Revista Agropecuaria Nuevo Siglo Número 123

Número 123 || Revista Agropecuaria y de Producción - Página 02
MAIZ
AL ROJO VIVO
Hoy haber tenido un buen rinde en maíz se volvió un problema de
logísticia y comercial para los productores, con precios y condiciones
comerciales negativas auguran una caida en la cantidad de hectáreas
a sembrarse en esta nueva campaña.
Una verdadera paradoja envuelve al
maíz en el cierre de la campaña 201 3/1 4,
el buen rinde logrado en los campos se
volvió una complicación para los
productores argentinos, y en mayor
medida para los productores del Norte del
país por distintas razones, por su lejanía
de los puertos y de los principales centros
demandantes de este grano para ser
industrializado o convertido en proteina
animal, y por el menor potencial
productivo de sus tierras.
En el sistema productivo actual se vuelve
fundamental tener parámetros que
permitan evaluar la factibilidad de
producción, uno de estos son los rindes
de indiferencia, es decir, la cantidad de
granos que se necesitan cosechar para
pagar los costos.
En este sentido podemos apelar a un
informe de la Bolsa de Cereales de
Rosario que indica que se necesitan más
granos para mantenerse produciendo en
esta campaña, comparando con los
promedios históricos.
"Tomando lotes de regular a buenos, con
alquileres de 16 qq/ha de soja, un campo
debería producir 101 qq/ha de maíz o 34
qq/ha de soja de primera o 25 qq de soja
de segunda con un trigo de 38 qq/ha para
pagar todos los costos sin obtener
ganancias. En la región núcleo, los
promedios de las últimas 6 campañas
dejaron rindes de 79 qq/ha para maíz de
primera, 33 en soja de primera, 24 en la
de segunda y 27,3 quintales por hectárea
en trigo. Si bien estos números
corresponden a promedios regionales y no
pueden compararse en forma directa con
la productividad unitaria de un lote, esta
campaña 2014/15 se distingue porque los
rindes de indiferencia muestran una de las
brechas más amplias respecto a los
promedios productivos de los últimos
años".
Para avalar estos datos la entidad
rosarina presenta algunos ejemplos, "se
toma un lote en Cavanagh (Córdoba), allí
el año pasado los rindes de indiferencia
para hacer soja y maíz bajo un
arrendamiento de 17 qq/ha eran de 32 y
70 qq/ha, respectivamente. Este año los
rindes de indiferencia ascienden a 36 y
100 qq/ha, respectivamente. También es
mayor el impacto del valor del
combustible. Por ejemplo, en General
Villegas, en lotes de suelo clase IV
produciendo soja, sólo el costo de flete por
la distancia a puerto quita la factibilidad
del negocio en este año. Todo esto
configura un escenario que sigue
presionando a la baja los alquileres".
Si estas regiones tienen complicaciones
para seguir produciendo maíz, ¿Cuanto
más inconvenientes tienen los productores
del NEA y NOA que además necesitan del
maíz para mantener un esquema
productivo que sea sustentable
agronómicamente?
Menores perspectivas
de siembra
Un informe de GEA, Guía Estratégica
para el Agro de la BCR, consigna
aspectos de indudable importancia para la
realidad agropecuaria de nuestro país.
Entre ellos, indica que:
a) En campos arrendados, sólo se
produciría maíz para cumplir con los
contratos de alquiler.
b) Por costos, prevalece la opción de
hacer soja en vez de maíz.
c) Los lotes de clase IV (baja aptitud
agrícola), que se encuentran a grandes
distancias de los puertos, al no
concretarse reducciones en el alquiler
corren riesgos de quedar fuera del ciclo
productivo en cuanto a siembra de maíz.
d) Rindes de indiferencia más altos
obligan a un cuidadoso y exhaustivo
análisis de cada eslabón del negocio del
maíz. Lograr beneficios depende de la
situación particular del productor: si
dispone o no de maquinaria propia; cuál
es la distancia de su campo a los puntos
terminales de entrega, como son los
puertos; si tiene o no capacidad de
almacenamiento; la capacidad de
negociación; el nivel de endeudamiento y
las posibilidades de financiación.
e) El alquiler, los aumentos del precio
del gasoil, y su efecto sobre los fletes, se
destacan como puntos determinantes en
la estructura de costos de la nueva
campaña.
El informe indica, además, que bajo
arrendamiento, y sin tener en cuenta
gastos de estructura ni impuestos, los
rindes de indiferencia en maíz son tan
elevados que sólo se cubrirían con
planteos de alta tecnología en lotes de
alto potencial y en el mejor de los
escenarios productivos. De esta forma
existe el riesgo de que queden fuera del
ciclo productivo los campos de menores
aptitudes agrícolas.
Entre 2003 y 201 4, los insumos y costos
mostraron aumentos en sus precios en
dólares muy superiores al del precio
Excelentes rindes y pocas
condiciones de venta
"Las distintas alteraciones que tenemos
en todos los productos agrícolas, el
exceso de retenciones, el tipo de
cambion devaluado, la intervención en
los mercados, hacen un coctel que
provoca una situación difícil para la
rentabilidad agrícola, esto se refleja en el
maíz y la soja", indica Ariel Ojeda,
corredor de cereales en el programa
radial "Haciendo Campo".
En el caso del maíz hay un combo de
situaciones que afectan la rentabilidad de
este cultivo, como por ejemplo, el mejor
estado de los cultivos en la historia
agrícola de Estados Unidos, esto
deprime el precio internacional, se
esperan rindes de 200 quintales por
hectárea. En el ámbito doméstico el
gobierno no entrega nuevos permisos de
exportación (ROE) lo que hace que los
exportadores se retiren del mercado
demandante ,"recorriendo los campos se
puede ver bolsones de maíz sin destino
posible, increible, el producto más
vendido del mundo con casi 900 millones
de tonelas que se comercializan a nivel
mundial, en el Chaco no se puede sacar
esperado en la cosecha para la tonelada
de maíz. En estos casos se dieron alzas
de entre el 111 % y el 1 93% interanual,
medidos en dólares, contra un 1 00% que
creció el precio a cobrar por la semilla en
el mismo lapso.
Así, ítems como labores y fletes registran
fuertes aumentos, perjudicando al maíz
que se cosecha en zonas alejadas de los
puertos.
El trabajo señala que un hecho
preocupante para la actividad maicera y
sus derivados: la caída en la intención de
siembra, ya que para esta campaña se
observa una caída de 24% de la superficie
de maíz de primera y un 1 3% menos del
tardío, con respecto al ciclo anterior, en la
denominada zona núcleo.
A la hora de señalar razones para esta
caída, la entidad rosarina destaca que por
costos, “prevalece la opción de hacer soja
en vez de maíz” y que en los campos
arrendados, “sólo se produciría maíz para
cumplir con los contratos de alquiler”.
de los campos porque nadie compra".
Para Ojeda es claro que no habría
muchos cambios a mediano plazo, "los
indicadores están estables porque la
cosecha norteamericana será de 350/355
millones de toneladas, en Chicago el
precio se mantiene entre 140 150
dólares, y en Argentina no hay precios en
dólares, se ofrecen 1.000 pesos para
entrega a partir de septiembre/octubre
con un flete de $400 y con muy pocos
cupos de descarga.
Tenemos un costo para el embolsado,
sin muchos destinos para enviar, el que
no puede guardar tiene que entregar su
maíz a un precio vil y con alto costo de
flete, esto realmente es una situación
muy compleja y que sin dudas debiera
ser tenida en cuenta por las autoridades
nacionales", indica.
"Es una pena ver los bolsones de maíz
en el campo, en lotes que han tenido
rindes excepcionales, y ese grano hoy no
se puede vender, el haber cosechado
bien en esta campaña se volvió un
problema para los productores, es una
locura", graficó Ojeda.