Volumen 1 - Auditoría Superior de la Federación

Informe del Resultado de la Revisión y Fiscalización Superior de la Cuenta Pública 2005
fijar nuevas competencias, para atender con capacidad y decisión la problemática del país y atender
los requerimientos ciudadanos oportunamente. Los cambios a la ley orgánica implicaron
modificaciones estructurales que dieron origen a órganos, instrumentos y procedimientos, que
demandan personal eficiente y honesto con alto sentido de responsabilidad.
Con fundamento en las reformas y adiciones a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal
expedida el 29 de diciembre de 1982, la Secretaría de Patrimonio y Fomento Industrial se transformó
en la Secretaría de Energía, Minas e Industria Paraestatal (SEMIP) y se transfirieron a la Secretaría de
Comercio y Fomento Industrial las funciones relacionadas con la minería y el fomento industrial.
Ante la necesidad de hacer frente a los cambios en el ámbito mundial en materia energética, en el Plan
Nacional de Desarrollo 1988-1994 se estableció como objetivo: lograr el bienestar de la población, el
crecimiento económico y la modernización de la administración pública. Para el efecto, se elaboró el
Programa Nacional de Modernización de la Empresa Pública 1990-1994, con el objetivo de fortalecer e
impulsar la desincorporación de las entidades paraestatales no prioritarias ni estratégicas y de orientar
los recursos económicos acordes con las reformas implantadas.
En 1994, el ejecutivo federal sometió a consideración del Congreso de la Unión la iniciativa de
reformas y adiciones a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, en la cual se propuso
adecuar la configuración administrativa de las dependencias del ejecutivo federal, para que su
estructura y acción cotidiana respondiera a la nueva realidad del país y demandas apremiantes,
orientadas a un gobierno más eficiente, promotor del desarrollo, justo y comprometido; así como
fomentar la generación de energía en todas sus formas.
De acuerdo con los considerandos, las modificaciones a la Ley Orgánica de la Administración Pública
Federal se orientaron a realizar cambios a la estructura y acción de la administración pública conforme
a la nueva realidad y a las aspiraciones y demandas colectivas más apremiantes, la conformación de
un gobierno más eficiente, promotor del desarrollo y más comprometido.
Con el propósito de agrupar las acciones respecto de un mismo sector y crear marcos e instituciones
regulatorios más eficientes, en 1994, la SEMIP se transformó en la Secretaría de Energía (SENER)
con atribuciones en la planeación estratégica del sector, con funciones reguladoras para establecer e
instrumentar una agenda de cambio en la política y en el desarrollo energético, y con autoridad y
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