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Cardiovascular
A nivel cardiovascular hay que prestar atención al equilibrio
electrolítico, y a los niveles de taurina y L-carnitina
Renal
Gatos con síntomas de insuficiencia renal
El gato mayor
La enfermedad renal es uno de los motivos de visita al veterinario
más importantes para los gatos mayores.
Cuando el riñón se descompensa no puede excretar
fosfatos ni sintetizar la vitamina D3 necesaria para la
absorción de calcio. Esto conduce a la hiperfosfatemia e
hipocalcemia, que exacerba el hiperparatiroidismo y en
ocasiones causa la desmineralización del hueso. Limitar
los fosfatos en la dieta es una vía eficaz de prevenir la hiperfosfatemia
y el hiperparatiroidismo. Diversos estudios
han mostrado que la esperanza de vida en gatos con fallo
renal es significativamente más larga cuando se alimentan
con dietas bajas en fósforo.
Una ingesta muy baja de fósforo es la clave para reforzar
la salud renal en gatos con enfermedad renal. La
retención de fosfato y la hiperfosfatemia se producen
temprano en el curso de la enfermedad renal y juega un
papel fundamental en el origen y progresión del hiperparatiroidismo
renal secundario, la osteodistrofia renal, la
deficiencia absoluta o relativa de vitamina D y la calcificación
de tejidos blandos. Minimizando la hiperfosfatemia,
el hiperparatiroidismo secundario y sus secuelas pueden
ser prevenidas.
Además las dietas con altos contenidos en aceite de pescado
mejora la tasa de filtración glomerular, al tiempo
que minimiza la glomeruloesclerosis renal.
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Cambios en la piel y el pelo
Algunos cambios son evidentes, como la aparición de pelo
blanco y un deterioro general del estado del pelaje.
La piel es menos flexible y elástica y la producción de grasa
no se realiza adecuadamente y queda más seca.
El envejecimiento cutáneo se debe a factores intrínsecos
(edad cronológica) y extrínsecos, fundamentalmente el
fotoenvejecimiento: los rayos ultravioleta (UVB y también
UVA) causan efectos perjudiciales debidos a la
formación de radicales libres que alteran el ADN nuclear
y mitocondrial.
Cuidado dental
Las enfermedades de la cavidad oral son a menudo una
causa de morbilidad en el gato mayor, que a menudo pasan
desapercibidas y pueden contribuir a un deterioro
general del gato.
Un examen oral completo, junto con las observaciones
del propietario en relación al comportamiento alimentario,
pondrán de manifiesto las patologías orales. Los gatos
con problemas dentales puedan estar delgados, dejar caer
comida de la boca, comer más lentamente, masticar solo
por un lado, o mostrar menos interés por el alimento.
Muchos gatos mayores son propensos a la formación de
sarro, que además de causar mal aliento puede provocar
gingivitis, pérdida de dientes e incluso enfermedades sistémicas.
Sin embargo, la edad o la presencia de otros procesos
crónicos no deberían excluir el tratamiento de las enfermedades
dentales, ya que no tratar procesos dolorosos,
como las lesiones odontoclásticas resortivas, la enfermedad
periodontal o las fracturas dentales, contribuyen a
disminuir la calidad de vida.
Conclusión
En el gato mayor se producen una serie de cambios a los
que podemos dar una repuesta nutricional específica a los
7 años, cuando aun no son evidentes, y otra a partir de los
10 años, cuando posiblemente empiecen a manifestarse
los efectos de la edad