Publicidad: Ctra. M-111, km 8, nave A, Paracuellos <strong>de</strong>l Jarama 28860 MADRID Tel.: +34 91 658 45 20 Fax: +34 91 658 45 21 www.spannabismagazine.com comercial@spannabismagazine.com Dep. Legal: M. 50.048-2004 Imprime: Jomagar, s.l. Distribuye: Coedis, s.l. Imagen <strong>de</strong> portada: Spannabis - redacción EDITORIAL Vuelve la primavera, y con ella vuelve Spannabis; y ya van cuatro. Cuatro años en los que miles <strong>de</strong> personas han acudido, puntualmente, a la cita con el autocultivo; cuatro años, y cuatro ediciones, que han sido cuatro gritos por la libertad. Todo acompaña: ha llegado el buen tiempo y, con él, comienzan a florecer los jardines. Es el momento <strong>de</strong> plantar, y <strong>de</strong> plantarnos. Basta ya <strong>de</strong> multas, basta ya <strong>de</strong> coacciones. No queremos consumir sustancias adulteradas en el mercado negro. No queremos alimentar mafias criminales que se <strong>de</strong>dican a financiar grupos terroristas. Eso sí: queremos seguir fumando lo que a nosotros nos plazca. Era febrero <strong>de</strong> 2004 cuando abrió las puertas la primera edición <strong>de</strong> Spannabis: en ese momento, nadie esperaba que alguien se atreviera a organizar una feria cannábica en España. Nosotros lo hicimos y, por ahora, no nos hemos cansado <strong>de</strong> luchar por <strong>de</strong>volver al cáñamo el lugar que se merece. El "caso Pannagh" ha creado un prece<strong>de</strong>nte que no po<strong>de</strong>mos pasar por alto: los responsables <strong>de</strong> un cultivo colectivo que abastece a más <strong>de</strong> 70 socios han sido exculpados. Es un paso más en nuestra lucha: el autocultivo no está penado, por lo que asociarse y crear cultivos compartidos es la reacción lógica <strong>de</strong> los consumidores que no pue<strong>de</strong>n plantar por sí mismos. A la vez, se abre otro camino que <strong>de</strong>bemos recorrer. Ya que el consumo <strong>de</strong> cannabis en el ámbito privado no es ilegal, una respuesta factible son los clubes <strong>de</strong> consumidores. Lo importante es que se multipliquen los cultivadores <strong>de</strong>clarados que actúan para controlar la proce<strong>de</strong>ncia y la calidad <strong>de</strong> lo que fuman. Y que, ante la apabullante evi<strong>de</strong>ncia, las autorida<strong>de</strong>s tengan que darse cuenta, <strong>de</strong> una vez por todas, <strong>de</strong> que no somos perfectos, pero somos muchos. 3