La Obra de Dios se fortalece

58 Impacto evangelístico devocional
1963 América
1963 Europa
1981 Oceanía
1984 África
1989 Asia
DRev. Luis M. Ortiz
Esta Obra es de
ios
“Y cuando lo oyeron todos nuestros enemigos, temieron todas las naciones… y se sintieron humillados, y conocieron que por
nuestro Dios había sido hecha esta obra.” Nehemías 6:16.
él es su dueño (Salmo 24:1). Él es el
Señor de la mies (Mateo 9:38). Él tiene todo el
derecho (Mateo 20:15). Sin Él nada podemos
hacer (Juan 15:5). Con Él todo lo podemos (Filipenses
4:13).
ESTA OBRA LA DISPUSO DIOS. En su
presciencia, previó la triste y alarmante decadencia
espiritual y la mundanalidad de las
iglesias, y específicamente de las iglesias y
concilios pentecostales, y determinó levantar
esta Obra para este tiempo del fin.
ESTA OBRA LA INICIÓ DIOS. Dios inspiró
el nombre: “MOVIMIENTO MISIONE-
RO MUNDIAL”. Lo registramos en febrero
1963.
Y en estos 50 años, Dios ha llevado esta
Obra a 65 países, nos ha ayudado a levantar
más de 5.000 nuevas congregaciones, nos
ha dado un cuerpo ministerial alrededor de
6.000 compañeros. “Lo necio del mundo escogió Dios,
para avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió Dios,
para avergonzar a lo fuerte; y lo vil del mundo y lo menospreciado
escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, a fin
de que nadie se jacte en su presencia” (1 Corintios 2:27-
29). ¡Y precisamente, porque nada somos, es
que Dios se glorifica en nosotros!
ESTA OBRA LA GOBIERNA DIOS. No-
sotros creemos y practicamos la dirección de
Dios, pues “los que son guiados por el Espíritu de Dios,
éstos son hijos de Dios” (Romanos 8:14). La Obra
de Dios no puede ser gobernada por ningún
sistema humano de gobierno; ni por la anarquía,
ni por la dictadura, ni por la autocracia,
ni por la democracia. Estos sistemas humanos,
unos son peores que otros. El que es un
poquito regular es el sistema democrático,
y por ser también humano, está plagado de
manipulación, corrupción y peculado. Tales
sistemas no son para la Obra de Dios.
La Obra de Dios la gobierna Dios. “Ha parecido
bien al Espíritu Santo, y a nosotros…” (Hechos
15:28). Esto es lo que creemos y practicamos.
ESTA OBRA LA PROMUEVE DIOS. Nosotros
no andamos arriba y abajo, de pueblo
en pueblo, de ciudad en ciudad, de país en
país, de continente en continente, mercadeando,
comprando congregaciones y templos,
conciencias y pastores. Pues esta Obra
es de Dios, Él es quien la promueve.
A aquellos que Él necesita los trae con
señales, milagros y revelaciones. Cuando Él
ve que alguien se daña, se materializa, o comete
adulterio, como ya no es un “ejemplo de
los creyentes” (1 Timoteo 4:12), ya se deshonró