Vázquez Núñez G., Manual de historia de la Orden de ... - OdeMIH

MANUALDE HISTORIA DE LA ORDENDE NUESTRA SEÑORA DE LAMERCEDPORFRAY GUILLERMO VÁZQUEZ NÚÑEZDE LA MISMA ORDENDOCTOR EN FILOSOFÍA Y LETRASTOMO I(1218-1574)TOLEDOEST. TIPOGRÁFICO « EDITORIAL CATÓLICA TOLEDANA»C ALLE DE JUAN LABRADOR, 6, TELÉFONO 2111931

•••Al Rvdmo. P. Juan del C. Garrido,Maestro General de la MercedPUEDE IMPRIMIRSE:Madrid 8 de Junio de 1931FRAY ALBERTO BARROSPROVINCIALNIHIL OBSTAT:DR. MARTÍN DE LA TORRECENSORMadrid 23 de Junio de 1931IMPRIMASE:DR. J. FRANCISCO MORÁNVICARIO GENERALHace veintiséis años que V. Pd. Reverendísima,entonces provincial de la Argentina,visitó esta provincia de Castillaimprimiéndole vigoroso impulso con S11clara inteligencia se vida por una voluntadenérgica.Yo era entonces un pobre estudiante alque V. Rma. prodigó las frases de alientoy cariño leyendo sus borradores y enviandoparte de ellos al Rmo. P. Valenzuela,general de la Orden. Desde entonces, aunquefalto de medios y abrumado de trabajo,no he cesado de laborar con otros enla historia de la Merced de la que hoypuedo ofrecerle el presente Manual, utilizandolas investigaciones propias yajenas.Recíbalo como una pequeña muestradel grande amor y agradecimiento quehacia V. Pd. Reverendísima, siente elúltimo de sus hijos.FR. G. VÁZQUEZMadrid 27 de Junio de 1931.

PRÓLOGOEn los tiempos modernos es inexcusable que loshabitantes de una nación y los que forman una colectividad'importante conozcan su historia, que paraellos debe ser maestra de la vida, pues la experienciadel pasado es lección para el porvenir.Esto a condición de que la historia sea verdadera,pues si se falsean los hechos, aparecerán como recomendables procedimientos y cosas que fueron detestables, y los que vienen detrás creerán que es caminollano y seguro el que está realmente rodeado de precipiciosy sembrado de dificultades.Esta convicción me ha movido hace muchos ariosa presentar con la fidelidad posible los sucesos, sin'o cultar los defectos y pecados aun de los mayoresPe rsonajes, como no los oculta la Sagrada Escritura,modelo divino de todas las historias. Defectos y pecados los hubo en el cielo y en el apostolado, y sería'e xcesiva soberbia creernos superiores a los ángeles.37 a los apóstoles.Hasta hace pocos arios se creía imposible escribirla historia de la Merced. Quejábanse los escritores.de la falta de documentos seguros y de que todo enella aparecía nebuloso.Unos años de investigación en los archivos hanba stado para disipar esas nieblas. Hoy podemos decir.quela Merced es una de las Ordenes antiguas mejordocu mentadas en proporción al número de sus religiosos.

VIEste número es la clave de su historia, reveladapor las actas del capítulo general de 1317, que hepublicado hace poco. Al cumplir los cien arios de sufundación tenía sólo unas cincuenta casas y menosde doscientos cincuenta religiosos. Esa cifra y elnúmero de casas que la Orden tenía en 1249 nospermiten calcular que, al morir San Pedro Nolasco,no contaba arriba de un centenar de religiosos.Documentos posteriores nos autorizan para formarla estadística de conventos y frailes en las centuriassiguientes. Un refrán recogido en 1548 por el ComendadorGriego, decía: Los frailes de la Merced sonpocos, mas llámenlo bien. Podrá tal vez discutirse lasegunda parte, pero no la primera, que el pueblocomprobaba todos los días.Estamos, pues, excusados de buscar los innumerablesmártires, doctores, escritores, obispos y santosque no cabían en tan exiguo número de religiosos.Para ese pequeño rebaño, la documentación conservadaes muy satisfactoria. Parte de ella se ha idopublicando y de otra poseemos abundantes extractosque verán pronto la luz pública. Hoy podemos, graciasa Dios, rehacer nuestra historia sobre los documentosoriginales, prescindiendo casi del todo de losautores muy posteriores a los sucesos, que era misueño dorado desde que me dediqué a la investigación.Podrán todavía aquilatarse muchos sucesos y descubrirseotros nuevos, más o menos importantes, perolos rasgos generales de la Orden están ya dibujadoscon bastante seguridad.Obras citadas con más frecuenciaBOLETÍN DE LA ORDEN DE LA MERCED. —(Publicado enRoma desde 1912. Contiene muchos estudios y documentosimportantes).GAVER (Fr. Nadal).—Cathalogus Magistrorum generaliumet priorum conventus Barchinonae anno 1445scriptus et nunc primum editus. Toleti. Typis EditorialCatólica, 1928. En 16.° de 70 págs. (En el archivode la corona de Aragón existen muchas otras cosasdel Rvmo. Gaver, que se citaran oportunamente).GAZULLA (Fr. Faustino).—Jaime I de Aragón y los Estadosmusulmanes. Discurso de recepción en la Academiade Bellas Letras. Barcelona, 1919. En 8.° de 80paginas.IDEm. —Refutación de un libro titulado San Raimundo dePeriafort... Barcelona, 1920. En 8.° de 252 págs.IDEM. —El Puig de Santa Maria. Valencia, 1927. En 4.° de66 págs.GAZULLA (Fr. Policarpo).—Los primeros mercedarios enChile. Santiago, 1919. En 4. 0 de 494 págs.Cr uimERAN (Fr. Felipe).—Breve Historia de la Orden deNuestra Señora de la Merced de redempcion de cautivoschristianos y de algunos santos y varones ilustresde ella... Impressa en Valencia, en casa de los herede-2ro9s2 pdáegJsu. an Navarro. Ario 1591. Un tomo en 8.° deLusits (Fr. José).—Bullarium Coelestis ac Regalis OrdinisB. Mariae Virginis de Mercede, redemptionis captivorum...Barcinone, 1696. En folio de unas 500 páginas.M ERCED (La).—Revista mensual, publicada por los PadresMercedarios en Ferrol y Madrid, desde 1918. Contienebastantes documentos y semblanzas documentadas demercedarios.

VIIIPÉREZ (Fr. Pedro Nolasco).—Religiosos de la Merced quepasaron a la América Española. Sevilla, 1924. En8.° de 496 págs.IDEM. —Los obispos de la Orden de la Merced en América.Santiago de Chile, 1927. En 8.° de 584 págs.IDEM. —Apostolado de los mercedarios entre los indios deAmérica. Trabajo premiado, en la Revista Mercedaria, de Barcelona, Febrero de 1919-Abril de ,1920.RIBERA (Fr. Manuel Mariano). —Centuria Primera delReal y militar Instituto de... Nuestra Señora de laMerced. Barcelona, 1726. En folio de unas 700 páginas.(El autor pasó cerca de treinta arios en el archivo de lacorona de Aragón y de él extrajo los documentos paraeste y el siguiente libro, ambos importantísimos).IDEm.—Real Patronato de los serenísimos señores Reyesde España en el Real y militar Orden de Nuestra Señorade la Merced... Barcelona, 1725. En folio de cercade 700 págs. (Contiene innumerables documentos casitodos del archivo de la corona de Aragón)..SALMERÖN (Fr. Marcos).—Recuerdos Históricos y Políticosde los servicios que los generales y varones ilustresde la religión de Nuestra Señora de la Merced, redenciónde cautivos, han hecho a los Reyes de España enlos dos mundos... En Valencia, año 1646, foli p de unas600 págs. (Contiene muchos documentos auténticos,pero también algunos apócrifos).VARGAS (Fr. Bernardo). — Chronica sacri líe militarisordinis B. M. de Merced.e redemptionis captivorum.Panormi, dos tomos, folio 1618 y 1622. (El autor sacómuchísimos documentos del archivo Vaticano y deotros en treinta años de trabajo).VÁZQUEZ (Fr. Guillermo). — Actas del capítulo general de1317, celebrado en Valencia en que fue elegido maestrogeneral el venerable Raimunclo Albert con asistenciade casi todos los frailes de la Orden. Roma, 1930.IDEM. —El P. Francisco Zumel, general de la Merced ycatedrático de Salamanca. Madrid, 1920.IDEM. —Biografia del Maestro Fr. Gaspar de Torres, mercedario,catedrático y cancelario de Salamanca yobispo de Medauro... Madrid, 1927.IDEM. —D. Diego de Muros, obispo de Tuy y de CiudadRodrigo, de la Orden de la Merced (1405-1492). Madrid,1919.ZIJMEL (Fr. Francisco). - De Vitis Patrum ac MagistrorumOrdinis Redemptorum B. M. de Mercede • Brevis Historia.Salmanticae, 1588. (Citaremos la edición de Roma,Schola Typographica Salesiana, 1924. En 16.° de 112páginas).No utilizo, por creerlos fabricados en el siglo XVII,los siguientes documentos referentes a los primeros tiemposde la Orden:1. 0 El documento de los sellos o información de la vidade San Pedro Nolasco en 1260.2.° La información sobre la vida de San Pedro Armengol,hecha en el capitulo de 1304.0L a vida anónima de Santa María de Cervellönde313234.° El códice de Gerona de 1401 con las vidas de SanPedro Nolasco, San Serapio, San Pedro Pascual...Inserta los dos primeros el P. Salmerón en sus RecuerrespectivosEn general .podemos adelantar que los mercedarios dey los dos últimos los biógrafos de los santoslos dos primeros siglos no escribieron historias. VivieronY tr abajaron, y de su labor nos quedan numerosos docuznentos, sobre todo de carácter económico, pero con abundantesreferencias personales.Ix

DIVISIÓNLa historia de la Merced se divide en cuatr&épocas bien caracterizadas:L a Orden militar (1218-1317).2. Generales clérigos vitalicios (1317-1574).3.' Generales de seis años (1574-1870).4•' Adaptación moderna (de 1870 a nuestrosdías).

PRIMERA ÉPOCAORDEN MILITAR (1218-1317)CAPITULO PRIMEROFundación y primeros pasos de la OrdenS UMARIO: Estado de la Iglesia a principios del siglo XIII.Los mahometanos. — La redención de cautivos. —SanPedro Nolasco.—Fundación de la Orden. —Nuestra Ma--dre y Fundadora.--Fecha.—E1 Rey y San Raimundo.Primeros religiosos.—El primer Convento.—Terciariosy cofrades. —Fundaciones en Perpiiián y Mallorca.—Hospitales. —Escasez de personal.—Hábito. —Estatutos.—Confirmación apostólica. —Sacerdotes.—Oficio divino.2-edda.P.7Hoe e rieuun riurp Ord Virg.s iacMercede., X At iitadat'ArtnoIar&w -71",ien4anno176 . elena; =teridi‘. recconzta,-, /Ce,r.OrdintiM 13:V at7iri‘ie e.,44.7>evrie7 2edgenzt.C4rAeip. anuda' er n -dittua ente„.: ah,Poluium, exvreplum ilzeic&419,,neditie jeae,-47 n •/ ui operale: dezdio rd. (qui adeercae o/r?iniznu:a. ier2fla7uicre,Itide,rieueve) itezzeiw•ad,rtrilenieZe p 414.U? efratif.)i,:»,, ieṛ)rt-trritds re- jjro.dit in.Pc4teinz, reiterarnm multoe44)7,- ah"-eze5 #6•1,1., • pree reü, yues,(4 retl7W1u2.6itme_rcuci,r77u.zrud..irZee, tuit exspori.Ai. •d2,27,1.Enscripción de Barcelona con la fundación de la Merced,en 1218.No era muy halagüeño el estado de la Iglesiaa principios del siglo XIII. Con tinuábase en ellafe lizmente el gran impulso renovador dado porSan Gregorio VII, pero tropezando con gravesdi ficultades. Los pueblos bárbaros, enseñoreadosde Europa y convertidos al cristianismo, nolograban enfrenar sus instintos salvajes, quedaban origen a continuas luchas civiles e internacionales.Y los que tan esclavos se mostraband e la ira no eran tampoco dueños de las otrasPasiones.Con ser esto muy grave, era todavía mayorel peligro exterior, pues los musulmanes estrechaban con cerco de hierro el pequeño rincón de

— 14 —'Europa al que estaba reducido el catolicismo.'Todo • el norte de Africa y la mitad de Españaestaba en poder de los mahometanos, y las últimashuellas de los cruzados iban a desapareceren Oriente. Los tártaros paganos ayudaban a•cerrar el paso al cristianismo en el norte deEuropa.Como siempre, Dios Nuestro Señor, que viveen su Iglesia, proveyó a sus necesidades con„grandes predicadores, con incomparables modelosde mansedumbre y de pureza que enseñarona los demás lo que tanto necesitaban, y con insignesreyes y caudillos que ensancharon los•dominios de la cruz.Una de las mayores necesidades de la época, era la redención de los cristianos que diariamentecaían en poder de los sectarios de Ma,homa, yaen las guerras, ya en el mar, que los piratasafricanos surcaban impunemente, saqueandoademás los pueblos de la costa y llevándose cautivosa sus habitantes.Millares y millares de cristianos eran arrastradosa los países musulmanes para ser vendidoscomo vil ganado., empleándolos de dia comobestias y sepultándolos de noche en hediondasmazmorras, generalmente subterráneas, paraevitar su huida.La apostasía era el único recurso para mejorarun poco su triste condición, y a ella apelaban,con frecuencia los desesperados, pues la ley deMahoma sólo protege a sus adeptos..Después.de la batalla de las Navas de Tolosa,— 15 —ganada por los cristianos españoles en 1212, elimperio de los almohades se fraccionó en pequeñosestados rivales, cuyas divisiones facilitaronlas conquistas de San Fernando y de Jaime deAragón. Gracias a sus escuadras pudo éste,desde mediados de siglo, ejercer la hegemoníaen el Mediterráneo e imponer ventajosos tratadosa los musulmanes de Africa, limitando lapiratería y facilitando el comercio. Pero esostratados, concluidos de mala fe, se cumplieronsiempre muy mal y los cautivos eran numerosísifilosen Granada, Túnez, Tremecén, Marruecos yEgipto (1).Para calcular el número de cautivos y deapóstatas, baste citar una carta de Jaime II deAragón dirigida al Papa en 1. 0 de diciembrede 1311, en que dice lo siguiente: « Cuentan personasfidedignas que en la ciudad de Granada,donde moran unas doscientas mil personas, no seencontrarán quinientas que sean sarracenos denaturaleza, sino que, o ellos fueron cristianos, otuvieron al padre o a la madre, al abuelo o a laabuela, o a los bisabuelos cristianos, y hay en elreino de Granada bien quinientos mil que negaronla fe católica y abrazaron locamente la sectade Mahoma. Y se cree firmemente que en elreino dich io hay más de treinta mil cristianosIniserablemente cautivos» (2).(1) Gazulla (Fr. Faustino): Jaime I de Aragón y loses tados musulmanes.(2) Ribera: Real Patronato, pág. 75.

.1"— 16 —Surgieron después los benimerines, cuyo imperioa principios del siglo XIV constituyó ungravísimo peligro para la cristiandad, pero supoderío se hundió definitivamente en la batalladel Salado en 1340. Con esto pudieron respirarlos cristianos hasta la aparición de los turcos.Muchos fueron los cristianos que intentaronremediar la horrenda desgracia del cautiverio,pero con poco éxito generalmente. Ocupábanseen la redención, no sólo los Trinitarios reciénfundados en Francia, sino también algunas órdenesmilitares y muchos seglares piadosos. SanJuan de Mata tropezó con la rutina de los monjesque no concebían que un religioso pudiera serfervoroso andando siempre entre los fieles, yhubo de limitarse a dedicar a la redención latercera parte de los bienes que tuvieran sus conventossin pedir. El mismo reparo opusierontambién los monjes a los mendicantes, cuyo modode vivir chocaba tanto con las costumbres antiguas(1).Un piadoso comerciante francés, establecidaen Barcelona, decidió consagrarse también al remediode aquella necesidad. San Pedro Nolasco,nacido en Mas-Saintes-Puelles, del condado deTolosa, hacia 1180, se trasladó, joven todavía, ala capital de Cataluña, ya por huir de las guerrasde los albigenses que ensangrentaban el mediodíade Francia, ya también por encontrar(1) P. Antonin de l'Assomption: Les Origines de l'Ordrede la Tres Sainte Trinité. Rome, 1925.— 17 —aquí mayores facilidades para su profesión ( 1 )Piadoso mercader le llama Fray Pedro de Cijar,nuestro cronista de 1446, y esa profesión tan peligrosaentonces, le sirvió providencialmente deescuela para la redención.Los comerciantes del siglo XIII no eran loshombres pacatos que hoy vemos detrás de unmostrador, sino capitanes arriesgados que emprendían grandes viajes para adquirir y colocarsus mercancías, luchando con todo género dePeligros. Sobre todo si el comercio era marítimo,la empresa rayaba en lo heroico. La distinciónentre marina mercante y marina de guerra, escosa moderna, pues en la Edad Media y aun después, buque desarmado era buque perdido.Para que la semejanza entre las dos profesio-(1) Mas-Saintes-Puelles es un pueblecillo de 900 habitantes, situado en una colina a distancia media entre Tolosa y Carcasona, con estación ferroviaria, y a unos cua-- tro k ilómetros de Ricaud, la antigua RecauduM, estaciónse fialada en los itinerarios romanos. En la Edad Mediat uvo un priorato de agustinos mencionado en los registrosPon tificios de Súplicas con el nombre de Mansum SanctarumPuellarum, en el territorio del Monasterio de SanPa poul, situado a corta distancia. Por eso Gaver dice bienq ue Mas era de la parroquia de San Papoul, que no fueele vada a obispado hasta 1317. Los protestantes se hicierenfuertes allí en 1573, y aunque los católicos de Castelndarylos sitiaron varias veces, hubieron de retirarseCOn gr andes pérdidas. En 1622, al aproximarse Luis XIIIc°n su ejército, los 'habitantes huyeron y la 'población fuecons umida por las llamas. (V. el Boletín, de la Orden, Marde1929).2

— 18 —nes fuera toda vía mayor, los redentores llevabantambién la mayor parte de su caudal en mercancías,pues la moneda escaseaba en tierra de cristianosy su exportación estaba generalmente prohibidao limitada.Quizá en esos mismos viajes conoció San PedroNolasco más a fondo las miserias del cautiverio,que nadie ignoraba en tierra de cristianos,y decidió consagrar a él parte de sus cuantiososbienes. ¡Pequeño remedio para tan grave mal!Buscó luego otras personas caritativas que leayudaran en su empresa, pero aunque obtuvieronalgún resultado, comenzó a apoderarse deellos el desaliento. Dios Nuestro Señor quiso fortalecerlosobrenaturalmente con varias revelaciones,una de las cuales fué la que, siguiendoantiguos manuscritos, cuenta el Mtro. Zumel:Después de pasar ufia noche en oración, recogiósepor la mañana a descansar, cuando se vióen un gran patio donde había una oliva hermosa.Dos majestuosos personajes le encargaroncuidase de ella y al poco tiempo llegaron otroshombres que, con • hachas y piquetas, queríandestrozar el árbol y arrancarlo, pero cuanto másse empeñaban en ello más florecía y echaba vigorososretoños.Lo que esta visión significaba, lo entendió elSanto más claramente cuando en la noche del 1.'al 2 de agosto se le apareció la Santísima Virgenrodeada de ángeles y radiante de gloria, y nosólo le animó en sus intentos, sino que le mandóinstituir una Orden religiosa, cuyo especial ins-— 19 —Murillo.—Aparición de la Virgen a San Pedro Nolasco(Catedral de Sevilla).tituto fuera la redención de los cautivos cristianos.Así lo cuentan todos nuestros cronistas antiguosy modernos, y la cosa no tiene nada de in-

-- 20 —verosímil, pues casi. todos los fundadores de....Ord.enesreligiosas y otros santos, recibieron favoressemejantes. Claro es, sin embargo, que ni élni ellos se dedicaron a pregonarlos, sino que presentaronsus proyectos como inspirados por la:fer y la razón; de lo contrario, se crearían dificultades.gravísimas, pues el examen de tales revelacionessería largo y enojoso. San Pedro Nolascopodía estar bien seguro de hacer Obra,útil, pues aun siendo varias las órdenes religiosasdedicadas a la redención y trabajando congrande ahinco, no lograron redimir sino una.parte insignificante de los cautivos, aunque los.Reyes hicieron también muchas redenciones.Lleno el Santo de nuevo aliento y apoyado.por el Rey Don Jaime y sus consejeros, entre,ellos San Raimundo de Peñafort, su confesor, s e .decidió a cumplir el mandato divino, fundando.la Orden de la Merced de los cautivos el día deSan Lorenzo, 10 de agosto de 1218, ante el altarde Santa Eulalia ' de la iglesia catedral. Así lo.declara el obispo de Barcelona Fray Pedro deCentellas en el documento de 1249, en que autorizaa San Pedro Nolasco para edificar nueva.iglesia, y ante aquel altar tomaban posesión de,su cargo los maestros generales de la Merced,.según declara en 1358 el Rey Don Pedro IV (1).La Orden reconoció siempre a la Santísima.Virgen por su cabeza y fundadora, como la proclamaen 1414 el General Fray Antonio Caxat,(1) Ribera: Patronato, págs. 22 y 155.— 21 —en documento descubierto 1:1ace poco y -célebreya (1). En 1243 el prior .de nuestro convento deValencia; llamado para dar el hábito de la Orden.al : donado Bonifacio, que estaba en 'peligro demuerte, le .dice: He aquí el hábito de Santa Maríaque proinetiste tomar; gquiere. recibirlo? (2).Durante los primeros siglos se llamó el nuevoInstituto Orden de Santa Eulalia o de SantaMaría de la .Merced o de la Misericordia de losc autivos, sin decir expresamente que esa misericordia o merced era la redención, cosa por.demás evidente. Ordo mercedis captivorum la lla-Man generalmente los documentos de la mismay así se afirman los generales casi rtodos hasta elSiglo XVII. La expresión Ordo de Mercede, fuéMás bien impuesta por la' curia romana y noParece' muy expresiva.Menéndez Pelayo se admiraba con razón delas interminables discusiones que ha habido sobreel año de nuestra fundación: «Es-increíble,'dice, el encarnizamiento con que se ha debatidoY-se debate todavía esta cuestión cronológica ylos mares de tinta que ha hecho derramar» (3).Es realmente lamentable el tiempo que se haPerdido en eso, estando por hacer lo demás de lahi storia de la Orden.Los pocos dominicos que se han ocupado deesa cuestión, comenzando por el P. Diago,' sólo(1) Gazulla: Refutación, pág. 230.(2) Ibid 237.(3) Obras de 1..,3pe de Vega, torno V, pág. ,

— 22 —se proponen retrasar la fundación hasta hacerdominico a San Raimundo en 1222 ó 1223. La,tradición y los documentos mercedarios estáncontestes en 1218. Los que han tratado de impugnarlosen cambio se contradicen mutuamentedemostrando cada uno el poco fundamento de suantecesor. En el Itinerario de Jaime el Conquistador,de Miret y Sans, publicado en 1918, sedemuestra que el Rey niño estuvo en Barcelona„desde julio a septiembre de 1218.Claro es que la cuestión cronológica no tiene.en manera alguna la importancia que se le ha .dado, y que la Merced fundada en 1218 o algunosaños después tiene la misma importancia yvalor.La intervención del Rey en la fundación está.atestiguada por innumerables documentos delmismo Don Jaime y de sus inmediatos sucesores(1). Esto y los precedentes inmediatos de lasotras órdenes militares consagradas a la redenciónllevaron a los fundadores de la nuestra adarle ese mismo carácter atestiguado tambiénpor sobrados documentos (2).La intervención de San Raimundo de Peñafortatestiguada desde fines del siglo XIV pareceverosímil también, aunque no tuviera el carácterque entonces se le atribuyó. Fiados en lasemejanza exterior y más aparente que real, de(1) Ribera: Real Patronato, en casi todas las páginas,(2) Ribera: Centuria primera; y Gazulla: Refutación,pág. 71.— 23 —las dos órdenes desde 1327, creyeron algunos queSan Raimundo había dado a los mercedarios granparte de las constituciones dominicanas. El estudiodetallado de lo que fué la Merced en el sigloXIII y de lo que era entonces la Orden dePredicadores no permite admitir semejanteadaptación.Algunos tienen dificultad en admitir que laMerced fuera militar en sus principios, pareciéndoleseso demasiado honroso. Más lo era entregarla vida por los cautivos, pero ambos honoresse concedían entonces gratis a quien los quisiera.Desde los años siguientes se encuentran variosdocumentos firmados por San Pedro Nolascoy sus primeros compañeros, siendo en buenaparte recibos de limosna y donaciones (1). Enunos se llama al Santo procurador y custodio(quaestor et custos) de las limosnas de los cautivosy en otros rector de los pobres de la merced omisericordia. Tampoco en la nomenclatura de losdemás cargos había gran uniformidad en la nuestra,como en las demás órdenes incipientes, aunquelo general es llamarse comendadores los superioreslocales.Fray Nadal Gaver, que escribía en 1445, envista de los documentos del archivo de Barcelona,señala como primeros compañeros de SanPedro Nolasco a Fray Guillermo de Bas (2) quele sucedió en el generalato, Fray Pedro Pascasio(1) Gazulla: Refutación, págs. 172 y sigtes.(2) De luso, en bajo latin.

— 24 —(o Pascual), que en efecto aparece ya en documentode 1226 en Perpirián, y Fray Bernardo deCorbera. Los documentos del archivo de Aragón,y de otros, nos revelan continuamente los nombresde muchos frailes y hoy podernos formaruna lista casi completa de los primeros mercedarios.El solar que hoy ocupa el convento de Barcelona,cerca del mar, lo adquirió en 1232 Ramónde Plegamans, nobilísimo caballero que fué algúntiempo gobernador general de Cataluña (1) , traspasándoloen seguida a San Pedro Nolasco.¿Dónde vivieron hasta entonces los primerosmercedarios? El Padre Gaver dice sencillamente:alibi intra eivitatem (en otra parte dentro de laciudad), pero el Rvmo. Zumel dice que halló encódices antiguos que el Santo habitó algunosaños el Palacio Real, y el dominico Padre Diagoañade que el Rey dió a los mercedarios el Hospitalde Santa Eulalia, contiguo al palacio, alegandopara ello razones no muy sólidas (2).No todos los frailes que figuran en nuestrosdocumentos son profesos, sino terciarios. Entreéstos ocupa lugar preferente Fray Ferrario oFerrer de Gerona, a quien San Pedro Nolascorecibió juntamente con su mujer Escalona en1234, entregándose ellos y sus bienes a la Orden.Es este uno de los episodios más curiosos de(1) Boletin de la R. A. de la H.' 1927, pág. 153.(2) Diago: Historia de los Condes de Barcelona... fol. 101y Gazulla: Refutación, págs. 90 y 229.— 25 —nuestra historia primitiva, revelado por unaserie de pergaminos de nuestro archivo de Geronacopiados con la mayor escrupulosidad afines del siglo XVIII. El nombre de Fray Ferrerfigura en muchos contratos y fundaciones, pues,como notario que era, sirvió mucho a San PedroNolasco en tales ocurrencias. Es uno de los quea sistieron a la muerte del Santo en 1249 y viviótodavía bastantes años en la misma condición.El documento de admisión dice lo siguiente:« Sea notorio a todos como nosotros Ferrer de Porteny mi mujer Escalona, para honor de Dios yde la Virgen María y para remedio de mi almanos damos y ofrecernos a Nuestro Señor Dios y ala limosna de los cautivos en mano y poder dePray Pedro Nolasco, Rector de la misma limosnadel Hospital que Ramón de Plegarnans hizo enBarcelona, y de los frailes del mismo, presentesY futuros, y con este público instrumento valederopara siempre donamos perpetuamente y entregamosal Señor Dios y a la dicha limosna nuestrascasas y nuestras viñas y todos nuestros bienesmuebles e inmuebles, y todo lo que tenemosY tener debemos y podremos adquirir en adelantePor cualquier titulo, bajo esta forma: que nosotrostengamos y poseamos todo lo dicho ennu estra vida y recibamos sus frutos a nuestravol untad y permanezcamos en nuestra casa yInat rimonio como ahora permanecemos, y siacaso tuviéremos hijos, los damos también alSeñor Dios y a la predicha limosna con todas las

— 26 —cosas nuestras presentes y futuras; y que a nuestramuerte yo Ferrer pueda tomar de los dichosbienes cien sueldos barceloneses, por mi alma,y yo Escalona igualmente doscientos sueldosbarceloneses por mi alma. Y bajo estas condicionesnos damos y entregamos a nosotros y a todosnuestros bienes al Señor Dios y a la limosnapredicha, y a vosotros los frailes presentes y futuros,para hacer toda vuestra voluntad perpetuamente».«Y yo Fray Pedro Nolasch, por mi y por mishermanos presentes y futuros, para honor deDios y de la Bienaventurada María y de todoslos santos y para salud de vuestra alma, os reciboa vos Ferrario de Portell y a vuestra mujerEscalona por hombres propios y por hermanos ydonados de la dicha limosna, con todas vuestrascosas muebles e inmuebles que tenéis o tendréisen adelante, todo lo cual os alabamos y concedemospor vuestra vida solamente, conservándoosvosotros en vuestra casa y matrimonio; y alabamosy concedemos a vosotros los dichos trescientossueldos a vuestra muerte, por vuestraalma, como queda dicho arriba.»«Y si acaso por causa de enfermedad o devejez os fuere necesaria alguna cosa, convengoen haceros ayuda de los mismos bienes de lalimosna, según nuestro poder; y si no lo quisiéremoshacer, os damos licencia por nos y pornuestros frailes presentes y futuros, para que deconsentimiento nuestro y de nuestros hermanospodáis empeñar o vender todo lo que quisiéreis— 27 -y del precio de ello podáis proveer a vuestrasnecesidades.»«Fué hecho esto el día 8 de las kalendas deNoviembre, año del señor MCCXXXIIII. Signo deFerrer de Portell'y de Escalona su mujer. Signode Fray Pedro Nolasco que estas cosas confirmamosy aprobamos.» Siguen las firmas de varioscanónigos de Gerona, donde se otorgó el documento(1).La admisión de terciarios y cofrades • en laOrden comenzó desde el principio para asegurarsela cooperación de los seglares en recogerlimosnas, sin las cuales era imposible la redención.Los que se asociaban a la Orden queríantener parte en obra tan meritoria y suplían laescasez de personal. Los Sumos Pontífices lesconcedieron grandes privilegios desde 1246.Por una bula de ese año nos enteramos deque las cofradías estaban ya organizadas enmuchas partes y eran una de las bases en que seapoyaba la Orden para su ministerio principal.Una vez al año pasaba un religioso a recoger lalimosna, y a su llegada debía abrirse la iglesia,aunque estuviera entredicha, cosa entonces muyfrecuente.Jaime II decía también en 1306 que los mer-(1) A. C. A. Clero, Ms. 2.676, fol. 143. Todavia en 1266Fr. Ferrer, con permiso del Comendador de Gerona FrayPedro de Ruppe, cede una viña, que habia sido de su mujerYa difunta, por un censo anual de cinco cestas de uva.(Ibid. fol. 182.)

— 28 —cedarios «públicamente .pedían limosna a loscristianos por las iglesias» (1). Sólo contadasveces y en época muy posterior se dice que anduvierande puerta en puerta. Ni eso era posibledado el escaso número de frailes. Para remediara esta escasez, Alejandro IV dispensó en 1255 deresidencia a los beneficiados, que se ocuparan entan santa obra (2).Es verdad que no todos los frailes serviríantampoco para ese ministerio, que exigía especialescondiciones, pues debían persuadir a los fielesuna cosa de las más difíciles que hay en el mundo,que es el desprendimiento. «A su alegre llegada,dice la bula de 1246, ábranse las iglesiastodos los años, aunque estén entredichas, y celébrenselos divinos oficios, para que pueda hacerseuna exhortación al pueblo, persuadiéndole lanecesidad de la limosna» (3).Ya en 1226 San Pedro Nolasco recibió en donaciónun solar en Perpiään, pero con todo nosabemos si la primera fundación fuera de Barcelonase hizo allí o en Palma de Mallorca conquistadaen 1229 y donde ciertamente habíamercedarios en 1232.Doy aquí la traducción de la donación de Perpiñánpor ser una de las más antiguas que tuvola Orden, señalada ya como tal por el Reveren-•ísimo Gaver: «Sea notorio a todos como yo(1) Ribera: Patronato, pág. 148.(2) Linäs: Bullarium Ordinis, pág. 9.(3) Ibid. pág. 6.— 29 —Pedro Comte de Salses, por mí y por los míostodos presentes y futuros, no obligado por fuerzaalguna, sino de buena fe y sin mal engaño alguno,con esta presente pública escritura valederapara siernpre,i.por amor de Dios.., gratis y pormi liberalidad, entre vivos doy y entrego alSeñor Dios y a los pobres que se llaman pobresde la misericordia y a vos fray Pedro Nolasch,rector de los mismos pobres, y a vuestros sucesoresy a todos los frailes, tanto presentes comofuturos de la misma Orden, en mano y poder defray Pascasio, de la misma Orden, para hacertoda vuestra voluntad libremente y para siempre,cinco canas y tres palmos de otra de Montpeller,de un patio que tengo y debo tener cercade San Juan de Perpifián, fuera de la puerta deMallols, para hacer allí todo lo que hacer quisiéreis.»(Siguen los linderos del patio y termina): «Ysi acaso quisiéreis vender o empeñar el dichopatio a otra persona, primero me lo hareis sabera mí o a los míos con espacio de treinta días consus noches, en las cuales yo y los míos tengamosl icencia de tomarlo según otra persona quisieredar o prestar...» Fué hecho esto.. de enero añodel Señor mil doscientos veintiseis (1). Años ade-(1) Barcelona. A. C. A. Clero. Ms. 2.676, fol. 56. HayOtro documento posterior de un clérigo llamado tambiénP etrus Comes, que demuestra ser esta palabra apellido, yno titulo de dignidad. Aun hoy se conoce en Perpirián laPuerta de Mallols.

— 30 —lante, los mercedarios obtuvieron de los benedicnos,en enfiteusis perpetua, el priorato de SanMartín, que fué por eso el titular de aquella importantecasa.Ya queda indicado cómo el nobilísimo caballeroRamón de Plegamans compró en 123'2 unterreno en la playa de Barcelona, y al día siguientelo trasmitió a San Pedro Nolasco, construyendoél mismo un hospital con su capilla, a laque dió por titular a Santa Eulalia. Este hospital,ampliado y renovado luego, vino a ser la casamatriz de la Orden, que durante dos siglos fuédesignada indiferentemente con el título de SantaEulalia o de Santa María de la Merced..Así se reunían en una sola casa la hospitalidady la redención de cautivos, como lo habíanhecho otras Ordenes militares y lo hicieron tambiénlos trinitarios. Los hospitales eran una grannecesidad en aquellos tiempos, y una gran partede los conventos de muchas Ordenes tenían adjuntoun albergue para los pobres caminantes yenfermos.Inútil advertir que esos hospitales no eranlos espléndidos palacios que para los dolienteslevantó después la caridad cristiana. Media docenade camas constituían generalmente suajuar, y alguna vez los frailes se negaban a recibirmás huéspedes, porque siendo ellos pocos,eran incapaces de impedir que los caminantes sellevasen las ropas al levantarse. En las listas denuestros conventos figuran muchos hospitales,tanto en Francia como en España.— 31 —Lo penoso de nuestro ministerio y, sobre todo,la obligación de «dar su vida por los cautivoscomo Cristo la dió por nosotros» (en frase de lasPrimitivas constituciones), eran causa más quesuficiente para que los mercedarios fueran pocos.Nunca olvidaré la terrible impresión que me hizola noticia del cuarto voto, que me hubiera alejadode la Merced si no me dijeran que no tendríaque practicarlo, por lo menos hasta ser un hombrehecho.Además, consta por innumerables documentos,que los mercedarios empeñaban y vendíansus propios bienes para la redención. Los conventosde las demás Ordenes eran también pequeñospor aquellos tiempos.Nuestro hábito fué desde el principio blanco,lo mismo que el de los cistercienses y agustinos,a cuya Orden fuimos agregados. Varias razonesmovieron a ello al santo Fundador y no sería laúltima su devoción a la pureza de la SantísimaVirgen.Parece que desde el principio llevaron sobreel pecho la cruz blanca de la catedral de Barcelona,según indica el Obispo D. Pedro en eldiploma de 1249 (1). Pero las barras de Aragónlao se concedieron hasta 1251. Todavía en Enerode 1250 el Rey otorga a Fray Guillermo de Bas'su protección y varios privilegios, pero inferioresa los que acompañan al escudo. Si la Orden(1) Ribera: Patronato, pág. 22.

— 32 —gozara ya de éste, el privilegio de 150 estaríademás (1).Las dos figuras sepulcrales del cuarto y séptimoMaestre General en el Puig de Valenciahan hecho suponer que el hábito de los caballerosera diferente del de los clérigos. Bien pudoser, aunque en las Constituciones no hay rastrode ello, y la necesidad de montar a caballo eracomún a los legos y a los sacerdotes.Como ninguna cosa humana sale perfectadesde su origen, es seguro que la Merced, cornotodas las Ordenes, fué desarrollando su organizacióny formando sus estatutos poco a poco.Las Constituciones de 1272 promulgadas por elGeneral Fr. Pedro Amer, son sin duda nuestrocódigo más antiguo, formado con los estatutos ydecretos de los capítulos anteriores, .como allí sedice expresamente. Esto no excluye en absolutola intervención de San Raimundo, aunque lahaga menos probable.La autoridad del maestro general sobre todoslos individuos de la Orden y la celebración anualde capítulos fueron las dos bases de nuestro gobierno.Que el maestro era vitalicio lo dice bienclaro la bula de 1245, que es, por decirlo así, lamagna carta de nuestra organización «Muriendotú, el maestro del dicho lugar, o cualquiera detus sucesores, ningún otro sea puesto allí, sinoel que los frailes todos eligieren de común acuerdo».Los demás cargos eran anuales, aunque— 33 —(1) A. H. N. IVIereedarios de Palma, leg. 57.

— 34 —cabía la reelección. Por entonces nada más necesitabala Orden, dada su pequeñez.Aunque los privilegios de los Reyes de Aragónbastaban para mantenerla contra cualquier oposicióny darla existencia legal y canónica, cuandosu desarrollo estaba ya asegurado, a fines de1234, se solicitó la confirmación de Gregorio IX,que la concedió estando en Perusa el 17 de enerode 1235, mandando al mismo tiempo, conformea la prescripción reciente del concilio Lateranense,que «no habiendo todavía elegido religiónaprobada a la que debían agregarse, pudiesenprofesar la Orden de San Agustín».La palabra «orden» era de significado muyvago todavía y en la de San Agustín se comprendíantodos los grupos de religiosos que profesabansu regla (1). Las órdenes con un general quepudiese manejar libremente a todos los fraileseran una institución nueva, que comenzaba entoncesa arraigar y fué una de las mejores conquistasde la Iglesia en esta época, pues colocabaen manos del Papa verdaderos ejércitos disciplinadosy aguerridos, capaces de realizar las mayoresproezas, a que no podían aspirar los antiguosmonasterios independientes y aislados.Es casi cierto que desde los primeros arioshubo en la Orden algunos sacerdotes, aunque no(1) Véase el estudio definitivo sobre nuestra confirmaciónpor el P. Ramón Serratosa en el Boletín de la Orden,año 1918, pág. 293, con fotografía del registro originalpontificio.— 35 —lo fué seguramente el santo Fundador. Si no entraronya ordenados, fácil era hacerlos ordenar,Pues las condiciones que para ello se exigíaneran modestísimas: un poco de mal latín y lasacra, o parte del canon. La idea de que unsa cerdote ha de ser siempre una persona de largacarrera y de profundos estudios es de ayer, pord ecirlo así. De ahi el que entre nosotros comoentre los franciscanos los legos pudieran ocuparel magisterio casi tan dignamente como los sacerdotes(1).Aunque en otras órdenes rezaban el oficiod ivino los no ordenados, es indudable que nuestroslegos como los templarios lo sustituían porUn crecido número de Padrenuestros, según especificanlas Constituciones de 1272, y nada inducea creer que ese precepto fuera nuevo. 0Q,Lié breviariousaban los primitivos sacerdotes de la Merced?Algunos de los innumerables que entoncescirculaban, puesl a anarquía era grande en eseComo en otros puntos. La uniformidad, aun dentrode cada orden religiosa, tardó mucho en obtenerse.De las Constituciones amerianas se deduceque nuestros Sacerdotes rezaban diariamente el°ficio de la Santísima Virgen, además del ordinario, y cuando éste era de solas tres lecciones,S e añadía el de difuntos.(I ) San Francisco fué sólo diácono por obediencia. Sus"Inme diatos sucesores Fr. Elías y Juan Parentferan legos.

CAPITULO IILa Merced hasta 1245SU MARIO: Fundación de Valencia y del Puig.— Capitulode 1243 y vocales que a él asistieron.— Casas existentesen 1245.—Origen de Santa Maria de los Prados,Mallorca y Tortosa.—Redención.—Hospitalidad.La Orden continuó dilatándose con bastanterapidez por toda la corona aragonesa y entró enFr ancia por Narbona. Meses antes de la conquistade Valencia, D. Jaime había repartido ya lasC asas y haciendas de los moros entre los soldadoscristianos, y a 14 de Julio de 1238, estandoen Ruzafa, estrechando el cerco de la ciudad,

- 38 -mejores puntos de Valencia, cerca de la iglesiade San Juan del Mercado, y allí estuvo el conventode la Merced hasta que fué demolido en elsiglo XIX. No hay que decir que la mezquita fuéconvertida en iglesia y dedicada a Santo Domingo,probablemente el gran redentor de cautivosy abad de Silos. Allí se celebró el memorablecapítulo de 1317.Nuestros cronistas antiguos suponen que elSanto Fundador acompañó a D. Jaime en la conquistade Valencia, lo que es muy verosímil,pues las donaciones a la Orden son frecuentespor aquellos días. Dos meses después de la transcrita,aparece en el Registro la siguiente: «AFray Juan Vendetta (o Verdera) Comendador deSanta Eulalia de Barcelona de los cautivos, seisyugadas en Nanquerella. A 16 de Setiembre.»Durante largos meses el Rey había tenido sucuartel general en el Puig, donde aparecen fechadasmuchas de las partidas del citado Registro.La tradición nos ha conservado la memoria,de un suceso maravilloso allí ocurrido. Segúnella, San Pedro Nolasco habría visto unas señalesluminosas en cierto lugar de la colina y mandandocavar allí se descubrió bajo una campana,una losa de mármol en la que estaba esculpida,una devota imagen de la Santísima Virgen quelos cristianos supusieron ocultada por los godosante la invasión musulmana.Algo extraordinario debió ocurrir entonces,pues D. Jaime, en vez de dar aquel lugar a loscistercienses, a quienes lo había prometido su- 39 -padre (promesa ratificada por él), lo dió a losInercedarios, construyendo a sus expensas unaiglesia a la que profesó gran cariño y de la quese recordó en su testamento. Antes de terminare) siglo aquella iglesia era ya un santuario célebrey poco después Santa María del Puig eraigualmente titular de nuestras iglesias de Murciay de Menorca.No conservamos el documento en que DonJaime dió a la Orden casas y tierras en el Puigantes de terminar la iglesia, pero tenemos ladonación de ésta, que dice así:« Sepan todos como Nos Jaime por la graciade Dios Rey de Aragón, de Mallorca y de Valencia,Conde Barcelona, y de Urgel y Señor deMontpeller, por Nos y por todos los nuestros,Para remedio de nuestra alma y de las de nuestrospadres, damos y concedemos a Dios y a vosFray Arnaldo de Carcasona,, ministro de la casade Valencia, de Santa Eulalia de la casa de Barcelonay a los frailes todos de la misma casa presentesy futuros la iglesia del Puig de Anaso o deCebolla, que se llama Santa María, con todo elPuig en que está situada, para que sirvais ladicha Iglesia y la hagais servir en honor delSeñor, de la Bienaventurada María y de todoslos santos.»« Y os damos y concedernos todas sus oblaciones,defunciones y todo lo demás que debe pertenecera la misma, entera y completamente, y osconcedemos y confirmamos las casas y las cuatroYugadas de tierra, con cierta pieza de tierra para

40 —la necesidad de huerta, como se contiene en otracarta que hicimos, según allí se verá contenido.»«Todo esto franco y libre, sin reserva algunade parte nuestra ni de los nuestros, que en lodicho no hacemos en modo alguno, para haberlo,tenerlo y poseerlo vosotros, y para cumplirloperpetuamente y para hacer toda vuestra voluntadlibremente. Dado ' en Valencia a 26 de Julio,año del Señor 1240. Signo de Jaime por la graciade Dios Rey de Aragón, de Mallorca, de Valencia,Conde de Barcelona y de Urgel y Señor de Montpellier»(1).Con esto la Orden se había desplazado hacialas tierras nuevas y allí estaban sus principalescasas. El 19 de Agosto de 1243, hallamos a SanPedro Nolasco en Valencia con los superiores delos Conventos, aunque sólo de cuatro se dice quelo eran. Todos aprueban la recepción en la Ordendel donado Bonifacio, que debía ser personade consideración. Doy aquí la traducción íntegrade este documento, cuyo original se conserva,por figurar en él todos los personajes más importantesde la Orden, a los veinticinco años de sufundación:«Sea notorio a todos como Nos Fray PedroNolasco, Ministro de la Orden de la Merced deSta. Eulalia de Barcelona de los cautivos, deconsej òy voluntad de Fr. Pedro de Capdebou, yde Fr. Bernardo Bonanat, y de Fr. Raimundo dePrat, y de Fr. Guillermo, diácono, y de Fr. Ber-(1) Ribera: Patronato, 42.— 41 —trando y de los otros frailes nuestros de la predichacasa nuestra, recibimos a tí Bonifacici porcofrade nuestro y te acogemos en todas nuestrasobras buenas, tanto espirituales como corporales,en todas nuestras casas y de la predicha Orden.»« Concediendo a tí pan y agua y cebada parauna bestia, como a uno de nuestros frailes, mientrasvivieres en todo tiempo y en todos los lugaresde nuestras casas, así existentes como futuras,exceptuando sin embargo la permanenciatuya con la familia demasiado asidua; que notengamos que dar nada sino de nuestra propiavoluntad.»«Pero de tal modo que tú mantengas, defiendasy protejas nuestra casa y los frailes de ella ylos bienes de los mismos en todos los lugares,según tu poder, y que seas obediente a la predidichaOrden sin engaño.»«Y si acaso murieres en el reino de Valencia,que te llevemos a enterrar en el cementerio nuestrode Santa María del Puig; y si murieres fueradel reino de Valencia te llevaremos a la casan uestra más cercana donde estuviere. Y además,que si antes de tu muerte quisieres recibir el hábito,que te lo demos sin costarte nada, sin impedimentoni contradicción alguna.»«A estas cosas yo, Bonifacio susodicho, aceptando las dichas cosas humilde y devotamente,prometo cumplir las predichas cosas a la casa dela Merced ya nombrada y a los frailes de ella,según mi poder sin fraude alguna. Fué hechoe sto a diecinueve de Agosto, año del Señor 1243. »

— 42 —Signo de Fr. Pedro Nolasco. Signo de Fr. Pedrode Capdebou.Signo de Fr. Bernardo Bonanato. Signo deFr. Raimundo de Prat.Signo de Fr. Guillermo, diácono. Signo deFr. Bertrando.Signo de Fr. Juan de Leers, lugarteniente deMallorca.Signo de Fr. Bernardo de Vic, lugartenientede Tortosa.Signo de Fr. Juan de-Verdera.Signo de Fr. Bernardo de Corbera, lugartenientede Barcelona.Signo de Fr. Guillermo de Bas, lugartenientede Gerona, nosotros todos que estas cosas sobredichasaprobarnos, concedemos y confirmamos.Signo de Bonifacio, que estas dichas cosasconfirmo y alabo de tal modo, que no tengais queproveerme de lo sobredicho por autoridad debaile o del Rey o por otra potestad.Sigho de Bernardo Pujan. Signo de Pedro deAltarriba, testigos de lo sobredicho.Signo de Pedro Guasch, notario público deValencia que esto escribi (1).En conjunto tenia la Orden a principios de1245 quince casas, cuatro de ellas con iglesia yotras con tierras, viñas, etc., enumeradas al pormenor en una bula de Inocencio IV dada en Lyon(1) El pergamino original lo posee actualmente el señorMás, beneficiado archivero de la Catedral de Barcelona,pero fué conocido ya de los cronistas del siglo XVIII.-- 43 --el 4 de Abril, durante el Concilio general deaquella ciudad, a saber:1. 0 El lugar en que está situado el mismo,hospital (de Barcelona) con todo lo que le pertenece.2.0 La Iglesia de Santo Domingo en Valenda.3. 0 La Iglesia parroquial de Santa María delene tre,narnrernuk anuninrenr ar-.51.oe wraz un. 1 • ; .r maleen afinf. Ore hnaAnular 4ttniunt airrtar ar fmnliii .7 •Apa .æ Mil. rtiv. tifivmP. .14.ụ. .e arar inirPS.an.9 ..%ine.anno foio . 1Meran emir fulero mide frausloris aam fiennbuta ii Tertie mal "fr.unam Merme: &pijo= anmenrr ..vAu neparne menee . ers.Azie enrm•on. u...J .. ,nah ìnilj demora' ainumn.,ifcir ibar .uurniA Init flanquee ~memo arrumo be trtar45 pecruetrumnollaarte o6Gefuk hmen •pern erTiu ,,pftecumr Admirarme e . cona .)nprann. Agua>. Nran....•,at raen =neme. ea 4216. 'unan :buen aii.g ussularn motee«. Acemita milisugmatikobeuctur..7erei:uguei roeffmMee cpumamm tuna san. Mamo -Lr rnirrrrom.m. mne- .!aensirum. imffürt- -.sur tramiten a...tarifan, ponedunan .9.E.14ktildaren rre-rnenn- crulb: her Amen& burimue marnourrianumainalas • temern %enprefnuem hofprent.e:Aeirmi ann onfnt, . riman fue• Odian' M.S....". learreduatern,CA- .nurur. In fotno fri,crume- tennlab --arcrani•te y -enre' 'N'alomen* .titO9 infle 7 mrume emite ,habectib tn Plumier eeneeturrnomu-'earnoe in're ii.ioo h.kti. nt.bure Oieneneik Oblitnao tuviste eru.u.Skomaan Cumurtr Yenii liformeratonin llamee .:rime..eme babe. us.vollo.brioorrinurnounir . lemas eue hibeee Inftwatniar- fr.& jün.i.min" lomea qua. haba. un (tumorlrernnoontii . nnin;iana gimantnre- prom.«, inuni. a.1baȧ. mutua 41;rromeamnao. reuma 7'era. 7 nueurumem mine elefarni 11~106 41. Imherie ala INUreurnr-einicilrftain' Atornoe quae Agiten. an Amanse 7inir Zorrofni >ende luna. 41.;elq 121. 41,1.11.11C Ortnnnçulbail . eriraarn rni Tarar ir afaan.arn Zoma° fa.. 7 n 18ėfumo)p.brmll ti. ciuMmr- gcal.rrnuiin T-171.0.7 tunean anide luhren, "vaelan ruma: Ano ;.tift1.. Innata, In bof.r plano .Lista de los conventos de la Merced en la bula de 1245(Reg. Vat. 21, fol. 172 v.)Puig y las casas, tierras y viñas que tenéis en laciudad y diócesis de Valencia.4.° Las casas, tierras y viñas que tenéis enla ciudad y diócesis de Mallorca.5.`) Las casas, tierras y viñas que teneis enla ciudad y diócesis de Gerona. Las casas, tierrasy viñas que teneis en la ciudad y diócesis deBarcelona.

146.° Las casas, tierras y viñas que teneis enla villa de Perpifián, en. la diócesis de Elna.7.° La casa que teneis en la ciudad y diócesisde Narbona.8.° Las casas que teneis en la ciudad de Tarragona.9.,° Y en el territorio de la Guardia de losPrados. La iglesia de Santa María de los Prados.10.° Las casas, viñas y tierras y la mitad deun molino que teneis en la ciudad y diócesis deLérida.H.°. Las casas que teneis en la ciudad y dióüesisde Tortosa.12.° Las casas y viñas que teneis en la ciudady diócesis de Zaragoza.13.° La iglesia de Santa María de Sarrión.14.° Las casas, tierras y viñas que teneis enCalatayud.15.° Las casas, tierras y viñas que teneis enla ciudad de Denia.Nos es ya conocido el origen de las iglesias de-Valencia y del Puig con sus casas. La iglesia deSanta María de los Prados la dió a la Ordenabrazando su instituto un ermitaño que allí vivíallamado fray Raimundo, que en los años siguientesconcurre a los documentos otorgados por losmerceclarios hasta 1263 (1).En 1317 la casa e iglesia de Santa María de losPrados se habían unido ya al convento recién fundadoen la próxima villa de Montblanch. La Orden(1) Morera y Llauradó: Tarragona Cristiana, II, 863.— 45 —no puede, sin embargo, olvidarlos, pues en ellosfué superior y pasó sus últimos años San PedroArmengol, cuyas reliquias descansan en la próximavilla de La Guardia (1). Todavía se conservanalgunos restos de la primitiva iglesia románica.La casa de Mallorca es seguramente de origenreal, aunque no conservamos el repartimientohechoallí, como en todos los reinos conquistadosa los moros, entre los colonos cristianos.Para la fundación de Tortosa, cedieron unsolar el obispo y cabildo en 1238. Buena parte delas otras casas, si no fueron dadas por el rey,recibieron por lo menos ayuda suya, como la deS arrión, a la que dió en 24 de mayo de 1242'«Dos yugadas de tierra, para alimento, en eltérmino de Sarrión, las cuales tengais sobre elagua hacia las salinas, y cuatro fanegadas detierra para huerta; y que podeis tomar de lass alinas del dicho lugar cuanta sal necesiteis parael uso...» (2).También en Denia recibió la Merced tierrasdel reparto, con obligación de tener allí un hospital(3).El número de frailes que tenia la Orden ensus cincuenta casas al cumplir los cien arios desu existencia, nos permite calcular muy por bajod e ciento los que habitaban en 1245 las quince(1) Ibid.(2) Ribera: Patronato, pág. 38.(3) Ibid. La donación integra está en el Arhivo H. N._de Madrid, Clero, perg. leg. 2.043.

— 46 —ahora existentes. No fué mucho más rápido elcrecimiento de los trinitarios a juzgar por subulario. Otras Ordenes en favor de los cautivos,como la del Santo Redentor, de Teruel, desaparecieronapenas fundadas.En la citada bula de 1245 se concede derechode sepultura para todos los que la soliciten, sinlimitación alguna, al hospital de Barcelona, y enaños posteriores se concedió también a las otrascasas el derecho de tener cementerios, pero sólopara los religiosos y SUS familiares, incluyendoentre ellos a los terciarios o cofrades, aunquevistieran el hábito a última hora.A pesar de ser la Orden militar, pocas veces-se dedicó al ejercicio de las armas, por falta depersonal y sobra de ocupaciones. Jaime II decíasin embargo en 1301 que los mercedarios teníanpor misión pelear contra los infieles, lo mismoque los religiosos de Calatrava, Alcántara y Ucléso Santiago (1). Y, efectivamente, en sus registrosse halla el mercedario Fr. Bernardo de Figueroles,al que se dió dinero para enmienda de uncaballo en el sitio de Almería por haber perdidoel que montaba, como otros caballeros (2).No era de esperar que del siglo XIII encontráramoslistas completas de cautivos redimidoscon su filiación y precio del rescate, como lastenernos de los siglos posteriores, pero los elogiosque los Papas y el Rey tributan a los merceda-(1) Gazulla: Refutación, pág. 72.(2) Ribera: Centuria Primera, pág. 148.— 47 —nos son prueba fehaciente de su fervor en eseministerio.Alejandro IV decía en 1255 que «Nuestrosamados hijos el Maestro y los frailes de la casade Santa Eulalia de Barcelona, de la Orden deSan Agustín, nuevos Macabeos del tiempo deLey de Gracia rénunciando a los deseos mundanosy dejando sus propios bienes, toman su cruzY siguen al Señor, amando a los prójimos como aSi mismos.., y no sólo emplean generosamente enla redención de los cautivos las limosnas quer ecogen de los fieles, sino que tampoco temenexponer la propia vida por sus hermanos, de locual se sigue una utilidad muy cristiana en muchaspartes y ellos ocupan un lugar preeminenteen la Iglesia, pues entre las obras de piedad conque se alcanza el reino de los cielos la redenciónde los cautivos es recomendada inefablementePor Dios Y por los sagrados cánones, pues paraella se nos manda enajenar los bienes eclesiásticosy aun nuestras mismas personas (1).Acerca de la hospitalidad había dicho tambiénInocencio IV en la bula de 1246: «Como los amadoshijos el Maestro y los frailes del hospital deSanta Eulalia de la diócesis de Barcelona, de laOrden de San Agustín, en el cual se dedican alservicio divino redimiendo a los cautivos de manosde los paganos, trabajan además con todasSUS fuerzas en socorrer a los pobres y enfermosque de todas partes acuden a ellos... Son ricos( 1) Bulario, 6.

— 48 —para los pobres y pobres para si mismos... Ellosdan de comer a los hambrientos, de beber a lossedientos, acogen a los huéspedes, visten a losdesnudos y no sólo visitan a los enfermos, sinoque toman sobre si las enfermedades de ellos,socorren a los que están en las cárceles, y a losque han asistido en la enfermedad les dan tambiéncristiana sepultura, haciendo todo aquellopor lo que el Señor dice que ha de premiar a losbuenos y castigar a los malos» (1).Muy honroso para la Orden es también el diplomaen que el Obispo de Valencia Arnaldo dePeralta concede a los mercedarios la parroquiadel Puig en 16 de Septiembre de 1245, donde seleen estas palabras: «Nos Arnaldo por la divinamisericordia obispo de Valencia: Considerandoque si por la novedad de la tierra y el escasonúmero de sacerdotes extendernos la mano congenerosidad a proveer a aquellos a quienes conocemospoco, mucho más estamos obligados por lacaridad bien ordenada a proveer a aquellos cuyosservicios a Nos, a los obispos y a todas las iglesiasson reconocidos con gratitud hace tiempo.Considerando, pues, la humildad, la devoción,la obediencia, el temor, la reverencia, el servicioacepto a todo el mundo y el laudable ministerio dela redención de cautivos que los frailes de la Mercedde Santa Eulalia de Barcelona prestan frecuentementea los obispos y a todos los miserablescautivos; deseando favorecer a esta religión(1) Ibid. 5.— 49 -Y orden en vista de lo dicho, habiéndolo tratadoCon el cabildo de Valencia y obtenido su consentimiento, damos libremente y ,asignamos...» (1).(1) Martincz (Fr. Francisco): Historia de la Imagen delPuig , pág. 279. El original de este documento estaba enel ar chivo parroquial del Puig. Una mejor copia de elexiste en el A. C. A. Monacales, 2.676.4

•CAPITULO IIIUltimos años y muerte de San Pedro NolascoSU MARIO: Originalidad del Santo.—Medios que discurriópara allegar limosnas.—Bula importante de InocencioIV. — Convento de Arguines y bienes de Algar. —Nueva iglesia de Bareelona.—Muerte del Santo. —j,Fue orden exenta la Merced? —Primeros mártires: SanSerapio y otros.„binirslataoineAtes: anerani S Petri NoIn,e0 13.",S1t-ttix de.-Ytud,trueis, tI evls vei-zurk et natitiztleinInao, CLY atrenon, qtram lile °tallar vivXOS est IÌu.1 pi>;11.,:('LIS Ordini.sBkirc;LCCat1VC.1111t5 1:11t,h' antiquitatis ,noa come ac Pat ruin tra cluctus,autbeirtico,..'nctipto in itimits, fðUttlvenerattxr.Retrato tradicional de San Pedro Nolasco.Aunque había en la Iglesia otras órdenes redentorasde cautivos, San Pedro Nolasco no seli mitó a copiarlas, sino que aportó a la obra comúnrecursos nuevos y más eficaces.Tres medios eficacísimos y nuevos discurrióPara hacer más provechoso el trabajo de sushijos en recoger limosnas. Fué el primero la institución de cofradías, de que hemos hablado yaY que tan buenos servicios prestaron a la caridad.El segundo fué el señalar a cada conventosu territorio o contrata, para que en él ejercitaraSU actividad, sin excusa y sin estorbarse unos aOtros, echando mano de cuestores seglares o terciarioscuando los religiosos no 'bastaban. El tercerofué llevar a los cautivos redimidos por losPue blos, para que ellos fueran un testimonio vivodel fruto de las limosnas y de los horrores delcautiverio.

— 52De las bailias o distritos habla el capítulo XIIIde las Constituciones amerianas en forma quedemuestra ser institución anterior: «Cada uno,dice, pida en su bailia, que le ha sido señalada yen ella no entre ningún otro fraile ni cuestor,fuera del que la tiene señalada. Y si por venturaentrase algún fraile en aquella bailia, no se detengaen ella ni fuera de su bailia más de dosdías sin licencia del Maestre, o conocida utilidadde la Orden. Los cuestores que los frailes envíena recoger limosnas sean tales que sepan evitarque la orden sea deshonrada por ellos. Y cuandolos reciban o confirmen, juren sobre los cuatroEvangelios que con todo su poder guardarán la.Orden de daño y de infamia, y que fielmenterecogerán todo lo que se diere a la Orden, y quefielmente darán cuenta de todo lo que les habrásido dado al comendador o su lugarteniente. Lostales cuestores lleven vestidos blancos».De la obligación que tenían los cautivos deacompañar a sus redentores habla también elcapítulo XXI de dichas Constituciones: «Los cautivosredimidos por los frailes harán luego juramentoy homenaje cada uno al Maestre o a aquelo aquellos que los hayan redimido, que no separtirán del servicio de la Orden hasta pasado eltiempo que se les señale por el Maestre o poraquellos que los han redimido. Durante el tiemposeñalado rasúreseles la barba, y el fraile quelos conduzca, asístalos cómodamente en sus necesidadessin queja. Y cumplido el tiempo señaladorasúreseles, córtenles los cabellos y dénles— 53 —v estidos nuevos, según será el tiempo: y el viáticocorrespondiente, para que vayan a sus tierraseon gozo y alegría».En el testamento de Ramón de Morelló, otorgadoen 1251, el fundador de nuestro conventode Arguines manda que a los cautivos que habíande redimirse con su dinero, se los exima deaco mpañar a los redentores, prueba de que lacos tumbre estaba ya establecida. Jaime II, en-1297, mandó a los magistrados que obligasen alos redimidos a acompañar a sus redentores durantemedio año (1) y esa práctica, aunque molesta, subsistió por lo menos hasta mediado elS iglo XVI, como veremos a su tiempo. Era taneficaz que algunas veces la limosna recogida porese medio fué mayor que la de varios años porlas otras diligencias.Pero sobre todo esto San Pedro Nolasco supocomunicar a sus hijos el ardor de la caridad deC risto, sin la cual todos los recursos serían estériles,y este es su mayor timbre de gloria, comoac,er tadamente dice Bossuet (2).La abnegación suprem.a es la característica'd e la Orden, y aunque no se expresó hasta mást arde en la profesión, los Papas y nuestros escritores(Cijar, por ejemplo), hablan ya del cuartov oto, que las Constituciones amerianas formulande este modo: Todos los frailes como hijos deverd adera obediencia alegremente estén aparejados(1) Ribera: Patronato, pág. 376.(2) Bossuet: Panegyrique de Saint Pierre Nolasque.

— 54 —en todo tiempo, si menester fuere, a poner su vidacomo Cristo la puso por nosotros.Quien de tal modo enseñó a los demás lacaridad, brillará como estrella en perpetuas eternidades.Los historiadores de la civilización cristianale consideran con razón como una de lasmayores glorias de la Iglesia. «En los varios institutosreligiosos, dice Balmes, que bajo distintasformas se han visto desde el principio de la Iglesia,hemos tenido ocasión de observar cosas altamentedignas de asombrar al filósofo como alcristiano; pero dudo mucho que en la historia deesos institutos pueda encontrarse nada más hermoso,más interesante, más tierno que el cuadroque nos ofrecen las Ordenes redentoras. ¡Quésímbolo más bello de la religión protegiendo aldesgraciado! ¡Qué emblema más sublime de laredención consumada en el augusto Madero,extendiéndose a la, redención de la cautividadterrena, que las visiones que precedieron a lafundación de estos santos institutos! Dirán algunosque esas apariciones no eran más que purailusión; ¡ilusiones dichosas, replicaremos nosotros,que así conducen al consuelo de la humanidad!»(1).No hay que imaginar, sin embargo, que lasredenciones llevadas a cabo por el Santo fueronde quinientos cautivos como las que se hicieronen el siglo XVI y siguientes. La pobreza de los(1) El Protestantismo comparado con el Catolicismo,cap. XLIV.— 55 —Pueblos cristianos era grande y la moneda escasísima,de modo que las limosnas eran casi todasen especie, lo que dificultaba enormemente sutransporte de un lugar a otro. El dinero estabacasi todo en poder de los judíos, que exigían porél intereses fabulosos. Véase adelante el privilegiode Enrique II de Castilla concedido en 1373a los rnercedarios, donde se pintan admirablementelas dificultades con que tropezaban losredentores. Lo que allí se dice del siglo XIV esaplicable en gran parte al anterior.Más que el número de redimidos importabaquizá el consuelo que los redentores llevaban alos cautivos, haciendo brillar en sus ojos un rayode esperanzas y demostrándoles que el pueblocristiano no los tenía olvidados. Durante los primerosaños del siglo XIII, la redención fué particularmentepenosa, por estar las potencias cristianas en continua guerra con los musulmanes dela Península y de Afriea. Don Jaime concertó elPrimer tratado de paz con el rey de Túnez en1240 (1).Antes de abandonar la tierra San Pedro Nolasco, tuvo el consuelo de ver su obra consolidaday protegida por Inocencio IV, que estando enel Concilio de Lyon el 4 de Abril de 1245, expidióuna Bula solemnísima, firmada por él y por docecardenales, en la que están los jalones de nuestraorganización.El Papa confirma de nuevo la Orden, enume-Gazulla: Jaime 1 y los Estados musulmanes.

— 56 —rando todos sus bienes. Prohibe que nadie cobrea los mercedarios diezmos de las tierras por ellosroturadas ni del alimento de sus bestias. Dafacultad para recibir libremente clérigos y legosy prohibe que ninguno abandone la Orden sinpermiso del Maestro. Cuando hubiere entredichopuedan celebrar los divinos oficios a puertacerrada y excluidos los excomulgados nominalmente.El crisma y el óleo santo, la consagraciónde los altares y la ordenación de los clérigos larecibirán de los ordinarios. «En los términos dela parroquia donde estuviere el convento, nadiesin consentimiento del diocesano y vuestro puedaedificar otra capilla. Nadie pueda imponerosnuevas contribuciones, sea cualquiera su dignidad.Sea libre la sepultura en el hospital de Barcelona,para cualquiera que libremente la eligiere.»La Orden podría reclamar todos los bienes ydiezmos pertenecientes a sus iglesias. A la muertedel Maestre, o de cualquiera de sus sucesores,los frailes, y no otra persona, deberían elegirlesucesor. Finalmente, el Papa toma la Orden ysus bienes bajo su especial protección, prohibiendoseveramente cualquier ataque contra ella.Dos asuntos ocuparon al Santo en los últimosaños de su vida: la fundación de Arguines y laconstrucción de una iglesia dedicada a la Madrede Dios en su casa de Barcelona.En un valle situado al Oeste de la carreteraque sube de Torres-Torres a Segorbe, existeactualmente una hermosa alquería conocida con— 57 —el nombre de Arguines, llamada también en losdoc umentos Árganas y Arguenes. Es el antiguosolar de un convento de Mercedarios, en un poblado del mismo nombre (1). Dicho poblado fuédonado por Don Jaime al caballero Pedro Andadoren 1239 y vendido por éste y su esposaa Ramón de Morelló, otro de los conquistadoresde Valencia, en 1241. Parece que este últimoPer sonaje, célebre en nuestra historia, era yas eñor de la próxima alquería de Algar. Era clérigo,por lo menos de tonsura, pues consta quetuvo un beneficio en Zaragoza.Raimundo, poco tiempo después de comprarla,dejó la administración de su alquería de Arguines, confiándola bajo ciertas condiciones a losrel igiosos de la Merced. El 5 de Marzo del año1245 de la Natividad, ante Bernardo Leoca dio,no tario público de Valencia, hizo entrega de ellaa la Orden, que debería darle mientras viviera lac uarta parte del trigo y del vino que se cosecharay edificar allí un convento e iglesia, en la queh abría de haber siempre un sacerdote que Celebrara los divinos oficios en sufragio de su alma yd e las de sus padres y del Rey Don Jaime. Aceptaronla donación Fr. Pedro Nolasch, Ministro dela Orden, y Fr. Guillermo de San Julián. La escritura fué llevada después a Barcelona, y firmaronen ella los principales religiosos para suaprobación, circunstancia que nos proporciona( 1) Gazulla: Los Mereedarios en Arguines. (Pronúncieseesdrújulo).

— 58 —un dato importante sobre la muerte del Santo,como luego veremos.La iglesia y convento estaban edificados yaen 1251, pues al otorgar su testamento en 2 deNoviembre, Ramón de Morelló se manda enterraren ella, dando antes a la Orden su otraalquería de Algar y entregándole su misma personaal recibir el hábito mercedario de manos deFr. Bertrando, Comendador del Puig (1).Tal fué el origen del Señorío de Algar y Escalésen el reino de Valencia, que tuvieron despuéslos Generales de la Merced, aunque pareceque el título señorial fué adquirido por Fr. NadalGaver en 1471. Los reyes de Aragón habíandicho repetidas veces en el siglo XIV que Algarera de los mercedarios.El otro asunto en que hallamos ocupado aSan Pedro Nolasco, es la construcción de la nuevaiglesia de Barcelona, la que en adelante figuraráen las bulas con el nombre de iglesia deSanta María. Para ello obtuvo licencia del Obispode Barcelona el 29 de Mayo de 1249, en la quese recuerda que «de la Iglesia Catedral de SantaCruz y de Santa Eulalia, la Orden tomó el nombrey la señal», o escudo (2).Esta obra, que había de durar más de cientocincuenta años, apenas pudo el Santo verla comenzada,pues algunos días más tarde pasó amejor vida. Al confirmar la citada escritura de— 59 —Arguines en Barcelona los frailes del Convento,el notario Pedro de Cardona advierte que falta la,firma de Fr. Pedro Nolasco, que había muertoentretanto. « ...et hoc clausit sine firmamento fratris-Petri Nolasch predicti, eo quia in tempore quo prensinstrumentum portatum fuit in Barchinone prc .firmamento ipsius et aliorum fratrum, et guando predictasminister et alii fratres firmaverunt, ipse fraterPetrus Nolasch ah hoc seculo transmigraverat...» (1>Este documento lleva la fecha de 12 de Junio,Pero en el año no están acordes las copias quee xisten en Madrid y Barcelona, pues la primeradice 1259 y la segunda 1265. La causa de esto esque en el siglo XVII alguien se atrevió a rasparel original para ponerlo de acuerdo con otrosdocumentos entonces fabricados. G-aver, que vió,el pergamino de Arguines y tomó de él los nombresde los frailes que asistieron a la muerte delSanto Fundador, dice que fué en 1249, lo queestá de acuerdo con el citado documento de laerección de la iglesia y con los demás que conocemosdel nuevo General Fray Guillén de Bas.Los firmantes del citado pergamino son lossiguientes: Fray Guillermo de Bas, ministro dela casa de la misericordia de los cautivos deBar celona; Fray Juan de Laereio o de Laes; FrayBernardo de Casiles, Fray Berenguer de Casan°,E'raY Domingo Dos°, Fray Raymundo de Unastretoo Ullastret, Fray Raimundo de Casan();(1) Gazulla: Ibid.(2) Ribera: Patronato, pág. 22.( 1) Gazulla: Los Mercedarios en Arguines y Bib. NI. deMa drid. Ms. 4347.

- 60 -Fray Bernardo de Corbera; Fray Pedro de Caldes;Fray Poncio de Solanes; Fray Arnaldo dePrats; Fray Bernardo de Tona; Fray Ferrario deGerona; Fray Raimundo de Montoliú; Fray Pedrode Castelló y Fray Pedro de Huesca.Si el Santo había muerto en 12 de Junio, hayque colocar su tránsito entre esa fecha y el 29 deAbril en que se le concedió licencia para la iglesia.Las Constituciones de 1272 precisan mástodavía esa fecha al mandar que se celebre suaniversario al día siguiente de la Ascensión, queaquel ario fué el 13 de Mayo. Ese mismo día 13 oel 14 es sin duda el de su muerte.Su aniversario, como el de otros muchísimossantos, se celebró al principio con Misa de Requiem,pero creciendo la veneración hacia él,pronto fué puesto en los altares. Gaver le llamaya santo y santísimo varón y lo mismo se ve en-otros documentos de su tiempo. Desde fines delsiglo XV su imagen fué venerada en el altarmayor de nuestra iglesia de Barcelona, y enotras partes. Urbano VIII autorizó y amplió esteculto en 1628.Cuantas diligencias se hicieron en los siglosXVII y XVIII para hallar su sepulcro resultaroninfructuosas, pues no cabe tomar en serio losmisterios que se cuentan de este último intento.Lo natural es que fuera sepultado en el cementeriodel hospital de Barcelona.No parece sino que San Pedro Nolasco estuvieraesperando para descargarse del gobiernode la Orden a que el Papa le concediera la dec-- 61 —ción de Maestre general. Desde el mismo año de1245 aparecen algunos documentos en que FrayGu illermo de Bas es llamado Maestre de la Orden,pero sería solo lugarteniente, como otrasveces sucedió adelante. Aun en nuestros tiemposa lgunos vicarios generales y vicarios provincialessuelen llamarse provinciales y generales as ecas, por gracia de los notarios. Tal inexactitudera mucho más disculpable al principio de laOrden,Cuál era la situación de la Orden respectode los Ordinarios? No se habla todavía de unaexe nción absoluta, pero los privilegios obtenidosd e la Santa Sede eran un gran paso hacia ella.La h umildad del Santo y de sus primeros compafierosbastaban para conquistarles el favor de losPre lados, que valía más que la exención. Entodo el primer siglo encontramos a varios Obis-Pos favoreciendo a la Orden con sus dones, pero110 hay serial de un solo conflicto, lo que pruebala b uena voluntad de ambas partes, aunque anduvieratambién de por medio la protección Realq ue después hubo de mediar varias veces entales pleitos.El P. Zumel escribió en 1588 una hermosabiog rafía de San Pedro Nolasco, digna de lalua yor estima por ser de tal autor y por los documentos que alega, de los cuales sólo una partelle garon a nosotros, aunque conocemos su existenciapor otros conductos. Esos documentos sondi gnos de fe por ser anteriores a la invasión de1°8 apócrifos, que tanto afearon después, no sólo

— 63 —la historia de las órdenes religiosas, sino toda lade España y aun de otras naciones.Los escasos datos contenidos en los documentosantiguos son tanto mas de estimar (advertíaYa en 1591 el Rvdmo. G-uimeran) cuanto estáni nás lejos de amplificar los sucesos que sólo mencionan de pasada (1).El citado P. Zumel en su libro de las Vidasde los Padres y Maestros de la Orden mencionae ntre los primeros compañeros de San PedroNo lasco al beato Serapio, «ínclito y religiosísimof raile de nuestra Orden, ejemplo de extraordinariasantidad y virtud, de gran abstinencia y ora -Q16, consagrado con admirable ardor a la redenciónde cautivos y que finalmente fué azotadoc ruel y bárbaramente por el rey de Argel (2).Su culto antiguo en nuestras iglesias fué reconocidopor Benedicto XIII en 1728.«Un santo religioso, continúa Zumel, llamadoRaimundo (de Blanes) en los principios de la Ordenfué diligentísimo en recoger limosnas. Habiendoreprendido a los bárbaros la dureza queus aban con los cristianos, aquéllos en vez deablandarse, determinaron tratarlos con mayorCrue ldad. Por lo cual el siervo de Dios con intre-Plelez cristiana les dijo: que los cautivos, porserl e) no dejaban de tener la imagen de Dios queles había criado como a sus amos, y que estaSan Serapio, Mártir.(1) Breve historia de la Orden... pág. 256.(2) A rege Angliae; dice el impreso, pero es errata mafiestade imprenta.

— 64 —vida se terminaría pronto. No pudiendo los herejese infieles soportar sus reprensiones le dieronmuerte cruel. Por lo cual leí en antiguos códicesque este Raimundo fué mártir por la redenciónde cautivos».«Tuvo este Raimundo un compañero diligentísimoque siguiendo su ejemplo era la admira-CAPÍTULO IVGeneralato de Fray Guillermo de Bas(1249-1260)SUMARIO: Elección y confirmación.—Capitulo de 1251.—La Merced en Castilla.—Escudo de la Orden. —OtrosPri vilegios._ Favores pontificios.— Conflictos.— Priorg eneral y priores conventuales. —Redenciones. —Procuradoresen Roma.—Fundaciones en Tolosa, Zaragozay Montpeller.—San Vicente de Valencia.—¡Hubodos generales llamados Guillen de Bas?Los beatos Raimundo de Blanes, Mártir, y su compañero FrayDiego de Soto.ción de todos por la pureza de su alma y el candorde su espíritu, y es admirable lo mucho quesobrevivió al martirio de Raimundo. Fué su compañeroen vida y en muerte y es contado por unode los hombres más santos de la Orden. LlamäbaseJaime (o Diego) de Soto. En algunos códiceshe visto que le llaman San Jaime de Soto. Y adviertoque este Raimundo no es aquel RaimundoNonato de quien antes dijimos algo» (1).Muerto en Mayo de 1249 San Pedro Nolascofuó elevado al supremo cargo de la Orden FrayGuillen de Bas, que había sido su vicario y gozabade la mayor estimación del Rey, según de-Muestran los muchos documentos a él dirigidosPor Don Jaime.Debieron concurrir a su elección todos losfr ailes de la Orden, según la bula de InocencioIV en 1245, arriba citada, y el nuevo Maestrodebió ser llevado en procesión a la Catedral, toliandoposesión ante el altar de Santa Eulaliado nde se había fundado la Orden. Habla de estacostumbre inmemorial Don Pedro IV un sigloliclás tarde y todavía se observó en 1570 con elkaestro Fray Antonio Tremoulieres (1).(1) De Vitis Patrum, 28.(1 ) Ribera: Patronato, pág. 155.5

— 66 —Es probable que pidieran la confirmaciónpontificia, asegurándose de ese modo contra posiblesdisgustos con el Ordinario. Para los derechosde confirmación en la corte romana los ingresosdel General se calculaban en cien librasbarcelonesas hasta 1417, en que los curiales pretendieronelevarlos a cuatrocientos florines (1).Varias veces intentó la Orden librarse de talgravamen y el capítulo de Lérida acordó en 1320no pedir más que la confirmación del Ordinario,pues la Merced no era Orden exenta, pero a finde evitar mayores daños hubieron de pedir aRoma la confirmación, no sólo del General, sinotambién de otros cargos subalternos. Pedro IVpidió en 1368 al Papa que eximiese a la Ordende tales gabelas, pero nada se consiguió (2).Un pergamino del convento de Tortosa nossuministra importantes datos sobre el personalde la Orden por 1250. El 24 de Abril de 1251 elMaestre otorga recibo en Tortosa a D. Sibilia,viuda de Tomás Garidell y demás testamentariosde éste, de quinientas diez mazmutinas de oroque había dejado en su testamento para edificaruna capilla de Santo Tomás en nuestra casadotar en ella una misa diaria.El General había empleado 150 mazmutinaspara auxilio de comprar la iglesia y casa de losFranciscanos. En pago de otras 170 había recibidouna finca en Murviedro y aplicó las restantes(1) Ibid, pág. 353.(2) Patronato, 157.— 67186 a la compra de otra finca en el Puig, concuyos frutos se había de dotar la capellanía.Corno el General no podía hacer tales actosPor sí solo, el documento fué ratificado por todoel capítulo en 7 de Mayo, en Barcelona, ante elNotario Bernardo de Caderita, con distinción dec lérigos y legos. Firman primero Fr. Ramón yFray Pedro Arnaldo, presbíteros. Otro, Arnaldo,Presbítero (sin Fray) y Fray Pedro de Rivo,Pre sbítero. Siguen después los legos: Fray Bernardode Corbera, Fray Pedro Arnaldo, FrayBer enguer de Vico, Fray Juan de Amer, FrayBer trando del Puig, Fray Pedro de Bas, FrayRa món de Ullastret, Fray Bernardo de Tonna,Fray Ferrer de Portell y Fray Pedro de Huesca(1).La desproporcióii entre clérigos y legos esbiell visible, y el corto número de sacerdotesex plica que en casi todas las fundaciones de ca-Pel lanías (incluso la de Tortosa), se diga que haser desempeñada por un Presbítero de laOr den o seglar. Lo mismo se dice en la de SanVi cente de Valencia, de que luego hablaremos,do nde habían de asistir cinco Sacerdotes y otroscinco diáconos y subdiáconos.B ajo el gobierno de Fray Guillén, la OrdenQ°ntinuó prosperando, y el Rey se felicitó de elloe I varias ocasiones: « Atendiendo a que la Ordenllan lada de la Merced, con la gracia de Dios cadaella Prospera y adelanta, Nos que somos Funda-(1) A. H. N. Clero. Leg. 1.811.

— 68 —dor y Patrono de dicha Orden, deseando favorecerlay honrarla, esperando que irá siempre debien en mejor...» decía un despacho de 1255 (1).El nuevo General tuvo la satisfacción de verla Orden establecida en Castilla. San Fernandohabía conquistado Sevilla en Noviembre de 1248y en el Repartimiento que se hizo de los bienesdejados por los moros tocó en heredamiento «A,Santa Olalla de Barcelona cinquenta aranzadasy seis yugadas, año e vez en Almamzor, y enAsnalcázar quarenta y siete yugadas» (2). Igualorigen debió tener el convento de Córdoba, que,como el de Sevilla, tenía en 1263 tierras, viñas,olivares y otros bienes, según la bula confirmatoriade ese año. Con bienes de los moros debieronfundarse también las casas de Mula, Arjona,Vejer y Almansa que menciona la citadabula.No puede tener en cambio ese principio elconvento de Cuenca, que se conservó extramurosde la ciudad y a bastante distancia, hasta finesdel siglo XVII.Don Jaime confirmó a la Orden, el 28 de Agostode 1250, la posesión del solar en que estaba elconvento de Barcelona, extendiéndolo hasta lasmismas olas del mar, donde se estaba edificandola iglesia nueva (3) y poco después autorizó la,construcción de dos puentes sobre la calle para(1) Ribera: Patronato, pág. 40.(2) La Merced, Enero de 1922, pág. 202.(3) Patronato, 47.— 69 —unir dos manzanas, sistema empleado por losMercedarios en muchas ciudades, por ser demaßiadoestrecha una manzana para casa e iglesia(1).Una de las concesiones más importantes delRey Fundador fué la del escudo que había de distinguiren adelante a la Orden, haciéndose tanglorioso. Tal concesión fué confirmada muchasveces por el mismo Don Jaime y por sus sucesores,pero el diploma más antiguo es de 1251 ydice así:« Sepan todos que Nos Jaime por la gracia deDios Rey de Aragón de Mallorca y de Valencia,Conde de Barcelona y de Urgel y Señor de Mont-Pelle'', Mirando a que la redención de cautivostiene el principado entre las demás virtudes y- Nos estamos obligado a dar para ella consejo yapoyo eficaz, por la presente carta concedemos yalabamos a nuestro fiel Fray Guillermo de Bas,Mayor de la orden de redención de cautivos, y atodos los frailes de la misma Orden, presentes yfut uros, el hábito o serial aquella que llevaréisen adelante, o sea el escudo de nuestra enseñaReal, y puesta encima la cruz blanca. Y esta'señal o hábito sea lícito a tí y a todos y cada unode los frailes de la dicha Orden tenerlo y llevarloPerpetuamente para honra de tu Orden y paragloria del Señor y de nuestra Majestad Real.»«Dando y concediendo a tí y a todos los frailesde la misma Orden que lleven dicho escudo o( 1) Ibid. 45.

— 70 —hábito que en ninguna parte de nuestros reinos,tierras y dominios, en tierra ni en mar o en aguadulce, no paguéis Mostalafia (o almojarifazgo),.yendo, estando ni volviendo por algún cautivoque traigáis ni por su redención. Ni persona algunase atreva a exigiros tal cosa, si estima nuestragracia y amor.»«Recibimos, por tanto, bajo nuestra protección,guarda, encomienda y especial guiatge avos, a las casas y frailes y mensajeros vuestrosy a todas vuestras cosas, yendo, estando o volviendo,y que ninguno se atreva a invadir, prendero detener ni a vosotros ni a vuestros mensajeros,ni cosa vuestra, ni a impedirla, gravarlani marcarla o hipotecarla por alguna causa orazón, a no ser por culpa vuestra propia, o queen vosotros encuentren fadiga y bajo vuestro juezeclesiástico de derecho.»Mandamos a los señores, mayordomos, vegueres,bailes, zalmedinas, justicias, jurados,curias, tribunales, jueces, alcaldes y demásoficiales nuestros y a todos nuestros súbditospresentes y futuros que guarden y observen estaconcesión nuestra y guiatge, teniéndolo por firmey lo hagan observar inviolablemente, y que osdefiendan a vosotros y a todas vuestras cosas yos amparen contra todos los hombres, como acosa propia nuestra.»Y cualquiera que contra esta nuestra concesióny guiatge osare agraviaros a vosotros o avuestras cosas, sepa que incurrirá en nuestra iray en la pena de mil maravedís sin remisión— 71 —alguna. Dado en Zaragoza en los idus (día 13) deJunio, año del Señor 1351» (1).Es también muy importante la concesiónotorgada por Don Jaime el 12 de Enero de 1254autorizando a la Merced para adquirir bienes detodas clases y de cualquier persona, noble o plebeya,militar o paisano, hombre o mujer, noObstante los muchos privilegios y limitaciones aque entonces estaban sujetos dichos bienes y lastrabas que había para su tránsito o manos muertas(2). Este privilegio chocaba de tal modo conla práctica de los tribunales que hubo de serconfirmado innumerables veces por el mismoDon Jaime y por sus sucesores, y aun no seguroscon esto, los frailes hacían confirmar individualmentecualquier adquisición de importancia.La resistencia a cumplir lo mandado era incomparablementemayor en la Edad Media que ennuestros tiempos, con no ser ahora floja, y pasadosalgunos años era preciso que los Reyes y losPapas insistieran en ello, so pena de que el pri-(1) Patronato, 50. Entre las muchas cosas que podríanadvertirse en este documento nos fijaremos sólo en laidentidad repetida entre escudo, o señal, y hábito, quebastaría para demostrar, si no lo estuviera hasta la saciedad,el carácter militar de la Orden. Hábito se llamaronsienpre en España las insignias de las Ordenes militares.Rec uérdese entre mil el conocido pasaje de Quevedo:Fuera un hábito en mi pechoremiendo sin resistencia...(2) Patronato, 49.

— 72 —vilegio no tuviera valor alguno. La confirma,ción era además cosa obligada a la muerte delSoberano, y de ahí esa multitud de privilegiosidénticos despachados por los diferentes Reyes yPapas.Estos favorecieron también cada vez más alnuevo General, encantados de la importanciaque la Orden tomaba de día en día y de los serviciosque prestaría a la iglesia. Alejandro IV,por una Bula expedida en Nápoles el 9 de Abrilde 1255 y dirigida a toda la Iglesia, recuerda elprivilegio concedido a los frailes del Hospital deSanta Eulalia y de los Cautivos para que unavez al año fueran recibidos en todas las iglesiasa fin de re -coger limosnas.Ahora había llegado a oídos del Papa congrandísimo disgusto que algun,os clérigos, llevadosde la avaricia, celebraban juntas de sus Cofradíasen el mismo día y al llegar los mercedariostenían que retirarse confusos y con poco oningún fruto. Mándales, pues, que reciban a losfrailes con todo amor y deferencia y les permitanpredicar y exhortar al pueblo a dar limosna,dejando sus Cofradías para otro día del ario.Recuerda también el privilegio que tenían losmercedarios de que nadie pudiese excomulgarlos,ni poner entredicho en sus oratorias sinmandato de la Silla Apostólica, exención importantísimaentonces, por el abuso desmedido quese hacía de tales armas.Manda igualmente a los Prelados que prestenauxilio a los frailes contra cualquiera que ose— 73 —molestados, y que no pongan obstáculo alguno alos que quisieren entregarse a la Orden en salud9 enfermedad. Que no les exijan nada por darUna redención.—Relieve de Pedro de la Cuadraen 1599. Museo de Valladolid.sepultura a los frailes que mueran fuera del conventoen el desempeño de su ministerio. Que nono les cobren diezmos de los alimentos de suscabalgaduras. Que bendigan sus oratorios y cenienterios,para ellos solos y sus familiares. Que

— 74 —obliguen a volver a la Orden a los frailes quedejado el hábito anduvieran de vagos por lasDiócesis.Concede indulgencia y remisión de la séptimaparte de la penitencia impuesta a nuestroscofrades que ayudaran a los frailes con sus limos.-nas y servicios, y después de otras muchas cláusulasfavorables ordena que los Prelados mismosanuncien a los fieles esta Bula (1).En cumplimiento de esto, el Arzobispo deTarragona, Benito de Rocaberti, expidió el 13 deAbril de 1256 una carta dirigida a los Obispos ya todos los fieles de su provincia, en que despuésde insertar las Bulas de la Orden exhorta a todosa cooperar en su grande obra, concediendo lasindulgencias ordinarias. Manda además que loslegados para redención se entreguen siempre alos mercedarios, si el testador no dispuso quefueran dados a los trinitarios. Es el documentomás antiguo que conozco donde se indique elrozamiento entre las dos Ordenes redentoras (2).En términos parecidos se expresa el Arzobispode Auch, Espagnol (Hispanus) en carta expedidaen Montpeller el 30 de Junio de 1256, losObispos de Vich, Córdoba, etc. (3).No es de maravillar que esos privilegios dieranorigen a algunos choques, siendo la gente(1) Linás: Bullarium Ordinis, 7.(2) A. C. A. Monacales, tomo 2.675, fol. 36. Es copialegalizada de mediados del siglo XV.(3) Ibid.— 75 —tan impetuosa como entonces solía. Sin embargo,no sabemos que hasta muelo más tarde algunosRectores de iglesias regulares arrebataran alos frailes la limosna recogida, arrojándola porlos suelos. Preciso es reconocer, también, que elandar así por iglesias ajenas ofrecería no pequeasdificultades, aun en nuestros días.El primer choque con los Párrocos por cuestiónde funerales, de que tengamos noticia, es elocurrido en Valencia por 1255 entre el Comendadordel Puig y el Párroco de San Martín sobre elen tierro del donado Bonifacio y de dos hijossuyos. La sentencia fué favorable en parte a losiner cedarios, pues los donados se equiparabanPara el caso a los religiosos (1).En el proceso mencionado aparece en primerté rmino en la Comunidad del Puig el Prior FrayArnaldo a nombre del Comendador y demás frailes.El Prior era evidentemente sacerdote y elComendador lego. Esto nos indica que la organización de la Orden estaba ya casi terminada,Pues no sólo había un Prior General sacerdote,sino que en los conventos, al menos en los prineiPales,había también Prior conventual. ¿Quiénel primer Prior general de toda la Orden? No,lo sabemos a punto fijo, pero en 1260 encontramosal lado del Maestre Fray Bernardo de SanRoMán a un Prior de la Orden llamado FrayRonce Solanes?) que concurrió a la acepta-(1 ) Gazulla: El Puig de Santa Maria, pág. 61.

— 76 —ción del convento del Olivar fundado entoncespor D. Gil de Atrosillo (1).• En 1263 era Prior de la Orden Fray Arnaldo deCampolobo (2), y en 1268 figura un Fray Sancho,lugarteniente de Prior con el Maestre Fray GuillénBas; al ario siguiente aparece de Prior en el•capítulo general del Puig Fr. Pedro de Pirariis(¡Perales?) y se menciona también al Comendadorde Barcelona Fray Pedro de Bas. Esto demuestrabien que los dos cargos no iban juntos como aveces se ha supuesto. En 1271 era ya Prior GeneralFray Guillermo de Issona, Comendador delPuig y más tarde de Barcelona, que llegó al sigloXIV en el cargo.Donde el Comendador era sacerdote estabademás el Prior, pues el primero podía ejercer lajurisdicción temporal y espiritual, mas a vecesla fuerza de la costumbre mantuvo los dos cargos.En Castilla, no sólo durante el gobierno delos militares sino hasta el siglo XVI, se mantuvieronen los conventos los cargos de Comendador,Prior y Vicario. Tan característico se conceptuabaesto de la Merced, que en 1414, laReina D.' Beatriz de Portugal, viuda de Juan Ide Castilla, ordenando las constituciones por quehabía de regirse el convento de monjas merce-•arias que ella quería fundar, estableció que enAl habría Comendadora, Priora y Vicaria (3).(1) Ribera: Centuria... pág. 296.(2) Gazulla: Los mercedarios en Jittiba, pág. 7.(3) La Merced, Diciembre de 1920, pág. 175.— 77 —Tampoco de estos arios tenernos listas de reS..-di luidos, aunque no cabe duda que fueron numerosos.En los registros notariales se encuentranalgunos documentos relativos a cautivos rescatadoscon dinero de la Orden, pero sin que losfrailes fueran a buscarlos. Tal procedimiento eraexpuesto a fraudes, y por eso las Constitucionesde 1272 lo prohiben, •a menos que los Obisposmismos lo aconsejen en casos determinados.Esto explica el registro llevado ante la curia.de Vich de los aúxilios dados por Fray Ramónde la Casa a varios cautivos para rescatarse,algunos de los cuales estaban en Valencia (antesde la conquista, por consiguiente) (1). En lacuria de Tarragona se conservaba también memoriade otros donativos concedidos por el Conlendadorde allí, Fr. Bernardo de Tonna, en 1255Y siguientes, otorgando los favorecidos una escrituraen estos o parecidos términos: Yo, fulano,reconozco haber recibido de vos, Fray Bernardo,cien sueldos para mi rescate, cuando estaba cautivoen Almería. Pero corno vos dudáis de ello,Si en algún tiempo demosträreis que yo no estabacautivo o que no me rescaté precisamente cond icho dinero, me obligo a devolvéroslo (2).Fray Bernardo de Tonna administró la casade Tarragona durante cerca de treinta arios ya(1) Ribera: Centuria Primera, pág. 470 y A. C. A. Monacales,t. 2.676.(2) A. C. A. Monacales, t. 2.676, folios 138 y otros,varios.

— 78 —de Comendador, ya como simple Procurador.Dos documentos del Notario de la curia arzobispalnos proporcionan un informe curioso sobre lamanera con que se obtenían entonces los despachospontificios. Hasta mediados del siglo XVno tuvimos Procurador permanente en la curiaromana y las bulas salen en grupos, con intervalosde dos o más años, hasta que volviera otroagente.El día de Pentecostés de 1260, el citado FrayBernardo dió poder al Canónigo Sacrista deTarragona, Miguel de Cerdagnol, para gestionaren Roma una confirmación y recusar a ciertosjueces. El segundo documento dice: «Yo, FrayBernardo de Tona, prometo a vos D. Miguel deVillafranca, Sacrista de Tarragona, que si paraimpetrar las letras y privilegios que os encargaé,hiciéreis por vos o por otro algunos gastos,yo os los restituiré a la vuelta de la curia, y paraesto obligo mi persona y los bienes de la mismacasa de que soy superior.» La fecha es la misma,o sea el 8 de Junio (1).Consultando ahora el Bulario encontramosuna bula de Urbano IV en Viterbo a 23 de Marzodel año siguiente en que se dice que ciertos jueceslaicos no querían reconocer a los mercedariospor herederos, con el pretexto de que habíanrenunciado al mundo. El Papa manda que nuestrosconventos hereden sin restricción alguna los— 79 —b ienes que hubieran correspondido a los religiosos.La bula confirmatoria es posterior en casidos años, pero no sería extraño que fuera obtenidapor el mismo Procurador.En esa última Bula se enumeran los conventosque la Orden tenía a principios de 1263, ya unque en tal fecha no era ya General Fray Guillermo de Bas, la mayor parte de las fundacionesn uevas corresponden a su gobierno. Entre ellasMerece especial mención por la importancia queluego tuvo, la de Tolosa, cabeza de nuestra provinciafrancesa. El 8 de Marzo del año de laEncarnación 1257 (año 1258 de la Natividad delSeñor), Fray Bertrando, Comendador de laslimosnas y de los cautivos de la casa de SantaEulalia, de Barcelona, adquiere para si y paraSUsucesores los frailes existentes en Tolosa, lastres casas y casales con todas sus dependenciasen que entonces habitaban, cerca de la plaza deArnaud Bernard (1).Unos arios después habían adquirido ya bastante importancia, pues los vemos intervenireon los dominicos y franciscanos en la paz establecida entre la ciudad y el burgo de Tolosa,cuYos municipios eran no sólo independientes,sino rivales. En 1269 acuerdan fundirse en unoadministrando en común sus intereses, yfi ntan la concordia por los naercedarios FrayGui llermo Urseti, lugarteniente de prior, Fray(1) A. C. A. Monacales, t. 2.676, fol. 137.( 1) Archivo Depart. de Tolosa. Religieux de la Merey,Ldasse 25.

— 80 —Guillermo Vital, Fray Poncio de Murello y FrayRaimundo de Castanhaco (1).Otra de las casas nuevamente adquiridas esla de San Miguel del Monte, en las afueras deZaragoza. En 1245 la Orden tenía una casa en laciudad, sin iglesia, y por estos años la cofradíade San Miguel del Monte, compuesta de caballeros,que había edificado un hospital con su capilla,lo cedió a los mercedarios por orden y conaprobación de Don Jaime. Así lo dice en 1327 elInfante Don Alfonso (luego Alfonso IV) y añadeque los frailes debían mantener siete camas paraenfermos pobres y peregrinos, a los cuales deberíansuministrar agua y fuego, condiciones quepara entonces habían caído ya en desuso (2).La carta ya citada del Arzobispo de AuchHispanus expedida en Montpeller en 1256 indicaque los mercedarios estaban ya allí establecidos,lo que consta en la bula de 1263. El convento dela Merced como todos los demás fué arrasado porlos protestantes en 1562 y destruido su archivo,pero un documento del archivo Real nos dice queel convento de la Merced estaba en el Puy deSanta Eulalia o Puy de Arquinel, formando manzanaindependiente y que pagaba al Rey comoseñal de vasallaje 24 herraduras con sus clavos.Don Jaime procuró, pues, a su Orden una casaen el mejor sitio de la ciudad, en lo que actualmentellaman el Peirou, desde el que se disfruta(1) A. C. A. Monacales, t. 2.681, fol. 265.(2) A. C. A. Monacales, t. 2.679, fol. 224.81las ,vistas mas hermosas • del mundo. Noleids eStaba el palacio de la madre de Don Jaimedonde ,el Rey había nacido. Jaime III de Mallorca»Señor de' • Montpeller, conmutó en 1340 elMontpeller.—La Tour des Pins que recue,rdaél nacimiento de Jaime I.tributo de las herraduras en 30 sueldos que losgeneraleS de la Merced deberían pagar una solaVe z al entrar en el cargo (1).'Ninguna de esas fundaciones clic') sin embargo: ( 1 ) La Merced, Abril de 1929, pág.'1'27.6

— 82 —origen a tantos comentarios como la de San Vicentede Valencia, que el Rey concedió a la Merceden 1255, quitándosela al Prior que la tenía yde cuya administración no estaba mayormentesatisfecho. La Iglesia tenía adjunto un hospitalcon cincp capellanías, y era una de las mejorescosas que el mismo Don Jaime había hecho paraagradecer al Santo Mártir la protección que lehabía dispensado en la conquista del reino deValencia.«Sea a todos notorio como Nos Jaime por lagracia de Dios Rey de Aragón, de Mallorca yValencia, Conde de Barcelona y de Urgel y Señorde 1VIontpeller: atendiendo y viendo que la Ordenllamada de la Merced por la gracia de Dios prosperacada día y adelanta, Nos que somos su Patronoy Fundador, queriendo favorecerla con beneficios'y honores, esperando firmemente quesiempre irá de bien en mejor, por la honestaconversación y vida laudable de los frailes deella, y también por la piadosa obra que ejercitanen la redención de cautivos; queriendo ademásreformar en mejor el monasterio, lugar o casa deSan Vicente de Valencia; por Nos y por los nuestroscon 'pleno conocimiento y consejo para remediode nuestra alma y de las de nuestros padres,damos y concedemos a vos Fray Guillermode Bas Maestro y a los frailes de la dicha Orden,que observais la regla de San Agustín, y a lamisma regla perpetuamente, a los presentesfuturos, el dicho monasterio e iglesia, lugar ocasa de San Vicente con el hospital edificado— 83 —allí y construido, con el diezmo de los réditos ein gresos nuestros de la Albufera de Valencia.. , yespe cialmente con la fortaleza llamada Castillode Burriana y la llamada Cuarte... Dada en Zaragozael 30 de Setiembre de 1255» (1).Tan importante pareció a todos la donaciónque el General se llamó alguna vez Maestre del a Merced y de San Vicente de Valencia. Perolos perjudicados con ella y otros se quejaron del'desPoio y llegaron a decir que el Rey, nuncaso brado de dinero, la había vendido. Por lo cuallos mercedarios se arreglaron comm la parte interesada renunciando a todo el derecho que teníane n la fundación. El Rey admiró y alabó este actode generosidad de la Orden, a la que eximió dedar cuenta de su administración ni de los objetosque del hospital hubiera podido extraer. Dado enMorella a 13 de Octubre de 1259.Pasados seis años, los que entonces gobernabanla Orden apreciaron el asunto de muy diferente manera que Fray Guillen de Bas y trataronde r ecobrar lo perdido. Para convencer al Reyec haron de intercesor al Papa Clemente IV, quehab iendo sido Arzobispo de Narbona había contraído estrecho afecto a la. Orden que tenía allícasa y trabajaba activamente en toda aquellare gión. El Papa dirigió efectivamente al Rey unab ula en que le suplicaba accediese a los deseosle /a Orden, pero Don Jaime se mantuvo firme,( 1) Ribera: Patronato, 511. Copia legalizada integra enMs . 2.441 de la Bib. NI. al fin.

— 84 —pensando sin duda que tenía otros medios de favorecera la Orden sin colocarse a sí mismo ensituación desairada (1).Sería tal vez esto lo que ocasionó la retiradade Fray Guillen de Bas? Ello es que en 1260encontramos de General a Fray Bernardo de SanRomán, hasta 1267 en que ocupa el Generalatoel Comendador de Perpiñán Fray Guillermo deBas. El Padre Ribera, que fué el primero enprecisar estas fechas y documentos, supuso queel Maestre Fray Guillen de Bas había muerto aprincipios de 1260, y que el Comendador de Perpiñán,que sucedió siete años más tarde a FrayBernardo de San Román, era persona diferentedel primero, tal vez sobrino o pariente suyo.No hay documento que esclarezca enteramenteel asunto y demuestre que el Fray Guillermode Bas, que figura en el generalato hasta1260 y después de 1267 sea una misma o diferentepersona. Mas eso mismo nos inclina a pensaren su identidad, pues no han de multiplicarse losseres sin necesidad. Y ninguna hay de suponerlosdiversos.El Padre Ribera suponía también que FrayBernardo de San Román había muerto en 1267,pero vivió todavía algunos años, como después(1) Estos documentos, incluso la bula, estaban en e l-convento de dominicos de Valencia y fueron aprovechadospor el P. Francisco Diago para sus Anales de Valencia,antes que comenzaran a pulular los apócrifos. Merecenpor tanto absoluto crédito, y tanto más, que el P. piarningún interés tenia en ello.— 85 —veremos. Y si éste pudo dejar el Generalato porqué no podría haberlo hecho Bas? Un poco másd ificil resulta su vuelta al supremo cargo deFray Guillen de Bas, segundo Generalde la Merced.(De una serie dibujada por elP. Talamanco.)l a Orden en 1267, pero los hombres y las cireunstanciascambian con facilidad y no es difícilbuscar a todo una explicación plausible. Ni valela pena de molestarnos en ello (1).(1 ) Véase la Centuria del P. Ribera, págs. 295 y siguientes.

CAPITULO VGeneralato de Fray Bernardo de San Román ysegundo de Fray Guillen de Bas (1260-1270)SUMARIO: El nuevo General. — Fundaciones en estosaños.—Iglesias , nuevas.— Segunda elección de FrayGuillen de Bas. —Fundaciones en Murcia.—Capitulogeneral de 1269.—Importancia de este General. —FrayBernardo de Corbera y Santa Maria de Cervellön.Nada sabemos en concreto de la elección deFray Bernardo de San Romín, o de Senromä, quePodemos suponer se ajustaría a lo mandado porInocencio IV en la bula ya citada. Fray Bernardofigura en los años anteriores como uno de los'religiosos más importantes de la Orden.Uno de los primeros documentos conocidosde su gobierno es la fundación del convento delOlivar, en la actual provincia de Teruek, queDon Gil de Atrosillo, señor de Estercuel, dió a laMerced en 24 de Septiembre de 1260. Aceptanla, donación con sus cargas el Maestre Fray Bernardode San Román, Fr. Ponce, Prior de toda la()rden, Fray Arnaldo de Gascóns, Fray Domingode Santa Cruz, Fray Domingo de Riparia, Fray4ui11ermo del Monte, Fray Barcelón y demás religiosos(1).(1) Ribera: Centuria Primera, 296.

-n•.1111.--- 88 —Una bula de Urbano IV, fechada en Orvietoa 18 de Enero de 1263, nos ha conservado la listade las casas que entonces poseía la Orden, en laque se mencionan no menos de 45 ciudades ypueblos, aunque es dudoso que llegaran . a habitarsetodas esas casas donadas a la Orden, sobretodo en Valencia, y Andalucía.Con la rápida conquista de estos reinos, PorAragón y Castilla respectivamente • se . vieronambos estados en grave aprieto, pues no teníanpoblación suficiente para ocuparlos; dejar abs omoros solos, fiándose del juramentó de 'fidel.'Oadera una locura, como demostró luego la insurrecciónde Murcia. 'Las guarniciones cristianas encerradasen los castillos de nada servían tampOcoante una insurrección general.La Merced, como otras órdenes, recibió, pues,numerosas donaciones en las poblaciones de iny-portancia, pero muchas de ellas se perdieron porfalta de personal para ocuparlas. Tal creemosque sucedió en Mula, Arjona, Vejer, Almansaotros pueblos de la corona de Castilla, mencionadosen esta bula y en otras hasta fines del sigloXIII, y en muchos lugares del reino de Va'-lencia. Todavía en 1317, -una . gran parte de lascasas de Castilla no tenían más que uno o dosmoradores, ;qué dificultades no habría para sostenerlasen 1260?Además de las fundaciones detalladas en capítulosanteriores, merece especial mención la deMontiorite, cerca de Huesca; sus patronos cedierona Fray Bernardo de San Román el derecho— 89 —de.presentación de, la parroquia en,- 1264; y enadelante fué 'regentada por In Mercedario. Montiorite-es hoy un pueblecillo de 150 habitantes;Pero en la Edad Media debió ser importante aJuzgar. por los inventarios de su iglesia (1).En Huesca adquirió también la Orden la iglesiay hospital de • Santa María de Acosta, por mediación,al parecer, de Don Jaime. Con los bienesadquiridos cerca de Sesa formóse más adelante el priorato de Burjaman, que subsistióh asta el siglo XVI. Fundóse también convento enVieh.Merece recordarse igualmente la donación de1) . García Pérez de Riudaroga, el cual cedió alGeneral San Román un grupo de casas y talleresen Valencia, con un huerto en las afueras paraser vendido y utilizar el precio en beneficio de laOrden, según documento fechado en 1264 (2).Durante estos anos varias de nuestras casasfueron construyendo iglesias o adquiriendo alguhacapilla ya existente. Así vemos que en 1266,en Perpiñán, el Comendador Fray Guillermo de1Bas recibió de los benedictinos, mediante un pequeñocenso, el priorato de San Martin, extramurosde la ciudad, que si bien reedificado varias'retes y en diferente lugar, conservó siempre sutitular (3).También aparecen como recién adquiridas en(1) Centuria Primera, 296.(2) A. H. N. de Madrid, Clero, leg. 2.043.(3) Centuria Primera, pág. 299.

— 90 —1263 las iglesias de Santo Tomás en Tortosa (deque arriba nos ocupamos) y de San Bartolomé enCastellón de Ampurias, pues las casas eran anteriores.En Tolosa recibió la Orden la iglesia de SantaEulalia extramuros, cuya posesión confirma elPapa en 1268, y donde hubo frailes durante unsiglo, hasta que arruinada la iglesia por las guerras,el general Barellis la edificó en la Plaza deArnaud Bernard, donde primeramente se habíanestablecido los mercedarios.También figura por vez primera en la bula de1263 el convento de Carcassona, que estuvo siempreen el Burgo, o ciudad nueva, y entre 1263 y1268 se estableció la Orden en la Iglesia de SantaEulalia, de la diócesis de Couserans, extramurosde Villafranca, que por las señas no puedeser más que Villafranca de Saint-Girons (Ariège)que hasta la Revolución fué municipio independientey ahora es un barrio de esta villa. Porla proximidad, quizá sin cambio de lugar, nuestrosdocumentos llaman a este convento el deSaint Girons. Nunca fué importante y desaparecea fines del siglo XIV.El último documento conocido del Generalatode San Román es una carta de hermandad otorgadael 8 de Marzo de 1267 a Bartolomé Osal,jurisconsulto de Valencia y a su esposa Elisenda(1). Debió cesar en el gobierno de toda laOrden, no por muerte, como suponía el P. Ribe-— 91 —ra, sino por renuncia, pues en documentos de losaños siguientes le hallamos ocupando el lugarinmediato al General. En 1. 0 de Agosto de 1267Fray Guillermo de Bas, ya confirmado en el Generalato,nombra a su antecesor para la encomiendade Játiba, que solía andar con el Maestrazgo y llevaba aneja la administración de muchosbienes situados al Sur de Valencia, dondeno habían podido establecerse comunidades.Autorizan el nombramiento el capellán delGeneral y los cuatro definidores del capitulo:« Sepan todos los que el presente documento vierencomo nos Fray Guillermo de Bas humildeMaestre de Santa Eulalia de Barcelona de laMerced de los cautivos, de consentimiento y voluntadde Fray. Raimundo de Prats capellánnuestro, y de Fray Pedro de Bas comendador deMallorca, y de Fray Guillermo de Isona, comendador de Santa María del Puig, y de Fray Pedrode Fornells y de Fray Guillermo de Vilano, constituimosy ordenamos a vos Fray Bernardo deSan Roman en comendador y procurador denuestra casa de Játiba con todas sus pertenencias,y de nuestra, casa de Gandia... Y para quela presente carta tenga mas firmeza la hicimossellar con nuestro sello. Dada en Valencia en 1.°'de Agosto, año del Señor 1267» (1).En 4 de Enero del año siguiente (del Señor1267, de la Natividad 1268) asiste Fray Bernardoa un capitulo celebrado en Valencia y presidido(1) Gazulla: El Puig de Sta. Maria, 36.(1) Centuria, pág. 299.

— 92 —por Fray Guillen, Isona,. cómendador de aquellacasa y del Puig, sentándose inmediatamentedespués de él (1). Gaver cita esta escritura en el'Tercer General, pero sin :advertir que San Románno era General cuando se otorgó, sino comendador. de .Tátiba. Nuestro primer cronistapone la muerte de San Román en 1272, quizá, porhaberlo leido así en su epitafio.Cuando en 1765 se descubrió su sepultura,notaron algunos que su estatua tenía cerquillo,lo cual indicaría que había sido sacerdote, dejandoquizá el Maestrazgo para ordenarse. Elepitafio, sin embargo, parece muy posterior yquizá lo fuera también la estatua (2).(1) A. II. N. Clero. Leg. 2.043; Es documento muy interesantepor contener los nombres de casi todos los capitularesy asi lo reproducimos aquí. «Sea notorio a todos-como Nos Fray Guillermo de Isona comendador de nuestracasa de Santa Maria del Puig y de la casa de Valenciade nuestra Orden, de consentimiento y voluntad de FrayBernardo de San Roman comendador de Jätiba, y deFrayPedro de Amer comendador de Sarrion, y de Fray Domingode Tamarite comendador de Calatayud, y de 'FrayPonce de Fornells y de Fray Guillermo de Castellfollitrector de la Iglesia de Santa Maria del Puig, y de FrayBertrando y de Fray Juan de Amer, y de Fray Arnaldode Campolobo y de Fray Pedro de Lambills y de FrayMarcos y de Fray Ponce y de Fray Pedro de San Martin,por nosotros y por nuestros sucesores los comendadoresestablecemos a vos Guillermo Carbonell y a vuestros sucesoresperpetuamente un patio que habemos y tenemoscontiguo a nuestra casa de Valencia... Fecha en Valenciaa 4 de Enero, año del Señor 1267».(2) Gazulla: La Patrona de Barcelona, pág. 151.— 93 —Fray Guillen de . Bas gobernó ahora la Orden.hasta fines . de 1 .270 pues consta que en 1. 0Diciembre de: este ario estaba vacante el Generalato: una escritura de Játiba de esa fecha expresaque los bienes en ella mencionados losr ecibe Fray Bernardo de San Román a nombredela Orden y del futuro Maestre (1).Que este Bas fué el comendador de Perpiriánot organte de numerosas escrituras allí durantelos años de 1263 a 1266, consta claramente porotra en que el nuevo' General Fray Pedro deAmer somete a laudo arbitral esos contratos otorgadospor el quondam General Fray Guillermo de:Bas, siendo Comendador de Perpirián (2). ' Y' conesto se indica también que entonces, o sea en1271, había muerto ya, pues la partícula quondamno suele aplicarse a los vivos.Fray Guillen de Bas tuvo' ahora la satisfacciónde ver la Orden establecida en el reino deMurcia, aunque ello le costara nuevo esfuerzo,Por la escasez de personal.Los moros de Murcia se hablan rendido en1 241 al infante Don Alonso de Castilla, (luego.Alfonso X), que puso guarniciones cristianas enlas plazas más importantes, pero en 1264 se sublevó toda la Andalucía y Murcia, poniendo al:Rey en gravísimo aprieto.El Papa concedió la cruzada para someterlos.Y. Don Jaime prestó valiosa ayuda a su yerno,(1) Gazulla: Loš Mercedarios en Jätiba, 10.(2) A. O. A. Monacales, t. 2.679, fols.' 55 y 56.

— 94 —sometiendo él solo a los murcianos, no sin grandestrabajos y después de vencer hábilmente laresistencia de sus miopes consejeros, incapacesde ver que tras la sublevación de Murcia vendríala de Valencia.Don Jaime no sólo entregó el reino pacificadoa su yerno sin pedirle indemnización alguna,sino que le regaló además diez mil familias aragonesasque repartió entre los moros, segúncuenta detalladamente su crónica, interesantecomo una novela. A los mercedarios se dierontambién casas y heredades en Murcia y Lorca,mencionadas en la, bula confirmatoria de 1268.En 1270 el Infante Don Manuel les concediócasa en Elche, según manifiesta el siguiente documento:«Sepan quantos esta carta vieren como yoInfante Don Manuel fijo del Rey Don Ferrando,por fazer bien e merced a los frailes de SantaOlalla de Barchanona en remisión de mis pecadose por el alma de la Infanta Doña Gostanzami mujer doles e otorgoles los banyos viejos...con el fosario de los moros que es de suso destosbanyos en el camino d'Aliquante, con tal maneraque fagan de los banyos una capilla en que diganmisa cada dia... Data en Elicho viernes veintisincodías de Junio Era de mil e trescientos eocho anyos...» (año de 1270) (1).La bula de 1268 no fué la única otorgada a laMerced por Clemente IV, de cuya benevolenciapara la Orden hemos hablado ya al mencionar su(1) A. H. N. Clero, leg. 77. Es copia de 1320.-- 95 —inter vención en el asunto de la casa de San Vicente.Nuestro Bulario registra dos bulas más,COn grandes favores a los que nos ayudasen con8us limosnas, aparte de confirmar todas las indulgencias concedidas por sus antecesores. Entrelos cooperadores más eficaces de la Orden secuentan siempre sus cofrades, a los que no cesande encomiar y alentar los Papas (1).En 1268 el Obispo de Zaragoza D. Arnaldo,'lió permiso al General Fr. Guillermo de BasPara trasladar al convento de Arguines la capellaníafundada por Ramón de Morelló en la igle-Sia del Portillo de Zaragoza, carga sin dudaMolesta a la Orden por la escasez de personal(2).En 1269, a principios de Mayo, encontramosal General presidiendo el capítulo anual en elPuig . El día 5, Arnaldo de Monzón ratifica ladonación de ciertos bienes que poseía en Ubeda,Probablemente para después de sus días, pues noap arece convento allí hasta principios del sigloXIV. Ahora elige además sepultura en nuestraiglesia de Játiba, lo que acepta el capítulo enla forma siguiente:«Nos Fray Guillermo de Bas, Maestre sobredicho,de voluntad y consejo y con asentimientode todos los frailes presentes con Nos en el capí-(1) Nuestro Bulario es sumamente incompleto y haynec esidad de rehacerlo, aunque no es preciso que sea muygrande, pues muchísimas Bulas repiten textos anteriores.(2) Centuria, pttg. 299.

— 96 —tulo general reunido este ario en la. iglesia de SantaMaría del Puig, a saber: de Fr. Ramón de Pirariis(,Perales?), Prior general de nuestra Ordensobredicha, y de Fr. Bernardo de San Román,,Comendador de nuestra casa de Játiba, y de FrayGuillermo del Monte, y de Fr. Arnaldo de Gascons,Comendador de San Miguel del Monte deZaragoza, y de Fr. Guillermo de Isona, Comen.-dador de nuestra casa de Santa Maria del Puig,y de Fr. Pedro de Bas, Comendador de nuestracasa de Barcelona, y de Fr. Guillermo de SanJulian, y de Fr. Bernardo de Collotorto, y deFray Sancho de Vaillo, nuestro Capellan, y deFray Berenguer de Bas, y de Fr. Domingo de Tamarite,y de todos los dichos frailes del capítulomencionado, por nosotros y por nuestros sucesores...recibimos de vos el dicho Arnaldo de Monzonla donacion y promesa a nosotros hecha porvos... Que fué hecho en la iglesia de Santa Mariadel Puig a 5 de Mayo de 1269» (1).No faltan en estos arios indicaciones de cautivosredimidos, sobre todo cuando en ello interveníaalguna circunstancia extraordinaria. Asívemos que en 1265 un seglar había redimido enAfrica dos cautivos con dinero de Fr. Pedro deRoca, Comendador de Gerona, al que otorgó lacorrespondiente escritura (2).Los documentos alegados demuestran que la.Orden había logrado ya su plena organización?(1) Centuria Primera, pág. 300.(2) A. C. A. Monacales, t. 2.676, fol. 9.-- 97 —cual aparece luego en las Constituciones compiladasen 1272, aunque no sepamos a punto fijoqué capítulos tomaron los correspondientes acuerdos.Fray Guillén de Bas no fué ciertamente unGeneral insignificante reducido, como otros, afi rmar el despacho ordinario. Sus obras nos lomue stran, por el contrario, corno un hombrel leno de espíritu y de iniciativas, el mejor colaboradorde San Pedro Nolasco y el que más contribuyó a dar a la Orden su sello y carácterPropio.Su desprendimiento en el asunto de la casade San Vicente nos lo hace ver corno un verdaderosanto, que para conservar la paz y zanjarPleitos no terne hacer los mayores sacrificios. LaO rden le debe eterno agradecimiento y nuestroscro nistas celebran a competencia sus virtudes.Entre sus colaboradores de la primera horadebe contarse Fr. Bernardo de Corbera, a quienvinios ya Superior de Barcelona en 1243. Faltaen cambio, en 1269, lo que nos hace pensar queq ue había muerto antes. A Fr. Bernardo se debenlas obras principales de la nueva iglesia de Barcelona,y consta que en 1259, siendo él Comendador, se rendía allí fervoroso culto a la San tísi-Ina Virgen de la Merced (1). Gaver lo hace Priorgeneral, lo que demostraría que fué Sacerdote,Pero yo no he visto documento alguno donde sele dé ese título.Sil memoria fué siempre venerada en la Or-Gazulla: La Patrona de Barcelona. pág. 52.7

-ran11111n""— 98 —den, y más desde que en 1574 se halló su cuerpoincorrupto en la iglesia de Barcelona. Sobre estoha habido alguna confusión, pues el P. FelipeGuimerän, estudiante en Barcelona cuando tuvolugar el hallazgo, dice que el cuerpo era de FrayBernardo de San Román (1); pero los de Barcelonalo veneraron siempre como de Corbera y elmismo G-uimerán en sus apuntes lo tiene comotal (2). Hoy se conserva al lado del altar deSanta María de Cervellón, en nuestra antiguaiglesia.Con su memoria está íntimamente ligada lavida de Santa María de Cervellón, una de lasmás célebres hermanas de la Orden, aunque nola primera. Nuestros cronistas antiguos aseguranque le dió el hábito y profesión el venerable Corbera.A su lado se formaron otras beatas notablespor su fervor y espíritu, entre ellas SantaColagia.El cuerpo de la venerable María fué colocadoen el altar de nuestra iglesia en tiempo dePedro IV, y el P. Ribera halló en los registrosreales lo que se pagó por el acta (3). El métodode vida de estas beatas y los servicios que prestabana la Orden están indicados en las Constitucionesde 1272, que no hacen sino traducir lasdisposiciones generales de la iglesia en la materia.Dice así el capítulo XVI:(1) Breve Historia de la Orden, 261.(2) Así lo anotó el P. Arques en el ejemplar de Critim eque posee nuestra casa de la Buena Dicha.(3) A. O. A. Monacales, t. 2.678.

— loa —«Ninguna mujer sea de aqui adelante recibidapor hermana nuestra, si no tiene tantos bienesque pueda vivir convenientemente en sucasa, en tal forma que su remanente sea y quedesin dificultad para la Orden. Y entrando en laOrden haga su testamento en razon de esto ental manera que por aquella razon no pueda venirdaño ni gravamen a la Orden de parte de susamigos y parientes.»El culto de María de Cervellón fué aprobadapor Inocencio XII en 1692 y su cuerpo se veneraalin en la caja del tiempo de Pedro IV, con pinturasde la época, que la representan en hábitode la Orden. Esta caja está encerrada en otramás lujosa que un tiempo fué de plata.CAPITULO VIGen eralato de Fray Pedro de Amer (1271-1301)'SUM ARIO: Elección de Fray Pedro de Amer.—Las primerasConstituciones de la Orden.—Extracto de las mismas.—Pobreza de la Orden. —Redención de cautivos.Hemos visto que el Generalato estaba va-'cante en 1. 0 de Diciembre de 1270. El términocanónico para las elecciones era de tres mesesY, p asados ellos, perdían el derecho los electores.r' ray Pedro de Amer hubo de ser elegido, portanto, muy a los prin.cipios del año siguiente.En Julio de 1271 lo encontramos en Valencia,'€londe otorga una escritura de censo en la si--guiente forma: Nos, Fray Pedro de Amer, MaestroGeneral de la Orden de Santa Eulalia de13arce1ona de la Merced de los cautivos, y FrayGuillermo Disona, Prior general de la mismaOr den y Comendador de la Casa del Puig de Va:-li eneia, con asentimiento y voluntad de Fray Gui-'„Iernio de Castellfollit, Vicario de la casa de'anta María del Puig, y de Fray Guillermo deVillaarnau y de Fray Pedro de Cabrera y de Fraybol ningo Martí, Presbíteros, y de Fray Pedro deLain bils, y de Fray Pedro de Castellón, llavero'(le la misma casa, y de Fray Pedro Oliver, y .de

113...""— 102 —Fray Guillermo de Olesa, y de todo el conventode la dicha nuestra casa... Fecha en Valencia el2 de Julio de 1271 (1).Al ser elegido se propuso dar a la Orden unvigoroso impulso, por lo cual en el primer añoemprendió la visita general, y «visitadas todaslas casas de nuestra Orden y vistas muchas desus necesidades y cuitas, y vistas y recogidaslas constituciones hechas por los antecesoresnuestros Maestres generales, quitadas algunasenteramente y otras enmendadas, y hechas otrasde nuevo» formó el cuerpo de leyes por el quehabía de gobernarse la Merced y fué promulgadoen el capítulo de 1272 celebrado en Barcelona.Con ser brevísimas estas constituciones, contienenabundantes datos sobre el estado de laOrden y la vida de nuestros conventos, de modoque con ellas podemos enterarnos hasta de lasintimidades de nuestros frailes en el primersiglo. Ciertas prohibiciones indican también lasdificultades con que hubo de lucharse al principio.Después de una introducción, que es por simisma una sublime lección de vida religiosade abnegación completa a imitación del RedentorJesús, establece la manera de celebrar elcapitulo general, piedra angular de nuestro go-bierno.El Maestro debía señalar el lugar de su celebracióntodos los años en la Cruz de Mayo y a él(1) Centuria Primera, 301.— 103 —habían de concurrir todos los Comendadores,aco mpañados cada uno de otro fraile, entregandoal Maestre las bolsas y las llaves y la cuenta deld inero de la redención. Desde este momentoqu edaban disponibles para ir a donde los mandasen, pues los cargos eran anuales. Sin embargo,Por la escasez de personal o por otros motivos,solían confirmarse mucho tiempo y aun casi todala, vida.El Maestre, de consentimiento del capítulo,nombra, cuatro definidores, dos clérigos y dosle gos, que examinen las cuentas y hagan justiciaen las acusaciones recibidas. Usábase como enotras Ordenes la acusación pública, y para evitarque fuera motivo de reyertas, se tornabans erias precauciones. El acusado no podía acusara su delator el mismo día, pero sí al siguiente.Toda, acusación que se haga en la Orden no debeProceder de ira ni de odio, sino de fuente de verdaderacaridad. Nadie acuse a otro de faltas queno pueda probar, y si lo hace, sufrirá la mismaPena que había de imponerse al acusado.Este día todos los frailes se levanten a maitinesy, terminados, sean leídas estas Constitucionesbien y claramente. El Prior excomulgue ato dos los propietarios, ladrones, conspiradores,Ingitivos, desobedientes y agresores de los frailes, y a los que a sabiendas quebrantan los establecimientosdel capítulo general. Léanse tambin en este capítulo los nombres de los berma-% y hermanas y de los familiares de la Ordenfall ecidos en aquel año y el Prior les dé la abso-

9— 104 —lución, según forma de la Orden. Al salir decapítulo cántese misa solemne de Santa María.El segundo día del capitulo se hará sermón ycontinuarán las acusaciones. Después confiesentodos los que lo necesiten, y cantada misa solemnedel Espíritu Santo, reciban el Cuerpo deCristo. Durante esta misa pueden ser recibidosa la profesión los novicios, a los cuales se explicaránlas austeridades y pobreza de la Orden. Sino hay impedimento canónico, harán solemnementeen manos del Maestre los votos de obediencia,pobreza y castidad y de observar lasconstituciones del capítulo general.El noviciado era considerado entonces comoun privilegio que podía renunciarse, profesandodesde luego, y así lo hacían muchos, aunque elloencerraba grandes peligros para la Orden y parael inexperto profeso. No había, felizmente, fórmulade profesión, pero las varias que conozcose parecen a ésta del convento de Tortosa:«Sea a todos conocido como yo Andrés Veyá,hijo de Bernardo Veyä, difunto, vecino de Tortosa,viendo las innumerables obras buenas yauxilios saludables a los cuerpos y a las almasque se hacen en la santa Orden de la BienaventuradaMaría de la Misericordia de los Cautivos,y queriendo por propio impulso hacerme participantede dichas obras y auxilios, por tanto noinducido por miedo ni violencia, ni engañadoo seducido, sino por buen ánimo y espontáneavoluntad, doy y ofrezco mi cuerpo y alma aNuestro Señor Jesucristo y a la gloriosa Virgen— 105 —Maria su Madre y recibiendo ahora en este mesel hábito de la brden sobredicha, hágome presenteen ella, a saber en manos y poder de vosPraY Payan, Comendador de los frailes de ladicha Orden en Tortosa, que recibió estos votosen nombre y lugar del venerable y religioso FrayEl General Fray Pedro de Amer.(De la serié dibujada por el PadreTalamaneo, en 1752.)Pedro de Amer, Maestre general de toda la Ordensobredicha.»«Y por la gran devoción y amor que siempretilve y tengo a la Orden citada, por mí y en"l'ubre de todos mis sucesores con este presenteAblico instrumento, valedero para siempre, cont itulo de pura, perfecta y firme donación entre vivos, doy, concedo y de presente entrego a la dicha9rden y por ella a vos el dicho Comendador en

— 106 —nombre y lugar del dicho señor Maestre y a losfrailes de la dicha Orden perpetuamente, todosmis bienes y derechos, muebles e inmuebles,presentes y futuros, que tengo y poseo y debotener y poseer...» (Siguen detalles acerca de losbienes, que eran considerables).«Y porque tengo firme intención y franca in -teligencia de servir completa y totalmente endicha Orden a Nuestro Señor Jesucristo, todo eltiempo de mi vida, por esto, conociendo mi derechoy certificado de él por vos el dicho Comendadoren presencia de los testigos de este documento,acerca del favor infrascrito renuncio conperfecto conocimiento a tal beneficio o auxiliode un año y un día concedido y dado por razónde prueba a toda persona que entre en la Orden.Y dejando a un lado dicho beneficio, quiero serprofeso, para que mejor y más perfectamente,llevando el peso de dicha Orden, pueda llegar alos gozos celestiales.»«Y para mayor firmeza de todo lo dicho, confesandoque soy mayor de dieciséis años y menorde veinticinco, juro por Dios y sus santos evangelios,por mí corporalmente tocados, que he detener y observar perpetuamente todas y cadauna de las cosas arriba expresadas, y que no irécontra ellas ni las revocaré con ocasión de lamenor edad, ni por algún otro pretexto.»«Fecha en la ciudad de Tortosa el trece desetiembre año de la Encarnación del Señor mildoscientos noventa y tres. Signo de Andrés VeYäque juro lo sobre dicho y que lo apruebo, con-— 107 —cedo y firmo y ruego a los testigos que lo firmen»(1).El tercer día del capítulo se hacían los nombramientosde superiores y demás oficios, no porel capitulo en pleno, sino por el General, el PriorY los cuatro definidores, o sean tres votos de clérigosy tres de legos, a quienes se encarece nose dejen llevar de humanos afectos, sino sólo delprovecho de la Orden y de los cautivos. Hechoesto, darán sus poderes y procuraciones a losnombrados, y cantada la misa de Trinidad, cadauno con la gracia del Padre, del Hijo y del EspírituSanto se marchará al lugar señalado. Para105 gastos del capítulo debía entregar cada Comendadoruna dobla de oro, ley que se conservóhasta época reciente.Detállase luego la forma del hábito con lassiguientes palabras: Los vestidos de los frailessean de lana, blancos, y en la capa y en el esca-Pulario lleven la señal de la Orden. La gonela otfinica sea redonda, y las calzas sin pies; lasbragas de hilo, y los zapatos como los de los tem-Plarios. No lleven guantes de cuero. Vestidos y cefliclosduerman cada uno en su lecho si puede ser.( Costó no poco tener cama para cada uno, por laPobreza general de aquellos tiempos.) Ni el Maes-( 1) A. N. II. de Madrid. Clero, leg. 1.811. El P. AndrésveYä estaba enfermo en Huesca en 1317 y dio su representaciónpara el capitulo general al Comendador de Tortosa.Véanse otras profesiones en Ribera: Centuria, páginas246 y 247.

— 108 —tre, ni el Comendador, ni fraile alguno llevencapa ni sobretodo, ni hábito de paño de Narbona,ni de otro mayor ni menor que floc (tela de lanavasta usada por los monjes). La inobservanciade este precepto era castigada con ayuno en tierraa pan y agua durante diez días (1).Por lo tocante a la comida, se permite comercarne solamente los domingos, martes y jueves.Los lunes, miércoles y sábados pueden comerqueso, huevos y pescado, debiendo ayunar rigurosamentetodos los viernes del año, la Cuaresmay desde la fiesta de Todos los Santos a Navidad.No se permita asistir a convites sino de personasreligiosas, y en ellos guárdense de beber y hablardemasiado. El Comendador o su lugartenienteprovea a los frailes de lo necesario sin murmuración,de manera que Dios se lo agradezca y elMaestre se pueda alabar por ello.El Maestre y el Prior General debían visitarla Orden todos los años, el primero acerca de lascosas temporales y el segundo en lo espiritual,por sí mismos o por otros, cuando no pudieranhacerlo per sonalmente. El Maestre debía iracompañado de un Sacerdote para oir confesiones.Así hemos visto ya figurar en los documentosel Capellán del General. Este detalle, comootros muchos, parece haber sido tomado de lostemplarios (2).Los frailes debían confesarse con sacerdotes(1) Véase el Boletin de la Orden, afío 1929, pág. 10.(2) Curzon (Henri): La Regle du Temple. Paris 1886-— 109 —de la Orden, salva imposibilidad. Ningún frailev aya solo, para esquivar infamia. Ninguno recibiráórdenes sagradas sin licencia del Prior.Xinguno sirva de padrino en bautismo ni boda.Para colectar limosnas señálese a cada frailes u bailía o distrito, del cual no salga. Por laes casez de personal pueden tomarse cuestoressegl ares, con grandes precauciones. Han de jurarfide lidad a la Orden y vestir de blanco.El poder de enajenar o empeñar los bienes dela Orden compete exclusivamente al capítulogeneral. Tales contratos hechos de otro modo sonnulos y el que los hiciere esté un año en la cárcelY Ro pueda ser en adelante Comendador. Prohibesee najenar o empeñar también las limosnasde un obispado, o arcedianato.Procürese que los enfermos reciban a tiempolOs Sacramentos y después de muertos vístaselesSU hábito y llévenlos a enterrar al convento, si110 d ista más de dos jornadas; en caso contrario,(16seles sepultura en la parroquia más próxima.Per cada fraile o monja difunta debían aplicar10s Sacerdotes tres Misas, los clérigos un salterioY los legos 150 Padrenuestros.Fuera de casa los frailes no se dejarán lavar1c) Pies por ninguna mujer, ni se atrevan a coiner, beber ni dormir en casa donde estén, ni01-c's con sus servidores, que es cosa de que sePodría seguir escándalo a la Orden. Después de1,. °Inp 1etas ninguno beba, y si lo hace torne azar las ) salvo caso de enfermedad o gran necesidad.

- 110 -Para ir a tierra de moros se necesitaba ordendel General o del Capítulo, que debían escogerpara ese ministerio frailes templados en comer ybeber, prudentes y sabios. Los cautivos redimidosestaban obligados a acompañar a sus redentores.Podíanse recibir donados que gozaban de losbienes espirituales y temporales de la Orden ytenían derecho a tomar el hábito de frailes hastaun término señalado, pasado el cual la Ordenquedaba libre de compromiso.Prohíbese ser fianza o testigo en juicios extrañosa la Orden. El tránsito de una Orden a otraera entonces muy frecuente y causa de grandesdisgustos entre ellas. Prohíbese en absoluto laadmisión de trinitarios, y la de otros se reservaal Capitulo general. Si alguno de los nuestros sepasa a la Trinidad, no sea readmitido en ningúntiempo.'Las penas señaladas a cada falta son bastantegraves, pues entonces no se sentían atacadoslos Capítulos de la flojedad que tanto perjudicódespués a nuestra Orden y a otras. Véansealgunos ejemplos:Si algún fraile es acusado al Capitulo detransgresión de las Constituciones y lo confiesallanamente o le es probado, sea allí castigadocom.o desobediente y excomulgado, en tal formaque la pena infunda pavor a los demás para noosar cosa semejante. Y si no se presentare enCapitulo séale impuesta la pena máxima en lacasa donde está.— 111 —Si un fraile hiere a otro o le despoja del hábito, esté un año en la cárcel y después sea,Pu esto a la misericordia del Maestre. El que seellibriague, o por haber comido o bebido demasiadodiga palabras ligeras o desordenadas, hagaPeni tencia, en tierra ocho días a pan y agua.Ninguno sea tan loco que descubra los secretosde la Orden, y si lo hiciere, ayune ocho viernesa pan y agua en tierra.El que sea convencido de fornicación sufraunario de cárcel, ayunando los miércoles y viernesa pan y agua, si el Maestre con su gran misericordia no dispensa con él. Igual pena sufriráel que juegue a dados o *algún juego en que corradinero.Fraile que huya de la Orden con alguna mujerjamás sea recibido; y si llevó bienes y no losdevuelve, tampoco se le reciba.Ningún comendador ni otro fraile lleve dos'a,bal gaduras, aunque una sea para llevar carga;37 Si lo hiciere sea castigado a pan y agua entierra durante el capítulo, y pierda la bestia sinrern isión. (Como nadie tenía seguridad de volveral Mismo convento, algunos, sin duda, llevabanelnisi derable bagaje).El que desobedezca a su mayor o amenacec'011 dejar el habito, ayunará diez días a pan ygua. El que arme conspiraciones sufra la pena deIc'rui cador. Ningún fraile tenga manteo, y el que4° tuviere sufra el mismo castigo que el conspirarY pierda el manteo. Los ladrones y propietalloss ufrirán también la pena de los anteriores.

— 112 —— 118 --sino que el convento tenga uno común para to-Con un año de cárcel se castiga también elbuscar recomendaciones del Rey, del Obispo o deotra persona a quien la Orden esté obligada, paraobtener cargos, y quien tal hiciere no sea nuncaComendador.Ningún COmendador dé ayuda particular pararedimir un cautivo sin licencia del Maestre oconsejo del Obispo, y en *este caso lleve al capítuloun documento que haga fe de la cantidadentregada.Los comendadores no pueden absolver a lospropietarios, ni a. los que hayan cometido otrasfaltas que • deban ser penitenciadas en capítulo.Para evitar la propiedad se prohibía tambiénque al ir a capítulo nadie dejase cosa alguna enpoder de seglares, y el que lo hacía era castigadocomo ladrón.Ninguno sea atrevido a dar parte a sus parientesni a otras personas seglares de los disgustosque haya tenido en el convento; y si lo hicieresea castigado con medio ario de cárcel y ayunetres días a pan y agua.- Ningún Comendador ni otro fraile sea osado apresentar a los obispos clérigo seglar para ordenarlo,asignándole titulo de- nuestras casas eiglesias. Si alguno lo hiciere, la Orden no le seaobligada en nada, antes sea gravemente castigadoel que lo hizo. (Bien -claro se indica la escasezde personal en los años anteriores para servirlas capellanías fundadas en nuestros conventos).Ningún fraile nuestro tenga sello particular?Martirio de San Pedro Armengol.(C uadro de Vicente Carducho, en la parroquial de SanJerónimo de Madrid.)(1°5. Nadie envíe ni reciba cartas sin que las veasuperior.8

- 114 -El Maestre no puede dar, ni vender, ni cambiarlas posesiones de la Orden, si no es para redenciónde cautivos, y esto por consejo del Priory de los cuatro definidores del capítulo general.Tampoco podrá el Maestre mudar a los comendadoresdurante el año, sino por evitar un graveescándalo. Y está obligado a rendir cuentas alcapítulo de todo lo que haya recibido de las en 7comiendas durante el año.Todos nuestros frailes, así clérigos como legos,se raen la barba de tres en tres semanas.Habían de celebrarse cuatro aniversarios: elprimero, el 4 de Febrero por los padres y madresde los religiosos; el segundo, el 7 de Septiembrepor los familiares y bienhechores; el tercero, a8 de Octubre por los hermanos y hermanas; elcuarto, el 7 de Noviembre, por todos los fielesdifuntos. Si alguno de estos aniversarios caía endomingo se dejaba para el día siguiente. El aniversariodel primer Maestre se hacia al dia siguientede la Ascensión. Los sacerdotes debíancada uno cantar una misa por cada aniversario,y todos los demás frailes rezar cincuenta Padrenuestros.Algo complicadas son las horas de los legos,que, como hemos dicho, no rezaban el oficio canónico.Sin embargo traduciré aquí el capítulo co-rrespondiente, pues da idea de la oración quehacían clérigos y legos.«Los días que el oficio es de tres lecciones,los legos rezarán diez Padrenuestros por . maitinesde difuntos y cinto por laudes; y quince por- 115 —Maitines y laudes de Santa María, y quince porMaitines y laudes del día.»«Después de maitines tres Padrenuestros porPre ciosa. Por Prima de Santa Maria y del día,diez P adrenuestros. A la misa, treinta Padrenuestros. A Tercia, Mediodía y Nona, por cadahoradiez Padrenuestros. Por Vísperas de difuntos,de Santa María y del día, treinta Padrenuestros.»«Iten en las fiestas de nueve lecciones en quen o se dice el oficio de difuntos, se doblan losmaitines y las vísperas del día.»«herí dirán cada día tres Padrenuestros porel Primer Maestre de la Orden. Iten otros tresPor el Maestre actual. Y tres por el Señor Apostólico(el Papa). Y tres por el Rey de Aragón yPor sus hijos.»Los clérigos rezaban, pues, diariamente el°fiel ° de Virgen, además del ordinario, y cuandoeee era de tres lecciones, debían añadir el dedifuntos. Los legos salían por 150 Padrenuestrosliarlos, lo que hecho con la debida atención bastabapara conservar su espíritu. Ninguna ordentenl a entonces oración mental en común.Tales son casi a la letra las primeras constitucionesde la Merced, breves y taxativas comol ehe serlo toda ley eficaz. Con razón exigen que;

— 116 —mas parecido es la organización de los templarios,a los que apelan nuestras constituciones.una vez. Vacíos se notan muchos, como el de lafrecuencia de sacramentos, lo referente a los estudiosde los clérigos, etc., que se llenarían conlas disposiciones comunes. En las Clementinasse mandó que los monjes confesaran y comulgaranuna vez al mes, y el Padre Albert ordenó quela confesión fuera quincenal, dejando la comuniónmensual. No era más perfecta la legislaciónde otras órdenes, como puede comprobarsefácilmente (1).No sabemos en qué fecha, pero seguramenteen el generalato de Fr. Amer se añadió a los cuarentay nueve capítulos primitivos otro en que,vistos los graves daños ocasionados por la admisiónde los fugitivos, se quita a los comendadoresla facultad de hacerla, reservándola al capítulogeneral que debía tenerlos a la puerta imploran'rando misericordia, hasta que el señor Maestre,habido consejo de los demás, los admita a misericordia.Los comendadores que procedieren porsí serán castigados con diez días a pan y aguaen tierra, quitada parte del hábito y lo hecho seranulo.Aunque la Merced no era mendicante y podía'(1) Consérvanse estas constituciones en el A. C. A. Có.dice de Gaver, y en nuestra casa de Madrid copia sacadapor el P. Arqués de un códice del Archivo General de 13Orden con referencias a otro de Valencia. Hay una ecliciónesmerada de Barcelona por 1907 y otra descuida»de Roma, 1922.— 117 —tener rentas y bienes, las Constituciones de-.muestran que vivía en gran pobreza. Antes de-dar la profesión a los novicios, debían exponerles« todas las asperezas de la Orden y sus pobre-2as. Y si prometen por amor de jesucristo sufrirtoda la vida estas asperezas», sean admitidos ah acer los votos.Esa austeridad explica el buen éxito de laOrden, no sólo en la redención de cautivos, sinota mbién en otras obras de caridad, y los elogios'q ue a porfía le tributan papas y reyes. Tenemosalg unas referencias de las redenciones hechas en'el G eneralato de Amer, sobre todo cuando enellas ocurría algo anormal.Una de las redenciones más notables por esteeGneepto, es la de 1296 en Granada, en que losrede ntores fueron presos, como puede verse en la'sig uiente carta sacada de los registros de JaiflCde Aragón:«Al muyt noble et muyt honrado Don MalloizetAboabdilla, Rey de Granada et Amir Amnlaulin,de Nos Don Jayme por la gracia de Dios,Rey Daragon, de Mayorcas, de Valencia et deültireia et Compte de Barcelona. Saludes muchas"Mo a Rey et ad amigo que mucho amamos.»«Rey: Femos saber que frey Pere de Amer,/-la estre mayor de la Orden de la Merced, pareanteNos e mostro nos en como el arraiv deMalacha habia presos dos freyres del dicho or-.den , con cautivos que avian redimidos en lavuestra tierra, et esto avia fecho porqué dezivanen Malacha que los homens de Sevilla avian

— 118 —tomamado e retenido un homen de vuestra tierra.«Ont como por la razon damunt dicha losfreyres ni los homens de nuestra tierra no seme-Ila a nos que devan ser rembargados, et los freyresdel dicho Orden ayan siempre acostumbradade andar salvos et seguros por la vuestra tierraredimiendo captivos, et en otra maniera, et ayansuplicado a nos que sobre esto vos einbiassemosnuestra carta de rogarlas, por esto, vos como adamigo rogarnos que vos los dichos freyres conaquellos captivos que avian redimidos mandedes'jurar por el nuestro amor, en manera que sepuedan ir salvos et seguros con todas sus cosas;y en esto ternos hedes honra et plazer e agradecervoslohemos mucho. Dada en Valencia 20 diasandados del mes de Setiembre, en el año de nuestroSeñor, 1296» (1).Parece que esta carta surtió efecto, aunquetal vez no muy rápido, pues la autoridad de losreyes moros fué siempre limitada y discutida.En 12 de Diciembre de 1297, el. Rey de Aragónescribe al de Granada nueva carta en que diceque los frailes de la Merced habían rescatado alalcaide del castillo de Pontes, pero quedaban alla.su mujer y tres hijos, a quienes suplica dé libertad,pues el castillo debía estar comprendido cillastreguas estipuladas entre los dos reinos (2)-En Mayo de 1300 se disponían los merced a-— 119 —n os a hacer nueva redención en Granada, segúnaparece en la siguiente carta:«Al muyt noble et honrado D. MahometAbo abdilla Abennavar et Amir Amuzlemin Reyde Granada, Don Jayme por la gracia de DiosRey Daragon, de Mayorcas, de Valencia et deMurcia, Conde de Barcelona e de la santa Eglesiade Roma Senyalero, Almirant et Capitan General. Salut como amigo, para. quien querriamostoda honra et buenaventurança.Rey: Como los freyres de la Orden de Santatu lalia de Barcelona entiendan entrar en la vuestratierra, per rehemir los cautivos christianosque y son, rogamos que guando los dichos freyresentrarán por la dita redempcion, que no losulan dedes embargar, en vostra tierra ni en losvuestros logares, ni a lurs cosas et que en ir et entornar vayan salvos et seguros, et agradecerlohe mos muyto. Dada en Lérida 15 dias andadosdel mes de Mayo de nuestro Señor 1300» (1).Dos cartas semejantes fueron dirigidas en lalulsma fecha a los arraeces de Málaga y de Altrieria.(1) Centuria Primera, pág. 38.(2) Ibid.( 1) Patronato, pág. 564.

CAPITULO VIISu cesos más importantes del Generalato deFray Pedro de AmerSUMARIO: Fundaciones en Castilla, Francia, Menorca yPortugal. —Estadistica general. —Castillo de Rebollet.Bulas.—La exclusiva en Aragón.—Privilegio en Castilla.—SanPedro Armengol.—San Pedro Pascual.—P leito con la parroquia en Barcelona. —Muerte delGeneral.El gobierno de Fray Amer fué uno de los seisInäs largos que registra la historia de la Merced,Piles duró más de treinta años (1), y en ellosabundan los documentos de todo género, que nossuministran noticias importantes.Una bula de 1291 nos da la lista de las casasfundadas hasta entonces en la que aparecen,además de las existentes en 1268, las siguientes:tn el Norte de Castilla las residencias de Burgos,Valladolid y Medina del Campo y en Toledola iglesia de Santa Catalina, extramuros, en elcamino que va a la puerta de Visagra, donde el(1 ) Los otros cinco generalatos de más de treinta aiíos2°11: el de San Pedro Nolasco (1218-1249); Fray Nicolás Pé-(13 65-1401); Fray Nadal Gaver (1442-1474); Fray PedroA. Valenzuela (1880-1911).

— 122 —General celebró capítulo en Junio de 1294, segúnaparece por el nombramiento de Comendadorpara la casa de Alcaraz, extendido a favor deFray Guillermo de Ameno (1).Se adquirió también una casa en Jaén que,como la mayor parte de las otras, debía de servirde centro para recoger limosnas.En Francia se estableció la Orden en Maleville,diócesis de Rodez, encargándose de unacasa con el hospital llamado de los pobres, concasas, tierras, viñas, prados, dominios, pastos,usos, etc., a pesar de lo cual no fué nunca muypróspera.En 1286 Alfonso III de Aragón, que habíadesposeído de su reino al de Mallorca, conquistóla Isla de Menorca, hasta entonces tributaria.Como de costumbre, señaló bienes a las Ordenesreligiosas y a los mercedarios dió casas en Ciudadelay una mezquita para iglesia. Nuestrosfrailes edificaron otra, de Santa María del Puig,en Sterón, con aprobación del Obispo de Barcelona,a quien pertenecía en lo espiritual la Isla.Sin embargo, estas fundaciones duraron poco,pues Jaime II de Aragón devolvió a su tío en1295 los estados de Mallorca, siendo anuladastodas las donaciones de Alfonso III. La estanciaen la Isla no debía ofrecer grande atractivo,pues muchas Ordenes no aceptaron las donacionesque allí les hicieron (2).— 123 —La reina Esclaramunda de Mallorca era, alParecer, muy afecta a la Orden, pues el capítulogeneral de 1291 celebrado en Lérida dió carta dehermandad, en términos muy expresivos, a ellaY a sus hijos (1).Entre 1291 y 1299 se fundaron también, segúnbula de este último año, las dos primeras casasde Navarra, una en Sangüesa con iglesia y otraen Pamplona, sin *ella, al principio, aunque coaabu ndantes recursos. Fundóse también casa enLogroño y se adquirió la iglesia de San Juan dePuentedueña en la diócesis de Segovia.Por vez primera aparece también una casa.(l e la Orden en Portugal, donde se nos dió laig lesia de Santa Victoria, en Beja. Figuran tambiénen la bula de 1299 las casas de Soria, Al-Inazán y Toro. Aunque las donaciones eran másanti guas, debieron poblarse entonces las casas(le Elche y Orihuela, ciudades del reino de Mureia, venidas últimamente a poder de Aragón.Del año 1300 es la fundación de Guadalajara,(IGnde la infanta Doña Isabel, hija de Sancho eldió a los frailes de Santa Eulalia laer mita de San Antolín, extramuros, con algunastierras colindantes.En Teruel, donde ya teníamos casa, vino aPo der de la Orden la iglesia de los frailes de laPen itencia de Jesucristo, extinguidos, al pare-42ȧ6e8a2r,rfeorlạ.74. Era Comendador allí en 1292 Fr. Guillermo(1) A. C. A. Monacales, t. 2.681, fol. 38.(2) Ribera: Patronato, pag. 51 y A. C. A. Clero, toino( l ) A. C. A. Clero, t. 2.679, fol. 59.

— 124 —cer. Hizo la entrega al General Amer, PedroFormich, clérigo del Obispo de Zaragoza donHugo, en 1290 (1).Un solo fraile de la Penitencia, llamado FrayEsteban, quedaba en Tarragona en 1299; el cualcedió su iglesia de San Antonio a la Merced paraque la reparase, pues amenazaba ruina, con obligaciónde sustentarle a 61 y aun darle el hábitosi lo desease. Hizo el contrato el ComendadorFray Arnaldo Cuconi (2).En Tarragona había tenido la Merced variospleitos sobre edificar iglesia, según vemos poruna bula de 1274. Los mercedarios habían edificadoallí una capilla con título de Santa Eulalia,pero los franciscanos, alegando el privilegio quetenían de que nadie pudiera levantar iglesianueva trescientas canas alrededor de la suya,quisieron obligarlos a demolerla, acudiendo paraello al Obispo de Vich, que les dió la razón. Replicaronlos mercedarios que su capilla, levantadacon aprobación del Arzobispo, era anterioral privilegio y acudieron a Roma. Gregorio Xdesde Lyon comisiona para fallar el asunto aSan Raimundo de Pefíafort, entonces casi centenario.Este es el único documento coetáneo quenos presenta al Santo en relaciones con la Merced,pero es dudoso que llegase a fallar el pleito,pues murió luego (3).(1) Ribera: Centuria, pág. 208.(2) A. C. A. Monacales, t. 2.676, fol. 115.(3) La comisión está fechada en Lyon el 13 de Agosto— 125 —En resumen, tenía la Merced al finalizar elSiglo XIII:Ocho casas en Cataluña, de ellas cinco coniglesjOnce en Aragón, de ellas cinco con iglesia.Siete en Valencia, de ellas tres con iglesia.Ocho en Francia, de ellas cinco con iglesia.Veinte en Castilla y Portugal, de ellas sieteCon iglesia.Dos en Navarra, de ellas una con iglesia.Una en Baleares, sin iglesia.O sean en total, 57 casas con 26 iglesias.Muerto el Comendador de Játiba Fray Bernardode San Román por 1273, el General asulnióde nuevo el gobierno de aquella encomiendaY de los cuantiosos bienes a ella anejos, cuyasrentas le fueron asignadas para los gastos delOficio, según afirma expresamente un doeumento. Son muchos los que otorgó durante estos añosaquella población que visitaba con frecuencia,residiendo allí largas temporadas (1).En 1279 le hallamos en Arguines para determinarde acuerdo con Belträn de Bellpuig loslimites de Algar, que pertenecía a la Orden, conTorres-Torres, propiedad de dicho caballero.F irman la concordia., ademas del General, el Co-Mendador de Arguines Fray Guillen Oliver y losde 1274, y San Raimundo murió en Barcelona el 6 de Ener°de 1275, después de larga enfermedad.(1 ) Gazulla: Los mercedarios en Játiba, págs. 11 y siguientes.

— 126 —definidores Fray Raimundo G-ualardo, Fray JaimeSeriti, Fray Ferrer Destorrent y Fray Pedro deCaldes (1).Otra adquisición notable de estos afros es ladel Castillo de Rebollet, propiedad del Almirantede Cataluña, en Carroz, que tenía allí por Alcaidea Bernardo de Peñafiel. Este en su testamentodejó el cargo con todos sus derechos y rentas ala Merced, disposición que fué confirmada por elAlmirante, dispensando además al General detener allí guarnición permanente, ya que vencidapor Don Jaime en 1276 la última sublevaciónde los moros, tal precaución parecía innecesaria:«Sea en memoria a todos, presentes y futuroscomo Nos Carroz señor de Rebollet y Carroz suhijo y doña Sancha su mujer, juntos in solidum,con pleno conocimiento y advertencia y certificadosde nuestro derecho, por nuestro buen deseoy espontánea voluntad, por Nos y por nuestrossucesores presentes y futuros, damos, concedemosy confirmamos a vos Fray Pedro de Amer,humilde Maestre de la Orden de Santa Eulalia dela Merced de los cautivos y a Fray Guillermo deCastellfollit Vicario y comendador de la iglesiade Santa Maria del Puig de Valencia, y a FrayGuillermo de Pujalt y a todos los otros frailesde la dicha Orden presentes y futuros perpetuamente,todo aquel legado que Bernardo de Peñafiel,caballero, ya difunto dejó a la dicha Orden(1) A. C. A. Clero, t. 2.675, fol. 211.— 127 —en su testamento de cierta heredad y molino lacual y el cual tenia y debia tener en el términode R ebollet, según que en él más largamente seCon tiene. Y con este público instrumento valederopara siempre os absolvemos y declararnos libres de la guarnición que vosotros en lugar dedicho Bernardo de Peñafiel, teniais que hacer enel castillo de Rebollet, como en el instrumentode d onacion hecho por nos el dicho noble Carrozal mismo Bernardo de Peñafiel, mas largamenteSe Contiene...» Fecha en Gandía el 2 de Enero de1281 (afro 1282 de la Natividad) (1).En 1294 D. Francisco Carroz, hijo y heredero •del Almirante, confirmó, explicándola más, laconcesión de su padre en documento dirigido alGe neral y a Fray Pedro de Alós su capellán (2).Continuaron los Papas favoreciendo a la Mercedcon muchos privilegios, que no todos estánen n uestro bulario. La mayor parte son merarepe tición de otros anteriores, renovando las indulgenciasconcedidas, exhortando a los fieles aPrestar decidido auxilio a la Orden, y condenandoCon expresiones durísimas la avaricia de algunosclérigos que impedían recoger limosnas eniglesias, o se quedaban con parte de ellas.Juan XX por dos bulas expedidas en 1276401nbra comisarios al Arzobispo de Tarragona y9bispo de Gerona para recobrar algunos bienesde la Orden enajenados indebidamente, y por(1) C enturia Primera, 167.(2) Ibid. 170.

128otras fechadas algunos días más tarde exime a laMerced de contribuir para la Cruzada con el diezmode sus bienes, pues todos ellos se empleabanen la redención, y prohibe a los colectores dedicho diezmo el exigirlo a los mercedarios.Nicolás IV en 1291 pone a sus concesionesuna condición nueva: «Prohibimos estrictamenteque las presentes letras sean enviadas por cuestores,declarando que serán nulas si tal se hiciere».El personal de la Orden era ya bastante numeroso,para no sentir mucho la falta de los cuestoresseglares, cuyos abusos ofendían al pueblocristiano. Las indulgencias falsas eran tan comunescomo la moneda falsa y en muchas partesllamaban echacuervos a los tales bulderos.Por otra bula del mismo afío 1291 Nicolás IVordena terminantemente que se entreguen a losmercedarios todos los legados hechos para la redencióny no destinados a cautivos determin a-dos, nombrando ejecutor al Obispo de Zaragoza.Esto nos recuerda la privativa que los mereedariospretendieron y obtuvieron, salvos cortosintervalos, en la corona aragonesa, a pesar delos esfuerzos hechos por los trinitarios. Dicho pr i-vilegio se remonta al mismo Don Jaime (1) y par e-cía entonces más natural, pues los trinitarios 11°tenían de regla pedir limosnas, sino sólo dedicara la redención la tercera parte de sus bienes (2).(1) Patronato, pags. 11 y 473.(2) P. Antonin de l'Assomption: Origines de l'Ordrela... Trinité, 81 y 123.— 129 —A su vez los trinitarios obtuvieron la exclusivaen Portugal, y la pretendieron tenazmenteen F rancia. En Castilla estuvieron las dos Ordenesequiparadas, con ventaja, al parecer, paralos cautivos.Por una carta de Sancho IV de Castilla de1289 consta que su padre Alfonso X había otorgadoa la Merced un privilegio en favor de lared ención, pero no ha llegado a nosotros copiade ese documento. La carta de Don Sancho diceasi•«Don Sanxo por la gracia de Dios Rey deeastiela, de Toledo, de Leon, de Gallicia, de Sevilla,de Córdova, de Murcia, de Jahen e del Algarve,A todos los conceios, alcaldes, jurados,itleses, justicias, merinos, alguasiles, maestres,comendadores e a todos los otros aportellados detnios regnos questa mi carta vieren Salut e graeia.»« Sepades que los frayres de la Orden de Santa°l ana de Barcilona vinieron a mi e pidieronmeInerced que quisiesse yo que la su peticion quees pora ssacar los cativos de tierra de moros,que andudiesse por mi tierra: e porque es cosaqtles grand servicio de Dios e de mi, e grand pro,de la xristiandat, e porque vi otra carta del ReyjiOn Alfonso mio padre que Dios perdone que erae n esta razon, tengólo por bien.»« Otrosí me dixeron que algunos logares de las6rdenes que les demandan el tercio de lo que lesn'andan pora ssacar los cativos. Ond.e mando(Pi e los frayres de la dicha orden que anden por9

— 130 —todas las villas, por todos los logares de miosreglos, ellos e los suos ornes que ellos enviarencon sus cartas, tambien en yermo como en poblado,a faser sus peticiones e sus demandas perasacar los cativos e aquellos que algo le quisieredesdar que ge lo dedes.»«E fesedles mostrar los testamentos a los albacease a los herederos de los finados. E si algunasmandas fisieren algunos ommes a la ordende Santa Olalla de Barcelona pora ssacar los cativosque lo ayan, e non les sea embargado porrason del tercio sobredicho fin por otra rasonnenguna.»«E si algunos hi oviere que ge lo non quisierendar e fueren rebeldes, mando a los aportelladossobredichos a cada uno en sus logares queles entreguen luego, vista esta mi carta, sin otrodetenimiento nenguno. E non fagan ende (al) pornenguna manera.»«E otrosí me dixeron que los que andan en elfecho de la Cruzada que les embargan la su demandae que les toman lo que les falan. Et estonon tengo yo por bien. Et mando a los aportell a-dos sobredichos que ge lo non conssientan. Eotrosí mando e defiendo que nenguno no sea ossado de les contrallar ni de les embargar a ellosnin a nengunas de sus cosas por nenguna maneje en-ra. E a qualquier que lo fisiesse pecharmepena cient maravedis de la moneda nueva, e alos frayres de santa Olalla, o a quien su bos t0viese, todo el clanyo que por ende recibiessen d o-bl ado . »San Pedro Pascual, Obispo y Mártir.

— 132 —«E mando a los alcaldes e a los justicias e alos aportellados sobredichos que qualquier quepassare contra nengunas destas cosas sobredichasquel peyndran por la pena que sobredichaes, e que la guarden pora faser della lo que yomandare.»«E non fagan ende al por nenguna manera;sinon por qualquier que fincasse que lo asi fisiesse,a él e a quanto que oviesse me tornaria polello.»«Dada en Toledo quinse días de Desiembre.Era de mil e tresientos e veynt e sete años.»«E yo Royz Martinez capiscoll de Toledo latis eserivir por mandado del Rey. Alfonsso Perez.Pedro Evanyes. Bartholomé Estevanes. Gonçal.bo Dominguiz. Fernan G-arcia. Garcia Perez» (1).Algunos cautivos concertábanse a veces corsus dueños y bajo la garantía de un comerciantEcristiano establecido en tierra de moros (hablibarrios enteros de ellos) venía a colectar su res'cate. Los reyes de Castilla y Aragón solían conceder licencias para ello por tiempo determinado, pero algunos lo prolongaban más de lo concedido, y otros que no eran cautivos recorrían l&pueblos abusando de su caridad. Los reyes mandan que a los tales embusteros les sea quitadalimosna recogida y que los metan en la cárcecortándoles sus luengas barbas.No faltaron algunos casos de individuos,giosos o 'seglares que se arrogaron el derecho d'(1) La Merced, 1930, pág. 297.— 133 —Predicar las bulas de la Merced, sin estar paraello autorizados, y a quienes los obispos mandandetener y castigar severamente. Muy curiosa esa este respecto una circular del Arzobispo deTar ragona Don Rodrigo, fechada en Junio de1300 (1).Nuestros cronistas elogian mucho al Comen-'dador de Barcelona por estos años, al que llamanV'ra 37 Arnaldo Liniberio, porque así aparece escritoen el códice de G-aver. Su verdadero apellidoes Loberes o de Loberio (de Lupus) y se encuentranmuchos documentos otorgados por élentre 1276 y 1291 (2), pero en ninguno se. le llamaPrior General, ni hay prueba de que fuera sacerdote.Al generalato de Amer corresponde tambiénla mayor parte de la vida de San Pedro Armengol, catalán y Comendador algún tiempo de SantaMaría de los Prados (3), unida más tarde akontblanch. Allí murió santamente, y en la iglesiaparroquial de la Guardia reciben sus reliquiasculto inmemorial que fué aprobado en 1686Por Inocencio XI.Quedóse en rehenes en Africa y no habiendollegado a tiempo el rescate, los moros le colgal'oude un árbol, aunque la Santísima Virgen le"ilvó milagrosamente y pudo volver a España,(1) A. C. A. Monacales, t. 2.658, fol. 259.(2) A. C. A. Monacales, t. 2.679, fol. 58.(3) Morera y Llauradó: Tarragona Cristiana, II, págilaas863 y siguientes, con importantes documentos nuevos•aca,dos del archivo de la Guardia.

— 134 —conservando en su cuello torcido las señales deglorioso martirio. Alude a él Fr. Pedro de Cijaren su opúsculo de 1446.El 6 de Diciembre de 1300 moría en Granadael Obispo de Jaén, Pedro, al que se ha atribuídoel apellido de Pascual y que había sido promovidoa aquella silla en 1296. Cuando regresaba dehacer la visita pastoral a principios de 1298, fuésorprendido por una emboscada de moros, cercaya de Jaén y llevado a Granada. Bonifacio VIII• exhortó a todos los obispos a que contribuyerana su rescate, pero éste no llegó. Durante su cautiverioescribió el Obispo dos obras muy importantes:La impugnación de la Secta de Mahoma, encastellano, y la Disputa con los Judíos, o BibliaParva en provenzal, para confortar a los muchoscautivos de una y otra lengua que en las cárceles'de Granada estaban expuestos a ser engañados oseducidos.Estas obras contribuyeron probablemente aacelerar su muerte, concitando contra él los odiosde los moros. La orden de la Merced, que gestionósu canonización en 1675, está en posesión dellamarle hijo suyo, contra la cual se han levantadomuchas dificultades, que fácilmente desh i-cieron los apologistas mercedarios. Preciso esreconocer, sin embargo, que las pruebas que poacreditan ser el Santo religioso, ne'-sitivamenteson de gran eficacia (1).(1) Varios Prelados de entonces se hicieron religiosospor razones más o menos elevadas. Asi el sacrista de B ar-— 135 —En 1296 encontramos ya de Comendador deBarcelona al Prior General de la Orden FrayG uillen de Isona, antes Comendador del Puig (1).El esplendor del culto de nuestra iglesia de Barcelonaexcitó los celos del Párroco de San Justo,que reclamó derechos exorbitantes. El ObispoFray Bernardo cometió el pleito al CanónigoRamón Amil, que dió una sentencia intolerablePara la redención de cautivos, viéndose obligadoel Prior a apelar a Roma. Bonifacio VIII, porb ula de 13 de Enero de 1298, nombró Juez delegadoal Prior de Santa Eulalia del Campo, queno llegó a fallar sobre la apelación. Elegido Obis-Po en 1300 Pons de Gualba, y antes que fueraconsagrado, ambas partes decidieron sometersea su laudo, que fué pronunciado el 26 de Febrerode 1301. Los mercedarios debían dar al Párrococuatrocientos sueldos anuales en tres veces, quedandolibres para hacer todo género de funcioneslimitación alguna.Firman la sentencia, además del Obispo electo,y confirmado, casi todos los Canónigos, elPrroco de San Justo, y por la Merced el PriorPraY Guillermo de Isona, Fray Berenguer Martí(que había sido Procurador en Roma), Fray Guieelona,Pedro de Centelles, elegido Obispo en discordia,Pron ietió hacerse dominico para desarmar a su competi-"r, que era el prior de los Predicadores. Hay varios casossin-al ares, y alguno de nuestros historiadores del sigloX VII hizo así mercedarios a varios Obispos, sin fundalnentoserio.( 1) A. C. A. Monacales, t. 2.659, fol. 56.

— 136 —llermo Guerao, Fray Pedro de Prats, Fray DomingoPeris, etc. (1) .. Sin embargo, el pleito resucitónuevamente, y en 1305 Clemente V, porbula despachada en Lyön el 13 de Diciembre,nombra nuevo Juez al Prior de San Pablo delCareo (2), llegando poco después ä nuevo concierto.Fué este uno de los pocos conflictos que laOrden tuvo con los Párrocos en sus primerostiempos, y aun nós cabe el consuelo de que elObispo era más bien favorable a nuestros religiosos.No siempre sucedió así por desgracia, yal- Ver los innumerables pleitos en que algunosreligiosos consumían sus energías, nos asalta laduda de si. valía la pena de fundar conventospara eso.. El 8 de Junio de 1301 falleció santamente enel Puig, donde está sepultado; el Maestre FrayPedro de Amer, después de una vida muy activay laboriosa. Su sepulcro levantado de tierra aestilo valenciano, se conserva a los pies de laiglesia, con este epitafio:Año del Señor MCCCI, seis días antes de los idusde Junio murió Fr. Pedro de Amer, Maestre Generalde toda la Orden de Santa María de la Merced delos cautivos. Cuya alma descanse en paz. Amén.o7.)C>oe". nNo•-n,ersEnCIDooN(1) Vargas: Chronica Ordinis, I, 124, extracta el p rocesosegún lo vió en el Vaticano. En el A. C. A. Mona'les, t. 2.679, fol. 62, se encuentra la sentencia del Obispo.(2) A. C. A. Monacales, t. 2.675, fol. 53.

CAPITULO VIIIPleito del generalato (1301-1308)SU MARIO: Luchas en la Iglesia.—Elección de un generallego y otro clérigo. —Apelación. Nuevo general clérige.—Intervención del Rey de Aragón.— El Papa nombraGeneral a Fray Arnaldo Rosiriol y Prior General alP adre Albert.—Limites de ambas jurisdicciones.—Laudo del concilio de Tarragona.Los primeros años del siglo XIV fueron parala Merced de profunda crisis, da la cual salió,51n embargo, mejorada y robustecida. Es posibleque en los últimos del generalato de Amer hubieraalguna discordia entre él y Fray Guillermode I sona, Prior General y Comendador de Barcelona.La Iglesia miraba con alguna desconfianza a105 institutos dirigidos por legos, en los que fáeilitentecreí ase descubrir tendencias heterodo-)(as o rebeldes. La lucha feroz entre clérigos y2eglares que entonces ardía en la Iglesia, debíate ner su eco en las órdenes monásticas.Bonifacio VIII había lanzado en 1296 unabula no menos célebre por su contenido que porstl encabezamiento que es el siguiente: La antigüedadnos enseña que los legos fueron en grantbanera enemigos de los clérigos, lo que demues-

— 140 —tra también claramente la experiencia de nuestrostiempos... (1). También en otras órdenes, yhasta en la Cartuja, hubo rivalidades lamentables(2).Los cuatro definidores (dos clérigos y doslegos), convocaron a elección en el Puig para el29 de Septiembre de 1301, sin contar con el PriorGeneral, Fray Guillen de Isona. que se atribuíael derecho de hacer la convocatoria. Desgraciadamentelas Constituciones nada decían respectoa eso, y la costumbre no practicada en treintaarios tampoco debía ser muy concluyente. Elejemplo de las demás órdenes militares es lomás sólido que el Padre Isona invoca en sufavor.El Prior General dió orden al Vicario o curadel Puig, Fray Pedro de Alós, prohibiendo sehieiese allí la elección, y amenazando con excomunióna los que tomasen parte en ella. La cartala llevaron Fray Domingo Pérez y Fray PedroFormich o Formica, y tiene la fecha de 20 deAgosto de 1301 (3). Pero el Vicario, que habíasido capellán del General difunto, apeló a laSanta Sede contra la violencia que se les haciay el día señalado procedieron a la elección, recayendoésta en Fray Arnaldo Amer, lego y parientequizá del General anterior.Él Prior y los suyos eligieron también en(1) Cap. Clericis de inmunitate ecclesiarum, in Sexto.(2) Mortier: Histoire des Maitres Généraux... II.(3) Centuria Primera, pág. 111.— 141 —Barcelona, el 18 de Octubre, al citado Fr. PedroPormica, idéntico probablemente con el clérigodel mismo nombre y capellán del Obispo de Zaragozaque en 1290 había dado a la Orden posesiónde la iglesia de Teruel.Nombraron ambas partes sus procuradores aRoma, creyéndose el General lego muy fuertecon el apoyo del Rey y con el número de frailesde su partido, que eran aproximadamente las dosterceras partes. Jaime II, con fecha del 4 deEnero de 1302, escribió al Papa en los siguientestrrninoS:... «Rogamos a Vuestra Beatitud y Clenlenciacon el mayor afecto que podemos que,atendiendo a que el oficio del dicho Maestre tienePor objeto combatir a las naciones bárbaras yreunir limosnas para redimir cautivos, y que elPapa Clemente confirmó a un lego por maestrode la dicha Orden, y así se observó hasta ahora,quiera Vuestra Santidad confirmar al dicho Arnaldoen Maestre de la dicha Orden, por serPróvido y honesto, pues nunca se observó quefuera asumido un clérigo para Maestre de losliospitalarios, Templarios, Calatravos y de Uclés(8antiaguistas) que tienen una regla semejante,Y seria derogar a nuestra dignidad Real, si loque fué establecido por nuestros antecesores sc%ciase en nuestro tiempo... Dada en Valencia'pera de las nonas de Enero, año (de la Encarnación)del Señor 1301 (1).( 1) Esta carta, cuya fuerza demostrativa es evidente,descubierta por el Padre Gazulla en el Archivo de la

— 142 —El procurador del General lego Fray Ramónde Ostolés, presentó a Bonifacio VIII el siguientememorial en 1.° de Abril de 1302, ignorando sinduda que para entonces habia muerto ya el PadreFormica:«Suplica a vuestra Santidad el procurador deFray Arnaldo, Maestre General de la Orden deSanta Maria de la Merced de los cautivos, queen la causa de apelacion o apelaciones y delnegocio principal que se disputa y espera disputarseentre Fray Arnaldo y sus adherentes queson en número doble que los contrarios, por unaparte, y Fray Pedro Formich por otra, con ocasionde la eleccion que se dice celebrada deldicho Fray Pedro en maestre general, se digneconceder juez que oiga a las partes en España,a saber el Sr. Arzobispo de Toledo, o el Obispode Jaen, o el de Córdoba, o aqui en la Curiaalguna persona idónea, a quien vuestra Santidaddetermine encargar la causa, para que examine,oiga y termine la dicha causa de apelacion o deapelaciones y el negocio principal y todo lo conél relacionado» (1).Entre las soluciones propuestas el Papa optópor la última, cometiendo el conocimiento de lacausa al cardenal Gentile de Monteflorum, fran-Corona y publicada por vez primera por Finke en losActa Aragonensia, I, pág. 113. La confirmación de unGeneral lego por el Papa Clemente no puede ser otra quela de Fray Guillen de Bas en 1267, pues no hubo otro Clementeen el siglo XIII.(1) Centuria, pág. 302.— 143 —eiscano, que comenzó a actuar el día 9 de Enerode 1303, pero que no llegó a terminarla por laM uerte del Papa y el breve pontificado de su ininediatosucesor Benedicto XI.Entre las razones que se alegaron en favordel Maestre lego es notable la contenida en unacarta de la ciudad de Segorbe al Papa, fechadaell 11 de Mayo de 1303, en que se afirma «que laredencion de cautivos no se puede ejercer tancómodamente por los frailes clérigos como porlos legos, por el impedimento de las órdenes sagradas,pues para redimir a los cristianos cautivosdel poder de los paganos y traerlos a tierrade cristianos, tienen que hacer uso de las armasY a lgunas veces tomar parte en hechos enormes,ituPropios de la profesion de clérigos» (1).El argumento era de peso y demuestra quebps conflictos con los moros se resolvían muchasveces a cintarazos, pero los clérigos supierondespués resolverlos con mejores razones, sin excluiralgunos mojicones, que gozaron siempre deg'ran prestigio entre los africanos.El P. Formica falleció el 25 de Marzo de 1302.1\10 se dieron por vencidos sus partidarios, y el .5de Junio, bajo la presidencia del P. Isona, eligiel'ounuevamente en General a Fray Ramón Al-Ort, que nombró procuradores suyos en la corteo /-nana al Comendador de Perpifián Fray Ber-,hardo Giralt y a Fray Bartolomé Pujol. Pocot'esPués falleció el Comendador de Barcelona(1 ) Centuria, pág. 149.

— 144 —Fray Guillen de Isona, sucediéndole al frente dela casa el P. Domingo Pérez arriba mencionado.A pesar de la influencia del Rey de Aragón e $probable que el Papa de la bula Clericis laicoshubiera puesto un clérigo al frente de la Orden,pero Bonifacio VIII falleció el 11 de Octubre de1303 después del sacrílego atentado de Anagni.Sucediéronle Papas menos belicosos que dieronlargas al asunto, para no aumentar las gravísimasdificultades en que se veían envueltos.El General Fray Arnaldo de Amer celebróvarios capítulos donde se tomaron importantesacuerdos, como el de 1304 en el Puig, en que sereservó al General la facultad de admitir novicios.Al lado del General figuran el teniente dePrior General Fray Miguel de Ara y los definí.'dores Fray Pedro de Alós, Fray Domingo deSanta Cruz (sacerdotes), Fray Guillen Zacarreray Fray Pedro de Tona (legos) (1).Jaime II volvió a escribir en 1306 a ClementeV la siguiente carta de grande interés histórico:«Al santísimo y reverendísimo en Cristo Padrey Señor Clemente, Sumo Pontífice de la santa'Romana y universal Iglesia, Jaime por la graciade Dios, Rey de Aragón, de Valencia... saludabesa sus bienaventurados pies. Hacemos saber avuestra Santidad por las presentes que en tienlpospasados, algunos legos de nuestra tierra,llevados de la devoción a Cristo, gastando stig(1) Esta Constitución está añadida a las de Amer.145 —bienes en .redimir los cautivos fieles y católicos,inv irtieron el dinero en la redención de los mis-Mos, y después pidiendo públicamente en lasigl esias limosnas de los fieles libraban a los citadoscristianos cautivos con las limosnas recogidas,del poder de los moros. Y según pueden losle gos sucesores de aquéllos se esfuerzan en cum-Plir la citada obra de inefable piedad».«Y habiendo nuestro abuelo el Serenísimoseñor Jaime de esclarecida memoria Rey deA ragón fijado los ojos en las dichas obras decaridad, dió a los citados legos que ejercían ladi cha obra de caridad el hospital de Santa Eulaliade Barcelona, para que en él pudiesen cum-Plir lo que devotísirnamente habian comenzado.»« Y las personas católicas de nuestro reinocen suma devocion a Cristo dieron tambien muchísimos bienes, no solo muebles, sino tambiénInn mebles a los dichos frailes legos para realizardicha obra.»«Y habiendo el Papa Gregorio, de venerableIner noria, reconocido cómo aumentaba el númerode los dichos frailes legos y las limosnas de losceles, aprobó la citada obra de inmensa misericordia, inducido por los humildes ruegos delInagnifico señor Jaime nuestro abuelo, y diólus c itados frailes legos la regla de San Agustin37 e l habito blanco, en que llevasen la señal denuestra dignidad Real, bajo la cruz del Señor,4nte el pecho, y constituyó a uno de los citadosfrailes legos en Maestre de los demás.»« Ahora, pues, habiéndose originado discordia10

— 146 —que ya dura largo tiempo entre los frailes legosy clérigos sobre la eleccion de Maestre generalde la Orden sobredicha, y estando el negocio enpleito ante la Sede Apostólica, imploramos laclemencia de vuestra Beatitud en favor de losfrailes legos de la misma Orden, para que osdigneis confirmar la eleccion de un hermanolego en Maestre general de la dicha Orden,según de antiguo fué observado, sobre todo porqueel origen de la dicha Orden requiere que seagobernada por un Maestre y fraile lego.»«Cristo omnipotente por su misericordia sedigne conservar la persona escogida de vuestraSantidad a su Santa Iglesia por dilatados tiempos.Dado en Barcelona el 20 de Agosto, ario delSeñor 1306» (1).Los capítulos celebrados por el General lego,demuestran que efectivamente estaban de suparte no solamente gran mayoría de los legos,sino también muchos sacerdotes, aun de los queen años posteriores se pasaron al partido contrario.Basta ver la nómina del capitulo general deCalatayud, celebrado en 1303 y de otros post e-riores para convencerse de ello (2).Fray Ramón Albert intentó imponer su auto"ridad a toda la Orden, presentándose al efeeteen Valencia en Septiembre de 1302, pero le salióal pasó el Vicario del Puig Fray Pedro de Alós,(1) Centuria Primera, pág. 307.(2) A. 11. N. de Madrid. Clero, leg. 2.044, y Centurig,páginas 306 y siguientes.— 147 —Protestando en nombre propio y de los suyos'c ontra toda violencia. El Rey mandó tambiénque el electo fuera mantenido en su puesto ex-Pidiendo al efecto una carta a todos sus ministroscon fecha de 24 de Enero de 1304 (1).Obedecían al Padre Albert la mayor parte delos conventos de Cataluña, comenzando por eld e Barcelona y los de Francia, y al general legotodos los demás.Aunque los viajes a Roma imponían crecidosgastos, para los cuales se contrajeron empréstitos,no parece que la reputación de la Orden padeciese mengua, antes vemos que recibe cuantiosos donativos para la redención y para fundarnuevos conventos. Por demostrar la antigüedadd e una costumbre de la Orden debe mencionarsela donación de Galcerán de Miralles en 19 deSeptiembre de 1307 a Fray Ferrario de Caldes,eomendador de Santa Coloma de Queralt, paraalu mbrado durante la misa y salve que se can--taba todos los sábados (2).Al cabo de siete años largos de una situaciónanómala, Clemente V puso fin al cisma que divi -dí a la Orden anulando las dos elecciones, sinmala nota de los electos y nombrando General araY Arnaldo Rosiñol, pero encargando el régilnende lo espiritual a Fray Ramón Albert, Priorgen eral. Tal solución, que años atrás podía serterminante, no lo era ahora con las exageradas(1) Centuria, pág. 305.(2) Gazulla: La Patrona de Barcelona, pág. 53.

— 148 —La Santísima Virgen da el hábito a SanPedro Nolasco, con asistencia del Obispo ydel Rey.(Relieve de Pedro de la Cuadra en el Museode Valladolid.)ideas que reinaban acerca de la inmunidad delos clérigos.La bula está fechada en Poitiers el 12 de Febrerode 1308, pero aunque se tuvo noticia deella tardó mucho en llegar a manos del promovi"— 149 —(lo,por lo cual, el 13 de Diciembre, el capítulore unido en el Puig acordó el nombramiento dedos visitadores que mantuvieran enérgicamentela disciplina, mientras Fray Arnaldo RosiñolPudiera hacerse cargo del gobierno. El nombra--Miento recayó en el Comendador de Teruel Fray-M artín de Alfaro y Fray Pedro de Bas, Comendadorde Gerona. Entre los concurrentes figura eln uevo Vicario del Puig Fray Nicolás Avinent, yel C omendador de Navarra Fray Pedro García deSangüesa, que era también sacerdote (1). Ocupato davía el primer lugar Fray Arnaldo de Amer,que en adelante se retiró a su encomienda deJ átiba y Arguines que le había sido concedida, y'e n la que vivió algunos años rodeado de granconsideración.En Abril de 1309, el nuevo General Rosiñol,en pleno ejercicio de sus facultades, convocó aca pitulo general para el Puig, de acuerdo con elp rior, pero Jaime II se lo mandó trasladar a Valencia, por temor de que retoñaran las discordiasPa sadas. El mismo día 20 de Abril escribió alJu sticia de Valencia, mandándole asistir al ca-P i tulo para evitar toda disensión (2). Parece quetales precauciones no eran excusadas y aun cone llas no pudieron cortarse todos los disgustos,•jendo la causa principal de ellos el Comendadorlego de Valencia Fray Ramón de Granollers (3).(1) Centuria, pág. 312.(2) Ibid. 314,(3) Gazulla: Los mercedarios en Valencia, lb

— 150 —La guerra nunca fué escuela de mansedumbre yes indudable que, por estos años al menos, losmercedarios empuñaban las armas. Ya hemosindicado que en el sitio de Almería intentado porlos aragoneses de acuerdo con Castilla, perdió,su Caballo el mercedario Fray Bernardo de Figuerola(caballero que diez años antes era conventualde Tortosa), según consta de los registrosde Jaime 11 (1).El capítulo general de 1310 se celebró enHuesca, y en él se nombró Procurador generalante la Ciirte Romana, que entonces estaba yaen Aviñón, Pero después surgieron graves disensionesentre los dos generales de la Orden, pueSen realidad lo eran cada uno en su esfera, y pareceque el Maestre encarceló al Prior. La discordiase acentuó más todavía el ario siguiente,pues habiendo el Maestre señalado la casa capitular,el Prior la revocó, y en la carta fechadaen el Puig el 23 de Febrero de 1311 manda dosveces al General en virtud de obediencia, segúndocumento extractado por el Padre Guimeránfines del siglo XVI (2).No se podía continuar de ese modo y ambaspartes convinieron en someter el litigio al conc i-lio provincial de Tarragona, que se celebró a'principios de abril. Los Padres sometieron elarreglo al Arzobispo Dn. Guillen de Rocaberti Y(1) Patronato, pág. 122.(2) Arqués, torno de Varia que conservan los Padres'de Aragón, fol. 146.— 151 —Y al Obispo de Valencia Fray Raimundo, que firmaronlos artículos de la concordia el 24 de Abrilde 1311.Si los dos Prelados se hubieran propuestodemostrar que la Orden había de hacerse clericalO perecer, no podrían discurrir cosa más a pro-Pósito. Conservando al Maestre lego la administración temporal concedida por el Papa, hacenal Prior y demás clérigos completamente inde-Pendientes.Con el artículo 11.° habría bastante parahacer la vida imposible: «Los frailes clérigos(dice), según el mandato del Prior, o de su lugartenientedonde el comendador fuere lego, y losfrailes legos según el mandato del comendador,sea éste clérigo o lego, estarán obligados a reunirlos réditos, gastos y entradas de la casa oencomienda donde fueren conventuales, y a pro-Curar los demás negocios lícitos».Es decir, que habría en las casas donde elComendador fuera lego, un Prior conventualnombrado por el Prior general, y a él deberíanObedecer, exclusivamente los clérigos. Al Priorgeneral competiría también exclusivamente eltraslado y corrección de los clérigos, sin que enello ni siquiera en salir de casa tuviera parte elComendador lego. ¡Lo maravilloso es que la Ordenpudiera durar así seis años!En cambio se estrecha al Maestre de una'flanera intolerable, quitándole hasta la libertadde escoger el capellán que debía acompañarle yreservando ese nombramiento al Prior y defini-

— 152 —dores. Muy bueno y enemigo de pleitos debía serel Maestre que pasó por tales condiciones y lascumplió hasta el fin de su vida (1).En los restantes artículos se dispone que elGeneral con el Prior y los definidores elijan ados frailes, uno clérigo y otro lego, que vayan aredimir cautivos con el dinero recogido para esoy con el sobrante de las rentas de la Orden. Laredención se hacía entonces anualmente, y no habladistinción de provincias, sino que los redentoreslo eran por toda la Orden.El Prior debía visitar la Orden toda, inclusoal General, en lo tocante al culto y a la observanciaregular, pues en él residía la cura dealmas.Las dimisorias para órdenes las daba el Priorsolo, pero si el candidato había entrado paralego, debía contar con el Maestre y el definitorio.La recepción de novicios, tanto clérigos comolegos, quedaría reservada al Maestre, Prior y definidores;y lo mismo la provisión de las encomiendas.Las vacantes ocurridas durante el ariolas cubriría el Maestre, si el difunto era lego, yy el Prior si era clérigo.Los frailes clérigos no envíen ni reciban cartasni salgan de casa sin permiso del Prior o desu lugarteniente, ni los legos sin licencia delComendador.(1) La concordia está integra en el P. Ribera: Centuria,pág. 116 y siguientes, salvo el encabezamiento y 13fecha. Copia entera en el A. C. A. Monacales, t. 2.6792fol. 209.— 153 —Si una encomienda no puede sostener dosfr ailes o no da trabajo para ellos, si tiene algoesp iritual y algo temporal, sea encomendada aU n clérigo (1).La presentación de los sacerdotes que habíande regir las parroquias de la Orden la harían dee° 1nún acuerdo el Maestre y el Prior, a no serque se hubiera convenido otra cosa con los obis-Pos.T anto el Maestre como el Prior deberían tenerLina encomienda señalada por el definitorio, coneeas rentas pudiesen atender a los gastos del°nejo.Los gastos de la visita anual, tanto del Maestrecomo del Prior, deberían costearlos las casasvisi tadas, según costumbre.Tal fué la concordia de Tarragona tan des-Vent ajosa para los legos. El fin lastimoso de losrr e nip 1 ari o s no debió ser enteramente ajeno aeste resultado.(1 ) Esto explica por qué la mayor parte de las casas'e Cas tilla con iglesia en 1317, aparecen encomendadas a

CAPITULO IXLos últimos años del gobierno laicalSUMARIO: Las provincias de Catalufía y de Castilla.—Pri vilegios de Fernando IV.—Detalles curiosos de lared ención y sus dificultades.—Tendencia a hacer laO rden clerical.—Capítulos celebrados.Queda ya indicado que los mercedarios noPedían limosna por las casas sino sólo en lasIglesias, pero en 1310 las de Barcelona estuvieroncerradas mucho tiempo a causa del prolongadoentredicho. Jaime II en carta dirigida desdeT er u el a los Conselleres dice que los mercedariosle h ablan pedido licencia para pedir por las casas, aunque nunca lo habían hecho, pues ahoraera i mposible hacerlo en las iglesias según costuillbre.El Rey les autoriza para ello a fin de que110 les faltara el sustento necesario y que pudierancon el resto atender a la redención de cautivos(1).El 24 de Octubre de 1310, estando en Valenela, el Maestre Rosifiol nombró visitador de losti e°11ventos de Aragón y Navarra a su antecesorvraY Arnaldo de Amer, con amplias facultades,(1 ) A. C. A. Clero, t. 2.679, fol. 207.

— 156 —por hallarse el Maestre ocupado en otros negocios(1).En la Cruz de Mayo de 1311, o sea poco despuésde firmada la concordia de Tarragona, celebróel capítulo de Castellón de Ampurias, asistiendoel Prior y siendo definidores Fray DomingoDexac, Fray Arnaldo de Amer (el ex General),Fray Egidio Capdeporch y Fray Pedro de Bas (2).Es éste el primer capítulo provincial de que tenemosnoticia, prueba de que por entonces se dividióla Orden en dos provincias para la celebraciónde los capítulos solamente, pues no se elegíanprovinciales, sino que el General, si loestimaba conveniente, nombraba Vicario suyo oVisitador a algún religioso de su confianza.Según lo que luego vemos determinado Ypracticado, al capítulo de Castilla debían conc u-rrir todos los comendadores de esta corona y dePortugal con un religioso acompañante, y al otrocapítulo todos los comendadores del resto de laOrden. Las dos provincias debían celebrar capituloanualmente y cada tres años uno de esoscapítulos tenía el carácter de general, dos vecesseguidas en Aragón y la tercera en Castilla, demodo 'que en ésta había capítulo general cadanueve arios. La provincia que celebraba capituloprovincial debía enviar al capítulo general dosdefinidores que con el Maestre disponían las c o-sas de interés común para toda la Orden, sin(1) Centuria, pág. 315.(2) Ibid. 316.— 157 —nlezclarse en las particulares de la provinciaajena, cuya resolución correspondía al Generalcon los cuatro definidores de ésta.No hay indicio de esta división en las Constitucionesde Amer ni en sus apéndices, ni es verosímil que se introdujera en los arios del cisma,cu ando la Orden estaba ya bastante dividida.Las demás órdenes celebraban también capítuloanual , pero estando divididas en provincias natenían los frailes que hacer tan largos viajes. Ladiv isión de provincias entre nosotros debió tenerPor consecuencia la de las limosnas para la redención,que se reunían en ellos, haciéndose dosredenciones distintas, o por lo menos enviand°un redentor por cada provincia. Esto últimofu6 lo más general hasta muy entrado el sigloXV.El procurador del General lego . propuso en1302 a Bonifacio VIII que la causa del maestrazf\g° se encomendara al Arzobispo de Toledo, al`jbl-sPo de Jaén o al de Córdoba, que sin dudaran afectos a la Orden. De la estima que goza-Luan lo s mercedarios en Castilla son buena prue-"a las cuantiosas mandas para la redención de,eatitivos. En Sevilla, Toledo, etc., son frecuenrlos legados a los frailes de Santa Olalla de-biar celona (1).Fernando IV de Castilla, por carta fechada en• ( 1) Ballesteros (Antonio): Sevilla en el siglo XIII, pa-Alija 143. Pero Toledo vóase la Colección de Salazar en la.de 1 . }La , n. o 43.

— 158 —Burgos el 27 de Febrero de 1311, confirmó a losantecesores, dándoles toda clase de facilidadesmercedarios los privilegios concedidos por suspara su piadoso ministerio, «porque yo sé (dice)quel oficio de la dicha orden es de sacar capti vose de mantener hospitales e de cantar sacrificiose de rogar a Dios por mi e por las ánimas de losreyes onde yo vengo, e por todos los otros bienfechores de la dicha orden, segunt que en losprivillejos de los Padres santos apostólicos e delos reyes mis antecesores onde yo vengo e de mise contiene... Porque yo sé de verdad que la demandaque ellos fasen que se despiende en serviciode Dios en en el mio, e en sacar captivos detierra de moros e en mantener hospitales que esgrant honra e gran pro de la xristiandat».Este privilegio explica la mayor parte de lasdificultades y trabajos de los mercedarios en recogerlimosnas, y como su texto es aproximad a-mente el mismo concedido por los reyes anteri o-res y ha de ser confirmado por todos los posteri o-res, bien merece que demos a conocer sus prin'cipales cláusulas:1. 0 «Tengo por bien que ande la su demandapor todos los mios reynos, tambien por yermoscomo en poblados, e que les non sea embargapor las demandas ultramarinas, nin por la dichacrusada, nin por la de la Trinidad, nin por otrademanda ninguna que acaesciere en los lugare s ölos frayles de la dicha Orden o sus mensagerosacaescieren.2.° E si manda fisieren algunos para la orden— 159 —de Santa Olalla, o para sacar captivos, que loaYan los que la ovieren de recabdar por ella.3 •0 E por les fazer mas bien e mas mercettengo por bien que todas las cosas que sean man-La milagrosa imagen de Nuestra Señoradel Puig.4adas de los homes buenos e de las buenas due-11as a sus finamientos, e non seyendo nombradoslugares onde se den, tengo por bien que las'aya la dicha orden para sacar captivos.

— 160 —4.° E aquellos que finaren e fisieren testamentoe non mandaren algo para los captivos,segunt fue usado de lo mandar, que den tantoquanto montare la mayor manda que fisieren a lademanda de la Crusada o a otras demandas de lasórdenes.5.° E que puedan demandar con ,baçines elloso aquellos a quien ellos lo encomendaren, e ponerarcas en las iglesias de las buenas gentes doechen sus alimosnas.6.° E otrosí me dixieron que en algunos lugaresde las Ordenes, que les toman el tercio deaquello que les mandan para los captivos, e queles fasen otros agraviamientos muchos, non lesdebiendo ninguna cosa; e so maravillado cómoson osados de lo faser.7.° Vos mando a cada uno de vos en sruestroslugares que cada que los frayles de la dicha O r-den, o sus mensageros por ellos, acaescierenque les fagades mostrar los testamentos a losalbaceas e a los herederos, e a los escribanos pú-blicos, sopena de los oficios; e si fallaren porellos que alguna cosa fué mandada, o sera deaqui adelante, a la dicha Orden, o para sacarcaptivos, que non ean nombrados para su O r-den, o en algunos do non fué mandado, lo den,segunt dicho es, que ge lo fagades luego dar sinotro detenimiento ninguno.8.° Otrosí si algunos finaren sin lenguas queles fagades dar el quinto de quanto y oviere Sil'otro detenimiento ninguno.9.° Otrosí vos mando que si algunos hornes— 161 —les acaescieren con cartas o con alguna cosa delo de la Orden, o anduvieren falsariamente demandando,o como non deven, que los recabdedeslos cuerpos e quanto les falläredes, e los entreguedesa los dichos frayles o a sus mensajerosque anduvieren por su mandado.10.0 Et otrosí me querellaron los dichos fraylesque andan algunos demandando por captivos,non lo seyendo, falsariamente, e por esta razoncine menoscaban mucho la dicha Orden, e pierdenmucho los captivos que yasen en tierra delloros; porque vos mando que, doquier que losdichos frayles o sus mensageros vos los mostraren, que les tomedes quanto les falläredes, eda dlo a los frayles para sacar captivos, e cercenadleslos cabellos e raedles las barbas.11. ° Et otrosí vos mando que cada que los"'eles de la dicha Orden o sus mensajeros acaeseierenen vuestros lugares con esta mi cartaC°11 su traslado della, signado de escribano público, que los acojades e que los rescibacles biene que les dedes buenas posadas, (gratis, se mandó'n'tis adelante).12. ° E que les fagades llegar vuestros pue-"1ns , varones e mujeres, a un lugar convenible,a oir el fecho de los captivos, e el lacerio que1)assan en tierra de moros; (en Castilla habían reunciado,según esto, a utilizar las iglesias, por nochocar con los cMrigos).13. ° E defiendo firmemente que ninguno nonossado de les embargar sus peticiones, nincle les fa ser fuerzas nin tuerto, nin otro mal nin-11

— 162 —guno, nin de baklonarlos de sus palabras, nin deles contrallar a ellos nin a sus homes, nin a susmensajeros, nin a ninguna de sus cosas, por cartasque vos muestren los que andan en la demandade la Crusada, nin en otras demandas ningunas...14.' Ca mi voluntad es que se aprovechen losde la dicha Orden destas mercedes que les yofago, e les ficieron los otros reyes onde yo vengo,que les confirmo; ca cualquiera que lo ficiese pecharmehia en pena mil maravedís de la monedanueva, e a la dicha Orden todo el dampno e menoscaboque por ende recibiesse, doblado...No contento con esto, un año más tarde, el 1de Julio de 1312, expidió en Valladólid otra cartadonde añade las siguientes cláusulas:15.° E otrosí me dixieron que hay algunoshomes en muchos lugares que mandan algo e quelo non mandan dar a homes ciertos, nin en lugaresciertos por sus ánimas, e que los sus testamentariose los sus cabezaleros que dexan paracumplir sus testamentos de aquellos que esto as'mandan, que lo toman en sí e lo dan a sus parienteso a aquellos a quien se pagan, e que lenon dan por las animas de aquellos cuyo es.(Estas mandas inciertas debían ser entregadas a losmercedarios).16.° Otrosí sepades que me fisieron entenderque algunos que mandan en sus testamentos dineroso otras cosas para sacar captivos, quedisen que cuando 'vinieren los frayles con 'loscaptivos que ge lo den. E porque yo sé en verdat— 163 —que los captivos non los quieren dar en' tierra deInuros menos del haber.., mando que les . sealuego dado sin otro detenimiento, e mando a 'losalc aldes e jurados e a las otras justicias... quege l o fa,gan luego entregar.17. ° E otrosí que guando acaesciere que finanalgunos buenos homes o buenas dueñas que mandanalgo por sus ánimas en sus testamentos para'sacar captivos e que lo den los sus testamentariosa pobres en aquellos lugares que entendierenque será mejor empleado; e porque11° r asen mencion especialmente en los sus testainentosque lo den a esta demanda.., que les11°11 q uieren ende dar ninguna cosa, e que lo dana los ultramarinos e que lo sacan fuera de mios1r7e2eyrneeocisạ i.(07. /en a que tales mandas se den a lo;918. ° E otrosí me dixieron que guando acaesereque algunos frayles o otros homes de esta1"1den de Santa Olalla van de los mios reynos aotros, que aquellos que están por guardas en1°2 P u ertos o en los otros lugares por do ellos hanPassar, que los embargan e les toman las':e2tiaS e el haber e las otras cosas de las alimosd'iasque les dan para sacar los dichos captivostierra de moros; e disen las guardas sobreasque lo sacan de los míos reynos e que es"efendido. (Ordena que los dejen pasar libremente).d 19. 0 E otrosí me dixieron que del pan que lesball Para esta alimosna de los captivos . los homesall las buenas dueñas de la mi -tierra e lo-legan e lo lievan de unas villas e de unos luga-

— 164 —res a otros; que los portadgueros e los querecabdan las alcabalas, que ge lo quieren prendare embargar porque les deben de portadgo ealcabalas e otros tributos que les demandan.20.° E otrosí que los alcaides de los castillos,e los de las rondas, e las guardas de los puertos,e los que están a las barcas de los nos, e otroshomes, que les toman portazgo e ronda e pasagee otras cosas muchas, por los cuerpos, e por lasbestias, e por las otras cosas que lievan de lasalimosnas que ganan para sacar los captivossobredichos. E esto non tengo yo por bien que lestomen ninguna cosa de lo que sobredicho es, porninguna manera.21.° Otrosí me dixieron que guando acaesceque algunos homes se acogen a los monesterioso a las casas de la dicha Orden de Santa (Hallarpor peleas o por contiendas que les acaescen,por muertes de homes, que porque no están eglesiasen algunas destas sus casas, que vienen Ylas justicias e otros homes muchos e quebrantanlas casas de la dicha Orden e las entran Pgfuerza, e que prenden los homes que se y aeegen,e que los lievan dende, e que muchos deaquellos que y entran que toman e les llevanende muchas de las dichas alimosnas que y tlenenpara sacar los dichos captivos, e de lagotras cosas que les y fallan', e en esto que r escibegrant daño la dicha Orden; e pidieron'por merced que les mandase dar mi carta..•yo porque sé e soy cierto ques bien empleadamerced e la alimosna que les tisiere en est°7— 165 —tellgolo por bien e mando e defiendo firmementeque de aquí adelante, que ninguno non sea osadode entrar, nin de quebrantar los monesterios ninlas casas que la Orden sobredicha de Santa Olalaha en todos los mios reynos, nin sacar ende1°8 homes ... salvo si oviere ende alguno o algunosque hayan fecho aleve o traicion, o seanrobadores o quebrantadores de caminos o ladronespúblicos sabidos...22. ° E otrosí vos mandamos a cada uno de-48 en vuestros lugares que veades las cartasde las alimosnas de las mercedes que los frayleslos procuradores de la Orden sobredicha deanta Olalla tienen de los reyes onde yo vengo ede mi sobre esta razon, e guardádgelos e com-Plidgelos en todo, segunt que en ellos dice, e non‘e°usintades a ningunos otros demandadores, nina otros ningunos que les passen contra esto quedicho es en ninguna manera, nin quebrantar losinonesterios, nin las casas desta Orden sobredicha,nin entrar en 'ellas a nueve passadas enPos los homes que en ellas se acogeren conini edo o con recelo de muerte... (1).Estos documentos nos hacen ver los recursosc° 11- que contaba la Orden para la redención decautivos y los innumerables trabajos que costabael reunir limosnas, sin mentar las dificultades de1) (1 ) Tomo estos párrafos de la confirmación hecha porA " Jilall II en 1449, pues las posteriores están muy mo-'erniz adas. El pergamino original de 1449 está hoy en411estracasa de la Buena Dicha.

— 166 —caminos y los peligros de todo género en untiempo en que apenas habla mas seguridad personalque la proporcionada a cada uno por elesfuerzo de su brazo.Tales privilegios daban a la Merced en Castillauna situación parecida a la que gozaba enAragón con el escudo real y el guiatge o especialsalvaguarda concedida, por Don Jaime y confirmadapor todos sus sucesores.Pero en Castilla no tenían los mercedarios laexclusiva, siendo frecuentes los rozamientos con.los trinitarios, desalentándose con ello hasta elpuntode que años adelante propusieron la fusiónde las dos Ordenes.El haber renunciado al derecho que tenían depedir en las iglesias, a pesar de los enérgicosmandatos' de los Papas, es indicio también deque se encontraba mayor resistencia que enAragón y que faltaba para vencerla un apoyodecisivo.En Aragón los Reyes se ocupaban continuamentede las cosas de la Orden y los registrosreales contienen innumerables documentos concernientesa ella por estos años (1). El 16 deEnero de 1313 (de la Encarnación 1312), Jaime 11escribió al General la siguiente carta, que es'indicio de la familiaridad con que le trataba:«Jaime, por la gracia de Dios Rey de Aragón,etc. Al religioso Fr. Arnaldo Rosifiol, MaestreGeneral de la Orden de Santa María de la(1) Patronato, pág. 419.— 167 —Merced, salud y amor. Teniendo necesidad devos para ciertos negocios nuestros, os decimos ymandamos que vengais a Nos, de dondequieraque estuviéreis, y no lo dejeis ni dilateis porningún motivo. Dada en Calatayud el 15 deE nero año del Señor 1312» (1).En Mayo de dicho año debía reunirse el capituloy llegó a oídos del Rey que se trataba delimitar todavia más los derechos de los legos,Por lo cual escribió afectuosamente al General ydenlas capitulares encomendándoles se observasela reciente concordia de Tarragona, y si algo seintentase en contrario, él se opondría y escribirlaal Papa a fin de estorbarlo (2). Y para que larecomendación fuera más eficaz, mandó al Obis-P° de Valencia que asistiera al capítulo quedebía celebrarse en el Puig el día de SantaCruz (3).Parece que el General se había convencidode la necesidad de cambiar el régimen de laOrden, pues trataba con mano dura a Fray Rallónde Ostolés, uno de los principales defensoresdel derecho de los legos. Jaime II escribió desdePoblet el 29 de Junio de 1313 al Maestre rogándolese hubiese benignamente con ese y con losdemás legos (4).Por cartas expedidas en Huerta el 22 de Julio(1) Centuria, pág. 317.(2) Ibid.(3) Ibid.(4) Ibid.

— 168 —rogó al Maestre y al Prior que comparecieran ensu presencia, juntos o separados, para estudiarmejor lo que convenía al buen régimen de laOrden y que llevaran consigo «el instrumento defundación y dotación de la Orden y la sentencia,declaración y confirmación del Sr. Papa y lasdemás cosas que fueron hechas en el concilio deLyon y todo lo actuado en Tarragona por el Arzobispoy en Valencia». El acta de fundación ydotación de la Orden no la conocemos y quizáno existió nunca, como no se tome por tal laconcesión del escudo y las varias donaciones deDon Jaime.La confirmación del Papa en el concilio deLyon es, sin duda, la bula de Inocencio IV, expedidaallí en 1245 y firmada por doce Cardenales,donde se echan los fundamentos de nuestrorégimen, pero sin determinar que el Generalfuera clérigo o lego.La entrevista con el Rey se celebró efectivamenteen Lérida, saliendo de ella el acuerdo deno innovar nada hasta el futuro capítulo, perocomo el General nada decía de sus propósitos,algunos legos temían verse privados de sus oficios,por lo cual el Rey volvió a escribir a FrayArnaldo en 6 de Septiembre rogándole mantuvieraen sus puestos a los legos y especialmentea Fray Berenguer de Queralt, Comendador delObispado de Valencia y de la casa de Orihuela ydefinidor.Es de notar que tanto éste como Fray Ramónde Ostolés habían muerto cuando en 1317 se— 169 —e'arnbió el régimen de la Orden. Jaime II debióirse convenciendo por todos estos incidentes yquizá por los informes del Maestre Rosiñol, deque el régimen laical era ya insostenible. Educadoal lado de las Ordenes militares no com-Prendía, sin embargo, que éstas habían termina-4° su misión, pues con los bienes de los templapensabafundar la Orden de Montesa.El capítulo del año 1314 debía reunirse en14 rida el 3 de Mayo, y los legos acudieron nueva-Ul ente al Rey para que se evitara todo cambio enla Orden, prueba de que se trataba de acordarlo,l'eservando su puesto al Maestre durante sus días,que ya se preveía no habían de ser largos (1).Estaba por estos años en Marruecos y continuóallí hasta 1319 en que murió, un mercedarioillalnado Fr. Ramón de Barbarroja, sirviendo aic's cautivos y colectando limosnas entre lose°111erciantes y militares cristianos al serviciobdel Sultán. En 1313 Jaime II, a petición de FrayA(12b)ert, comisionado para ello por el'laestre, ordenó a Bernardo Cansech devolver alinercedario cincuenta doblas que éste le habíaPrestadoCelebró todavía Fray Arnaldo Rositiol capí-1, 4110 en Valencia en 1315 con recelo de los legos.n 1317 estaba reunido el capítulo provincial de'Iragóri en Valencia, pero el día mismo en que(1) Centuria, pág. 320.(2) Gazulla en el Boletín de la Orden, año 1928, página149 •

— 170 —debía abrirse, o sea el 3 de Mayo, falleció piadosamenteel General. Tocóle gobernar en momentosdifíciles, pero su conducta fué recta y preparóel cambio necesario de gobierno.Su dureza con los legos indica que estabapersuadido de la necesidad de tomar otro rumbo,si la Orden había de continuar subsistiendo. Esdifícil sospechar en él apasionamiento, sobretodo viendo lo poco que tenía que agradecer alos sacerdotes, muy puestos en defender sumunidad en todos los ordenes.Zurbarán.—Un ángel muestra a San Pedro Nolasco la Jertls31°celestial(Museo del Prado.)1SEGUNDA ÉPOCAGEN ERALES CLÉRIGOS VITALICIOS (1317-1574)CAPITULO XElección de 1317. Cambio de régimenSUM ARIO: Estado de los conventos según las actas delcap itulo. —Discusiones en él.—Elección de dos Generales.—Juan XXII nombra para el cargo al P. Albert.—Nuevo sistema de elección.—Cinco provincias. —Yense los legos del generalato. —Nuevas , constituciones.—Breviarioy misal.--Frecuencia de Sacramentos.— Peculio.Al morir Fr. Arnaldo Rosiliol, los clérigos yInuchos legos estaban de acuerdo sobre la necesidadde que el General reuniera en su mano elgobierno espiritual y el temporal de la Orden..Escarmentados con el fracaso anterior, ambosPartidos quisieron asegurarse el triunfo, y ter-" nados los funerales del Maestre, el 7 de Mayo,acordaron fijar la elección para el domingo 10de Julio inmediato en el mismo convento de Va-1, 1enci a, expidiendo la convocatoria que firma el-urior General y los cuatro definidores Fray Do-Otger y Fray Gonzalo de Teruel, presbíteros; Fray Andrés Despujol y Fray Miguel deealatayuci, legos.Leída e intimada a los frailes allí presentes11° 41braron cuatro mensajeros, enviándolos pordiferentes veredas con orden terminante de re-

— 172 —coger en todas partes acuse de recibo. A Andalucíay Portugal fué el correo jurado Pedro Miguel;el segundo para Aragón y Navarra; el terceropara Cataluña y Francia, y el cuarto parael Norte de Castilla.Con este motivo se consignan en el acta detallesmuy curiosos. En algunos conventos no habíafrailes, pues eran pocos y andaban todos recogiendolimosna. En Badajoz el mensajero hubode buscar al depositario de las llaves, que era unracionero de la catedral, al que entregó la convocatoria,pues el Comendador Fr. Miguel deSoria había salido con dirección a Murcia.Muchos frailes se excusaron de asistir por nodesamparar sus casas con daño de la Orden ypoca edificación del pueblo. Evidentemente elvoto que Inocencio IV había concedido en 1245a todos los frailes debía ahora restringirse a unospocos representantes de toda la Orden, pues lareunión, que en un principio era fácil, resultabaahora imposible. Muchos frailes se hicieron •representarpor otros, poniendo a veces la condiciónde que el elegido fuera clérigo o lego.Las actas de 1317 son uno de los monumentosmás importantes que tiene la Merced en sus pr i-meros tiempos y no han sido explotadas hastaahora debidamente. Por fortuna apareció hacepocos años el original que se había perdido enlas revueltas del siglo XIX (1).(1) Véanse las actas, publicadas por mi en Roma en1930, tirada aparte del Boletín de la Orden.— 173 —venFturayleMs. artín Sanz, Presbítero Comendador deArguines, acusa recibo por sí y otros siete con-Fray Miguel de Calatayud, lego, por sí y doslnás, en Sarrión.En Teruel había un solo fraile. En el Olivarseis, sin el Comendador ausente, que era FrayPollee de Banis, caudillo de los legos que ya enVal encia recibió copia de lo actuado.En San Pedro de los Griegos había uno solo;en Daroca, el Comendador lego Fray Pedro deAmer tenía cuatro súbditos. El de Tarazona FrayAlfonso, uno solo para recorrer toda la diócesis,een casa también en Tudela.En Zaragoza y San Miguel del Monte acusarecibo Fray Lorenzo de Lérida, Presbítero por síY otros tres en ausencia del Comendador legoFray Juan de Estella.En Estella había tres frailes, y en Pamplonael Comendador Fray Juan Digal, Presbítero,tenia consigo ocho. En Sangüesa, había tres; enIlnesca, cuatro. En Monfiorite, el Comendador yCura Fray Domingo de Villanueva, tenía cincoMás.En Lérida había seis, contando al ComendadorFray Arnaldo Martí, Presbítero. El Comendadory Vicario del Puig Fray Nicolás Avinent,tenía la Comunidad más numerosa de la Orden,Piles constaba de 18 religiosos.En Murcia aparecen dos frailes, y más tardese nombra a otro. En Tarragona acusan recibod°s en ausencia de Fray Domingo Otger, Comen-

— 174 —dador que era uno de los definidores. En BarcelonaFray Guillermo G-uerau acusa recibo por siy otros nueve en ausencia del Prior Fray RamónAlbert. Otros debían estar ausentes. En Castellónde Ampurias había nueve frailes sin el ComendadorFray Juan de Clarenciach, Presbítero,ausente. Uno de los conventuales era Fray BerenguerCantull, Subdiácono, que fué más tardeGeneral.Más allá del Puerto de Panisars, en los dominiosdel Rey de Mallorca, había en Perphiáncuatro frailes con el Comendador Fray ArnaldoCuconi, y en Montpeller tres.En los dominios del Rey de Francia había enNarbona cinco frailes, de los que era SuperiorFray Guillermo Stagell, lego. El Comendadorde Tolosa Fray Juan de Leu, tenía consigo ochoconventuales. En Aurignac, había dos; en SaintGirons, uno; en Carcasona, tres, y en 1VIaleville,cuatro religiosos.El correo de Francia Domingo Pascual volviópor Vich, donde encontró cuatro frailes sin Comendador,pues había muerto recientementeFray Ramón de Granollers. En Agramunt habíatambién cuatro, y en Montblanch, cinco frailes.En Castilla, el Comendador de Ubeda y JaénFray Miguel de Córdoba, parece que tenía solosdos frailes para ambas casas; Fray Rodrigo deCórdoba, Comendador de esta ciudad, tenía cincoreligiosos; el de Sevilla Fray Pedro García, legocomo los anteriores, tenía otros cinco por lomenos; en Beja (Portugal), había sólo uno llama-— 175 —119 Fray Lorenzo, y en Badajoz, dos. En Ciudad-";°drig'o, el correo obtuvo certificación de queadi no hubo nunca mercedarios.No se insertan en el acta las cartas de losdelnás conventos de Castilla, tal vez porque estandoya presentes los únicos religiosos de talesca sas era excusada aquella precaución. De lailmayor parte de ellas no aparece más que un solohile y este sacerdote, conforme a la concordiade Tarragona. De Toledo asistieron, sin embarg,e,tres clérigos. El Comendador de Soria, Fray'inan Banyuls, cayó enfermo en Calatayud y dióP Oder al Comendador de allí, Fray Martín dePc'nlar.Finalmente asistió el Comendador de Valen-Qia con otros cuatro religiosos, sin contar a FrayVicente Riera, Procurador entonces en elObispad„°de Valencia, y que veinticinco años más tarde-Llegó al generalato.El domingo 10 de Julio estaban reunidos en'a Iglesia de Valencia muy de mañana, a la horae ,11. que solía celebrarse el capítulo cotidiano,cilleuenta y cinco religiosos clérigos, en su maerParte Presbíteros, los cuales tenían la repre-2entación de otros clérigos y bastantes legos que,cc% razones más o menos sólidas, excusaban suasistencia.d Los legos presentes no pasaban de treinta ya los que se añadió al dia siguiente el Colnendadorde Santa Victoria de Beja; los poderesl'etinidos por ellos eran también Menos numerososalgunos, como los del Comendador de Córdoba,

— 176 —meramente verbales y por tanto no fehacientes.Algunos clérigos habían dado sus votos a los C o-mendadores legos, pero en los últimos días losrevocaron nombrando apoderados suyos a otrosclérigos, de modo que esta, vez ni un solo clérigoaparece de parte de los legos.Todos los presentes, de común acuerdo, nom -braron secretarios a dos beneficiados de la Catedralllamados Guera o de Blanes y Pedro de Cov1-lada, sin excluir al notario público BenavenoBenvivre. Presentados y examinados los poderes,se terminó la sesión.El lunes día 11 se reunieron de nuevo a lamisma hora y Fr. Ramón Albert hizo las intimacionesde rúbrica a los excomulgados posibles,inhábiles, etc. Los legos y en nombre de elloSel Comendador del Olivar, pidieron que fuera eleoldoun lego conforme a la costumbre de 19'Orden, protestando de todo lo que se hiciera encontrario. Contestó el Prior en nombre de todoslos demás, que no podían aceptar esa ni otracondición, pues la elección debía ser enterame n-te libre y la bula que dió a la Orden el dereeln)de nombrar General no determinaba si habíaser clérigo o lego. Sobre ello se discutió larg a-mente, acordando suspender la sesión hasta eldía siguiente.El martes 12, después de incorporado al cal*tulo el Comendador de Beja, siguieron las alega"ciones, manteniéndose cada uno en sus pretensionesy apelando los legos a la Santa Sede. Las'razones son cada vez más apremiantes y si 105— 177 —legos no discurrían por cuenta propia, estabanPor lo menos bien aconsejados.Ante la imposibilidad de ponerse de acuerdole's clérigos, determinaron proceder a la elecciónde escrutadores, que recogieran y contaran losvotos, recayendo el nombramiento en Fr. DomingoOtger, Comendador de Tarragona; Fr. Gonzalode Teruel, Conventual del Puig, y Fr. Juan deVadillo, Comendador de Guadalajara, todos presbíteros.Los legos estuvieron presentes a esto y a,todo lo que luego se siguió, pero ya no votaron.La votación fué oral pero secreta en un ángulode la iglesia ante el notario y testigos. Albertv°t6 por Otger. El Comendador y Vicario delNig, Fr. Nicolás Avinent, dió su voto y algunosIllás a Albert y otros cuatro a Otger, según indicación de sus podenlantes.Fr. Bernardo de Ripoll, Presbítero Comenda -,dór de Agramunt, con tres votos más eligió arr . Juan de Clarenciach, Comendador de Castellón. Los demás clérigos votan unánimemente alP. Albert.Llamado Fray Ponce de Banes al escrutinio,dijo que no quería ir ni tomar parte en la elece,ióncon los clérigos. Lo mismo respondió Frayredro García, Comendador de Sevilla, y todoslt°8 demás legos que fueron llamados por sus nomores.Llegóse, por fin, al recuento de los votos yProclamación del resultado que hizo Fr. Domingo°tger en estos términos:12

- 178 -« Consta, señores, que después de la muerte deFray Arnaldo Rusiñol fueron citados todos y cadauno de los frailes, tanto clérigos como legos, parael domingo 10 de Julio en Valencia, donde se juntarontodos, unos personalmente y algunos por S USprocuradores, reuniéndose en total ciento noventicincoentre clérigos y legos, que quisieron ypudieron tomar parte en la elección.»«Ir procediendo en el escrutinio de los votosse halló que ciento catorce clérigos y legos, convinieronen Fr. Ramón Albert; en mí Fray DomingoOtger, cinco; y en Fray .Juan de Clarelciach,cuatro; y los frailes legos, en número desetenta, no quisieron intervenir, a pesar de serrequeridos singular y nominalmente.»Proclamada la elección, todos los clérigos di ee-ron la obediencia al P. Albert, cantaron el «TDeum» y anunciaron al clero y pueblo allí reunidoel resultado, estando a todo presentes los l e-gos. Era esto sobre las nueve de la mañana.Poco después el Comendador del Olivar, FraPonce de Banes, en nombre de los demás legos,de quienes se decía compromisario, en la mismiglesia de Valencia proclamó general a Fr. B e-renguer de Ostolés, Comendador de Gerona, alque sentó en una silla del coro, dándole todos loslegos la obediencia con estas palabras: «Señor,vos sois el Maestre y os tenemos y recibimos PO'Maestre y como tal os hacemos obediencia», besándoleluego en la mano y en el pecho, conforni ea la costumbre militar.Protestaron los clérigos ante notario de esta- 179 —elección y ambos partidos nombraron sus procuradores en la Corte Romana. Después de muchas>diligencias y actas notariales, el domingo 7 deAgosto salieron de Valencia por la puerta de Serranoscon dirección a, Aviñón, el electo Fr. Ra-Inón Albert; Fr , Martín Sanz, Comendador deArguines, y Fr. Raimundo Cogombre, Conventualle Barcelona. No parece, sin embargo, que elP. Albert llegara a Aviñón, pues a fines de Agostodió nuevos poderes en Barcelona. Por la partede los legos, in fué procurador Fr. Ponce deàflesJuan XXII, después de oídas las partes, anulóa mbas elecciones, y con la plenitud de su potestadnombró Gefieral a Fr. Ramón Albert,;Aviñón el 5 de Enero de 1318. Por otra bula dela Misma fecha, comunica a la Orden su deci-510n mandando que todos reconozcan al nombra-4° Y anunciando que procederá enérgicamenteeontra los rebeldes. Felizmente no los hubo.No excluyó, sin embargo, a los legos de las'ignidades, antes por varias bulas de esos días,°Irclen6 que fueran mantenidos en sus encomienespecialmenteFr. Ponce de Banis, Fr. Benrenguerde Ostolés y demás jefes del partido.011 esa medida prudente y caritativa, tan ordinaen la Santa Sede, se evitaron las últimas'ifieultades y se enderezó a la Orden por el buencaMino.La Merced se había salvado de ruina casi ine\qtabley pudo cantar el Te Deuṃ más devoto ye'letnine de toda su historia.

— 181 —No es fácil sacar en limpio el número de frailesque tenía la Orden, pues varios aparecen conPocos días de diferencia en diversos lugares, perose Puede asegurar que no llegaban a trescientos.Pueron bastantes los que no tomaron parte en laelección dispuestos a acatar el resultado del ca--Pítulo, cualquiera que él fuese.Nuestro cronista, Fr. Nadal Gaver, dice queel P • Albert era doctor en Decretos o DerechoCanónico, pero en las actas nada se dice de eso,aunque se enumeran otras cualidades menos im-Port antes del electo. Pero era competente en esaY en otras materias. El P. Gazulla sospecha queera de origen francés, del condado de Foix y parientede dos Cardenales del mismo apellido, aJuzgar por sus armas. También el P. Otger debía2er de la misma tierra, a juzgar por los muchos'4tos que de allí le vinieron y por su apellido,q ue alguna vez escriben Augier.Gaver echa la culpa de la divisiónde la Ordena lo s castellanos, afirmando que Fray Ponce de13an 1 5 y Fray Berenguer de Ostolés lo eran; ¡cómo>ciega la pasión! El cronista quería hacer olvidar,duda, el origen de su nombramiento hechoPor los cismáticos de Basilea en abierta rebelióne"tra el legitimo Papa Eugenio IV.Juan XXII en la bula nombrando General aladre Albert dice que lo hace llevado principalillentepor la piadosa instancia de algunas sublilUespersonas, que serían probablemente el Rey'cle Aragón y su primo el de Mallorca, desenga-4aclos al fin de sus antiguas ideas.

— 182 —Este mismo año de 1318, a principios de Junio,celebró el Padre Albert capítulo provincialen Valencia, del que fueron definidores con losPadres Otger y Avinent, comendadores de Tarragonay del Puig, los legos Fray Berenguer deOstolés y Fray Guillen Esteve, comendadores dGerona y de Vich respectivamente (1). Se ve quelos clérigos comenzaban a trasladar los capítulosa Pentecostés, para asemejarse a las órdenesclericales, mientras los militares acostumbrabana reunirse el día de la Santa Cruz. Pronto seconvirtió en ley ese cambio.Juan XXII, al poner un clérigo al frente de la'Orden, no excluye la posibilidad de que los legosvolvieran a ocupar el magisterio. Pero el cambio'se imponía y el Padre Albert trató con buenacuerdo de consolidar lo que tanto esfuerzo hablacostado. En el capítulo general celebrado enCuenca por San Martín de 1319, se acordó ya,reducir a siete el número de electores del Gen e-ral a saber: El Prior de Barcelona, que sería V i-cario general en la vacante, con el fraile masantiguo del convento y cinco diputados por otrastantas provincias en que para ese sólo efecto Sedividió la Orden.« Establecemos y ordenamos (dice el decrete)por esta constitucion irrefragable y valederapara siempre que las dos provincias en que sedivide toda nuestra Orden para la celebracionde capitulos provinciales, desde ahora para la(1) A. H. N]. de Madrid: Clero, leg. 2.044.— 183 —eleeeion de Maestro sean cinco, a saber: una deCataluña, otra de los reinos de Aragon y Navarra; otra del reino de Valencia con lo que elseñor Rey de Aragon domina y posee en el reinode Murcia; otra de toda la Provenza, con lasc asas de nuestra Orden que ahora existen masallá del puerto de Panizars y en las islas deMallorca; otra de los reinos de Castilla y de Portugal».Tal vez contribuyó a fijar el número de sietela idea de que no eran más los electores del SacroII° 111ano Imperio y debían con más razón bastarPara una Orden pequeña. Sin embargo la Iglesiadeseó siempre que el número de electores nofuese muy reducido para impedir confabulaciones. Los mercedarios de Castilla eran entoncesPocos, aunque merecieran ya más que un voto;algunos años después la injusticia era demasiadoevidente para que se contentaran con tal representación., La provincia de Castilla y Portugal es llama-'la también provincia de España conforme a lacostumbre entonces frecuente en el extranjero,dende el Rey de España era el de Castilla. Locine el Sr. Rey de Aragón dominaba en Murciaeran las ciudades de Alicante, Elche, Orihuela,ete tera, desmembradas de Castilla no hacía mucho.Por ser la población de origen aragonés seuagregaron también a Valencia los conventos denrcia y Lorca hasta fines del siglo XV.d Más importante que la reducción del número'e electores es la cláusula en que se prescribe

e— 184 —que tanto ellos como el Maestro futuro «sean capacesde gobernar la Orden tanto en lo espiritualcomo en lo temporal», excluyendo así a loslegos de ambos cargos. Y todavía se llevó elrigor más adelante, pues declarado el magisteriodignidad eclesiástica, no se permitió a los legostomar parte en el nombramiento de electores porcada provincia.Como este cambio afectaba a todos los religiososse procuró tener el asentimiento de cadauno enviando el acta a todos los conventos, quela aceptaron sin resistencia. El capítulo provincialde Aragón, celebrado en Lérida el 5 de MaY0de 1320 aceptó igualmente los acuerdos de Cuencapor unanimidad. Entre los firmantes están losdos definidores legos Fray Francisco Zacosta YFray Ramón de Bompas, Fray Berenguer de Ostolés,Comendador de Gerona; Fray Guillermo E s -Leve, Comendador de Vich, Fray Miguel de Calatayud,Comendador de Tarazona, Fray Ponce doBanes, Comendador del Olivar, y otros varioslegos.Esto demuestra que no es cierto que los caballerosmercedarios despechados se pasaran a larecién fundada Orden de Montesa. Los más c a-racterizados permanecían en la Merced todavíaalgunos años después (1).(1) V. las actas de este capitulo en el apéndice VII delas de 1317, publicadas por mi. La aceptación del capitulede Cuenca por los diversos conventos se halla en elA. C. A. Monacales, t. 2679, fol. 280.— 185 —Durante los años siguientes Fray Ramón Albertse dedicó a compilar las constituciones dela Orden, acomodándolas a sus nuevas condiciones. Se ha dicho que estas constituciones estáncal cadas en las de la Orden de Predicadores. Enefecto, el P. Albert tomó de estas las normas generalesde vida religiosa, no expresadas en nuestras constituciones catalanas, y el cuadro de mat,crias, pero colocó en los capítulos respectivoslas leyes que la Merced venía observando desdeel siglo anterior, elaboradas en sus capítulos generales.Las constituciones albertinas son enInuchos casos mera traducción de las amerianas.Fuera del sistema electoral que en nada seParece al de los Predicadores, ningún cambioKlstancial se advierte en las nuevas constituci o-1,1es con respecto a las primitivas. Ni siquiera seIntro ducen los Provinciales en nuestro sistemacl , e gobierno, quedando todas las casas sujetaslurnediatamente al General, que podia nombrarisitadores o vicarios suyos en las diferentesl'egiones, como antes se practicaba.Para evitar que la Orden se encontrara nuncaSin cabeza, se dió a la comunidad de Barcelonael derecho de elegir su Prior o Comendador. Afalta de éste debía suplirle el religioso más anhtlguodel convento, y si ningún conventual de'arcelona se encontrase hábil, debería ocupar eleargo de Vicario general de la Orden el Comendadorde Tarragona. Ya veremos cómo la precauciónno fué excusada.Ei breviario y misal fueron tomados de los

e— 186 —predicadores, que habían logrado bastante uniformidadmerced a los esfuerzos del cuarto G e-neral Humberto deRomans, pues según ésteafirma, hasta entonces reinaba también la mayorvariedad en la Orden dominicaha. En realidadlos mercedarios no llegamos a la uniformidadhasta la adopción del breviario romano en elsiglo XVI. Las actas de visita de los anterioresconsignan con frecuencia que los breviarios encontradosen nuestras casas no eran según 13Orden, y lo mismo los misales.La forma del oficio divino se parecía muchoa la del romano actual. Los maitines constan deinvitatorio y tres nocturnos con tres salmos Yotras tantas lecciones con sus responsorios. Lashoras menores eran también semejantes a lasactuales. Un defecto grave presentaba, sin embargo,el breviario antiguo y era el contenerpoca Escritura y Santos Padres, pues la mayorparte de las lecciones son históricas o de invenciónpropia, justificando el reproche del PadreZumel, de que contenían no pocas ineptas sentencias.La mayor parte de los oficios eran simplesde tres lecciones, debiendo entonces rezarse eloficio de difuntos, además del oficio parvo de laVirgen, que se decía diariamente. En éste,camente, se rezaba el Ave María, cuya segundaparte era así: Santa María, Virgen y Madre deDios, ruega por nosotros pecadores. Amén.Las constituciones autorizaban al superiorlocal para variar el calendario, sin duda para— 187 —dar lugar a los oficios de las diferentes diócesisY ciudades. Entre los adoptados por toda la°rden, y que ciertamente no figuraban en elIno delo, se cuenta el de la Inmaculada Concepción.Acerca de la frecuencia de sacramentos haytambién un precepto que no tiene similar en laOrden dominicana hasta el siglo XVI: «Todos los-fr ailes no presbíteros confiesen, una vez a lase mana, o a más tardar cada rasura y reciban elsacramento de la comunión cada mes». (La rasuraera de quince en quince días en verano ycada tres semanas en invierno).En cambio nada hay en nuestras constitucionesreferente a los estudios, y hasta fines deliglo XV no tuvimos legislación propia sobreesta materia, siendo de iniciativa particularcuanto bueno se hizo.Otra de las cosas que no había en las constitUcionesdominicanas era la jubilación de los frailesde muchos años de vida religiosa. Por ellaqu edaba el jubilario exento de todos los trabajos3' vejaciones de la religión, o sea de las obser-\'-ancias y ministerios más penosos. Supongo quetal co stumbre fué tomada de algunos monjes, yell la Merced era disculpable por la vida arrastradaque llevaban los frailes, corriendo sin desallsode pueblo en pueblo.M enos disculpable era la permisión de pecuaunquela Orden no fuera mendicante o de'4 37 estrecha pobreza. Al final de las Constittiioneshace la distribución de las joyas y

— 188 —ropas que tuvieran los Comendadores y demásreligiosos a su fallecimiento, reservando la m i-tad a los Generales que de este modo llegarona reunir grandes riquezas, no siempre bienempleadas. El destino de estos espolios fué unade las causas de mayor disgusto en la provinciade Castilla desde el siglo XV y quizá deantes.Los Comendadores son los principales responsablesdel particularismo y contra ellos dirigenlas más agrias censuras los celosos de lavida común. Algún indicio de peculio existe yaen las Constituciones de 1272, pues se confiscauna de las cabalgaduras al Comendador que llevarados. Si no las considerasen como propias,nada les importaría el castigo. En las nuevasConstituciones se manda también que nadiecompre ni tenga caballo ni rocín que valga másde quince libras, debiendo ser las monturas sencillasy honestas, no pomposas.En esto, desgraciadamente, no andaban mejorlas Ordenes que habían comenzado por estrictapobreza (1). El lujo y el fausto mundanos suplíanen muchos superiores y eclesiásticos el prestigi°que debían dar la ciencia y la virtud. No hayque esperar a la peste negra de 1348 para ver alos Generales mendicantes rodeados de numere'rosos escuderos y palafreneros. Era difícil sus"traerse al contagio.— 189 —Otra cosa lamentable en las nuevas Constitucioneses el permitir que entrasen mujeres en losconventos para asistir a los enfermos, aunqueexigiendo que fueran honestas y no jóvenes.Malo era dejar la puerta abierta como en otrasórdenes.(1) Mortier: Histoire des Maitres Généraux des Fr.Précheurs. I, 644.

CAPITULO XILa Orden durante el gobierno del P. Albert(1318-1330)SIIMARIO: Su celo por la redención.—Celebración deCap ituloFr. Ramón Barbarroja en Africa. —Fundacionesen Castilla.—Asuntos del Puig.—San RamónNona to.—Priores de Barcelona.—Promülganse las nuevasCo nstituciones.—Algunos preceptos de ellas.Nuestros cronistas antiguos, comenzando porC+aver, elogian calurosamente al P. Albert y sucelo por los ministerios de la Orden. El estudiodeta llado de sus actos confirma esa impresión,demostrando que no era la ambición personalcillien le sostenía en las luchas pasadas, sino un4rcliente deseo de la conservación de la Orden yde ha cerla más útil a la sociedad cristiana.?ara esto era preciso en primer lugar evitar'Gs gastos superfluos, y el P. Albert llegó en esteresPecto a los mayores sacrificios. En el Capítulode 1 317 había pedido repetidas veces a los legosle ac ataran el acuerdo de la mayoría, pues de'`) cont rario se seguirían gastos inútiles en daño121 41 earloesstproebehreas ecuaeunttiav.os, y que de ello habrían deLa Orden, con sus numerosos privilegiosaPost ólicos y la continua intervención del Papa

— 192 --y del Rey en sus cosas, había alcanzado de hechouna verdadera exención de los Obispos. Tal situaciónera indudablemente muy honrosa y ventajosa,pero ocasionaba frecuentes viajes a la CuriaRomana con los dispendios consiguientes.vista de ello, Albert propuso en el Capítulo de1320 que los Generales futuros sólo pidieran laconfirmación del Ordinario, renunciando a obtenerla de Roma, «pues la Orden no es exenta nien su cabeza ni en sus miembros». ¡Es adondepodía llegar el afán de economías!Tal acuerdo, sin embargo, no pudo arraigarpor la oposición de la Curia Romana desde 1338,y aunque se mantenía en las constitucione s aprincipios del siglo XV, y fué invocado entoneeSpor el Obispo de Barcelona, sólo se aplicó alsucesor inmediato del P. Albert.En 1319 hizo éste numerosas copias legaliza'das de nuestras bulas más importantes, a fin deque los religiosos que sanan a pedir limosnaspudiesen mostrarlas al pueblo y obtener así sucooperación a tan santa obra. Llevaban tambiéncopia de los privilegios reales, sobre todoAragón, del de la concesión del escudo, que n°era un mero honor, pues llevaba aneja la esa"•ción de derechos de entrada y salida, peaje, Portazgo, etc., que hemos visto concedida tambi611en Castilla.A las bulas acompaña una alocución del P a-dre Albert, que es la expresión más conmo Vedorade su corazón:« ;Condoleos, hermanos! ¡Conmuévase— 193 —triSternente cristi vuestro corazón ante el daño de laherandad, por falta del necesario auxilio! Ved,manos, a esta Orden de San Agustín queIntlere de dolor y vergüenza contemplando cómoel ba utismo y la predicación de la fe son olvida -3s y los ejercicios de la vida cristiana se hacen'Posibles allende el mar. Oid, hermanos, la vozdel Señor...»Hace luego un breve resumen de todas lasgracias concedidas a la Orden y a sus bienhechorePor los Sumos Pontífices hasta BenedictoY admite a los cooperadores a participar en todaslas o bras buenas de la religión, misas, maitines,aYtillos y en las aflicciones de la redención decautivos (1).Todo era necesario para reavivar el fuego de'a caridad. El siglo XIV fué poco favorable a larede nción de cautivos. Los Estados cristianos,3:4 n o muy ricos, acabaron de arruinarse conias guerra; continuas. Lo extraño es que enIs inecli ouueno.de tantos desastres pudiera hacerse algoA la disminución de las limosnas pudo contritambiénla supresión de los cuestores segla-1;„,e hecha por el Concilio de Viena en 1309. Los.(4'13as solían declarar nulas sus concesiones delinclulgencias si en su predicación interveníanrilD cuestores. La peste que sobrevino a media-?. s de siglo debió hacer notar más su falta, alluinuir el personal de la Orden, pero la protes---(1) M adrid: Bib. NI., núm. 6.140, fol. 22.13

- 194 —ta contra los cuestores y sus abusos era generalen la Iglesia. Sin embargo, vuelven a apareceren nuestros documentos, aunque limitados alugar o parroquia, donde a veces eran como tesorerosde la Cofradía de la Merced.Las limosnas debían presentarse anualmenteal Capítulo general o provincial, cuyo funcion a-miento era igual que en la época anterior, salvoen un detalle: la elección de los cuatro definid o-res no la hacía el Maestro con asentimiento detodo el Capítulo, sino con los cuatro definidoressalientes, pues el Padre Albert había concebidohorror a las votaciones numerosas. Sólo en elnombramiento de elector general tomaban partetodos los votos de la provincia respectiva.He aquí lo que las Constituciones nuevasdisponen acerca del Capítulo: «Establecemos quetodos los arios en cada uno de los capítulos provinciales,tanto de la provincia de Cataluñacomo de toda España, hecha la recomendaciffilde los vivos, inmediatamente antes de procedera otra cosa, el Maestro de la Orden, o su Vicari°2si el Maestro estuviere ausente, con los cuatrodefinidores del capítulo del ario próximo pasado,se retraiga a un lado, y separadamente en lugarsecreto elijan en definidores del presente Capitlo a cuatro de los frailes presentes en él entrelos más discretos e idóneos, y no de los mismossalientes».Los nuevos con el General nombraban proa"radores encargados de proveer lo necesario, recibiendode cada uno de los presentes una dobl3- 195 —de oro, o veinte sueldos barceloneses, conformeal uso primitivo de la Orden.«Nombrados estos Procuradores, cada uno del Os Comendadores ponga a los pies del Maestroel sello y el título o procuración de su encomienda, estando sentados los definidores, dos a la derechay otros dos a la izquierda del Maestro. Ydepuestos ya los sellos y las encomiendas, cadalino dé cuenta de la encomienda que había tenido, ordenada y detalladamente.», Claro es, que esta cuenta se refería particu-'anuente a las limosnas de la redención y, conf°rniea las Constituciones primeras, debían darPor escrito nota del dinero que hubieran prestadoID tomado a crédito, y de cualquier manda quehubieran recibido por razón de algún cautivo particular, a fin de que esta cantidad sea entregadaal fraile que vaya a aquella tierra en donde estasnlandas deben cumplirse.Generalmente al recibir una limosna paraeau tivos determinados, la Orden se obligaba adevolverla si el cautivo no aparecía o era impo-'sible redimirlo, y si la limosna perecía por serasal tados o muertos los redentores, la Merced seObligaba a devolverla con hipoteca de todos susbienes . La condición era dura, pero inevitable,nuestra Orden, como la trinitaria, pasó a causacle ella trances amarguísimos, viéndose obligadaai vender sus bienes, después de haber perdido aosredentores, cautivados o muertos por losPiratas.Cuando el Capitulo era general, o sea cada

—2ul— 196 —tercer año, elegíanse también los cuatro definldoresen la provincia donde se celebraba, y aunqueasistían dos más de la obra, éstos no tornabanparte sino en los asuntos generales que interesabana toda la Orden, reservando los nombramientosde Comendadores y demás referentes ala provincia para el General y los definidoresde ella.Atrás hicimos mención de Fray Ramón Barbarrojaque estaba en Marruecos recogiendo l i-mosnas para la redención y agenciando, sin duda,la de algunos cautivos. Fray Ramón había muertoen Diciembre de 1320 y Jaime II escribe alObispo de Marruecos, ordenándole entregue loscaballos, doblas de oro y demás objetos del di-funto al Procurador, enviado por Fray RamónAlbert, «pues no es decente ni razonable que laScosas que pertenecen a dicha Orden de la Mercedde los cautivos y se emplean en redimirlos, seanretenidas por alguien en su poder y se nieguena entregarlas a la orden sobredicha» (1). Otracarta semejante lud enviada en la misma fechaa Pedro Eximenez de Spilonga, alcaide de lamilicia cristiana en Marruecos, complicado en elmismo asunto.Este documento y otros semejantes arrojanmucha luz sobre las relaciones de los reyes africanoscon los estados cristianos. El estado deanarquía en que vivían ordinariamente los nul-(1) Gazulla en el Boletín de la Orden, año 1928, paei -na 149.— 197manes de Africa, obligaba a sus reyes a procurarse tropas cristianas que eran su mejor apo-YO . Los reyes de Aragón y de Castilla solían venderMil muy caro ese favor, y a la sombra de lasicias iban al Africa muchos otros cristianos,8°bre todo comerciantes, que vivían en las principalesciudades, pero en barrios separados y a\Tece s amurallados, bajo el gobierno de sus'cón sules (1). Esto facilitaba no poco las redenciones.El Reverendísimo Albert vió aumentada coniclerablemente la Orden. En 1321 aparece dee°Mendador del convento de Huete Fray GarcíaLóPez, que ' sin duda fué el primero y duró en el'cargo hasta 1341. Este convento alcanzó luegoInucha importancia y de él salieron numerososIlisioneros para América (2). También se fundóPor estos años, al parecer, el convento de Olmeenla diócesis de Avila, con una capilla yvie nes donados por la familia Troche, en la cualSe co nservó el patronato (3).El célebre almirante Roger de Laura, señor'cle la Baronia del Puig, comenzó a principios deligió la construcción de una nueva iglesia paraaquel santuario mariano, continuada después dercl. ,1 M uerte por su hija D. » Margarita de Laura,'''°ndesa de Terranova, que años adelante se4 (1) Ramos y Loseertales: El Cautiverio en la Coronae Ara gón, Zaragoza 1915.(2) Talamanco en el Ms. 2.448 de la B. NI. de Madrid.‘3) Ms. 2.441 de la misma biblioteca.

— 198 —Convento del Puig.—Sepulcro de D. Margarita de Lauria.mandó enterrar allí con su marido D. Nicolás deJamvilla.' En cambio tuvo que sufrir el convento del,Puig una grave contrariedad: habían tomadoel hábito cuatro hermanos apellidados Ricart'— 199 —hil os de un jurisconsulto distinguido, aportandobienes considerables, pero andando el tiempo, sevieron comprometidos por una fianza prestadaPor el padre, por la cual hubo de pagar el convento26.000 sueldos, suma considerable paraentonces, de la que Jaime II rebajó 11.000 acesta del erario real, llevado de su devoción alsantuario del Puig, al que hizo también otrosdonativos considerables. Era esto en 1321 (1).se mismo año pagó el P. Albert los 15.00021-leidos restantes (2).Conforme a la nueva Constitución, cada provinciadebía nombrar su elector que la representaraen caso de faltar el Maestro general. LaProvincia de Aragón y Navarra, el 19 de Mayode 1323, nombró elector suyo a Fray Gonzalo deTeruel, Comendador de Sarrión, y la de Valenreunidaen el Puig el 7 de Mayo de 1324,eligió representante a Fray Domingo Otger,endador entonces de Játiba, que había desem-Peflado tan importante papel en el Capítulo de1317 . Nombró además subelector, para sustituiren caso necesario al primero, a Fray Martín8anz, Comendador de Arguines (3).Uno de los votantes es Fray Vicente Riera,que ya para entonces era Vicario o Cura de laParroquia del Puig, cargo en el que permanecióhasta su elevación al generalato en 1343, y queera uno de los más importantes de la Orden.(1) Gazulla: El Puig de Santa Maria, pág. 57.(2) Notas del P. Dempére, fol. 135.(3) A. C. A. Monacales, t. 2.679, fol. 78.

— 200 —Otro de los asistentes a aquella reunión esFray Ramón Salón, o Surrons, que según los cr o-nistas antiguos es el futuro San Ramón Nonato.Los autores del documento de los Sellos, ign o-rando la verdadera tradición de los conventosdonde el Santo había vivido y la documentacióna él referente, guiados por vagas expresiones deZumel, hicieron a San Ramón contemporáneo deSan Pedro Nolasco, pero el P. Antillon, que c o-noció aquel engendro, sostuvo la verdad e informóde ella al P. Vargas, a lo que se deduce de laChronica de éste (1).Con esos autores está el P. Guimerán, pueshabla del Santo en el generalato del P. Albert, yaunque no repara mucho en cronología, al referirel Viático milagroso de San Ramón, sospechaque «quien le trajo el Santísimo Sacramentofuese nuestro Santo Padre o algún otro señaladosanto» (2).Según los códices antiguos citados por esosautores y la tradición viva en su tiempo, SanRamón floreció en los generalatos de Fray Alberty de Fray Berenguer Cantull. Vino al mundo enPortell, que pertenecía entonces a la abadía deSolsona, erigida mucho después en Obispado.Sabido es el origen del sobrenombre de Nonato,con que es conocido por haber sido extraído delseno de su madre recién fallecida. El, sin embar-(1) Antillon: Vidas de San Pedro Nolasco y de SanRamón Nonato, Ms. en la Universidad de Valencia.(2) Breve Historia, pág. 270.Martirio de San Ramón Nonato.(Cu adro de Vicente Carducho, hoy en la Parroquial deSan Jerónimo de Madrid.)

— 202 —go, no usó tal apellido, sino el paterno, que liemosvisto. Vistió el hábito en el priorato mere e-dario de San Nicolás de Portell, que perteneciaal convenio de Barcelona.Después de referir su asistencia al capítulodel Puig, añade el P. Antillon: «Doce años nlästarde, o sea el de 1335, estuvo el Santo de peenidoren el Capítulo provincial celebrado en LA'rida el 6 de Mayo de dicho año, siendo GeneralFray Berengario Cantull. Allí le nombraron re'dentor y en esta ocasión fué cuando padeció Clmartirio del candado en la boca y otros torme n-tos», con que los moros castigaron sus desacatosa Mahoma, seguramente en Argel, adonde solíandirigirse los redentores de Aragón.Fray Ramón Salón es uno de los electores delGeneral Fray Vicente Riera en la primavera de1344, según la bula, de confirmación expedida el9 de Agosto de aquel año (1). El apellido Surronscitado por Vargas y Antillon es, sin duda, malalectura de Salonis, que aparece en los doetymentos.Poco después, según la tradición, el Papaquiso crearlo Cardenal, y cuando se dirigí a 3Aviñón, falleció santamente en el castillo deCardona, de donde sus restos fueron llevad os 3Portell.Los milagros que Dios obró por su intercesiónhicieron que el antiguo priorato de San Nicolse llamara ya en el siglo XV de San Ramón'(1) Reg. Vat. 163, fol. 44.— 203 —urbano VIII extendió a toda la Iglesia en 1628el culto que se le tributaba en Cataluña y en todala Orden de la Merced.Menos agradable es otro suceso que nos revelaUn documento de 1325: el Comendador de Arguin'esFray Martín Sanz, se presenta ante el Colnendadorde Valencia y se niega a comparecerante el General de la Orden, al que recusa porenemigo suyo capital. El P. Sanz no debíaYa niño, pues figura mucho en los documentosde principios de siglo como partidario delgeneral lego (1).Cuando el P. Albert se vió afianzado en eigeneralato, dejó el cargo de Prior de Barcelona,siendo elegido para sucederle el P. Guillermo4uerau (en latín Giraldus), que era Vicario delConvento en 1317, y que con los demás de laComunidad no asistió al capitulo de Valencia.«Para evitar que el culto divino disminuyese enla dicha casa de Santa María de la Merced»,Prueba de la 'importancia que había alcanzadoYa la devoción a Nuestra Señora de la Merced,aunqu e bastante lo indicaba ya el pleito movidoPor el Párroco de San Justo años atrás.En 1324, el P. Guerau pasó a la encomiendad'e Mallorca, sucediéndole en el Priorato Fraylere nguer Cantull, que en 1317 era Subdiácono.3' conventual de Castellón de Ampurias, trasladadoluego a Barcelona. Gaver asegura que fuélbestro en Teología y a su cultura debió proba-(1 ) A. C. A. Monacales, t. 2.679, fol. 78.

— 204 —blemente su rápido encumbramiento. El C onventode Barcelona le debió considerables aumen'tos y la adquisición de varias casas en la manz a-na donde hoy está la iglesia.El General celebró por estos años los Capíttllosreglamentarios, entre ellos el de 1324, general,en el Puig, siempre con la mira de aumentarla eficacia de la Orden en bien de los cautivos Yde la Iglesia. La impresión que se deduce delCapítulo de 1317 es que el escaso personal de 13Orden estaba abrumado de trabajo, pues uno edos religiosos habían de recoger las limosnas deun Obispado entero o de dos, como Fray Juan deRoa, Procurador en los de León y Astorga.Con las reformas y el ejemplo del P. Albert,se aumentó aún más el ansia de mejores resul tados,y pudo ya decirse de los Mercedarios lo queaños adelante aparece como refrán en Castilla:«Los frailes de la Merced son pocos, mas hácenlebien» (1).En los capítulos se fueron precisando tambiénlas nuevas Constituciones, cuya redacción finalse aprobó en el general de Agramunt (Lérida) el3 de Junio de 1327.Dada su brevedad, pudo con razón el P. Albertexigir que se leyesen «frecuentísimamente,de modo que la mayor parte se recorriese cadasemana», asegurando de ese modo su eficacia.Dudo que tal efecto pueda conseguirse con la(1) V. La Merced, año 1927, pág. 64.— 205 —•Lleettira anual impuesta más tarde, cuando elLextose hizo largo y pesado.Llámanse ya en ellas responsiones a las canti -aportadas por cada Comendador para larede nción de cautivos, pero no hay prueba de" e se hubiera señalado a los Conventos un tantahalzaclo que debieran entregar en todo caso. Esa'111-blera equivalido a arrendar las limosnas deIlna b ailía, cosa prohibida en las Constitucionesfde 127 2. Con todo, más tarde se llegó a ese sis-'ella , Para obligar a los religiosos a hacer algo,a Pe sar de las circunstancias desfavorables, peroen Ca stilla no quisieron adoptarlo nunca.Regúlase también en las Constituciones lalla nera de entregarse en rehenes los redentores,eritlando el caso lo requiriese, previa aprobación‘4el General y de los definidores.El P . Albert da muy acertadas reglas a losi'redic adores de la redención, ordenándoles «queell to das sus palabras se conduzcan con madurezdebi da mesura, no levantando la cara al cieloagi tando los brazos, a fin de no escandalizara 105 re ligiosos ni a los clérigos, sino que procu-1:len h ablar con tal prudencia, discreción y ver-Y guardar tal moderación y sobriedad en'ellc's y hechos, que nadie tenga que reprenderen ellos».Por vez primera se fijó entre nosotros la prehldeneia en los asientos, por antigüedad en el1.1,4blto . De títulos honoríficos nada se dice felizente,pero al General continuó llamándoseleco nforme a la costumbre antigua, subsis-

•- 206 -tiendo el título de señoría hasta fines del sigloXVI.El P. Ramón Albert falleció santamente ellValencia el 18 de Noviembre de 1330, y tres añosdespués fueron trasladados sus restos al Puig,donde descansan en una arqueta levantada delsuelo conforme a la costumbre regional. Nuestroscronistas le colman de elegías y le llaman beat°y santo.CAPITULO XIIGeneralatos de Fray Berenguer Cantull,• ra Y Vicente Riera y Fray Domingo Serrano(1331-1348)SIT M ARIO: Elección del P. Cantull. -Fundación de Bonaria.-FrayBonanato de Prexana. -Privilegios en Castilla.-Reclaman las Cortes de Alcalá y son revocadosalg unos. - Pleito en Aviñón sobre la confirmación delos Generales.-Viaje del General a la Curia en 1343.-M uere en Barcelona. Sucédele el P. Riera.- CargosPrincipales en la Orden.-Doña Margarita de Laura.-Ei Dr. Fray Domingo Serrano, nombrado en 1345.-Fun dación de Algeciras. -Importancia del conventode Montpeller.Lápida sepulcral del P. Raimundo Albert, en el Puig.(Foto Gazulla.)• Cuatro días después de la muerte del P. Al-• t, el 22 de Noviembre, el Prior de Barcelona1, 37 Vicario General de la Orden P. Cantull, que'labia asistido al funeral y quizá a la enfermedad,Pidió en Valencia la convocatoria para nuevadeleeeión que debía celebrarse en Barcelona el 27e Enero de 1331 (1330 según la cuenta de entonees).Firman el documento Fray Pedro de Aguidie, Fray Pedro de Rocalaura, Fray Berenguer .13rats y otros religiosos muy conocidos des-1'4s del C ' apitulo de 1317 (1).(1) A. C. A. Monacales, t. 2.679, fol. 110.

— 208 —Se aplicaba por vez primera la Constituciónde 1320 con los siete electores ideados por elP. Albert, y así tomaron parte en la elecciónademás del Prior de Barcelona, presidente, otrosseis religiosos, a saber:Fray Pedro García, por Castilla; Fray RamónCogombre; Fray Francisco Magraner; Fray B ernardode Villamorell; Fray Esteban de Pina YFray Bartolome Cogombre, Comendador de Perpifránpor la Provenza, los cuales, como por in s-piración divina, aclamaron General al P. Cantull(1). Después hemos de ver repetida la escena'muchas veces, aunque no a gusto de todos.Conforme a la Constitución de 1320, el elect°pidió la confirmación del Obispo de Barcelona,Pons de Gualba, grande amigo de la Merced,quien la otorgó el 12 de Febrero, evitando así elacudir a la Curia romana. Pronto veremos quela evasiva no prosperó.El cargo de Prior de Barcelona que dejaba elelecto, fue provisto por elección en Fr. Doming°Otger, digno de ese y aun de mas alto destino.El nuevo General, una vez confirmado, c elebrósu primer Capítulo en Barcelona el día dePentecostés de 1331. En él debió nombrarseredentor a Fr. Juan de Capdevila, Comendadorde Gerona, que estaba en Granada en 1332, porcuyo motivo el General nombró Vicario del conventoa Fr. Berenguer Rosell (2).(1) Vaticano: Reg. Vat. 129, fol. 319.(2) A. C. A. Monacales, t. 2.676, fol. 193.— 209 —En Mayo de 1333 trasladó al Puig los restosde su antecesor, del que se declara hijo, sinduda por haber recibido el hábito de sus manosY deberle la primera formación religiosa. El epitatiO dice así:Año del Señor 1330 a 19 de Noviembre fallecióel Padre Fray Raimundo, primer Maestro clérigo dela Orden, y el año del Señor 1333 a 25 de Mayo elPadre Fray Berenguer, hijo y sucesor de él trasladó84 cuerpo a la casa de la Bienaventurada VirgenIlíctria del Puig... (1).Tuvo el P. Cantull la satisfacción de vere(tendida la Orden a la isla de Cerdeña, pertenecienteahora a la corona de Aragón, recibiendode Alfonso IV la iglesia de Bonaria, que los milagrosde la Santísima Virgen transformaron¡llego en célebre santuario. La donación lleva lafecha de 16 de Octubre de 1335, pero habiendoIniterto el Rey poco después, hubo de ser despachadapor su hijo y sucesor Pedro IV (2).Tenía entonces la iglesia de Bonaria el clérigoGuillermo Jordá, no obstante lo cual deberíanestablecerse allí dos mercedarios sacerdotes,Y seis des' pues de la muerte o cesión del propietario• Estaba inmediata al castillo de Cagliari yen el lugar donde Don Alfonso había tenido susreales para la toma de la capital. En las actascapitulares se llama al Superior de Bonaria Prior(1) Gazulla: en el Boletin de la Orden de 1927, pág. 96.(2) Ribera: Patronato, pág. 52 y por extenso en Vargas:Chronica, I, 158.14

— 210 —del castillo de Cagliari. La iglesia era parro -quial.Arriba hemos mencionado el Capitulo provincialde Lérida en 1335, donde fué definidor SanRamón Nonato. Conocemos también otros varios,cuyos definidores enumera Gaver. En el provincialde Santa Coloma, el 8 de Julio de 1337, aparecede primer definidor Fr. Bonanato de PreNana,que habla sucedido el año anterior, a Fr. D o-mingo Otger en el priorato de Barcelona. FrayBonanato estaba nombrado Comendador de • SanPedro de los Griegos (cerca del Olivar) en 1317,aunque le disputaba el cargo, que era de lo mäspobre de la Orden, otro Comendador lego. Debíaser entonces muy joven, pues desempeñó cuarentay un arios el priorato de Barcelona con adm i-rable abnegación y acierto. Gaver dice con razónque no se encontró semejante a él en procurar elbien de la casa.En 1338 el Comendador de Valladolid obtuvode Alfonso XI de Castilla plena confirmación detodos los privilegios concedidos a la Merced porsus antepasados, para vencer la resistencia quemuchos oponían a la redención:« Sepades que Fray Juan de Sevilla, de la'Orden de Santa Olalla de Barcelona, e Comendadorde las casas que la dicha Orden ha en Valladolid,se nos querelló e dice que algunos honlesque andan en las demandas ultramarinas e elllas otras demandas, e otros homes algunos queles fazen fuerzas e tuerto e que les prenden losfrailes e sus mensageros sin razon e sin dereelie;— 211 —'e qu e Si esto asi pasase no podrian haver ningunaCosa para sacar cautivos de tierra de moros, een esto que reciben grande agraviamiento, e lesP48an contra las mercedes que han de los reyes"de Nos venimos e confirmadas por nos despuesde las cortes de Madrid acá; e pidionos por mer-Leed. que mandásemos y lo que toviesemos poruien.»«Porque vos mandamos vista esta nuestrae ar ta, que veades los privilegios e las mercedeselle ellos han de los reyes onde Nos venimos econfirmados de Nos despues de las cortes de Madridacá, e guardädgelos e cumplídgelos en todo,que en ellos se contiene e les fueron guar-`44clos hasta aqui, e non consintades a ningunoa ningunos, que les embarguen la su demandaen ninguna cosa de lo que a ellos perteneve,e°1110 se contiene en los dichos previlegios. E"1-1 fagades ende al,, so pena de la nuestra merede cien maravedis de la moneda nueva aeacla uno de vos... Dada en Valladolid a dieci-°ello dias de Marzo, Era de mil e trezientos eetenta e seis años...»Algunos de esos privilegios eran, sin embar-4'1), exor bitantes y contra ellos reclamaron lasbelebres cortes de Alcalá en 1348, obligando al'e37 a limitarlos en la siguiente forma:"Porque acaesce que los procuradores de lasZṙclenes de la Trenidad e Santa Olalla e de lasra O rdenes, diciendo tener cartas e previle-Ode los Reyes nuestros predecessores e de la-tictra Chancillería, se entremeten a apremiar e

— 212 —constreñir a los nuestros súbditos e naturalegvassallos que les muestren los testamentos de les"finados, e mostrados, demandan los legatosmandas que son fechos a logares non ciertos/que dicen que les perteneçe,E otrosí, si en el testamento non manda elfinado a las dichas Ordenes cosa alguna, dice')que les perteneçe la quantia de la mayor manda'del dicho testamento;E asi mesmo si algunos mueren sin testarnelrto que les perteneçen los bienes del difunto, enon a los herederos: e porque desto se han segui"do muchos daños e cohechos;Revocamos los previlegios e cartas que sobreesta razon son dadas a las dichas Ordenes. peraque si las dichas Ordenes de la Trenidad o d e 13Merced mostraren los tales previllejos, aque1l0declararnos e interpretamos que se entienda quelos Reyes pudieron dar lo que perteneciese a sucámara o fisco, e no en otra manera.E mandamos que si el difunto dispuso en suvida que fuesen esclusas las dichas Ordenes efrailes, que aun en tal caso non ayan lugar les'previlegios que mostraren. E defendemos qu e lo:conservadores, desto non se entrometan; ninlegos nori sean escrivanos nin procuradore s delas tales causas.»«Mandamos que los questores e demandad°resde las demandas ultramarinas e otras quale s-quiera, por virtud de nuestras cartas que teng311de nuestra Chancilleria, non puedan aprernigl'los pueblos, nin los obligar para que apremiac13-— 213Inente vayan a oyr los sermones, nin los haganPara ello detener, porque pierdan sus labores yfaziendas. E revocamos las cartas que sobre.ello son dadas. E si algunas parecieren, que nonvalan» (1).Estas reclamaciones demuestran hasta quéPunto intolerable se habían llevado a veces lostales privilegios. Con todo, quedaba en pie lolilas importante de ellos, y el concepto de que laredención de cautivos era una manda forzosa,Para la que todo cristiano debía dejar algo, searraig oi en la , conciencia del pueblo. Otras de las'läu sulas revocadas volvieron otra vez a ser'pu estas en vigor, con intervalos, salvo aquella{lile destinaba a la redención el quinto de los bieilesde los fallecidos sin lenguas, o ab intestato,PUes era una enormidad.b Por Julio de 1338, se hallaba el General en- ,111 '3 por asuntos de la Orden o tal vez para13btener el grado de Maestro en Teología, quesegún Gaver, y que no ostentaba hasta-itera. Tal grado no se confería en España ni siqtlieraen Tolosa hasta fines de aquel siglo.A nenediet0 XII manda al Prior de San Eloy, al'reediano de Brie y al Chantre de París que em-Placen al General de la Merced, Fray Berenguer,Para que en el término de un mes comparezcaPersonalmente ante el Papa (2).40(1) Torno estos textos del Ordenamiento que hizo el¡o ctor Alonso Díaz de Montalvo, Oidor de la Audiencia de( eYes Católicos...Reg. Vat. 126, fol. 4.

— 214 —Un poco debió sorprender al P. Cantullemplazamiento, pues había estado seguramenteen la Curia repetidas veces, y una de ellas en1336, llevando fondos del nuevo Obispo de Bar"celona Fray Ferrer de Abella (1).Una bula de 1341 nos explica todo lo sucedido:pretendían los curiales que el General no seescapara de pagar la media annata, que estaba'calculada en cien libras barcelonesas. Para ellaafirmaban que la Merced no tenía derecho a elegirseGeneral o por lo menos que la confirmaciónpertenecía a la Santa Sede y no al Obispo de B arcelona.El P. Cantull, basándose en razones evidentes,sostuvo la legitimidad de su elección, pero alcabo de tres años, cansado de tanta porfía, renuncióel cargo en manos del Papa. Por fin, el 12de Noviembre de 1341, Benedicto XII expide unabula en que después de contar todo lo sueedidedesde la muerte del P. Albert y reconociendo queel P. Cantull había gobernado bien y fielmente.(rite et fideliter) acepta su dimisión y le nombra denuevo General (2).A esa bula acompañan otras dos, dirigidn'suna a la Orden y otra al Obispo de Barcelona, enque les participa el nombramiento del Genera l Yles ordena que lo reciban por tal.El Maestro Fray Berenguer celebró Capítulo(1) Göller: Die Einnahmen der Apostolische Kammer."'pág. 54 (Paderborn, 1920).(2) Reg. Vat. 129, fol. 319.Inlagen de la Merced en la portería del convento de Barcelona,construida en 1343, aunque el grupo debió ser renovado

, osas indulgencias para los que contribuyeran ala obra. Es seguro que el Procurador fué el mis-112° Fray Bonanato, pues obtuvo a la vez in-"Ilige ncias para sí y otros devotos y allegadosstlYos.E staba en Montpeller el 26 de Septiembre deaquel año, figurando corno testigo en una escrituraoto rgada por el General, aceptando la funiClaeiönde una capellanía fundada en nuestra4g;lesia por el presbítero Raimundo de Vulganhiels, Para que la sirviera un mercedario (1).La petición hecha a la Santa Sede está conebida, en los siguientes términos, que indican lafgrall devoción que a la Virgen de la, Merced proesabaya Barcelona:" Suplican a Vuestra Santidad los devotísimos°l'adores vuestros el Maestro y los frailes de Sanla María de la Merced de los cautivos, que comoInisma Orden haya tenido su origen en la ciu-T;acl de Barcelona, y la casa situada en la mismaed41clad sea la principal y cabeza de la dicha Or-"en , d onde la bienaventurada Virgen por la de-:°e1611 de los fieles obra muchos milagros, y los„—isttlos Maestro y frailes hayan comenzado a'911struir en la dicha ciudad una iglesia bajo eltitMO de la bienaventurada Virgen con obra muy%Untuosa, y para continuar dicha obra tanto en la(„4'beza como en los pies de la dicha iglesia, net-aes4itencomprar casas a ella contiguas que cos-.

— 218 —cabo esto son conocidamente insuficientes lasrentas de dicha Orden que consisten pOr su 'ala"yor parte en las limosnas de los fieles, sobre lascuales pesa la obligación de redimir cautivos, Yen la iglesia comenzada se hace todos los díasespecial Memoria por la, feliz conservación deV. Sd.»« Para que el culto divino se aumente allícontinuamente suplican humilde y devotamenteque a cinco personas que en dicha iglesia haganconstruir una arcada completa, que generalm entecostará hasta doscientos florines de oro, y aotras cinco personas que para ensanchar dichaiglesia y para comprar el solar y casas dichasdieren la limosna de doscientos florines, el priorde la dicha casa que es o por tiempo fuere, unasola vez en el articulo de la muerte les puedaconceder con autoridad apostólica plena remisionde todos sus pecados, de que estuvieren verdaderamentearrepentidos y confesados, lo cualV. Sd. se dignará conceder generosamente,•segansu acostumbrada clemencia».A ésta y a otras varias peticiones se puso elfiat en 17 de Octubre de 1343 (1).Algunos días después, el 4 de Diciembre de1343, fallecía en Barcelona el Maestro Cantull, alos trece años de gobierno, siendo sepultado enla capilla de San Eloy de nuestro convento. Filétanta su fama, añade Gaver, que le reputarondigno de un obispado, aunque murió antes de(1) «La Merced» de 1923, pág. 13.— 219 —obtener la confirmación. Si estuvo electo, sinettibargo, no seria de Barcelona, que no aparecevacante hasta el 21 de Diciembre de1344 (1).Unos dos meses más tarde reuniéronse enBarcelona los siete electores, que eran: El PriorPraY Bonanato de Prexana, Fray Guillermo Cullerer,Fray Guillermo Isern, Fray Bernardo deVilla morell, Fray Pedro Berenguer y Fray RamónSalón, los cuales' eligieron unánimemente al Vicariodel Puig Fray Vicente Riera, que ya en1317 era Comendador de la diócesis de Valencia,es decir, procurador de la limosna fuera de laciudad.La elección fué presentada a la Santa Sede.1,). or el Comendador de Tolosa Fray Guillermo'sern a nombre de Pedro IV de Aragón, por te-111°r de que el Papa, aprovechando cualquierrTeserva de las entonces usadas, nombrase a otro.I,a reserva existía realmente, pero el Papa, sinreconocer la elección hecha por la Orden nombró232'erio motu al mismo P. Riera. La bula lleva lafecha de 10 de Agosto de 1344, pero la confirmaciónfué el 24 de Marzo.Ei Rey pidió también y obtuvo la vicaría delUlg que dejaba el electo para Fray Domingoans o Serrano, Doctor en Decretos, Comenda-"r entonces de Perpirián. El Procurador por suParte obtuvo el cambio de su encomienda de To-(1 ) Eubel Hierarehia Cath... El Obispado de Barcelonase diö el 12 de Enero de 1345 al Obispo de Huesca.

— 220 —losa por la de Perpiñán, que dejaba Fray Domgo (1).Como se ve, los puestos más estimados enOrden después del generalato eran el prioratoBarcelona y la vicaría del Puig. La encomiende Perpiñán tenía aficionados en Francia y laSevilla en Castilla.n-ladodadeEl nuevo G-eneral celebró su primer capítuloen Barcelona el día de Pentecostés de 1344, pür°no llegó a celebrar el segundo, pues falleció el25 de Marzo del año siguiente.Tocóle durante su breve gobierno aceptar lasespléndidas fundaciones ordenadas por la Coi'desa de Terranova. Doña Margarita de Lau n ahabía hecho testamento en 1341, por el que mi 11-daba enterrarse en el monasterio cistercienseSantas Creus, al lado de su padre el AlmiranteRoger, pero habiendo su marido el Conde 119 onNicolás de Jamvilla escogido sepultura en nuestraiglesia del Puig, ella también, por codicilo otorgadoel 14 de Marzo de 1343, rectifica el testamentoy manda enterrarse con su marido ante elaltar mayor del Puig, trasladando allí las cap e-llanías que tenía ordenadas en Santas Creus.Muerta la Condesa pocos días después, sahijo fundó en nuestra iglesia siete capellanías,dotándolas espléndidamente y otra mas en elcastillo del Puig, obtenida previamente licenci adel Rey (2).(1) Reg. Vat. 163, fol. 44. Véase el Cathalogus Magis"trorum de Gaver, pág. 68, en el apéndice.(2) A. II. N. de Madrid. Clero leg. 2.044 y A. C.Sucedió al P. Riera en el generalato, como lehabía sucedido en la vicaría del Puig, Fray DonfiugoSerrano, Doctor en Cánones, hombre degran prestigio dentro y fuera de la Orden. FuéilluY Probablemente el primer catedrático de Universidadque tuvo la Merced, pues consta queenseñaba en Montpeller en 1340 (1).No figura en las listas de Mercedarios de 1317,1° que nos hace suponer que entró en la Ordenterminados ya sus estudios. Los historiadores deMontpeller lo hacen natural de aquella ciudad.Sus apellidos eran Sancii o Sanxii, sive Serrani,según constan en los registros pontificios. No fuéelegido por la Orden, sino nombrado directamentePor el Papa el 17 de Abril de 1345 (2). Erahij o del convento de Barcelona.En las bulas dirigidas al Obispo de esta ciudadnotificándole los nombramientos del P. RieraP el P. Serrano se dice expresamente que elueneral era súbdito del Obispo.Al principio del siglo XV se contaba, y así lorefiere Gaver, que Fray Domingo formaba partedel tr ibunal que examinó a un joven monje delLanguedoc y no encontrándole suficiente hizoque fuera reprobado. Esta afrenta sacudió la perezadel estudiante, que aplicándose a los cano-[vio-— 221 —"cales, t. 2.668, fol. 47. La, licencia del Rey precede aeasi todas las fundaciones a pesar del privilegio generalci all . e Jaime I concedió a la Orden, cuya observancia erasuficil imponer a los curiales.(1) «La Merced», ario 1929, pág. 126.(2) Reg. Vat. 167, fol. 53 v.

— 222 —nes llegó a ser eminente en ellos, y elegido Papacon el nombre de Urbano (seguramente el BeatoUrbano V), recordó con gratitud al que le habíaespoleado, diciendo que desearía hacerlo Cardenal.Pero cuando esto sucedió (en 1362 lo máspronto), había muerto el P. Serrano, cuyo generalatoduró sólo hasta 1348, o sean poco más detres arios (1).En la vicaría del Puig sucedió a Fray Domingoel P. Rodrigo Dara, que en 1352 tenía por sucesora Fray Pedro Berenguer, Vicario y Comendadora la vez (2).Puede asegurarse que estos generalatos fu e-ron dichosos para la Orden que aumentó en personal,cultura y prestigio sin levantar recelos enel clero secular ni en las demás órdenes. Los n u-merosos pergaminos que los archivos guardan deesta época nos hablan de donaciones, censos,fundaciones y limosnas para la redención decautivos, pero no de pleitos ni de conflictos conel clero.Pudo contribuir a ello la índole pacífica delos superiores, pero la causa más decisiva parecehaber sido el que los mercedarios no hacían conla los demás en los funerales, manzana-petenciade discordia en la Edad Media y aun en la MOderna.Al hojear esos pleitos no se puede conte'(1) Urbano V se graduó en Aviñón en 1342 y fué lueg°profesor en Montpeller, ciudad que visitó siendo Papa Ydonde fundó un célebre colegio a los benedictinos, quehoy es Facultad de Medicina.(2) A. II. N. Clero, leg. 2.043.— 223 —uer un gesto de repugnancia, considerando lasenergías perdidas en ellos y el fruto que hubieranProducido en las misiones y en otras grandes em-Presas. Después veremos, cómo los mercedariosentr aron a disputar a los otros ese mendrugo,El Dr. Fray Domingo Serrano.(De la serie del P. Talamanco, en 1752.),,etl3Ta conquista parece haber sido el único anheloqe ci ertos corazones mezquinos.f, El convento de más importancia fundado por-st05 afíos parece ser el de Algeciras, poblaciónnqu1 stacla por Alonso XI en 1344. En 1356 eraYa uno de los más principales de Castilla y comoa tal se le concedió derecho de sepultura parave.glares. Es seguro que los mercedarios lo obtu-' iernu en el acostumbrado reparto de los moros.

— 224 —Pocos años después los granadinos arrasaron lapoblación, que no resurgió hasta principios delsiglo XVIII con los fugitivos de Gibraltar, vol'viendo entonces a fundarse nuestro convento eolllicencia de Felipe V.También comienzan a figurar por estos afloslos conventos de Santa Coloma de Queralt en qu°se. celebró el Capítulo de 1337, y de Berga,Cataluña (1). En Santa Coloma tenía la Ordendesde 1307 la iglesia de Santa María de I3elloch(2).El Maestro Serrano falleció en Montpeller,9 de Junio de 1348, víctima de la famosa pesteque entonces asolaba a Europa y que con tallnegros colores describe el Boccacio y todos 1°5supervivientes. Los estragos producidos en 13'ciudad fueron tan grandes que los Cónsules eseribíana fin de año al Rey de Francia, nuevo sefl°rde Montpeller, que era imposible cobrar los tributos,pues la población había quedado recluid°a la décima parte y muchas familias habían d esaparecidoenteramente (3).Estaba al lado del General moribundo el C°mendadorde Perpiñán Fr. Ponce de Barellis,que al día siguiente hizo inventario de los bienesdel Maestro, que eran muchos, según Galrer.Este dato no favorecería mucho al P. Secan-e'primero en la serie de Generales ricos, si no sOs-— 225 —Pecháramos que la muerte le sorprendió cuandoProyectaba convertir aquel pequeño convento encasa de estudios para su Orden.Aun sin esa ayuda, el convento de Santatu lalia gozó, según los historiadores locales, deIllás prestigio literario que otros más numero -SO(1) y los graduados aparecen en él con freeilencia. La Universidad no tenía más facultadesqu e las de Artes, Medicina, Leyes y Cánones.(1) Bib. NI. de Madrid, Mss. 6.140, fol. 24.(2) A. C. A. Monacales, t. 2.679, fol. 66.(3) La Merced de 1929, pág. 127.(e1r) A. 2 G6e2 rma2i7n:. y 3 Histoire de la Commune de Montpe-15

CAPITULO XIIIG eneralato, de Fray .Ponce de Barellis(1348-1364)MA RIO Nombramiento ,del P. Barellis.-4stragos de laPeste—Redenciones por éstos años.—Intento de fusión:CO i los trinitariéS.'Leargos perpetuos en la Orden.--Obras del General en Tolosa.—Privilegio de sepiiltura' en Castilla.—Provinciales en esta. corona:—Aumentosdel co nvento de Guadalajara y fundación de Segovia.R, geclificación de Perpifián.--Peculio.--Conventos . .arruiliadospor fas guerras.—Pedro el Cruel en el Puig.La imposibilidad de reunir. a los electores enaciagos dias facilitó al Comendador c-lePerPhn lä, Fr. Ponce de Barellis,.obtener del Papaecil nombramiento de General, intervención temi-, a Ya en elecciones ceiones anteriores y realizada enProbable el nombramiento se hicieraIT ITY Pronto, aunque no conocemos la bula correst;Qi.ndierite. En Febrero de 1349, Fr. Ponce sed-utila General en ' documentos ,de Tolosa, ciudadj ie do nde era natural, y a cuyo convento favoreJ.bióe extraordinariamente con la adquisición de• Iles cuantiosos (1)-..,(12 Toulousej'Arch.,Depart..Mercy, liasse . 26. Compra-ena el 4 de Febrero. Uno de los testigos es Raimundo,de

— 228 —Que fué nombrado por el Papa Clemente VIy no elegido por la Orden, se lo echa en caraPedro IV de Aragón en varios despachos, censurandosu poco amor a las tradiciones merced a-rias y a la corona aragonesa.En días bien tristes inauguró su gobierno elPadre Barellis. La peste asolaba campos ydades, y cuando parecía haberse alejado, v0lvi8fpor los contados sobrevivientes. En España dur°?con intervalos, de 1348 a 1350, y en este últinlóaño falleció el Rey de Castilla sitiando a Gibral"tar (1).No tenemos datos precisos para calcular 05estragos en la Merced, pero debieron ser grandescomo en las demás órdenes y en todas las clase5sociales. Por considerables que hubieran sido lesaumentos de personal en los últimos treintaaños, el número de religiosos debió volver al (10había en 1317.Sin embargo, los conventos abandonados f ue-Barrellis, ciudadano de Tolosa, pariente sin duda de l General.El apellido aparece escrito de varias maneras, Oreeentonces se acostumbraba en todo.(1) La Crónica de Alonso Onceno dice: «Estando a si elfecho desia cerca de Gibraltar fué voluntad de Dios querecresció pestilencia de mortandad en el real del reyAlfonso de Castiella muy grande, en el año siguiente qtletpusiera su real sobre Gibraltar; et esta fue la primera egrande pestilencia, como quer que dos años antes des°fuera ya esta pestilencia en las partes de Francia et de leglaterra et de Italia et aun de Castiella et en Leon etExtremadura et en otras partidas». (En Rivadeneira, t• Gupág. 390).— 229 —ron pocos y quizá menos por falta de personal,cilue por otras razones. En adelante no se habla'e los de Beja, Badajoz, Medina del Campo, nide Toro, aunque éste volvió a fundarse en el sigi1° XV. El de Saint Girons aparece todavía en• 65 , y el de Narbona en 1397 y 1420.rna vez posesionado del cargo, celebró Fray°l'Ice en Barcelona Capítulo general en Pentee°stesde 1349, en el cual se hizo una constitu-16n muy importante, prohibiendo que el General, fi menos otro religioso, dedicase las limosasde la redención a otras necesidades, salvodalgún caso muy extraordinario con aprobación• la Orden. Esta prohibición se incorporó aletT. "Po de las Constituciones. (Dist. I, cap. IV).• COn ello se corrige al General difunto, hase de,.ener en cuenta que la rapidez de su muerte le'111Pidió disponer las cosas en debida forma, perolaudable el celo que en esta ocasión mostróel Capitulo.t, Prueba del gran vigor de la Orden, es quelos años mismos de la. peste tuvo arrestos2 ra h acer una redención. Pedro IV escribía elde Mayo de 1349 al Rey de Granada en los"iguientes términos:Inny noble y muy honrado Alamir DonAgiseePh Abenamir Amuzlemina, Abulbuait Ismaelenfaraig, Rey de Granada, de Mälaga, de Al-(-,-.eria y de Guadix. De Nos D. Pedro por la gra4 de4 Dios, Rey de Aragon, de Valencia, dej allorca, de Cerdeña, de Córcega y Conde deareel ona, de Rosellon y de Cerdaña, Salud

— 230 —— 231 —'Como a Rey, a quien deseamos mucha honra Y vuestros que a los dichos frailes y sus cosas nobüenaventura.sea hecho gravamen alguno, ni los fuercen a. »,Rey: : 08 hacernos ,saber que Fray G-uillerulu eGrnprar más cautivos sino aquellos que bien lesGoday, 'Comendador del Monasterio de Arguines, Parezca. Sabed, Rey, que en esto nos haréis grande la orden de Santa •1Vlaria de 'la Merced de los Placer y os quedaremos muy reconocido. Dadacautivos, constituido 'en nuestra presencia nos 11/' en Valencia a 22 días del mes de Mayo del añoreferido:que algunos oficiales vuestros a él y 1349» (1).sus compañeros hacen algunas ettorsiones, bija" Por esta carta se ve que el P. Goday o CodalriaS y novedades, que no tenían costumbre deCO n otros Mercedarios había hecho redención enhacer en los años pasados, a saber: que los fuelzana comprar: cautivos que son viejos y ademäs' recomendó en términos parecidos al mismo Pa-0-ranada poco tiempo antes. En 1354, D. Pedroque pertenecen a otra nacion diferente de la,s. clre Goday y a Fray G-aufrido Graubert, Comendadorde Montpeller, que iban a Granada con eltierras y reinos miestros.tambien que los dichos oficiales les haeell1.-1 de hacer una redención (2).pagar diezmo y .medio y alfaqueria, lo que n° El Rey procuró también con repetidas cartastenian costumbre de pagar, sino solamente 1111 allanar todos los obstáculos que se oponían a ladiezmo, corno vuestros súbditos no pagan eneiplecta de limosnas para la redención. El esmeroreinos y tierras nuestras mas que el diezmo.qu e nuestros religiosos ponían en ello, se muestraademás, los dichos oficiales . y otras personas 10 Por documentos Reales de 1361 y este mismo añolohacen otras injurias que son en opresión y gra(PP. Bernardo Aymar, Comendador de Tarragh°11a, y Francisco Serra, Comendador de Gerona,vamen de los dichos frailes.»Por lo cual, Rey, queremos que sepais queeron una redención en Túnez (3). El P. Ca-Nos tenemos a la dicha Orden gran afecto y dOrecion,especialmente porque los reyes antecesores(1) Patronato, 377.(2) Gazulla: Refutación, pág. 25.nuestros de Aragon fundaron y edificaron nuev3- 4 (3) Ei 10 de Septiembre de 1361 estaban en Cagliari,mente aquella Orden a honor y servicio de Dios».v:Ilde otorgaron escritura en favor de un mercader geriocilioles habla prestado dinero en Túnez. (A, C. A. Mo-»Y así, Rey, , os suplicamos afectuosamenteque por honor nuestro queráis tener por rece13 114e4les , t. 2.679, fol. 12). A la ida en 20 de Julio, habianmendados a dichos frailes y sus cosas, y qu e 19s ¡lado en Caller a Pedro Bosch, ciudadano de Barcelona,/57 doblas de oro por un moro para cambiarlo por Jaimequeráis defender y , guardar para que no se 1.e .t arti , vecino de Tarragona, cautivo en Túnez. Los rescaval.clOshabían sido diez. A. C. A. Monacales, t. 2.681, fol. 60haga violencia, injuria ni novedad alguna, y que,ordenéis a vuestros oficiales y demás súbdit°' u* 2.703 , pergamino 3.°.

— 232 —yero, siguiendo al P. Antillon, que dispuso demuchos documentos ahora extraviados, calculaque los cautivos redimidos en los dieciséis afi°Sdel Gobierno del P. Barellis no bajaron de 1.6007y aunque esta cifra resulte exagerada (pues Dien los mejores tiempos se alcanzó un promediode cien cautivos por año), demuestra la buena'impresión que produce la actividad de este gen e-ralato (1).Algo tal vez por la escasez de personal Ymucho por terminar los conflictos entre las dosOrdenes, los Mercedarios y Trinitarios de Castillapresentaron al Papa en 1357 unas bases parala fusión de ambos Institutos, proyecto que raerecióla aprobación del General P. Barelli (2)•Tal noticia nos produce hoy dolorosa impresión,pero las dificultades de aquellos años y las guerrasen que vivían los Estados cristianos, expli"can el que los Mercedarios, fuera de Aragón,renunciaran sin gran dificultad a los recuerdosdel Rey Conquistador.Afortunadamente se opuso a ello D. Pedro IVescribiendo al General una carta amarga, Puescon el intento podía alterarse el escudo de 1.3Orden, disminuyendo así la gloria de la casa deAragón, que la había fundado. Por los datos h istóricosque encierra traducimos aquí este curiosodocumento:(1) Gazulla: Refutación, pág. 26.(2) El P. Antillon copiaba en su Epitome las bases Pargla fusión. (A. C. A. Monacales, t. 2.681, fol. 60.)— 233 —«Pedro por la gracia de Dios Rey de Aragón,de Valencia, de Mallorca, de Cerdeña y de Córcega,Conde Barcelona, etc. Al venerable y religlesofraile el Maestro de la Orden de la bien--aventurada' Maria de la Merced de los cautivos,salud y amor. »

— 234 —hábito, con cierto pequeño escudo bajo la sefialde la santa cruz encima y debajo la insignia suY3que era entonces y ahora es nuestro escudo Real'puesto en el mismo escudo.»«Andando el tiempo habiendose desarrolladodicha Orden por la gracia de Dios y las naunfflcenciasy privilegios, tanto del dicho Rey PO"Jaime como de otros nuestros predecesores y deotros fieles cristianos, se instituyeron tambien elldicha Orden clérigos y presbíteros, de los cualesy de la dicha Orden se acostumbró siempr e aconstituir Maestro, de los naturales de estos reinosen su caso, delante de dicho altar, sino es depoco tiempo a esta parte en que la Silla Apos tólicaos proveyó de dicho magisterio.»«Y ahora llegó a nuestros oidos por relae1011fidedigna de muchos,, que vos que no sois denuestra nación, sino de otra extraña, olvidand°con cuántos beneficios de nuestros predecesorilustres y de Nos mismo fud honrada, sin rellexionarque dicha Orden tuvo su origen en nuestrosdominios y por fundador principal despuesde Dios a dicho Rey Jaime de buena memoria'os empefiais en procurar con el dicho Sumo P°11-tífice y de otras maneras la union de dicha Orde"'con otra, y con el pretexto de esta union quitarla insignia nuestra del dicho escudo y hábito,poner alli otra insignia lo cual si se llevase 3cabo redundaria indudablemente en deshonranuestra.»«Por lo cual os rogamos atentamente y °5requerimos y exhortamos a que no hagais 13— 235 —dicha union, ni quiteis la dicha insignia, ni ha -gais otra novedad alguna en dicha Orden quere dunde en perjuicio nuestro, pues no podríamosen manera alguna llevarlo con paciencia; antesPor el contrario si algo hicisteis de lo dicho lovolvais al estadó ,debido y primitivo, evitandocon todo cuidado que por culpa vuestra (pueseelnio tal juzgaríamos lo predicho), no se veaPrivada en alguna manera la dicha Orden de losfav°res y oportunas ayudas de que gozó hastatanto de nuestros ilustres predecesoresReyes de Aragon, como de Nos mismo y denuestros fieles súbditos, antes por el contrario seafavorecida con mayores y mas amplias graciasPor nuestra intervencion. Dada en Valencia el 11de Enero, año de la Natividad del Señor 1358» (1).Este documento muestra el gran cariño queel Rey sentía por la Orden, que rápidamente serePonia de sus quebrantos y gozaba cada día de1naYor estima, superando con mucho el estadoque tenía anteriormente. El General desistió desus intentos y a pesar de ser francés gozó de losfavores del Rey de Aragón.+. Los documentos citados hasta aquí demues-'tan que, a pesar de la letra de las Constituciones, que hacían los cargos anuales, muchos Co-111 1. endaclores se perpetuaban en las encomiendas.&-ia experiencia de toda la Iglesia demuestra quetrae, a cambio de algunas ventajas, gravísigicsinconvenientes. Sin embargo, la tendencia(1) Patronato, pág. 154.

— 236 —a la inamovilidad se acentúa cada vez más Yviene reforzada por los nombramientos y confi r-macionespontificias, que llevaban generalmenteaneja la perpetuidad, pues para un año no vallala pena de negociarlas.Es uno de los males que se achacan a la peste'pero los registros pontificios demuestran quetiene raíces anteriores a ella y los Papas habíande echar mano hasta de los cargos de despenseroy sacristán en los Monasterios para satisfacer a lospedigüeños, que no eran generalmente lo mejor• de cada Orden, como el hecho mismo demuestra.En la Merced había otra causa peculiar dedesazón en las recomendaciones del Rey de A ragón,al que acudían todos los ambiciosos. El Ge"neral en 1359 encargó al Prior de Barcelona,Fray Bonanato de Prexana, que manifestas e aPedro IV que «deseando condescender con lassúplicas del Rey, algunas veces encargaba elgobierno de las casas de la Orden a algunosfrailes recomendados por él, aunque fueran Inenosaptos para el cargo, y tal vez desobedientesy rebeldes a la misma Orden, por lo cual deberíanmás bien ser castigados que favorecidos,y esto redunda en manifiesto daño de la Orden » (1)"El Rey contestó en 8 de Mayo que no era stlintención favorecer a quien no lo mereciera, porlo cual agradece al General sus atenciones, asegurándoleque en adelante obrará con más eautela,y que no se ofenderá porque no sean aten"(1) Patronato, pág. 156.— 237 —dicla S sus recomendaciones, dejándole desde luegoen libertad de proveer las encomiendas deArgnines v de Mallorca (de que entonces se trata'ba)en quienes las merecieran.El archivo de nuestro convento de Tolosa (hoyincorporado al Departamental) conserva muchosdc'enmentos en que constan las adquisicioneshechas por el General Fray Pons (1). Varias deellas ofrecen la particularidad de estar hechasPor el General, no como religioso, sino como persGnaparticular. El fin de esta declaración era,sin duda, evadir los crecidos derechos que por la.alnortización cobraba el fisco, pero años ade-Liante, habiéndose comprobado que el herederoti liabia sido el convento, vióse el Comendadorray Arnauld Erard condenado a pagar una creeidamulta, de la que apeló, consiguiendo al fin4 sucesor Fray Bernardo de Plano ver en parteredu cidos los derechos en 1395 (2).El P. Gaver asegura que el General BarelliIrasladó intramuros de Tolosa el convento queestaba fuera de la ciudad y había sido arruinado.Por la s guerras. La Orden había tenido desde elPrincipio casa dentro de la ciudad en la plaza deer (1) En algunos actúan como testigos dos escuderos del"eral, Vidal de Bordis y Domingo de Talavera, el prirlero fr ancés probablemente, y el segundo espahol. Si noeenia más que esos no era mucho lujo, para el que entoni;'sga staban hasta los mendicantes. (Tolosa: Merci,'aSge 12.)(2 ) Toulouse. Arch. Depart. Religieux de la Merci,eg. 16 y 8.

— 240 —taba el Comendador de Sevilla Fray Pedro Endríguezde Barrio.En ese año celebróse Capítulo provincial enSevilla, cuyos definidores (los primeros tambiénque conocemos) constan en una autorizaciónconcedida al Comendador de Guadalajara Pargaceptar la fundación de una capellanía:«Sepan quantos esta carta vieren como n°5.Fray Pedro Rodriguez de Varrio, Comendadordel monesterio de Santa Maria de la Merced deSevilla e Vicario provincial en los reinos de CaStillae de Portugal... con ciencia e con conse jo evoluntad de los honrados e discretos religios°Fray Gil de Huete, Comendador del monesteri°de Santa Maria de la Merced de Valladoli d, eFray Miguel de Guadalaxara, Comendador delmonesterio de Santa Cathalina de Toledo, e FrJuan de Miranda, Comendador de las casas quela dicha Orden ha en Soria y Fray Miguel de"'Comendador de las casas de Logroño, definidores en nuestro Capítulo provincial que agor a secelebró en el nuestro monesterio de Santa Mari3de la Merced de la muy noble eibdat de Sev11lg7seyendo ayuntados, en el dicho Capítulo, segullque lo habemos de costumbre e de regla, otorg3-mos que damos todo nuestro libre e lleno e etillvplido poder a Fray Gil de Truxillo... Comendor de Guadalaxara... Dada en Sevilla a veitIVdos dias de Mayo, era de mill e trecientos enoventa e nueve años» (1).(1) Bib. NI. de Madrid. Mss. 2.684.— 241 -Menciónase también al Provincial Fray Pedro°c1riguez de Barrio en los años siguientes hasta1385 en coe ocupa su lugar el Comendador de8Gria Fray Juan de Miranda, que figura arribaeQrao definidor.El Comendador de Guadalajara Fray Gil de'Trujillo recibió por estos años como dotación deeaPellanias cuantiosos bienes de Doña ElviraMart ínez, camarera mayor de la Reina Doñaliarla , y mujer de Fernán Rodríguez de Pecha,camarero mayor de Alfonso XI de Castilla. Fuéeta, señora devotísima de la Merced, cuyo hábitolle vaba, y después de una vida llena de virtudesfalleció en Guadalajara, mandándose enterare n nuestra iglesia. Vivía aún en 1374 (1).Estos bienes fueron los que dieron al conviltode Guadalajara el primer lugar en la pro -nciaCastilla hasta fines del siglo XV. Elviraar tinez dió además unas casas que habían sidode su hijo Don Alfonso, Obispo de Jaén, y en lasetlales se fundó nuestro convento en 1367, yendo4ellá Para establecerlo la donante y su confesor el°Inendador de Guadalajara Fray Gil de Tru-J i llo (2).r, Si mucho hizo el General por el convento de'°10sa, no menos se esmeró en favorecer al de(1) Ibid.10?,) Don Alfonsofrcle Pecha y su hermano Pedro fueronIllndadores de los jerönimos en España; que por estatṅ %°11 ap arecen relacionados con la Merced. Bib. NI. Mss.ado.16

— 242 —Perpiñán, del que era Comendador. Edificó denuevo el convento e iglesia, aunque todo fuó depoca duración, pues estando fuera de mural'fué arruinado en la guerra que luego sobrevin°'En tiempo de Gaver se había trasladado ya in"tramuros, y en el solar antiguo estaban los 111011.nos del Pastell. Dotólo también con ~chesréditos y con ornamentos, libros y alhajas, 3Taún duraba en tiempo del cronista el cabreolibro de la hacienda, mandado hacer por FraYPons.En el convento de Tolosa instituyó cuatrocapellanías, para cuya dotación adquirió eielllibras tornesas en réditos, o sean cien francos,que entonces equivalían a dieciseis sueldos demoneda aragonesa, y cada uno de los frailescapellanes recibía veinticuatro libras o francos'debiendo residir continuamente en Tolosa, dondetenían solemnes celdas con huertos y todo 1°demás necesario.Tales fundaciones, de las que salía mal par9 -da la pobreza y la vida común, eran desgracia'mente frecuentes por entonces. En el Puig y ellHuete se instituyen otras parecidas, y aniver83-nos en que el Comendador o el Cura debiallentregar a cada fraile cierta cantidad, o 1.1113'svaras de paño con que vestirse (1).Cosas admirables (dice Gaver) hizo el Gelle, -ral en dichos dos monasterios de Tolosa y Perlg'-(1) Documentos del Puig en el A. H. N. y Ms. 2.448 dela Bib. NI. de Madrid.— 243 —flám. Murió en Tolosa el 17 de Octubre de 1364,'Y su cadáver fué inmediatamente conducido aPerPirián, donde había escogido sepultura, poréste un soberbio monasterio. Gobernó la°rden dieciseis años. Descanse en paz.Las guerras que asolaron a las naciones crisaliasdurante el siglo XIV, produjeron tambiénl;tlinas entre nosotros. Pedro IV de Aragón dió enu .4tiba en 1358 una compensación a los Merceda-119s Por su convento, demolido el año anteriorPara evitar que sirviera de punto de apoyo a loscastel lanos, cuyo ataque se temía. Ese convento,e° 1110 otros muchísimos de todas las órdenes, estiaba fuera de las murallas, y él manda que seh' es cié la iglesia de San Félix y casas donde-abitar y edificar nuevo convento (1).Sirvió mucho al Rey de Aragón en estas gue-;28, desempeñando importantes comisiones enk'astilla Fray Bernardo de Prats, cuyos servicios10ce el Rey en documento de 1365: «El religdi. c'so Fray Bernardo de Prats, de la Orden sobrecha,que por nuestro servicio y utilidad de?estros reinos por algún tiempo estuvo en deal-de Castilla»... (2).estas guerras de los dos Pedros de CastillaA-ragön, en 1364, se refiere un episodio notablecitie registra el de Aragón en su Crónica. El Reyde ')as tilla se hallaba con su escuadra enfrentecu nera, cuando se levantó una horrorosa tem-(,1) Patronato, pág. 53.\2) Ibid. 122.

— 244 —pestad que por milagro no estrelló los buquessobre la costa. Agradecido Don Pedro el Cruela la Santísima Virgen del Puig, a la que se habia'encomendado, fué allá en peregrinación con u113soga al cuello y en paños menores (1).Esto prueba que aquellos desalmados teníancierta piedad allá en lo hondo, como dicenlos cronistas antiguos. Don Pedro en su testamentootorgado en Sevilla en 1362 dejaba torilbiénuna manda a nuestro convento de aquella'ciudad (2).CAPITULO XIVGeneralato de Fray Nicolás Pérez(1365-1401)113.M ARIO: Urbano V nombra al Padre Pérez.— Vida particular, lujo. —Ambiciones del General. —Fundaciónde Burceria.—Obras en Huete y Tärrega. —Sucesoresde Fray Bonanato en Barcelona. —Las recomendacioiles• — Confirmaciones pontificias. —Doña Beatriz deCastil la.—Guadalupe y Valladolid.-- El Provincial Fray'luan Miranda.—Aumento de cultura. —Titulos universitarios.— Cargos honorificos. —Más conventos arruinados.—Pleitosen Vich.—Capítulos.—Traslación de SantaMaria de Cervellón.(1) Zurita: Anales, Lib. IX, cap. 55,(2) Rivadeneira, t. 66, pág. 596.• 1\Ttlevamente se vió la Orden privada de ele-7 11' M aestro general, pues aunque los efectos dela Peste se habían reparado en gran parte, ardíaguerra entre Aragón y Castilla, luchando los12's Reyes a las puertas de Valencia. No era ma-Orla tranquilidad al otro lado de los Pirineos.t Sin embargo estaban ya convocados los elec-2re 5cuando Urbano V, por bula fechada en:vvillön el 5 de Enero de 1365, para evitar losConvenientes de una larga vacante, nombrómeneral a Fray Nicolás Pérez, bachiller en de-. l''et°s y Vicario perpetuo del Puig (1). Antes de(1 ) Bulario, 44.

— 246 —salir de Aviñón el nuevo General, por docum entofechado allí el 24 de Enero, dió la vicaría delPuig a Fray Jaime Tauste, que desempeñaba ya'la encomienda (1).Poco después se graduó de Doctor en decre"tos, para lo cual no le faltaba mas que el diner°2como a tantos otros de todos los tiempos. Babiatomado posesión de la vicaria del Puig el jueves16 de Junio de 1362, haciendo un curioso inv elltariode todas las alhajas de la Iglesia, que demuestrala importancia grande que había adq uiridoya el santuario.Firman el documento el Comendador del Puig'Fray Jaime Tauste, y el de Orihuela Fray pedrode Altarriba, haciendo la entrega de los objet°sFray Bernardo Moner, Comendador de Tarrag°na(2). Su antecesor en la vicaría, Fr. Pedro Berenguer,había muerto recientemente.El generalato de Fray Nicolás Pérez, eselmás largo que registra la historia mercedarig'pues duró más de treinta y seis años. Duranteellos la Orden aumentó en personal y en cultura'a pesar de las inquietudes que padecieron 1/5naciones cristianas y del terrible cisma que 10-go sobrevino en la Iglesia.Celebró su primer Capítulo en Barcelona el.día de Pentecostés del año 1365 en que fuédo, y en los pergaminos del Puig y de Valenei°)encontramos los definitorios de otros muchos C3-(1) A. C. A. Monacales, t. 2.679, fol. 112.(2) Gazulla: El Puig de Santa María, pág. 64.— 247 —Pitulos celebrados por él, de los cuales habremosde copiar algunos, pues contienen los nombresIllás prestigiosos de la Orden por aquellos arios.En el de 1365 celebrado en Barcelona el 1.°'le julio fueron definidores Fray Deodato Porcel,CoMendador de Saint-G-irons; Fray FranciscoI2eu , Comendador de Vich; Fray Guillermo GoclaY,Comendador de Monfiorite, y Fray Bernardoeast elló, Comendador del Obispado de Valencia(1).Varios de esos documentos son concesionesde usufructo vitalicio de casas y haciendas arruiiladaspor las guerras y restauradas por religios0sparticulares. La vida común salía poco favol'eeidaen eso, aunque los intereses de los conventosmejoraran a la larga.Mala impresión causa también el boato que4aba el General, a quien el Príncipe herederogide Aragón (después Juan I) pidió en 1379 presta-SU mula para el día de la boda del Príncipe:: eemo vos, segun hemos entendido por cierto,'eugais una bella y buena mula, la cual seriabilena para nuestra persona, por tanto os roga-Ine's afectuosamente, ya que estais siempre dis-Puesto a nuestro servicio, que nos envieis por elPortador de la presente la dicha vuestra mula,1)ara necesidad de nuestra persona...» (2).G-aver acusa al General de haber gastadoIntleho dinero en Aviñón para sus pretensiones(1) A. C. A. Monacales, t. 2.679, fol. 113.(2) Patronato, 439.

— 248 —de mitras y capelos, de lo cual hay algunos indi'dos en documentos coetáneos.Una fundación importante se realizó por estosaños, que dió lustre a la Orden en los siglos pes"tenores: En 1382 el Conde Fernán Pérez dela y su hijo Pedro López entregaron a la Merced,representada por el Licenciado Fray Lorenzo deMonterrey, la iglesia de Santa María de Burceria,no lejos de Bilbao y en la orilla izquierda de laría, con sus bienes y rentas. En la iglesia estabasepultado ya Don Sancho, hermano de FernänPérez, del que habla el hijo de éste Pero LóPezde Ayala, famoso Canciller de Castilla, en sticrónica del Rey Don Pedro. La coincidencia detales nombres demuestra que la fundación esefectivamente de 1382 y no del siglo XIII, coillesuponen muchos historiadores, por faltarle unaC a la copia de la donación que poseía el Cell'vento (1).Por las actas de los Capítulos de fines delsiglo XV se ve que la nueva casa tuvo dificultaden desarrollarse, pues las de Pamplona y Logreflo le disputaban las limosnas en las regionesvecinas.Una bula de 1393 nos informa de que por estosaños se reparaba en Huete la iglesia detro convento, en la que era muy venerada ulla(1) Publicó este documento el P. Ledesma en su Ilis1°nadel Convento de Alarcón, pág. 247. Esto aparte de que,no se menciona al convento de Burcefía en las listas de'siglo XIII ni en el capitulo de 1317.

— 250 —imagen de la Santísima Virgen. Clemente VIIconcedió varias indulgencias a los que ayudaralla aquellas costosas obras (1).En 1383 se inauguraba también la nuevaiglesia de Tárrega, a la que se dió por titula r ßNuestra Señora de la Merced, junto con el pril nitivo,que era San Juan Bautista. Puso la primerapiedra el Infante Don Martín, luego Rey de A ragón(2). Este cambio fué casi general en la Ordelly a mediados del siglo XV la mayor parte denuestras casas tenían por titular a Santa Mari8"de la Merced con su imagen en el altar mayor, Ya veces la historia de la aparición desarrolladaen varios cuadros, según describe minuciosametrte Fray Nadal Gaver en sus actas de visita.En 1383 Bernardo Miguel, queriendo ayudara la redehción de cautivos, dió a la Orden u 11a5casas y un huerto que tenía en la ciudad deAlghero, de Cerdeña, para convento, estipulaudóque la iglesia tendría por invocación a SantaMaría de la Merced (3). La fundación no pareceque se llevara a cabo por entonces a causa de la'sguerras que padecía la isla, pero ese documentódemuestra la popularidad de la invocació n deSanta María de la Merced. El P. Gazulla encontróademás en los registros Reales un documentedonde se menciona una galera con ese nombreen 1390 (4). La mayor parte de nuestras iglesiß8(1) Bulario, pág. 52.(2) A. C. A. Monacales, t. 2.679, fol. 116.(3) Patronato, 53.(4) La Patrona de Barcelona, pág. 58.— 251 —leva ntadas en el siglo XIV no tuvieron seguran'enteotro titular desde el principio. La mismade Valencia a principios del siglo XV había olvidn'cloa su primer titular Santo Domingo, llamáncle5eya de Santa María de la Merced (1).Sabido es que esa y otras invocaciones, a lasc ine la Santa Sede no señaló día propio, solíaneelehrarse el día de la Natividad de NuestraSetiora o el de la Asunción, como es frecuentehe todavía.Indicamos ya atrás cómo desapareció en 1369e°n la ciudad nuestro convento de Algeciras.1')er estos tiempos, en cambio, debió fundarse elde Jerez, que aparece ya como importante aPrin cipios del siglo XV.El 20 de Octubre de 1377 falleció en Barcelonael santo Prior Fray Bonanato de Prexana, delcine hemos hablado anteriormente. Fué el mayorbienhechor de aquella casa que gobernó duranteilarenta y un años. Sucedióle Fray Jaime Tauste,que era Vicario del Puig y fué Prior de Barcelonaonce años, al cabo de los cuales renunció,\Mviendo a la Vicaría del Puig, donde otorgóInnehos documentos, que hoy conserva el Archi-0 histórico Nacional.Su renuncia al Priorato de Barcelona obedeeiaa no poseerlo con buen título, según afirmaayer, aunque no sabemos qué nulidad mediaba,en e llo. Sin duda por eso había intentado renuneiarya en 1381, a lo que se opuso el Príncipe(1 ) A. H. N. Clero, leg. 2.198, 13 P.

— 252 —Don Juan, que le apreciaba mucho (1). Más tardeveremos al P. Tauste General.Vino a ocupar el Priorato de Barcelona el V i-cario del Puig Fray Jaime de San Martín, hon"bre bueno y de piadosa vida que duró cuatroaños en el cargo hasta su muerte en 1392. Elconvento eligió entonces al subprior Fray GrtlillermoVives, bachiller en Decretos, hombre pacíficoy bueno, que a pesar de ello tuvo que sos"tener una lucha terrible con el Obispo.No obstante las promesas de enmienda hechas.al P. Barelli, Pedro IV de Aragón continuó 113°lestandoal General con recomendaciones 1019cargos honoríficos de muchos frailes, que 11 0siempre eran los mejores (2). Uno de los que nláisusaron y abusaron de la influencia real dentrode la Orden fué el P. Pedro Guilmon, licenciad°en Decretos y Capellán del Rey, a cuyo favor seexpidieron muchas cartas.Mayor daño que esto producía aún la conflr"mación pontificia obtenida por religiosos par"ticulares, que impedía retnoverles de sus carg'ospasado el año reglamentario. El General, apoya'do por el Rey de Aragón, obtuvo en 1392 queClemente VII le autorizara a proceder con l'gstales como si tal confirmación no existiera, y 1°mismo con los capellanes pontificios, quesiendo numerosos como los capellanes reales'— 253 —Pues el cisma había hecho a los Papas demasiadoacc esibles (1).Desde 1368 intentóse ya obtener la dispensa.de la confirmación pontificia para el General y?ellas cargos, escribiendo el Rey a Urbano V en1°2 siguientes términos: «Significa a V. Santidad\Ttlestro hijo Pedro, Rey de Aragón, que sus predecesoresinstituyeron antiguamente la. Orden dela bienaventurada María de la Merced de losCaut ivos, para redimir a los cautivos cristianosdetenidos en las cárceles de los agarenos y sumi-"s en la miseria, la cual Orden con el auxiliode la divina gracia se ha extendido por diversosPaises y el derecho de patronato de ella pertenecepor voluntad de sus fundadores al mismoey«El cual suplica os digneis conceder que en\, adelante no tengan que pedir confirmación dev . Santidad ni de otros ordinarios en las elecciounes, postulaciones, colaciones y provisiones delagisterio, encomiendas y otros beneficios de lasino que una vez hechas por los frailes;,engarl. el mismo valor que si hubieran sido'echas por V. Santidad» (2).No iban las aguas por ese cauce y la peticiónnt ° surtió efecto por entonces. En cambio sev° en 1373 la exención de contribuir a los sub-71dios que los Papas concedían frecuentemente aReyes sobre las rentas eclesiásticas con mo-(1) Patronato, pág. 157.(2) Patronato, pág. 160 y siguientes.(1) Bulario, pág. 52.(2) Patronato, pág. 157.

— 254 —ti vo de la Cruzada o de otras necesidades. Larazón invocada por Gregorio XI es que así cóln°las Ordenes militares de San Juan, MontesaCalatrava estaban exentas de tales cargas Perdedicarse ellas mismas y todos sus bienes a ladefensa de la fe, así debían estarlo también lesMercedarios por dedicarse a la redención de c antivos(1).La Reina D. Beatriz de Portugal, esposa detegiZ4:701:74:tiefe,\g4,:e:11e.22,1n GMoneda de D. Beatriz de Portugal, Reina de Castilla.Juan I de Castilla, mujer de grandes virtudes'fué Terciaria de la Merced, a la que hizo grandesfavores (2). A ella probablemente debió la Ordenel que D. Juan Serrano, Capellán mayor del ce"lebre Santuario de Guadalupe, llevara a él a lesMercedarios en 1388, pero no habiendo lograd°ponerse de acuerdo sobre las condiciones en quehabían de servirlo, se retiraron antes de un afie'Serrano fué luego Obispo de Segovia y dejó elSantuario a los Jerónimos, que lo poseyeron en— 255 —Pr9iedad (1). Los documentos nada más dicen.La misma D . Beatriz dió a la Merced su casa'de Valladolid para convertirla en convento, y ensu iglesia mandó sepultar los restos de su madre1).a Leonor Téllez de Meneses, Reina que habíasido de Portugal. Ella misma, viuda a los die-'ocho años, rechazó varios matrimonios ventaresueltaa fundar un convento de Religio-"s Mercedarias, cuyas Constituciones hizo aproarPer el General Fray Antonio Caxal y por elapa , mas no vió realizado su proyecto y murió'daCia 1440 retirada en las Dominicas de Toro,° 1-1de tiene un hermoso sepulcro dentro del coro,Pero en traje de Reina.El Provincial de Castilla Fray Juan de Mianda, hizo en 1387 un contrato con D. Juan. 1-1Dad de San Millán de la Cogolla, cuya principal14usula es la siguiente:«Otorgamos e conoscemos que permutamos etbul'ucaMos et cambiamos con vos Don Fray Johanreincial de la Orden de Santa Maria de la'-i-ere Cu en los regnos de Castilla et de Portugal,vos y en nombre de la dicha vuestra Ordenna eglesia que nos avemos en Soria, de dentro105 muros de la dicha villa de Soria, que dicen.f-ant Andrés, con un hortal que tiene et está de-'1'4 de la dicha eglesia, et con unas casas que'ecistä,n delante de la dicha eglesia, la cal en meo...por una eglesia que vos e la dicha vuestra(1) Bulario, pág. 48.(2) «La Merced» de 1920, pág. 175.te,((1)1a,R1u9b2i9. o: Historia del Santuario de Guadalupe. Bar-

— 256 —orden a-vedes que es cerca de Toledo, fuera delos muros, que llaman Santa Catalina, que es enel camino que van a la puerta de Visagra, et porunas casas que son en la villa de Logroño, a 11puerta de Santa María de Palacio, que fueron deElvira Peres...» (1).A pesar de toda la solemnidad empleada, elcontrato no llegó a realizarse, y no sería Purculpa de los 1VIercedarios, pues treinta años n'Otarde el Provincial Fray Juan de Granada, hi°.confirmar la escritura por Benedicto XIII, Y eelleste motivo se insertó en los registros pontifiei°s`Parece que el deseo de los Mercedarios era trasladarsedentro de los muros de Toledo, para 1°cual obtuvieron otra bula de Benedicto Sill'aunque no lo realizaron hasta unos años 11 1tarde en el provincialato del Mtro. Fray Pedrode Valencia (2).Parece que en 1395 había muerto ya el provincialde Castilla Fray Juan de Miranda, Pue5'el 23 de Abril Benedicto XIII se dirige a FOIPedro de Burgos, Maestro en Teología, y le ene°miendalos estudios de Fray Pedro Gallego, Murcedariode Olmedo (3). El nuevo Provincia l P..berna,ba la provincia, en 1401, y en ella le juzg3-ban digno del generalato.(1) Vaticano: Avign. vol. 349, fol. 413.(2) Alcocer (Pedro). Historia de la imperial ciudadToledo. 1554.(3) Eubel (Konrad): Die Avignonesische Obedien%Mendikanten Orden... El registro original dice Oblatino Oliveti corno leyó Eubel.de•— 257 —El avance de la Orden por el camino de lacul tura fué cada día más rápido desde que coillenzóa ser gobernada por los clérigos, y esto aPesar del retraso producido por la peste de 1348.Pe dro IV de Aragón escribía al Papa en 1373:«Suplica el mismo Rey que, pues muchos frailesde la dicha Orden se consagran continua-Inente a buscar la margarita de la ciencia, paraaumento de la devoción que los fieles tienen a ladicha Orden, v para que pueda ejercer la obra dela redención y' adelantar cada día en ciencia, osequipararla a los predicadores y menoresen los ministerios de predicar y confesar, ye n el derecho de dar sepultura en sus iglesias,aunque hayan hecho pactos con algunas iglesiasParroquiales o con otros cualesquiera, de no im-121etrar el privilegio de sepultura, para que la Or-'ten la redención se aumenten, y que puedanPre dicar y luchar con la propagación de la fe católica,aun entre infieles, a los cuales deben tratardichos frailes con motivo de la redención» (1).As í vemos que los títulos universitarios se41 1 ultiplican entre nosotros, aunque al principio1°2 Más frecuentes son los de decretos o derechoe,andnito , por no tener las Universidades espalasf acultad de Teología hasta que Benito XIIIja ins truyó en Salamanca en 1395 (2).1\T O faltan, sin embargo, algunos Doctores en-teología como el citado Fray Pedro de Burgos y(1) Pa tronato, 272(2) Eubel: Die Avignonesische Obedienz...17

— 258 —Fray Pedro de Logroño, que le sucedió en el PO"vincialato de Castilla, el cual había hecho 5 9 5estudios en París, como Fray Antonio Ca2cal'Otros procedían de la Universidad de Tolosa,donde la Orden poseía convento. En Montpellertampoco había Teología.Deben ser recordados con estima, ademá s delos citados, Fray Francisco Olot, Vicerrector dela Universidad de Lérida, en 1383; Fray Pedr°Tordera en 1382; Fray Antonio Blas en 1387, elevadoluego al Arzobispado de Atenas; Fray Poucede Oliveres en 1399; Fray Pedro Corrati ell1392; Don Fray Bernardo Gilabert en 1383; FraYJuan Gilabert en 1397; El Doctor Fray Bart olamé Saiforés, Fray Bernardo Riera, Maestro enTeología... y otros varios que continuamente n OSrevelan los documentos de aquel tiempo (1).Muchos otros religiosos obtuvieron honores Ycargos de confianza durante estos años.El citado P. Tordera, nombrado en 1 38SObispo de 8'i-deis, era Comendador de Mallor ca Ycontinuó siéndolo porque, ardiendo la isla deCerdeña en continuas guerras, no podía aprOe.charse de las rentas de su Obispado (2).Fray Antonio Blas era Comendador de Mur -cia (3) al ser promovido a la Sede Arzobispa l deAtenas, dependiente de la corona de Aragón que(15 Para evitar citas enojosas, veáse el Padre Gazillig:Refutación... 14-15.(2) Patronato, 450.(3) Ibid.— 259 —había a dquirido los ducados de Atenas y Neopatriaa consecuencia de la famosa expedición aA" riente. En 1403 fué trasladado al Arzobispadome aller, que gobernó hasta 1414(1)..P edro IV ayudó también a las pretensionesEl Ilmo. Fray Antonio Blas, Arzobispode Atenas y de Cagliari. • -(Cuadro existente en la Merced del Cuzco.)1,4e1 General Fray Nicolás Pérez, •aunque con el'°e0 resultado que apunta Gaver (2).rara el Maestro. Fray Ponce de Oliver, Coo'behcladorde Tortosa, pidió Juan 1 de Aragón el_ 1sPado de Daulia en Grecia en 1389 (3).,(1) La Merced de 1929, pg. 379. .,k2) Pat ronato pág. 450.'bid. 451.

— 260 —Den Juan I hizo capellán suyo al P. FranciscoCifré en 1360, y en 1382 era capellán realtambién Fray Galcerán Ventayol. Martín I otorgóel mismo honor en 1397 al P. Miguel de Ari°y a los Padres Pedro de Benavent y Juan Oliver'Comendador de Daroca, y poco después al PadreSancho Pastor y otros varios (1).El Papa Clemente VII, en 28 de Septiembrede 1390, nombró capellán suyo al P. Fray MIC0th1°de Fenollera, del convento de Montblanch (2)*El nombramiento de capellanes reales ergmuchas veces un recurso para sustraer afrailes de las molestias que ocasionaban a 13'Orden los ordinarios y a veces se llegó a 110111-brar capellanes reales a todos los de un convellt°y aun a todos los superiores (3). Esto indic a 319"que las cosas andaban mal.La mayor parte de nuestros conventos, 0111°casi todos los de mendicantes, se habían fund3:do extramuros de las ciudades, pues los solare'dentro de la muralla eran carísimos y estreeb°s7pero en las guerras del siglo XIV, lo mism o e/1España que en Francia, esos conventos fuer°,11arrasados y quemados. Los frailes hubieron (I'pensar, por tanto, en meterse dentro de las 10,rallas, aunque fuera con estrechez, pues n13,svalía una mala casa en seguro que un pal3ei°expuesto a todas las contingencias.(1) Patronato, 456-7.(2) Eubel: Die Avignonesische Obedienz..., pág . 203'(3) Patronato, 287 y 456.— 261 —Con este motivo luchó la Orden de la Mercedr.arlos años en muchas ciudades de la coronaarag onesa y también en algunas de Castilla. Unade las traslaciones que costaron más trabajo fuéla del convento de Vich, derribado para evitarque si rviera de apoyo a los enemigos contra laInuralla. Pedro IV mandó al Obispo y a la ciudadque dieran a los Mercedaries casa dentro de ella,Pero cada palmo de terreno costó un pleito. Laeunstancia del Comendador P. Guilmon, fuéalla nando todas las dificultades por medio derePetidas cédulas reales y de hábiles negociaciones(1).ci El Obispo Don Ramón de Beleria, monje de\-',11)(ä, (t 1377) era muy afecto a la Merced, hastael Pu nto de que en su palacio se celebró el Capítul°general de 1376 (2). No así, empero, su2tieesor Don García Fernández de Heredia, aUiePedro IV hubo de dirigir duras reprimen-"S hasta ver a los mercedarios dentro de lacnitidad. La última carta del Rey al Obispo yabildo termina por las siguientes palabras:«Por lo cual queriendo absolutamente poner(1) Patronato, págs. 307 y siguientes.bia(2) A. H. N. de Madrid, Clero leg. 2.043. Fueron deti-Z° 1'e s con el Rvdmo. Fray Nicolás Pérez, Fray Beren-V er Za clusa, por la Provenza; Fray Francisco Olot,b4ehiller en Decretos, por Cataluña; Fray Bernardo Gula-.s en , d octor en Decretos, por Aragón. El de Valencia noe exp resa, pero era seguramente Fray Jaime Taust, a1,gilien va dirigido el documento, que es la concesión de'stifructo de una casa reparada por él.

— 262 —fin en breve a las quejas de dicho Comendador?pues sabemos que es molestado indebida e injustamente,os requerimos y rogamos, y a vosotr°5y a cada uno de vosotros decimos y mandan:Oque deis lugar y coopereis en efecto a qu e 115cosas dichas en nuestras letras expresadas, se311ejecutadas en el término de un dia despuesesta os fuere intimada, portandoos de tal manorg'que no veamos otra vez al dicho Comendadnrvenir en queja por las cosas dichas.»«De otro modo no queremos ocultar qu e 11°pensamos escribiros nuevamente sobre ello, sineque por desobediencia a nuestros mandatos h aremosproceder contra vosotros y vuestras ten310-ralidades, según nos pareciere conveniente, porqueasí de ciencia cierta queremos y mandanl°sque se haga en favor de dicha Orden. Dada ellBarcelona bajo nuestro sello secreto el 19 deMarzo, año de la Natividad del Señor 1380 (1).Cosa parecida sucedió con el convento cleTortosa, demolido en 1376 para ensanchar Ia'smurallas. El nuevo se edificó en la casa de Sant°'Catalina, que los Mercedarios poseían dentro della ciudad. Medió personalmente en el asunt° ecRey en una visita a Tortosa en 1380 y el PrinciP;on Juan, pero aún pasaron dos años ante s citl' Del pleito se resolviera favorablemente. Lo s queahora se quejan de la lentitud de nuestros procedimientostienen donde consolarse y edificarse (21.(1) Patronato, 310.(2) Ibid. 310-313.— 263 —En Mayo de 1388 celebró Fray Nicolás capítulogeneral en Játiba, del que fueron definidoresFray Juan de Pamiers, Comendador de Carcaso-", por Francia ', Fray Jaime Tauste, Prior deBar celona, por Cataluña; Fray Pedro Baygorri,Com endador de Sangüesa, por Aragón y Nava-Fra; Fray Bernardo Moner, lugarteniente del134ig, por Valencia; Fray Diego de Sevilla, Co-Mendador de Sevilla, y Fray Simón de Agreda,Comendador de Guadalajara, por Castilla y Portugal(1).En Agosto de 1397 estaba el General graveinenteenfermo, y temiendo que a su muerte laSanta Sede nombrara Maestro sin contar con la°Me'', ésta comenzó a tomar precauciones. Hizoen Primer lugar que el Rey de Aragón escribieraal Papa suplicándole apretadamente que no escUcharalas peticiones 'de los ambiciosos, sinoqu e la dejara libre para escoger al más digno (2)37 en el Capítulo general que estaba convocadoPara Carcasona se nombraron los electores de lascinco provincias.Presidió el Prior de Barcelona Fray Guiller-,14 Vives, y fueron nombrados para el caso de1, `altar el General: por la provincia de Francialeetor Fray Pedro Guilmón, Comendador de'erpifián , y Subelector (caso de estar impeclidoel primero) Fray Ramón de Valls, Comendadorde Narbona; por Cataluña, Fray Juan(I ) A. C. A. Monacales, 2.679, fol. 116.(2) Patronato, 166.

— 264 —Cirera, Comendador de Tarragona, y Subeleetor,Fray Juan Gilabert, Comendador de Lérida; PorAragón, Fray Martín ,de Liso, Vicario de Monflurite,y Coadjutor, Fray Pedro Baygorri, Comendadorde Pamplona; por Valencia, Fray B elnardoScala, Comendador del Puig, y Coadj u-tor, Fray Bartolomé Martí, Comendador de Ar"guines.Nombráronse también redentores y se mandódepositar las limosnas recogidas en poder delPrior de Barcelona, de Fray Bernardo de Plano,Comendador de Tolosa y Vicario del Sr. Maestreen la Provenza y del Comendador de Montpe"ller (1).Pero el General, a pesar de estar desahucia;do, salió de la enfermedad, y en Octubre de 139‘hizo todavía una importante adquisición de bi e-nes raíces en Villenouvelle, cerca de Tolosa'para el convento de aquella ciudad, •representa'do en el otorgamiento de la escritura por su P rocuradorGeneral Fray Bernardo de Plano a 22 deOctubre (2).Esto demuestra que el General se había reconciliadocon la comunidad de Tolosa, a la clueen años anteriores había tratado duramente. 13113bula de 1387 nos hace saber que Fray Nic00Pérez había excomulgado por rebeldes y coutirmaces a siete conventuales, desde el Comendor Fray Juan Grassi hasta Fray Bernardo de(1) Gaver en el Catálogo de los Generales.(2) Toulouse: Arch. Depart. Merci, leg. 1 y 7.— 265 —Planis (probablemente el futuro General). Clernte VII a 25 de Marzo encarga al Obispo de.1" a n -Hers que los absuelva (1). Quizá no hubieraen el asunto sino una mala información de lasque entonces eran frecuentes a causa de las dificultades en las comunicaciones.A estos años corresponde la traslación delcuerpo de Santa María de Cervellón en nuestralesi a de Barcelona (muy adelantada ya por en-'°Ilees)• Fué colocado en lugar elevado en unarea de madera decorada con hermosas pinturas,que to davía se conservan por fortuna. En uno delus co stados se representa a la Santa vestida conel häbito de la Orden. Fué esto en Julio de 1380,at_\1 Parecer, y en la traslación tomaron parte elb"blsPo de Barcelona v el Rey Don Pedro (2). El-`.• Ribera encontró en' los registros Reales la cantidadque se pagó al notario por el acta corres-Poudiente (3).y. El General Fray Nicolás Pérez falleció enalencia el 18 de Marzo de 1401, dejando a lad'Iden muy mejorada, aunque no tanto como puitechera y debiera, si sus ambiciones no le hubieranO perder tiempo y dinero en Aviñón.Eubel: Die Avi o.nonsische Obedienz... pág. 203.a: 49)4. Gazulla: Vida de Santa Maria de Cérvellón... pági-(8) A. C . A. Libro de Nótulas del P. Ribera.

CAPITULO XVActividad de la Orden durante el gobierno deFray Nicolás PérezSUM ARIO: Estado lamentable de Europa.—RedencionesPor estos afíos.—Privilegios en Castilla y detalles curiosos de la redención.—Los Mercedarios en Galicia.—Mini sterios sacerdotales.—Conflictos en Perpirián y°tras ciudades.—Recóbrase el santuario de Bonaria.—Intentos de obtener la exención.—Los Mercedarios,Cap ellanes Reales.Quien conozca un poco las guerras e inquielitucles que padecieron los reinos de España y' rancia en el último tercio del siglo XIV, se maravillará de que los Mercedarios hayan trabajadotanto en aquellos años, cuando hasta el vivirPA areeía imposible. Las guerras entre Castilla,ragón, Navarra y Portugal, con diferentes alnativas, llenan casi todos aquellos años, y poresto era poco, en todas partes hubo guerrasviles ; entre Don Pedro el Cruel y su hermanode Trastamara en Castilla, y entre el Rey y la"lián de los Nobles en Aragón.d En Francia ardía con todo su furor la guerra-e Cien Años, y franceses e ingleses, después de

-- 268 —asolar a Francia, vinieron a España para apoyara sus amigos respectivos.Pues a pesar de todo eso, los Mercedarios reunieroncuantiosas limosnas e hicieron numeresas redenciones atestiguadas por documentesfehacientes, aun prescindiendo de las enumera'das en crónicas muy posteriores.Pocas semanas después de su elevación algeneralato obtuvo Fray Nicolás Pérez una bulade Urbano V en que daba amplias licencias a lesredentores Mercedarios que fueran a tierra deinfieles, para absolver a los cristianos cautivosya redimidos (1).Gregorio XI, a 17 de Mayo de 1373, Para'eximir a los Mercedarios de contribuir a los su b-sidios concedidos a los Reyes, alega la siguienterazón: «Mirando con atención los saludables enldadosde vuestro trabajo, al que os dedicaisduamente, para la redención de los fieles cristianosdetenidos en miserable cautividad por 1°senemigos de la fe ortodoxa, y los múltiples g5tos. que continuamente soportais para la dielredención, reputamos digno y convenienteclaros con singulares favores.»«Una petición presentada por vosotros conteniaque si bien todos los frutos, réditos y entradasde los beneficios, casas y otros lugares v ilestros,junto con las limosnas de los fieles cristia(nos, debían ser consagrados, y lo son efect1v3-mente, a la redención (salvo lo necesario 133ra(1) Bulario, pág. 45.— 269 —VtleStro sustento y vestido), sin embargo loscole ctores de los diezmos y otros subsidios osObligan a contribuir a ellos» (1).El mismo Pontífice renovó en 1374 las amenazascontra los clérigos que retenían para susiglesias parte de las limosnas de los cautivos,repitiendo las frases durísimas de Nicolás IV en1291.Pero quien más entusiasmado se muestra con,a labor de los Mercedarios es Urbano VI, en una"tila expedida en 1378, primero de su pontificado:

— 270 —tando cautivos en Collo, Bona y otras poblaciones(1). El 14 de Junio llegaron a Mallorca con12 cautivos que elevaron a escritura pública Cldocumento hecho en Collo (departamento deConstantina), obligándose a seguir a los redento"res durante medio ario (2). Entre ellos había algunossicilianos y sardos.Más expresivo es otro pergamino de 20 deOctubre de 1388, en que el Cardenal Jaime deAragón, Administrador de Valencia y herman°de Pedro IV, pone en conocimiento de los fielesla redención hecha por los Padres Jaime de SanMartín, Prior de Barcelona, y Pedro Baygorri,Comendor de Sangüesa. Traían de Bugia 38 cantivosque habían costado 3.840 doblas de oro,precio enorme, y la Orden había quedado eraP e-fiada. Los cautivos, que eran una mínima partede los que había en Bugia, salían para recorrerlos pueblos y pertenecían a las coronas de Ara"gón y Francia (3).En el Capítulo de 1395 fueron nombrados re"dentores los Padres Guillermo Vives, Prior deBarcelona, Aymerico Alagueda y Juan Cirerg'Comendadores de Tárrega y de Tarragona r espectivamente,que obtuvieron licencia de Juan Ipara trasladarse a Berbería (4). El 23 de Novieni.(1) Gazulla: Refutación, pág. 26.(2) A. C. A. Monacales, t. 2.703, pergamino 3.°.(3) A. H. N. de Madrid. Clero: Pergaminos de la Mer'ced, de Mallorca, leg. 55.(4) A. C. A. Nötulas del P. Ribera, I, pág. 165.— 271 —bre estaban de partida, según se ve por una cartaReal relativa al Superior de Barcelona encar, do del Gobierno durante la ausencia del PadreVives (1).En Agosto de 1397 se celebró Capítulo generalen Carcasona, bajo la presidencia del men-L.11111111•111111~n1111•11•11Convento de Nuestra Señora del Puig.CiGnad O Padre Vives, por estar el General enferd—,°de peligro. Gaver, que vió las actas, nos'd e'e que fueron nombrados redentores el ComendeTolosa Fray Bernardo de Plano y el de2,jareasona, Fray Arnaldo de Arenchs. Las res-`- i °718i°nes, o sea el dinero reunido en ese ario para; redención, ascendía a 1.046 florines de oro de.` ragón.ese ario de 1397, según un documento(1) Pat ronato, pág. 164.

— -272 —Franciscano, estaba en Granada el Mercedari°Fray Miguel (probablemente Redentor por Ca stilla),que presenció el martirio de los minor1t3sFray Juan Lorenzo y Fray Pedro de Toledo, ordenadopor el Rey Mahomad el 19 de Mayo (1).Una cruz de piedra recuerda este suceso en 13'Alhambra.Como la limosna de los cautivos se reun ía enlos capítulos y los de Castilla eran independ ieutesde los de Aragón y Francia, independientegeran también muchas veces las redencione s deambas coronas. Son pocos los documentos quehasta ahora tenernos de Castilla, pero muy si gnificativos.Don Enrique II concedió a la Merced,1373, un extenso privilegio en que se detall a lgmanera de reunir limosnas y de hacer la redención:«Sepades que Fray Pedro Rodriguez,cial de la Orden de Santa Maria de la Merced'se nos querelló e dice que... algunas vecesdo van a tierra de moros él e los frailes de i?dicha su Orden a sacar cautivos de tierra uemoros, que lievan mulas e acémilas, para vende:e dar por los cristianos cautivos; e que algull°'recaudadores de las rentas de los nuestros se11%-n os e de la dichas Ordenes e de otros seriorin'que les toman derecho por las dichas bestia s queansi lievan, non lo deviendo tomar.»(1) Ramos y los Certales: Cautiverio en Aragón, Pha XLII.-- 273 —2. ° «E otrosí que nevar' lienzo para haceriiibas (1) e albanegas (2) a los cristianos quan-', 1° los han comprado e sacado de captivo e queles toman los cogedores derecho de ello, non ge11`) debiendo tornar.»3. ° « Otrosí que algunas veces les daban algu-1-10s fieles cristianos por amor de Dios, para sacarlos cristianos cautivos: vacas, ovejas e otrosganados; que guando los lievan les demandancieno derechos en los nuestros reinos, e en lastierras de las Ordenes e en los otros seriorios,n°11 ge lo debiendo tomar.»f , 4. ° « Otrosí que guando sacaban algunos cris-Liallos de cativo, que les escodriñaban en Córdo-"a e en algunos otros lugares e que por un tabadelue(3) o por un par de zapatos, o por otra cosa• Poca valía que traian los cristianos que salian• eativo, que les toman los arrendadores dereeh°dello, e que les fazian desaguisado e agraalniento;e que si esto asi pasase, que la su"rdenno podria fazer esta obra tan santa comode redimir los cristianos de poder de los mo-1.08 renegados.» (El Rey amenaza con gravesPenas a los que tal hicieren).«E otrosí por fazer bien y merced al dichoreEvincial e a los frailes de la dicha Orden con-)11 (1) Aljuba: Vestidura morisca, especie de gabán conallg'as cortas y estrechas que usaron también los cristia-1)8 es P,arioles. (Acad.)b (2) Albanega: Especie de cofia o red para cubrir la caza.(Acad.)(3) Tabaque: Cestillo de mimbres. (Acad.)18

— 274 —firmamosles todas las franquezas e gracia s emercedes e buenos usos e buenas costumbres cluelos Reyes onde Nos venimos ficieron a esta Ordensobredicha.»6.° «E otrosí por facer mas bien e mas Inerceda esta dicha Orden e al dicho Provincial e alos frailes de la dicha Orden, rescebimos a ellose a todas sus cosas en nuestra guarda e en n tlestraencomienda e en nuestro defendimien to, emandamos e tenemos por bien que anden salvose seguros por todas las partes de nuestros reinos'con todo lo que llevaren e traxeren de unos lu ggresa otros, no sacando cosas vedadas fuera delos nuestros reynos...»7.° «E otrosí vos mandamos que guand o eldicho provincial o los frailes de la dicha Orde'acaescieren en vuestros lugares, que les dedes efagades dar posadas sin dineros en casas de btlenoshomes e honestos; e viandas por sus dineros.»8.° «E otrosí vos mandamos guando fuer°con el ayer para sacar cautivos, que si ovierellmiedo o recelo de homes malos, que les dedes,guia de un lugar a otro, porque no se pierda elayer que ansi llevaren.»9.° « Otrosí si algunos bienes p arescierellmuebles o raices, e no pareciendo dueños dell°'a esto tal que es llamado mostrenco e perteneseea Nos, tenemos por bien que lo haya esta ordell,para esta limosna e obra de piedad para saeß>cautivos.»10.° «Otrosí nos dixo que a las vece s les— 275 —a lai' los cristianos fieles, moros e moras paral'eclitnir cristianos cautivos de tierra de moros, e*que lle vándolos por los nuestros reynos e por latierra de las Ordenes, que les demandan derecho,n" lo debiendo facer...»11. ° « Otrosí nos dixo que algunas veces al-1\ gunos de los frailes de su Orden, non temiendo asalian desobedientes, e andaban por los"estros reinos e por las tierras de las OrdenesPidiendo e recaudando las limosnas que perteneseena los cautivos, e que las despendiannlalos usos, e que se defendian con algunos sellol'ese en la tierra de las Ordenes, e que en estoUerescibia la su Orden grande agravio; porqueOMandamos que guando el dicho Provincial..."Os Mo strare a tales frailes, que los tomedes e losfagades tomar presos e ge los entreguedes contv°,d° lo que les falláredes, porque el dicho Pro-(..'ne ial los castigue e los corrija segund Dios y su-rden. »d 12. ° « Otrosí que les non tomen nin consintarto mar tercio nin cuarto nin alcavala de lolas buenas gentes les dan por amor de Diosl 'ara sacar cautivos, salvo si les fuere demanda-Pipr razon de sepulturas que alguno se manta're enterrar en sus monesterios, ea entonceetelos por bien que paguen lo que es derecho.»tlePite, te,además, otras cláusulas de los privimgilpsde Fernando IV, relativas a las mandas in4, i-Las y a la entrega inmediata de las limosnasJadas en los testamentos, sin esperar a que los-ailes tr ajeran los cautivos redimidos, cosa im-

— 276 —posible. Pero no se obliga a los albaceas a l'Ostrar los testamentos, ni menos se aplican a 13'redención los bienes de los que morían ab intestato,concesiones anuladas en el famoso Orde'miento de Alcalá en 1348. Esta carta está fec113-da en Valladolid a 25 de Marzo de 1373 (Era de1411).Otra disposición general de orden eclesiástie°referente a la redención hallamos en el Concili°de Palencia presidido por el Cardenal legad°Pedro de Luna (después Benito XIII) en 1388'Mándase confiscar los bienes de los clérigos c°11-cubinarios, privándolos de sepultura a ellos Y 3sus cómplices. Una tercera parte de esos bien°debía aplicarse a la redención de cautivos,cargando su recaudación a los frailes de ladad y de la Merced, con obligación de dar CUCOa los ordinarios de su inversión (1).En Galicia, donde la Orden no poseía 011-ventos, algunas cofradías recogían limosnas 193r9Yla redención, entregándolas a los frailes de Sant3Eulalia. Tal hacían los clérigos de Santa rreelten La Guardia (Pontevedra), cuyas instituciolle"se conservan y son por lo menos de mediad°de este siglo (2).El personal de la Orden había aumentado Yla redención no era ya el único ministerio de 05(1) Tejada y Ramiro: Cánones de la Iglesia Espai l°194III, pág. 615.(2) Según nota que debo a D. Juan D,-,mineuez c, erudit°canónigo de Orense. •— 277 —Mereedarios. Hemos visto que en 1373 el Rey deAuragán pedía a Gregorio XI que igualara a losereedarios con los predicadores y menores en'o re lativo a la predicación y confesión y en el›el:reche de sepultura, «pues muchos frailes de la'dcha Orden se consagran continuamente a buscarl a margarita de la ciencia».Eibrillo exterior que estas cosas daban a la‘"I'clen y las limosnas que le proporcionaban fue-1.°11 causa de algunos disgustos con los clérigos2eeulares dica y principalmente con los frailes men-ntes, que si no tenían bienes temporales,.e°nsideraban como propiedad suya las limosnasde los fieles.El conflicto revistió verdadera gravedad enell31fián en 1390, pues los mendicantes apoya-"s Por el Obispo, carmelita, se negaron a asistirl O s funerales a que fueran invitados los Mercealios. De todo salió triunfante el Comendador' IsaY Pedro Guilmon con el apoyo del Rey (1).Renovóse el pleito en 1399, dando ocasión aeille elfr a Rey Don Martín escribiera al Obispo estasses intencionadas:«Entre la variedad de las diversas Ordenesn que se adorna la Iglesia, esposa de Cristo,- guna Orden es más fragante por su virtud,:411guna despide más suave olor de Cristo que lai aerat isima Orden de Santa María de la Merced,t'In, dada con miras a la redención de los fielesl'' tlanos cautivos en poder de los pérfidos sa-(1) Pat ronato, pág. 317.

— 278 —rracenos y de la cual Nos somos Protector y 193-trono...» (1).Los mendicantes se oponían tenazmen te 3'que los Mercedarios asistieran a las procesionescon cruz alzada, a pesar de que tomaban hum ildementeel último lugar, y el Obispo había mandadoque los rectores de las iglesias no llamarana los Mercedarios a predicar sino a falta de niendicantes.Estos, además, estorbaban el pedirmosna para la redención en sus iglesias, maltr a-tando a los Mercedarios y arrojando por el aireel dinero recogido (2).Cosa parecida había ocurrido en el conventde Orihuela en 1389, donde era Comendador e'P. Francisco de Plano, o Desplá, consejerocapellán de Juan I que le apoyó enérgicamelyte (3).En 1392 el Vicario del Obispo de Htlesed'entró violentamente en nuestro convento de M°11-florite, y después de saquearlo y maltrat ar 3los frailes, se llevó preso al P. Andrés de Mnirfort, que fué defendido por el Comendado r deHuesca y Monfiorite, el ya citado Fray Pecir.,f°Guilmon, consejero y capellán de Juan Iacostumbrado a semejantes lides (4).Es probable, sin embargo, que una parte delos conflictos que señalan el pasaje de dial&(1) Ibid. 334.(2) Ibid. 331.(3) Ibid. 315.(4) Ibid. 318.— 279 —Padre por los diferentes conventos fueran produiclóspor su carácter impetuoso. La lucha queluego sostuvo con la Orden entera (que por fortunalogró derrotarle), demuestra que no era1.fl°111bre pacífico. ¡Pobre mentalidad la de los' ral les, que ponían su gloria en salir triunfantesue t ales pleitos y no mas bien en evitarlos!Algo parecido, aunque menos violento, sucediótambién en Berga en 1396, siendo Comenda-,c4 el P. Guillermo Vives, a cuya defensa salió.la R eina D.' Maria, esposa de D. Martin (1).Mayor fué la contradicción que experimentóla Orden en Cerdeña para recobrar el santuarioBonaria, abandonado algunos años a causa de'as guerras que asolaban la isla y que tocabanInny de cerca al convento por estar inmediato alcastillo de Cagliari. A 26 de Septiembre de 1396heeribía la Reina D. María al Arzobispo que elr• Gabriel Sala iba a tomar nuevamente pose-1611 de la Iglesia, suplicando lo recibiese benignainente.Lejos de hacerlo así, opuso tenaz resistenciay sólo cedió a repetidas cartas reales (2).Todo esto, sin embargo, no era sino un amago" las tormentas que la Orden había de sufrir enel siglo siguiente, y de las que salió victoriosa,1:11iiparada y aun preferida a las mendicantes.Por todo ello, se hacía indispensable eximira,l ja Merced de la jurisdicción ordinaria, some-'16ndola inmediatamente a la Santa Sede. Pedro(1) Patronato 320.(2) Ibid. 322.,

— 280 —IV lo había intentado ya en 1374 escribiend o alPapa una larga carta donde expone las violen'cias y atropellos de que los Obispos, o sus V icarios,hacían víctima a la Orden, contra Di os Yjusticia, obligándola a consumir en pleitos lasrentas que deberían emplearse en la redención'Para demostrar el interés que ponía en ello ariadióde su puño y letra esta postdata:«Padre Santo: Como yo repetidas veces hayaescrito y suplicado a V. Santidad que tuviese porbien eximir de toda jurisdicción ordinaria a laOrden y a los frailes de la Merced, fundada Pgmis predecesores, según largamente aparece Pgla solicitud a Vos enviada; por tanto, Os suplie°afectuosamente (pues tengo en el corazón dielleasunto) que Os digneis proveer y ,firmar las cosascontenidas en mi súplica antedicha; pues en est°V. Santidad me hará gracia y placer, a fin deque en mi tiempo dicha Orden se vea aumentaen bienes y libre perpetuamente de toda oposición.Escrita de mi mano en Barcelona el 3 deFebraro. Rex Petrus (1).Gregorio XI concedió todas las cosas pedid°por el Rey, pero no la exención, y la Merced c ontinuóexpuesta a todos los arrebatos de los Proiriisores, que en aquellos tiempos sustituían e n ej'gobierno eclesiástico a los Obispos, muy oc upadosen guerras y asuntos temporales.Cuando la tormenta arreciaba, los Reye s deAragón ponían a salvo la Orden declarando a 1°— 281 —e°111endadores y frailes capellanes suyos y a lose°11ventos capillas reales. De ese modo quedaban20In etidos a la jurisdicción palatina, que era dehecho y de derecho exenta como lo es hoy, aunqueno fuera tan respetada.Así los Obispos y sus Provisores tenían queentendérselas con el Rey y su Fiscal y con ellosa' entaban los Capítulos de concordia. Tal sucedióeuri Vich en 1401, al ajustar los derechos que losm-ereedarios habían de pagar por funerales, ser-Ortes y obras, previa la declaración de capellanesY1400 (1)capilla Real hecha el 18 de Diciembre deLa fórmula de esta declaración era idéntica a'a empleada en favor del convento de Barcelonaet 27 de Enero de 1401, cuyas principales cláu-"las son las siguientes:• • • « Nuestros ilustres predecesores los reyes deAr—1, aen , por el afecto de íntima devocion que1-vrellian a la beatisima e intacta Virgen Mariak "-re de Dios, fundaron muchas casas y monasnr,ert'sen nuestros reinos, que se llaman comunentemonasterios y casas de Santa Maria de lal eed de los cautivos, recibiendolas a ellas y a'4 comendadores y frailes bajo su especial enco-Itlienda y proteccion... Nos reverenciando a laVirgen, vida, dulzura y esperanza nuestrae° 11. Pureza de mente y de alma, siguiendo losilestigio5 7. de nuestros predecesores... acordamosrar a la dicha Orden con los favores oportu-(1) Patronato 272.(1) I bid. 342 y 455.

— 282 —nos... Sabiendo, pues que los religiosos amadosnuestros, Guillermo Vives, prior y los frailes dela casa de la bienaventurada Maria de la Merced,de la ciudad de Barcelona están consagrado s alculto divino y a obras meritorias.., por el ten°rde nuestro privilegio presente, valedero par3siempre, querernos y mandamos que la dichacasa, capilla o iglesia y monasterio sean nuestrosy de nuestros sucesores y recibimos a los prioresy frailes de ella presentes y futuros por cape113-nes, familiares, domésticos y comensales nuestros,queriendo que gocen en adelante de tod°slos honores, gracias, favores, privilegios, ¡ nulanidades,franquicias y prerogativas de que disfrutanotras capillas e iglesias Reales y los deingsfamiliares, comensales y domésticos nuestros quesiguen continuamente nuestra Corte...» (1).Y así manda que se comunique al Obisp o deBarcelona y a todos los demás prelados. A tie01Pevenia esta declaración, pues el horizonte ap arecíaamenazador.(1) Patronato, 287.CAPÍTULO XVIQeneralatos de Fray Jaime Tauste (1401-1405)Y de Fray Antonio Caxal (1405-1417)StTMA RIO: Elección laboriosa del P. Tauste.—ConflictoCOn el Obispo de Barcelona.—Favores al convento deValencia.—Elección del Maestro Caxal.—Cardenal proteetor.—Capitulos celebrados por el * General.—Embajadaa Fez. —Intento de reforma en Valladolid.— Trabajos del General en favor de la paz de la Iglesia.—Emb ajada a Constanza.—Muerte de Caxal.—Redencioannesnuevos y renovados. — El Beato jtiGilabert,Muerto el General Fray Nicolás Pérez el 18cle Marzo de 1401, la Orden, poco satisfecha degobierno, se propuso recobrar a toda costa elerecho de darle sucesor. La lucha con el Obispo" tar celona y con el ambicioso por él protegidoter rible, pero los electores pudieron al fineantar victoria.11 Convocados por el Prior de Barcelona, P. Gui-11Vives, estaban ya todos en el primer conentode la Orden el 1.° de Junio, exeeptci el deastilla. Eran electores además del Prior:Gilabert, Comendador de Lérida,JuanPorClaPta. l .Pray Felipe Andrés, Comendador de Teruel,4-4 Aragón y Navarra.

— 284 —Fray Jaime Tahust, Vicario perpetuo delPuig, por Valencia.Fray Francisco Gin, Comendador de Palma,por la Provenza.Fray Pedro de Logroño, Comendador de 'D e-te, por Castilla y Portugal.El derecho de los electores no expiraba hastael día 18 de Junio en que se cumplían los tresmeses, pero el Obispo de Barcelona para influiren la elección se propuso entonces hacer la visitadel convento, cosa no realizada jamás por susantecesores en . casi doscientos años que contabade existencia.Era Obispo entonces D. Juan Armengol, e'cAbad de San Cugás del Vallés, grande amigo denuestro Fray Pedro Guilmön, valenciano eolue.61 y tal vez condiscípulo suyo, pues ambos eralldoctores en Decretos. Tengo observado que estetítulo sirvió muchas veces para burlar las leYeSy atropellar a los demás.Resistióse el Prior a la visita y el Obisp o seapresuró a excomulgarle a él y a toda la Connidad, a pesar de la apelación interpuesta autela Santa Sede y de que los Mercedarios tenla'1desde el siglo XIII el privilegio de no pode r serexcomulgados por aquellos irascibles Prelados'Con esto creía el Obispo dejar al Prior fuera clecombate para la elección.Las Constituciones decían que en caso delestar inhábil la Comunidad de Barcelona para'nombramiento de General, el Comendado r 'ej.Tarragona sucedería en todos sus derechos 3El Beato Juan Gilabert.(Viñeta de Pedro Perret en la portada delos tonlos «Variarum Disputationum»,de Zumel. 1608)

— 286 —Prior, y éste se apresuré a comunicarlo así 51P. Juan Cirera, Comendador de Tarragona.Esto tenía además la ventaja de sustra er alos electores de la jurisdicción de Barcelona'colocándolos a la sombra del Metropolitano, quese mostró muy favorable a la Orden.El 13 de Junio procedieron a la elección enTarragona los delegados de las provincias c on elComendador Fray Juan Cirera y el representantede la Comunidad Fray Francisco Verdaguer.Fray Jaime Tauste dió su voto al P. Antoni°Caxal y el delegado de Castilla a su Provincial'el Maestro Fray Pedro de Burgos. Los otros cincelvotaron al citado Fray Jaime Tauste. Rogare n a'elector de Castilla que uniera su voto al de lamayoría, pero el P. Logroño se negó a ello, aP e-lando al Papa. En Castilla estaban sin ducl3cansados del Dr. Fray Nicolás Pérez, mas lusaragoneses podían responder que ellos taniP°e°le habían elegido.En el mismo acto la mayoría pide la eonfirmaciónal Papa y nombra Procurador al P. Jua'nGilabert (1). El Rey Don Martín y el ArzobisP°de Tarragona, apoyaron al nuevo General, y elP. Gilabert hizo frecuentes viajes a Aviñón c°11recomendaciones, que pueden leerse en el P atrenatodel P. Ribera (2).Prueba del buen concepto en que se teni a 3la Merced por estos años, son las siguientes pal'-— 287 —braS del Rey en carta dirigida al Papa el 8 dej U10 de 14 '02: «La dicha Orden va de bien enulej or hasta el punto que ha crecido en casas yPersonas muy notables y buenas, que son paraervieie de Dios y utilidad de la cristiandad y de'a cosa pública y para grande honor de nuestrae?rona» (1). Don ' Martín, ligado a los merceda-1105 Per estrecha amistad, había observado desdestl. inf ancia el crecimiento de la Orden, a pesarde to das las dificultades.Sin embargo, hubieron de contentarse conbellie el Papa se abstuviera de confirmar ni al• Tauste ni al P. Guilmon, a quien el Obispo de'areelona había nombrado General el 20 de Junio(le 1401, suponiendo que los electores habíana'tejade transcurrir los tres meses sin usar de su'erecto (2).b Seguíase también el pleito sobre la visita de'areelona , para el cual había nombrado el con-c,.ellto t su Procurador al Dr. Fray Bartolomé deel,fc)rs , que gastó en diligencias más de tresflo rines para terminar en 1405 por una avedela que maldice el P. Gaver, dando por:guro que el convento hubiera ganado la partifundadoen la prescripción.que demostraban todos estos incidentesj a que la Orden necesitaba la exención de losIldinarios si había de poder vivir. El Rey Donartin reclamó para el convento la exención de(1) A. C. A. Monacales, 2.672. Son las actas original&(2) Patronato, pág. 168 y siguientes.(C1) Patronato 273.'2) A. C . A. Monacales, t. 2.679, fol. 119.

-- 288 —que gozaban los capellanes reales, pues la Mercedera capilla real, y el Prior había puesto 13'sllaves del convento en manos del Rey, como detal dependencia suya. El mismo Rey, a qt11°,impresionaron profundamente las lágrima s de'P. Vives, cuenta el incidente en una de sus cartas(1). Su intervención produjo algún efect°7pero no todo el que se necesitaba. Sobran 1°sdocumentos de tan enojosos pleitos.Por fin Benito XIII, el 31 de Octubre de 1037confirmó en el generalato al P. Tauste, per°dando la Vicaría del Puig que él había tenido,su competidor el P. Guilmon, aunque el P. Gr113-bert había tomado posesión de ella hacía má s deun año (2). El nuevo General estaba ya gobe.rnandola Orden desde su elección, confirmado 5113duda por el Arzobispo de Tarragona.Así le vemos celebrar su primer Cap1tul°1degeneral en Lérida el 18 de Agosto de 1402,que fueron definidores Fray Antonio Caxal, 10estroen Artes y bachiller formado en Teol0g131por Francia; Fray Juan Gilabert, bachillerDecretos, Vicario del Puig, por Cataluña; Fr3Y-Sancho de Soria, bachiller en Teología, Conlelldadorde Pamplona, por Aragón y Navarra; fra.,Bartolomé Martí, Comendador de Arguines , P°,, ›Valencia, y Fray Pedro de Logroño, baellille'en Teología, Comendador (de Huete), por C3s(1) Patronato, pág. 345. ,, e 1;(2). «La Merced» de Mayo de 1930, pág. 172, y en vfibDie Ayignonesische Obedienz.— 289 —tina . La presencia de este último indica que laProv incia había aceptado también al nuevo General.Fue éste generoso protector del convento deV ale ncia, al que hizo grandes bienes, según Gaver. Un documento muy curioso de 1404 confirtilaese interés del General por aquella casa,ento nces muy pobre todavía, y a la vez nos daUna idea de la importancia del peculio reunidoPor algunos religiosos.El Comendador del Puig, Fray Guillen Cifré,había comprado en veinte mil sueldos una rentaanual de 800. La mayor parte del capital procecijadel espolio de Fray Bernardo Scala, Vicario(1 ) ue había sido del Puig y de algunos otros fraitesY, Por tanto, la mitad correspondía al Genesegúnlas Constituciones.Para evitar pleitos, éste y la Comunidad del111g sometieron el litigio al abogado de Valenciaan cisco Blanch y a Fray Domingo Alavés,illereedario. Los árbitros fallaron en 18 de Dielnhreque el censo debía quedar propiedad delPero que el General cobraría durante su:id a la mitad, o sean 400 sueldos. A su muerte4)13 su eldos pasarían al convento del Puig, y losn°405.200, por común acuerdo del General y de la7. unidad del Puig, se darían al convento dealencia que estaba muy necesitado.d Este vendría obligado a celebrar anualmenteaniversarios por Fray Nicolás Pérez, Fray44-une Tauste y Fray Bernardo Scala, cada uno' e 20 su eldos, los cuales serían repartidos entre19

— 290 —los frailes de la casa de Valencia, etc. Diósesentencia en la cámara del dicho Fray DomingeAlavés, detrás del coro del Puig. Esta Comu nidaddebería tener igualmente aniversarios, asueldos, distribuyéndolos, según costumbre, entrelos frailes, que eran entonces trece (1).Por otro pergamino de 1405 nos enteramo s deque el P. Tauste había pagado por manos deFray Juan de Josa al noble caballero Pedro FernándezDixer, Comendador de Montalbán, elcenso que pesaba sobre Algar a causa de las podigalidadesde Fray Nicolás Pérez (2).El P. Guillén Vives, hombre pacífico y l'unidde,menor en días, como él solía titularse, y queno obstante hubo de sostener rudos combates,murió santamente en Barcelona el 3 de Ener o de1405, y el día 5 fué elegido para sucederle elP. Antonio Caxal, entonces Provincial de Frag;cia, que estaba enfermo en Tolosa. El 6 de Abri'prestó obediencia canónica al Obispo de Bar eelona,en virtud sin duda de la concordia en O°había parado el pleito de la visita (3).Celebró el Maestro Tauste un Capítulo esteiaño, al parecer en Tarragona, en que se tomó eiacuerdo de que las encomiendas vacantes ültlrante el año podían ser provistas por el Generg'o sus Vicarios, y los así nombrados eran verd3-deros Comendadores hasta el próximo Capital°.(1) A. EI. Nl. Mercedarios del Puig, leg. 2.047.(2) Ibid.(3) A. C. A. Monacales 2.679, fol. 119.— 291 —Pueron definidores el P. Caxal, Prior de Barc,el°11-a , por Cataluña; el P. Gilabert, Comenda-'or de Perpiñán, por Francia; Fray Juan Cirera,e°111endador de játiba, por Valencia; Fray Mar-.tin de Liso, Vicario de Monflorite, por Aragón yIN:avarra, Fray Mateo de Guadalajara, Comenda-"r de Toledo', y Fray Pedro de Logroño, bachilleren Decretos, Comendador de Logroño, porCas tilla y Portugal (1).El. 28 de Agosto de 1405, falleció en ValenciaGenei Tauste de avanzada edad, a juzgar1) ,er los cargos importantes que había desempenadocuarenta años antes.El Prior de Barcelona P. Caxal hizo ya unabtlena obra en la vacante y fué redimir el censo"e p esaba sobre Algar desde 1387 por • 7.000124,eldes de capital pertenecientes a D. Pedro Ferf,'Ianclez de lijar y a su esposa D . Beatriz. La'rrta de pago lleva la fecha de Valencia 28 dePtiembre de 1405. Es probable que , la reden-„ 1611 se hiciera con el dinero encontrado en laJadel difunto General (2).a .eAn tes del 2 de Octubre dieron el generalato-u re Antonio Caxal, que poco después se titula15;4 Maestro en Teología, grado que debió obtenerste tiempo, y para el que le faltaba sólo el1:.ner°, pues ser bachiller formado, por París era- l'tlaYer calificación en los estudios de entonces.Ignoro la fecha precisa de su elección, pero(1)(2) A Cons tituciones albertinas, Dist. II, cap. III.C. A. Monacales, t. 2.679, fol. 120.

— 292 --en 2 de Octubre el Rey la supone ya realizada, Yen 1. 0 de Diciembre recomienda calurosamen te alelecto (1). La confirmación lleva la fecha de 31 deEnero de 1406 y es la primera vez que los c urialesde Aviñón reconocieron pura y simplementea la Orden el derecho de darse un Genera l (2)"El 1.° de Diciembre de 1405, escribió tambiéliD. Martin al Papa recomendando al P. Gilabertpara Prior de Barcelona y haciendo de é l unmerecido elogio, pero Benito se atuvo ala rec emendación primera hecha a favor del P. Z elfórés,doctor en Decretos, que fué nombrado Prieren 20 de Marzo de 1406, aunque renunció antede tres años.El 29 de Mayo celebró el P. Caxal su primCapítulo en Tarragona, su patria, cuyosdores enumera Gaver. Por Castilla, lo fue e>venerable Fray Juan de Granada, bachillerDecretos, Comendador de Córdoba y más tardeProvincial; tuvo dos votos por falta de supañero. Por Francia fué definidor Fray Bernde Plano, bachiller también en Decretos, Conleirdador de Perpiñán, al que hemos de ver Prent°General.A ejemplo de otras Ordenes que por entoncescomenzaron a pedir un Cardenal protect or, 9'Merced solicitó también en 1409, por mediacióndel Rey D. Martín, se diese este encargo al Caldenalde San Jorge Carlos de Urries, y debió sel'( 1 ) Patronato, pág. 177.(2) Eubel: Die Avignonesische Obedienz...— 293 --;dda la petición (1) pues el Rey escribe en adelantevarias veces a dicho Cardenal encargándOlenuestros asuntos. Vivió hasta 1420.B enito XIII concedió al General en 1405 lafac ultad de absolver a los religiosos de todos losC?Ì e/e-wd,s,1PON.USt.1406 I%r-1T° HegeCortcil *E pl SCEl Venerable Maestro Fray Antonio Caxal.(De la serie del P. Talamanco.),i13eados no reservados a la Sede apostólica, pu-'llendo delegar esta facultad a algunos padres, yetri4 tarde extendió la misma gracia al Provinj,alde Castilla En 1409 concedió altar portátilCaxal.(1) Pat ronato, 184.

— 294 —Aunque las Constituciones exigían sólo 1,119capítulo general cada tres arios, el celoso M aestrocelebró otro en Valladolid, en Pentecostés•de1407, a fin de reparar las quiebras pasada s Y.promover enérgicamente la observancia. _Asistió'como definidor por Cataluña el Padre Gilabertestaba nombrado también el Maestro Fray BernardoRiera, pero no consta su asistencia.El Rey Don Martin aprovechó este viaje parsencomendar a su amado consejero, el Padrexal, graves asuntos en la corona de Castilla,nombrándole al efecto su Embajador y escribiendocon tal motivo una carta muy exp resivaa su sobrino Don Juan II de Castilla (1)'También el Padre Gilabert llevó su recomención (2).En 1409 celebröse Capítulo provincial enMontblanch para las provincias de Aragón YFrancia, y esto a pesar de verse comprometidael General en gravísimos asuntos eclesiásticos Yseculares, sobre todo a causa del cisma que afligíaa la Iglesia con incalculable daño de la vi°cristiana.El Padre Gaver dice que Caxal fué hon'de grande eminencia, enviado por el Papa BO"y por el Rey de Aragón a diversas partes . °11408 le hallamos en el Concilio que la obedielrcia de Aviñón celebró en Perpiñán, al que a sistiótambién otro Mercedario, el Reverendisil°(1) Patronato, 124.(2) Ibid. 182.— 295 —PraY Antonio Blas, Arzobispo entonces de Caller(1).En 1413 desempeñó otra embajada por ordende Fernando I al Rey de Fez, o de Benamarín,e°1110 entonces decían, en compañía del noblecab allero Ramón de Conesa, empleando en ellanueve meses y días, a contar desde Marzo quesalieron de Barcelona. El Rey, agradecido a susbuenos oficios, mandó se le pagaran 662 y medioflorines de oro y otras cantidades.Durante su ausencia, el Vicario General nomm'OVicario del Puig al Padre Zelforés, por defuncióndel Padre Bartolomé Martí, y el Rey obtuvola confirmación de Benito XIII (2).El ario 1411 celebró el General nuevo Capítu-1° en Vich, a 3 de Junio, y otro en Estella de Navarrapor Pentecostés del ario 1414, sobre lose'uales suministra detalles Gaver. La celebracióncle este capítulo en Navarra fué seguramenteuna atención del General para el Rey Carlos IIIel Noble, que en 1412 había dotado a cada unode los conventos de Pamplona, Estella y Sanl'Ilesacon seis cahices de trigo anuales «por lag.rande et especial devoción que Nos avemos a laOrdene convento de los frayres de Sta. Maria`te la Merced, tanto por los devotos sufragios,111 ,r isas et oraciones que de dia et de noche son'echas et celebradas... como porque el dicho1) pelele un Ehrle: Archiv für Litteratur und Kir-'engeschichte... VII, 670 y 680.(2) Patronato, pág. 184.

— 296 —convento fué fundado por nuestros predecesoresde noble memoria a qui Dios perdone».Los conventos agradecieron la merced daudeal Rey carta de hermandad y ofreciéndos e acelebrar un aniversario por sus antepasados'El sello del convento de Pamplona representaun crucifijo con San Juan y la Virgen y al pi e elescudo de la Orden, con la inscripción: DonnisPampilonensis misericordiae captivorum (1) .El General en 1414 confirmó a 24 de Sep"tiembre, estando en el convento de Arguines elplan de reforma, elaborado para el convent o deValladolid por su Comendador, conforme a loque había comenzado a hacerse en otras órdenestambién.La reforma debía consistir, principalmente,en la restauración de la perfecta vida común Yen los medios para conservarla, entre ellos laelección de Comendador por la misma connniidad.Pidió esta confirmación la Reina Doña Beatriz,viuda de Juan I, Terciaria de la Orde n Y.gran bienhechora del convento de Valladolid,que al ario siguiente obtuvo la del Papa (2). Y3por estas fechas aparece como Secretario delPadre General un joven llamado Fray Antoni°Dullan, del cual se hablara adelante mucho y 110siempre bien.El Padre Caxal estaba empeñado con todassus fuerzas en la terminación del cisma, que erg(1) Arch. de Navarra: Comptos, cajón 90, núms. 47-5°'(2) Eubel: Die Avignonesische Obedienz...— 297 —-la obsesión de todas las almas grandes por ent"ces. El Infante Don Fernando de Castilla,elevadopor el compromiso de Caspe al trono deragön, ansiaba vivamente la unión de laPero encontraba gran dificultad en rompere°Ii el Papa Luna, a quien tanto debía y que,vie ndo su actitud, dicen que exclamó con proflindaamargura: Don Fernando me debe la coron'ade Aragón, que no le pertenecía, y quierearre batarme la tiara que me pertenece.Los recursos puestos en juego para convenceral Papa de que debía abdicar en el Concilioclue estaba celebrándose en Constanza, no sonPara contados aquí, pero en ellos cupo buenaParte a nuestro General. Al fin Benito se mantu-\'° en die sus trece y el Rey decidió retirarle la obe-ncia en Enero de 1416.Nombróse una embajada solemne que repree,ntara al reino en el Concilio, y en ella se diódel Primer lugar al Maestro Caxal, que fué recibi-`'e eon todo aparato en la Asamblea el 2 de Mardz°de 1416 (1). El poder sacado de los registrosL'e Aragón, fué publicado ya por el Padre Riberael Patronato (2).1, NO andaba muy fuerte de salud el piadoso1\1 -LeY Don Fernando y el P. General había ido aallorea a buscarle un médico conocido suyo y-e cuya habilidad confiaba mucho (3). Sobrevino(1) Mansi, XXVII, 839.(2) Pit o. . 126.(8) Ibid. b

— 298 —por fin la muerte y el P. Caxal pronunció e10de Abril la oración fúnebre de su real amig°ante el Concilio, presente, al parecer, el EmP e-rador Segismundo. El discurso ocupa seis colmar"nas en las actas y aunque la amistad haya Puestoen él un calor extraordinario, no cabe negarque Don Fernando merecía los elogios que le trrbatael P. Caxal (1).Al lado de las citas de la Escritura y SanWsPadres figuran en el discurso otras de Cicerón Yde Séneca y hasta una del Petrarca. El estil o de"muestra también que el Renacimiento se a eercabaa más andar.El Concilio escribió a 5 de Mayo dando elpésame al nuevo Rey Alfonso V y haciendo tan')."bién un cumplido elogio del P. Caxal, «hombrede gran circunspeccion y de vastísima literaturgy grave conversacion que con su eruditisilu°discurso habia consolado al Concilio, infor01311-dolo de que los deseos del nuevo Rey eran lesmismos de su padre con respecto a la union del3Iglesia» (2).En efecto, Don Alfonso confirmó en 1 0 deJunio de 1416 los poderes otorgados por su padre'nombrando por compañeros del P. Caxal a d°11Juan Ramón Folch, Conde de Cardona; al inri°Esperaindeo Cardona y otras personas más, Irviando con ellas unas instrucciones llenas uemarrullería diplomática (3). ¡El nuevo RO 11°(1) Mansi: Coneiliorum Collectio... XXVIII-567.(2) Patronato, 127. 91-27(3) Las instrucciones están en Simancas, P. It.— 299 —habla heredado la sencillez cristiana de su padre,tau elogiada por nuestro General!Los nuevos embajadores llegaron a Constanzaen Octubre, y para zanjar cuestiones de precedenciase convino en que los aragoneses alternaranen los asientos con los de Francia, viniendoa quedar el P. Caxal muy cerca de Gerson, quePresidía la embajada francesa y de quien habíasido probablemente condiscípulo.Tanto se distinguió el P. Caxal en aquellaAsamblea que muchos le conceptuaban digno delPalpado (dice el P. Gaver) y los Padres le nombraronObispo de León (1), dignidad que se negóa aceptar mientras no viera reformada la Iglesia.así (concluye su biógrafo) por la union de laMadre Iglesia murió en Constanza el 25 de'layo de 1417 y fué enterrado en la iglesia de losreclicadores, pero con reserva de entregarlo ala Merced».Desgraciadamente no se hizo la reclamacióna tiempo, y la iglesia dominicana fué profanadaPor los protestantes. Hoy sirve de salón al Inselc'Pa hecha para los embajadores que iban al Concilio deel (1) Episeopus Leonis es el nombre oficial de Saint-Pol-, e-Leun, sufragánea de Tours, aunque entonces no estaba,aeante, pero se propondría algún traslado. Es poco yero-" que Gaver llamara episcopus Leonis al Archiepis-ṯ °Pus Lugdunensis, como entendieron algunos de nues-5 Cronistas. Posible es que en ese nombramiento hubie-(l'a' el deseo de alejar de Constanza al P. General por partelOs Cardenales cuyas miras interesadas habla reproba--° según Zurita.

— 300 —Hotel, así llamado por estar en una isleta delRhin.«Creenlo santo en el mundo (termina Gaver)y yo asi lo creo tambien pues fuí su discípule,atenta su santa vida, pues nunca advertí en ellani observé nada que fuera digno de reprension"'Nosotros podemos añadir que el P. Caxal esuno de los mayores Generales que tuvo a su frentela Merced, digno de gobernar, no sólo una Ordende quinientos individuos, sino a toda la Iglesia"De un hombre así, la redención de cautivoscomo toda la vida de la Orden debió recibir unvigoroso impulso; «reformó toda la Orden » , diceGaver, que había recibido el hábito del Maestr°Caxal.Probablemente el mismo General había esta -do en Fez a redimir cautivos, y de ahí que s e lejuzgara el más apropósito para dirigir allá unaembaj ada.En 1409 fueron nombrados redentores los pa-•dres Jaime Aimerich Prior de Barcelona, FolBernardo Riera Comendador de Vich y Fray Bel'nardo de Plano Comendador de Perpirián,nes habiendo tocado en Mallorca de paso para ej.Africa, tuvieron pleito con la ciudad sobre dereellosde extracción de bizcocho y otras provisi°nesque allí hicieron. El Virrey condenó alnicipio por motivos de humanidad y caridad cris'tiana el 15 de Enero de 1410 y los redentorespudieron continuar libremente su viaje (1).(1) Ribera: Patronato, pág. 386. Alúdese también 3— 301 —En Noviembre de 1412 volvían de Bugia elilli smo P. Aimerich, Fray Juan de Josa, Comendadorde Játiba y Fray Francisco Ferrer, Comendadorde Tarragona (1).Sabemos también que en su tiempo hicieronrede nciones Fray Pedro Roure, Comendador del°1ivar, y Fray Juan de Josa, Comendador deJá tiba, con Fray Francisco Ferrer, Comendadorde Tarragona, y Fray García de Lanas, Comen -dador de Sangüesa (2).En 1415 hicieron nueva redención en Bona yotras ciudades africanas los Padres Pedro deMalasang, Comendador de Agramunt, y Juan degranada, Comendador de Soria y Provincial deCastilla (3). Años adelante los veremos juntos enOtra redención en que perdieron heroicamente lavida.El citado Fray Juan de Granada, bachiller enbeeretos, había sucedido en 1411 en el provineialato de Castilla a Fray Pedro de Logroño, que1410 se titula lector o bachiller parisiense endocumentos de Huete. Este, a su vez, fue sucesordel Maestro Fray Pedro de Burgos, a quien habíael,ad° su voto para General en 1401. Las redeniel°neshechas en común por las dos provincias4ndiean la intimidad de relaciones y compenetraredenciónque fué la primera del P. Aimerichel t. 2. 703 de Monacales del A. C. A., fol. 16.(1 ) A. C. A. Monacales, 2.703, fol. 1.eA. C. A. Monacales, t. 2.703, fol. 16.Ibid. t. 2.672, fols. 95 y 153.

— 302 —ción de pensamientos en estos años, en que uncastellano había ceñido la corona aragonesa.Por varias Bulas de Benito XIII sabemos quedurante el generalato del P. Caxal se edificala iglesia de Colindres (Santander); y los Meree"darios de Burgos obtuvieron facultad para hacercasa nueva, sin esperar la licencia del ordinario.Su iglesia tenia por titular entonces a Santa C3-talina (1).En 1407 concedió también el Papa indulgen"das a los que visitaran nuestra iglesia de Córdoba,terminada, al parecer, por su ComendadorFray Juan de Granada (2).Por 1405, los Mercedarios habitaban el conventode San Lorenzo de Trasouto, extramur°sde Santiago, del que fueron arrojados por 1°sfranciscanos. Llevado el asunto a Aviñón, Benit°XIII mandó, por bien de paz, que los franci scanosse quedaran en San . Lorenzo, dando a 13Merced una indemnización en dinero y adernäsel convento de San Francisco, de Ferrol. No Pa-.rece que esto se cumpliera (3).Hemos mencionado ya a la Reina D. BeatriØ,viuda de Juan I de Castilla, hermana de la Ordeny gran bienhechora del convento de Va lladolid,con cuyo Prior se confesaba. En 1414 per).-saba fundar un convento de Mercedarias de(1) Vaticano, Reg. Avign. 324, fol. 299 y en Eubel : Pi°Avignonesische...(2) Vaticano, Reg. Avign. 324, fol. 392.(3) Eubel: Die Avignonesische Obedienz...— 303 —sura en el reino de León o de Castilla, para locual obtuvo licencia de Benito XIII y aprobaciónde las Constituciones (1)., Ne llegó a realizar su proyecto y se recogió'Os ú ltimos años de su vida al convento de Domi-111ea s de Toro, donde está sepultada en traje deReiha.Por estos años la Orden adquirió en Salallaucala sinagoga de los judíos, convertidos engFan número por San Vicente Ferrer, al queitulehos suponen acompañado en esta ocasión porel P . Gilabert, que consta le acompañó en otras.A-rriba hemos visto cómo el célebre predicadorIlereedario pasó a Castilla en 1407 para asistirc)1110 Definidor al Capitulo de Valladolid.Los Mercedarios de Salamanca dejaron enton-Qes su primitiva casa en el arrabal del Puente,Y el nuevo Colegio de la Vera Cruz adquirió1-1'1,-1)4:lamente grande importancia.En 1409 era el P. Gilabert Comendador deVi alencia, donde ayudado por varios ciudadanos,'levó a cabo la fundación del primer Manicomio,hIlle luego obtuvo gran desarrollo y subsiste aún.-"ic's premió la fe de él y de sus colaboradoresec'lleediéndoles la milagrosa imagen de Nuestra:llora de los Desamparados, que hoy es patronala ciudad.En los últimos años acompañó en sus apostóleascorrerías a San Vicente Ferrer, su paisano,quice -n Por divina revelación le mandó volver a su

— 304 —convento, pues estaba próximo su fin. Confesócon San Vicente, y a poco de regresar al Puigentregó su alma a Dios el 18 de Mayo de 14117lo que el Santo anunció luego a sus compañeros 7 .celebrando co'h ellos un solemne funeral, segällconsta en sus actas (1). Su cuerpo se conserva'incorrupto en la sacristía del Puig.En el convento de Barcelona, Fray JaillieAimerich, sucesor del Dr. Celforés, termin ó 13iglesia y la dotó con rentas y alhajas mejorauci°considerablemente todo el edificio, lo que hacedecir a Gaver que desde Fray Bonanato un seencontró semejante a Aimerich entre los Priores'de Barcelona.El P. Caxal distribuyó también muchas alhajaspor los conventos, a cuenta sin duda de 1°Sgajes de sus embajadas. Todavía se conservglien el Puig algunos objetos con sus armas, qll,eera una quijada (o quexal en catalán) y los eat3-logos antiguos hablan de otras alhajas de Pl3t3'semejantes en Arguines, Valencia, etc.A su muerte los colectores de espolios se aPuderaronde cuanto tenía, afirmando que perterie:cía a la cámara apostólica. La Orden reclainacontra semejante arbitrariedad, alegando serinaudito que los bienes de un General dejase n depertenecer a la Orden de que formaba Parte'siendo él mero usufructuario (2).(1) Acta Santorum Aprilis, I, 499.(2) Archivo de Navarra, Mercedarios de ParnPl0113'leg. 416 al fin. Reclamación en letra de entonces.20

CAPITULO XVII1211eralatos de Fray Bernardo de la Plaigne(1417-9)y Fray Jaime Aimerich (1419-28)e MARIO: Manejos de Fray Antonio DullálL-Electoresdel P . La Plaigne. -Fundación de Marsella.- Eleccióndel P . A imerich.-Gastos de la confirmación.-Merceclariosque se pasaban a otras Ordenes.-Redencionesdel Rvdmo. Aimerich. -Muerte del P. Cami, redentor.Despojo de .los Padres Navarro y MunAbrega. - Muertecle los Padres Granada y Malasang.- El V. P. Juan dejonseaa.-stilDnoullän, Prior de Barcelona.-Difiérense los Ca-P„itulos. -Favores reales en Aragón.-Convento de1). Traj o a España la noticia de la muerte dele axal su familiar o secretario Fray Antonio,r1län, que estaba con él en Constanza, y que„i lhilu seuhsasvicaojseass.habia entrevisto la posibilidad de4 . Con el intento de alcanzar el generalato, seeririgió al Arzobispo de Tarragona Don Pedroheriga, que gozaba de grande influencia con ele37, Pero el Arzobispo le dijo que para suceder'1 1111 hombre de la talla de Caxal se necesitababbe4°ha, de más valía que el pretendiente; que la.ir; "ra y que el Arzobispo gestionaría su elec-Resignóse Dullän ante lo irremediable, y

— 308 —buscó un General a quien pudiera manejar a stiantojo (1).Parecióle bueno para ello el Comendador dePerpiñán Fray Bernardo de la Plaigne, bachilleren Decretos, que debía ser hombre de muchaedad, pues figuraba hacía largos años en carges.importantes. Avínose con él para administrar 1(9sbienes del oficio, haciendo las gestiones necesariaspara obtener el nombramiento del Papa.Mas en esto regresó a Barcelona. el Prior FadreAimerich, que había ido en peregrinaciffilSantiago y desbarató en parte el arreglo.Convocada la elección se reunieron en Bareelona(2) los representantes de las provincias'concurriendo ademas del P. Aimerich:Fray Juan Pesquer, Comehdador de Ger01131por Cataluña.Fray Martin de Liso, Vicario perpetuo deMonfiorite y Comendador de Huesca, por Aragálly Navarra.•Fray Juan de Josa, Comendador del Puig', Per.Valencia y Murcia.Fray Bernardo de G-onestario, Comendadgde Aurignac, por Francia.Fray Juan Ferrer, Conventual de Bareeloea'por esta Comunidad.Como se ve, no asistió nadie de Castilla. poraclamación fué elegido el Padre Bernardo dPlano, bachiller en Decretos, que estaba Pre-(1) Gaver: De Schismatibus.(2) El 3 de Noviembre de 1417.— 309 --Seilte en Barcelona y fué reconocido inmediata -flentEra el P. Bernardo gascón de nacimiento ehij o delc onvento de Tolosa, del que había sidoe°Mendador treinta años antes. En la encomien-114' de Perpiñán labia comenzado la iglesia nueadentro de la ciudad (al lado de la de Sant' llan , hoy catedral), donde Gaver vió sus armas.Ullåì logró por de pronto sucederle en esta:ticomienda. La bula de confirmación está fechaenConstanza el 7 de Enero de 1418 (2).Celebró el nuevo General su primero y últimoeaPítulo en Berga el día de Pentecostés de 1418,del que fueron definidores:Fray Bartolomé Celforés, doctor en Decretos,, ficario perpetuo del Puig; Fray Antonio Dullán,l'athiller en Decretos, Comendador de Perpifián;!re Pedro Roure, Comendador de Zaragoza;4i1'4 37 Guillermo Camí, Comendador de Valencia,Por Castilla y Portugal Fray Martín de G-uada-'ajara , que tuvo dos votos a falta de compañero.Dice Gaver que el descontento en la Ordenl eeia por momentos ante la prepotencia de Duyalgo debía haber en ello, aunque no todostvieran con tan malos ojos la influencia del joven411'° 1ense. El mismo General prometió a G-aver41 4eUdir el yugo de su administrador, y sin duda° hu biera hecho de haber vivido algún tiempoA. C. A. Monacales, t. 2.672, fol. 112. Es el acta(2) Bulario, pág. 60.

— 310 —más, pero murió en Perpialán el 12 de Ene°de 1419.. No sabernos que en el año que gobernó seciera redención alguna, pero consta que él, c on elPrior de Barcelona P. Aimerich, satisfizo las ob'"gaciones contraídas por Fray Juan de Grany Fray Pedro de Malasang en la redenci ón de1415 (1).Por documento fechado en Barcelona el 2 7 deMayo de 1418, Fray Bernardo dió plenos pode ra Fray Pedro .Guillén, Comendador de Narbonalpara tratar con el Obispo y los prohombres deMarsella sobre la fundación de un convento deMercedarios (2). La ciudad dió para ello u 1 3Scasas y jardines a la entrada del Carrer Francés'obligándose los Padres del nuevo convento a Precurarespecialmente la redención de los cautivesmarselleses (3).Enterado de la muerte del General, FraYtomo Dullán, que se hallaba en la Universde Tolosa, corrió al convento de Perpiiía n , deque era Comendador, y se apoderó de los bielle:del Maestro difunto, tomando , sus escude ros '11dándose aires de General. Intentó obten er einombramiento de Martillo V, pero le fuéble, y el 8 de Abril juntäronse para elegir M aestro,bajo la presidencia del P. Aimerich:(1) A. C. A. Monacales, t. 2.672, fols. 95 y 153.(2) Ibid. fol. 152.(3) El acta en la Histoire de los Padres de París,nas 997-8.— 311 —Fray Pedro de Mataró, Comendador de Santa%loma , por Cataluña.Fray Domingo de Munébrega, Comendadorde Calatayud, por Aragón y Navarra.Fray Bartolomé Celforés, por Valencia yMurcia.Fray Antonio Dullän, Subelector por Franciaa causa de estar enfermo Fray Juan de Montagut, Comendador de Tolosa.Fray Juan Ferrer, por la Comunidad de Barcelona.La elección tuvo lugar el 8 de Abril de 1419,Por vía del Espíritu Santo, siendo aclamado portodo s el P. Aimerich. Martirio V confirmó al Generalcon celeridad no acostumbrada, pues labilla está fechada en Florencia el 28 del mismoInes , aunque surgieron graves dificultades sobreel Paio de derechos (1).Alfonso V de Aragón representó en carta deorto sa a 30 de Enero de 1420 que las rentas delMaestrazgo se habían calculado hasta allí en100 libras y ahora los curiales habían elevadoesa cantidad a 400 florines (casi triple), cuandoen realidad sería preciso disminuir el cálculoantiguo por la pobreza de los tiempos.Además, el General Fray Bernardo de Planohabía muerto a los diez meses de confirmado ye.ria contra las reglas de la cancillería cobrartina vacante dos veces en el mismo año. Pidetalnbién el Rey que se dispense al electo de ir a(1 ) Eubel: Die Avignonesische Obedienz...

— 312 —prestar obediencia personalmente en la curiaromana, pues hartos viajes tiene que hacer paravisitar los conventos y reunir limosnas (1). Lamayor reputación que para la Orden había ganadoel Maestro Caxal comenzaba a costarlecara.El elector por Castilla no vino tampoco ahora,juzgando inútil su asistencia, • pero mandó suspoderes al P. Celforés que no quiso usar de ellos.Aunque figura por Cataluña, el P. Mataró, no eraéste el elector, sino el Maestro Fra y Bernard°Riera, Comendador de Vich, que ha cía poc o sehabía pasado a los carmelitas, tránsitos entoncesfrecuentes y de los cuales salían perjudicada s lasOrdenes que tenían menos que ofrecer.Por eso la Merced obtuvo años adelante 1)111privilegio para hacer volver a ella a todos lüsfrailes que se hubieran pasado a otras,-.except° 3la Cartuja, haciendo imposibles en adelante esasdeserciones. El P. Aimerich, Vicario general,había nombrado Comendador de Vich el 20 deEnero de 1419 a Fray Domingo Navarro parallenar el vacío del Maestro Riera (2).Algunos fantaseadores han supuesto que éstey el Dr. Celforés habían sido nombrados Car denalespor Benito XIII y confirmados en el Conciliode Constanza. ¡Como si el Antipapa tuviergpocos ambiciosos a su alrededor! El P. Celforémurió este mismo año en la vicaría del Puig'— 313 —stleediéndole a 12' de Septiembre Fray Juan deJosa (1).El lector advertirá cómo se repiten los mismos1,1°111bres en todos los documentos y sucesos; estA-atural , dado el escaso número de frailes que foranla Orden, que no debía pasar de quinientos.(1) Patronato, pág. 353.(2) Monacales, t. 2.672, fol. 204.›. (1) Archivó Parroquial del Puig: Libro 1.° de Bauti-,ados.

— 314 —A veces los Mercedarios trasladados a otra'Orden lo eran sólo para disfrutar las renta s depingües abadías, conservando algún afecte a saverdadera madre. Así vemos que en las cuentasde redención de 1446 figura una partida de veiti:tiuna libras entregadas por Fray Bernardo cleBatejat, de la Orden de San Benito, Prior d e SanMarcial y Capellán del Cardenal de Fois qtrprimero fué fraile nuestro y Comendador del Pi"de Valencia (1). El P. Batejat era francés Y stinombramiento para Comendador del Puig, heelli°por Benito XIII en 1408, había causado revueieen Aragón (2).El nuevo General P. Aimerich era barcelonésy había sido años atrás Comendador de Gerona,donde hizo grandes obras y arbitró recursos para'una Comunidad regular que celebrara los diviDesoficios, donde antes no solía haber más de dostres frailes.Con esto no es extraño que la Comunid ad cleBarcelona pusiera en él los ojos y que el P . Cßixalconfirmara, de buen grado su elecciónPrior. Ya he dicho también cuánto mejo ró e,convento de Barcelona desde 1408 en que fAti,eelegido, pagando todas sus deudas y adquiriell'iiimportantes alhajas para el culto. Alfons o 1n7nombró su consejero y escribió a su fav or 'tichascartas que demuestran un especial afeeue;Durante el generalato residió habitualnlellt(1) A. C. A. Monacales, t. 2.703, fol. 26.(2) Patronato, 183.— 315 —en Valencia, en cuyo convento realizó importantes,obras que elevaron esta pobre casa al rangocle una de las más importantes de la Orden. Mei°r6también el convento de Arguines y reparótorre de Meliana y el lugar de • Algar que desdetiempo atrás administraban los Generales.Atendió fervorosamente a la redención y sonbastantes los documentos que prueban su celo enesta materia. Celebró su primer Capítulo en .14-tiba el 28 de Septiembre de 1419, presentando enel la bula de su confirmación, según costumbrea ntigua de la Orden seguida en adelante.Salieron definidores: Fray Pedro de Malasang,comendador de Perpirián, *por Cataluña; FraylIalinundo de Rupe (Roca), bachiller en Decretos,Por Francia; Fray Domingo de Munébrega, Coniendadorde Calatayud, por Aragón; Fray Antoniode Agrarnunt, Comendador de Agramunt, porVale ncia. Por Castilla fueron definidores FrayPedro de Valladolid, bachiller en Teología, Co-Inendador de Salamanca y Fray Juan de Toledo,CoMe ndador de San Antolín de Guadalajara (1).p' rimero no asistió y en su lugar fué el Comen-(1, ador de Valladolid y Provincial de Castilla Fray;' nall de Granada, que al fin actuó solo, por hallarseenfermo su compañero.Fueron nombrados redentores este año Fraygrni llermo Camí, Comendador de Valencia y eleitado Fray Raimundo Roca, quienes con las(1 ) San Victorian dice el texto de Gaver, por errataProbablemente.

— 316 --El Venerable P. Juan de Granada, Provincial -de CastillJy famoso redentor.limosnas del año anterior se dirigieron al Afrieg.Levantóse una horrible tormenta y cayend o 1111madero de la gavia destrozó la cabeza al PadreCamí, cuyo cadáver fué arrojado al mar. Est3desgracia impresionó mucho a la Orden y la des"— 317 —cribe con vivos colores el P. Cijar. El Maestrol'ra,v Pedro de Logroño recordaba también aea lixto III en 1457 la muerte de aquel religiosovirt uoso Fray Guillermo Camí, al que probableinenteconoció Don Alfonso de Borja antes de serPaPa (1). El dinéro del rescate no se perdió,v01vienduFray Raimundo Con los cautivos, aunquecon la pena de haber perdido a su compañero.No sucedió lo mismo en la redención de 1423..Q111 el Capítulo provincial celebrado en Zaragozael dia de Pentecostés de 1422, fueron nombradosredentores Fray Domingo Navarro, Comendadorde Gerona y Fray Domingo de Munébrega, queContinuaba en Calatayud, los cuales, con las liinosnasde los años anteriores, se dirigieron aitigia y Bona, pero fueron detenidos por un piratall amado Juan Boto, vecino de Marsella, quelos llevó a su madriguera y después de maltratrarlos se quedó con cuanto llevaban y los enviótiledio desnudos.Marsella era del Duque de Anjou, en guerraPor aquellos años con Aragón por la pretensiónde Nápoles. Tal inhumanidad irritó sobremaneraa Alfonso V, que pocos días después, o sea en elIlles de Noviembre de 1423, vino con su armadal Obre la ciudad y la saqueó, aunque guardando a,44 Personas consideraciones poco usadas en talescasos (2)._(1) Que la redención tuvo lugar este año lo demuestra2 .703, fol. 3 de Monacales del A. C. A.(2) La fecha de la toma de Marsella determina el nom-

— 318 —,Qué tal lo pasarían los Mercedarios estab lecidosen Marsella, desde 14189 El convento quedóabandonado muchos años.Parte del dinero robado era de las familiasde Juan Domenech y Pedro Romeu, vecinos deSitges, las cuales exigieron se les devolviera, Yaque los cautivos no habían sido redimidos. ElGeneral Aimerich y el Prior de Barcelona FraYAntonio Dullán 'hicieron para ello un empréstitoque pesó varios años sobre el convento de Barcelona(1). El trance era duro, pero irremediable,si la Orden no había de renunciar a esas ayudasde las familias.La provincia de Castilla hacía sus redenei°nesgeneralmente con independencia de las deAragón, y así sabemos que en 1422 estuvo ellrehenes en Granada el P. Miguel Liesquos, delreino de Córdoba, por dos cautivos (2).En el Capítulo de 1426, celebrado en Léric13por Pentecostés, fueron nombrados redentoresFray Antonio de Agramunt, Comendador d e 13villa de su nombre; Fray Pedro de Montfangós2Comendador de Carcasona, y Fray Lope de Agra (de Sacra) de cuya redención no tenernosotra noticia.Tenérnosla por el contrario, y muy triste, deotra realizada poco después por los Padres Pedr°— 319 —Malasang, Comendador de Perpiriä,n, y FrayJuan de Granada, Comendador de Valladolid. All'egresar de Africa con los cautivos redimidos elllavio aragonés, fue atacado por los genovesesen g uerra con Alfonso V, y los dos redentoresfAlleron mortalmente heridos con saetas y lanzas.Sl lo cuenta, poco después Fray Pedro de Cijar,etue t enia motivos para no olvidar un suceso recientede tanto bulto (1).d La fecha de este suceso debe ser a principios1428, pues en los años anteriores hay docu-Zento s que acreditan la permanencia en Perpi-"n del citado Comendador. En Mayo de 14281, reg 1 a aquella encomienda el Vicario general de1, -rancia Fray Nadal Gaver, que poco después era'°Inbrado Comendador en propiedad (2). Pocoates se ha,bía dado a Gaver la encomienda, deV ieh quien no pudiendo servirla, por estar estu-'ianclo en Tolosa, había nombrado sustituto.°tro de los religiosos mas estimados del 0re-41uraAfué el P. Juan de Josa, varias veces nom-teya.`to in 1419 hízolo Vicario del Puig, yt llliendo que el Papa diera el cargo a otro, obqueel Rey escribiera a Roma: « que Fraycitlan de Josa era, hacía mucho tiempo, el espejoreligión, de muchos años en ella, de sobre-.aliente ingenio y elocuencia, y que no sólo comobre de los redentores saqueados, conocidos ademá s P°I.otros documentos. A. C. A. Monacales, '2.703, fol. 16.(1) Patronato, 77.(2) A. C. A. Monacales, 2.676, fol. 455.cli(bi) Tengo por apócrifa la vida de estos religiosos des-(2ierta por el P. San Cecilio, de quien fio muy poco.1A94. .C. A. Monacales, 2.676, fol. 101. Además:O,Patro-

— 320 —Vicario provincial, sino como socio de los generalespasados, gobernó dicha Orden maravillosa'mente» (1).Por defunción del P. Josa en 1424, 0019,6también este puesto Fray Nadal G-aver, en 24 ueOctubre (2).La Comunidad de Barcelona cubrió la yae3,11-te de Prior en 1419 con Fray Antonio Dullán,cuyo gobierno hay un grueso tomo de docullien -tos en el archivo de Barcelona. Gaver dice quesu administración fué ruinosa y hasta le pareeeimal la adquisición de la capilla del Palaci o Red'donde los Mercedarios tuvieron una residehasta el siglo XIX. Los gastos ocasionados fuerellrealmente grandes y las ventajas quizá más al93'rentes que reales (3).Fallecido en 1420 el Cardenal de San Jorge,'Carlos de Urríes, Martín V nombró protector oeila Orden en 1422 a D. Pedro de Fonsec a, detítulo de San Angelo, Obispo de Sigilenza , quieefalleció aquel mismo año (4). Ignoro quién::sucedió hasta 1446, si es que tuvo sucesor avrante estos años.Un cambio notable en la disciplina se ti c° el:la nuestra como en las demás Ordenesaños: los Capítulos dejan de ser anualesraras excepciones) para celebrarse(1) Patronato, 192.(2) Ibid. 193.(3) Monacales, 2.673.(4) Patronato, 277.— 321 —Cada dos años. Las encomiendas debían durarigua lmente dos arios, pero en la práctica se pro-1°Agan indefinidamente, a no ser que al Comendadorse le ofrezca algún ascenso. Estoy muyCapilla del Palacio Real de Barcelona,e ntregada a los Mercedarios por Alfonso V.lejos de creer que tal sistema fuera ventajoso yatiteS de fin de siglo se abolirán las encomiendasPel'Petuas... para reincidir otra vez en ellas hastaConcilio de Trento.Martín V en 1420 decretó ya que las enco-21

— 322 —miendas fueran de un Capítulo a otro, aunquelos así provistos hubieran obtenido la confirrnaciónapostólica, pretexto de que solían valerselos agraciados para mantenerse en el cargo.Los nuevos Reyes de Aragón, como nacid os Ycriados en Castilla, se interesaron por las cosasde la Orden en las dos coronas. Así vemos queen 1421, Alfonso V recomienda al Papa las peticionesde Fray Luis de Huete, que iba a reclamarcontra la visita intentada por el Arzobispo deToledo en el convento de Guadalajara, Y enefecto, Martillo V expidió una bula sobre ello (1)*Este incidente, como 'otros muchos ya citados,demuestra que la Merced excitaba y a 1°scelos de los Prelados y sus allegados, y a la ve5confirma que no había memoria de que en nuestrosconventos hubieran sido visitados p or losOrdinarios, aunque no gozáramos de exención'El P. Luis de Huete (o Luis Sánchez) aprochó este viaje a Roma para obtener la absolucióde un grave pecado: Estando años atrás ceconvento de Lorca, los moros asaltaron la ein.dad, y él solo, despertado por los gritos de en3vecina, derribó una almena sobre la escal a delos asaltantes, que se rompió aplastando a algu"nos de ellos, haciendo frente a los demás coeballesta, y dando así tiempo a que se organizarala defensa (2).— 323 —En este generalato se fundó la casa de Un-'cas tillo, en la actual provincia de Zaragoza,pero en el Obispado de Pamplona. Fué su primer")/nendador Fray Esteban Gil, a quien Alfonso Vtlerendía en 1430 contra los curiales de Pamplona, afirmando ser el mismo Rey quien había convertidoen convento de la Merced la antiguaernlita de San Lázaro, a cuyo Comendador llamaSU Capellán (1). Cuando Gaver la visitó en 1443'egnia el mismo Superior con seis frailes más.En 1426, Alfonso V presentó para el Obispado,ge Oraltelli, en Cerdeña, al P. Francisco de Sy,4ereedario, a causa de su vida y costumbreslaud ables y de su profunda ciencia (2), pero comoel derecho de presentación no estaba entoncesl'eeonocido, no pasó de ahí el recomendado.El General Aimerich hizo testamento conadlitoridacl apostólica en Valencia en Diciembre.d`le 1428 y falleció piadosamente allí el 23 de,'41-10 mes (3). La liquidación de su testamentolue lar guísima, y aun se habla de los testamentariostreinta arios después. Menos mal que a'e245 facultades de testar solía ponerse la condieiónde que los bienes no salieran de la Orden.(1) Patronato, pág. 355, y en el Ms. 2.684 de la Biblicvteca Nacional de Madrid.(2) «La Merced», Septiembre de 1918, pág. 112.(1) Patronato, 356.(2) Patronato, 355.A. C. A. Monacales, 2.675, fol. 324.

CAPITULO XVIIIGen eralatos de Dullán (1429-41) y de FrayPedro de Huele (1441-52)81.111An170: de Ambiciones del P. Dullán.—Sale por fin General.—Gaver, Prior de Barcelona.—Capitulos y re-ones.—Fundación de Aviñón.—Redención en Túnez.—Descontento en la Orden.—Quejas en Basileaco ntra el General.—El conciliábulo depone a este yno mbra a Gaver.—Eugenio IV nombra al Maestroeu:te. — Dullán se defiende. —Diligencias de GavcrPara ser reconocido.—Mueren Dullán y Huete.—Privilegiotiobtenidos por este.—Capitulos de Gaver.—Cau-verio de los Padres Company y Bodet.—Intentoresc . deatarlos. —Fundación en Nápoles. —Las responsionesfijas. —Visitas que se conservan. —Estadistica. --me(M uerte del P. Grallera; sálvase del naufragio el PadreSe,--ẕ 1,1ars. —El Cardenal de Valencia protector de la2 e(1.—Bula de exención. —Ruina de Arguines.—Itesc ate del P. Boclet en 1452; su muerte.A,„_la muerte del P. Aimerich la Mercál cayómanos del ambicioso Dullán, del que no logróeISlibre en bastantes años. Es un espectáculotriste el de estas luchas internas, pero no valeeerrar los ojos ante ellas. La Orden que no sepaincloeo:esntdi( rnel eresee vcontra los manejos de los ambiciosos,El P. 0-ayer nos da una visión personal de3esos que le tocaban muy de cerca, pero

— 326 —los documentos abundan y confirman gener almentelas indicaciones de nuestro primer c ronista.Dullán trató de obtener también ahora el generalatode Martino V, sin elección, mas viendoque esto le era imposible, convocó a los elec tores,que eran los siguientes:Fray Juan de Valladolid, Comendador de estgciudad, bachiller en Teología, por Castilla.Fray Domingo de Munébrega, Comendador de'Calatayud, gran amigo de Dullän, por Aragón'Fray Adeodato Artal, bachiller en Decretos,Comendador de Berga, subelector por Cataltifiga falta de Fray Juan Jover, elector fallecido.Fray Guillermo Balaguer, Comendador delPuig, por Valencia.Fray Raimundo de Rupe, Comendador deMontpeller, por Francia.Fray Francisco Riera, Conventual de Barc e-lona, por la Comunidad.Encerrados los electores en la librería elbado 11 de Marzo de 1429, se presentó el bailegeneral de Cataluña con cartas apremiantes delRey a favor de Dullán. Este intentó salir porde Espíritu Santo, pero (dice Gaver) el EspírituSanto no vino, pues tres de los electores se op u-sieron enérgicamente a esa proclamación.No dió mejor resultado el escrutinio, Pues'sólo votaron a Dullán los Padres Valladolid, 1111-nébrega y Riera, mientras Artal, BalaguerRupe votaban a Gaver. Este asegura que mss dela otra parcialidad estaban vendidos, cosa difícil— 327 —de comprobar. Gaver, después de dos días, rentinci5a la elección por bien de paz, aconsejandoa los suyos que se adhiriesen a Dullán.El convento de Barcelona eligió en cambioPrior t a Gaver, muy a pesar del General, que'esea ba conservar ambos cargos. Ya que esto noPudo ser, trató al menos de conservar en su personala capilla real de Barcelona, y obtuvo unlaudo an favorable del Obispo de Valencia, que fuéulado por otra sentencia en 1430 (1). Ambaselec ciones de General y de Prior fueron confir-Inadas por el Cardenal de Foix, legado en Ara-141. Para la extinción del cisma de Gil Muñozllama lo Clemente VIII, último retoño del graneisMa de Aviñón.El P. Dullän se graduó entonces de doctor enpi hin, con dispensa tal vez de algunos requi-Este detalle, entre muchos, prueba que la(1)rden no había comenzado todavía a dar gradosacadémicos, y los religiosos que los tienenrhubie-aue ganarlos en la Universidad. Los franciscanoshabían obtenido esa gracia en el siglo XIV,t,Pero les fué retirada por Martín V en 1429 (2).el generalato siguiente veremos yadari_Merce-graduados en la Orden, aunque exigien-Siempre que fueran bachilleres por Univericlad.Celebró Dullán su primer Capitulo en Mont-(1) P atronato, pág. 195.(2) Thurot: De l'Organisation de l'enseignernent... auAge, pág. 121.

— 328 —blanch el 4 de Junio de •1430, del que fuerondefinidores:Fray Lorenzo Fillol, Comendador de Vid'por Cataluña.Fray Francisco Jafer, Comendador de Valencia .Fray Pedro Roure, Comendador de Zaragoza'cada uno por su Provincia.Fray Francisco Serrano, bachiller en Artes'por Francia.Por Castilla no asistió nadie.En este Capítulo fueron nombrados redent°resel citado Comendador de Valencia P. Jaferel de Gerona Fray Domingo Navarro, avezad°ya a las penalidades del ministerio. Dirigiér011-se a Bugia, y cuando habían empleado ya tod°el caudal, se ofrecieron dos jóvenes de Tarra genaen gravísimo peligro de apostatar, por los quehubo de quedar en rehenes el P. Navarro.En el Capítulo de 1432, celebrado en Teruel'se encargaron de rescatar al P. Navarro los n uevosredentores Fray Nadal Gaver y Fray Bartelomé Dalmau, a los cuales se dió poder Para'empeñar y vender bienes de la Orden (1).El P. Navarro estuvo en rehenes más dedieciseis meses.El Capítulo general de 1431 se celebró enValladolid, aunque no asistieron los definidoresde Aragón, que eran Gaver y Fray Antoni o , deAgramunt. Al de 1434, celebrado en Calatarld7cg"cs:74(cigobi).",ocnoooe'14)e(1) A. C. A. Monacales, 2.681, fol. 69.

— 330 —asistieron los definidores por Castilla, queel Maestro Fray García de Meneses y Frayde León, Comendador de Toledo, siendo ele °idosademás:Fray Nadal Gaver, por Cataluña.Fray Pedro Bodet, Comendador de Malepor Francia.Fray Domingo de Munébrega, Comeudadgde Calatayud, por Aragón.Fray Jaime Lázaro, Maestro en Tea 007Comendador de Valencia, per esta Provincia.Al año siguiente de 1435, hallamos al (loeralcelebrando Capítulo en Almazán, dond e seaceptó la fundación hecha en Aviñón por FraYJuan de Ubeda en 1434. El Cabildo de laquia de San Agrícola habiale dado la iglesi a deSanta María de los Milagros, con casa y huerta'baja la pensión anual de un florín y otras CargaSmenores. Habiendo surgido algunas dificultades7hízose nueva escritura, que ratificaron ahora elGeneral y los definidores (1). El convent( oc ncinco o seis frailes subsistió hasta fines delsiglo XVI.Dullán había nombrado Provincial de Casal Maestro Fray Pedro de Valencia, Comendadgde Guadalajara, que en Mayo de 1438 obtuvo d eJuan II confirmación de todos los privilegios quela Orden tenía en Castilla (2). A este ProvineranJuan•(1) Tolosa: Arch. Depart. Merci, hasse 6.(2) Anda impresa con los demás privilegios d( ) Cas "tilla.l— 331 —e4Pole también la satisfacción de trasladar elCOnventolade Toledo dentro de las murallas, sobretes Puerta de Visagra, enfrente del lugar que an-ocupaba (1). Igualmente se comenzó por ahorala iglesia nueva del convento de Burgos.En el Capítulo de 1437 celebrado en Agra-Inuiclefinfueron nombrados redentores dos de losidores, a saber: el Dr. Fray BartoloméVicario .de Monfiori te, y Fray Lorenzo Com-PanY, Comendador del Puig, los cuales tomaronPres tados hasta mil florines para hacer una importanteredención (2).El 30 de Enero de 1438 estaban en Mallorcaue vuelta de Túnez con 20 cautivos que hacenPromesa de acompañar a los redentores un año y114,Liariocon estas condiciones: llevar el escapula-de la Orden; no jurar de Dios ni de SantaAtarno ir a casas llanas ni jugar... El doctorualtnau estaba enfermo, y una cautiva habíaquedado en Manacor por la misma causa. AsiseFray Bernardo Grallera, sacrista de Valen-ela (3)Yavtepor estas fechas el descontento contra elneral y su administración ruinosa crecía de11a,manera alarmante, habiéndose pedido deariase partes un juez o visitador apostólico. Ya1433 Fray Berenguer Blanch, natural de Car-UY 15c5o4e c . r (Pedro): Historia de la Imperial ciudad dededo(2) Patronato, 73.(3) A. C. A. Monacales, 2.703, pergamino 6.

— 332 —casona y Comendador de Lérida, obtuvo tinabula encomendando el conocimiento de la causaal Arzobispo de Tarragona, aunque Gaver retuvoel documento y procuró calmar al rec u-rrente.Más tarde se sumó a los descontentos el Mae s-tro Fray Bernardo de Sevilla, Comendad or deesta ciudad y ex Provincial de Castilla. Las P a-.siones se encresparon todavía más cuand o e31438 el Concilio de Basilea se alzó en manifiestarebeldía contra el legítimo Papa Eugenio IV, eli;giendo enfrente de él a Amadeo de Saboya c on e'nombre de Félix V. Aunque Dullán, que estabupresente, supo defenderse, fué depuesto por elseudo Cardenal Bernardo, ex Obispo deproveyendo el Concilio la vacante en el Prior deBarcelona Fray Nadal Gaver, por bula de 2 1- deAbril de 1441 (1).Los frailes de Castilla que se habían conservadoen la obediencia al legítimo Papa, a cuellerontambién a éste, pues no podían obedecerun General cismático. El Obispo de Osma,sionado al efecto, por sentencia firmada e n Segoviael 29 de Mayo de 1441, declaró priva d° 3Dullán, nombrando en su lugar al Comendor de Guadalajara Maestro Fray Pedro de litlete(2).No era Dullán hombre que se acobarda ra fácilmentey obtuvo varias veces su reposición'(1) Patronato, 206-7.(2) A. C. A. Monacales, 2.681, fol. 72.— 333 —etlando los aragoneses se hubieron reconciliadocon Eugenio IV, acudió a Florencia el Generalde Puesto y obtuvo un decreto favorable en 1442,aunque fué después privado y condenado a cárcelPerpetua por sentencia de 13 de Enero de1444 (1).Pero esto no debió ejecutarse, pues Alfonso V,Pe decreto dado en Castelnuovo de Nápoles el 8de Junio de 1445, notificando a los Prelados eclesiásticos la cualidad de capellán, doméstico, faycomensal suyo del P. Fray Antonio Dullan, doctor en Decretos y promotor de su. curia,ikes Previene que no se entrometan en la persona,ienes ni familia de dicho su capellán, y en casoe contravención manda a sus regios ministrosPasen a la ejecución debida contra los usurpadoresde las regalías de Su Majestad (2).La acusación más eficaz que contra él se;labia esgrimido, fué la de haber usado de dosUlas falsas, una atribuida a Nicolás III en 1278,37 Otra a Clemente VI en 1344, por las cuales se%cedía indulgencia plenaria a los que dieran(1°s florines de oro de Aragón para los cautivos.A.inbas bulas fueron dadas por buenas y eonfir-%das, la primera por Sixto IV en 1472 y la selindapor Calixto III en 1455 (3).Gaver, sin embargo, mandó en varios Capí-(1) Ibid.(2) Patronato, 286.(3) Están en el bulario, págs. 24 y 40. El vídimus o co-PAi4 legalizada es de Avión y existe un ejemplar en el11 . Nl. de Madrid: Clero, leg. 411.

— 334 —tulos, por ejemplo, en el de 1469, celebrad o enDaroca, romper dichas bulas donde quiera quese hallaran, «pues eran falsas y condenada s Perel Santísimo Papa Eugenio IV, y por esta causafué preso el Maestro Antonio Dullan, doctor enAMIInCagliari.—Milagrosa imagende Nuestra Señora de Bona -na, Patrona de Cerdeña.Decretos, Maestro en otro tiempo de la Orde n .)rcondenado a cárcel perpetua.»A pesar de las confirmaciones obtenidas de5-pués, las bulas son seguramente apócrifas, Pueshablan de florines de oro de Aragón, que no e Sistieronhasta que Pedro IV los mandó acuñar-- 335 —itaincdióinciods e ( 1.17 de Florencia. Esto apar-'Ite34d6e aotirillosD espués de la primera sentencia absolutoria,el Ma estro Huete había reconocido a Dullán, pero41 ser éste condenado de nuevo reclamó sus derechos al generalato.En tretanto en Aragón se hacían las diligenciaspara entronizar a Gaver, aunque éste lorehusó durante todo el año 1441, rindiéndose por:in en 26 de Enero de 1442 y comenzando desdei,tlego a visitar los conventos y celebrar Capítu-% Para dar a la Orden la mayor eficiencia.Tanto 0-ayer como Huete, hicieron las diligencias posibles para ser reconocidos en toda laCIrclen, sin conseguirlo. En Agosto de 1444 obtu-OGaver una bula que esperaba sería definitiva,Pero E ugenio IV, después de un terrible varapaloa todos los cismáticos, comete el conocimientocle l a causa al Chantre de Gerona y le ordenadque Provea a Gaver «con tal que el tiempo de la0a t'tajta de las presentes no se haya provisto a dicha"rden canónicamente de General» (2).El p roceso incoado en Barcelona para demostrarque el generalato estaba vacante, hubo de4ban donarse por imposible, aunque en él se em-Plearon• recursos poco nobles. El Maestro Huete,-elen nombrado, había comisionado a varios re -, felo sos.102 de Aragón para recibir la obediencia dedemás; uno de esos poderes está precisamen-(1) Botet y Sisó: Monedes Catalanes, II.(2) A. C. A. Monacales, 2.674, fol. 166.

— 336 —te a nombre de Gaver y otro al del Maestro FraYPedro de Surnmes, que intentó valerse de él pardaactuar en dicho proceso en contra de su po derdante(1).Gaver, para facilitar su nombramiento, había'reconocido que los frutos anuales del Magisteri°llegaban a 450 florines de oro de Aragón, ashrtiendo así y aun mejorando la tasación hecha lgglos curiales en 1419.A la muerte de Eugenio IV, en 1447, la 5i taciónde la Orden vino a agravarse todavía, Puesel nuevo Papa, Nicolás V, persuadido por las ra"zones de Dullán, parece que lo mandó resta bleceren todos sus cargos y honores. Declal'Oselatambién a su favor el Cardenal protector deOrden Don Alfonso de Borja (2). Suponían todosque Dullán era inocente víctima de las pasionesde sus competidores, pero no tardaron en llegar Gi oa Nápoles informes de todo lo contrario, si'enevidente que ni G-aver ni Huete habían /lea°nada por alcanzar la dignidad suprema d e 13Orden (3).(1) Monacales, 2.678, fol. 331.(2) Patronato, 233.(3) La carta en que el Rey manda reponer a Dan°lleva la fecha de 19 de Junio de 1447 y tiene esta el iri0s3indicación: «Los frailes de la dicha Orden... están 000-dos a llevar ante el pecho la cruz con nuestras arn 1.cuando entran en tierra de sarracenos para redimir canvos están obligados a llevar una bandera con la eril%nuestras armas, ya vayan por mar o por tierra». Pa-tron -to, 233.-- 337 —A lfonso V escribió entonces al Papa, desentendiéndosedel asunto y rogándole solamenteque mirase con benignidad a la Orden fundadaPor , s_ alsle —antecesores los Reyes de Aragón, dando-gilla hosroalatecnabia cabeza (nen vez de las tres o cuatroqueGaver envió a Roma al Maestro Fray Juan dede bt7lars que, a pesar de estar nombrado PriorBarcelona,ordesempeñaba el cargo de Procura -d ț Ç:eneral ante el Papa y ante el Rey Alfonsoen Näpoles,,después de haber hecho el mismo'-to en Basilea.Segalars logró desbaratar los manejos deac, que debió morir poco después en la oscu-t , pero no pudo conseguir una confirmacióneXPldel ícita de G-aver, ni menos la desautorizaciónM aestro Huete. Eran demasiado graves losuiso,, bustos ocasionados a Eugenio IV por los de4ilea, para que su sucesor anulara un nombralento hecho por' Eugenio, a fin de dar el cargo" l -1 fautor del conciliábulo.A lo que se avino el nuevo Papa fué a queu-av,, continuase gobernando a los Mercedarios• laotocoronaaragonesa, conforme a la concesión-tgada por Eugenio IV, que para atraerse alto • Jkilabia Je l aprobado, en términos generales, cuan -h I su favor habían dispuesto los Padres de-ea. Por esta razón puede considerarse comoleel 1t11 0 el gobierno de G-aver desde 1444, aunqueerdadero General fuera el Maestro Huete has-(1)Patronato, 234.22

— 338 —ta su muerte. Sólo después de ella accedió Nie°lasV a reconocer expresamente a Gaver, porbul3del 18 de Noviembre de 1452, en que ordena a 09€13la Orden que le obedezca declarando extinguelos derechos de los Padres Dullán y Huete (1).Este último había fallecido- antes del 18 de,Febrero de 1452, pues con esa fecha Gaver di°la encomienda de Guadalajara a Fray Hernand°de Cáceres «por muerte del Reverendo Maestr°Fray Pedro de Huete» (2). Con este y otros 11011-bramientos envió a Castilla a su secretario Fr'93;Andrés Pellicer (3) que obtuvo la conformid"de los religiosos de Castilla.El General Don Fray Pedro de Huete habi3obtenido en 1449 de Juan II confirmación de t°doslos privilegios antiguos de la Orden en Ostilla,aun de varios que habían sido revoca dos enel Ordenamiento de Alcalá de 1348, como el dereell°de llevar para la redención la quinta parte d e I9sbienes que dejaban los que fallecían sin testa r (4).Por lo demás, el Maestro Huete no gozó depaz en su gobierno, pues bastantes conven tos deCastilla acudían a Gaver, por lo menos eunlic1:9el primero no satisfacía sus deseos o les esig13el riguroso cumplimiento del deber.G-aver, a quien obedecían las cuatro provill:cias de Aragón y . Francia, para reparar en 11)(1) Patronato, 238.(2) A. C. A. Monacales, 2.678, fol. 319.(3) Patronato, 238.(4) Tenemos en la Buena Dicha cl original de esta e-firmación que fué después impresa muchas veces.ntl-— 339 —hgsible los daños de tantas luchas, convocó parael Primero de Abril de 1442, en Barcelona, suPritner Capítulo general, del que fueron definidoresel Maestro Fray Pedro de Summes, Comentiaclorde Vich, por Cataluña; Fray Valentin Roira,P resentado en Teología, por Francia; Frayr n ardo Tárrega, Maestro en Artes y presentaenTeología, por Aragón y Navarra; Frayd-ernardo Catalá, doctor en Decretos, Comendah`'erde e Valencia, por esta provincia. No asistióde Castilla.d fueron nombrados redentores el Comendadors'el Puig Fray Lorenzo Company, el de Maleville' .raY Pedro Baudet, y el del Olivar Fray Frau-SCo Jafer que, reunidas todas las limosnas yQoGn algún dinero prestado, se dirigieron a Bugia,-011° y Túnez a fines del verano.Terminada la redención, emprendieron su re-'bi:eso a España a principios de Diciembre, su-(" leudo los Padres Company y Baudet, con parte1e los cautivos, en la galeota de Eloy Holms, eniltle h abían ido, mientras el Padre Jafer, con1-Veinte redimidos, tomaba pasaje en otro navío.va ntóse poco después una horrorosa tormenta71, e (li ó con la galeota de Horns en la costa de(21nez , cuyo Rey, creyendo expirado el salvo--cliclucto, hizo prisioneros a todos los náufragos,7 1e e ran unas 150 personas, mientras el Padreafer lograba regresar a Barcelona (1).t„(1) A . C. A. Monacales 2.703; fol. 12. Abundan los do-"Illentos relativos a este suceso.

lk -— 340 --Tal desgracia llenó de consternación a la 01-den, y muy particularmente a Gaver, que lulb°de llorarla muchos años, pues los dos religios°scautivos eran de su particular confianza, VicariosGenerales en las respectivas provincias.El Padre Company era joven todavía y Pontoideó la manera de libertarse a si mismo f' acompañero, pero los moros se dieron cuent a dela importancia de la presa y pidieron por los d°s>Mercedarios la suma de cinco mil doblas, q ue era'la empleada ordinariamente en dos redenciones'La Orden no podia invertir en eso las limosnas'de los fieles sin exponerse a gravísimas eensitras, ni los recursos de los conventos llega ban atanto.Company creyó a veces que la Orden leolvidado, y protestó enérgicamente, perode convencerse de que no habla otro recursla misericordia divina.En la primavera de 1446 vino a Nápoles bajufianza (de los comerciantes cristianos, sin duda )y en primero de Junio escribía desde allí lile jeenviasen 1.200 doblas para libertarse a sí 7 acompañero, «pues de otro modo clamaría contra.la Orden y sus gritos se oirían en todo el mund°».El General dió orden de hipotecar tod os 119s.bienes de los conventos, y reunida la sim ia requerida,fueron enviados el Prior de Barcel°°P. Segalars y el sac,rista Fray Bernardo 1,,ra, y delante de ellos un giro por la mitad de '-cantidad, pero la redención resultó imP°°)leante las exigencias de los moros, y el P.— 341 —PanYzaaprendió en la tribulación a bajar la cabe-(1). 1,1-). Luego le veremos resignado con su suerlalibertad a otros sin cuidarse dePropia, vropia,refily cuando al cabo de catorce años pudo'esaren a España, intentó fundar residencias2IfricalOspara facilitar la redención y atender acristianos allá establecidos, que eran muchos.El Padre Pedro Bodet, durantesus diez arios de cautividad enTúnez.A mediados de 1442, Alfonso V se apoderó deciudad de Nápoles, y en Diciembre dió a la'eria, yr Ce, la iglesia de Santa María de la Paz y de"1-ereed por él edificada en el Campo Vecchio,"1lde el Rey tenía su ejército para la toma de lavital (2). Don Alfonso conservó siempre granibaamor a aquella iglesia, y todos los añosallá, con su corte (3). El primer Comendador(1)(2)(3)A. C. A. Monacales, 2.703, fol. 4.Patronato, 55.«La Merced» de 1928, pág. 187.

— 342 —de esta casa parece haber sido Fray Juan de Cetina,a quien el Rey propuso en 1445 para elobispado de Tempio, en Cerdeña (1).Ya en 1436 había concedido Alfonso pernlis°para fundar conventos de la Merced enpero no llegó a formalizarse ninguno antes queel de Nápoles.En 1443, día de Pentecostés, celebró Gavernuevo Capítulo en Huesca, cuyos definideresenumera él mismo. Es célebre este Capitul e P°rla Constitución que en él se hizo, fijando la ell0t9)o responsión con que para la redención había n decontribuir anualmente los conventos.Tal sistema equivalia a arrendar las linWsnasa los Comendadores, cosa prohibida en 13gprimitivas Constituciones, pero que ahora, dad8rla miseria de los tiempos y el cansancio en ree°gerlimosnas, resultaba ventajoso. Con no P arecerelevadas las tasas, no es raro que los Corlendadoresnombrados renuncien el cargo P or 11 ,c,'creer posible reunir tal limosna en los límitessu contrata o distrito.0-ayer obtuvo de todos los religiosos Presel::tes en el Capítulo, que eran unos 50, jurarneubi°de observar esta Constitución, y a su euruP1''miento consagró buena parte de sus energiasiCon las limosnas reunidas pasó a GranaP. Jafer en 1445, volviendo con 16 cautivos quecostaron 1.088 libras y 4 sueldos. En el Misil':año el P. Company envió desde Túnez tres, citi-(1) Patronato, 452.— 343 —habla redimido por 220 libras. El Secretario generalle recrimina amargamente por haber rescatadootro cautivo que se escapó, quitándoseasi la espina de las quejas del P. Company. ¡Esan'perdonados uno y otro!En los años siguientes se registra la compraele cautivos en grupos de dos o más, que el PareCompany iba rescatando, según se presen-'alga la ocasión o lo exigía la necesidad, girandoa veces en contra de Barcelona por medio de los111 egociantes cristianos con casa en Túnez. Un talVives merecía toda su confianza a pesar de'as protestas del Secretario general, que fiabanienes de él (1).Las limosnas eran cortas; G-aver lo afirma asíen el prólogo del Speculum Fratrum, riéndose de1O1 que decían que los Mercedarios vivían de. 1las; ¡no llegarían! dice el General, aunque los'railes eran también pocos.Desde 1443 comenzó Gaver a visitar personan/lentelas casas de su obediencia, dejándonosen las actas, que se conservan originales en gran11,1'llnero (2), una información inapreciable sobrePersonal y hacienda de los conventos, pues en1. °s inventarios figuran no sólo los objetos deiglesia, sino también el ajuar de las celdas.fi Muchos Comendadores estaban bien instala-No se había logrado la uniformidad litúrgica,Piles muchos breviarios no eran según la Orden.,(1) A. C. A. Monacales, 2.703, fol. 4-6.\2) A. C. A. Monacales, 2.668, fol. 9-70.

— 344 —El Santísimo Sacramento estaba en una arquetamás o menos rica dentro del Tabernáculo, següncostumbre general entonces. En los altares figuracon mucha frecuencia la Virgen de la Merced,que se había convertido insensiblemente en titular,aun de aquellos conventos que tenían otro.Muchas imágenes son de vestir. En todos losconventos había cárcel con cadena y grillos.Las listas de conventuales contenidas en lasvisitas y algunos' otros datos de los Capitulespermiten calcular el total de Mercedario s etiunos 550 a mediados del siglo XV (1).Celebró también Gaver Capítulo en G- er ona'en 1444 y en el Puig dos arios después, insistielldoenérgicamente en la colecta de las limosnas'En el Capítulo de 1446 fué donde se acordóviar a Túnez al Prior de Barcelona P. Segalarsal sacristán P. Bernardo Grallera.Este viaje fué desgraciado, pues los libro s decuentas consignan que en el mes de Octubremurió en Trápani de muerte cuitada el P. Grallera,cayendo de una escala, y por haber qdado sin habla fué imposible averiguar a quienhabía encomendado el dinero que llevaban (2)El P. Segalars hizo desde allí rumbo a Newles a fin de concertar la paz de Túnez con A-1"1-so V y obtener así la redención de los dos luercedariosy de otros cautivos, pero el Rey 110(1) Vázquez: La Merced a mediados de los siglo s S17. YXVI. Roma 1931.(2) A. C. A. Monacales 2.703, fol. 24.— 345 —rp e°11tró aceptables las condiciones. Al volver atUnez al ario siguiente de 1447 se perdió la gale-1:, ell que iba, frente a Girgenti, el día de Juevesahogándose muchos de los pasajeros ylvändose milagrosamente, desnudo, el redentorPor la intercesión de la Santísima Virgen, aunqueperdiendo cuanto llevaba (1).En el ario de 1446 se consignan también enr, "as cuentas 6 libras y 7 sueldos para «las cartasu`e la Sra. Reina y de la ciudad de Barcelonaclitigidas al Papa y a los Cardenales en favor deOrden y para obtener protector en Roma» (2) ,I G que puede interpretarse como indicio de queen arios anteriores estuvo vacante el protectorado.Pilé designado entonces para ejercerlo el Car -e rial Alfonso de Borja, valenciano, a quien lah'Reina escribió dando el parabién, pues no se'lanaria otra persona más a propósito. En efecto,el Cardenal fué un verdadero padre para la Or-,(1ell antes y después de su elevación al sumoronti ficado, aunque al principio se equivocó latiletitablementeen proteger al General depuestor. Dullan, que tanto había perjudicado a laOrden.El favor más grande que la Merced podíaobtener de la Santa Sede era la exención de losordinarios, causa de innumerables daños y pleit°. Nicolás V la concedió por fin a ruegos del(1) Ibid.(2) A. C. A. Monacales 2.703, fol. 7 v.

— 346 --Rey de Aragón y sin duda también del Cardenal.La fecha de esa bula, 9 de Agosto de 14482 fijóinscrita como fiesta en el calendario de la Orden,lo mismo que el 24 de Julio (de 1449) en que sepresentó al Obispo de Barcelona (1). G-averdaba como un tesoro esta bula en su cámaraprohibe sacarla para nada a la calle, pues hablacostado más de mil florines. Cuando fuera neeesarioobtener copia de ella debía ir el notarl o alconvento (2).Una de las razones alegadas por Nico]para conceder la ansiada exención es quObispos o sus curiales se constituían con 111frecuencia en protectores de los frailes dcuentes, impidiendo que fueran castigadolos superiores.Otra desgracia sucedió por estos añosMerced: los moros de Valencia saquearon ymaron el hospital de Arguines, fundado pormón de Morelló, profanando las sagradas foy matando a los dos religiosos que allí haban. Nicolás V, en la misma fecha de lación de la Orden, somete al Abad de los eicienses de Valencia el examen del caso paraautorice la traslación del hospital de Argtal convento del mismo nombre que distabamilla.Del libro de cuentas parece deducirse qua laque-14a-Islasbit3-Sen-ster-queinesunae— 347 —1451 hizo redención el secretario general FrayAndrés Pellicer (1).El 5 de Abril de 1452 estaba en Barcelona,después de nueve años de cautiverio en Túnez,el P adre Bodet, al cual mandó dar G-aver seisflorines de oro para restituirse a su convento de1V1alevi1le, pues venía desprovisto de todo. ParaSu l re dención había comprado el General un morode euenta, aparte de otras sumas giradas al Padre Company. Juntamente con el moro se envióen la nave de Arnaldo de Vilabella el breviariod€ Padre Company, que su dueño podía utilizarYa eon desahogo, pues con su virtud y talento sehabía granjeado la estima de su amo el Rey de, nnez (2). Parece que este año estuvo en Näpotesnuevamente para gestionar la paz.Gaver había nombrado Comendador de Malelleal Padre Bodet el 27 de Marzo de 1452, perovidisfrutó poco tiempo la encomienda, pues habíaUerto antes del Capítulo de 1456.(1) Breviarium Ordinis de Mercede. LugduniHay ejemplares en la Bib. Nacional de Madrid.(2) A. C. A. Monacales, 2.666, fol. 75.1560'(1) Monacales, 2.703, fol. 54.(2) A. C. A. Monacales, 2.703, fol. 53.HIV

CAPITULO XIXeneralato de Fray Nadal Gaver (1452-1474)Sti-MARIO: Origen de la autonomia de Castilla.—Muereel Maestro Cijar.—Fray Alonso Pascual, Confesor delRey y Reina de Aragón.—Fray Bernardo Catalä desempeñael mismo cargo.—Cultura de los Mercedaries.—Ministerios sacerdotales. —Redenciones de 1453Y 1456.—Libertad del Padre Company. —Otras redeneiones.—Choquesdel General con los Provinciales deCast illa.—Gaver nombra Visitadores seglares.—FrayDiego de Muros, Provincial de Castilla. —Equivocacionesdel General.—Concordia de Guadalajara.—Murosem bajador en Roma y Obispo de Tuy.—Fray Antoniode Molina, Obispo de Ronda.—Fundación en Palerlun.—Muerte de Gaver; sus méritos.Queda ya indicado, cómo después de la muertedel Maestro Huete, Gaver logró ser reconocidatambién por la provincia de Castilla y confirmadopor Nicolás V en Noviembre de 1452. Pero laseosas no volvieron al estado antiguo; los diez41-10 5 de independencia fueron causa de que la1)rovincia experimentara las ventajas de la autonomíade que gozaban las de otras órdenes.Cuando el Secretario General, Fray AndrésPel licer, regresó a Barcelona, llevaba unos capítulosque el General había de confirmar y que se

— 350 —referían a estos cuatro puntos acordados en tien i-pos del Maestro Huete:1.° La provincia de Castilla tendría cuatrovotos en la elección de General, siendo electoreslos Comendadores de Guadalajara, Valladolid,Sevilla y Huete.2.° El General no llevaría la mitad del esp o-lio de los Comendadores y demás frailes difuntos,sino una pequeiia parte, siendo aplica do lodemás a la redención y a los conventos.3. 0 Los Capítulos serían presididos por elGeneral o Provincial.4.° Este habría de hacer también de ordillariola visita.Estos capítulos fueron confirmados por el Generalen Barcelona el 8 de Abril de 1452 ( 1) ymas tarde en los Capítulos generales de 14551466, celebrados en Valladolid y Toledo respectivamente.Paulo II los confirmó tambiénen 1461.El secretario general, Fray Andrés Pe]llevó a Castilla, con otros nombramientos, el deProvincial a favor del Maestro Fray Mací as deMonterrey, que había sido el brazo derech o delMaestro Huete y heredero de muchas d e susideas (2). A pesar de los Capítulos acordad os, el(I) A. C. A. Monacales, 2.667, fol. 75.(2) Sé que no a todos son simpäticas, pero la hist°143de la Orden, antigua y moderna, demuestra a mi entender oque la vida de la Merced, como la de otras, ha depelididprincipalmente de la iniciativa de las provincias, y ctlairdo ésta falta, no se la ha suplido con nada.Il Maestro Fray Pedro de Cijar, escritor, bienhechordel Convento de Zaragoza.

— 352 —libro de cuentas de Gaver indica que el MaeFray Macías ingresaba sumas considerableslas arcas del General (1).El 24 de Octubre de 1452, nombró éste Comendadorde Zaragoza al Maestro Fray B ernardoTárrega, «por muerte del venerable y cliscretoFray Pedro de Cijar, Maestro en Artes 3'bachiller en Teología, Comendador de dicho C°uvento»(2). Era el autor de la conocida obra'Tantum Quin que, impresa una vez en el siglo XVy otra en París en 1506, que dió a conocer 19'Orden y lo que le debía la sociedad cristiana, deél se debió en buena parte la transformaciónla pobrísima casa de Zaragoza en uno de 10sConventos más principales de la Orden. Lo s inventarloshechos por Gaver en sus visitas deestos años, son de lo más importante.Figura también mucho en los documentos dedelesta época Fray Alonso Pascual, confesorRey de Navarra Don Juan II, regente de Aragón'. y de la Reina. Don Juan le propuso en 1461 Pargel priorato de Santa María de Besalú, aumentandocon él sus ya cuantiosos ingresos (3).Confesor de Don Juan II fué también FraYBernardo Catalit, doctor en Decretos, Cornodor muchos años del Convento de Valencia, queelevó a gran altura, y Procurador general enRoma, no a gusto de todos. G-aver escribió cont(1) A. C. A. Monacales, 2.666, fol. 80.(2) Monacales, 2.674, fol. 327.(3) Patronato, 454.str°en—353-1frases muy duras en el Capítulo de 1456, peroclebió justificarse plenamente, pues en los añossigu ientes le vemos figurar en primera 'líneac° 1110 definidor. Era Comendador de Játiba147 2 (1).Los Mercedarios habían alcanzado una culturaenv idiable y envidiada, según advertía el Re-\rerendísimo G-aver, y era natural que la ejerci-El Venerable Padre LorenzoCompany.taran en otros ministerios además de laAsí escribía el General en 1445 a su famidarFray Bartolome Ledo:«Hijo queridísimo, nosotros hacernos todo locine hacen los demás religiosos y además libra-111°s a nuestros prójimos de manos de los enemi-42 de la fe con las limosnas de los fieles. Si9tros religiosos predican, también nosotros pref,11eainos;si otros celebran los divinos oficios,'ainhien nosotros los celebramos; si otros oyen(1) Patronato, 249.23

— 354 —confesiones, también nosotros las oírnos; Si otrosalaban a Dios cantando y salmodiando, nosotroslo haCemos igual; si otros tienen manos v lengua,'pies y cabeza, también nosotros las tenemos; Y siotros son literatos, también entre nosotros hemuchos tales; y si a ellos porque sirven a Dios Yhacen lo sobredicho, los fieles les dan limosna'también a nosotros...» (1).Conforme a esto, decía la Reina D. » 143r139Regente de Aragón, al Papa en 1447: A- estaOrden le incumbe un doble oficio: conservar lasánimas por medio de la predicación y confesión'y reparar a las perdidas por la redención (2)*Por este tiempo aparece en documentos extrañesa la Orden el nombre de mercenarios, que lesfrailes llevaron con paciencia, como los corres'pondientes vulgares de otras Ordenes, pero quetardaron mucho en aceptar.En el Capítulo de 1456, celebrado en Bareelona,dieron cuenta de su cometido los reden teresFray Valentín Rovira, Maestro en Artes Ybachiller en Teología, Provincial de Valenc ia, :YFray Jaime Prunera, doctor en Decretos y Prj°vincialde Francia, los cuales habían comenzara°su viaje en 1453, terminándolo en 25 de Octubrede 1454, vistiendo conforme a la costumbr e de13Orden a los cautivos que habían recorr ido 1°5pueblos. Los gastos habían montado 2.121 libra'scatalanas, o sean unos 3.263 florines de oro.(1) Prólogo al «Speculum Fratrum».(2) Patronato, 131.— 355 —En este Capítulo de 1456 fueron nombradosrede ntores Fray Pedro Sans, Comendador de'eas tellón de Ampurias, Fray Pedro G-uerau, Conlendador de Valencia, y Fray Vicente Turrel,.qU e lo era de Sarrión, pero su oficio debía limitarsea recoger limosnas, encargándose de larede nción Fray Lorenzo Company, que estabaca utivo en Túnez.C uando esto se escribía, el P. Company estabaYa libre felizmente, pues el 18 de Febrero de1456 había girado desde Nápoles una letra de 2044e ados para remediarse al salir del cautiverio,14and0 de la autorización de mayor cantidad que'e h abía concedido el General (1).Su libertad se debió, según los historiadores,‘a q ue la escuadra de Nápoles había apresadotinas galeras de Túnez, pero Don Alfonso las devnlvió a su dueño con todos sus ocupantes, lo'elne obligó al africano a libertar a los cautivoseagoneses.Al Capitulo general de 1458, celebrado en`fas tellón de Ampurias, asiste ya el P. Company,[lile es Definidor por su provincia de Valencia.no mbrar Comendador del Puig, se acordó lo(,,igniente: Como el religioso varón Fray Lorenzoh`')In Panys haya estado detenido en cautividad"len por quince años, el cual iba a aquellas tiel'rascomo redentor de cautivos y fué cautivadoT únez y padeció muchos trabajos y tribula-1°nes y muchas veces fué puesto en cárceles del(1 ) A. C. A. Monacales, 2.703.

— 356 —Rey de Túnez, el reverendo Maestro generaUlos honorables Definidores en remuneració n cl esus trabajos... le dieron la dicha encomiend a Portoda su vida y le autorizaron para obtener culifirmación del Sumo Pontífice, para que otro s seanimen a padecer cosas semejantes y aun mar)"res por la Orden y por la redención (1).En 16 de Abril de 1459, Gaver nombr ó alP. Company su Vicario general en toda la Orden'cargo siempre muy importante, pero más alinligcuando las guerras impedían al General comu nicarselibremente con las provincias, por lo q ue elVicario hubo de hacer mucho uso de sus facilltades.En el Capítulo de 1458 fueron nombrad os redentoresel Maestro Fray Jaime de Zamora, co -mendador del Olivar; Fray Pedro Guera u , C°mendadorde Valencia, y el Maestro Fray Ant,°nioMorell, Comendador de Tolosa, con orden uedejarse la barba inmediatamente, para tras13,:darse en aquel mismo verano a Argel, Bugi"Bona.Por el Capítulo de 1460 celebrado en Jitti133'sabemos que trajeron 28 cautivos, de los que sellevó 13 a Francia el Maestro Morell para ree°rrerlas ciudades con ellos, recogiendo limo''Esto disgustó sobremanera a Gaver, que 101dado orden de que los cautivos se presentaran!Rey de Aragón, por lo cual y por otras acusaele,-nes de desobediencia, lanzó una sentencia durr(1) A. C. A. Monacales, 2.667.irna con excomunión y deposición contra el1) . Moren. Todo se redujo a nada cuando éste see nteró de ello, demostrando que no había recibidotal orden, sino el aviso contrario, y . que nohabla procedido con mala voluntad ni ligeraleente,pues temiendo no haberse enterado bien,v° 1-vió atrás algunas leguas para asegurarse. EnVista de esto fué revocada la sentencia de Játiba. 0 11 todos los pronunciamientos favorables en elCapítulo de 1468 celebrado en 1VIaleville. En'ea lubio queda en mala postura el Comendador dekal lorea Fray Gabriel Portas, que le había engallado.El Comendador de Valencia P. Pedro Garauhabla muerto en Caller, de vuelta de Africa.El mismo año 1459 hicieron otra redención'en G ranada el Maestro Fray Macias de Monte-Y, Provincial de Castilla, y el P. Juan de Estella,Comendador de Estella. El 8 de Agosto elGeneral encargó a Fray Francisco Burguet, sufaibiliar, de acompañar a los redimidos a Francia'e Inglaterra (es decir, a la Grascmia, ocupada'antes por los ingleses) (1). Las actas capitularesde 1467 indican que los provinciales de Castillaten íanla costumbre de hacer las redenciones por'44 persona y esto cada dos años.Los asuntos de Castilla continuaban preocu--Pando al General, que en el Capítulo de.1458 dió13 klenos poderes a Fray Francisco Burguet paraaeer una concordia con el Provincial Fray Ma-( 1) A. C. A. Monacales, 2.675, fol. 176.

— 358 —cías de Monterrey imponiendo penas al qu e 11quebrantara. Para ello debían reunirse en Toledo"el día de la Trinidad de 1459. Poco duró, Si esque llegó a concertarse, pues el 26 de Octubre'de 1460 el General prohibe al Maestro Fray Maiciasproceder contra el Comendador de Guada lajaraFray Diego de Cáceres, que había sido P artidariode Gaver en los años del Maestro Huete'El 18 de Diciembre de 1460 nombra Pro vincialde Castilla y Portugal a Fray Diego de V3-lladolid, privando a Fray Macías por haber usurpadola jurisdicción del General (1), pero el P O-vincial apeló a Roma, donde en 1461 obtuvo c onfirmaciónde los Capítulos acordados en 1452 . fu26 de Enero de 1462, Gaver otorga nuevos p oderesal licenciado Fray Miguel de Gaviria, Cemendadorde Pamplona y Vicario Genera l deAragón y Navarra para estipular otra concordia (2).Estas gestiones debieron producir escaefecto, pues en Octubre del mismo año el Generalnombró su Visitador en Castilla a D. Franciscode Villalpando, Arcediano de Mayorgala iglesia de León (3). Tal recurso demuestra Vela provincia estaba al lado del Maestro Monterre)ry probablemente que el General no tenía razónen defender al Comendador de Guadalajara, queal fin hubo de presentar la dimisión.(1) Ibid. fols. 218 y 230.(2) Ibid. fol. 255.(3) Ibid. fol. 266.— 359 —No fué esta la única vez que Gaver nombróVicario seglar para las provincias. En 1464 dióesa Co misión en Barcelona a su amigo el Canónigoy Provisor D. Juan Narciso Zaplana, pero elconvento lo rechazó enérgicamente (1). Era Priorentonces el Maestro Fray Damián Quart, uno del OS varios que durante pocos años hubieron deEl Rmo. Nadal Gaver.(De la serie del P. Talamaneo.)"•cederse al frente del convento de Barcelona"rante la insurrección del Principado contrajtlan II, conforme a los caprichos de los nuevosajnos . El Prior elegido durante el mando de donedro de Portugal hubo de dimitir cuando suce-'16 a éste el Duque de Anjou.El 1. 0 de Diciembre de 1464, Gaver nombra)(;°111endador de Huete a Fray Diego de la Torre,achiller en Teología, «porque no hay Provincial(1) Ibid. fol. 233.

— 360 —ni Vicario nuestro en dicha provincia de Casti-11a, porque Fray Matías de Monterrey, antes Vicarioy Provincial nuestro, fué privado por susculpas» (1).El mismo día nombró Comendador de Guiadlajara a Fray Diego de Muros por renuncia de'Maestro Fray Diego de Cáceres, y confirmóencomienda de Toledo a Fray Fernando de Córd°va,cuyo nombramiento había sido nulo por c iertascausas (seguramente por falta de jurisdicción'en Fray Matías de Monterrey que le había conferidoel cargo).: También el Maestro Muros era Y3Comendador efectivo de Guadalajara, antes deesa fecha (y).El mismo día fueron nombrados redentoreslos tres religiosos citados, o sean Torre, Córd0v3y Muros. Poco después debió .. fallecer el P. M°11-terrey y así no es extraño que se adhirieran aGaver los más decididos partidarios del ProvincialFray ~las, del que no tenernos otración en adelante.El Maestro Monterrey había fundado rnuella'sicasas, no todas en condiciones viables. En ej"Capítulo de 1467 se mencionan como hecliurgsuya las de Toro, San Pedro de la Tarza,garcia de la Torre en Extremadura, Santa María'de Fuentes cerca de Aguilar de Campos, Cazoria'Rivadeo, Raíces cerca de Avilés...Había obtenido también de Enrique IV en(1) A. C. A. Monacales, 2.675, fol. 324.(2) Vázquez: Don Diego de Muros, pág. 15.— 361 —1457 co nfirmación de todos los privilegios de la°rcien. Las memorias del convento de Sevillaafirman que este Rey fué gran •bienhechor suyo.El registro original de Gaver tiene una granlag una por estos años, pues a causa de la sublevaciónde Cataluña hubo de ausentarse de Bareelona.A principios de 1465 debió nombrar Provincial de Castilla al Maestro Muros, pues en eleapitulo de 1467 se afirma que lo fué desde lan 'Inerte del Maestro Fray Macias. Muros es unade las figuras más brillantes que tuvo la Mercede I1 aquel siglo.Tuvo, como su antecesor, graves disgustosCO n el General que le privó del provincialato en1466 , por acusaciones que él mismo hubo dereco nocer calumniosas al año siguiente.La dificultad de las comunicaciones y algo dePrecipitación en Gaver, le ocasionaron gravesdisg ustos y equivocaciones que reconoció noblemente.El 10 de Agosto de 1466, abría Capitulogeneral en Toledo, que empieza con una terriblel'equi sitoria contra los Maestros Monterrey ytiros, autores de mil males y escándalos. Elhabía querido prender al General apos-'ictudose con treinta hombres en Santa Cruz de la,Zal'za, aparte de haberse apropiado el tesoro delgifunto Fray Macías (1).Todas estas fechorías habían tenido lugar,(1 ) Las actas originales están en el tomó 2.667 de Mo-. 'leales del A. C. A., junto con las de otros Capitulos que11. C Citando.

—4e— 362 —como luego se comprobó, en la fantasía de Fra?'Pedro Payo Borrayo, bachiller en Teología, asP1-rante a la encomienda de Huete, a quien el Generalhizo su Vicario en Castilla, en premi o dehaberle descubierto tantos males. Las actas soninteresantes corno una novela y acaban por "3temas contra el Maestro Muros y sus adherenteslos Maestros Fray Pedro de Logroño, Fray Luisde Santiago (o de Compostela) y otros que tuvieronla prudencia de no asistir. Actuó de seeretaçrio Fray Juan Urgel, estudiante de Artes, 3quien veremos más tarde Prior de Barcel ona YGeneral.Acordóse declarar sin ningún valor los gr3-dos académicos conferidos sin licencia eserit3del General, lo que prueba que ya se conferí°por la Orden. Tratöse también de implantarCastilla el sistema de las responsiones fijas'establecido en Aragón, que ofrecía algunaventajas al lado de graves inconvenientes, Puescuando mejoraran los tiempos o aumentara 13diligencia de los frailes no sería fácil sub ir 13cuota.Al final del Capítulo dejó Gaver por vez Primeraen libertad a la Provincia para elegirselProvincial, y fué designado por unanimidad,eP. Fernando de Córdoba, Comendador de Teleue'que debía lamentar sinceramente la equivee3-ción del General con el Maestro Muros.Cuando Gaver hubo regresado a Valenel3'discurrieron el Provincial nuevo y el depuestc;una estratagema graciosa para abrir los oPs— 363neral: reuniéronse primero en Salamanca yluego en Torrijos con el Vicario general FrayPaY0, y ante notario hicieron una escriturado nde Payo y Córdoba renunciaban sus cargosen Muros, comprometiéndose a prescindir enteramente del General. Cuando el documento estuv°firmado, Muros lo envió a Gaver, que al finco noció a su favorito Fray Payo por lo que era:U n embustero y traidor.Para cerciorarse envió nuevamente a Castillaal P. Pascuet, Prior de Barcelona, que com-Probó fácilmente la falsedad de los documentosen que Fray Payo apoyaba sus calumnias. Elno tario de Valladolid, ante quien se suponían°torgados, no había existido nunca, y el mismoPre Payo hubo de reconocer que habían sidofabricados en Huete.Gaver anuló en vista de esto todos los nombratnientoshechos el año anterior, declarando aPr\raY Diego de Muros verdadero Provincial deastilla, y convocando nuevo Capítulo en Guadalajarapara el día de San Miguel en 1467.y sus adherentes son ahora losres,definido-que dieron humildemente obediencia al4eneral y demostraron su nobleza de alma implol'andoclemencia para su calumniador Fray Payo.a Las actas de este Capítulo son enteramente'ger entes de las anteriores y un espíritu nuevoanima todas sus decisiones. Diríase que la mentalidad de los capitulares había cambiado, y así4.1111.0s.Pues discurrían con las ideas del Maestro

— 364 —Suprimiéronse varios de los conventos últimamentefundados, por inútiles y perjudicialdotáronse plazas de estudiantes en Valladolidy Salamanca; exigióse riguroso examen a lospredicadores; dióse voto en Capítulo a ted°slos bachilleres en Teología por Universidad,prefiriéndolos, y con sobrada razón, a los callenistas.Para acabar con las equivocaciones pasadas'que tanto habían perjudicado a la Provincia, sehizo una concordia que consagraba su autolle;mía, reduciendo las contribuciones en favo r delerario general, del que poco o nada bueno salía.De esa concordia arranca el engrandecimiellt°de la Provincia de Castilla y de las otras fundadaspor ella y aun de las provincias de lacorona de Aragón y Francia que un siglo 111'starde hubieron de adoptar el sistema de Cas.tilla.Esta Provincia renunció a los tres electoresque había alcanzado, y las demás en el Cap ita l°de 1469 volvieron también a nombrar uno sOlc:por cada una, pues únicamente para anula r e'efecto de los cuatro electores de Castilla se 113-bían atribuído dos a cada una de las restantes'Sin embargo, el deseo de que los electores fuer'más de siete quedó en el ambiente, y pronto leveremos reaparecer.Devolviéronse a la Provincia de Castilla lesconventos de Murcia y Lorca, agregados antes 3Valencia, y el de Burceña, que era filial deplona, pasó a serlo de Logroño, atribuyéndose— 365 --eastillael señorío de Guipúzcoa, a pesar deestar en el obispado de Pamplona.Serialóse el Capitulo provincial para Almazánen 1 469. En éste se nombró una comisión paraavis tarse con los trinitarios a fin de llegar a unae°11cordia que suavizara por lo menos la rivali-(lad entre las dos Ordenes redentoras, documentoquef uó ratificado por Muros en Guadalajara eltode Febrero de 1470 (1).Al año siguiente emprendió el Provincial su13,rilner viaje como embajador del Rey ante elEn el Consistorio de 28 de Enero de 1471,t 'aulo II encomendó la abadía de San Clodio, en,14 diócesis de Orense, de la Orden del Cister, al-rrov incial de la Merced, embajador del ilustrisi-;11° Rey de Castilla, y poco después le dió tamuiénla abadía de Sobrado (2).E nrique IV demostró poco después el mayoragrade cimiento al Provincial por sus gestiones y:ervieies, «que son tales e tan dignos de mayor: ell-luneracion que con los dichos ciento e sesen-'a flh1l maravedis de juro de heredad, nin con%cha mayor contia non se satisfasen nin remurieran»(3).El 15 de Junio de 1471 era preconizado Fraylege Obispo de Tuy, y en 1475, los Reyes Cató-.4% le nombraban oidor de su Audiencia, cargo(1) Vá , zquez: Don Diego de Muros, pág. 33.Vaticano: Obl. 83, fol. 18v. y 19.e i;:' ) Vázquez: Don Diego de Muros, 46. Antes de 1474 el"IsPo habla hecho ya dos viajes a Roma.

— 366 —que tenía antes Diego Rodríguez de Muros, padredel Obispo.Como Sixto IV se había reservado hasta laspobres encomiendas de la Merced, para cobrarFray Diego de Muros, Provincial de Castillay Obispo de Tuy.las annatas, el provincialato de Castilla fué dad°a Fray Fernando de Córdova, que en 1466 había'obtenido todos los votos de los electores, auricilesta vez no parece que hubiera elección. Qt115`;por esto mismo se originó una contienda entre e>Provincial y el Maestro Fray Francisco de 1\011-— 367 —CiragÓn, Comendador de Valladolid, a quien dióParte razón el Capítulo general de 1475.Fray Diego de Muros continuó hasta 1486 de411endador de Guadalajara, y su parecer autorizado fué requerido varias veces por la Orden.Otro Obispo mercedario encontramos por estc'saños favoreciendo nuestros asuntos: el IlustrísimoFray Antonio de Molina (no de Medina),2 bispo titular de Ronda y auxiliar de D. Lope dea 5, Obispo de Cartagena. Pertenecían a esta'i6 cesis las ciudades de Elche y Orihuela (erigida1114 t arde en Obispado), cuyos conventos tuvier%diferencias con los clérigos sobre derechosfilne rales. Fray Antonio intervino en varios deLe2GS conflictos v bendijo el claustro nuevo dededicándolo a cementerio y autorizando44 erección de cofradías. Era Comendador Fray41411 de Pomar (1).En 1464 Gaver fué despojado por Juan II de'4. 2 rentas del lugar de Algar, cuya administrae'71611 fué encomendada al Maestro Fray Jaime de1. alliora, por sospechas de que el General habíab`a.vo recido la sublevación de Cataluña, pero ha_"1611close convencido el Rey de lo contrario le,t elptiso e (2). en el goce de sus rentas al año siguien-1 En 1471 Gaver adquirió los derechos selioriaede la baronía de Algar que Juan II habíapj.1) A. H. N. Clero: pergaminos del Puig; leg. 2.049.inal COn firma autógrafa.(2) A. C. A. Monacales 2.679, fol. 239.

— 368 —vendido a Francisco de Menaguerra, barón deBonrepos, primo, grande amigo y testafer ro delGeneral. Ello es que desde entonces aparecen losGenerales de la Merced como señores de Algar YEscalés en el reino de Valencia (1).Juan II, por carta fechada en Olite de Navarrael 1. 0 de Julio de 1463, a petición de su caPellänel mercedario Fray Gómez de Montoya (o deBorsega) autorizó la fundación de conventos dela Orden en la isla de Sicilia, donde el citad°Padre tomó posesión del priorato de Santa Anade Palermo (2). Más tarde fue nombrado Viearl°provincial en la Isla, dando a la Merced grgu,prestigio. El Rey le presentó en 1470 para ?1,priorato de San Marcial en Tudela (3) pero debl°fallecer en Sicilia.Sucedióle en el vicariato y al frente de lacasa de Palermo el Maestro Fray Francis co de,Bartulono, hombre de gran prestigio, que t011ienuestro hábito a poco de fundarse el convennEn 1471 había hecho ya una redención de 3'cautivos que fué elogiada por Sixto IV (4). 911475 tuvo grandes debates con el Arzobisp o queno sólo le despojó de las limosnas recogidas enla catedral, sino que le tuvo cinco días encárcel, mereciendo por ello una carta muy äsPeradel Rey.— 369 —Poco después fué nombrado el merceda-11 0 Obispo veriense con retención del priorato,a unle ntando así la autoridad de la Orden. El Ca-Pitulo general de 1475 dió un elector a la provinciade Sicilia. En Febrero de 1488 se nombró nuev°Obispo veriense por muerte de Francisco, debtlena memoria (1).Rvdmo. Fray Nadal Gaver falleció en Barcelonael 27 de Abril de 1474, después de gober-,tiar las provincias de Aragón y Francia 32 años22 toda la Orden. En medio de la decadencia4selleral de la Iglesia tuvo aspiraciones dignas y,1141es, aunque algunos de sus súbditos le llevaenesto ventaja.La Orden le debe el primer ensayo de su'1%ria y una documentación riquísima del tiem-Pe de su gobierno, más abundante proporcional-11 1,1ellte que la de ninguna otra por aquellos arios.adeeió equivocaciones lamentables al juzgar aInäs notables de sus súbditos, pero reconocióhs -°blemente su error cooperando al encumbra-4itliento de los mismos a quienes había molestado111s-tan-lente.(1) Gazulla: Los Mereedarios en Arguines, pág. 11.(2) Vargas: Chroniea, I, 313-4.(3) Patronato, 455.(4) Vargas, I, 330.(I) I bid. 342 y Eubel: Hierarchia Catholica.24___n11111dL

CAPÍTULO XX°ene ralato de Fray Lorenzo Company (1474-9)Y de Fray Antonio Morell (1480-92)''",ARIO: Elección del P. Company. - Su celo y actividad.—Gradosen la Orden.—Capitulos.—Arreglo deCasti lla.—Fray Jorge de la Puerta. —Pleito con lostrini tarios. —Fray Alonso de Sevilla. —Elección delfra ncés P. Morell.- Pleito de •Burcefia.—El Maestrot°groño, Provincial de Castilla.—Fundaciones de Ralees, Con,jo y Monterrey.—El P. Saldafia.—Los PP. ZortGzay Huete, mártires. —El P. Gaviria.- Conflictoeon los trinitarios en Francia.A la muerte de 0-ayer temióse, como otrasn'eees , que el Papa diera el generalato a algúnrbleioso, y el 27 de Abril de 1474 Juan II escri-16 al Cardenal de Monreal una carta que comenzabaasí: «Hoy data de las presentes fallecióen Barcelona el maestro Nadal Gaver,-eral de la Orden de la Merced...» suplicándoleintercediera con Sixto IV para que dejara ad. 4 Me rcedarios en libertad de elegir al másA este efecto incluía una súplica al Papa ytambién al Cardenal de Albano D. Roilgode Borja, protector de la Orden y a otros

— 372 —prelados (1). Todo ello sin duda por indicacióndel prior de Barcelona, Maestro Fray Juan rgel.Felizmente la curia romana no intervin o Y el23 de Junio los siete electores reunidos en Barcelonaaclamaron por unanimidad al Comendor y Vicario del Puig Fray Lorenzo ComPanY.Fueron electores con el 'Maestro Urgel elMaestro.Fray.Nicolás Borrasa, por Cataluffla; elMaestro .Fray Antonio •Morell, Comendador deTolosa, por Francia; Fray Gil de Soria, Coleendadorde Cuenca, por ,Castilla, Fray Jorge dePuerta, Comendador de Daroca, por Aragón;Fray Gonzalo-Flores, Comendador de Orilmelalpor Valencia, y Fray Juan Perler, Sub':hriorBarcelona.Fué comisionado para presentar la (leCal Papa Fray Pedro de Torres, nuevo Vicar io de'Puig, y Juan II escribió- un elogio caluros o delelecto que contaba unos sesenta años yel hábito mercedario desde los cinco de suedad (2). La confirmación lleva la fecha de 27 cleAgosto de 1475 (3).Prontó se conoció que la Orden tenía a stlfrente un santo, cuyo fervor se comunicab3todos. Celebró su primer Capítulo en CalatarIL'el día de San Martín de 1475, asistiend o eóniedefinidores por Castilla el Provincial Fray Fenandode Córdova y Fray Diego derAvila.e, El nuevo General presentó la bula de su conna ción y diéronle todos la obediencia. El'-aestro Fray Francisco de Mondragón, Comenli,,aclorde Valladolid, que andaba en pleito con elA rovi ncial, envió con plenos poderes a Fray Juanragonés. El Maestro Fray Jaime de Zamorad'eallnció también a las apelaciones interpuestas,janclo su suerte en manos del General.Sen tenciáronse muchos pleitos sobre propie-• (1) Patronato, 251.(2) Patronato, 254.(3) En la continuación de los Generales, de Gaver.— 373 —'Pueron elegidos por las demás provincias . Elrjesentado Fray Francisco de Gerona, que eravicari o general de la Orden y Comendador de laeasa capitular, por Cataluña; el Maestro Borrasa1,), or Aragón; Fray Juan Ferrándiz, ComendadorJä tiba, por Valencia, y por Francia el MaestroMoren, Comendador de Tolosa y Provincial.1 Pres entado Fray Francisco de Gerona, que dotó al Conventode Calatayud de un Claustro hermosísimo.(Composición de P. Baglietto.)

— 374 —dad de libros, que eran muy buscados; ibnella'serial en tiempo en que ciertos monasterios 1 0svendían para comprar vino! Impónense penitenciasseveras.Volvióse nuevamente sobre el número de elee"tores, dando tres a Castilla como a Catal uña' Ydos a cada una de las demás provincias, wen°sSicilia, que tendría uno. Las razones alegadas/.para esta reforma honran al P. Company.aumento de votos no tuvo efecto, sin ernbarepues fué anulado en el Capítulo de 1478 a pesarde la protesta de Castilla.Ibanse haciendo frecuentes los títulos en Te°logiaconferidos por la Orden, sobre lo cual setomó el siguiente acuerdo: «Acerca de los nise°trosque en adelante se han de hacer man nen virtud de santa obediencia y bajo p ena deexcomunión que ningún fraile de nuestra Ordelic1bajo la misma pena, reciba el grado de rnaestlisin que primero haya leido los cuatro libros uulas Sentencias en algún estudio general, Y queltenga que responder a una cuestion teológieacapítulo general o provincial; sin estas condie/enies el que haya recibido el grado, aun con lieen -cia del general, téngasele por no graduado» (1);Era necesario, por tanto, que los candida't°,fueran bachilleres por estudio general, o unive:sidad, y que hubieran leído en ella púb1ica1'ien.u,e71como acostumbraban los bachilleres, condiel°/que estuvo en vigor hasta época muy reciente'(1) A. C. A. Monacales, 2.667.— 375 —uebIl idaibndóse rezar todos los sábados el oficio dela Santísima Virgen, todo doble.El pleito de los PP. Córdova y Mondragón131pre el provincialato de Castilla había sido sotnetidoa árbitros con dafio de la obedienciat al General y a los Capítulos; anúlase,Pues, el laudo y en atención a la ciencia y vidah°nesta del Maestro Mondragón, y a que habíalevantado casi de planta el convento de Valladolid,se le sujeta inmediatamente al General,agregándole también la casa de Aguilar, o dePuentes con el reino de Galicia y Obispado de°silla, debiendo renovar la obediencia al Generaleu término de tres meses.Es ya Comendador de Zaragoza el venerableFra, Y Jorge de la Puerta, al que sucede en Darocael Maestro Fray Luis de Ríos. Para Burdeos nom -hrase a Fray Juan de Ramis, que era Comendadorde Riscla en 1468.Son elegidos redentores los citados Maestrosklos, Puerta y Nicolás Borrasa, con orden de(tejare inmediatamente la barba para ir a Argel,Sla y Bona.Nómbranse definidores para el Capítulo generalu q ue debía celebrarse en Córdoba en 1477 los'-taestros Fray Juan Fernández, Comendador deJátlb y Fray Miguel de Gaviria, Comendador deutplona• En 1478 debía celebrarse otro Capítuloen Valencia.Condénase a cárcel perpetua en Zaragoza alkaestro Zamora, Vicario de Montlorite y últimatilenteComendador de Valencia, obligándole a

— 376 —restituir una asna de plata de la iglesia de Monorite.El Comendador de Zaragoza Fray Jorge fiprestó juramento de no soltar al preso sin licea"da del General.Las actas son autógrafas del secretario g'eueralFray Pedro Pérez, que había desempeña do elmismo cargo en tiempo de Gaver y copió el Co"dice del Speculum Fratrum conservado en Tolosa:Las guerras en que ardía Castilla no p erglitieroncelebrar el Capítulo General señalad°para Córdoba en 1477 o por lo menos no 11337rastro de él. Existen en cambio las actas de Valenciaen 1478, donde fueron definidores Fra'YJuan Urgel, Maestro en Teología y Prior de 1331-celona; el Maestro Fray Luis de Ríos, por -Ara:gón; Fray Gonzalo Flores, Comendador de Oil"huela, por Valencia, y por Francia Fray MiguelBarraqua, Comendador de Montpeller.Por Castilla asiste el Comendador dedolid, Maestro Mondragón y el presentado FraYGarcia de Córdova. Entre los vocales se euentaal Maestro Morell, Comendador de Tolosa.Los navarros se habían mostrado poco sunlisosal General, por lo que se encargó al P.puerta, Comendador de Zaragoza, que los arn°nestase,amenazándoles con excomunión si n°entregaban puntualmente las responsiones.Condénase a cárcel perpetua a Fray Berliit°Salvat, que durante su gobierno había arruina°el convento de Perpiñán, del que se nombró C°:mendador al citado P. Barraqua, ¡y aquel desdl;chado había pretendido el generalato en 1414'— 377 —• Confirmase la sentencia pronunciada, por elXa estro Mondragón contra Fray Juan de Aillón,°Inendador de Soria. Para desalojarle de allí seinvocó el auxilio del Obispo de -Osma y del brazosee ular. Al Capitulo celebrado por Mondra,gónhabía asistido como delegado del General el1\11aestro Ferrändiz, Comendador de Elche.» Dieron cuenta de su gestión los redentoresPraY Jorge de la Puerta y Fray Luis de Ríos,(Ille habían traído 39 cautivos de Berbería, yPagados todos los gastos y los censos, entregaronetec ientas libras de reales de Valencia (1).Los de Castilla hubieron de hacer este ario1111-a redención copiosa, pues Sixto IV, por bulacle 26 de Octubre de 1478, elogia calurosamentela Orden y dice que el año anterior había redi-Inicio 180 cautivos, cifra verdaderamente extra-4c1inaria aun para dos redenciones.Vista la humildad de Fray García de Córdoba,Presentado • en Teología, le restituyen todos susl'aclos a pesar de la sentencia de que había sidoObjeto en el Capitulo de Valladolid por el MaestroSe dió la encomienda de Zaragoza por todavida al Maestro Fray Jorge de la Puerta «con-Merados sus trabajos y el honor que ha dadola Orden y que es además un fraile veneraele»El P. Lapuerta gozó de gran prestigio en Zarag°zay la ciudad lo envió más de una vez como(1 ) A. C. A. Monacales, 2.667.

— 378 —embajador al Rey D. Fernando (1). Falleció ell1486 (2).Nombróse Procurador General en Rom a 31Maestro Fray Luis de Rios (de Rivis) con su culi,parlero Fray Juan de Aimerich. Este últim o fuequien reimprimió en París en 1506 la obrita delP. Cijar. El P. Ríos era natural de la Diócesis deCuenca, según declara al inscribirse en la Cara,día de Santo Spirito en el Borgo. No termi nó elcargo a gusto de todos, pues el Capitulo generalde 1485 dió orden de prenderlo.El Rey D. Fernando el Católico, lo misal°que D. Juan, su padre, distinguió desde su nifleal Maestro Company. En 1469, siendo nuestroGeneral Vicario y Comendador del Puig, se i nscribióD. Fernando, entonces Rey de Sicili a, enla Cofradía del Puig, con frases muy afectuosaspara el P. Company, al que llama querido o onsejerosuyo y del Rey, su padre (3).Sostuvo el P. Company la última batallaportante contra los Trinitarios sobre la exclu5W3de pedir limosnas para la redención en la core11,3aragonesa. Para evitar sorpresas habían lograu,°los Generales anteriores, desde Fray NieelasPérez en 1388 (4), que fuera nula toda conceselo privilegio relativo a la materia concedido(1) Neila: Historia del convento de San Lázar o... 0011documentos.(2) Patronato, 256.(3) A. H. N. Pergaminos del Puig, leg. 2.049.(4) Patronato, 515.— 379 —°ir a los Mercedarios. Con este recurso habían14grad0 los nuestros anular cuantos esfuerzos sehicieron contra la privativa.El último y quizá el más violento fué el realizadoen 1477 por los Padres Trinitarios, que el14 de Junio lograron un privilegio, dando fuerzaa otros anteriores, anulados apenas concedidos.El Rmo. Antonio Morell,Decano de Teología enTolosa y General.Por un largo rescripto fechado en Barcelona el 5'le Septiembre, Juan II pone en vigor nueva -'h eute la exclusiva de la Merced, desahuciandoPara siempre a sus contrarios (1).Desde el afío 1443, en que G-aver hizo su pri-Inera visita al convento de Sangüesa, viene figurandoal frente de él, con ligeros intervalos en°tras encomiendas, Fray Alonso de Sevilla, aquien algunos trienios se encomendó también la(1 ) Ibid. 523.

— 380 —casa de Uncastillo, perteneciente a la misniadiócesis de Pamplona, pero en Aragón.Juan II, por cédula despachada en Fignerasen 1472, tomó bajo su protección a Fray Alons°y a dicha casa de Sangüesa con todos sus bienesy a la demanda de los cautivos, logrando d e esemodo mejorar grandemente su encomienda segúnlos libros de visita. Vivía aún en 1493 y acipios del siglo XVI se citaba el nombre de FraYAlonso de Sevilla entre los más venerados de laOrden al lado de Ramón Nonato y de Pedro Armengol(1).El. 20 de Noviembre de 1479 pasó a meiervida en el Puig el Maestro Company, siendo 0°tocadossus restos en lugar distinguido con estatuayacente y un epitafio en verso que copian loshistoriadores de la Orden. Su memoria es tarnbién una de las más respetadas en ella y muellesde nuestros autores, comenzando por Zumel, lellaman beato.Sus cenizas están hoy en caja aparte e n elsepulcro del Maestro Fray Juan Calvo, pues a . loshombres del siglo.. XVIII que desfiguraro n laiglesia les estorbaba la sepultura de CompanY•la hicieron pedazos, cosa sensible y bárbara,como la llama el P. Arques.. El 25 de Febrero de 1480 fué elegido Generalen Barcelona el Maestro Fray Antonio: IVInrelLProvincial de Francia y. Comendador de Tole'(1) «La Merced» de 1929, pág. 331.— 381 —tantas veces mencionado (1). Fué confirmado porSixto IV el 20 de Abril, encomendando el exa-Inell de la elección al Provisor de Tolosa.Los documentos de entonces escriben su nombre,como el de otros personajes, de todas las'flaneras posibles: Maurel, Morelli, Moren. Nosatendremos a esta forma usada generalmente por21,1 Secretario el P. Malirat, y por bastantes do -tu'entos Ti de Tolosa.Dijeron algunos que era natural de Tarragona, pero era francés sin duda alguna. Cuandosuee lieron sus conflictos con Gaver se dijo quehabi:jnamenazado impedir la entrada de aragonese en Francia en virtud de la PragmáticaSan-Celebró el P. Morell su primer Capítulo enGer ona en Pentecostés de 1481, del que fueronDefi nidores el Maestro Fray Jorge de la Puerta,Com mulador de Zaragoza, por Cataluría. Poreast 11a, el Presentado Fray Fernando de Córdoba,Provincial, y el Comendador de ValladolidMa estro Mondragón. Por Aragón y Navarra, ellliaestro Fray Miguel de Gaviria. Por Valencia,el Maestro Fray Vicente Torrell. Por Francia, el/-laestro Fray Bertrando de Besse.Señalóse para contrata al convento de Cahorsla diócesis de Perigueux y otras. Renovóse la°I'clen de suprimir el convento de Riscla, dejandosus , oienes a disposición del General.• (1) Entre los electores figura, según Antillon, el Padreeórdoba, Provincial de Castilla.

11--- 382Este acusó a Fray Bernardo Martí, valenno, de graves desobediencias a su Provincial elMaestro Ferrandis, en dañe del convent o delPuig. Ratificóse la Constitución de Calata Yadsobre el oficio de la Virgen en sábado.Confirmóse también la sentencia arbitra dedada por Fray Diego de Muros, ya ObisPeTuy, sobre los términos de los conventos de BUJceña,Logroño y Estella, ordenando al Comendor del segundo, Maestro Fray Pedro de L ogr efro, que respetara los derechos de los otroS•Muros había tornado por norma la divisió n detierras hecha por el Maestro Monterrey . 1-'3queja fué presentada por el Comendador de EStellaen nombre propio y como Procurad or deBurceña.Dióse igualmente por bueno el arreglo he o b. en Castilla entre el Provincial y el MaestroMondragón, que parece había renunciado a laexención de que gozaba, pues figura corno deenidorde la Provincia.Hízose Comendador perpetuo de Sangüe sa 3Fray Alonso de Sevilla. Era Comendado r deBurdeos el Maestro Fray Bertrando de BeSse,definidor. Señalóse el Capítulo siguiente pa' 3Cahors en 1483, pero no -debió celebrarse, Puesen el de 1485, reunido en Tolosa, actúan los dee"nidores de 1481.Poco después de esta fecha debió mori"Provincial de Castilla Fray Fernando de Córdoba,pues al año siguiente hallamos de Prffidial al Maestro Fray Pedro de Logroño. Casi al— 383 —tiempo desaparece el Maestro Mondragön,Pues en 1483 era ya Comendador de Valladolidel Maestro Fray Antonio de Valladolid, a quienveremos luego Provincial (1).En 1483 tomó posesión del convento de Raíces,próximo a Avilés, en nombre del MaestroLG igrotio, Vicario provincial, el licenciado Frayjuan de Bustamante (2). Había adquirido aquellacasa el Maestro Monterrey por escritura hechaCOnlos terceros franciscanos y confirmada pora, !0 II en 1461, pero sus antiguos dueños seInantenían allí en 1466.Probablemente la Merced hubo de cederlesahora el convento de Santa María de Fuentes,donde figuran los terceros en el siglo XVI. El denai ces era más importante para los Mercedariosque no tenían casa en Asturias para recoger laIiinosna de los cautivos.La misma razón fué la que movió al Provinciala aceptar dos en Galicia: una en Santa Maríaele Conjo, extramuros, de Compostela, y la otraMonterrey, cerca de la frontera portuguesa.De la primera fué fundador el bachiller FrayDiego de Saldaña, a quien dió posesión el Pro-¡sor Don Juan García de G-ómara (con anuenciadel Maestro Logroño) de un antiguo cone,4uco de benedictinas abandonado. Sixto IVe'° 11firrnó esta donación en 22 de Marzo de 1483.(1) A. H. N. Pergaminos de a: Merced de Madrid,l e,- • ,(2) Bib. Nl. Ms. 2.448.

El Ilmo. Fray Diego de Saldaña, fundador del Convent°de Conjo y Obispo auxiliar de Santiago.(Cuadro conservado en Poyo.)— 385 —Fray Diego de Saldaña fué preconizado el 13cle Marzo de 1493 Obispo beritense y auxiliar de8antiago, con retención de la encomienda, que,ilegó a ser más tarde la segunda de la Provincia.ra el P. Saldaría grande amigo del Obispo deTuY Fray Diego de Muros, y a su influencia conel Arzobispo de Santiago debió sus primerose Xitos el Comendador de Conjo.También debió mediar el Ilmo. Muros en lafundación de Santa María Magdalena de Monterrey, de la que tomó posesión en 1484 el doctor. 'raY Miguel Francés, aceptando la donación'lecha por Don Sancho de Ulloa, primer Condecle Monterrey, grande amigo y aliado del Obispoçie Tuy (1).Entre el provincialato del P. Córdoba y elclel Maestro Logroño, o sea en 1482, colocannuestros autores el martirio en Baza de dosredentores de Castilla. Fray Juan de Zorroza y-'1"a'Y Juan de Huete, víctimas de la furia de losIlleros, despechados por la pérdida de Zahara,que tomaron entonces los Reyes Católicos. ElIlustrísimo Fray Melchor Rodríguez de Torres,Vi6 las actas de su martirio, que cita en su4gricultura del Alma, impresa en 1603 (2).Celebró el P. Moren su tercer Capítulo gene-1;41 en Pamplona en 1487, en el que se titula proesede Sagrada Teología y decano de la alma(I ) Ms. 2.438.(2 ) Fol. 306-7.25

— 386 —Universidad de Tolosa, siendo probablemente elprimer mercedario que logró este honor.Fue definidor y Comendador de Pamplona FraYMiguel de Gaviria, Provincial de Aragón y figura'relevante de la Orden que había mejorad o gralldementesu convento. Falleció el 5 de »ni°de 1493 (1).Por Castilla fueron definidores los Maestr°sFray Juan de Ayora y Fray Juan Cercos.Mandóse, entre otras cosas, -que todos los re'ligiosos se arrodillasen al verso «Monstra te esseMatrem» y que se celebrasen con octava solernnelas cuatro fiestas principales de la SantísilngVirgen, cuyo hábito llevarnos, a saber: la Asullción,Natividad, Purificación y Anunciaci ón. 4Con esto quedaba ya casi redactado el Ge l-tulo «De las Alabanzas de la Santísima Virgen''', que figura en los códices de las Constituciones defines del siglo XV y subsiste en las modecon poca alteración. Al final de cada hora debiaildecirse las palabras: _In omni tribulatione et anggstiasubveniat nobis Virgo Maria.Inocencio VIII concedió a la Orden en 14 A7a petición del Procurador General Maestr o Fra'YGaspar Burguerre, Prior de Näpoles, una 191113- que indica bien el estado lamentable de la Iglesia:Algunos clérigos y religiosos de diferente:órdenes arrojábanse a predicar las indulgeneid:de la Merced, recogiendo fraudulentamente stl"limosnas. El Papa manda a los'i Obispos y Pre13.(1) Arch. de Navarra: leg. 457.— 387 —d°S regulares que persigan a estos impostores,Pero autoriza a los regulares de otras órdenes1:ecluerido5 por los Mercedarios, a predicar lasIndulgencias de éstos, aun sin permiso de los411 Pe riores de las otras órdenes.El Capítulo de 1489 estaba convocado paraMartirio de Fray Juan de Zorroza.(Cuadro del Convento•del Olivar.)J, 4tiba , pero se c,elebró en Valencia por las razo-2es que explican sus actas. No asistieron los deuniclores de Castilla, y en su lugar se nombró ad4 Comendadores de otras provincias.Salieron redentores los Maestros Fray Auto-Pase uet y Fray Vicente Torren. con el Padre.d.1411 Aimerich, Comendador entonces de Valen-'14 , y el Padre Juan Roquer.

— 388 —Había por aquellos años grande eferveseencig'contra los cristianos nuevos (conversos 0 1113de conversos) que se refleja en el capítu lo C°11la prohibición de dar el hábito a neófitos v e°"fuertes castigos a los que habían puesto 1T1a1c113en la ascendencia de algunos religiosos,dolos de marranos.Dióse la encomienda de Burdeos ad vita/W31Maestro Sarransot de Dado, Catedrático de 'relogia en aquella Universidad, con mucha gigigde nuestro hábito. Del cartulario de la Universidad,consta que leía en su mismo conven to n°lejos de la catedral. Vivía aún en i51 9::actas están escritas siempre por el S( , c'y retargeneral Maestro Fray Juan Malirat.Inocencio VIII, en 23 de Septiembre de 142hizo Obispo achadense (de Achonry en Irlail"'al Maestro Fran Juan de Bustamante, con rete%ción de su encomienda de Toledo. Es el nlisT99;quien vimos primer Comendador de Ralees ' ».-gunos de nuestros autores le llaman Pedro, egtirvocando también el tiempo en queiv;%rió Y .,,1°)sede episcopal (1). Debió durarle poco la 1111e'9'dignidad, pues en 1492 se provee la diócesis des'pués de otro Obispo intermedio.11 ado 1111El Reverendísimo Morell había sellex° noCapítulo general para Barcelona en 149 1 , 13,,e 10llegó a celebrarse por las inquietude'tiempos y por la decrepitud del Gene l' g110falleció en Tolosa el 15 de Junio de 1492(1) Tengo copiadas sus bulas.— 389 —Su celo por celebrar Capítulos indica el ansiatIlle te Orcie_ , nia por la observancia y actividad de laque falta desgraciadamente en:(-1 eisnocrliecsi.o.Baj o su dirección, la Orden tomó en Francia'1 °11s1d erables vuelos, suscitando la emulación detrinitarios, cuyo General, el célebre Roberto'44tlin t1,)3:, ,1 Rector de la Universidad de París, esv er,_lo e:contra la Merced una diatriba en prosa y1,4 '9 ,er xcitando a los Prelados del Norte contral i '-i- 3edarios, que eran de origen español y,"ab11ansobre el pecho las armas deLosAragón (1).eatio,_. a rgumentos no honran mayormente alh , etid ins , _ta francés, pero malos y todo fueron re-Ir '' constantemente por sus sucesores. Los, 14 h ' cl rttrios franceses replicaron con razón que1 e llanos de España nunca invocaron contraä i'l itarios, de origen francés, un argumento1144 t'II deleneznable, que además fué producido en(Jretle_ ui.al. 1?. regía los destinos de la Orden unfrancés .ä\71)1 4.37 bastante documentación acerca de esteJ aittie Ite', ci ėleo peso llevó en París el Maestro Fraye tlande Vera, Comendador de Perpirián, al queFailienció in demnizar en el Capitulo de 1493, re -letor,. 14i a° -os gastos entre los doce conventos de, Pues en beneficio de todos habla sido la1a (2)., (1)4144 hobertiGaguini Epistolae et Orationes, en la Bi-(2)"e1-, cle..1 ella Renaissance. Paris 1903.'4andres: L'Ordre des Trinitaires... I, 357.

CAPITULO XXIGeneralato de Fray Juan de Urgel (1492-1513)Elección del Prior de Barcelona.—Reformasen las Constituciones.—Visitas.—Breviario impreso.--C olón y la Merced.—Fundación de Aränzazu.—Málaga— Granada.—labispos Mereedarios.--Redención.—11sPA ndense las limosnas.—Favores de Julio II.—LosEvan y Becerril en defensa de la Concepción.—rlin dación de Ecija.—Primeros catedráticos en Salahlanca.—Beaterios de Mercedarias.—Sicilia.—Oritn.—Santo Domingo.C omendador de Carcasona, Fray Juan1:4111 , se apresuró a dar conocimiento de laITu ert e del P. Morell al Prior de Barcelona Fraydual ti -Ur ge', que era Vicario general en Españanfle' clif unto y ahora sucedía en la vacante por sur i° de Prior. Urgel convocó a los electoresra Bar celona el 8 de Septiembre de 1492. Ha-Pres idido las dos elecciones anteriores y tegranparte en su resultado; esta vez fué él1110 pro clamado General. Uno de los electo-' SegÜera el Provincial de CastillaYde Valladolid.ciebha vez obtenida la confirmación pontificia,su primer Capítulo en Huesca en 1493.-‘'Lleron_ de Castilla el Presentado Fray Juan

Martínez, Comendador de Guadalajara,Maestro Fray Alonso Pérez.Tomáronse importantes acuerdos, entreel de suprimir enteramente las encomiendaspetuas, cuyos resultados eran deplorables.graciadamente, el propósito de enmiendapoco eficaz.Renovóse el precepto de que nadie se grase por Universidad sin licencia del GeneralProvincial de Castilla.Figura por estos años un Prior de Burjar1an7casa hecha semiindependiente con ciertos bienesdel Convento de Huesca, adonde volvió a ranndirseunos sesenta más tarde.Entre los asistentes encontramos al Ma(3streFray Jaime Llorens de la Mata (futuro Gener al),que fué Procurador del Capítulo y salió eleet°rgeneral.Nombraron redentores a los Maestros D'eJaime de Vera, Comendador de Perpiñän, y - POSJuan Martínez, y al Presentado Fray Pedro del3Puerta, a los que se prohibe dejarse la barba'ni recibir legados hasta que el General l(dene.Prescríbense oraciones por los reyes y ¡en-hechores y a cada sacerdote una misa por eJ. aC rP•9'denal de Monreal, protector de la Orden.Juan de Borja, que debió suceder en el carg° ensu tío Alejandro VI al ser creado por és4-u',de1492. Asignáronse por distrito al ConventoBurdeos las diócesis de Bazas y de ,Saintes.Parece que fué en esta Asamblea dondPitillos para 1496, uno en Agramunt para Cataitinay otro para Francia en Perpilián.Alladióse también la pena de cárcel para los'adrones y falsarios de bulas pontificias o de dotill'llentos del General y monederos falsos, con-°rIne a lo acordado en Toledo en 1466.n Mandóse igualmente corregir las Constitucioie2 e n el Capítulo del vestido, donde decían que° c1OS los frailes llevasen el escudo en la capa yel escapulario; en adelante deberían decir ena capa o en el escapulario. Permítese llevar taellosperpesfuédua"o dele se393 —41.5 el acuerdo de celebrar Capítulos para cadaProvincia, a fin de que los frailes no tuvieran quehacer largos viajes, mandato convertido luegoen Constitución y añadido a las antiguas con elCjapítulo de las alabanzas a la Santísima Virgen.vemos que en 1493 se convocaron ya dos Ca-R1 Maestro Fray Miguel de Gaviria, restaurador delConvento de Pamplona.(Composición de P. Baglietto.)

— 394 —bardos o manteos en viaje, contra la prohibiciónabsoluta antes existente.Desde 1494 tenemos actas de visita practica"das por el Maestro Urgel en Barbastro, Huesca,Montlorite, etc., siendo de notar que en casi todaspartes la imagen de la Merced ocupaba el l a-gar preferente en el altar mayor.En Sangüesa, el 9 de Mayo de 1494, encontróde Comendador al anciano Fray Alonso de Sevl-11a, que había adquirido bastantes libros. E s laúltima mención que tenemos de él.En Pamplona era Comendador Fray Juan deHuarte con 13 'conventuales, buena libreríaun gentil reloj en la torre que toca las horas diay noche», obra, como casi todo el Convento, delMaestro G-aviria, fallecido el año anterior.Un curioso inventario de ese Convento hech°en 1522, nos describe la Danza de la Muerte, pin"tada en el claustro, con versos castellano s e'c'plicativos hechos por el citado Maestro, queraba en algunas de sus escenas (1). Todo desaP"reció en 1521 en que fué derribado el Convent°por temor de que lo utilizaran los francese s Paracombatir la muralla, pues estaba fuera de ella'En Zaragoza era Comendador Fray Pedro clela Puerta, sobrino del venerable Fray Jorge, e°11nueve frailes. San Lázaro había vuelto a 0e1-1193rel lugar preferente donde en 1446 estaba lagen de la Merced, que a mediados del siglolo había recobrado.(1) Archivo de Navarra, leg. 25.— 395 —En estas y otras visitas acompaña al Generalel Maestro Fray Esteban Sebastiá, Prior de Barcelona.Adviértese en las actas que muchos breviariosy misales no eran según la Orden, puesennio el coste de los manuscritos era muy elevado,los frailes usaban los que su buena suerte lesdeparaba, como en el siglo XIII.Esto debió hacer pensar al General en la convenienciade imprimirlos, como lo ejecutó en'1503 por Lucantonio Giunta en Venecia (1). Enel Capítulo general de 1506, se manda ya rezarel oficio «según está ordenado en los breviariosnuevamente compuestos por el Rvdo. Maestrogen eral» y se habla largamente de ellos.El Maestro Fray Antonio de Valladolid, desde1493 , añade a sus títulos de Provincial de Castillay Portugal, el de Granada, recién libertadadel Yugo sarraceno. Los Reyes Católicos, al confirmarnuestros privilegios en 1500, llaman a, raY Antonio nuestro Capellán y del nuestro\.ionsej oA él corresponde la gloria de haber enviadofln Mercedario corno capellán de Colón en suegundo viaje al Nuevo Mundo en 1493, según el°Ilocido testimonio de Pedro Mártir, que en 1501eXtractó el diario del Almirante (2).Pué poco lo que adelantó la colonia y la evan-(1 ) Vargas I, 361.„ (2) pecas Occeánea, impresa en Sevilla por Crombereren 1511.

— 396 —gelización durante el gobierno de Colón, limitadoexclusivamente a la isla de Santo Domingo. Alsucederle Ovando en 1501, se le manda que pr o-cure la conversión de los indios por medio de losfrailes que allá había y que educaban a loshijos de los caciques en sus casas, única manerade hacer obra sólida. Más tarde veremos la parteque en ello tomaron los nuestros.,En una licencia otorgada al Comendador deOlmedo Maestro Fray Juan de Ayora en 1494,consta que fueron definidores con el Provinc ial-Fray Antonio de Valladolid, el Comendador FraYDiego de Saldaña, Obispo de anillo (1) y Comendador de Conjo; Fray Pedro de Avila, Comen dadorde Huete; Fray Francisco de Elvas, Com endadorde Cuenca, y el bachiller Fray Blas, Comendadorde Almazán (2).De este Capítulo debió salir el acuerdo dehacer redención aquel año. El Deán de SevillaFonseca, encargado de proveer las armadas deIndias, había secuestrado para este efecto lespaños y otras mercancías que el Comendado r deSevilla Maestro Fray Jorge tenía dispuestas par3la redención. Los Reyes Católicos, por cédulaexpedida en Madrid a 17 de Noviembre de 14942mandan al Deán levantar el embargo (3). P or n'trodocumento sabemos que, efectivamente, en 140hizo redención .el Comendador de Burceña (4).(1) Mal leido de Axila.(2) Remon II, fol. 97.(3) Simancas: Cédulas, t. I, fol. 86.(4) A. C. A. Monacales, 2.681, fol. 86.— 397 --Es curiosa la asistencia a un Capítulo provincial del Obispo de Beirut, P. Saldaña. LaSanta Sede le encargó también una abadía, cuyonombre no he podido sacar en claro de los registrospontificios. Había muerto el 23 de Junio de149 7, en que se da su titulo episcopal a un franciscano.En Conjo le sucedió el Maestro FrayRo drigo de Mosquera, de quien hay documentoshasta 1505.Entre las fundaciones hechas o intentadasPor estos años, debe mencionarse la de Aranzazu,importante santuario de Nuestra Señora,Pa trona de Guipúzcoa, ocupado más tarde porlos fr anciscanos. Antes que ellos lo Poseyeron1°s IVIercedarios a fines del siglo XV, según unacon ocida bula de Alejandro VI, que en 1501 confiriuöen su posesión a los observantes.Ya en el siglo XVII se censuraba a los nuestrospor haberlo abandonado, pero debe tenerseen C uenta que casi todo estaba por hacer allí yade más tenían parte en la casa ciertas beatas(1).En el Capítulo provincial celebrado en Sevi-'2 el 3 de Mayo de 1499, por el Maestro Vallauolidse aceptó la donación de la ermita de la7.eraCruz y otros bienes extramuros de Málaga9frecidos por Alonso de Ribera, uno de los concristadores de la ciudad, para fundar convento,"de él tomaría el hábito (2).(1) Vaticano, Reg. Lat. 1.082, fol. 238.(2) Bib. Nl. Ms. 2.441.

— 398 —Por ser el lugar expuesto a las visitas de lospiratas, en 1507 se trasladaron los Mercedariosdentro de las murallas a un solar que les diola ciudad y confirmó la Reina Doña Juana,siendo Comendador el bachiller Fray Diego deRoa (1).Bendijo la nueva iglesia y cementerio, ellunes 5 de Noviembre de 1509, el Maestro FraYGarcía de Sahagún, Obispo beritense, religiosenuestro y auxiliar en Málaga de Don Diego Bamilrezde Villaescusa (2).En 1494 era Fray García Comendador de Salamanca,y fué creado Obispo en 1501 paraliar de Coria, uno de los muchos obispados quetenía el Cardenal de Capua. Tengo sus bulas'"Vivía en 1515, en que León X le dió licenei3para testar.Marine° Sículo enumera entre los varonesilustres de España por 1499 al Comenda dor deBurgos Maestro Fray Juan de Valencia, alualnede París y de vida inculpada (3).También se fundó por 1500 el convento deGranada que, como el de Málaga, había de aleanzargrande importancia. Debióla en gran p arte '11uno de sus primeros Comendadores, el Maestr°Fray Gonzalo de Ubeda, que en 1521 fuéindogrado Obispo drivastense, auxiliar del segt4_ deArzobispo Don Antonio de Rojas, presidente(1) Salmerón: Recuerdos, pág. 252.(2) Ibid. .(3) De Laudibus Hispaniae, 72.— 399 —Castilla. En sus bulas se le reserva durante suvida la encomienda de Granada.Dió nombre a la Merced también por estosaños el bachiller Fray Diego de Ciudad Rodrigo,Vicario del convento de Toledo, cuyas piadosasEl Ilmo. Fray Gonzalo de Ubeda, Obispoauxiliar de Granada y Comendador de laMerced.4, °\ra S se imprimieron varias veces con las Treselentas,de,Juan de Mena, consideradas entonces‘:' 111 0 la obra maestra de nuestra poesía.Ei Maestro Urgel celebró su segundo Capítulogieneral en Perpiflän el 10 de Noviembre. de 1499,d4t 'lile no asistieron los de Castilla. Salieron-eeniclores:

— 400 —El Maestro Fray Juan Ferrandes, Vicario delPuig, por Cataluña; el Maestro Fray Jaime L1°rensde la Mata, Comendador del Olivar, PcirAragón; el Maestro Fray Miguel Istla, por Valencia,.y el Presentado Fray Antonio Gay, Come n-dador de Tolosa, por Francia.El Geriérail dió cuenta 'cle todos TOS "ingres os Ygastos de la redención desde 1493 a 98. Los ¡II'gresos montaban 2.180 libras catalanas y losgastoS 4.058. No había sido grande la diligenciaen colectar limosnas.Nombráronse redentores los Maestros L'oreasde la Mata y Esteban Sebastiá, Comendadgahora de Zaragoza, y Fray Juan Malirat, doet°1'en Decretos, Provincial de Francia y ex seeretariodel General anterior.Había que tomar dinero prestado para haceruna redención, y en vez de pedirlo a extrafi0s2que cobrarían intereses, prefirióse acudir a lesmismos religiosos, a quienes se concediero n eiertasgracias. El Maestro Llorens y otros potenta"tados adelantan cien florines de oro y °tr4ee:frailes cantidades menores, lo que nos pernilver la importancia de su peculio.A continuación están en el libro de Capit alas cuentas de redención de 1499 a 1505, Pralde qu'e no hubo otro Capítulo intermedi o. Si ecelo por celebrarlos hubiera de ser la Inedicigpldela actividad de la Orden, ésta habría desej,(lid° mucho en las Provincias sujetas inmediat'mente al General.P°Verdad es que durante bastantes arios,— 401 —61.0 no se pedía para la redención, sino que lasihnosnas espontáneas recogidas en nuestras iglesiastenían que entregarse a la Cruzada, segúntnanifiesta el. Rey D. Fernando en cédula de1511 (1). El hecho se repitió muchas veces, y esinnY importante para explicar la aparente inactividadde la Orden. Los Mercedarios se quejaronal RcY de que en tales circunstancias no podíansatisfacer los censos que pesaban sobre la redención.En cambio el Rmo. Urgel dotó la iglesiaBarcelona de un lujoso altar mayor en el qued' I g tiraban las imágenes de San Ramón Nonato y`4e San Pedro Armengol, esculpidas en 1499 (2).Labró *también muchas alhajas de plata conSatIS armas (que eran un oso con llamas en campo:e oro), edificó los claustros alto y bajo y dotó el`nrode magnífica sillería y órgano (3).:Su último Capítulo lo celebró el Maestro Urgeledll 3 1' de Mayo de 1506 en Gerona, del que fueronCnidores Fray Pedro Sans, por Cataluña; elestro Fray Pedro Luis Sans, Comendador dewa,leneia, por Aragón y Navarra; por Valencia,lltaestro Fray Vicente Martí, y por Francia, el4ae5t10 Fray Bernardo Durán.i , 13e Castilla . no asistió nadie, ni tenían obliga-911 > según la bula de la concordia, y fueron(1) b(2 txepr oducida por Vargas, I, 363.(3)Grazulla: La Patrona de Barcelona, pág. 38.A . Vargas ' I 369. Las noticias son seguramente de26

— 402 —nombrados por fórmula Fray Juan Duarte y Fra)García de Mañero, ex Comendador el primero')Comendador actual de Pamplona el segundo.Salieron redentores los Maestros: Fray Pedr°Luis Sans;, Fray Jaime Gili, Comendador de perpiiián,y Fray Juan de Ocengua 2 Comendador de_Montpeller.En los sufragios se manda a cada Sacerdoteuna misa por el Sr. Cardenal de Salermo, protee"tor de la Orden. Llamábase Juan de Vera y debiósuceder a Juan de Borja,lallecido en 1503. E l deSalen.° murió en 1507.• No es probable que el Cardenal de San Peelróad Vincula; Juliano de la Rövere, fuera proteeteroficial de la Orden, aunque los:Reyes de Aragónle pidieron varias ,veces que intercediesenuestro favor; tal sucedió en 1474 para obtenerla confirmación del P. Company (1).Después, siendo legado . en Aviñón, trató dieheCardenal de dar más vida a aquella casa unestra(2), y elevado al solio pontificio en 1503 eelleLnombre de Julio II, concedió a la Merce d ni18)bula muy favorable en 1505 con grandes induigenciaspara los religiosos y cofrades.Obtúvola el Maestro Fray Pedro Luis 83115'Comendador de Valencia .mencionado arribacomo redentor, aunque es dudoso que llegarabaserlo de hecho, pues en la solicitud exPres3que eran muy pocas las limosnas recogidas'(1) Patronato, 255.(2) Deslandres: L'Ordre des Trinitaires.— 403 —En Castilla hay. 'documentos del Provinciallbestro Valladolid hasta 1503 (1). A principios1508 lo era el Maestro,Fray Jorge de Sevilla,Ya mencionado, y . ,Vicario suyo Fray Franciscode Evan (2). Fué el Provincial predicador de los'eYes Católicos y conspjero suyo, según rezabaepitafio leído po'r Zumel.Si n Vicario P. Evan, Comendador de Toledo,l'ituf5 de juez conservador de los franciscanos de4tireia contra los dominicos de allí y de Alcaraz,.(itle los habían insultado gravemente, además defi llegar en públieo la . doctrina de la Inmaculada::eu ererPilci:53: ., E, sta sentencia fué ejecütada el mis-41,° alí o de 1508 con bula especial de Julio II porCinmendador de Huete 1V1aestro Fray Pedro deIr En Dicieṃ' bre de 1512 era ya Provincial ele stro Fray Juan de Baena, y tenía por VicarioPra Y Francisco del Campo, Comendador detlada lajara, y poco después al Maestro Fray'd01-1s0 de Zorita, que fué más tarde Provincial (4).En 1509 se fundó el conVento de Ecija en un,u.gar próximo al río que lo destruyó en una crea,siendo reedificado en mejor lugar en 1545.tiotTeron sus fundadores los Condes de Palma ymilló la posesión el Comendador de Huete Fray°—40 de Godoy (5}. - •(91)\ NI. Ms. 2.684. Documentos de Guadalajara.Ibid. Ms. 2.906.(\'' 4) 'bid- Ms. 2.438.Eib • NI. Ms. 7.002.Ibid. Ms. 3,530.

Salamanca —Lápida sepulcral de Fray• Alonso de Medina, Catedrático de Sant&Tomás, en 1509.— 405 —De 1509 son los documentos salmantinos en1.11e consta haber ocupado un Mercedario la cátedratenido de Santo Tomás en la Universidad, quePronto iba a llenar el mundo con su fama. Los/lercedIrios de Salamanca dijeron en 1584 quehaeL-. ciento y más años que su colegio habíacatedráticos, pero el más antiguo que':)nocemos es el bachiller Fray Alfonso de Medi-Comendador de la Vera Cruz, que tomó pose-1611 de la cátedra en Enero de 1509; hubo dePresentar la dimisión en Abril, quizá por la ente_ ,ruieu Id que en Octubre le llevó al sepulcro.Fué designado para sucederle Fray Francisco7erino que había hecho varias oposiciónes, y en'513 se opuso a la cátedra de Biblia. En 1518 lo'eneentramosrio -4,„de Comendador de Córdoba y Vica,-4.01 vincial y fué elegido definidor aquel año'11 el C apítulo de Huete. En 1522 y 23 era Co-%rou tior (de Jerez, según demuestra el libro deProfesiones ,Por eSte tiempo y con el espíritu de la verda-{) ' I forma iniciada en España por la Reina"atólic% se consolidan los beaterios de Mercedal'hi4ha3ta convertirse en verdaderos conventos." siglos pasados, además del beaterio deii6411'e, e4,1_011,a en que vivió Santa María de Cervelb13_'e_ neos m documentos relativos a la casa .de'atas del Puig y mención de alguna otra,todas desaparecen al cabo de algún tiempo.'k'Xistí, ,an, sin embargo, beatas aisladas, cuyas(1)1-a Merced» de 1924, pág. 203.

— 406 —profesiones se registran entre las de lciS frailes', Eri 1509 había en Guadalajara un beateriaMercedarias al que Julio II permitió se trasl adaseima religiosa dominica, beaterio que fué arnpliacloen 1515 por. D."' Beatriz de Padilla; viud3del Regidor de Segovia Diego de Mesa; la cualse retiró allí con su hija D.' ConStanza. AeePt6la donación el Comendadór de Guadalajara FraYiFrancisco del Campo, Vicario provincial por: eiMaestro Baena (1)._ En 1514 existía también en Bilbao en.laSomera, o Calsomera, 'otro beaterio de Mereed3-rias-que pocos años después constituyen el COvento de San José de dicha ciudad, del q ue 111, 3-bremos de ocuparnos repetidas veces y q ue suysiste con gloria (2).En Sicilia nuestro convento de Palermocreciendo en importancia, merced a los buen°superiores que lo gobernaron, entre los cualescita al P. Vargas (que fue allí Comendador Y'estudió detenidamente su archivo), al MaestT:Fray Bartolome de Lorenzo. LOs que le 50 cecIP;5ron viéronse envueltos en nuevas luchas c on loArzobispos empeñados en disponer de las ilul°snasde la redención (3).Con ellas pudo en 1501 Fray Vicentese°redimir en Túnez 39 cautivos con los q ue v°1v(1) Bib. N. Ms. 2.684.de 13'(2) «La Merced» de 1921 , pag. ' 39s y e l « oletin»Orden, Enero de 1920.(3) Vargas, I, 356-7.— -107 --feli zmente a Träpani, y el Virrey Dón Juan de la&iza confirmó nuestros privilegios para colectarlimosnas qué tan bien se empleaban. Julio II exliRmo. Juan Urgel, que construyó en 1500 el Claustrobajo y alto de Barcelona. •(Composición de P. Baglietto.)131(lió también en 1505 una bula destinada a vencerla resistencia de los mendicantes (1).En 1509 el Cardenal Cisneros, con los recur-1,c's cle su arzobispado v utilizando la pericia deedro Navarro, se apoderó de la importante(1) Ibid. 361.

- 408 —plaza de Orán en la costa africana v en ella flurdó conventos de predicadores, menores y mercedarios,a los que esta casa prestó importa,ntísi"mos servicios, permitiéndoles tratar el rescatede los cautivos sin exponer el dinero, aunqu e sticonservación impuso a la Orden grandes sac rificiosen los porfiados asedios de que fue objeto laplaza por parte de los moros. En el arreglo couque se terminó el pleito entre el General Y elProvincial de Castilla en 1532 las tierras de Africafueron asignadas al primero y el conventoOrán, fundado por Castilla., pasó a depender dela provincia de Valencia.En el afán de conquistas y aventuras que dominabaa los españoles de entonces, algunos religiososnuestros y de otras órdenes se dirigier°al Africa en hábito de soldados, pero reconocidosa tiempo fueron devueltos a su convento de -Murcia(1).El Provincial Maestro Baena dió nuevo °-pulso a las expediciones de Mercedarios al Nileir°Mundo. Consta que en 1514 se edificaba und°11-vento formal de la Merced en Santo Domillg°'para cuya fábrica fueron señalados unos indi°.sde servicio (2) y pronto veremos a nuestros 1111;sioneros irradiar desde allí su acción a Cu ba Y 3continente americano.(1) Revista de Archivos, t. 21, pág. 286.(2) Documentos inéditos del Archivo de Indias,CAPITULO XXIIqeneralato de Fray Jaime Llorens de la Mata(1513-1522)SUMARIO: Su elección.- Estudiantes en las Universidacles.-Redención de 1516. -Concesión y nueva suspen-Siön de indulgencias.-Intento de reforma.-Obrasel Olivar.-Fundación de Paris.- Colegio de Alcalá.-Monjas de Lorca. -Privilegio en Francia. - Obras enBurdeos y en Burgos. - El P. Bovadilla en América.-Misiones en Nicaragua. -El P. Olmedo en México.-11 Maestro Fray Domingo, catedrático de Salamanca.Fun dación en Ronda.-Muere el P. Llorens.Terminados los funerales del Rvdmo. Urgel,prior de Barcelona Maestro Fray Esteban Se-"a2ti ti convocó a los electores para el 23 de Nov2"1-brede 1513. Consérvase original la hojaa la Provincia de Valencia con las firmas1 e1 el ector Fray Vicente Martí, Comendador deld iligY de su compañero Fray Luis Boyl, Comen-'4dor de Valencia (1).Pilé proclamado General por vía de Espiritua'llt° el Maestro Fray Jaime Llorens de la Mata,i°111endador del Olivar, que obtuvo la confirmae'61-1-de León X el 18 de Enero de 1514. El 20 de(1)i0 416. Areli. de Navarra: Mercedarios de Pamplona, lega-

— 410 —Febrero Fernando el Católico despachó en Madriduna carta donde después de contar todo el pr°cesode la elección del nuevo General lo presentaa todos los Prelados de España (1).Esta atención la debió sin duda el P. Llorensal Arzobispo de Zaragoza don Alfonso de Aragón'hijo natural .del Rey y Regente , varias veces deaquella corona, de quien el nuevo General eraconfesor y fué después testamentario.Celebró su primer Capítulo general en Migael mismo año de 1514, actuando en él los definidoresde 1506, pues no se había celebrado ning11-11otro intermedio.En éste salieron definidores: Por Cataluña, elMaestro Fray Luis Boyl, Comendador delencia.Por Aragón y Navarra, Fray Juan de picatillo, Maestro en Teología; por Francia, Fr,Juan de Ocenguo, licenciado en Teología, Conlendadorde Montpeller.Por Castilla, asistieron. Fray Pedro de Be cerril,Comendador de Huete, doctor en Teolo gía YFray Pedro de Arriarán.Se proveyó de un pequeño subsidio a l os eßtudiantesque el General había enviado a paris'eAlcalá y Zaragoza, prueba del gran interés qu.le inspiraban los estudios, pues en las dos Pri.meras ciudades la Orden no tenía aún casa . leSe reprende ásperamente la facilida d 011 1 1' slos superiores de las otras cuatro Provilleig(1) Ribera: Patronato, pág. 258.- 411 —Convento del Olivar.—Capilla Mayor edificada por elRmo. Llorens.btliDgian a los fugitivos de Castilla, y se proehacerlo bajo la pena de diez libras de Araquepagarían los culpables al General.IL) Salieron elegidos redentores Fray Arnaldo de(o de la Detz), Comendador de Tolosa, Fraytlän Lupi, Comendador de Huesca, y Fr. Luis Boil.

— 412 —Prescriben se oraciones por los reyes y bienhechores,entre ellos el Abad de Poblet, ' protectorde la Orden. El 24 de Septiembre, de 1516,León X nombró protector de la Orden aldenal Francisco Remolino, del título de los SantosJuan y Pablo (1) que murió en 1518.Este nombramiento fué debido probablementea una petición de los redentores que en la primaverallegaron a Roma con 70 redimidos, nie'reciendo del Papa la felicitación más efusiv a Yconcesiones muy importantes.Los Padres Juan Lupi y Arnaldo de Duce estabanen Träpani el 11 de Abril de 1516, c on 1°srescatados que allí hicieron juramento de ac onlpañara sus redentores. Constan en el documePt°los nombres y patria de todos los redimid os (2)*Llegaron a falencia a principios de 1517 Y fuer;ron recibidos con gran solemnidad por la cinclal;y cabildo, asistiendo el General y predicando etMaestro Luis Boil, según el Padre Antillon.El 28 de Julio de 1516 había expedido el Pn;133la bula Dum grata Deo, llena de elogios y favores'en la cual, sin embargo, se trasluce la influenel3de los dos celosos redentores poco satisfechos dela marcha de la Orden.A vuelta de muchas concesiones se ataca elsistema de las responsiones fijas y se Concede quelos conventos puedan aplicar para susust ent° 1.3tercera parte de las limosnas recogidas, dePesi-(1) Boletín de la Orden, afin 1922, pág. 157.(2) A. C. A. Monacales, 2.703, pergamino IX.— 413 —t'ando lo demás para la redención bajo cuatrollaves.Se concede, ademas, plena libertad de prediearlas indulgencias de los cautivos, aboliendoel Privilegio en contra, que tenia la Crúzada yenalquier otro existente, los que tanto habíanestorbado en años 'anteriores la acción de laOrden.Sin embargo, poco después, volvieron a sus-Penderse todas las indulgencias que no fueranen favor de la expedición contra el Africa, aunqueel 19 de Junio de 1519 concedió el Papa lienciade predicar por un año la redención, a finde rescatar a los soldados de Carlos Y que unadr1e1osa tempestad había arrojado en las costasterberia, permiso extendido mas tarde a otrostresarios.Estas suspensiones de indulgencias llevabanaParejada la prohibición de predicar la redenión, imposibilitando el hacerla durante varios11°s. Esas bulas hablan, además, de que losrelados v sus secretarios exigían exorbitantes`lereehos por la licencia de predicar en susquedándose con gran parte de la limosna.l'hilero se les prohibe llevar más de cinco(que no era poco), y más tarde se les coneeten sólo los honorarios del escribiente que exendiala licencia.El 17 de . Septiembre de 1516, León X, manda4eneral convocar para Septiembre de 1517 und aPitillo general en Zaragoza, para el cual habíae darle instrucciones el Cardenal protector

— 414 —Franciscó Remolino. El lector recordará que enese año estalló la rebelión de Lutero, consecu enciadolorosísima de la, flojedad que había hecil°casi imposible la disciplina en todos los órdenes.Los. dos redentores veían claro a dónde se iba porese camino.Las actas del proyectado Capítulo no apar e-cen por ninguna parte, y es posible que n o secelebrara hasta 1519 en que tenemos un frag'-mento del reunido en Huesca.En.61 salieron , definidores el Maestro FraYc:ente Martí,' Comendador del Puig por Cataluña'Por Aragón, el Maestro Fray Juan Lupi, Cemendadorde Huesca. -Por Valencia, el Licenciado Fray Martín deLabayetr, Comendador de Pamplona.Por Francia, Fray Pedro de Besse, Corneadadorde Careasona.De Castilla, asistieron et Maestro Fray A1911;so de Zorita, Comendador de Guadalajar a ycario, provincial y el Maestro Becerril, Co mendor de Huete.v„srFueron elegidos Redentores el Maestr o -u')Benito Zafont (que en .1515 había sucedi do en e;Priorato de Barcelona al Padre Sebastiä), ei.1)jeenciadoFray Martín de Labayen y Fray laallBonet, Vicario del Puig: yAunque las actas están incompletas e n Prl'-eelona, conocemos algunos acuerdos de este ()ti-pítulo.Afl deEn Pamplona se conserva ladistritos entre el convento ',de aquella ea] • dad ,los de Tudela . y Sangüesa; al primero -Local' 13— 415 —cliöeesis de Bayona, que se introducía mucho enllafta y continuó perteneciendo a la provinciade Aragón hasta fines del siglo XVIII (1).No parece, sin embargo, que se acometierangrandes reformas ni se intentara sustituir las1:esPonsiones por cosa mejor. El Cardenal Remosotruheacbiíoanems?uerto, ¿llegarían al Capítulo sus2Consörvanse algunas visitas hechas por elReverendísimo Llorens, y entre ellas la de suaillado convento del Olivar en 1516, con rico inventario, La celda del General estaba , bien alhai4day no faltaba en ella ni siquiera la ballesta(cle caza).Era, en cambio, pobrísima la de Fray Lana,'lile sin duda es el venerable Mateo de Lana, :.a41l1en la Santísima Virgen favoreció en 1512 con111,', resplandor milagroso salido de su imagen, se-`111 refirieron al P. Guimerán dos Padres aneja-41,4 que aquel día habían sido monaguillos (2). Eli • /lateo de Lana vivió aún muchos años, y, en10547 lo encontraremos .Comendador de Daroca,uen t eólogo y predicador celoso., La fundación que el Maestro Llorens vió conit-`14s il usión en sus días, fue sin duda la de París,devada a cabo en 1515 por el P. Nicolás Barre-.? e a narrere, profeso de Carcasona y bachillerZ uado en Teología, en un solar donado por elagnitie o Sr. Alain D'Albret, Conde de Dreux,((,12) At rechvė dHeisNtoarivzria)ä. gṂ e6r7ẹedarios, leg. 217.

— 416 —en la calle de Sept-Voles, al lado del hotel de Al"bret, detrás de la Sorbona. El nuevo colegio tuve,sin embargo, vida dificil, y las conmociones delprotestantismo lo malograron en gran parte (1)*Mucha más vida tuvo el colegio fundad o enAlcalá en 1518 por la provincia de Castill a eticasas donadas por la Universidad, con la honr o-sa obligación de que el Comendador fueraconservador de la misma. Fué primer Comendor durante cerca de treinta años Fray Juan deRiaño, que, con la autoridad de su persona, diogran prestigio al cargo y aun a la Universidad,que le tenia asignado el puesto inmediato al Reetor.Por su mano corrió casi toda la administra'ción de justicia y otras graves cuestiones deltudio General (2).De 1515 data la fundación del Convento deMercedarios de Lorca por el Arcipreste M ontesinosdel Puerto, que impuso condiciones bastan'tes onerosas, pero se fueron suavizand o räPidamente.Las primeras Superioras fuero n 133-rientes del fundador, designadas por él, comolos antiguos monasterios familiares de infaustamemoria (3).on-De 1515 es también el primer privile gio e - laservado de los Reyes de Francia en favor de,Merced. Tal vez los anteriores quedaron en 1-3-(1) Amplia documentación en los Arch. Nat. de ?gris.L. 1.556.(2) Boletin de la Orden. Año 1913.(3) Ibid. 1924, pág. 172.— 417 —°s.—Capil1a Mayor de la Merced, construida por 1520.1' después del pleito sostenido con los trinitat,‘4)sen 1488. Francisco I, por cédula expedida enYón el 29 de Noviembre, primero de su reinado,ta:,11,,t°riza a los Merceclarios a pedir limosnas en'un Pr ancia y a recorrerla con cautivos o sin27

— 418 —ellos, ordenando a los Prelados y autoridade s civilesque los reciban y apoyen (1).El 14 de Febrero de 1519, el Obispo Auxiliarde Burdeos, Francisco Boyer, bendijo la iglesianueva de nuestro convento de aquella ciudad,diputándola para el culto y sepultura de los fle"les. Era Comendador el P. Fray Pedro Vign entus,o Vinyes, como lo llaman los Capítulos (2).En 1514, el Comendador de Burgos, MaestroFray Juan de Soria, con permiso del Provill"cial Maestro Baena y del definitorio, otorgó eseriturade patronato de la iglesia conventual a favorde Don Francisco del Castillo y su esposaDoña Leonor de Pesquera, los cuales se con1Pr°metierona terminar la obra, una de las más hermosasque realizó la Merced (3).Más trascendencia que todo esto tuvo la i el3 3la América Central, que empezaba a colonizarse'del P. Francisco de Bovadilla, probablemente en1514, en compañía del nuevo Gobernador Pedr3-rias Dávila, que en 1524 escribe al ErnperaderCarlos V una carta en gran loor suyo:«Asimismo mande V. M. proveer de religios°(1) Toulouse: Arch. Depart. Merci., 1. 12.(2) Bordeaux: Areh. Depart. Merci., 1. 20. , p, de(3) Madrid, B. NI. Ms. 2.443. El 15 de Novie1114r- „e1515 se celebró en Sevilla Capítulo provincial, de l cl.c;fueron definidores con el Maestro Baena: Fray J1-1-311,,,Soria, Comendador de Burgos; Fray Alonso de Z°1-."-presentado en Teología; Fray Gil de Valladolid, Oet°d0• en Decretos y Comendador de Valladolid, y Fray Peclr°Arriaron. (Documentos de Burceria).— 419 —Y p ersonas doctas que doctrinen los indios en laseosas de nuestra santa fe católica, porque hayaeä mucha necesidad dellos, sobre lo cual va elIlvdo. P. Fray Francisco de Bovadilla, Vice-Provincialde la Orden de Santa Maria de la Merceddestos reinos, a hacer relacion a V. M., a la cualhuinildemente suplico mande dar audiencia, por,que es persona que su ejemplo y doctrina hafructificado mucho en la conversion de los indios'3' ciado mucha consolacion a los cristianos con susPredicaciones; y es persona que sabe las cosas deeomo testigo de vista, el cual tiene fundadasiertas casas de su santa religión; y le mandei\relver luego, porque de su doctrina, así para los' Ildios como para los cristianos, hay acá muchalieesidad, e le mande dar favor para que traiga"religiosos con que se acreciente la fe de Cristo,Pues la principal cosa que V. M. me tiene mandadoen que le sirva es esto» (1).Una de las casas fundadas en aquella región,fi -aatizada con el pomposo nombre de Castilla de-;r°, e s la de Panamá, de la que el mismo Pedra -as se da por fundador.El P. Bovadilla ocupa muchas páginas en lahist •d ella de los años posteriores, y como Vicarioj i Pro vincial de Castilla en América, a él ha debuirse la fundación de nuestros primeros conv"entosen ella.1,1 be lo que habían hecho en Panamá, y Nicaraaantes de 1524 los Mercedarios, dice algo(1) P érez: Mercedarios que pasaron a América, 31.

— 420 —Francisco López de Gómara en su Historia Genepublicada en 1552, utilizand0-ral de las Indias,relaciones hoy no conocidas.Según él, Gil González de Avila, teniente dePedrarias, salió en Enero de 1522 de Panamá haciael Norte, llevando en su compañía un frailede la Merced. Tropezaron con un régulo ll amadNicoian, que ganaron a su amistad y al cristi a-nismo, haciendo que les entregara sus ídolos.Supieron que tierra adentro había otro reY.más poderoso llamado Nicaragua y se dirigierél. Tenía el indio noticias de la valentía del°seabarbudos y los recibió cortésmente. Tratar on deatraerlo a su amistad y al cristianismo, eilyc'sdogmas y preceptos encontró aceptables, salve.en lo de prohibir la guerra con los vecinos y131borrachera. Bautizóse, sin embargo, con nuevemil de los suyos.Algunos dijeron ya entonces que tales conversioneseran demasiado rápidas, pero ¿no estaba"predicando Las Casas que los indios e ran degrande inteligencia y de mejor corazón? Lo s e°11-vertidos entregaron también aquí sus ídolo s a 1°Sespañoles y todos, en solemne procesión, coloc a-ron en su lugar una cruz.siCorrieron más hacia el norte para veraquellas tierras lindaban con las de México,quistadas por Cortés, y, aunque no sin dificil,- iradesblos,y peligros, consiguieron atraerse muchos plie (bautizando hasta treinta y dos mil personas 1) °(1) Bib. de AA. EE. de Rivadeneira, t. 22, pág. 280.— 421 —El más célebre de los compañeros del PadreBovadilla es el P. Bartolomé de Olmedo, naturalde la villa de este nombre en la provincia deValladolid, cuyo pasaje está, registrado en 27 deka 370 de 1516. De Santo Domingo se dirigió aCuba con otro Mercedario, y en 1519 acompañóa Cortés en su expedición a México, donde bautizóa los primeros cristianos y erigió numerososaltares al Crucificado y a su Madre Santísima, dequien llevaba muchas imágenes.Fué el mejor consejero de Cortés, a quien2alvó en trances apurados como el conflicto cona atrayendo a los soldados de éste alPl\Taarrt\i'däjo e zdelEl desprecio que Cortés mostró a Moctezumafutcausa de la sublevación de los mexicanos ydel desastre de la Noche Triste, en que el Conquistadorperdió las dos terceras partes de sugel 1 -e y todos los tesoros acumulados.El cronista Cervantes de Salazar oyó a Cort,g,lamentarse de no haber seguido entonces losco a 1.'seJ os del Mercedario, que le persuadía fuesevisitar al Emperador azteca y a consolarle ensu ua Prisión, pues harto comprendía que los cris-, nós estaban envalentonados con el refuerzoinecu('sPerado que les había proporcionado la expe-'16Il de Narváez.1)espués el P. Olmedo ayudó a Cortés a reco-11.4.;ie13ePe:Ir lo perdido, entrando con él en México el 13Agosto de 1521. La última vez que le mencionarnal Díaz del Castillo es cuando el Mercedario4ua de a Cortés que el botín se .reparta entre

— 422 —los soldados ciegos y estropeados, renunclos sanos a la parte que les correspondía.Debió morir poco después, rendido por lafatiga, que más de una vez había puesto en pe ligrosu vida. Había nacido en 1485, según élmismo declara (1). Era teólogo y gran cantor.La Universidad de Salamanca trajo en 151Spara regente de Filosofía a Fray Domingo deSan Juan del Pie del Puerto, que como bachillerlela en París con grande aceptación. Vino en sucompañía el Maestro Juan Martínez Siliceo, quefué Maestro de Felipe II, Cardenal y Arzobispode Toledo, encargado de la cátedra de Filosofía'nominal. Fué a contratarlos el Dr. Honcala, mástarde Canónigo de Avila.El sueldo concedido a Fray Domingo este afl°de 1518 fué de 25.000 maravedís, pero ganó Ya'en 1523 la cátedra de Vísperas o de Lógi°'Magna, en que alcanzó gran prestigio, llegaudua ser una de las primeras figuras de la Universidady Vicecanciller en ella.Fué muchos años Rector de nuestro Cc1eg1°2donde sacó grandes discípulos, a los quesantos ejemplos, según testifica Zumel. Ad(31antehemos de encontrar algunas veces su nombre'Desde 1521 comenzó a publicar libros de test°'que se reimprimieron varias veces. Era 11111.3rjoven todavía, pues no contaba más decinco años cuando vino a Salamanca (2).(1) «La Merced», Octubre de 1920, págs. 89 y 141.(2) Salamanca: Arch. Univ., libros de cuentas de 151Sen adelante. .— 423 —i ando También sirvió mucho a la Orden el licenciadoFray Martín de Labayen, arriba mencionado,Ei Padre Olmedo, consejero de Hernán Cortésy primer apóstol de México.l'eeaurador de nuestro convento de Pamplona,arruinado cuando en 1512 el Rey Católico se.13()cler15 de la ciudad. El Comendador obtuvo1111°211as y auxilios con numerosas bulas y privi-

— 424 —legios reales. Era el convento, según ellos, un°de los mejores de la ciudad y debió mejorar al:01en la reparación.Todo fué de poca duración sin embargo, puesen el verano de 1521, temiendo nueva acome tidadel ejército francés, el Virrey mandó demolernuestro convento y el de San Francisco, queestaban fuera de las murallas y podían servir deapoyo a los atacantes. Para indemnizar lueg o alos perjudicados, se hizo una minuciosa deserilg"ción y tasación de nuestro convento, que est'al lado de los actuales jardines de Taconera,donde a fines del siglo XVII se descubrió el s e-pulcro del Maestro Gaviria (1).Trataron los Mercedarios de hallar otro solara propósito, y después de varias tentativa s sepasaron al lado opuesto de la ciudad, dondelevantaron a mediados de aquella centuria an`lhermosa iglesia, que aún subsiste.El Comendador de Granada Fray Gonza lo deUbeda, había comenzado por 1519 la iglesi a denuestro convento, que los Papas León X y AdrianoVI favorecieron con indulgencias (2). Este"table religioso era conventual del de Guadalaiaraen 1505. Consagrado Obispo en 1521, falleció1525, dejando muy adelantada la iglesi a quesubsiste en buen estado, aunque no dedic aba 31culto, y es un magnífico ejemplar de estilo 'O -déjar.(1) Arch. de Navarra, leg. 417.(2) Bib. NI. Ms. 2.906.— 425 —En 1522 se fundó el convento de Ronda conauxilio de varias personas. Fué su primer Coluendadorel bachiller Fray Antonio de Chaves yPa trono Don Pedro Martín de la Mata. Trasladósea mejor sitio en 1551, siendo Comendador.9raY Pedro de Orenes (1).Convento del Olivar.—Claustro y escalera.ti El año 1522 otorgó su testamento don LuisAcufia, hijo de los Condes de Buendía, man-:Ido fundar con sus bienes un convento de laereed en Baza en una capilla de Nuestra Seade la Piedad, cuya imagen había sido ena-1)1 ntrada a raíz de la conquista. Tomó posesiónr° siguiente el Comendador de Cazorla Fraye`tr° de Cazorla en nombre del nuevo Provincial(1) I bid. Ms. 2.448.

-- 42(3 --Maestro Zorita. Los milagros de Nuestra S eñor3hicieron que esta casa alcanzara grande i wpor-mayor que hoy existe (1).tancia, y de 1539 data ya la hermosa eapillaTambién corresponde a 1523 y al Maestr°Zorita la fundación del convento de Baeza Perlos caballeros Ayalas. Por hallarse esta ciudad 3corta distancia de Ubeda, donde había conventantiguo de la Orden, el desarrollo de ambos fuepequeño (2).El Arzobispo de Zaragoza Don Alfons o deAragón murió en Lécera el 24 de Febrero de1520, dejando por testamentarios a varios "flag'nates y a su confesor el Maestro Llorens de 13Mata, según refiere Argensola (3).Sea por las turbaciones que entonces sobrevinieronen España, sea por otras causas, el Generalno volvió a reunir Capítulo desde 1519rió el 7 de Junio de 1522 en el Olivar, 0 11 aej ordicho, en un pueblecillo próximo, que sin divo)sería la Mata, donde había nacido.El P.nosAntillon, que garantiza estos datos,informa también que el Maestro Lloren s 1] abi3pensado anular la Concordia con Castilla, serlietiéndolaal régimen común, y había alcanz3d°— 427 —Para ello bula de León X que se frustró por laIn aerte de éste (1).Hizo importantes obras en el Olivar y enotros conventos donde en tiempo del cronistaVargas se veían sus armas, que eran una manoe° 11- un ramo de oliva, alusión a su convento delOlivarEn la Orden dejó buena memoria y el Capituue1523 castigó severamente a Fray Juan Ver-loe30,que había pretendido infamarla.- (1) Bib. NI. Ms. 2.443.con"(2). Ibid. Los frailes de Baeza pretendían q ue sil. forovento era fundación de San Pedro Nolasco y Cl pri perode Castilla, en 1234, abandonado en la peste de 1348jo S deno hay el menor indicio de tal antigüedad y Si Tulle"lo contrario.(3) Continuación de Zurita, lib. I,.eap. 94.(1) A. C. A. Monacales, 103.

CAPITULO XXIIIeneralato de Fray Benito Zafont (1522-1535)1UMARIO: Elección del P. Zafont. —Premios a los estudios.— Redención de 1525. —El Maestro Zorita, Provincial de Castilla. —El Maestro Samunde.—Confirmación(le los conventos de América.—Pleito con el General.Vi ajes del P. Bovadilla. —Fundaciones en el Perú. —ElP. Remando de Granada. -- Libros impresos por elM aestro Zorita. —Redención de 1531.—Idem de 1533.—Pri vilegio de Francisco I.El Prior Maestro Zafont, como Vicario generalde la Orden, convocó a los electores para el2i° de Agosto en Barcelona, siendo él mismo pro-Qtalnado General, elección que fué confirmada1)Or Adriano VI el 24 de Octubre de 1522.t FA, nuevo General era valenciano, hijo de unla llic" medico de Elche, aunque de familia catadila,según afirma Zumel siguiendo los apuntesPraY Juan Martínez, coetáneo del Maestroe Este celebró su primer Capitulo en Barcelona1523 , al que asistieron como definidores porastilla el Maestro Becerril y Fray Francisco deLlevas , bachiller en Teología.Pretendióse dar grande impulso a los estueoncediendo premios y distinciones a los

— 430 —más aplicados. Confirmáronse y ampliárom4e losprivilegios concedidos en 1475 por el Capitulo deCalatayud a los maestros en Teología, como 1°Stenían en otras órdenes, equiparando a los r n ea s-tros los doctores en decretos o cánones. Tambiénse otorgaron privilegios menores a los maestrosen artes con excesivas ausencias del coro y refectorio .Destinäronse estudiantes a París, donde seguíagobernando el P. Barrére, bachiller formad°en Teología.Autorizóse a los comendadores para dar eartasde hermandad a los bienhechores de la Ordelly, en efecto, desde entonces se encuentra n 011más abundancia tales documentos en CasUlla'impresos o manuscritos, con la Virgen de la gereedpor cabeza. Los hay del mismo ario 152 2 (1).El Capítulo señaló también el lugar q ue cbían ocupar en las Asambleas generales los dennidoresde Castilla y de Cataluña.Fueron nombrados redentores: El presentad°)Fray Martín de Labayen, Comendador deplona, el Maestro Fray Jerónimo Pérez; el kvraestroFray Domingo de Clavería, Comendadoi de Co-Gerona y el presentado Fray Juan de PotJa,men.dador Tolosa y Provincial de Francia' dei°La redención debía ir a, Túnez, pero sela fecha al a`rbitrio del General y de los qa( 3 teníanel libro y la bolsa. Llevóse a cabo en 0‘2'(1) A. II. N. Pergaminos del convento de Madrid,jo 811.-- 431 —Pasando antes los redentores a Roma a ganar eli nileo del año santo, donde obtuvieron de Oleineogitie erriVbIrIela. confirmación de nuestros privile-3 más importantes, por bula-expedida el 22 deSe,pAcompañaba a los Maestros Pérez y Claveríael P. Agustín lVfolinar, Comendador de Zaragoza, y además de las gracias citadas obtuvieronPara los conventos de Zaragoza, Gerona y Barcelonala reducción de misas que debían celebrarY enyas dotaciones habían venido a menos o estabandel todo perdidas.x4itl P. Jerónimo Pérez imprimió aquel ario en201es su obrita Monoctium, de que hay ejem-Piar en la Universidad de Barcelona.elólExiste una completa relación de esta reden-,:71 Por la que consta estaban los PP. en Túneznrlo ' de Junio de 1526 y en Träpani el 22 del mis-152,17ne5 , llegando a Valencia el 17 de Febrero deQo ' Y predicando el sermón de gracias el Maes-: urez. El número de redimidos no es muyrand (1).oje's arios más tarde, o sea en 1529, hicieron4 enredención en Argel los Padres Jerónimoe el`:e0 , Comendador de Tudela, y el Prior de Bar-)rlaIír Maestro Fray Pedro Sorell, que volvieron,v peJJ-Lallorca, a Barcelona con unos treinta cauti-Tio "1aitnabiendo tenido que tratar con el célebre‘varroia, (2).(1)e A. C. A. Monacales, 2.703, perg. X y XI.A. C . A. Monacales, 9.703, fol. 80.

— 432 —Tenemos algunas visitas hechas por el MaestroZafont. En la de Valencia en 1534 le acompañabael Maestro Fray Juan Calvo, que había profesadoen Barcelona en 1523 y fué después Vieari°del Puig, Provincial de Valencia y Procuradoren Roma. Era Comendador de Valencia el Mae s-tro Fray Luis Boil con unos veinte conventuales'Otras visitas las encomendó el General al M aestroCalvo, con el Comendador del Puig Maestr°Fray Vicente Martí, que estuvieron en Orihuela7Játiba, Arguines, etc. (1).También para Italia escogió buenos Vicariescomo el Maestro Fray Cristóbal Lenares y FreJuan de Santamaría, que gozaron allá de grailprestigio, predicando en italiano ante las aut°14-dades y grandes concursos (2).En 1530 obtuvo una bula muy importante deClemente VII, en que por vez primera Un dc'elj,,,-mento pontificio refiere la fundación milagr°sdela Orden, y después de enumerar sus Privilieṉgios más importantes, los confirma, a pesar de —suspensión general de indulgencias por él deeire-0tada poco antes. Prohibe, sin embargo, el erliPlesde cuestores, exigiendo que sean los mis°frailes quienes recojan las limosnas.'esaEn varios de estos documentos se esP1que las redenciones se hacían de tres en tre7años.Habiendo muerto el Provincial de Ca s(1) Ibid. Monacales, 2.669.(2) Vargas, I, 386.— 433 —Maestro Baena, reunióse el Capítulo de elecciónell Segovia el 23 de Mayo de 1523, elevando a laPrimera dignidad de la provincia al Maestro Zo-)Ita , que había sido el brazo derecho de su anteeesor.Ratificóse con algunas enmiendas el contratohecho en 1518 con la Universidad de Alcaláacerca de la fundación de nuestro colegio, acuer-(1° que firman en 27 de Mayo el Provincial y losiguientes definidores:El Maestro Fray Martín de Samunde, Comendadorde Burgos.El bachiller Fray Bartolomé de Ullate, C/11en dador de Cuenca.F ray Diego de Salinas, Comendador de Conjo,PraY Martín de Acuña, Comendador de la casaeaPi tular de Segovia (1).De éste, como insigne predicador, hablan los1iieor iadores de la ciudad; fué después Comentd4clorde Toledo. Pero el más célebre es el Maesr°Samunde, hijo del convento de Burceña ylean° provincial muchos años en Castilla por-'Ail aestro Zorita, que se reservó la encomiendae Se villa, residiendo allá lo más del tiempo.. EI P. Samunde promovió un pleito con losrini tarios en 1527 sobre legados y limosnas,al fin hubo de terminarse con una concordia;l e,guaict que firmaron por nuestra parte en VallaaYel 30 de Julio de aquel año el BachillerFrancisco de Villagarcía, Comendador de(1) R oma: Arch. de San Adrián, Rector de Alcalá.28

— 434 —Valladolid, y Fray Juan de Tapia, Comendadorde Burceña (1).Los artículos acordados establecían la ig ualdadentre las dos Ordenes, que debían repartirselas limosnas y legados, cosa más fácil de decirque de cumplir. Sin embargo, la concordia bastópara que las dos Ordenes vivieran en paz rela tivabastantes años.El Maestro Samunde, principal autor de ella,no pudo concurrir a firmarla por estar preocuPadoaquellos días con otro asunto de graverés: la calificación de las obras de Erasmoque entendía la junta reunida en Valladolid porel inquisidor general D. Alonso Manrique y de laque formaban aparte unos treinta teólogos, 1°más granado de España.Consérvanse las actas y en ellas el voto erigínaldel Maestro Samuncle, que como otros fraujuzgaba benignamente al de Rotterdam, tan gr°serocon ellos en sus escritos. Los seglares, e n °In -bio, suelen tratarle con más dureza. Nuestr o \le a;rio había pasado grandes trabajos para ad.qu irir st,cultura y aborrecía la poltronería dominante all°s"atrás en muchos conventos, teniendo po r alia d°suyos a cuantos le ayudaban a combatirla (2)'(1) Inserta el documento Remon en su Histo ria, t'fol. 154, con bastantes erratas. Hay copia legalizadaetänea en Poyo. Firman por los Trinitarios, el baell,11-‘rFray Diego de Terän, Ministro de Buros c, . el Maestr°Juan de Herrera, Ministro de Valladolid, y Fray" Ant°11de Zorita, Ministro de Toledo.(2) A. H. NI. Inquisición, leg. I.— 435 —sos.— Claustro de la Merced (estado actual) y retrato delMaestro Samunde, en cuyo gobierno se construía.1 5‘»ejairlOS al P. Bovadilla en Panamá el año.411`44 Preparando su viaje a España en busca de_-evOs operarios, sin los cuales nada podía ha-

— 436 —— 437 —cerse. Todos los grandes empresarios de la eva n- 1acla, en que la dicha Orden ha gastado mucho;gelización hubieron de pasar el Atlántico varias ni e fué suplicado y pedido por merced manlasseconfirmar las dichas casas y monasterios yveces con el mismo objeto.Llegó a tiempo para asistir al Capitulo Povincialcelebrado en Burgos el año 26, donde se hac er, dándoles solares y sitios que hubiesen dedar licencia, para todas las que se quisiessenle confirmó en el oficio de Vicario, y se le P O- tnenester, y que no consintiessemos ni diessemosmetió algún personal, siempre menos de lo queél deseaba. Carlos V, por cédula expedid a enluga-r que de ningún reino ni provincia fuessenligetados, salvo del Provincial de Castilla, ySevilla el 11 de Mayo de 1526, confirma la eregciónde conventos mercedarios en América y da' no fuesse*que , S4 alguna bula viniese y se presentase sobrefacultad para fundar otros, ordenando que a log nadcumplida sin ser primero exami-un en el nuestro Consejo de las Indias, paraMercedarios se les concedan solares en la s nuevasciudades.COï 0 la mi merced fuesse.»lile allí se determinasse lo que fuesse justicia,«EEL REYyo túvelo por bien. Por ende por la pre-, confirmo y apruebo y he por bien fechas• Nuestros oidores de la nuestra Audieneigta'S diReal de las Indias que reside en la Isla Espalle.ord„. chas casas y monasterios que de la dicha). un. hasta aoray,otras qualesquier justicias y jueces, asi de 1•-indi aestán fechas y edificadas en las_ Islas e Tierra Firme del mar Occéano. Ydicha Isla como de todas las otras ciudades,"has y lugares de las nuestras Indias, Islas m3rando que si algunas bulas o breves viniel'ensobre sugetar las dichas casas a los Provintjai_`3Ne o_ de otros reinos y sacarlas de la ProvinciaTierra Firme del Mar Occéano, e a cada un° iciwevos, a quien esta mi cédula o su traslado de"\-)a stilla, que las obedezcais, y en quanto alsignado de escrivano público fuere mostrada.'uP ¡mientoYPor parte del Provincial y frailes de N"° 'e bredellas supliqueis de las dichas bulasLus-vceptsroys aviseis dello a los de nuestro ConsejoSeñora Santa Maria de la Merced, redencion `e de las Indias, para que se informe a su Santidadcautivos y de la religion y observancia de lae,provincia de Castilla me fué hecha relaje n que_ 12 suplique las mande revocar. Y los unosra, 8 _ no fagades ende al en alguna maneenesas Indias, Islas y Tierra Firm e del 111111Occéano, tienen fundadas ciertas casa de" Pena de la nuestra merced y de diez mils , u' vedisreligion y esperan que de ahi adelante se fi-111°y_'itte para la nuestra Cámara a cada uno,(lias I:: co ntrario fiziere. Fecha en Sevilla a onzerän mas, con que Dios Nuestro Señor haserá servido, y nuestra santa fe católi ca acre tiei:e1 mes de Mayo de mil y quinientos y veinallos.—Y0EL REY.»

— 438 —La prohibición de sujetar los convento s deAmérica a otra provincia que no fuera la de.Cas"tilla, que los habla fundado, es 'indicio de qu e epor entonces el General pretendía que no debíanincluirse en la concordia de 1467, sino sujetarseinmediatamente a él.El pleito no se entabló, sin embargo, hasta1530 ante Clemente VII, que encomendó su estadioal auditor Nicolás de Piccolomini, docto r enambos Derechos, al que pensaron recusa r los'procuradores del General, Fray Domingo C laveríay Fray Miguel Puig, doctor también en Cal lenes y Leyes. Mas viendo que la causa durimuchos años con gastos muy crecidos, convinieroncon el Procurador de Castilla, Fray P edro deMiño, en nombrar árbitro al mismo auditor qu e, e:efecto, pronunció sentencia el 19 de Junio de 153'4'Por ella pasaban a depender del Generaltierras de Africa, en las que había enton ces econvento de Orán y grandes esperanzas , ltleg°desvanecidas, quedando por Castilla Grallas Indias, Islas y Tierra Firme del Mar Oeéan°.;El Provincial dé Castilla debería contial General con dieciseis doblas cada año, aderilíts.de las cuarenta estipuladas en la Concordia1467 y esta añadidura «por el reino de GrauNueva 'España, Tierra Firme e islas internies.dias» (1). Jurarón observar la sentencia los treapoderados.(1)•El apunte del pleito y la sentencias están a l finlas Constituciones impresas en Valladolid en 1533.de— 439 —Además del convento de Santo Domingo estabanfundados los de Panamá, León de 'Nicaragua,Santa Marta y quizá algún otro puestoMisional. En Panamá, residió el P. Bovadilla conel Gobernador Pedrarias y favoreció con su intluenciael aviamiento de Pizarro y Almagro parael descubrimiento del Perú, según afirma unacarta de 1534 y confirma la influencia que elMercedario tuvo sobre los dos conquistadores.El de Santa Marta es de 1527, en que elPadre Bovadilla, recién vuelto de España con(lee compañeros, pasó allá a fin de apaciguarlas discordias que habían surgido entre los conqUistadores.Fué el primer superior de esta casaPraY Juan de Chaves, que volvió a España unosanos más tarde a buscar elementos para ella yfité recibido con grande amor por la EmperatrizI abel , que le concedió ornamentos, cálices yhasta una campana para la nueva iglesia.Cuando se disponía a partir el P. Chaves llevóleDios para sí en Sevilla en 1533, nombrandoel P . Zorita en su lugar al P. Miguel de OreneS,i«Persona de buena vida y ejemplo » , que debíaitilevar consigo cuatro religiosos más, a saber:raY Juan de Vargas, Fray Juan Curiel, Frayncl.r s Laso y Fray Sebastián de Betanzos. En11 de cuentas parece que el P. Orenes no fué a'anta Marta, sinú al Perú, donde desempeñó im-13 (1 °. rtante papel, lo mismo que sus compañeros, enitrentes partes de América (1).(1) P Arez: Mercedarios, pg. 76.

— 440 —A principios de 1528 salió el P. Bovadilla dePanamá con el Gobernador hacia Nicaragua,llevando plenos poderes del Cabildo eclesiásticopara organizar la iglesia en aquella región. LOSdocumentos nos hablan de gran número de infielesbautizados por su mano. Es de suponer qUetales bautizos no serían muy precipitados, Puesel P. Bovadilla no participaba de las ilusiones deLas Casas sobre la inteligencia de los indios,como demuestra la información que acerca deello hizo entonces. Fundöse en esta ocasió n el,convento de León de Nicaragua, en el qu e fuesepultado en 1531 el Gobernador Pedrarias.En 1530 había vuelto a España por segundavez el P. Bovadilla en busca de más misioneros,regresando en 1532 con siete, en vez de los doceque deseaba. Con algunos de ellos emprend ió !3fundación de México, donde la Merced te1113derechos incuestionables, gracias al P. Olmed°'A pesar del apoyo del Concejo y de los vecinos,se opuso el Provisor a que la capilla abierta eón'tinuara funcionando, y los Padres frenan do deTalavera y Gonzalo de Vera hubieron de retirar'se a fines de 1533 (1).En cambio se desarrollaron prósperanlen.telas misiones mercedarias en Guatemala ypas donde el P. MarcosiPardon y sus co nipaneroshicieron prodigios de caridad y in ostrarffi,especial habilidad en atraerse a los indio s Poi(1)Vázquez: Origen de las Misiones, pág. 7.— 441 —Inedio de la música y otras 'artes que con pacienciales enseñaron.Por estos mismos dias se abría otra granPuerta para el apostolado en el recién conquista--4G imperio de los Incas. Dos Mercedarios bajá1--'°s fun dadores de Quito, señalan al Padre Hernando deGranada solar para su Convento.(Cuadro de Joaquín Pinto.)11)th CO n Alvarado a Quito en Enero de 1534 yb'r°s llegaron en otras expediciones. En Noviemrede 1535 habla, en la recién fundada Limai llatro Padres Mercedarios, un sacerdote y unei g° franciscanos y dos sacerdotes seculares. En:21 T.,erano ' del mismo año estaba ya en el CuzcoAntonio de Almansa. En 1539 los Merceda-

— 442 —/los tenían casa en todas las poblaciones delPerú, como atestigua en son de queja el P. Valverde,primer Obispo del Cuzco (1).En los territorios de Quito y Popayan se disel P. Hernando de Granada, que fue el-tinguióprimero en anunciar el Evangelio a aquellasindómitas tribus y fundó los conventos de Quite'Pasto, Cali y Ancerma, entre otros. Con un erncifijoen la mano puso paz entre los ejército s deBelalcázar y Andagoya, que estaban para venira las manos. Los habitantes de ambas provinciasle pidieron para su primer Obispo, y el Provincialde Castilla Maestro Zorita le nombró su Vicarioen ellas. A su lado figuran Fray J uan ,cleiTorreblanca y Fray Juan de Santamarí a, ue'que cuenta milagros Pedro Cieza, testigo Presencial.El P. Zorita, que impulsó todas estas obra's'tiene además otras en su haber. En 1533imprimir por vez primera en Valladolid P°rNicolás Tierry las Constituciones de la Orde n, 3dos tintas, con grande esmero, tirando algansiejemplares sobre vitela. Anterior es la coleceiel'de bulas y privilegios de la Merced, p ues "1ejemplares sobre vitela legalizados en 1528.Además de los privilegios de Castill a, 19jeiaconocidos, incluye algunos de Aragón, coine,concesión del escudo por Jaime I. Parece quellprimiótambién el misal y breviario, pues elverendísimo Puig, al imponer su edición de 6°'Vázquez Origen de las Misiones, pág.— 443nda retirar entre otras —111a la de Zorita. No hePodido encontrar ejemplar de ella hasta hoy,he deseado, por el calendario que sedice teníaEn Salamanca tuvo por estos años Fray JuanSolís un curso de Artes que se vacó por su defunciónel 10 de Mayo de 1531, según el corres-Pondiente libro de claustros, perdiendo la Mercedde sus más risueñas esperanzas.No abundan los documentos de redenciones enestos años. En Castilla debió hacerse una a fines(le 1 531, pues a 26 de Octubre la Reina dió unae dula en Medina del Campo «para que no pagaderechoslas mercaderías que sacase paralerbería la Orden de la Merced, fasta quantiade tres mill ducados, para rescatar cautivos» (1).Fueron redentores, según Vargas, el P. Do-Ilingo de Alvarado y Fray Miguel de Heredia,elle se dirigieron a Fez, volviendo por TetuánC0 11 139 cautivos. El P. Alvarado murió en 1548en Granada en grande estima, habiendo sidoalgún tiempo confesor de San Juan de Dios.a En Aragón, además de las redenciones cita-4S , conocemos otra de 1533 por el Comendadorde Tudela Maestro Fray Juan de Iribias, quellevaba gran provisión de feces o gorros turcos,Illereancía de fácil salida en Berbería entonces(1)111-0 ahora (2). Fué muy accidentado su viaje ari (1 ) Simancas: Libros de Relaciones del Consejo y de la'4"lara.(2) Arch. de Navarra, leg. 457. Libro del convento.

— 444 —Túnez, que duró hasta mediados de 1535, o seancercade dos años. El dinero que llevaba era e°su mayor parte del Consejo de las Ordenes Militaresy del Dr. Ercilla, y los rescatados fueron44 (1).En Francia tuvo que soportar la Merced otr°asalto de los Trinitarios que, aprovechando lasguerras de Carlos V y Francisco I, pretendieraque éste impidiera recoger limosnas a los Merce‘clarios fundados en España y gobernados po r unGeneral español.El Rey Caballero, que acababa de salir d e sncautividad de Madrid, por decreto fechadoParís el 8 de Enero de 1527 rechazó en absolut°tales sugestiones confirmando y ampliando idafacultades concedidas a los 1VIercedarios en sncédula de 1515 (2).Aunque varios autores hablan de ello, lo séqué parte cupo a los Mercedarios en la sustituciónde la capa blanca de los Trinitarios por la obs-(1) Detalles auténticos en Gari: Historia de las Red e""tiones.(2) Insertan el documento los Padres de la Congrega'• ción de Paris y existen copias auténticas en Touiellse'Burdeos, etc... «les fréres de la Trinité, dits les Mathurins'lesquels neanmoins et paroll'une emulation, ambiticnenvie qu'ils avoient conceu puis naguére contre les, ditssuppliants, ä cause des guerres qui ont esté par cy-des'311';entre nous et et l'esleu Empereur, Prince des Espa-¡Pies'en pais duquel aulcuns des couvents des dicts suPPsontfondés, les avoient voulu empescher faire leúrs di ce-questes en nostre Royaume, auquel il y a grand nonligede leurs dicts couvents...»— 445 —11ra, evitando así la confusión de las dos Ordenes. Parece que en tiempo de León X trataronde usarla negra, pero se opusieron los Domini -1 Ma estro Fray Alonso de Zorita, Provincial de Castilla.Pío IV en 1561 concedió a los Trinitariosesbaf loles la capa de buriel, pero los francesese°11ti nuaron usándola blanca.Ei Maestro Zafont murió piadosamente en

— 446 —Barcelona el 20 de Agosto de 1535 y hasta finesdel siglo XVIII se conservó su sepulcro con susarmas parlantes, que eran una fuente o su rtidorcon este lema: « Sicut cervus desiderat ontes&Tu arUm »CAPITULO XXIV4neralato de Fray Pedro Sorell (1535-1546)MARIO:Elección del Maestro Sorell.—Moderación delos gastos del General.—E1 Maestro Jerónimo Pérez. —Itedención de 1537.—Reformas en Castilla.— Mejorasen; . cs en de Alcalá. —Mercedarias en Escoriaza yDeusto.—E1 P. Salazar en el Rio de la Plata. —Merce-da] Chile.—E1 P. Bovadilla, árbitro entre PizarroAl magro.—EI P. Orenes.—Mercedarios pizarristas.El P. Dardón.—Prohibición de fundar conventos enAtnAr ica.—Renuncian los Mercedarios sus posesiones.R,e dención de 1546.Ta mbién ahora, fué elegido General de la_ OrelPrior de Barcelona y Presidente del Capí -0s'ad_Maestro Fray Pedro Sorell, fenómeno dema-humano del que sacarán pronto consecuen-,11"3 los1_ enemigos de la preponderancia catalanaMerced y no sólo en Castilla, sino en todasxP 0vi3Provincias. lroijbre d La tuvo lugar el 11 de,ee,, El 4 de Junio del año siguiente, fiesta de Pen-"t6s,11pre ;celebróse Capítulo general en Zaragozatal,s_Ldido por el Maestro Clavería, Vicario genef.;Pue,..1or enfermedad del Maestro Sorell. No asis-los definidores de Castilla, alegando quePodían llegar a tiempo.41-1-ho alguna duda sobre si el Vicario general

-- 448 —tenia poder suficiente para celebrar el Capítulo,pero los juristas opinaron que sí y a mayor abultd.amiento los vocales le dieron sus votos paraello.Salieron definidores el Maestro Fray Jual}Calvo, por Cataluila, el Maestro Fray Agustínivlolinar, Comendador de Zaragoza, por Aragón;el Dr. Fray Vicente Martí, Vicario del puiglProvincial de Valencia, por aquella provinc ia; Ypor Francia el Maestro Fray Juan Mata, Vieariedel palacio de Barcelona.Es un poco rara la elección de un catalánpara definidor por Francia, habiendo en el CaPitulobastantes franceses y entre ellos el Comen"dador de Tolosa Fray Juan Galofy, que desemPe"fió adelante ese cargo muchas veces, pero 1°Sdefinidores no eran elegidos por el Capítulo, sillepor los cuatro definidores salientes juntamentecon el General. La reforma de este artículo delas constituciones antiguas fué una de las recia'ma das con mayor unanimidad.El Maestro Clavería declaró en nombre delGeneral que no era su intención vivir de lasdoblas con que anualmente contribuía cada Superiorlocal, ni retener en su poder las respensines para los cautivos, sino que se contentaríacon que la Orden le diese anualmente ciendos de oro. Se ve que el ansia de mejorar i ba elaumento desde principios del siglo.En vista de ello el Capítulo acordó noillwencada provincia un colector de toda confiad°que recaudara las r doblas'esponsiones y las -— 449 --depositando el dinero en la Taula de Barcelona, banco entonces de gran prestigio, enviandodirectamente al General 25 escudos de oro. Debíatainbién recaudar la contribución de los conventospara el sostenimiento en París de un estudiantede cada provincia escogido por cinco cotnendadoresde ella.eonfirmóse en este Capítulo por ComendadorPerpetuo de Valencia al Maestro Fray JerónimoTPerez, cargo que tenía antes el Maestro Fray'Luis Boil. Peris era ya probablemente catedräitieode la Universidad, en que dió tanta gloria aOrden. Era Prior de Barcelona el MaestroraY Miguel Puig, que excusó la asistencia dandoPi lellos poderes al Maestro Calvo. Fray Juan de1vias es ahora Comendador de Pamplona y el'aestro Fray Pedro Dimas Sans, de Jätiba.Pueron nombrados redentores los Maestrosli 'tre Juan Calvo, Vicario del Puig; Fray Juan'l 'ata y Fray Juan Sans, Comendador del Puig,4 cuales al año siguiente se dirigieron a Argelestaban de vuelta en Valencia el 13 de Octubrea'e 153 7, con unos 58 cautivos que prometen- ° 10apafiar a sus libertadores un afio y un día.IvIltre los rescatados figura Fray Guillermo Serra,tere edario de Mallorca (1).ahi 1\T° era sólo en Aragón donde se mostraba elde modernizar el régimen de la Orden yarle mayor eficacia. La provincia de Castilla- el Capítulo celebrado en Guadalajara en 1539(1) A. C. A. Monacales, 2.703, perg. XIII.29

— 450 —trató igualmente de dar mayor flexibilidad a Silgobierno, reduciendo a seis años la duración delprovincialato que venía siendo vitalicio, aunquela Concordia de 1467 no lo mandaba, debiende,además, transcurrir dos sexenios antes de la reelección.Reservóse, no obstante, el cargo a l sirciano Maestro Zorita durante el resto ele suvida (1).Eran definidores de este Capítulo Fray Juande Tapia, Comendador de Burcefía; Fray Ju an deTarazona, Comendador de Granada; Fray Juallde la Torre, Comendador de Baza, y Fray fier.nando de Aguilera, Comendador de Córdo ba Yantes de Conjo. Tomáronse aquí también ¡lag'tantes acuerdos para el desarrollo de nuestro 09-legio de Alcalá, nombrando comisarios para 17tar con la Universidad a los PP. Franci sco ueCuevas, Comendador de Valladolid, Vicario Pr°'vincial; Maestro Fray Domingo de SanComendador de Salamanca, y Fray Diegoquez, Comendador de Jerez y luego Provillei%La Universidad nombró por su part e adoctores Diego López y Zornoza, quiene s diereea censo a la Merced otro patio ademas de los quatenía, obligándose en cambio los Mercedari°stener allí diez estudiantes matriculados (2) . C°111;curriö también a otorgar la escritura el P . J11-(1) Constan estos detalles en buleto del Peniteneilie°1;Cardenal Roberto, que confirma los acuerdo s por,°'del Papa. Simancas: P. R. 23-47. Fecha en 16 de Ljide 1546.(2) Boletín de la Ord. 1913, págs. 317 y 413.- 451 —21 Maestro Fray Domingo de San Juan del Pie del Puerto,Catedrático de Salamanca y escritor.ÌEiaño kcie, ,Rector de nuestro colegio el 31 deYA0gidi enelr5:9 y al día siguiente la ratificaron el°vineial Maestro Zorita y el otro definidorM aestro Fray Domingo de San Juan falle-

— 452 —ció santamente en Salamanca en Junio de 150'El P. Cuevas, que era estudiante en la célebreUniversidad en 1514 fué después Comendad or deGranada y pasó a Indias como visitador.Maestro Zorita falleció en 1542, sucediéndol e ellel provincialato el Licenciado Fray Diego Enriquez,y fallecido éste en 1544 fué elegido en Sevillapara sucederle el Maestro Fray Pedro deOriona, que hubo de jurar el estatuto del sesenieobteniendo bula de él y prometiendo n() Pedirdispensa (1).Por estos años se fundó el beaterio de -rdereedariasde Escoriaza por el Beneficiado Gag°de Galarza, interviniendo el Comendador de Bar'ceño, Fray Juan de Tapia, en nombre delcial Zorita. En 1541 hizo ya la visita el Vieari°Provincial Fray Francisco de Cuevas, que dio 19profesión a las seis primeras monjas (2).En 1538, el beaterio de Bilbao había ) b /e"una fundación en San Pedro de Deusto, e( nnes del presbítero Ochoa de Leuzavia, beateri°que subsistió con varia fortuna hasta thles delsiglo XVII (3). loSCupó al Padre Zorita la gloria de enviprimeros Mercedarios al Río de la Plata, enpañía del fundador de Buenos Aires Don Pedr°de Mendoza en Julio de 1535 (4). Llanv(1) Simancas, P. R. 23-47.(2) Boletin de la Ord., año 1930, pág. 20.(3) Ibid. año 1920, pág. 346.(4) Pérez: Mercedarios..., pág. 279.— 4b —PraY Juan de Salazar y Fray Juan de Almacia.8te último debió morir pronto, quizá en e] viaje,Pues no se halla más rastro de él. El Padre Salazarvivió, en cambio, muchos años y convirtiógran número de indios, fundando nuestro conentode la Asunción, capital de Paraguay, ytrabajando indeciblemente en pacificar a los co-1°11es que habían convertido aquellas regiones eneaneo de Agramante.La Asunción era entonces, en frase del Padre'alazor, «pueblo de más de quinientos vecinos ynlas de quinientas mil turbaciones», huyendo de14 cuales, el mercedario ansiaba volver a Espana; mas parece que no lo consiguió, pues docu-Illentos de fines de aquel siglo, afirman que murióa manos de los indios (1). Habla de él conisgran elogio Alvar Núñez Cabeza de Vaca, Gou2rnadorque fue del Río de la Plata, en sus4ctufragios.a Increíbles trabajos pasaron también los PaeesAntonio de Almansa y Antonio de Solís en,11.1 viaj e de exploración a Chile en compañía del'ridelantado Don Diego de Almagro, que salió delllzeo el 3 de Julio de 1535. Fueron indiscutible-1,41; ente de los primeros Sacerdotes que pisaron'erra chilena (2).Pero los sucesos más lamentables acaecieronel Perú. El Padre Bovadilla hizo nuevo viajesPailia en 1534. El 28 de Julio de aquel año,Ibid. 291.pág. 257.

— 454 —la ciudad de Santo Domingo escribía al Emp erador:»Fray Francisco de Bovadilla, Vicario P rovincialde la Orden de la Merced, doto y sant°2que aquí, en la Tierra Firme y provincia de Ni"caragua, convertida de su mano, ha hecho nula°bien, va a pedir limosna a V. M. para la fábriodel Monasterio de su Orden en ésta, que se 113empezado suntuosamente de cantería y muy bienlabrada a lo romano. Dicho Monesterio tienemuchas personas doctas i celosas que han se rvidomucho en la conversion i no tiene posibilidad.Suplicamos le despache favorablemente com o lesReyes Católicos lo hacian. El Padre Bovad1l3podrá decir del Perú, pues conoce a los mas cleallá. En Panamá ayudó al aviamiento del Gr obernadorPizarro i fundó en aquellas partes M oneteriosde su orden, que permanecen poblacitTenemos en mucho su persona i V. M. le Pvie'hacer merced» (1).El 4 de Febrero de 1536 salía de Sevilla elMercedario con dirección a América, obten ido Yaalgo de lo que había venido a gestionar, yvando en su compañia a los Padres Di ege vs-Lebrixa, Alonso de Tordesillas, Gaspar Mate°Lázaro de Jaén.Desde Panamá debió bajar muy proa°Perú, donde había estallado niel formidable insurrecciónde los indios que puso en peligr o tecitg,la obra realizada. Ayudó a dominar a los ins,tirrectos el Mariscal D. Diego de Almagr e, reeiel(1) Colección Muñoz, t.° 80, fol. 21.

— 456 —'vuelto de su excursión a Chile, cuya presenciaobligó a los indios a levantar el cerco del COco,del que se apoderó Almagro.Esta ciudad fué la manzana de la discordiaentre los dos capitanes, de los que se había did°que eran un alma sola en dos cuerpos. Carlos Vhabía señalado a Pizarro la gobernación de laNueva Castilla, con 270 leguas de costa desde elrío de Santiago (al norte de la actual repúblicadel Ecuador) y a Almagro la gobernación de -laNueva Toledo, a continuación de la anterior.Sobre si el Cuzco estaba en la góbernació9de Pizarro o pertenecía a la de Almagro, estabana punto de venir a las manos los ejércit os deentrambos cuando los dos capitanes acordar°poner el pleito en manos de su antiguo ami go elPadre Bovadilla, Viceprovincial de la Merce d aaquellas partes. Era esto en Octubre de 1537'Intentó el arbitro renovar en aquellos eoral' e-nes la amistad antigua reuniéndolos en un ballquete,pero los recelos por una y otra parte fr"straronel buen propósito, y en la misma entríta de Mala estuvieron a punto de reñir Almagrey Pizarro. El P. Bovadilla los desarmó a allibes:,diciéndoles sonriendo: ¡Daos ahora de puñadasquisieredes! Cenaron los tres juntos,ė tirándoseluego los capitanes a sus campos respectiv os. ,El Mercedario hubo de asesorarse entonces oemarinos peritos en la medición de grados, PIcomo pertenecían a los dos bandos no pridierffisllegar a un acuerdo. La opinión común entoneeay verdadera, conforme a las leguas atribuís— 457 —Cada grado, era que el Cuzco estaba en la gobernaciónde Pizarro, la cual debía extenderse todavíabastantes leguas más al Sur. Así lo entendióVaca de Castro, sucesor de Pizarro, y Felipe II,al fijar los límites de la Audiencia de Charcas conla de Lima (I).Sin embargo, el P. Bovadilla no quiso exas-13erar a los almagristas, sino que difirió la adjudicacióndefinitiva del Cuzco hasta que una comisión de pilotos determinara de común acuerdola a ltura del río de Santiago, límite norte de laAbernación de Pizarro, ordenando entre tantoque las cosas volvieran al estado que tenían antede comenzar las violencias.r, No se avinieron los del Almagro a entregar elnzeo ni a depositarlo en poder de tercero, romlnAndoseal momento las hostilidades y cayendoa Poco Almagro en poder de Hernando Pizarro,qUe lo condenó a muerte en el Cuzco. Los Merceclarios hicieron lo posible por evitar esta muerte,cine fué el principio de innumerables males, y'ttando no pudieron conseguir otra cosa, retira-% el c adáver del Mariscal, dándole honrosa se-Pintura en su iglesia, asistiendo a los funeralesel inismo Hernando Pizarro.Almagro había hecho un testamento muy fa-%'able a la Merced, a quien debía muchos favo-1(ies, lo mismo que su rival Pizarro, que es el fla n-don de nuestras primeras casas en el Perú (2).(1) Boletin de la Orden, año 1929, pág. 166.(2) Vázquez: Origen de las Misiones Mereedarias.

— 458 —Después de estos sucesos el P. Bovadilla desap a-rece de la escena, no siendo probablemente a jenoa ello el fracaso de su mediación.El 6 de Enero de 1538, se registra en Sevillael pasaje a Santo Domingo de Fray Pedro deMiño, Comendador de Valladolid, nombrado Vicariode la Española y de Nicaragua por el P rovincialde Castilla.Cuando los partidarios de Almagro dierenmuerte a Pizarro en Lima el 26 de Junio de 15412el P. Miguel de Orenes, Comendador de nuestroconvento, acudió a salvar a los vivos y a ente"rrar los muertos, evitando que fueran profa nadossus cadáveres. A él se debió la fundaci ón denuestro convento de Lima, cuyo titular es S°Miguel, y desempeñó un papel muy importanteen las luchas que luego sobrevinieron, ejerci tandocon éxito el papel de pacificador. Aunqueamigo de Gonzalo Pizarro, estuvo al lado de Lagaseacuando éste fué a imponer la ley a los Gelonosen 1546.Los historiadores de entonces, adoradores dela imperial majestad, consideran como un saerlilegio aquel primer conato de independen cia d,ePerú y como indignos de remisión a cuant os 1113so menos débilmente lo apoyaron; lo extraü° CSque, escritores modernos, repitan aquell os al13 -temas después de la independencia de las cOlenias.deNo fueron sólo 1VIercedarios, sino tambiénotras órdenes los que, habiendo tomado par te ea,los viajes y empresas heroicas de los conquist459 --dores, se sintieron identificados con ellos y apoyaronsus pretensiones. Entre los nuestros sedistinguió Fray Pedro Muñoz o Zarco, del cualrefieren acciones más o menos verosímiles y contradictorias los cronistas.Fray Pedro estaba en Valladolid en Marzo de1551 y declaró en una información con Fray Juande Vega, su compañero de aventuras (1). No salió tan bien librado el dominico Fray Luis, grandeagente de Pizarro, de quien habla Diego Ferndez,y otros que mencionan los documentos.Las declaraciones de testigos presencialesCO-10 Diego Pacheco, Gobernador de Tucumán,desmienten las hablillas esparcidas entonces porel asesino sobre la muerte del Mercedario FrayGonzalo, a quien mandó ahorcar Francisco deCarvajal, capitán de Gonzalo Pizarro, por sulealtad al Rey. El P. Gonzalo había acompañadoa Sti tocayo Pizarro en la célebre expedición dela Canela, una de las más heroicas de los conquistadores,debiendo serle muy doloroso coloarseenfrente de él a última hora.r] El P. Lascasas, promotor de las famosas orranzasque fueron causa de la sublevación delk-erti, carga a los Mercedarios la responsabilidadcle su fracaso, pero en Nueva España no se apliearon las nuevas leyes y se conservó la paz, esribiendocontra ellas franciscanos, agustinos y1,1luellos dominicos, entre ellos el Provincial Fray-" olningo de Betanzos, lumbrera de su Orden,(1) P rez: Mereeclarios que pasaron, 187.

— 460 —Contra los cuales se desata igualmente el biliosoObispo de Chiapas, que no se contenta con me"nos que con llamar endemoniados a cuantos 110pensaban corno él.Según los frailes de Nueva España (1) los en"comenderos trataban a los indios más humana'mente que los oficiales reales, no exigiéndolesmás contribuciones ni servicios de los que b uenamentepodían prestar, mientras los recauda doresdel Estado, entonces como ahora, exigía n leseñalado, sin dar oídos a consideraciones.En Chiapas estaba ya en 1538 el P. Marcos Pe'rez Dardón, que recibió amorosamente a Lasca:sas y a sus cuarenta dominicos en 1545 y asisti°con gran caridad a los enfermos, dándoles con"-da, cálices y ornamentos. Poco después los gel',cedarios hubieron de proteger con sus cuerposObispo contra las iras del pueblo, aunque el P a-dre Dardön, que era Provisor, pensaba de maneracontraria a él en casi todo. Para e -sitar ' cb°aunqueques ofreció el Mercedario dejar su casa,fué el Obispo quien se retiró al poco tiempo,17.°1-viendo a España. Los Mercedarios, sin ernbarge'abandonaron luego aquella ciudad, que esta"bien atendida por los dominicos, estableciendoen Tustlan (2).Nuestra casa de Guatemala debió ser fund3da(1) Muñoz, t.° 83, año 1542.(2) .Sobre estos episodios hay una relacióna decur0l-s,ro.un compañero de Lascasas en Jiménez: Historia de l a 1vincia de... Chiapa. Guatemala, 1929.— 461 —El Padre Marcos Dardón, celebrando los divinosoficios con los indios por el educados.1536 por el P. Juan Zambrano, que en 1540Vino a España para allegar recursos y gente conclile l levar adelante la obra comenzada (1). Entrecol aboradores de primera hora se distinguie-(1) Jiménez, 1, 203.

— 462 —ron los PP. Juan de Zárate y Francisco de Alma"raz, grandes predicadores en lengua mexicana,que autorizaron mucho el convento (1).El P. Pardon fué nombrado también por laAudiencia protector de los indios, desempeñandoel cargo con inmensa caridad, hasta el punto deque en 1619 recordaban todavía con gran amo r aMarcos Pale, según atestigua Remesal, gran Pa'negirista de Lascasas (2).Este y sus amigos hicieron violenta campacontrala Merced, alegando sobre todo que P°rno ser mendicante y tener propiedades era peceedificante; ¡donosa acusación, cuando los mendi'cantes abandonaban a toda prisa su prirnitiv°instituto! Los Mercedarios, sin embargo, eranen casi todas partes más pobres que sus consores.El Obispo de Guatemala, D. Francisco Marr°quin,se dejó impresionar algo por estas e aallgañas,aunque luego reaccionó, escribiendo 03violenta diatriba contra Lascasas y colmando deelogios a los nuestros.Sin embargo, en 1543 se prohibió el pa53,iede Mercedarios a América y la fundación de n'sconventos, prohibición que debió contrariar PI°al nuevo Provincial Fray Diego Enríquez, quecomo los de otras Ordenes entonces y ahora sexytia la marcha de tantos religiosos útiles.Acordóse reducir nuestras casas en el Ntleir°(1) Remesal: Historia de Chiapa..., 1619.(2) Remesal: Historia de Chiapa, 1619.-- 463 —M undo a cinco: en Santo Domingo, Panamá,León de Nicaragua, Lima y Cuzco, entre lascuales debían repartirse los bienes de las suprilnill1s.Para afianzar las que quedaban, envió elPadre Enríquez en 1544 una expedición de veintereligiosos y por jefe de ellos al P. Franciscode Cuevas, Comendador entonces de Málaga yamigo, al parecer, de Lascasas. Intentöse formareon los Mercedarios de América una Provinciaindependiente de Castilla, como las tenían otrasOrdenes más numerosas, pero esto no tuvo efectohasta mas tarde (1) .Tampoco se realizó la supresión de conventos,porque las necesidades de las misiones y dela P oblaciónblación española desbarataron los proyectosforjados a larga distancia, aunque en ellos estabainteresado el Provincial de Castilla, con grandolor de los que en América habían consagradosu s angre y sus energías a las misiones.La mendicidad callejera era difícil ya entonces,y más en América, donde apenas había a"en pedir; sin embargo, los mendicantes hubieronde resignarse por algún tiempo a dejar susPropi edades y los Mercedarios hicieron igual.El Dr. Hernán Pérez, del Consejo de Indias,ecribió al Consejo el 28 de Noviembre de 1553,entre otras cosas: «El P. Reverendo de la Mercedque ésta lleva, viene del Perú, y en verdad quesle,f-ildo como dice, parece cosa justa no deshacerP érez: Mereedarios, pág. 193 y siguientes.1111/1111»n____

— 464 —aquella Orden, porque dice que hay doce o trecemonasterios y más de cien frailes que hacenfruto, y dice que con facilidad renunciarían atodo el propio que tienen. Vuestra Alteza le m andaráoir y mandará ver las visitas que hizo elPadre Cuevas, que fué por visitador de aquellaOrden y mandará proveer lo que cumpla a silReal servicio» (1).También en las gobernaciones de Quito YPopayán fueron despojados los Mercedarios desus cortos haberes. El Tesorero Luis de Guevara'escribía desde Cali al Emperador en 31 de O ettibrede 1549: «En esta ciudad hay un monasteriode la Merced al que se dieron estancias, solarese indios, teniendo respeto a los méritos de c lertosreligiosos que anduvieron en esta conquista Yen la de Quito, ayudando corporal y espiritual"mente a los conquistadores, y establecidos aglifhan sido socorro de pobres, espital de enferincisy refugio de todos. Tendrán en todos setenta °setenticinco indios para cultivar tierras y su servicio,tratándoles como hermanos. Havrá u n 3fli°que se los quitó el Gobernador por un calgitill°de las nuevas leyes. Sin ello con dificult ad Pedránsustentarse, etc. Suplico se los devtle1-van» (2).El General Maestro Sorell celebró su segun°y último Capítulo el 18 de Octubre de 1544 enValencia. Salieron definidores:(1) Prez: Obra citada, pág. 199.(2) Muñoz, t. 85, fol. 162.— 465 —Por Catalufia, Fray Miguel Puig, licenciadoen, Derecho Canónico y Prior de Barcelona.Por Aragón, Fray Fortún de Esparza, bachillerformado en Teología y Comendador de Pamplona.Por Valencia, Fray Jerónimo Pérez, doctoren T eologia y Comendador perpetuo de Valencia.Por Francia, Fray Domingo Clavería, doctor'Teólogo y Comendador de Gerona (a falta defranceses auténticos, que no asistieron, aunquerecientemente se había firmado la paz).Fray Pedro Juan de Tärrega, Maestro en ArtesProfesor luego en Gandía con el Maestro Pérez,4 Vicario de éste en el convento de Valencia.Nombróse al Maestro Clavería Vicario genel'alde toda la Orden. Lo mismo que en el Capí -lo anterior diéronse tres electores a cada Pro-\In cia con sus respectivos subelectores o suplent%conforme a lo acordado en 1475. Aceptóseara, toda la Orden el oficio del dulcísimo nom -re de Jesús a ruegos del Maestro Fray Vicente4arti , Vicario del Puig.Pueron elegidos redentores los Padres Migueltlig , Agustín Molinar, Pedro Dimas Sanz, Co-14, enclador del Puig, y Fortún de Esparza, señabk1cl°1espara la redención la ciudad de Argel.eibian dejarse inmediatamente la barba, para-alir después de la Pascua de 1545.iQuedaba encargado de la bolsa el Maestroinar y del libro el P. Sanz, pudiendo susti-;rlos el General, si alguno de ellos faltara oiibtilviera impedido. El Maestro Sorell dió setental'aS valencianas al P. Jerónimo Pérez para30

— 466 —completar los gastos del Capítulo y 490 ducadospara que él y el Maestro Fray Pedro Dimas San%• los colocaran en la Tabla de Valencia hasta lapróxima redención.Las guerras impidieron que ésta saliera tallpronto como se deseaba, y en Octubre de 15.°estaban todavía en preparativos (1). No sabenlesel número preciso de redimidos, pero consta quela redención fué numerosa. Una hoja gótica,presa en Burdeos en 1551, nos informa de que «fuerescatado un gran número, 56 de los cuales desembarcaronen Bayona el 10 de Diciembre de1546, dirigiéndose a Dax, Burdeos, Agen, Tnlos3y Carcasona, donde, despidiéndose de los redeltores, marcharon cada uno a su casa (2).Ese camino aparece recorrido varias veces porlos redentores franceses que desde Africa sub°por el Atlántico a desembarcar en Bayona (e 5edirigían de ésta a Cádiz), aunque lo más fre(te era hacer el viaje por Marsella. Habiendo sia°esta redención de las cuatro provincias, el nüille-rro de redimidos españoles debió ser much o tn3Y°que el de franceses.Tocaba celebrar el Capítulo sigui ente el:Francia, «mas porque los conventos de alb .1de poca sustancia y pobres y el camin o difiedi eacordose celebrarlo en Gerona en Pentecostés1547». seEl castillo de Algar amenazaba ruina(1) A. C. A. Monacales, 2.703, pergamino XIV".(2) Bordeaux: Arch. Depart. Merci, b. 10.— 467 —reunió n a su reparación buscando dinero a censo.La salud del General debía ofrecer poca seguridad,pues vemos que la provincia de Cataluña se) en 1545 en Montblanch para tener com-Pleto el número de electores.En efecto, el Rvdmo. Sorell falleció en BarcelonaL el 10 de Febrero de 1546, siendo sepultadoe U la nave de la iglesia bajo una lápida donde seela n sus armas que era un jurel bajo las olas(8°I'en en catalán) y el escudo de la Merced encima.El haber celebrado dos Capítulos, aunque con14tervalo de diez años, convocando un terceroPara dentro de tres, es indicio de que se tratabadeuprimir a la Orden mayor actividad, aunque11° f uera toda la que se necesitaba.Las, No tenemos documentos precisos acerca deredPeroenciones hechas estos años por Castilla,lasrecriminaciones que luego hubo sobrek-temuestran que tampoco en esta provinciafi, lo_ r>er grande la actividad redentora, aunqueite a la cultural y misional.El,r,.eP. Vargas habla de los trabajos pasadosA, ilia por los PP. Pedro Sagren y Juan deq'ta,z, Priores de Palermo, para colectar limos-Y defenderlas después de reunidas, pues, setendencia,despertaban grandess (1).1) ei P. Dimas Sans tenemos un tratado contra4 judíos tan elegante como sólido (2).(1) v(2) Aargas: I, 406.C. A. Monacales, 2.680, fol. 74.

CAPITULO XXV4s provincias de Aragón y Francia durante elgobierno de Fray Miguel Puig (1546-1567)SU:MARIO: Es elegido el Prior de Barcelona.—Refuérzasela d isciplina.—Ultimos arios del Maestro Pérez.—Estadistica de la Orden.—Estudiantes en Paris.—El V. Cal-Inel l.—Redenciones.—Expectativas de encomienda._Nuevas— Gran redención de 1562. — ElMaestro Arcisio Gregori.—PArdidas de la Merced enPra ncia.—Ruina de Montpeller.— Daños 'en Tolosa.—euzeivearss.a Según costumbre que iba adquiriendo fuerzad''e ley , el 2 de Mayo de 1546 los electores reuni-14,4 en Barcelona Proclamaron General al Prior7 raY Miguel Puig, que por rara excepción nogrado en Teología, sino que era LicenciadoOerecho canónico y así se firmó toda la vida.algunas actas de profesión sabemos que eraIlInbien Licenciado en Derecho civil o abogado.—s abia profesado en manos del Maestro Estebanebastl ä Prior de Barcelona, el 25 de Mayo de1514 (1):Probable que no asistieran tampoco ahora1,4 elec tores de Castilla, cada vez más desinteeaclade lo que pasara en Barcelona.(1) A. C. A. Monacales, 2.710, fol. 2.

— 470 —Al. año siguiente, obtenida la confirmaciónpontificia, el General la presentó en ei frinlerCapítulo celebrado en Gerona el 17 de Octubrede 1547, prestándole todos los vocales obedi encia.No asistió nadie de Castilla.El General se retiró aparte con los defin idoresdel Capítulo anterior y nombró para el Presente:por Cataluña, al Maestro Fray Do]ningoClavería, Comendador de Gerona y Vicari o generalde la Orden; al Maestro Fray Juan Calve'Vicario del Puig, por Aragón y Navarra; al PadreFélix Can dell, Comendador de Játiba, por Valencia,y a Fray Juan Gallofi, Comendador de Tolo 'sa y Vicario provincial por Francia.Los demás cargos inferiores se distribu i v.011 e'entre los religiosos asistentes, que eran mil( ,bosmuy calificados. Pocas veces había visto la Mercedreunidos tantos maestros, predicadore s , PI19-fesores y escritores. El primero y segundo di 3;del Capítulo disertó y sostuvo conclusiouesMaestro Fray Arcisio Gregorio, valenciano, ca;tedrätico luego de Salamanca y escritor, çuea l'9ßJities-año anterior había profesado en Barcelona30 de su edad. Es la primera vez que entros Capítulos se consignan estos ejerciciosraros, que en adelante se hicieron comunes.El Concilio de Trento abierto en 1545 hbai'dado por fin la nota enérgica suspirad a Part i 13D.reforma de la Iglesia en la cabeza y en lo s 111 colybros, nuestro Capítulo indica también que 1, enginvtrarreformaiba a emprenderse, aunque 11enérgicamente .de lo que se necesitabaEl Maestro Fray Jerónimo Pérez.(Cuadro de Zurbarán, hoy en la Academia de SanFernando.)

— 472 —---_ 473 —No se suprimieron todavía las encomiendasperpetuas, causa de gravísimos males, pero sedieron poderes amplios al General para depona los superiores indignos y se destinó para enee'rrar a los incorregibles, en las provincias de Es'pafiä; el castillo de Algar recién restaurado, y enFrancia el convento de Tolosa.tvelioSe mandó también rigurosamente, a super'o'res y súbditos rezar el oficio divino en públic o Yen privado so graves penas.Se dió al General el encargo de coleccion ar eimprimir las constituciones y decretos de l os nitimosCapítulos desde 1523. El P. Miguel Puigera hombre de gran cultura y muy amigo de ell3y dió desde el principio de su gobierno grandeimpulso a los estudios, según atestigua el citad°Maestro Tárrega al editar los comentario s delMaestro Pérez.Este se jubiló ahora en la Universid ad deValencia después de treinta años de enseñanz3'Los jesuitas, que le habían oído con admiración'escribían a San Ignacio que ni en París 1131°cosa mejor, y ahora jubilado le llevaron a suColegio-Universidad de Gandía, que dirigiósus consejos hasta su muerte en Diciembre1549. A su lado enseñó también en Grandía ecitado Maestro Tárrega, y ambos hicieron 1°Sejercicios de San Ignacio (1). Entre sus disciPnlosmás notables debe contarse a San Fracise° nde Borja, a quien dedicó sus comentarios de 19)J(1) «La Merced» de 125, pág. 848.Soma, obra elegante y concisa, llena de puntosde vista nuevos y que ejerció grande influenciafl el desarrollo de las ideas.Algunos Comendadores se negaban a admitirel número de conventuales correspondientes asus rentas, por lo cual el Capítulo señaló a cadaoltloss religiosos que debía tener, designándolosPor sus nombres y apellidos, facilitándonos así1111a serie de informes de gran valor.En la provincia de Cataluña había 14 concon87 frailes.En Aragón y Navarra, 15 con 124.En Valencia, 7 con 78.En Francia, 14 con 140.En total, 50 conventos con 430 frailes. Faltanjes conventos de Bonaria, Nápoles y Palermo, losPodrían tener hasta 30 religiosos.En Castilla había por entonces unos 32 con-\tentos cuyo promedio no llegaba a 10 religiosos,° 2ea aproximadamente unos 300.1 En América había unas 20 casas, muchas deas cuales eran simples estaciones misionales,e on menos de 150 religiosos entre todas.t El total de la Orden se aproximaba, porant°, a unos 900 religiosos en 106 casas (1).en La a ctividad desarrollada por esos religiososlas Universidades, en las misiones, en la re-4ieneión y en los ministerios sacerdotales eraerior al rendimiento de otras corporaciones_1s numerosas y justifica plenamente el refrán(1) Boletín de la Orden, de 1931.

— 474 —que entonces recogió del pueblo salmantino elComendador griego Hernán Núñez: Los frailes dela Merced son pocos, mas hdeenlo bien (1).Señaló también el Capítulo cuatro depos itarios,' uno por cada provincia, para recoger lasresponsiones, a saber: el Maestro Molinar, PerAragón; el Maestro Clavería, por Cataluña;Maestro Juan Sans, por Valencia, y el PrOViDeialde Francia, P. Galoti, los cuales deberían depositarlas limosnas en la Taula de Barcelona, ceirforme a lo acordado en el Capítulo anterior.Obligóse al Colegio de París a sustentar W1estudiante de cada provincia de la Orden queayudaría con veinte francos o libras tornesas Percada uno. Pocos años antes era Prior de diell°Colegio el P. Fortún de Esparza, ahora Colldador de Pamplona, que allá se hizo Bachillerformado, título que usaba con prefere,ncia al deMaestro otorgado por la Orden.Por las inquietudes de aquel arlo no se atrevena señalar redentores ni lugar para la rede1,1,1-ción, quedando en que el General convoearl,'-una reunión de religiosos notables para deter1,11„1nar esos puntos al año siguiente, debiendo 11°cersela redención en 1549.reeeAdemás de los religiosos ya citados, l eilmención el P. Miguel Jerónim o Calinhauoo Carmelo, que en este Capítulo fué nor nl""Comendador de Santa Coloma. Era Doet°r alTeología y en Cánones y Notario apostólico(1) «La Merced» de 1926, pág. 66.El Venerable Jerónimo Carmelo o Calmell.(Cuadro de Zurbarán, hoy en el Museo de Sevilla.)

— 476 —entrar en la Orden en 1543 y se distinguió por suamor entrañable a la Santísima Virgen, que lefavoreció con extraordinarios consuelos. Fallecióen Barcelona en 1558 (1).Era Comendador de Vich el P. Matías Pap1917nombrado ahora Secretario general en lugar delMaestro Juan Cabrer, que lo había sido ya delRvdmo. Sorell y que actuó todavía como Secre"tario en este Capítulo, falleciendo poco después'Para sustituirlo en la encomienda de Daroea'fué nombrado el P. Mateo de Lana, tan celebrad°en nuestras historias.El futuro General Fray Francisco de Salazar'muy joven todavía, figura de conventual enragoza, su patria.En Sangüesa era estudiante Fray Jorg e deOngay, que en 1582 fué Provincial de Aragón Yen 1579 redentor en compañía del P. Jorge deOlivar, tan elogiado por Cervantes. El P. Oliv3res probablemente el frater Olivariu,s que figuraHuesca.Nombráronse tres electores por cada pravinda,conforme al decreto del Capítulo anterior'debiendo notarse entre ellos el Padre PapiedCataluña; el Padre Miguel de Echarri, Comedador de Calatayud, entre los de Aragón;dre Jerónimo Pérez, entre los de Valencia'entre los de Francia, el Padre Juan Suau (Suti -vis) Comendador de Cahors.sePrueba de que el gobierno de la O rue- ,(1) «La Merced» de 1928, pág. 328.— 477 -llevaba con más energía que antes, es la frecuenciade los Capítulos generales, pues el ReverendísimoPuig celebró el segundo en Zaragozaen 1554, asistiendo por Castilla el ProvincialMaestro Fray Pedro de Salazar y el Comendadorde Burgos Fray Pedro de Torres.Por Cataluña, se eligió definidor al Prior deBarcelona Maestro Fray Juan Mata; por Aragón,al Maestro Molinar, Comendador de Zaragoza;Por Valencia, al Maestro Fray Juan Sans, y porl'rancia, a Fray Pedro Ponxinat.Es Procurador del Capítulo Fray Miguel de2charri, Comendador de Calatayud, que fuénombrado redentor con el Maestro Papiol, Frayrancisco Roig y Fray Pedro Sánchez, Comenpdaecdtoirveasmpeenrtpeetuosde Mallorca y del Olivar res-El lugar y tiempo se dejó al arbitrio del Gefloraly éste, al año siguiente, envió a Argel a losnedentores que volvieron con 73 cautivos des-13n05 de grandes trabajos, según refiere el acta deelección del Maestro Papiol, uno de los redentores.El Capítulo de 1554 nombró Comendador deltlig al Maestro Calvo y Coadjutor suyo, con;utura sucesión, al Maestro Arcisio Gregori. Iguallavor se concedió a Fray Pascual Molinar, alumn°de Salamanca, dándole la expectativa de la,.. ell-cemienda de Zaragoza que tenía su tío el-51 1 aestro Fray Agustín Molinar. El abuso que de414 expectativas se hacía en la Iglesia era causaj ogrudeenȯ parecieran tan feas y perjudiciales en

— 478 —Muchos religiosos dieron importantes limosnasde su peculio para la redención.El provincial de Castilla preguntó: ,«Cuánt°será bien que dé al Maestro general de la Ordenpor el servicio de confirmación, atento que estrienio?» Fué respondido (dicen las actas, en 11'misma lengua en que se formuló la pregunta:«Respondemos que entre tanto que fuesen trieniospaguen dies y ocho ducados de oro, y siendo d o 3seis arios paguen veintisinco ducados por cadaconfirmacion».Celebró el Reverendísimo Puig su tercer Capítuloen 1561 en Barcelona, habiendo fracasadopor la peste el convocado en 1559 en la misn13ciudad. Asistieron por Castilla el Maestro Frn'YPedro de Torres, Comendador de Burgos (defini"dor ya en el anterior) y el Comendador de Conj°Fray Luis de Bances, que había residido largnsarios en Aragón, y en 1547 era Vicario en Z3-ragoza.Ordénase el uso del breviario nuevamenteimpreso en Lyon por el General, prohibien do Inside sus antecesores, Urgel, Llorens, Zafon t y e'del Provincial Zorita (prueba de que todas estasediciones existían). Mandóse comprar tambiénlos misales nuevos, que costarían 24 realespasta. Los breviarios se pagarían a 12 realescastellanos, encuadernados, y a nueve en rils%ea, precio no muy elevado, pues el libro estiimpreso a dos tintas, aunque los caracteres s°1demasiado pequeños.• oSe prohibe usar gorros o bonetes negro s, Sin— 479 —sólo la capilla, pero se tolera el solideo blancoque cubra sólo la corona a los Maestros en Teologiay a los ancianos. El General podía usartambién birrete negro.Confirmase la Constitución hecha por el GeneralMoren en el Capítulo de Valencia en 1478,Prohibiendo a los Comendadores dar el hábito aningún neófito o descendiente de neófitos (cristianosnuevos) y ahora se añade: «ni de raza deindios » , y si hubiera algún novicio de esa claseque se lo despida en seguida.Mandase que las camisas sean bien escotadasPor causa de honestidad (e;!) pues los cuellos yPeos se reputaban deshonestos.I, Entre los nombramientos hechos figura el deraY Ramón de Esparza, ex alumno de Salamana,Prior del Colegio de París. Comendador de°1°sa, Fray Pedro Masson, Doctor en TeologíaProvincial de Francia. Comendador Aurignac,ri c'tró Fray Pedro Masson, el mayor o el viejo.1\j°41endador de Burdeos Fray. Guillermo Peytavi.Maleville, Fray Juan del Aubespin. De Carassona,Fray Pedro Penxenat, y de Auteri ve,liraY Juan Dufourc, encargado luego de Montpeer, cuya provisión quedó ahora al arbitrio del"eneral.Subsistían todos los conventos de Francia,at unque sobre ellos se cernía la tormenta protes-(,allte , que había de producir tantos saqueos, in--encliós y muertes.13äse a Fray Pascual de Molinar la encomiendeHuesca mientras ocupara su tío la de Zara-

— 480 —goza. Es Comendador de Tarazona el futuro Oe"neral Fray Francisco de Salazar. De ValenciaFray Clemente de 0-inebrosa, alumno de S alamanca.Del Puig Fray Vicente Murta.Menciónase por vez primera el convento deGirgenti con el de Palermo en Sicilia. Hácesememoria de la redención llevada a cabo en 029por el Maestro Sorell y Fray Jerónimo Pec o, 3propósito de los dineros que habían tomado delconvento de Barcelona.Fueron nombrados ahora redentores los 193-dres Matías Papiol, Secretario general, ytro Fray Fortún de Esparza, Comendad or eePamplona. El General se propuso dar con est3ocasión una prueba de la vitalidad de la Ordeny gestionó con el Maestro Fray Gaspar de Torres'Provincial de Castilla, que sus redentores seunieran a los de Aragón.Fueron nombrados por Castilla Fray -Ant°11,•Martínez, Comendador de Cazorla, muy p räetl.eeneste ministerio, y el santo Fray Juan Va1le1°'modelo de recogimiento y de fervor, qu e vi° ief,su ida a Argel la puerta del martirio. Unióse'también, quizá en la misma esperanza, el padreMiguel Echarri, Comendador de Calatay ud , een,rpañero que había sido del Maestro Papiol en 1buApy que ahora murió en el viaje a causlos a --malos tratos de los moros.La redención fué de 427 cautivos, a s lgun°ellos muy caros, número jamás alcanza do dest`lafundación de la Orden, que celebró esta redeellición como un triunfo glorioso, en frase d e Zullap,— 481 —aunque el coste fué enorme, pues se acercó acuarenta mil escudos de oro. El precio medio de93 escudos no es, sin embargo, muy alto, yPr onto hemos de ver encarecida la mercancíahumana o depreciada la moneda.Entre los redimidos venían cuatro religiosasfranciscanas, cautivadas cuando se dirigían aealler para reformar el monasterio de su Orden.La redénción entró en Valencia el 27 de Noviembrede 1562 (1).Cuando se celebró el Capítulo en Pentecostésde 1561, parece había muerto ya el Maestro FrayAhrcisio Gregori, pues se da la encomienda del' uig a Fray Vicente Murta, sin mencionar al21ebre Maestro, que la tenía en expectativa.' T'a Maestro en Teología, en Artes y en Medici-14. Desde 1551 figura en nuestro Colegio de Saiainanca, donde ganó un curso de Lógica, y en1.5 56 la sustitución de Filosofía Natural, cuyotitular se jubiló entonces (2).Ejerció también con gloria la Medicina, y1) ,,ara a sistir a la Marquesa de las Navas, pidió laivrincesa regente D. Juana a la Universidad quePermitiera ausentarse. Concedióle un mes deicencia, pero a la segunda petición la Universi-(14c1 sacó a oposición la cátedra, cosa que debió14(1i) Según refiere el acta de elección del Maestro Pa-Qon. Areh • de Navarra: Mercedarios de Pamplona, 416.esta redención hacen tres, y aun cuatro algunos—12(istas.(2) «La Merced» de 1928, pág. 280.31

— 482 —sentir poco el Mercedario, empujado por ni:asprósperos vientos. Los honorarios de la Medicinapermitieron al P. Arcisio mostrarse espléndid°en el Capítulo de 1554, dando cien escudos parala redención. Para obtener más limosnas volví°a la Corte en 1561, falleciendo poco después'antes de cumplir los cincuenta años.Sus libros de Filosofía eran muy busead°spor los estudiantes, y hay ediciones de ellosSalamanca, en Alcalá y en Valencia.Echóse el Capítulo siguiente para Pampl0113'aunque según veremos se celebró en Barcelonaen 1567. Nombráronse tres electores por eac13,Provincia; siendo uno de los de Franc ia elMaestro Penxinat y subelector suyo el P. JuanDufourc.Quisieron señalar los conventuales como1547, pero dejaron los nombres en blanc o. rra'vez a esta idea corresponden las correcci ones Ynotas puestas al Capítulo de 1547.Todavía pudo el General celebrar otro en1567, trasladándolo a Barcelona, quizá Por 1,3,mucha edad del que debía presidirlo. No asisti°1nadie de Castilla. Sale definidor por Fran cia eMaestro Penchinat, Comendador de CarcasonaProvincial, y son confesores por la mism a Pr°vinciael P. Dufourc y el P. Aubespin. Asisten()también los Padres Peytavy y Galofi, este últiln-Comendador de Tolosa.Nombróse Comendador de Pamplona a lirgdYeFrancisco de Salazar. Menciónase el convent°San Ginés, cerca de Orihuela (en el que se refun— 483 —c1i6 más tarde), y del que era Comendador elfutu ro General Fray Francisco de Torres, que en:1539el era ya Presbítero en Elche, su patria, segúnacta n de visita.En Francia padeció la Merced, como toda lat• cAorio so,Ca ectratie.:Salt'ne Alfa, no Ithocienciaent._ndeorn.rt Sf (1/1 I 41pleitPiti1 ' • aEl Maestro Fray Arcisio Gregori,célebre escritor y médico. .(Cuadro del Convento del Cuzco.)fr, ,v1t,' Jai,sgrandes daños con las revueltas del pro- •ismo, aunque no hay señales de apostatirarelos nuestros.\,, 0nd 15 48, los Mercedarios de Auterive, en elIdo de Foix, acudieron al Rey de Navarra,

— 484 —su señor, pidiendo les fueran conservados sus bi eAlbret-nes, de los que presentan inventario. Losse inclinaban ya a la Reforma. Era ComendacWFray Bernardo Alric (1). El convento se fttedefendiendo hasta 1570, en que fué arrui n adopor los protestantes. Enrique IV dió auxilio para'restaurarlo en 1598.3 e droEl Comendador de Montpeller, FrayPenxinat, se veía en grandes apuros en 041para sostener su Comunidad de ocho o nuev e religiosos,teniendo que enajenar algunas finspara poner en explotación las restantes (2).el Capítulo de 1561 fué nombrado para aque113encomienda Fray Juan Dufourc (de Furco) quevió demolido su convento en Octubre de aque'año, con todos los demás de la ciudad (3).El Comendador se mantuvo allí, sin embai del 3y en Febrero de 1567 arrendó algunas fincascasa (4). El Capítulo Provincial de 1586 celebr3-dedo en Tolosa, agregó sus bienes al Convent oCarcasona (5).El convento de Tolosa hubo de padecerbién bastante en sus bienes, y el P. GallofYtó la quema de un molino de pastel cerca demaul en 1560, realizada por los herejes (6Toulouse: Arch. Depart. Merci, hasse 6.Toulouse: Arch. Depart. Merci, 19.Aigrefeuille: Hist. de Montpellier.Montpellier: Arch. Depart. Merci, 12.Ibid. 16.Toulouse: Arch. Depart. Merci, 30.g' 7tagl"09'crll— 485 —Conv ento, sin embargo, logró salvarse, contribu-Yendo a ello el prestigio del Maestro Fray Antonio'rrE mioulieres, que había sido miembro del Parla-'lento de Tolosa, según Zumel, y a quien vereraoselecto General.Peor suerte corrió el convento de Béziers, queen 1562 fué derruido por los amotinados. En1570 el Provincial P. Penxinat, presentó una relatnación,y en vista de ella le dieron la casa delhereje León 1VIalvoyr, donde se establecieron losreli giosos hasta 1584, en que el dueño obtuvo sudevolución. La ciudad dió el convento arruinado1( s jesuitas en 1599 (1).Estas son las noticias seguras que he podidosacar de los documentos coetáneos. A fines de siglotodos los cronistas de Francia se dieron aexa gerar las pérdidas y el número de muertos, ycreo que los Mercedarios se dejaron contagiarPor el mal general.Nuestros religiosos no pasaban mucho de 150ea 4_pie4uoda la provincia de Francia (incluidos Per-, cd1 y Mallorca, políticamente españoles, queMacita padecieron).eoEn documentos del siglo XVII se dice que elv entootpde Maleville fué quemado en 1563 y°s debieron sufrir también bastante en lasciogu€:Iftira s de religión, pero continuaron subsistien-Eran pobres y pobres continuaron siendo.Enrique II, por carta fechada en Dijon en Jucle1548, concedió amplios favores a la Mer-_(1 ) Bib. NI. de Madrid. Ms. 7.327.

— 486 —ced (1), y en 1552 confirmó el privilegio otorgadopor su padre Francisco 1 en 1527, sin correcciónalguna, por cédula fechada en París el 21 deEnero (2). Tales confirmaciones, en Francia conloen España, eran necesarias a la muerte de losreyes.Otra confirmación semejante despachó Frall"cisco II en Fontainebleau el 13 de Julio de 1560,primero de su reinado, copiando las cláusulasprincipales de los anteriores privilegios (3).Carlos IX despachó su confirmación, nlásbreve, en Tolosa en Febrero de 1565, a peticióndel Comendador y Vicario general (4).El Rvilmo. Miguel Puig falleció en Barce10113el 22 de Noviembre de 1567, a los veintidós alesy medio de generalato, bastante aprovechados,aunque menos de lo que exigían los tiempos.En los libros impresos por él aparecen su s armas,que eran un cerro (puig) coronado porárbol y las iniciales M. P., todo ello entadopunta del escudo de la Orden.(1) Toulouse: Arch. Depart. Merci, 12. Original.(2) Ibid.(3) Ibid.(4) Bordeaux: Arch. Depart. Merci, c. 10.CAPÍTULO XXVILa provincia de Castilla durante el gobierno delRvdmo. Puig (1546-1567)StIMARIO: El Maestro Oriona, Provincial de Castilla.—Estatutos nuevos.—Fray Pedro de Salazar.—Mercedariasen Marquina, Orozco y Bérriz.—Religiosos distinguidos.—FrayGaspar de Torres.—Intento de reforma.Mercedarios ante la Inquisición.—Fundación en Madrid.—Faltade redenciones y sus causas.—Estado dela provincia de Castilla.Gobernábala desde 1544 el Maestro Fray Pedrode Oriona, Comendador de Toledo, que diezallos antes lo era de Córdoba, y fue elegido Pro-'vineial en Sevilla por un sexenio, según la bulade confirmación expedida en 1546.Conocemos varios Capítulos celebrados por61 que demuestran el interés que se había des-Pertado por la verdadera reforma. En el de 1545elebrado en Huete por Septiembre, fueron Defi-,t, tliclores los Maestros Fray Juan de Somorrostro,'cario Provincial; Fray Alonso de Vinuesa, Co-711dador de Huete, y Fray Pedro de Salazar,\-1°Inendador de Burceña (1).(1) Boletin de la Orden, 1920, pág. 343.

— 488 —'Tocóle al Maestro Oriona hacer frente a lasdificultades suscitadas a la Merced en Américapor Las Casas y sus allegados (y también por lasimprudencias de algunos de los nuestros), perode todo salió bien con su gran prestigio. El CardenalSiliceo, Arzobispo de Toledo, le pidió porsu auxiliar, siendo preconizado el 18 de Enerode 1549 Obispo colimbricense, pero continuó de•Provincial hasta el año siguiente, y sobrevivi ó alCardenal, falleciendo en 1560.Al terminar sus seis años el P. Oriona, elCapítulo, reunido en Segovia, tomó importantesacuerdos, confirmados luego por el Rvdmo. Puigy , por la Santa Sede, a saber:1. 0 Los conventos que contaran con diez v°tospodrían elegir su Comendador, pero tenienvoto sólo los religiosos ordenados in. sacris, decuatro años de profesión.2.° Tendrían voto en la elección de Pr°vinciallos Comendadores y un socio elegid o Pglos conventos que tuvieran diez ordenados insacris, y los graduados en Teología por Univ ersidad.3. 0 El Provincialato duraría sólo tres ofi°scontar desde la confirmación por el Generarpues antes de obtenerla no podía actuar.4. 0 Los Definidores debían ser elegid os P°1'el Capítulo, , y no por el Presidente y los Pefinidoressalientes, como antes se hacía.Después de confirmado el nuevo Prov11e131'lase reunía con los Definidores y procedía 3elección de Comendadores y a la confirmaci°— 489 —de los elegidos por las casas, tomando cuentas asu antecesor (1).El primero elegido en estas condiciones fuéel Maestro Somorrostro, que presidía como Vicarioprovincial. De todos los acuerdos tomados eneste Capítulo, el que suscitó mayores . dificultadesMaestro Fray Pedro de Salazar, enseñando hebreo enSalamanca.'416 la elección de Comendadores por los conven-s,c ausa de muchos desasosiegos y que por locayó luego en desuso.t., Terminado el trienio del Maestro Somorrosfuléelegido en 1553 el Maestro Fray Pedroe Sol azar, Comendador de Burcefia, y antes de(1) Bu llarium Ord., pág. 141.

— 490 —Salamanca, donde había sido Profesor de hebre()en 1542. Hizo oposición a la cátedra de TresLenguas (hebreo, árabe y caldeo), pero los j'iristas,que eran mayoría, no quisieron dársela p retextandoque no sabían árabe para juzgar de silcompetencia.El Rector y Consiliarios enviaron entonc es aGranada una Comisión de su seno con el Merce'dario, para comprobar si efectivamente sabíaárabe, pero entretanto los juristas se amot1113-ron, y el P. Salazar abandonó sus pretensiones Yla Universidad (1).Siendo Comendador de Burcefía en 154S elMaestro Salazar dió la profesión a las cinco P rimerasbeatas fundadoras del convento de Mar,-quina, (lúe después de laboriosos principios logr°adoptar la clausura y ha crecido siempre en fervore importancia (2). Por el mismo tiempofundaron los beaterios de Bérriz, Orozco, Ibä rruri,Larrabezúa y Arrencudiaga, de humildesdifíciles principios también, pero llegado s nlästarde a grande desarrollo los tres primeros.Por 1551 entró de Rector de Alcalá el padreAgustín de Revenga, que ejerció el cargo dede la Universidad hasta 1568 con presti gio 11 deinferior al de Fray Juan de Riaño y gran fau lc ,santidad, según atestigua Zumel, que le stieecil°en el cargo.El 4 de Mayo de 1556 el Capítulo pro vill *31(1) Vázquez: El Maestro Zumel, 132.(2) Boletin de la Orden, 1930, pág. 12.— 491 —re unido en Toledo acordó prolongar por otroStres afios el gobierno del Maestro Salazar. Erandef inidores el Maestro Fray Gaspar de Torres,Co mendador de Salamanca; Fray Antonio Martínez, Comendador de Cazorla; el Licenciado FrayP edro de Torres, Comendador de Burgos y el presennadtaa.do Fray Pedro Iñiguez, Comendador de Gra-Contáronse 52 capitulares representantes de32 casas, teniendo dos votos (el Comendador y sus° e10) los conventos de diez o más ordenadossacris, que eran doce, a saber Toledo, Huete,Bur gos, Valladolid, Sevilla, Jerez, Cazorla, Segovia, G uadalajara, Granada, Málaga y Salamanca.Entre los vocales de este capítulo debemosse ñalar al licenciado Fray Pedro de Torres, Coinendador de Burgos, de quien habla con grandeelogi e el Rvdmo. Maldonado, equivocando elno mbre. Vivió aún bastantes años y adelantequiuseiera h paiecrenralo. Provincial, pero estaba ya faltOEl. P. Baltasar de Torres, Comendador detra . Sra. de los Remedios, vivía con gran recogliniento en la ermita de este nombre en la Fuensan,La (Albacete). El Maestro Salazar lo hizo Colnendador de Toro y el Maestro Fray Gaspar,e t lu nario del venerable, lo trasladó a Málaga (1).cle sbuy Juan Pérez de Valenzuela, ComendadorSevilla, lo había sido de Panamá, en 1540, de'-“-te volvió a España en 1544.(1) M aldonado en Vargas, II, pág. 127.

—-Fray Alonso Muñoz, Comendador aho ra deBurcelia, lo fué adelante de Madrid y provincial'El Maestro Fray Pedro de Cárdenas, C°111e,11;dador de Baza, fué, según Zufnel, que lo conoe'uno de los más célebres predicadore s de siltiempo.Fray Juan de Móstoles, Comendador de Jereli'y Fray Pedro de Málaga, que lo era de•Alniaz°'pasaron el año siguiente a Guatemala, dondedesempeñaron papel importante.El presentado Fray Juan de Covarrubias es;tuvo destinado a América el año anteri or Yadelante Provincial.El presentado Fray Cristóbal de Soto 1151913sido colegial mayor de Alcalá y en 1569 era C°imendadorde Santiago y catedrático de suversidad, de donde pasó a la de Valladolid Y fas"lleció joven todavía.Fray Mateo de la Cuadra, Procurador de 13casa de Salamanca, pasó luego al Perú dondefué dos veces Provincial. rEl Maestro Fray Juan Enríquez, Come91 nt"—ahora de . Córdoba, fué Procurador general e,1,1Roma del Rvdmo. Maldonado, muy bienquisto uGregorio XIII, al que había tratado en Esp aña ' `)murió por 1582 electo Arzobispo de Santo P°mingo,habiendo rechazado otros obispados ellItalia, según refiere el mismo Maldonad o (1-)•En Pentecostés de 1559 fué elegido en 'D'el:-para suceder al Maestro Salazar el Rector de(1) En Vargas, II, 129.— 493 —Salamanca, Maestro Fray Gaspar de Torres, ho-°e de la provincia y de la Orden. Había nacido,eerea de Cazorla y en esta villa tomó el hábito.uestinado al colegio de Salamanca hizo una carerabrillante, siendo discípulo de Fray Domingode San Juan. Muy joven aún obtuvo un cursod C Artes en 1541 y después de varias oposicionesla Cátedra de propiedad de Filosofía Moral en1549.Pilé luego el mentor de la Universidad enbc:clos los asuntos difíciles y desempeñó largotlernPo en ella el oficio de Vicecanciller. Hizograndes obras en nuestro colegio de la Vera Cruz(lió un poderoso impulso a los estudios. Strprodoinciilallat5o6.de 5 duró seis años, conforme a lo acorda-,13110 de los primeros asuntos que hubo debresolver en su gobierno fué la organización que'labia de darse a nuestras casas de América,1) ,,Iles su dependencia inmediata del Provincial de'astilla resultaba ya imposible, dado el númerode frailes y la dificultad de las comunicaciones,1)111-0 veremos en el capítulo siguiente.El P. Torres era hombre de extraordinario'e2s5n, cuyos frutos se dejaron pronto sentir en eltinlento de toda actividad provechosa y en laPlantación de la disciplina acordada en el"%cilio de Trento.b, Pray Gaspar, como otros de sus sucesores,r';1z() responsables a los Prelados de todos los"efectos de los súbditos, pues éstos eran generalenteblandos y dóciles. El Rvdmo. Zumel, que

— 494 —El Obispo Fray Gaspar de Torres y el Maestro Fra y Antonio de Ve1gsc.191'ß,)(De un cuadro coetáneo existente en el Convento de la Asunción, de Sevilprofesó en Salamanca en 1556 en manos de FrayGaspar, dice con razón que éste fué el que principalmentereformó la Provincia de Castilla y laelevó a la cumbre de la observancia.Fueron muchos los que encontraron excesivassus exigencias, pero hubieron de conven"cerse luego de que no lo eran y que la Iglesi a Yla sociedad exigían de consuno en los religiososun mayor esfuerzo en el culto, en el estudio, enla redención, en las misiones y en todos los restantesministerios.Con fecha 12 de Marzo de 1563, escribí a Fe"upe II a su Embajador en Roma Don Francis°de Vargas: «Ya sabeis como aunque la Orde n de— 495 —Ntra. Sra. de la Merced es tan santa, no estáen aquella puridakl y perfeccion que solia entiempos pasados... y porque yo desearia y estinutriaen mucho que en el felice pontificado desu Sanctidad y por su mano se restituyese ladicha Orden a su antiguo estado, y me han dadociertos apuntamientos de lo que habria de proveery mandar su Sanctidad para que esto sehiciese y encaminase, he querido enviaroslos conesta y encargaros mucho que, habiendolos vistoY considerado, los mostreis de mi parte a suSanetidad, suplicándole en virtud de la cartaque le escribo sobre ello en vuestra creencia quetriande mirar los dichos apuntamientos y pareeielldolejustificados, tenga por bien conceder eldespacho que se pide, remitiendome a mi laexecucion de ello, como me remitió lo de laOrden de Sant Benito, de que agora se trata,Para que yo en virtud de la comission de Su Sanetidadnombre las personas que convenga para4tte entiendan con diligencia en hazer la reforthacionde la dicha Orden de la Merced y ponerlas cosas, conventos della en el concierto que sel'ecluiere conforme a sus antiguos y loables statu-Y a lo que segun el estado de las cosas y.htlernpos se viere mas convenir al servicio de.uies Ntro. Señor...» (1).El apuntamiento de las reformas que habíande introducirse en la Orden se refiere a los%uientes puntos:Roma: Arch. de la Embajada Esp., leg. 34.

— 496 —1." El General continuaría siendo vitalicio,pero tendrían voto en su elección todos los Provinciales,incluso los de América, con dos adju n-tos por cada provincia. Todas las eleccionesserían por votos secretos.2.° Los Provinciales durarían seis años y n°podrían ser reelegidos en los dos Capítulos inule"diatos. Las encomiendas durarían tres años, eÑ"cepto en Alcalá y Salamanca, pudiendo ser re'elegido el Comendador sólo otro trienio.3.° Los definidores serían elegidos por todo el.Capítulo y no podrían ser reelegidos en los d°sinmediatos.4.° El Provincial saliente daría cuenta de suadministración al nuevo y a su definitorio.5.° Los colegiales de Alcalá y Salamancaentrarían previa información de limpieza...Es evidente que todo esto era obra de FraYGaspar, y él hubiera sido el ejecutor de la refermade la Orden si se hubieran -seguido sus consejos,pues se indicaba para juez de las pena s alMaestrescuela de Salamanca, testaferro delmismo Provincial. No se hizo así y las reforulascostaron largos años de luchas y disgusto s, aunquemenos de lo que habían costado en las Ordenesde Santo Domingo y San Francisco y e°stgronahora en otras.Para el mismo efecto tenia preparada Fra YGaspar una edición de las Constituciones, (1.11eapareció en Salamanca en 1565, en la que se introducíanlos cánones de Trento y a la vez secorregía el latín pintoresco de las antiguas.— 497 —En lo demás las reformas son poco importantes, y aunque con graves trastornos hubieron dehacerse otras más radicales en la edición de1588, llevada a cabo por el P. Zumel, discípulode Fray Gaspar. En las dos ediciones se expresael voto de redención con idénticas palabras, peroel Maestro Torres nada decía de la oración mentaly frecuencia de sacramentos y otras cosasque hoy reputamos fundamentales, y que fueronañadidas por Zumel.Por 1558 se descubrieron en España dos focosde p rotestantismo en Valladolid y Sevilla. Muchas Ordenes religiosas tuvieron defecciones, yen la Merced fué llorada la del Maestro Fray*Ro drigo Guerrero, que en 1550 y años siguientesestudiaba Teología en Alcalá,. Era natural degra nada, y parece que tuvo la desgracia de oir;1: 1 Dr. Egidio, luego Canónigo de Sevilla, sem-'ar ador de la cizaña.El P. Guerrero, estando enfermo en 1559, sedelató a sí mismo en Valladolid, y en el segundoacto allí celebrado en Octubre de 1561, fué conclenadoa cárcel perpetua y sambenito. Indultadoluego, reincidió y se delató varias veces, siendoe°ndenado a galeras en 1571, para ser devueltoPronto a Valladolid. En un Manicomio estaríatIlejor (1) .A be menor categoría era Fray Bartolomé deque en 1562 fué condenado en Toledo a11 . (1) Schäfer (Ernest): Beitrage zur Geschichte des SpalehenProtestantismus... I, 332 y en toda la obra.32

— 498 —cárcel perpetua y degradación, pues habiendoescapado de la Orden apenas profeso, se ordenócon dimisorias falsas, secularizándose luego (1).Tales descarríos no perjudicaron a la Orden,que en 1563 fundó una casa en Madrid, adondese había trasladado la Corte en 1561 desde To"ledo. El Provincial gestionó todas las licenci as Yadquirió en la calle de Barrio Nuevo una casapequeña, donde instaló a los religiosos. Fuémer Comendador Fray Tomás de Truxillo, n aturalde Guadalupe, alumno de Alcalá y de S alamanca,el cual después de 1569 se trasladó a laOrden de Santo Domingo a causa de ciertos disgustos.Allá hizo mejor papel que algunos D onclinicosvenidos a nosotros, pues fué Lectoral de laCatedral de Barcelona y tiene obras impresas'siendo citado su nombre corno uno de los niä5gloriosos de su tiempo.El P. Rernón cuenta en forma dramática elasalto nocturno de que fueron objeto los Mereedariosen aquella primera casa de Madrid P°1'parte de las parroquias vecinas, y no parec e quetodo sea invención del poeta. Aunque lentaruellte,el convento fué adquiriendo importancia, rnercedsobre todo al amor de sus hijos elevado s a 31-tas dignidades, y cien años después era u n° dielos mejores de Madrid y el más important e de 131Orden (2).En la primavera de 1565 se celebró en Tole-(1) V. el Indice impreso de la Inquisición de Toled°'(2) Bib. NI. Ms. 2.684, con amplia documentación.

— 500 —do Capítulo provincial con 49 vocales, y obtuvo26 votos el Maestro Fray Juan de Peñaranda;que era Vicario del Provincial saliente y hechurasuya. Los otros 21 fueron para el Maestro Cay-rrillo, y obtuvieron uno Fray Pedro de TorresFray Juan de Covarrubias (1). Asiste por vez p rimeraFray Francisco Zumel, último de los P resentados,pues acababa de graduarse de bachilleren SalamanCa.Sólo figuran en la nómina dos de los definido'res salientes: Fray Diego de Illana y Fray Juande Covarrubias, los otros dos, o sean Fray Luisde Bances y Fray Juan de Conchillos, parece quehabían muerto. Eligióse Provincial por cuatroaños, pues el Maestro Fray Gaspar dijo a los C a-pitulares que ese era el término que iba a sell a-larse en Roma para casi todas las Ordene s Y7efectivamente, estuvo redactada la bula, perofracasó a última hora (2).Los nuevos definidores fueron Fray Juan deMóstoles, Fray Antonio Martínez, Fray Pedro deTorres y Fray Cristóbal Navarro.El Provincial saliente entregó a su suces01.dos breves de Pío IV ordenando que nadie fueraadmitido en los colegios de Alcalá y Salamancasin expediente de limpieza, según la preoc uP a-ción general entonces, no del todo infundadn''pues se descubrían muchos falsos cristianos Yverdaderos judíos, hasta entre los clérigos. pare -(1) Simancas: P. R., 23-53.(2) Arch. Embaj. España en Roma, leg. 32, fol. 230'— 501 —ee que el Maestro Torres, en vista de los disgustosque tales informaciones causaron en Sala-'llanca, retuvo las bulas que el Maestro Peñaranclano quiso aplicar tampoco, reservando esa tristecomisión al Maestro Carrillo.No hay noticia cierta de redenciones duranteeste tiempo, y la explicación la recordaba elMaestro Carrillo a Felipe II en 1568, diciendo:

'como tengo dicho, se hiciese libro• de nue--vo» (1).Más brillante era la situación de la provincia'de Castilla en cuanto a los otros votos, según exponeel Maestro Carrillo: «En lo que toca a losvotos esenciales: en el de la castidad no hay quehablar, porque parece que no hay más pecadoque éste, y ansi en las visitas de los Provincialesy en Capítulos y ordinariamente los Comenda doresse tiene gran cuenta con castigallo; y si alg°se halla contra este voto en alguno, no sólo secastiga con rigor, mas resulta en infamia grandeentre los otros religiosos.»«En lo de la obediencia, son tan súbditos les-Comendadores a los.Provinciales v los religiososa los Comendadores, que estoy por decir que sobra;y cierto, los religiosos en común son genteclómita y sujeta y que con poco rigor hacen 19que les mandan; y ansi si no están mucho inasreformados, la culpa es de los superiores:»«En lo que toca a la pobreza, remítome l°que en otra parte está advertido, que los Provindalesy algunos Comendadores son los más netadosdesto, por tener algunas cosas como propie"dad, como mulas y ropas, dineros, etc., llevand°esto de unos monesterios a otros cuando se mudan'y ansi lo llaman y tratan como cosa propria.-»Censura que en el último Capítulo, de 1565'se mandó a los Superiores que proveyesen de 19El Venerable Padre Agustín de Revenga, Rector deAlcalá.(Cuadro de R. Escribano.)(1) Vázquez: La Merced a mediados del siglo108.

504 —fiecesario a sus súbditos, «excepto en Salamancay Alcalá, como si aquéllos no fuesen súbditos Yfrailes y no tuviesen necesidades.., y esto parecemuy mal, y suena peor, porque los Perlados des -tos dos monesterios el uno tiene buena cátedra yel otro una judicatura que le vale muchos reales,y ansi se podria decir dellos el harto del ayuno..."tos dos rectores aludidos, o golpeados tanduramente, eran Fray Gaspar de Torres y el venerableAgustín de Revenga, a cuya encomiendade Alcalá estaba adjunto el cargo de juez conse r-vador de la Universidad. Es de suponer que uney otro harían lo posible en favor de sus estudi antes,aunque no les fuera posible sostenerlos a todos,por ser muchos. Los que solicitaban ir a es"tudiar en aquellas Universidades, debían pensaral mismo tiempo en cómo habían de vivir. N°era nuevo eso, por desgracia, pues ya en 1467 sehabía acordado algo semejante para los estud iantesde Salamanca. El P. Carrillo, ya Provinciadióen 1571 para el Magisterio de Zumel 140 ducados,autorizando al Colegio de la Vera Cruzpara renunciar la legítima del graduando e n favorde su hermana, pues no había otra manera'de hacer frente a los gastos.Ya por estas fechas había comenzado a erecerexcesivamente el número de religiosos, si endolos conventos de Huete y Burcefia los que da:ban mayor contingente, y no de la mejor caliclau'a juicio del Maestro Carrillo, que era rieian°:Los frailes de Castilla iban con gusto a Andalticía, costando hacerlos volver al Norte.CAPITULO XXVIILa Merced en América durante el gobierno delRvdmo. Puig (1546-1567)StM NIII0.—Fray Juan de Vargas defiende las casas delPerú.—Es elegido Provincial en 1556.—Confirmaciónde Roma.--Dificultades en España. —Erigense cuatroprovincias en América.—Conversiones importantes.—El P. Diego Martinez. —Fray Diego de Porres.—Susglandes empresas.—El P. Dardón y otros en CentroAmérica. —Los Padres Correa, Rendón y otros enChile.—Muerte del P. Albarrán.Queda ya indicado que los Provinciales de°astilla no veían con malos ojos la reducción acine) de nuestros Conventos de América, perolos que allá habían gastado sus energías en fundarlosy sostenerlos experimentaban gran doloren que aquello se perdiera y quedaran abandonadaslas cristiandades formadas alrededor denuestras casas.Fray Juan de Vargas, que desde 1547 figuraC0 Vicario Provincial en el Perú y Comendadordel Cuzco, hizo que las principales ciudadesescr ibieran al Rey dando testimonio de la actividaddesplegada por los nuestros y pidiendo quese enviaran nuevos misioneros en vez de retirara los que había.El Cabildo del Cuzco escribía al Emperador

— 5,)6 —en 1552: «Los mercenarios tienen aqui Conventocasi desde la fundacion desta ciudad; han hechoy hacen gran fructo, y aun con ventaja a lasotras órdenes, por tener frailes hijos de naturales,mas diestros en la lengua que los otros...Tenian de 60 a 70 indios de servicio, y podianconservarlos, pues no eran mendicantes; que P i-zarro los favoreció mucho» (1).Casi lo mismo escribe la ciudad de Trujillo.Los habitantes de Piura « quisieran hacerles unacasa como las que en otras partes tienen, queverdaderamente son aventajadas» (2). El P. Vargas,despreciando las pequerieces de dentr o Yde fuera de la Orden, pide en Marzo de 1-5b3desde Lima que se envíen más frailes, pues lamies es mucha y los operarios pocos (3).En 1555, el Provincial de Castilla MaestroSalazar envió al Perú como Vicario y Visitadora Fray Alonso de Losa, que era Vicario del C°legiode Salamanca (4). Tuvo graves disgustoscon los religiosos que allá estaban, aunquetarde llegaron a un acuerdo, aceptando el Visltadorgran parte de las ideas de aquellos.Felipe II, por cédula fechada en Toledo e l 24de Diciembre de 1559, confirmó la del EmPeradorde 1526 aprobando la fundación de Conv eutosde la Merced en América y permitiendo se(1) Colección Solazar, t. 86, fol. 154.(2) Ibid.(3) Ibid, fol. 288.(4) Pérez: IVIercedarios que pasaron a América, 264.— ho/fundasen otros nuevos. Esto quiere decir que elnuevo Provincial de Castilla Maestro Torres y elGobierno a su instancia, abandonaban el pro-Yeeto de reducirlos que tanto contristaba a losMercedarios de América (1).Estos habían tomado resueltamente la defen-21-1 de su obra y las contradicciones acrecentabanCn edlos el deseo de formar provincia independientecorno la tenían los de otras Ordenes.En Noviembre de 1556 celebraron en el Cuzcouna Asamblea en la que fué elegido Fray Juande Vargas Provincial del Perú, Tierra Firme yPopayán , y Definidores Fray Miguel de Orenes,Con iendador de Lima; Fray Bartolome' de Ungría,Comendador de Trujillo; Fray Alejo Daza, Conlendadorde Panamá, y Fray Luis de Ovalle,co mendador de Quito. Asistían ademas otrosdoce religiosos que llaman a su reunión CabildoY Ayuntamiento, evitando el llamarlo CapítuloProvincial, en espera de que fuera confirmado(2,.'Para conseguir sus intentos nombraron Procuradoresa los Padres Orenes y Daza, con encargode venir a Europa a gestionar la erecciónde la provincia con el Papa, el Rey y los Superiores de la Orden. En realidad, parece que vihieronlos Padres Daza y Vargas, pues Orenesco ntinúa figurando en el Perú.Parece que los comisionados fueron bien aco-(1) Salmerön: Recuerdos, 286.(2) Vázquez: El Maestro Fray Gaspar de . Torres, 58.

— 508 —gidos por el General, y obtenida en Barcelona stiaprobación se dirigieron a Roma. Para apoYarsus deseos habían hecho en el Perú en 1560 unainformación bastante violenta contra el régimende los Provinciales de Castilla, que no daban ladebida importancia a la obra realizada por lesMercedarios en el Perú. En ella declaran variosreligiosos de otras Ordenes.Movido por estas razones, Pío IV confirm ó laerección de la nueva provincia y la elección deProvincial realizada en 1556, por breve fechadoen 30 de Diciembre de 1560 (1).Refiérese en él cómo fueron al Perú los pri -meros Mercedarios y sus trabajos para extenderla religión cristiana, logrando la conversión Jemuchísimos indios y fundando algunos Mona sterioscon las limosnas de los fieles. Menciona'luego el Capítulo celebrado en el Cuzco, dondeFray Juan de Vargas (de cuya doctrina, costumbresy probidad tenían plena satisfacción 1°selectores) fué elevado al Provincialato por eine°años, del Perú, Tierra Firme, provincia de Chile'gobernación de Popayán y lugares cercanos.El mencionado Capitulo de 1556 es, por tanto,el primero electivo celebrado por los Merced'en América. El Provincial de Castilla tuvo sopl°de lo que se trataba en Roma y el lo de Ener°de 1561 consiguió de Felipe II una cédula en quese dice que:El Provincial de la Merced hizo relación a SuEl Presentado Fray Juan de Vargas.(Estampa de P. Perret, en la Historia de Remón.)(1) Rern ȯn: Hist. General, II, 149 y 151.

— 510 —Majestad que ciertos Prelados Mercedarios delPerú se juntaron y eligieron Provincial, por vivircon más libertad, siendo como son sujetos al Provincialde Castilla, y para que se confirme enRoma la elección han enviado poderes, lo cual,visto por los del Consejo, fué acordado mandaral Virrey, que si algunas bulas o letras apost ólicasfuesen presentadas por parte de los dichosreligiosos que en aquellas partes residen, no c onsientaque se use de ellas, sino que la s.envie 31Consejo de Indias, para que se provea lo queconvenga (1).Con este motivo fueron llamados a compare'cer en Sevilla, ante el Provincial Fray Grasigde Torres: el Padre Juan de Vargas y sus definidores,Orenes Daza, °valle y Fray Migu el deSantamaría.Diose cuenta del caso a su Majestad y a SuSantidad, y vinieron las partes a una coneordigen que se hicieron cuatro provincias y cantr°Provinciales, y que el de Castilla fuese suPeri°ry pudiese enviar cada tres o cada seis años anvisitador, el cual no pudiese visitar mas de 11113vez cada convento en tres años, excepto si 11°isucediese algún ruido notable que el Provincia'no remediase (2).El cronista Remon cuenta que estando el padreJuan de Vargas detenido en Toledo fué visitarlesu amigo Don Pedro de Lagasca, al que(1) Pérez: Mereedarios... 203.(2) Ibid.— 511 —había ayudado grandemente en la pacificaciónde1 Perú, servicio que ahora agradeció Lagascahablando en favor del acusado al Rey y al ProacialMaestro Torres.viEl arreglo se venía preparando desde 1558 enque los peruanos obtuvieron que el Padre Losaaprobara las bases para el gobierno de la nuevaProvincia. Los de allá, enviaron seis mil pesosor o a Sevilla con orden de entregarlos al Pro vmeialy definitorio de Castilla si aceptaban lasbases dichas.Negóse a ello el Padre Torres y entabló pleitoen la casa de la Contratación, pero en Diciembrede 1560, los del Perú, y a su cabeza el PadreLosa, otorgan poder sin condición alguna al Provincialpara retirar dicha suma, destinándola acomprar renta para el Colegio de Salamanca,adonde podrían mandar estudiantes las provinciasdel Perú, como vino poco después Fray Francisco Maldonado (1).Por cédula de 21 de Febrero de 1563, el Reyautorizó a Fray Juan de Vargas para regresar alPerú, llevando 20 religiosos • en su compañía,aunque sólo reunió siete, quedando los restantesPara 1565 (2). El P. Vargas continuaba de Provincialde Lima en 1571 (3).Un ejemplo de cómo trabajaban los Merceda-(1) Vázquez: El Maestro Torres, 57.(2) Pérez: Mereedarios... 205-6.(3) Monroy (Joel): Los Mereedarios en Cali... Quito,30.

— 512 —n os en la instrucción de los indios, nos la ofreceuna donación hecha al convento del Cuzco porCayo Topa Inga, primo de Huáscar y de Atahualpaen 1549: «.,.por quanto yo tengo recib i-das muchas e buenas obras asi espirituales comotemporales del Comendador, flayres e conventodel Monesterio de Nuestra Señora de la Merceddesta cibdad del Cuzco, de que a mi se me haseguido mucha utilidad e provecho, por dondevoy entendiendo las cosas de nuestra santa feecatólica e tengo voluntad mediante los consejose buenas obras e doctrinas que los dichos frayresme han dado de me tornar cristiano; e no tallsolamente yo he recibido estas tan santas e bu e-nas obras, mas el dicho Comendador e frayreshan enseñado y enseñan a mis hijos la doctrinacristiana y las cosas de nuestra santa fee católicae los quieren fazer cristianos, para que col°tales, dándoles buenos y sanos consejos perillnezcan en ella, para que sus ánimas se sa l-ven» (1).El intérprete que sirvió para la redacción deesta escritura se llamaba Gabriel Alvarez de 13Carrera, hijo de español e india cristiana, Ytió el hábito de la Merced al ario siguiente, fig1-1-rando después mucho.Dos nombres descuellan entre los 1VIerc edariosdel Perú por estos años: los de los Padres,Diego Martínez o Martín y Diego de Porres.primero no se han publicado todavía documentos(1) Boletín de la Orden, 1931, pág. 25.— 513 —Precisos, pero los elogios que le tributan escritorescontemporáneos suyos o poco posteriores demuestranla grandeza de su alma y de su apostolado.El P. Martínez, cargando el recado de decirMisa sobre una llama o carnero del país y llevandoen la mano el cáliz se metió entre losChunchos y otros pueblos feroces del alto Perú,que admirados de su arrojo y desprendimiento,le recibieron como venido del cielo y aceptaronsus enseñanzas (1). A él parece referirse FrayMartin de Murua, Mercedario que escribía en1599 la Historia de los Incas, el cual afirmahaber oído a los primeros conquistadores quehubo religioso nuestro que bautizó en un solo díadiez mil indios (2).De Fray Diego de Porres tenemos documentos más concretos, precisando lugares y años.Copiaremos un Memorial presentado por él mismoal Rey, poniendo de relieve sus servicios, no porvana ostentación, sino por la necesidad de obtenerapoyo para sus obras, que fué el objeto prineipalde tantas informaciones como entonces sehicieron por toda clase de personas y que hoyes suministran datos interesantísimos. Otrasniformaciones se proponían también imponer silencioa los émulos, mas por este tiempo los de laMerced habían abandonado ya el campo. Dice,P116s, el P. Fray Diego:(1) Vargas, II, 190.(2) Obr. cit. I, pág. 4. Lima, 1922.33

— 514 —«Fui yo uno de los primeros que se ocuparonen las doctrinas que hubo en los reinos delPerú; aprendí la lengua general y fui el p rimeroque dió orden cómo se habrían de doctrinarlos indios.»«Por orden del Arzobispo Don Jerónimo deLoaisa, tuve a mi cargo tres años los repartímientos de los indios checas y atabillos, para loscuales hice veinte iglesias, por estar ellos di vididosen muchos pueblos; los puse en toda p olicíadoctrinándolos, bauticé mas de seis mil án i-mas y casé muchos.»«De allí fui promovido por el mismo Arzob ispoa la provincia de los caxatambos, donde resi"dí otros tres años e hice diez iglesias, y con 13ayuda de Dios Nuestro Señor y mi doctrina ball'tizé mas de dos mil ánimas y casé más de quinientas.»«De aquí fui a la provincia de Chinchacocha,que estaba rebelde y la sosegué con harto trabajoy riesgo de mi persona; bautizé mas dequa,tro mil ánimas en quatro años que allí estuve;hize diez iglesias y casé mas de mil indios."« En las provincias de Tarama y Bonlb(51)2siendo visitador por dicho Arzobispo, hice cine°iglesias, confesé y bauticé mas de mil indio s, Ypor entender su lengua puse orden y modo para'enseñar la doctrina (1), cosa que se debe guardaren todas las tierras nuevas.»«En la provincia de Chacalla hize cinco i gle -(1) Tiene copia de estos documentos el P. Pérez.

- 516 -sias, bautizé más de mil indios y deshice muchasguacas y acloratorios. Todo esto es en el distritode Lima.»«En la provincia de Guamanga en cuatro repartimientosreduje los indios que estaban mulYderramados, los puse en sus pueblos en policía ycristiandad, hize siete iglesias, bautizé y casémas de mil y les quité sus ritos y guacas.»«En la provincia del Cuzco, en los chumbi bicas,repartimiento de Bellille, los junté y puse ensus pueblos, por andar derramados de la guerrade Francisco Hernández Girón; los doctriné Yprediqué cinco años hasta reunirlos en cine°pueblos.»«Lo mismo hice en el valle de Cuchoa y Mar"capata, donde andaban los indios por los montes;los recogí y reduje a sus pueblos, hize siete iglesiasy bautizé y casé muchos dellos. Todos estosson en el distrito del Cuzco.»«En la provincia de los Charcas, en el vallede Tomina, Tacopaya y Supachuy planté la do e-trina cristiana, que nunca la había habido hastaentonces, hice iglesias y fui . parte para que all1se poblase la villa de Tomina, de que V. Mages"tad es muy servido.»«En la provincia de Arequipa, en los repar timientosde Omata y Quimistaca hice cinco iglesias,bauticé mas de mil indios, deshice muchasguacas y adoratorios, quitandoles sus ritos Yceremonias antiguas y saqué de una sepultur3dos indias vivas, que por saber su lenguacubrí.»- 517 —«En la ciudad de Sta. Cruz de la Sierra, queestá ciento ochenta leguas de la ciudad de laPlata, fuí nombrado por el virrey don Franciscode Toledo y por la Iglesia de la Plata, sede vacante,Vicario general de aquella ciudad y provincia,donde estuve doce años predicando ydoctrinando a los indios porque entiendo la lenguachiriguaná, y los puse en policía, y di ordenque anduviesen vestidos, porque de antes andabandesnudos; y he bautizado y casado muchosdellos, y nunca jamás• ha entrado allí ObispoPara confirmar, y muchas veces falta el óleo ycrisma para bautizar, por estar tan lejos y haberde ir a traerle por tierra de guerra, donde hePadecido grandes trabajos y riesgos de mi vida yhambre; y aunque los virreyes han señalado milPesos de salario al sacerdote en cada un año,n unca se me ha pagado, porque en la tierra nohay de qué se pague, porque no hay oro niPlata.»« De ahí entré en los hitatines y chiriguanaes,que están de guerra, distantes cuarenta leguasde Santa Cruz, determinados de irse a juntareoli los de la Cordillera, que están treinta leguasde la ciudad de la Plata, y por evitar tan granleal, con el favor de Dios y por saber su lenguafui a ellos y los puse de paz y saqué a la ciudadde la Plata doce caciques a quienes el Presidenteoidores de la Audiencia mandaron vestir y lesdieron cuchillos, tijeras y coronas de latón, todocual hice con grandísimo riesgo de mi vida, y1" Poblé en sus pueblos y les hice cinco iglesiasAMO

— 518 —y bauticé muchas criaturas en cada pueblo y lesdejé quien les enseñara doctrina.»«Asi mismo anduve muchas provincias y lleguécerca de la tierra y Noticia Rica, que es elreino de Candire y Gnasu y los Moxos, el Paytitey la provincia de las Amazonas.»«Por Chinchacocha entré en dos provinciasde guerra que se dicen Oxamarcas y Pilcosones;donde con mi predicacion saqué seis caciquesseñores de Duo y Oliana con mucha gente quepoblé en el valle de Guancabamba, veinte leguasde Chinchacocha, bauticé los caciques, los casé,les hice iglesia y puse doctrina.»«Entré en los chunchos, asimismo tierra deguerra, a sesenta leguas del Cuzco; hice iglesiasen cada pueblo y bauticé los caciques prinei133-les, que fueron: Taran°, que se llamó don Juan;Harapo°, que se llamó don Pedro, y HandesuYe,que se llamó don Cristóbal.»«En la visita que hice en la provincia de Tu'lina, San Lucas, Taviga, Tumina, valle de Taeepaya,por orden de don Francisco de Toledo,reduje los indios y los puse por la orden de losdemás.»«Asi mismo empadroné los indios que estánrepartidos en Sta. Cruz de la Sierra, que S°15.700 varones y no han tenido mas doctrin a quela que yo les he dado.»«De manera que en todas las provinci as delPerú y lugares sujetos a V. Magestad he tenido 3mi cargo muchas doctrinas y repartimientos,los cuales he bautizado mas de ochenta mil äni°— 519 —Mas y casado mas de treinta mil y hecho mas dedoscientas iglesias» (1).Con razón dice el moderno historiador Ballesterosque la misiones de Fray Diego tienen tantaimportancia política como religiosa ('2). Este me-Inorial lo presentó el célebre misionero en Madriden 1585 y Felipe II tuvo con él larguezas noacostumbradas. Volvió luego al Perú con otrosVeinte misioneros y vivía aún en 1592 (3):A su lado y colaborando en sus grandiosaseinpresás figuran otros muchos religiosos nuestros,entre los cuales citaremos a Fray Antoniode Avila, Fray, Sebastián de la Fuente, FrayMiguel Troilo, apóstol de Urubamba, etc. (4).No menos brillante que en el Perú fué la aceiónde los Mercedarios en Centroamérica, segúndemuestra plenamente la información hecha en15.51 " en Guatemala por el P. Dardon y en la quedepuso el Obispo Marroquín y las personas másineortantes de la región (5). El Obispo declara«que son los primeros que poblaron casa y perseveraronen esta ciudad de Guatemala, y ciertohacen todo lo que pueden y han hecho muchofruto, Vuestra Magestad los favorezca con mandarque se les acabe la casa».La Audiencia de Guatemala escribía al Em-(1) A. G. I., 75-6-1.(2) Historia de España, IV, 2. » part. 661.(3) Pérez: Mercedarios que pasaron a América, página46.(4) Boletín de la Ord. 1931, pág. 98.(5) Pérez: Obr. cit. 90.

— 2o —El Venerable Fray Antonio bravo, Apóstol de Guatemala.(Cuadro madrileño.)perador en Agosto de 1554: «Los religiosos de 13Orden de Ntra. Sra. de la Merced han servidoestas partes a *Dios y a V. Magestad en la j118-truccion de los naturales en nuestra santa fe Y— 21 —fueron los primeros que poblaron monasterio enesta ciudad en tiempos de Don Pedro de Alvarado,y los primeros que tuvieron escuelas y enellas mostraron a los hijos de los principales y delos naturales de estas partes la doctrina cristianalos comenzaron a poner en policia, y les enseñarona leer, escribir y cantar y ayudar a misaY otras muchas cosas convenientes a nuestra feYsalva.ción de sus almas, y esto no solo en estaciudad pero en la provincia de Chiapa y Honduras»poblado en esta ciudad un monasteriodonde los religiosos que en él residen celebranlos divinos misterios y administran los sacramentosasí a los naturales como a españoles ynegros, de que es Nuestro Señor muy servido; yPray Marcos de Ardón, Comendador que al preen te es y Vicario de este distrito y otros religiososque con él estaban, hicieron lo mismo eneiliapa poco después que se pobló de cristianos,Y fueron parte para quitar muchos ritos y sacrificiosdiabólicos y destruir muchos ídolos de diversasmaneras y otros pecados nefandos, e hizoedificar iglesias y templos y decir misa, dondese administran los sacramentos, y los puso enPolicía; y él mismo por ser tal persona fué nombradomuchos días por protector y defensor delos te naturales, y en esto hizo grande fruto y sirvió a V. M. en cinco o seis años que fuó pro-«Tienen pobladas otras casas en el obispadode Honduras, donde tienen escuelas y enseñan la

—doctrina cristiana y administran los santos sä-cramentos,etc.» (1).El Obispo Marroquin elogia también grandementea los PP. Francisco de Almaraz y Juan deZárate, entrambos famosos predicadores, y elP. Francisco sabía con eminencia la lengua me"xieana e importó mucho su buena doctrina paralos indios que la entendían.En otra información de 1562 declara un testigohaber visto impresa gran parte de la doctrinacristiana en lengua montey (una de las deGuatemala) por el P. Antonio Bravo, de etlY°celo y maravillosas conversiones se hacen lenguaslos cronistas mercedarios (2).El P. Hardä en su Biblioteca Mercedaria citadocumentos en que consta que el P. Bravo vivíaen 1564 y fué uno de los primeros provincialesde aquella región, falleciendo por 1569. Hablatornado el hábito en Santo Domingo y despué s deconvertir millares de indios en Centroaméricaestuvo algún tiempo en el Perú, de donde volviópor orden de los superiores a Guatemala. Alganoscronistas le suponen ahogado al bajar a Lima,pero consta que vivió después muchos aflOS•En 1550 y 51 pasaron a Chile los PP. AntonioCorrea, Antonio de Olmedo, Miguel de Benaventey Antonio Rendon y Sarmiento, que organizaronallá las primeras cristiandades utilizando la m úsicapara atraer a los indios, sobre todo el P. Correa'Muerte del Padre Cristóbal de Albarrán.(1) «La Merced» de 1929, pág. 96.(2) Ibid. 97.

NA —ni P. Rendon escribía a Felipe II en 1513:«En veintitres arios que esta sagrada religion enesta provincia está fundada nos hemos ocupadode descargar la Real conciencia de V. 1VIagestad,hemos bautizado, predicado, confesado, socorridoa los pueblos que estaban mas habla de diezmeses sin sacerdote, que se les habia huido, Ynosotros por tierra de guerra y con riesgo de la$vidas hemos acudido a favorecerlos, sin querernadie socorrelles».« Osaré decir a V. Magestad. que . hay religi o-sos entre nosotros que despues que hay Indiasdescubiertas, en veintisiete arios que ha que e s-toy en ellas ningún sacerdote, clérigo ni religio"so en servir a V. Magestacl se le ha 'aventajadoy muy poquitos llegado» (1).En el verano de 1566 murió a manos de lesindios chiriguanaes, no lejos de Santa Cruz de laSierra,. el P. Cristóbal de Albarrán, Comendadorde la Asunción, que formando caravana con elObispo y otros vecinos subía al Perú a fin deasistir al Capítulo provincial. El P. Albarrán,según testigos presenciales, había trabajado enaquellas provincias más de treinta -arios doctrinandoy cristianando a muchos indios parientesde los chiriguanaes. Don Lorenzo Suárez de Figueroa,siendo gobernador de Santa Cruz de 13Sierra, mandó ahorcar a nueve de los asesinesdel misionero y de otros cristianos (2).(1) Pérez: Mercedarios..., 264.(2) Pérez: Mercedarios..., págs. 299-301.CAPITULO XXVIIILas visitas apostólicas y la vacante del generalato(1567-1574)JMARIO: Ejecución de las reformas de Trent,—Eleccióndificil del Maestro Papiol.—Su muerte.—Memorialesdel Maestro Carrillo—Capitulo provincial deCastilla en 1569. —Nuevos visitadores dominicos. —Monjas de Sevilla.—Capitulo de Aragón en 1571. —Zumel, catedrático de Salamanca.—El Maestro Castillo,Visitador.—Capitulo general de Guadalajara en 1574.La provincia de Francia.—Las de América duranteestos arios.El Papa Santo y el Rey Prudente coincidíanen el deseo vehementísimo de que la disciplina.,,tacrn orednatdea. Trento se aplicara pronta y enérgicEn las Ordenes en que había reformados yconventuales la reforma se encargó a los primeros, que la aplicaron con todo rigor a sus cofrades. Tal sucedió en las Ordenes de Santo Donlingoy San Francisco. Los benedictinos yatI,leenmeoiass.visto cómo se aplicaron el remedio atiempo aunque no faltaron protestas y resis-Perjudicó gravemente a la Merced no tener1 -na Congregación oficialmente reformada, aun-

526 -que hubiera en ella muchísimos religiosos tnos. Por eso muchos anhelaban la formaciónla descalcez, pero tal anhelo no se cons4hasta 1603, cuando había perdido su importary se habían disipado muchas ilusiones.Felipe II, por cuya mano corría la reformade los benedictinos, pidió que se dejara a saarbitrio el escoger los reformadores para lasotras Ordenes, pero San Pío V, que veía con dis"gusto tanta ingerencia del poder real en lascosas espirituales, por breve del 15 de Abril de1567 (en vida, por tanto, del Rvdmo. Puig) enc oy 18'-mendó la visita de la Merced, el CarmenTrinidad a los Ordinarios, acompañados de dosreligiosos dominicos escogidos por ellos en cadadiócesis (1). En otras Ordenes había comenzadoantes.Las visitas hechas de ese modo carecían deplan y de vista de conjunto, y su resultado deblaser fatalmente la confusión. Para mayor desg racialos Obispos, ocupados con frecuencia en n e-gocios temporales, dejaron el asunto en triall°5de sus Provisores, necesitadísimos de refornlamuchos de ellos e incapaces de darse cuenta de lasituación.En Barcelona el Obispo encomendó la 'visi tade nuestro Convento al Maestro Papiol, que eya Prior en 1. 0 de Mayo de 1567 por fallecirnierdel Maestro Mata.Fallecido el Rvdmo. Puig el 22 de Noviernb(1) Simancas: P. R. 23-61.uedeuióciaratore— 527 —de 1567, el Prior convocó a los electores para el20 de Enero de 1568. Vino a intimar la convocatoriaa Castilla Fray Sebastián Belträn, peroestando en el Convento de Madrid recibió delEl Maestro Fray Matías Papiol.(De la serie del P. Talamanco.)4e 37 orden de no moverse de allí hasta nuevoa'v180. La cédula lleva la firma del Secretario4abrie1 de Zayas, muy afecto a la Merced y alol-nendador de Toledo P. Carrillo (1).Felipe II pidió al Papa que suspendiera la(1) Arch. de Navarra: Mercedarios, leg. 416.

— 528 —elección de General hasta que estuviera term i-nada la visita apostólica, pero el breve dirigidoal Obispo de Barcelona salió al día siguiente dela elección. A ésta faltaron los representantes deCastilla, pero asistieron, además de los electoresde Aragón, los de Francia Maestro Penxinat,Provincial; Fray Juan Gallofi, Comendador deTolosa, y Fray Juan del Aubespin, los cuales aclamaronGeneral al Maestro Papiol, de cuyos m é-ritos hacen grande elogio en la súplica dirigidaal Papa a fin de obtener la confirmación (1).Fué a Roma con esta Comisión Fray JerónillinAntich, que encontró al Papa bien dibpuesto,pero nada pudo obtener ante la oposición delRey. Entre tanto, el General electo falleció enZaragoza el 23 de Julio de 1568, a los cincuentay cinco arios de edad, y el Rey se apresur ó 3pedir la suspensión de nueva elección (2) . LaOrden quedó de ese modo sin General /la°1574.El 21 de Julio de 1568, el embajador en Romamanifestaba el deseo del Papa sobre que se le enmunicaranlas visitas para tomar acuerdos, y el17 de Agosto de 1569, el Rey escribe al emba jadorque las visitas estaban acabadas y mandabaentregar los procesos originales al Nuncio, Per°añadía de su mano: «Yo estoy tan cansado des;tas cosas y de ver que en lugar de hazerseprovecho que yo pretendía, sea todo al contrarl°'(1) Ibid.(2) Arch. Embaj. Española en Roma, leg. 34.— 529 —que no tengo que dezir sino remitirme a ésta. Yoel Rey» (1).Ya en la primavera de 1568, el Comendadorde Toledo, P. Carrillo, había dirigido a Felipe IIUn memorial sobre el régimen general de la Orden,ampliando luego sus informes en lo referentea la provincia de Castilla en otros dos memorialesescritos por orden del Rey (o del secretarioZayas). Carrillo preveía que de las visita§ no sesacaría nada en limpio.. Opina también que antes de emprender la reformade los conventos de la corona de Aragón,llevara a cabo la de Castilla, donde el dañoera menor y el remedio más fácil, «para quehaya fundamento y principio para proceder a lac ura de lo mas estragado; y en lo de Castilla noserá tan dificultoso como algunos lo imaginan,Porque está muy gran parte del camino andad°,y con un fiero que se leS haga no habrá cosa.illäs blanda, y mas como han visto agora lasorejas al lobo; demás de que los religiosos desil» son harto blandos y doctrinales, uf inPlurimum, y aási en las otras provincias nohalará más que hazer sino reducillos al estilolesta» (2).h En esta apreciación coincidían el Rey y elapa con respecto a todas las Ordenes religiosas,e°1110 demuestra la extensa correspondencia en-(1) Ibid.(2) Vázquez: La Merced a mediados del siglo XV y XVI,"g . 103.34

— 530 —tre España y la Santa Sede (1). Ya en Diciembrede 1566, escribía de Roma el embajador Recfn e-sens: «Y sabe Su Beatitud muy bien que en Cataluña,Aragón y Valencia, es el daño y neces iEs--dad mayor que en ninguna otra parte depaña» (2).. También se pidió informe al Provincial Ma estroPeñaranda, que coincide casi enteramentecon el P. Carrillo, aunque estaban algo dista n-ciados, pues éste contaba por segura su elecciónal provincialato, habiendo reunido casi la m i-tad de los votos en 1565. No era pequeña honrapara la Merced la estima que se hacia de sus superiores,cuando los Provinciales de otras O rdenesestaban en la cárcel.Convocóse el Capítulo para Guadalajara el 2°de Junio de 1569, y , a titulo de visitador y refgmadorpresidió D. Jerónimo Manrique de Lara'Vicario general de Toledo., grande amigo del padreCarrillo, que salió elegido por 38 votos de 46'El acta original supone, sin embargo, que el Presidentefué el Maestro Fray Juan de Móst0le.57primer definidor, a falta del Maestro Pefiarandalque no asistió.Salieron definidores el Maestro Fray A1°11,s°Muñoz y.Fray Cristóbal de Soto, el Presenta°Fray Miguel de Castro y Fray Blas de Villagarcía. El Maestro Peñaranda había enviado a R°1113(1) Tal es el titulo de la obra en 4 tomos del P. L'aciall°Serrano.(2) Ob. cit. I, 108.— 531 —a su secretario Fray Francisco Maldonado, paraque gestionara la suspensión del Capitulo y de lavisita, que tan mal resultado auguraba. Duranteel Capitulo se recibió una carta del Procurador,que se retrata en ella de cuerpo entero. Tenialas mejores esperanzas, pues el Papa le habíaPrometido dar por terminada la visita, y gozabade la confianza del prefecto de ella, CardenalBoncompagni, después Gregorio XIII.El P. Maldonado muestra aquí un ardentísimoamor a la Orden, con gran deseo de evitar eldescrédito que la visita, hecha a veces atropelladamente,arrojaba sobre ella y sobre las demás.Pero el nuevo Provincial no se fiaba de él,en carta firmada por todos los definidores, len'ancló regresar a España, como lo hizo inmediatamente,siendo nombrado Comendador de Málaga(1).Para que el nuevo Provincial entrara desdeluego en funciones, el Rey había pedido al MaestroFray Bernardo Durán, Prior de Barcelona yVicario general de la Orden, que diera comisióna un religioso de Castilla para confirmar al electo. Durán contestó que la Concordia de Guada-Tajara había terminado con el Concilio de Trento,Y por consiguiente la provincia no . tenia ya derechoa elegir Provincial, mas por complacer alRey nombraba Vicario general en Castilla al PatireCarrillo.. Consérvanse •todos los originales deesto s documentos, con apreciaciones graciosasO) Sili3saneag.,P..-...R,,..23-49.

— 532 —del Dr. Velasco, consejero muy atendido de FelipeII en lo relativo a la Merced (1).A San Pío V disgustó mucho la presencia deun seglar en nuestro Capítulo y escribió al Nuncio,quejándose amargamente de ello, y para terminarcon el desbarajuste nombró visitadoresapostólicos de la Merced el 20 de Agosto de 1569 ados religiosos dominicos: en Castilla, al MaestroFray Felipe de Meneses, Rector del _Colegio deValladolid, y en Aragón al Padre GuillermoMontaña, Prior de Gerona, con orden de recogerlas visitas hechas e informarse de ellas ode hacer otras nuevas, si lo juzgaban conve-niente.Así terminó infelizmente la primera etapa delas visitas apostólicas, aunque los Mercedariosfueron tal vez los menos perjudicados por ellas.Desde entonces las cosas marcharon por mejorcamino.El Maestro Fray,llernando del Castillo, queanduvo en todos estos negocios y sucedió en 1573a su hermano de hábito Padre Meneses, en lavisita de Castilla, escribía en 1576 a Felipequejándose de la forma en que se habían llevadoalgunas vistas y particularmente la de los franciscanos,poniendo en mitad del arroyo sus defectos,con grave escándalo y sin necesidad. El,que conocía bien la documentación de su ordende Santo Domingo, afirma que las órdenes religiosasestaban en peor situación en tiemp o de(1) Arch. de Navarra: Mercedarios, leg, 416.— 533 —El Maestro Fray Pedro Carrillo.(Por E. González.)los Reyes Católicos, y por consideración a losPocos buenos que en ellas había, cuidaban aquellosMonarcas de corregir las faltas de los más,sin infamar a la colectividad. Mas ahora esta-

— 534 —ban invertidos los papeles, siendo los buenosmuchos más en número que los inobservantesy, sin embargo, el escándalo era mucho mayor(1).El cronista Fray Bernardo de Vargas, querecibió el hábito en Sevilla, de manos del MaestroCarrillo, dice que éste era pequeño de cuerpo,pero de grande espíritu y de inagotables energíaspara el bien. Había nacido en la Rioja enun lugar llamado Galilea.En Sevilla vió el Padre Carrillo los trabajosde otro Maestro y famoso predicador Fray Antoniode Velasco, para formar un convento de clausuracon las beatas de la Orden, idea realizadaen tiempo del Maestro Peñaranda, con bula deMayo de 1568, pero las Constituciones fueron definitivamenteaprobadas en 1570 por el MaestroCarrillo y otros dos comisionados por el Capítulo,o sean el Maestro Fray Alonso Muñoz, Comendadorde Sevilla, y el presentado Fray Miguel deCastro, Comendador de Cazorla.Fueron las fundadoras del nuevo convento,que tanto había de honrar a la Orden, DoñaMaría Zapata, Doña Beatriz de las Roelas y DoñaFrancisca Martel, cuya vida escribió el Rever endísimoGuimerá,n (2). Al lado de este conventevivió el Maestro Fray Gaspar de Torres, desde(1) López (Fr. Juan): CLiarta parte de la Historia deSanto Domingo, 731.(2) Apéndice a la Regla y Constituciones de las Monia9Recoletas de la Asunción. Valencia, 1614.— 535 —antes de su elevación al episcopado en 1570 hastasu fallecimiento el día de Reyes de 1584, recibiendomodesta sepultura en su iglesia bajo unalápida que él mismo diseñó y que aún se conserva.Su nombre figura en muchos papeles de laComunidad, cuyo fervor merecía todo el cariñodel Obispo de Medauro.El Prior de Barcelona, Maestro Durán, bajola presión del visitador Padre Montaña, celebróCapitulo provincial en Zaragoza el 8 de Septiembrede 1571, en el que fué definidor por Catalufia,el Maestro Fray Juan Calvo, ya muy anciano,que había sido Procurador en Roma, y cuyos serviciosagradece el Capítulo nombrándolo hijo dela corona de Aragón y de Barcelona. Los otrosdefinidores fueron: por Aragón, Fray Pedro deAngulo, Comendador de Zaragoza, y por Valencia,Fray Asensio Lagaria.Reservóse en él la admisión de novicios alGeneral o Provinciales, y prohibióse en absolutola admisión de religiosos de otras órdenes, cosamil veces acordada, y siempre mal cumplida, aPesar de los gravísimos daños que ocasionó. Precisamentepor estas fechas el Padre Durán dió elhábito de la Merced en Tortosa al apóstata dominicoFray Vicente Mendia, que años adelantetué el mayor azote de la Orden.Impusiéronse graves castigos a algunos religiosos,y entre ellos a Fray Bartolomé de la Hoz,Comendador de Lérida, destierro y cárcel; ahuy Gabriel Roca y a Fray Vicente Vergara, loMismo; a Fray Juan Lupi, Comendador que había

— 536 —sido de I3arbastro, destierro y cárcel en Orihuela;a Fray Juan Alfonso... etc. (4.También hizo el P. Duran bastantes visitas,algunas de las cuales parecen destinadas a disiparla mala impresión de la yisiOs apostólica.Las cosas más desagradables aparecen en elreino de Valencia, donde los religiosos observantesse quejan de la lenidad de los superiores quoSepulcro del Maestro Calvo, en el Puig.dejaron llegar el mal a extremos lamentables.Del Maestro Calvo dicen que era personalmentebueno, demasiado bueno, dejándose engañar porlas pr omesas de los culpables, que pasada lacorrección volvían a sus malos hábitos (2).Como es natural, en las Ordenes numerosashabía más que corregir y en ellas se produjeronlos mayores choques. La mencionada correspon'(1) A. C. A. Monacales, '2.667.(2) Ibid.— 537 —dencia diplomática entre España y la Santa Sedes suministra de ello abundantes ejemplos, aun-las dificultades no terminaron con el pontifi-qneeado de Pío V, a quien se refiere esa obra.Los visitadores continuaron su labor durante.einco años valiéndose . a veces para ella de religiososde la Merced y de algunos Dominicos. ElPadre Carrillo ejerció su , cargo de Provincial conl'hucha libertad,. haciendo la visita de los conventosy urgiendo la observancia mucho másque su antecesor el Maestro Torres, a quienhabía reputado duro. Las actas del convento deIluete, donde hizo dos visitas en poco más de unarlo, son edificantes a este respecto'.Don Jerónimo Manrique escribía. al Secretaibdesde el Capítulo de Guadalajara, quehabía recomendado al nuevo Provincial la mayorbenignidad con su antecesor Peñaranda y con elhector de Alcalá, sobrino de Rosales, o sea elPadre Francisco Zumel. Muy . conforme a losdeseos de éste, lo hizo volver a Salamanca paragraduarse allí y hacer oposiciones, en las quePronto ganó una cátedra de Filosofía. Carrillo leayudó en su pobreza con 150 ducados para elgrado de Maestro, dando traza para obtenerOtros 200 con renunciar el graduando su legítimaen favor de una hermana suya (1).U0deCumplido el trienio del P. Carrillo, fue elegíparasucederle en 1572 el Maestro Fray JuanCovarrubias, Comendador de Burgos y famosoI ) «La Merced» de 1928, pág. 387.

— 538 —predicador, que gozó también de gran libertad deacción a pesar de la visita. Fueron sus definid o-res Fray Domingo de Illana, Fray Rodrigo deBustos, Fray Antonio de Velasco y Fray Rodrigode Arce (1).El Visitador apostólico P. Meneses, cuandoentendía en la de nuestros conventos de Galicia,falleció en el de su Orden de Santa Marta deOrtigueira en 1572, y el 2 de Junio del arlosiguiente, fué nombrado para terminar la con*sión el Maestro Fray Hernando del Castillo, bienconocido como historiador de su Orden de Pred iy pru-cadoresdencia. Según el breve de su nombramient°hombre de gran talento, espíritufaltaban sólo por visitar tres o cuatro conv entos(2).Cuando los dos visitadores hubieron termina'do su tarea, presentaron el resultado al Pap a Yal Rey, que para asentar la reforma con In°suavidad quisieron fuera aceptada por la Ordenen Capítulo general, que al efecto convocaronlos visitadores para Guadalajara el 14 de Soviembrede 1574, con letras despachada s enMadrid que debía intimar al Prior de Barcelona'el Maestro Fray Juan Enríquez, más tarde Pcurador general en Roma.La convocatoria fué bien recibida en Castilla,donde los visitadores encontraron el carnin9,llano, como había previsto el P. Carrillo. N o asi-— 539 —en Aragón y sobre todo en Cataluña, donde eIPadre Montanya, a pesar de ser catalán, nacidoen el Pirineo, tropezó con grandes resistencias,que se hicieron más patentes en el Capítulo.Según indican sus actas no se hicieron redeneioneseñ las provincias de Aragón por estosaños, pero sí en la de Castilla, aunque menosnumerosas de lo que suponen algunos autores,siendo comisionado para ello el Maestro FrayRodrigo de Arce, a quien veremos adelante ocu-Pado otras dos veces en este ministerio y gobernandola Provincia (1).Entre los sucesos memorables de estos añosdebe destacarse el hallazgo en Barcelona en 1574del cuerpo incorrupto de un religioso nuestro de1°s primitivos: Fray Bernardo de Corbera, segúnla opinión común. En la misma capilla de San10 37 , donde se descubrió ese cuerpo, subsistíaa un a fines del siglo XVIII el sepulcro del tercer4.enera1 San Román, que no debía confundirse%).. el anterior (2).Las visitas no alcanzaron más que a las pro-\Indas de España. En Francia continuaba gobernandoel P. Penchinat en medio de las conmoionesde las guerras de religión, en que perecieronvarias de nuestras casas, padeciendo otrasgravísimos daños, aunque merced al prestigio yen ergía de hombres, corno Gallofy y Tremoulié--l'es , lograron salvar los escollos.(1) Vargas, II, 5.(2) Ibid. I, 437.(1) Ibid.(2) Gazulla: La Patrona de Barcelona, pág. 151.

— 540 —En Lima era Provincial el P. Juan de Vargas,y lo merecía por su talento y constancia en de"tender aquellas fundaciones hasta erigirlas enprovincia independiente. En 1565 salió de Se villala segunda- expedición de 13 religiosos, queno habían podido aviar en 1563 para 'ir con elP. Vargas, y en los años siguientes van al Ferilotros Mercedarios, entre ellos el P. Diego degulo, Visitador, en 1570. Son estos años de grandeactividad para nuestros Misioneros del Perú/cuyos nombres citamos ya.El P. Angulo fué elegido Provincial en 15747y gobernó a los 1VIercedarios con extraordinari°celo, mereciendo ser reelegido otro cuadrieni°.En 1574 pasó a Lima como Lector de Arte s elP. Alonso Gómez Bolofío, que en 1580 fué le Visitadora Guatemala (1).En Tucumán, que dependía de la provin'del Cuzco, se distinguió por estos años el PadreLuis de Valderrama, quiteño, que figura al lad°del Gobernador Diego Pacheco y del sucesor cl°éste D. Lorenzo Suárez de Figueroa, con el quetomó parte en la fundación de Córdoba. En 151°existían en Tucumán tres conventos de la Merced„ a saber: el de Santiago del Estero, el de 113-lavera de Esteco y el de San Miguel de Tucumán'despoblado a la sazón este último por falta de religiosos,que no pasan de media docena en to€13la gobernación, aunque trabajaban como Si fue'ran ciento.(1) Prez: Mercedarios..., 211.— 541 —La Provincia de Chile tenía a su frente en1536 al P. Rodrigo González de Carvajal que,con el Comendador de Santiago P. Antonio Correa, otorga en el mes de Abril una escriturasobre las cargas de esta casa con su fundadorJU an Fernández de Alderete, ex Regidor de laciudad y ahora donado en el mismo convento (1).Gobernaba todavía el P. Carvajal en 1569, peroen 1571 le había sucedido ya el P. Antonio RendónSarmiento, que con su homónimo el P. Correah abía trabajado heroicamente en la conversiónde los araucanos y otros indios del Sur, cuyas sim-Patías se captaron, hasta el punto de andar libre-'l'ente en medio de ellos en plena sublevación.Encerráronse luego en las ciudades y fuertesitiados para asistir espiritual y corporalmente asti s defensores cuando los curas los abandonabanhuyendo de peligros y privaciones sin cuento. La.his toria del P. Correa en Concepción y la delPad re Rendón en la Imperial y en Arauco, essU Perior a todo elogio, según afirman los héroesde aquellos sitios, los más terribles, quizá, afrontadospor seres humanos (2).En 1580 era el P. Rendón Provincial de/.(12del que había sido desmembrada recienentela Provincia de Chile (3). Vivió hasta.tetoedad muy avanzada.(1(2hji(3Gazulla: Los primeros Mercedarios en Chile, 155.Gazulla (Policarpo): Los primeros Mercedarios en205.Nrez: Mercedarios que pasaron a Am6rica, 303.

ÍNDICEPrólogoObras citadas con más frecuenciabivisiónPägs.xiPRIMERA ÉPOCAORDEN MILITAR (1 2 1 8-1 3 1 7)Capitulo I.—Fundación y primeros pasos, de la Orden13Capitulo H.—La Orden hasta 1245 37Capitulo 111.—Ultimos años y muerte de San PedroNolasco51Capitulo IV. —Generalato de Fray Guillermo de Bas(1249-1260). 65Capitulo V.—Generalato de Fray Bernardo de San'toman . y Segundo de Fray Guillermo de Bas(1260-1270)Capitulo VI. —Generalato de Fray Pedro de Amer(1271-1301). 101Capitulo VII.—Sucesos más importantes del generalatode Fr. Pedro de Amer 121*Capitulo VIII.—Pleito del generalato 139Capitulo IX.—Ultimos años del gobierno laical. . . 155SEGUNDA ÉPOCAGENERALES CLÉRIGOS VITALICIOS (1317-1574)87aPitulo X.—Elección de 1317. Cambio dé régimen. 171%Pituló XI. —La Orden durante el gobierno del -P . kibert (1318-1330) 191

Capitulo XII. —Generalatos de Fray Berenguer Cantull,Fray Vicente Riera y Fray Domingo Serrano(1331-1348)Capitulo XIII. —Generalato de Fray Ponce de Barellis(1348-1364)Capitulo XIV.—Generalato de Fray Nicolás Pérez(1365-1401).Capitulo XV.—Actividad de la Orden durante el generalatode Fray Nicolás PérezCapitulo XVI.—Generalatos de Fray Jaime Tauste(1401-1405) y de Fray Antonio Caxal (1405-1417).Capitulo XVII.—Generalatos de Fray Bernardo dela Plaigne (1417-19) y de Fray Jaime Aimerieh(1419-1428)Capitulo XVIII. — Generalatos de Fray AntonioDulhin (1429-1441) y de Fray Pedro de Huete(1441-1452)Capitulo XIX.—Generalato de Fray Nadal Gaver(1452-1474)Capitulo XX. —Generalatos de Fray Lorenzo Company(1474-79) y de Fr. Antonio Morell (1480-92).Capitulo XXI.—Generalato de Fray Juan Urgel(1492-1513)Capitulo XXII.—Generalato de Fray Jaime Llorensde la Mata (1513-1522)Capitulo XXIII.—Generalato de Fray Benito Zafont(1522-1535)Capitulo XXIV.—Generalato de Fray Pedro Sorell(1535-1546)Capitulo XXV.—Las provincias de Aragón y Franciadurante el gobierno de Fray Miguel Puig(1546-1567)Capitulo XXVI. —La provincia de Castilla duranteel gobierno del Rvmo. Puig (1546-1567) .....Capitulo XXVII. —La Merced en América duranteel generalato del Rvmo. Puig (1546-1567) . . • •Capitulo XXVIII.—Las visitas apostólicas y la vacantedel generalato (1567-1574)Págs»207227245267283307325349'371391409129147169'187i05MANUALDE HISTORIA DE LA ORDENDE NUESTRA SESORA DE LAMERCEDPORFRAY GUILLERMO VÁZQUEZ NÚÑEZDE LA MISMA ORDENDOCTOR EN FILOSOFÍA Y LETRASTOMO II(1574-1935)MADRIDPP. MERCEDARIOSCALLE DE SILVA, 251936

PUEDE IMPRIMIRSE:Roma 24 de Diciembre de 1935.41 Rvdmo. P. Juan del O. Garrido,Maestro General de la MercedFR. JUAN DEL C. GARRIDOMAESTRO GENERALNIHIL OBSTAT:DR. MARTÍN DE LA TORRECENSORFR. AMERIO S. BLANC°PRO-SECRETARIOMadrid 25 de Abril de 1936'IMPRIMASEDR. JUAN FRANCISCO 1\1011ÁI4VICARIO GENERALHan pasado cinco años desde que ofrecía V. Pd. 1?vdma. el primer tomo deesta Historia, años azarosos como pocosen la Historia de España, llenos de recelospara la Iglesia y para las Ordenesreligiosas. La Provincia mercedaria deCastilla no ha cesado de sentir la manobenéfica y cariñosa de V. Pd. Reverendísimaque se ha ofrecido a recoger encualquier momento a nuestros jóvenes,utilizando las generosas disposiciones detodas las provincias de la Orden.Reciba con este segundo tomo el perennetestimonio de nuestro agradecimiento.FR. GUILLERMO VÁZQUEZPerrol 10 de Mayo de 1936.EDITORIAL CATÓLICA TOLEDANA, JUAN LABRADOR,6, Tul--15/7

PROLOGOEsta segunda parte del Manual es mucho más fácilque la primera, pues abundan las fuentes manuscritase impresas. Sin los trastornos y molestias que la Re-Pública ocasionó a todos los españoles y muy particularmentea los frailes, debía estar impreso este tomohace tiempo.Amigos bien intencionados me han sugerido laidea de sustituir la serie de generalatos, que ahoraduran solamente seis arios, por cuadros que resumieranlas diferentes actividades de la Orden. He vistoese sistema en los manuales publicados ha poco por°tros institutos, pero la confusión que produce vercitados en el mismo párrafo a individuos que vivierona varios siglos de distancia, me parece lamentable.eontinuaré, pues, con el mismo orden cronológico deJa primera parte, lo cual permite dar a cada época y4 sus hombres lo que merecen.Se quejan otros de que consagro poco espacio alo s santos y personajes ilustres. Procuraré satisfacer1-os quejosos con el libro que preparo de Varonesililstres de la Orden, algunas de cuyas semblanzas,Juntamente con sus retratos, han ido apareciendo enMerced, siempre dentro de la brevedad, pues estoyPersuadido de que las cosas breves son casi las únicasqU eentierpeonrypernobira.bilidades e d ser leídas, en el presenteYA algunos ha desagradado la importancia quetieuen las pasiones humanas en la vida de la Orden.

VITambién a mí me desgrada sobremanera, y desearíaque en lo futuro no fuera así, pero la verdad es laprimera condición de la Historia. Por otra parte, quilas pasiones de los hombres, apenas habría que-tadascontar.Las redenciones de cautivos, bien documentadasdesde ahora, podrían llenar por sí solas un gran volumen,pues abundan en episodios interesantes. No nleextenderé, sin embargo, en ellos, pues son ya conocidosen parte por la Historia de las Redenciones, delP. Gari. No faltan omisiones y equivocaciones ellella, aun en la parte moderna, y además no suelecitar las fuentes. Procuraré hacerlo yo, a fin de prepararel camino al futuro historiador de las redenciones.AUTORESMÁS CITADOS EN ESTE TOMO II, ADEMÁS DELOS INDICADOS EN EL IBARRIGA (Fr. Victor M.).—Los Mercedarios en el Perú enel siglo XVI. Documentos inéditos del Archivo deIndias. Roma, 1933.BLANCO (Fr. Ameno S.).—Catálogo de los procuradoresgenerales de la Merced. Roma, 1932.EXTRAORDINARIO DE LA REVISTA MERCEDARIA CHILENA, conmotivo del VII centenario de la fundación de la Merced.Santiago, 1918.GARI (Fr. José A.).—Biblioteca Mercedaria. Barcelona,1875.GAEI (Fr. José A.). —Historia de las redenciones... realizadaspor la Orden de la Merced. Barcelona, 1873.IlISTOIRE DE LA MERCY PAR LES PP. DE LA CONGREGATIONDE PARIS.—Un gran tomo en fol. Amiens, 1685.LEDESMA (Fr. Francisco de).—Historia del convento deAlarcón. Madrid, 1709.1IAEDÁ (Fr. Antonio A.).—Biblioteca Mercedaria. Ms. originalen la Academia de la Historia y copia del PadreArqués en la Buena Dicha.NEYLA (Fr. Francisco).—Historia del convento de San Lázarode Zaragoza. Barcelona, 1698.PAREJA (Fr. Francisco).— Crónica de la provincia de laVisitación, o México, escrita en 1688 y publicada en1883.TÉLLEZ (Fr. Gabriel).—Historia original de la Merced.Ms. original en la Academia de la Historia y copia enla Buena Dicha. Muy importante para los años delcélebre autor.TOLEDO (Fr. Bernardino).—Estudios históricos de la provinciade Tucumán. Tres tomos. Córdoba, 191 8.

TERCERA ÉPOCALOS GENERALES DE SEIS AÑOS (1574 A 1870)PRINCIPALES ARCHIVOSCONSULTADOS PARA ESTA OBRAA. H. NL—Archivo Histórico Nacional, de Madrid.A. C. A.—Archivo de la Corona de Aragón, en Barcelona.Archivo de Navarra, en Pamplona.» Histórico de Protocolos, de Madrid.Universitario; de Salamanca.del Procurador general de la Merced, Roma.Vaticano.departamental, de Tolosa.de Burdeos.de Montpellier.Nacional, de Paris.Van citados con frecuencia en este tomo y en el I, Per°cuando los documentos han sido publicados por mi o porotros, remito sólo al impreso.CAPITULO PRIMEROLas reformas de 1574. Generalatos de FrayPrancisco de Torres y Fr. Francisco Maldonado(1574-1582)SUMARIO: Actas de 1574.—Generales de seis arios y provincialesde tres.—Limosna de los cautivos.—Grados.—Provincias de América.—Resistencia en Cataluña.—Ei Rmo. Torres.—E1 P. Maldonado, secretario.—E1P. Tremouliéres.—Maldonado general.—Visita en todaEsparia.—Idem en América.—Redenciones. — Venerables.—Provincialesen América.Sólo el Capitulo de 1317 gana en importanciaal de 1574. Los acuerdos que en éste se tomaronestaban contenidos ya en una instrucción de Su8antidad, ajustada casi en todo a lo que en 1568había propuesto al Rey el Maestro Fr. PedroCarrillo, Comendador entonces de Toledo y Pro-Vincial luego de Castilla.Establécese un régimen uniforme para todala Orden, renunciando Castilla a la bula de laConcordia. El gobierno de los Generales duraria2ei5 años, no pudiendo ser reelegidos sino des-PUés de otros dos Generales confirmados. El Generaldebla visitar toda la orden dos veces, y alos tres años celebrar un Capitulo intermedio.

— lo —Con esto se pretendía devolver a los Capítulossu antigua importancia, pero el resultado fuemediocre y los intermedios duraron poco.Los Capítulos electivos serían alternativamenteen la corona de Aragón y en la de Castilla;los Generales deberían ser también una vezde Castilla o Indias y otra de Aragón, Italia oFrancia.Consérvase al Prior de Barcelona el vicariatogeneral en la vacante y su elección por la Com'nidad, pero sólo por un trienio, como los conv entualeshabían pretendido ya en tiempo del M aestroZafont.Si el General faltaba cuatro meses antes dePentecostés debería convocarse a los electorespara esta fiesta, y si faltaban menos de cuatromeses, se dejaba la elección para Nuestra Señorade Septiembre. Si también faltaban menos decuatro meses para el 8 de septiembre, debería'diferirse la elección hasta Pentecostés del alesiguiente.El General electo comenzaría a actuar irnnediatamente,a título de Vicario, hasta, obtener laconfirmación apostólica. Todas las eleccionesdeberían ser por escrutinio, quitada la aclaM a-ción de que tanto se había abusado en la EdadMedia.Por cada provincia tendrían voto el Provincialy dos Definidores. Para compensar la reuniónde las tres provincias de la corona arag°nesaen una sola, concédese voto, además, a losComendadores de Gerona, Zaragoza y Valencia'1- 11 --y seis votos también a Castilla. Insinúase la ideade separar de ésta la provincia de Andalucía,como en otras órdenes, pero se deja para mejorOportunidad.Alégase para reunir en una sola las provinciasde Cataluña, Aragón y Valencia, la escasezde personal, pero aunque era cierta, parece quemás decisiva era la necesidad de poder mover elPersonal de unos conventos a otros en la reformaque se proyectaba.La elección de los Provinciales corresponderíaa las provincias respectivas y la de Comendadoresal definitorio; todos estos cargos seríantrienales.Los Generales deberían tratarse como pobresreligiosos y no con la majestad que entoncesusaban. Prohíbeseles el título de Señoría, conservadoen la Orden, aun después que eran sacerdotes.Quitanseles los espolios de los religiosos,reduciendo su haber a las rentas de AlgarY a los vestuarios que anualmente pagaban elProvincial de Castilla y los de América. De todosgastos deberían dar estrecha cuenta en losCapítulos.«Porque no tienen ni han tenido más que unfraile», ordénase la supresión de las casas deSanta Coloma, San Ramón, Tärrega, Pradas yliontblanch, en Cataluña; Sarrión, San Pedro delos Griegos y Uncastillo, en Aragón; Arguines ySan Ginés, cerca de Orihuela, en Valencia. Larnayor parte de estas supresiones habían sidoIntentadas ya en 1569 por el Vicario general,

— 12 —Maestro Durán, pero el Rey le contestó que lodejara hasta que se terminara el estudio de lassupresiones convenientes en todas las órdenes (1).Los Provinciales no podrían ser reelegidoshasta pasar seis Míos; los Comendadores podríanserlo una vez, mas para la segunda debería reenrrirsea la Santa Sede. El General debería m i-rarse mucho en la confirmación del Prior deBarcelona, que tanta importancia tenía en laOrden.Por centésima vez se acuerda poner un P rocuradorde asiento en Roma, pero todavía pasaronalgunos afios hasta que el propósito tuvieraefecto. Ordénase la estricta vida común, proh i-biendo al religioso tener renta ni dineros, nisiquiera como depósito de seglares por más deveinticuatro horas. Todo cuanto los religiosostenían se aplica a los conventos respectivos.Tómanse especiales precauciones en la Coronade Aragón. Ordénase al General sacar deaquellos conventos a varios religiosos cuya listadaría el Visitador apostólico. Prohíbese estrechamentela entrada de mujeres en la clausura,ni siquiera para asistir a los enfermos, cosa hastaallí permitida en casi todas las Ordenes. Ordénaseestrecha vigilancia en las puertas, quedeberían abrirse a calles principales, reformandolas que lo necesitasen.(1) Antillón, Juan: Epitome de los Generales de laMerced, t. II, Ms. en la Biblioteca provincial de Cád15'Trae la cédula Real.— 13 —Los Prelados se harán respetar .de sus súbditosimponiendo con rigor la disciplina. LaOrden no tenía cárceles fuertes, y los reos deculpas muy graves deberían ser entregados albrazo secular y mandados a galeras.Defiéndese con fuertes penas la hacienda delos conventos, especialmente en la Corona deAragón, donde algunos Comendadores, temiendolos rigores del Capítulo, se habían apresurado ahacer dinero. Las enajenaciones así .realizadasserían nulas y sus autores recibirían el merecidocastigo.Pónese en vigor la bula de León X a peticiónde los PP. Juan Lupi y Arnaldo de Duce, estableciendoun depósito especial para la limosnade los cautivos, con tres llaves, y prohíbeseabsolutamente arrendar la colecta, ni a religiososni a seglares. La Orden podría disfrutar deltercio, por sus trabajos y gastos. A predicar laredención irían padres competentes y no noviciosni legos.De los gastos de la redención darían estrechacuenta los redentores, observando los de Castillalas instrucciones dadas por el Consejo Real y losde Aragón lo que ordenara el Consejo de aquelReino. Esto nos valió el tener en adelante relacionesdetalladísimas de los cautivos, pues enlos siglos pasados se contentaban con un perga-'tino o pocas hojas de papel. Los redentores deCastilla debían llevar consigo un escribano, cosaque al principio les pareció molesta, pero queluego fué beneficiosa, aunque no económica. Su-

- 14 —prímese la peregrinación con los cautivos por lasciudades del reino para recaudar nuevas limosnas.En Aragón no se había hecho redención desdealgunos años y se ordena una rigurosa inves tigación.Los religiosos de Castilla que fueranahora trasladados a Aragón para la reforma,gozarían de voz activa y pasiva y no podríanvolver antes de tres años. Repítese por milésimavez (ahora eficazmente), la prohibición de admitiren una provincia los religiosos de otra sinlicencia escrita del General.Asegúrase la autonomía de las provinciascontra la excesiva ingerencia de aquél. LosCapítulos provinciales se fijan en la dominicaIn Cantate (4.' después de Pascua). En la Coronaaragonesa serían casas de noviciado únicamentelos conventos de Barcelona, Valencia y Zar a-goza; en Castilla se prohibe dar hábitos en oncecasas pequeñas, ordenando se críen los noviciescon grande esmero. ¡Harta falta hacía, pero desgraciadamentela enmienda fué poca!Establézcanse estudios serios en los conven"tos y no se den dimisorias para Ordenes a losque no reunan las condiciones exigidas por elTridentino, y menos aún para confesar y predicar.Establécese el consejo doméstico con tresPadres, graduados a poder ser.Prohíbense los grados de favor que eranirrisión de las letras y oprobio de las religiones.Los candidatos a Presentado deberían ser pr°puestosal General por los Capítulos provincia'- 15 —les, después de obtenido el grado de bachiller enalguna universidad y de haber leído dos años enalgún convento, sosteniendo conclusiones públicas.Los aspirantes a Maestro deberían haberenseñado tres años después de la presentatura,sosteniendo también conclusiones públicas. LosMaestros no podrían ser más de doce en cadaProvincia, ni los Presentados más de veinticuatro.Los salarios de cátedras, judicaturas, predicación,etc., deberán ingresar en el fondo de laComunidad, pero los superiores atenderán especialmentea los religiosos beneméritos.Deben decirse los maitines a media noche entodos partes y se prohibe el usar lienzo. Seanexpulsados de la Orden los religiosos de otras,que hayan sido recibidos sin la debida licencia, otráigase para ellos rescripto apostólico.Anúl ans e las capitulaciones establecidasentre Castilla y las cuatro nuevas provincias deGuatemala, Lima, Cuzco y Chile; en adelanteelegirán libremente sus provinciales, como las deE uropa, y acudirán al General con los vestuariosPrometidos a Castilla, excepto la del Cuzco, quehabía constituido una renta de cien ducados en4villa, para el Provincial de Castilla o de Andalucíacuando las dos provincias se separasen.El General con su dçfinitorio nombraría unVicario general para América, siempre de laCorona de Castilla. Obsérvese puntualmente enAmérica todo lo dispuesto sobre la limosna deles cautivos, que se remitirá con la posible segu-

— 16 —ridad en las armadas, para unirse a la limosnade Castilla.Finalmente se anulan todas las antiguasConstituciones contrarias a éstas.Por bien de paz y concordia se determinó queel General fuera por esta vez de la Corona deAragón, y, en efecto, salió elegido por unaniuli"dad el Maestro Fr. Francisco de Torres, naturalde Elche, uno de los pocos asistentes al Capítulode fuera de Castilla (1).El Rvdmo. Torres era hombre cariños o Ypacífico y se atrajo las simpatías, aun de losmás opuestos a la reforma. Zumel, que fuó tul°de los Definidores del Capítulo, dice que erareputado universalmente por hombre de vida in"culpada. Temiendo quizá ser débil, tomó por unede sus Secretarios o compañeros al Maestro M aldonado,que representaba la energía.El Prior de Barcelona, Maestro Durán, fermulóel 5 de octubre una protesta contra la eelyvocatoria, alegando que ninguno de los Visita dorestenía poder para hacerla, con razones quenunca faltan a los Abogados. Para organiza r -13resistencia reunió en Tortosa a los principale selementos de la Corona de Aragón, algunos de loscuales habían desempeñado o desempeñaron nlästarde cargos importantes, como Fr. Juan Calvo,Provincial de Valencia; el Provincial de Aragáll'Fray Miguel de Dicastillo; Fr. Pedro Angulo, Cemendadorde Zaragoza; Fr. Vicente Murta, que(1) Actas en el Boletin de la Orden, año 1932, Pág. 22.— 17 —lo era de Játiba; Fr. Asensio Lagaria, Fr. PedroBalaguer, Fr. Pascual Molinar, etc.Notificaron la protesta a los Visitadores a laentrada del puente de Guadalajara, pero no laquisieron recibir, diciendo que se lo contaran alNuncio que venia detrás. En vista del fracaso,se dirigió a Roma el Maestro Lagaria, y un Notarioda fe de sus intenciones en la barca mismaque debía alejarle de la costa (1).Los Visitadores y el Nuncio (que había experimentadomayores resistencias y sabía vencerlas)dieron orden de que el Maestro Durán fueradetenido. La prisión la llevó a cabo el Obispo detarcelona en su Palacio, a donde el Prior ibaCon frecuencia. Logró después huir a Francia,de donde volvió a ponerse en manos del Nuncio,que lo detuvo en la Corte, y allí, al cabo de tres/rieses, escribe al Rey sincerándose y asegurandoque por no estar él en Barcelona habían elegidoGeneral a un extranjero (el Maestro Tremoulières).Acabó sus días desterrado en Valencia.En defensa suya escribieron al Nuncio losConcelleres de Barcelona y los Canónigos, queafirman ser el Prior hombre de santa y ejemplarvida, no menos distinguido por su ciencia quePor la pureza de sus costumbres. Quizá su mayorPecado fuera el excesivo apego a los privilegiosde Barcelona.(1) Muchos de estos papeles originales, o copias coetáneas,se encuentran en el Archivo de Navarra, Mercedalios,416.2

— 18 —Entre tanto el Rmo. Torres había sido confirmadopor la Santa Sede el 28 de mayo de 15 75 Yel 13 de agosto la comunidad de Barcelona le diola obediencia. Son 24 frailes, a cuyo frente ap a-rece el Subprior Fr. Jerónimo de Almenara. TodoEl Rmo. P. Francisco Maldonadose iba encaminando bien, pero el 29 de septieln"bre falleció en Zaragoza el General.El Nuncio y el Rey encargaron al P. Mald°,nado que terminara la visita de los conventos ae,Cataluña y el Comisario Apostólico se presen Barcelona a principios de noviembr e P1r3— 19 —impedir la elección de nuevo General, que seintentaba, a pesar de estar el Prior en Madrid.Comprendiendo que en Barcelona todo eraPolítica y que los catalanes eran capaces de llegara los mayores extremos en defensa de susPrivilegios, el P. Maldonado se proveyó del vistobueno de las autoridades locales. Dos concelleresancianos, de pulso vacilante, le autorizan con sufirma para hacer la visita, como habían autorizadoal P. Montaña, con tal que les diera cuentade sus acuerdos.Con todo, los frailes se reunieron en Capituloel 6 de noviembre de 1575 bajo la presidencia dePr. Luis Valls, religioso más antiguo, asistiendoOtros cuatro electores catalanes (todos suplentes)Y tres franceses, a saber: el Maestro Fr. AntonioTremoulières, Comendador de Tolosa y Provincialde Francia; el Maestro Fr. Pedro Masson,Prior del Colegio de París, y Fr. Domingo Castet,elector. Hecho el escrutinio resultó elegido portodos los votos, menos el suyo, el Maestro Trenloulières,hombre digno de ese y de mayorescargos, que había sido consejero del Parlamentode Tolosa, donde murió santamente en agosto de1577 (1).Todo el tesón del P. Maldonado no bastó arendir aquella pequeña comunidad, apoyada portecla la ciudad. La visita fracasó lamentable-(1) Acta de la elección en el A. C. A. Monacales, tomo2.832, fol. 323. Arch. Vat. «Nunziatura di Spagna», vol. 14,fol. 157.

— 20 —mente, viéndose el Comisario obligado a retira r-se a la residencia de Santa Agueda en el palacioReal. Entre los papeles del convento se encue n-tran muchos pareceres de los abogados Aylla,padre e hijo, que aconsejaban la resistencia hastael último extremo; felizmente los frailes no seguiaron por ellos más que en parte. El VirreYescribía al Embajador en Roma el 7 'de febrerode 1576 que era peligroso el empleo de la fuerza,pues la población apoyaba a los recalcitrantes.El Nuncio y el Rey, creyendo que un Generalen propiedad sería más respetado, acordaro n seprocediese a elegirlo. Para que la Provinc ia deAragón estuviese legítimamente representada'debía celebrarse Capítulo en el Olivar el 2 0 de,mayo de 1576, encomendando la presidenci a alP. Maldonado. Salió Provincial Fr. Francisco deSalazar, de noble familia zaragozana, que habladesempeñado importantes cargos, entre ellos 1-3'encomienda de su patria (1).Entre los asistentes , se cuenta Fr. Juan Ordóñez,Comendador de Nápoles, que fué reelegid°y murió adelante siendo Procurador general enRoma. No asistió el Comendador de Orán, porqueno había podido ser convocado, ni el MaestroFr. Jerónimo de Boneta, Catedrático de Huesca'por legítima causa. Varios catalanes faltaron porrebeldes.A continuación de las actas está la convoca-(1) Libro original de actas en el A. C. A. Monacales'tomo 2.659.— 21 —toria para el Capítulo general, que debía celebrarseen Zaragoza el 10 de junio inmediato.Firman además de Maldonado y Salazar los electoresgenerales PP. Jorge Ongay, Pedro Masedas,Onofre García y Jorge Olivar.Presidió la elección el Obispo de BarbastroD. Felipe de Urríes, amigo de Maldonado, quefué proclamado General. Opusiéronse a su confirl'Ilaciónlos catalanes, que entre mil dificultadeslio olvidaron alegar que el electo era hombre,soberbio, que en el Cuzco había osado retirar dede la picota la cabeza de su padre degollado porLagasca en 1548 (1), por su participación en larebelión de Pizarro. Padre e hijo llevaban elMismo nombre y el P. Francisco había nacidoseguramente en América, aunque fuera oriundode Salamanca y de nobilísima prosapia, comodice Zumel. Había tomado el hábito en el Cuzeo,de donde vino a hacer la carrera en Salaanca.Uno de los acuerdos del Capítulo fué adoptarel breviario romano, a pesar del voto en contrade Fr. Gaspar de Torres y de que podíamos conservarel nuestro, por ser anterior en doscientosarios al decreto de Pío V. Los hombres del Rena-Cimiento miraban con desdén las cosas de latdad Media, y Zumel vela en el breviario abolidomuchas ineptas sentencias.A pesar de todas las protestas, el Papa confirmóla elección de Maldonado el 27 de octubre(1) Pamplona. Mercedarios, leg. 416.

— 22 —de 1576 (1) y el General, por orden del Rey y delNuncio, se presentó nuevamente en Barcelonapara hacer efectiva la visita, aunque en vano.De todo lo actuado hay numerosos papeles y relacióndel mismo General fechada en Barcelon a elprimero de octubre de 1577 (2).Como el asunto llevaba trazas de eternizarsey el General debía atender a otras partes, enc o-mendó lo de Barcelona al P. Salazar, con fac ultadapostólica, pues el abogado Aylla informabaque como Provincial no podía visitar la casageneralicia. De la visita del P. Salazar tenemosun larguísimo y accidentado proceso, donde losepisodios lamentables se dan la mano con otrosamenos (3).Al frente de la rebeldía figuraba ya por entoncesFr. Lorenzo Mendia, apóstata domini co Yde otra media docena de órdenes, natural de Z a-ragoza, al que el Visitador P. Montaña hablamandado quitar el hábito en mal hora dado porel P. Durán. Volviéronselo a dar de nuevo y Pr°fesóen Barcelona el 24 de octubre de 157 7 (4)•El convento estuvo sitiado largo tiempo , Y'aun en entredicho, pero en él entraban clérigos Yseglares que animaban a los frailes a la resis ten-(1) Boletin de 1921, pág. 160.(2) Embajada Española en Roma, leg. 34.(3) Copias en la Embajada Española en Roma, leg . 34y en el A. C. A. Monacales, 3.004 bis y 2.677. •(4) A. C. A. Monacales, 2.710, fol. 73. Libro originalde profesiones.— 23 —cia y los proveían de todo lo necesario. Distinguiéronseen este empeño el conc,eller Mollet, elCanónigo Capmany y el inquisidor Aimard, a losque descubrieron dos de los frailes que reprobabanla actitud de los otros.Nombró el General Procurador en Roma alMaestro Fr. Juan Enríquez, de una acaudaladafamilia de Huete, muy acepto al Cardenal Boncompagni,Nuncio en España, ahora GregorioXIII, que atendió todas sus peticiones y leofreció varios obispados en Italia, pero los rehusóesperando volver a España. Murió al fin en Romaen 1582, electo Arzobispo de Santo Domingo, segúnrefiere el P. Maldonado (1).El General emprendió la visita de los demásconventos de la Orden, en cuyas actas ejecutivasse ve el decidido propósito de mostrar que laMerced se bastaba para corregir a sus miembrosSin necesidad de intervenciones extrañas. En lasProvincias Vascongadas redujo a menos de lamitad los beaterios fundados desde principios deSiglo, intentando establecer en ellos la clausura,que no fué duradera por la escasez de recursos(2).Atendió también con mayor interés que ningunode sus antecesores a las casas de América,enviando dos expediciones de doce misioneros,una al Perú, y al frente de ella al P. Francisco(1) En la Chronica del Maestro Vargas, II, 122 y 129.(2) Boletín de 1930, pág. 14.

— 24 —de Móstoles, en septiembre de 1577 (1) y otra aGuatemala, cuyo presidente era el P. AlonsoSánchez, que fué luego Provincial (2). El Reycosteó estos viajes, gracias a las informacionesde buenos servicios enviadas de América, y quetan importantes noticias contienen (3).Parece que fué el P. Mósteles quien envió deEl P. Nicolás de OvalleVisitador a Chile en 1578 al P. Tomás Pérez deValdés, que procedió con mucho rigor, como puedeverse por sus informes (4). El Comendador deSantiago, Fray Pedro de Moncalvillo, fué acusado(1) Pérez: 1VIercedarios, pág. 211.(2) Ibid, pág. 108.(3) Barriga, Victor M.: Los Mercedarios en el PeriliRoma, 1933.(4) Pérez, Ob. cit., pág. 273.— 25 —ante él calumniosamente, pero Dios volvióPor la inocencia de su siervo, y en 1580 fué ésteelegido Provincial, falleciendo al ario siguiente(1).En el Perú, además de los ministerios sacerdotalesy la conversión de los indios, se aspirabaa montar un Colegio en Lima, donde se leyeseGramática, Artes y Teología, para el mayoraumento de aquellas provincias, yendo para ellolectores señalados. Entre ellos distinguíase elP. Nicolás de Ovalle, que pronto ganó cátedraen la Universidad y en la de Prima de Teologíafué ornamento de ella en el último cuarto delsiglo, desemperiando también tres veces el provincialato.Fué también el P. Ovalle Consultor del SantoOficio e informó al Visitador de aquel tribunalde las muchas faltas de sus miembros. Desgraciadamenteabundan las manchas en toda clasede ropa, y al auto de fe de 1578 en Lima salierondos legos mercedarios al lado de gente másrepresentativa de otras Ordenes. Los nuestros,que pasaban por profetas entre los demás, fuerondesterrados a España (2).Los religiosos enviados a Guatemala fueronrecibidos con grande aplauso por el Obispo y laAudiencia e hicieron mucho fruto (3). El General(1) Gazulla: Primeros Mercedarios, pág. 315.(2) Medina, José Toribio: Historia de la Inquisición deUrna, I, 48 y otras.(3) Pérez: Mercedarios, pág. 110.

— 26 —envió otros siete a Santo Domingo en 1577, conel P. Salvador de Santa María (1).Tres redenciones se hicieron durante su gode las cuales tenemos relación detallad i-bierno,-sima, conforme al deseo de Felipe II. La primerase hizo en Argel en 1575, por el Maestro Fr. R o-drigo de Arce, Comendador de Toledo, y FraYAntonio de Valdepeñas. La bandera de la redenciónllevaba pintada por una parte a NuestraSeñora de la Merced con muchos cautivos, y porEl P. Jorge Olivarla otra, la bajada de Cristo al limbo; costó chi"cuenta reales.Fué con los mercedarios el P. Juan de To"rres, S. J., Administrador de un cuantioso legadocon que se redimieron cuarenta cautivos. Cervantes,llegado poco después, elogia la caridady el ánimo real del P. Arce en «Los Baños deArgel». En total llegaron al Grao de Valencia 139(1) Ibid., 60.— 27 —rescatados, sin los cuatro muertos en el viaje(1).Más renombre alcanzó todavía la redención de1577 por los PP. Jorge Olivar, Comendador de Valencia,y Jorge Ongay, Comendador de Pamplonay más tarde Provincial. Quedóse el primero en rehenesy secundó los planes de evasión de Miguelde Cervantes, al que no pudo redimir por el extraordinarioaprecio que de él hacían los moros.Figura en cambio entre los 106 rescatados suhermano Rodrigo. Miguel no encuentra palabrascon que ponderar el santo pecho del Redentor,que corrió gravísimos peligros de perder la vidaen el año que permaneció en Argel (2).La tercera redención la llevó a cabo en Tetuánel citado Maestro Arce al terminar su provincialatode Castilla en 1579, con el P. Luis deMatienzo, que permaneció en rehenes desde 1. 0de enero de 1580 a 1." de agosto de 1583 padeciendograndes trabajos. La contabilidad es complicada,pues con el dinero se hacían hasta cuatrooperaciones: comprábanse mercancías enEspaña, que eran vendidas en Africa, y con laMoneda allí obtenida se rescataban los cautivos,dando fe el notario de todas estas operaciones yde las equivalencias de la moneda africana (3).Entre los cautivos ahora redimidos figuran algunoscaballeros portugueses perdidos en la rota(1) Bib. N1., Ms. 2.963.(2) Pérez Pastor: Documentos Cervantinos, II.(3) Bib. NI. Ms. 6.569.

— 28 —El P. Rodrigo de Arcelamentable de Don Sebastián en 1578. Entretodos llegaron los redimidos a 220.En medio de las luchas que hubo de afrontarel P. Maldonado recibió un consuelo sobrenatural— 29 —que debió confortarlo. Visitaba en Valencia alBeato Nicolás Factor y éste elogió el voto heroicode la Merced.----,Estaría V. Rvdma. dispuesto a dar la sangrepor los cautivos? — preguntó al P. General.—Sí, lo estoy—contestó el P. Maldonado—,Y aquí está el P. Comendador (señalando alP. Olivar), que dió su libertad y estuvo a puntode perder la vida en Africa.—Crea, P. General, que en su Orden hayalgunos santos por esos rincones—. Y continuóalabando a su amigo San Luis Beltrán, reciénfallecido (1).Pasaron a mejor vida por estos años en olorde santidad algunas de las primeras monjas deSevilla, elogiadas por Santa Teresa, que se hos-Pedó enfrente de su Monasterio en 1575. Sor Maríade la Concepción falleció en 1574. Sor Maríade la Resurrección en 1580. Hizo informaciónacerca de sus vidas en 1610 el Rvdmo. G-uimerán,que publicó un extracto de ellas en Valenciaen 1614, como apéndice a las Constitucionesde dicho convento. Fué primera Abadesa Sor Anade la Cruz, y, fallecida ésta a poco de la fundación,le sucedió Sor Francisca de la Asunción(Martel), hermana del P. Jerónimo Martel, distinguidoredentor. Sor Francisca fué unos treintaarios Comendadora, reelegida cada trienio con(1) Loarte, P. Lucas, O. P. Vida de San Luis Beltrán,205.

— 30 —tanto sentimiento suyo como satisfacción de laComunidad, hasta 1604 en que murió.Uno de los últimos actos del P. Maldonadofué la celebración del Capítulo de Aragón en laciudad de Valencia en mayo de 1581, donde fueelegido Provincial el P. Jorge Ongay, que sehabía distinguido como redentor. Tuvo OngaY17 votos contra 12 del Maestro Fr. Pedro Balaguer.El P. Salazar habla gobernado dos trienioscon autoridad apostólica, a causa de las inqu ietudesde Catalufia.En Castilla había sucedido al P. MaestroArce en 1579 el Maestro Fr. Alonso MulĪoz, Yterminado el trienio fué reelegido en 1582 elMaestro Carrillo.En Lima fué Provincial desde 1574 el Mae s-tro Fr. Diego de Angulo, que había sido enviadocomo Visitador en 1570 por el Provincial deCastilla, Carrillo. Sucedióle en 1579 el MaestroFray Mateo de la Cuadra, que había hecho lainformación de servicios prestados por los mer"cedarios, llena de iffiportantes noticias.A pesar de los refuerzos enviados por el G e-neral, pesaba sobre nuestros religiosos un trabajoabrumador, según escribía al Rey en maYode 1581 el Provincial: «La mayor necesidad queal presente esta religión tiene en este reino es dereligiosos que ayuden, porque con los que al presentetenemos, no podemos acudir a sustentarlos conventos, ni los estudios ni doctrina s denaturales, y sacamos muchas veces los estudi antessin tiempo de su estudio, para que suplan 3— 31 —donde hay falta. Hará V. M. muy sefialado servicioa Dios Nuestro Sefior, y a esta religióngrandísima merced, en mandar se nos proveanreligiosos tales que nos ayuden. Del fruto y provechoque esta religión ha hecho y hace en estereino es buen testigo Don Francisco de Toledo,Virrey que ha sido de V. M., el cual muy dePensado, desde que en él entró, se informó y enteróde esta verdad, del cual se podrá V. M. informar»(1).La provincia del Cuzco, por muerte del PadreJuan de Vargas, estaba ya gobernada enabril de 1570 por el P. Martín Blanco, santoreligioso, que fué reelegido en junio de 1571 ydió grande impulso a todas las actividades, mereciendoser reelegido en 1585 (2).Gregorio XIII había nombrado protector dela Orden en 1572 al Cardenal Migo Dávalos, quevivió hasta 1600 e intervino con frecuencia enasuntos de la Orden.(1) Barriga: Los Mereedarios en el Perú, 303.(2) Boletín de 1933, pág. 133.

CAPITULO IIContienda sobre el lugar de la elección.—Generalatodel Rvdmo. Salazar (1582-1593)SUMARIO: Termina el P. Maldonado.—El Obispo Tocco.Pleito sobre el lugar de la elección.—Religiosos castellanosen Aragón.—Provincias de América; el P. Obre-,gön.—Elección del Rvdmo. Salazar.—Compilación delas Constituciones. — Oración mental. — Provincia deAndalucia.—Expediciones misionales; el P. Porres enEspafia. — Actividades varias. — Venerables. — Redenciones.Felipe II, que llevaba al día los asuntos de laMerced, había decidido que no hubiera nuevaelección de General hasta que se fallara el pleitode Barcelona, pues uno de los puntos en litigio' era precisamente el lugar donde el Capítulo debíacongregarse.Querían algunos que se prorrogase el gobiernodel P. Maldonado, pero el Rey se opuso, porser el General odioso a los catalanes y aun aotros (1). Solicitó en cambio que se nombraseVicario general al nuevo Provincial de Aragón,Pero los catalanes obtuvieron que fuera designadoel Obispo de Gerona y luego de Lérida, Fray(1) Boletin de 1924, pág. 195.•3

— 34 —Benito Tocco, que por ser napolitano juzgaría sinpasión las pretensiones del convento de Barcelona.El Obispo, que estaba hondamente preocu padocon la reforma de su Orden benedictina, dejóel gobierno de la Merced a los provinciales deAragón y Castilla, y luego al P. Salazar, contitulo de Comisario. Abrió una información jurídicasobre el lugar en que debían celebrarse losCapítulos electivos, llamando a todos los quedebían ser oídos. Todas las informaciones fueroncontrarias a Barcelona, comenzando por la delProvincial de Aragón, P. Ongay, según el cualla estancia en aquella ciudad era molesta a todoslos no catalanes, expuestos a graves descor tesías,como había sucedido al Comendador deBurgos, Fr. Juan Montoro, Maestro en Teología,que había ido a dar la obediencia a Tocco.No sólo Castilla, sino Aragón, Valencia, Navarray Francia, eran opuestas al predominiocatalán. Aunque el derecho estuviera en favorde los catalanes (9ue no lo estaba), debería pri"várseles de él por sus abusos (1).La ciudad de Barcelona había enviado a Ronlaal Dr. Tomás Pujades para mantener los sup uestosderechos del convento de la Merced, y des'pués de cinco años de gestiones y de gastar 01"chos miles de ducados, logró que se suprimierala alternativa en las elecciones, dejando a 19sCapítulos el determinar dónde había de reunirseel siguiente.(1) Arch. C. Ar. Monacales, t. 3.004 bis.— 35 —Felipe II apoyó secretamente los deseos deCastilla y del resto de la Orden, escribiendo a suEmbajador, Conde de Olivares, que « cuando entendiéredesque no se podrá obtener esto, sinoque se ha de declarar sin dificultad en favor dela ciudad y monasterio de Barcelona, estaréisadvertido para procurar encaminar con la destrezay secreto que lo sabéis hacer, que su Beatitudlo conceda de gracia a la dicha ciudad, dandoa entender que es a contemplación mía, paraque de esta manera queden reconocidos y obligadosa mi servicio y no puedan decir que salencon la suya» (1).Esta carta lleva la fecha de 31 de diciembrede 1583, y el 14 de enero siguiente escribe denuevo el Rey que deja el asunto a Su Santidad,Para que lo termine conforme a justicia. Entretanto, los frailes de Barcelona cometieron eldisparate de elegir prior a Fr. Vicente Mendía,cosa que el Obispo Comisario desaprobó (2).Mendía se apoderó de los fondos del convento yhuyó a Italia. Se enviaron las señas a la Embajadapara detenerle, y aunque no sabemos cómolo prendieron, es lo cierto que en 1589 estaba enel convento de Valladolid condenado a galeras,Y- en 1590 se fugó nuevamente con el fraile quele guardaba (3).(1) Embajada Esp. en Roma, leg. 34, donde hay muelode la Merced.(2) Ibid.(3) Ibid.

- 36 -Celebróse en 1585 Capítulo de Aragón enZaragoza, presidiendo el Provincial saliente,Maestro Ongay. Obtuvo el P. Salazar veintic uatrovotos de treinta. El P. Francisco Polaynnexpone que es hijo de la provincia de Castilla,pero ha servido muchos arios en la de Aragón;pide ser prohijado en ésta y se le concede, perosin que pueda ser Provincial ni General. NffinbranleComendador de Milán, fundación por élgestionada, aunque no prosperó. Fué más tardeComendador de Roma. Era hijo de Sevilla y habíaestudiado en Salamanca. En 1574 era Conve n-tual de Málaga de donde lo sacó el Rvdmo. Maldonado.Admitióse también la fundación de Santa R u-fina en el Trastévere, obtenida por el P. JuanOrdóñez, que había restaurado el convento deNápoles desde 1569 y continuaba al frente de él.Era también hijo de la provincia de Castilla,natural de Segovia al parecer. Murió santamenteen Roma y fué enterrado con gran veneració n enSanta Rufina.El P. Jorge Olivar presentó un curioso mem o-rial sobre la manera de aumentar la eficaci a dela Redención. Quéjase de que las limosnas ibana menos, porque se enviaba a la colecta a lesmuy comunes frailes. Propone que se den gradesa los predicadores de la Redención y a los r e-dentores como a los Letrados, idea que el PadreZumel puso luego en práctica. Los gastos de laredención eran enormes por las extorsiones delos moros y podrían evitarse en parte estand°anaK0 CiAreçfrz;4

-- 38 —uno de los redentores de asiento en Argel. P o-drían, sin embargo, a su vuelta hacer la procesiónde entrada, que tanto conmovía a las ciudades.cristianas. Firma este documento en Zaragoz a a21 de mayo de 1585. (Monacales, 2.659, fol. 157)•En este Capítulo fué nombrado Comendadorde Elche, su patria, el P. Francisco de Torres,que luego fué Procurador en Roma. Había sidocolegial en Huesca al ser restaurado el colegiopor el Rvdmo. Maldonado, y luego ea Salamanca,donde acreditó su habilidad como Catedrero oagente en las oposiciones.Había muerto en el trienio anterior, joventodavía el Maestro Fr. Jerónimo de Boneta, Caltedräticode Prima en Huesca y Rector de nuestrocolegio, muy elogiado por Zumel. Sucedióleotro Mercedario llamado Fr. Juan de Guevara (1).También fué llevado para ayudar en la reformade Aragón Fr. Juan Suárez de Godoy, quedesempeñó el cargo de Lectoral en las catedralesde Tortosa y Barcelona con grande aplaus o Ypublicó una obra importante sobre el salmo SS.El Capítulo de 1594 le concedió una presentaturade púlpito en premio de sus buenos servicios'También se prohijó entonces en Aragón al PadreFelipe de Mana, que estudiaba en Salamancaen 1575 y había sido admitido por el P. Salazar.La provincia de Castilla celebró Capítulo enToledo en 1585, sucediendo al P. Carrill o elMaestro Zumel, ya famoso en Salamanca y en(1) Vargas, II, 357.— 39 —todo el Reino. El mismo refiere lo que luchó porestos años (1) para colocar nuestro colegio a laaltura de los más ilustres, y nuestros archivoscantan los grandes aumentos de la Provinciabajo su dirección, en lo material como en lo morale intelectual.Las que estaban algo abandonadas eran lasprovincias de América durante la vacante delGeneralato y el P. Zumel trató de hacer valersobre ellas la antigua Superintendencia de Castilla,enviando allá como Visitador al P. AlonsoEnríquez de Armendáriz, que había venido en1585 como Delegado de Lima al Capítulo general;fué aceptado con dificultad por los americanos,hasta que el nuevo General revalidó su nombramiento.Zumel gestionó el envío de dieciocho religiososque dieron nuevo impulso a las Misiones.Entre ellos iba el futuro fundador de nuestraRecolección, P. Juan Bautista González. Estabanya en Sevilla en septiembre de 1586, perono llegaron a Panamá hasta mayo siguiente (2).Gobernaba la provincia de Lima después delP. Nicolás de Ovalle, el Maestro Fr. Diego deAngulo, reelegido en 1586, hombre de grandeactividad y de importantes iniciativas, algunade ellas prematura, como la de llevar monjaspara la enseñanza de las indias, que no pudorealizarse hasta pasados algunos siglos. (Pérez:Religiosos... pág. 210). El Maestro Angulo era(1) De Vitis Patrum.(2) Prez: Religiosos... 220 y 229.

— 40 —natural de Losa en el Obispado de Burgos, alumnode Salamanca.En el Cuzco fueron Provinciales: en 1582 elP. Gonzalo Ballesteros; en 1585 el P. MartínBlanco y en 1588 el P. Francisco de Obregón-De los dos primeros he dicho ya algo. Del últimoy como muestra copiaré la solicitud que encabezala información de sus méritos en 1589.«Muy Poderoso Señor: Fr. Francisco de Obregón,Provincial de la Orden de Nuestra Señorade la Merced, redención de cautivos de la provinciadel Cuzco y Charcas, digo que ha cuarenta!años que salí de los reinos de España y vine aestos del Perú, y en ellos ha más de treinta yseis años que tomé el hábito de Nuestra Señorade la Merced, con el que me he ocupado en laconversión de los naturales, por haber sido unode los primeros lenguas que hubo en estos reinos,haciendo la dicha mi doctrina con mucho trabaje,por tener muchos pueblos a mi cargo y haberandado de unos a otros a pie, por no haber enaquellos tiempos . caballos, lo cual era un excesivotrabajo, ansi por la aspereza y longitud de loscaminos e pueblos de mi doctrina como por elcontinuo trabajo que tomé de ordinario en esteMinisterio, edificando en los dichos pueblos demi doctrina muchos templos y convertido más dediez mil indios viejos y bautizado gran númerode muchachos».«Y de veinte años a esta parte he sido ocuien-paddo Comendador muchas y diversas veces de mi Orden cargos preeminentes, slos— 41 —Monasterios de esta Provincia, casi de los másdellos, los cuales he mejorado y edificado muchascasas dellos, y adelantándoles las rentas,y he sido tres veces Vicario Provincial y dosveces Visitador de esta provincia, y agora últimamentesoy de presente Provincial de la dichami Orden; en todo lo cual me he ocupado congran cuidado, sirviendo a Dios Nuestro Señor ydescargando la real conciencia de V. R. Persona...En La Plata a 2 de junio de 1589».(A. G. I. Charcas, 79).En carta de 17 de agosto de 1585 al Embajador,Felipe II solicitaba se nombrase Presidentedel Capítulo general y añadía de su puño: «Mejorserá qu'el breve venga para el Prelado queel Nuncio nombrare y aparte se le ordene quenombre al que yo le señalare» (1). El breve salióefectivamente con fecha del 5 de noviembre de1585, ordenando que el Capítulo se celebraracuanto antes en Zaragoza. La presidencia seconfirió al Arzobispo D. Andrés de Bovadilla yel 13 de abril de 1586 Zumel pidió en Salamancalicencia, para concurrir al Capítulo (2). Sinembargo, éste no, se celebró hasta la primaverade 1587. El forcejeo por conservar la preponderanciade Cataluña en la Orden no desdice delque los catalanes pusieron en otras cosas.Por fin se realizó la elección de General enZaragoza el 23 de mayo de 1587, obteniendo el(1) Emb. esp. en Roma, 34.(2) Vázquez: M. Maestro Zumel, 34.

— 42 —P. Salazar 12 votos de los 15 que formaban elCapítulo y eran:1. 0 El Maestro Fr. Francisco de Salazar,Provincial de Aragón y Vicario general de laOrden.2.° El Maestro Fr. Francisco Zumel, Provincialde Castilla, escritor famoso.3.° El Maestro Fr. Bernardo Massón, Provincialde Francia, Predicador célebre.4.° El Maestro Fr. Pedro Balaguer,dor de Aragón y más tarde General.5 •0 Fr. Jorge Olivar, Comendador del Puigy Redentor famoso, Definidor por Aragón.6.° El Maestro Fr. Rodrigo de Arce, Definidorpor Castilla, Profesor y Redentor.7. 0 El Maestro Fr. Francisco de Medina,Comendador de Toledo, Definidor por Castilla,más tarde General.8.° El Maestro Fr. Pedro Massón, hombredoctísimo, Definidor por Francia y luego Pr°.vincial.9. 0 Fr. Juan de Joanne, Comendador deAuterive, hombre muy sagaz, Definidor por Franciay luego Catedrático de la Universidad deHuesca (1).10." El Maestro Fr. Dionisio Beltrán, varónde gran prestigio, Comendador de Valencia.11.° El Maestro Fr. Jaime Torres, Comendadorde Zaragoza.(1) Ainsa: Fundación y excelencias de Huesca . Afl°1619.— 43 —12.° El Maestro Fr. Antonio Simón, Comendadorde Gerona, que actuó de Secretario.13.° El Maestro Fr. Baltasar Camacho, Comendadorde Sevilla, luego Visitador de Guatemala.14.° El Maestro Fr. Juan de Ribas, Predicadorcélebre, Comendador de Madrid.15.° El Maestro Fr. Juan Bernal, santo ycélebre orador, Comendador de Córdoba, luegoProvincial de Andalucía.Al dia siguiente, que era el de Pentecostés, sehizo una solemne procesión desde el convento ala catedral de la Seo, celebrando la misa el nuevoGeneral y predicando el Comendador de MadridMaestro Rivas (1).La Orden tan dignamente representada aceptócon gozo la elección, excepto algunos catalanesque porfiaron en ponerle reparos, hasta queSixto V les impuso silencio en 9 de abril de 1588.Los concelleres habían enviado nuevamente aRoma sobre ello al Dr. Ramón Cornet (2). ElCapitulo ratificó los acuerdos de Guadalajarasobre la alternativa del Generalato y del lugarde la elección en los dos Reinos, constitución quedespués de varia fortuna quedó consolidada enel Capítulo general de 1593.Dióse comisión al P. Zumel para compilarnuevamente las constituciones de la Orden incorporandoa ellas todas las reformas a tanta(1) A. C. A. Ms. 49, fol. 148.(2) Boletín de 1922, pág. 214.

— 44 —costa obtenidas, además de las impuestas por elconcilio de Trento. La nueva edición apareció enSalamanca en 1588 con interesantes comentariosy una breve historia de la Orden, que es elopúsculo De Vitis Patrum.En estas Constituciones se hizo obligatoria lafórmula de profesión indicada por Fr. Gaspar deTorres en su ensayo de 1565, y que desde unosarios se venía usando en Castilla, con el cuartovoto expreso. Introdújose también la oraciónmental obligatoria de media hora dos veces aldía y alguna mayor frecuencia de Sacramentos.Los mercedarios fueron de los más decididoscampeones de la Comunión diaria y en el c onventode Madrid por el ario 1600 se comulgabahasta el día de Viernes Santo.Acordóse separar Castilla y Andalucía y queen el Capítulo próximo se eligiesen dos Provi n-ciales. La renta destinada para los gastos deCapítulos y vestuarios de los Provinciales debíadividirse por mitad entre los dos. En adelante nohabría Vicarid Provincial, a no ser que el p ropietarioestuviera enfermo o ausente.Determinóse también crear dos Vicarios G e-nerales, uno para Guatemala y otro para el Virreinatodel Perú, alternando en ambos cargosun castellano y un andaluz. Andalucía podríaenviar cinco colegiales a Salamanca y tres aAlcalá, previa información de limpieza. Si algúnotro religioso quiere ir a estudiar costeándose lamanutención, sea admitido con licencia de suProvincial.— 45 —Los Comendadores podrán durar nueve añosen las casas pobres de Aragón, y señala comotales las de Tortosa, Lérida, Tarragona, SantaColoma, Montblanch, Agramunt y Castellón deAmpurias en Cataluña, y las de Sarrión, Teruel,Daroca, Tarazona, Uncastillo y Barbastro enAragón; en Valencia las de Arguines y San Ginés;en Navarra, Tudela y Sangüesa, y todas lasde Francia e Italia.Los reos de delitos atroces sean enviados agaleras. Era frecuente que los legos pasaran aFrancia donde los ordenaban fácilmente. Pierdanla esperanza de ejercer las órdenes así obtenidas.Mandóse quemar los procesos y visitas del PadreMaldonado, por viejas, aunque el aludido asistióal Capítulo. Concédense excesivos honores alGeneral saliente, lo mismo que a los Provincialesy graduados. Resérvanse dos presentaturaspara los predicadores, que se llamarían Presentados de púlpito.Confírmanse las exenciones concedidas porel Capítulo de Aragón al P. Olivar, aunque noera bachiller por Universidad. Seftálanse losMaestros y Presentados reconocidos en cadaprovincia, a saber: diez Maestros en Aragón,siete en Castilla y once en Andalucía. Los cuatrode Francia son Fr. Pedro Massón, Fr. Severinode Ardiflach, Fr. Juan Benedicto (Benoist) yFr. Juan del Aubespin (1). Los de las otras pro-Yincias pueden verse en Vargas.(1) A. C. A. Monacales, 2.683.

— 46 —Nombró el P. Salazar Procurador general enRoma al valenciano P. Francisco de Torres ensustitución del P. Ordóñez, ya difunto. Llegó aRoma en 1588 y pronto se captó las simpatíasde todos, obteniendo la confirmación del Generaly la iglesia de San Adrián de manos del CardenalCusano, su titular, en 1589. Desgraciada--« .. , _••___„•ei e.SAN Lt ",F Gez J. • III. ' •• ..r.. ._t „.•••••• •. n• • n...1 I •El P. Diego de Porres bautizando(Dibujo que adorna uno de los memoriales del P. Porres, seguramentede su mano)mente no duró mucho tiempo, pues falleció el 16de agosto de 1590, con gran sentimiento de laCuria. El dominico P. Alonso Chacón, redactóun hermoso epitafio para su sepulcro.A Guatemala envió el nuevo General corn°Vicario al P. Baltasar Camacho, que fué despachadoen junio de 1588 con otros doce religioso— 47 —Encontró de Provincial allá al P. Diego de Torrescuya actividad elogia, lo mismo que la deSUS súbditos (1). Al finalizar el sexenio del PadreSalazar fué a Guatemala el P. Francisco de Escobarcon otros doce religiosos en 1593. No parecedudoso que el P. Zumel tomó parte considerableen las gestiones para el envio de estosmisioneros por cuenta de la Real hacienda.Al Perú fueron a fines de 1586 doce mercedariosen compañía del famoso misionero Fr. Diegode Porres, que para gestionar esa ayuda habíavenido a España, presentando al Rey, ademásdel memorial de sus servicios personales antescopiado, el siguiente donde resume los méritosde la Orden:«8. C. R. M.—Fr. Diego de Porres, de laOrden de Nuestra Señora de la Merced dice quesu Orden es la primera que se fundó en el Perú,cuyos religiosos siempre se han ocupado enservicio de Dios y de V. Majestad, haciendoconventos en todas las ciudades y villas que sehan fundado y poblado, acudiendo los primerosa los descubrimientos a predicar y enseriar a losindios la doctrina con mucho trabajo de desnudezy hambre y grandísimo riesgo de sus vidas,de los cuales han muerto a algunos los indiosehiriguanaes, los de la Cordillera y los del Ríode la Plata y otros».«Que ultra de esto se han ocupado y ocupansiempre en tener cátedras como la presente la(1) Pérez: Religiosos... 114.

— 48 —tienen la de propiedad de Teología en la ciudadde los Reyes, y en otras facultades, por ser comoson personas de mucha religión, doctrina y letras,y los que más han pretendido la paz y acrecentamientode aquellas provincias en servicio deV. M. acudiendo muy de veras a todas las necesidadesque se han ofrecido, a cuya causa tienensus casas muy pobres y las iglesias por edificar».«Por tanto a V. M. suplica sea servido deacordarse de la dicha Orden y religiosos della,favoreciéndola y empleándolos en V. R. serviciocomo a los de las otras órdenes, pues son ben e-méritos y los principales fundadores de las provinciasde Lima, Cuzco, Charcas, Chile, Tu cumány Santa Cruz de la Sierra; que en ello seraV. M. bien servido y ellos recibirían muy Particularmerced. (A. G. I. Charcas, 142)».Felipe II acogió al P. Porres con el amor quesus trabajos merecían y tuvo con él larguezas uoacostumbradas, asignándole una pequeña rentapara alivio 'de su vejez. En 1588 fueron otrosocho religiosos más al Perú, a costa de la realhacienda, en compañía de Fr. Francisco de Veamonte, que iba por Vicario general mientras suhermano Fr. Alonso Enríquez volvía a Esparia.Dos de esos religiosos, Fr. Luis de Heredi a YFr. Juan de Pefiacerrada, fueron a su regresoProvinciales en Andalucía y Castilla.Del Perú volvió en 1588 el P. Alonso Enríqueza ponerse al habla con el nuevo General, queconfirmó y amplió sus poderes en Madrid a 5 de— 49 —junio de 1589 (1). El Vicario General desarrollóuna grande actividad que mereció elogios detodos y reunió con los de Lima en 1592 a losProvinciales de Chile y Cuzco, tomando acuerdosmuy importantes para las tres provincias(2). El Virrey y las demás autoridades elogianunánimes su gestión, cuyos buenos efectos palpaban.Debía venir a dar cuenta de ella en elCapítulo general de 1593, pero le fueron prorrogadossus poderes por un trienio, y no volvióhasta 1596.En el año final de su provincialato de Castilla,tuvo el P. Zumel un disgusto con el GeneralPor haber hecho éste su Vicario en Castilla alComendador de Madrid, Fray Francisco de Medina.Llevóse el asunto a la Santa Sede, que tardóen resolverlo, pero diö la razón al MaestroZumel, prohibiendo al General tales nombra-Mientos, si no era en casos extraordinarios.Sucedió al P. Zumel en el provincialato. en1588 el citado Maestro Medina, ya éste en 1591 elMaestro Fr. Pedro Machado, Catedrático de Sala-'llanca y famoso predicador, que en 1592 obtuvode Clemente VIII la confirmación de la absolucióngeneral que la Orden acostumbraba a dar dosveces al año, señalando para ella los días de SanAntonio Abad y Santa Catalina, Virgen y Mártir.Al frente de la nueva provincia de Andalucíaquedó desde 1588 el Maestro Fr. Juan de Ribas, Ca-(I) Vargas: Chroniea, II, 200.(2) Pérez: Religiosos, 233.4

— 50 —tedrático de la Universidad de Sevilla, y termin a-do su trienio le sucedió en 1591 el Maestro FraYRodrigo de Arce, que había sido Provincial deCastilla y tres veces Redentor.Al ascender al generalato el P. Salazar nombróVicario de Aragón al P. Olivar, y en 1588 fueelegido Provincial el Maestro Fr. Pedro Balagner,que era Secretario general y mereció años adela n-te el generalato. Mandóse en este Capítulo ponerel noviciado en las ciudades universitarias, porqueallí se encontraban buenas vocaciones, y organizáronsefuertemente los estudios. Mándase taro--bién que se enseñe a tarier y cantar y que haYaopositores en las universidades, como los tienenotras Ordenes, pues sería poca autoridad en lanuestra el no tenerlos.En efecto, consta que hubo catedráticos enHuesca en los arios inmediatos, cuyos salariesdebían aplicarse íntegros al colegio, pero las V niversidadesde Salamanca y Alcalá tenían oscur e-cidas a todas las demás de España.En el Capítulo de Aragón, que presidió el PadreSalazar en 1591, salió Provincial el MaestroFr. Asensio Lagaria. Había fallecido ya el PadreOlivar. Fué nombrado Comendador de Roma YVicario General el P. Mateo Benedicto y de Näpolesel P. Francisco Polayno. En Orán lo eradesde años atrás el P. Baltasar García, que hablaobtenido del Rey una ayuda considerable Parasostener la casa.Sixto V, al ordenar la celebración de un CaP i-tulo general intermedio al cabo de tres arios, de-— 51 —Cía que su cometido principal había de ser confirmaral General en su oficio. Sobre la interpretaciónde esa cláusula, hubo gran discusión. AlgunosPadres de Andalucía opinaban que la confirmaciónera libre, equivalente a nueva elección,Parecer sostenido por los Doctores de Salamancacontra los de Alcalá. Trabajó en Roma la tesis deEl V. P.Juan Vallejolos andaluces el célebre predicador Fr. Hernandode Santiago (a quien Felipe II había llamadoPico de Oro), pero el General logró sostener suderecho, sentando jurisprudencia para lo sucesivo.Entre las personas que se distinguieron por'sus virtudes en estos años, merece recordarse elP . Baltasar Velázquez, asesinado en el verano de1588 por los moriscos no lejos de Zaragoza, dedonde volvía de hablar con el General. Era natu-

-breza— 52 —ral de Jerez de la Frontera y estudiante en A l-calá. Desangrándose por momentos corrió aauxiliar a sus compañeros heridos también porlos bandidos. Su memoria fué venerada en LaMuela muchos años.El 24 de agosto de 1592 murió santamente enel convento de Valladolid el P. Juan Vallejo,natural del Valle de Mena, hijo del convento deColindres, modelo de oración y de penitenterecogimiento en el de Valladolid durante casisesenta arios. Había sido redentor en 1562 Y elSeñor honró su cuerpo incorrupto con varios in i-lagros. El Maestro Remón extracta en su Historiala vida impresa aparte. Sus restos han a parecidoahora en el Colegio de Escoceses, próxilli°a la Merced.Por 1590 murió en Arequipa, donde habla"tomado el hábito el P. Hernando de Cifuentes,nacido en Granada. Desempeñó con gran fi delidadaltos cargos en la administración del Perú,y a los cincuenta años se recogió al convento,donde pasó el resto de sus días en suma poy admirable obediencia con grande oración(1).Fray Alonso ,de la Cruz, lego de Murcia, sedistinguió por su santa sencillez y humildad.,adornada con extraordinarios dones que le correr"liaron singular veneración, asistiendo a su entie,-rro todas las Comunidades y el Obispo de la pi°cesis.Muy penitente fué también el herrna°(1) Vargas, 11, 197.— 53 —Fr. Juan Ruiz, del convento de Ubeda, a pesardel regalo en que se había criado (1).Murió por estos arios en Guatemala el PadreVerdugo, fundador de muchas doctrinas o pueblosde indios y Visitador por el Ordinario deotras confiadas a clérigos seculares, a los quedió muy prudentes estatutos (2).Sixto V concedió a la Orden en 1587 el cuadernode rezos propios ajustados al rito romano,que había adoptado en el Capítulo de 1576.En Italia dió gran fama a la Orden por suelocuencia y sus virtudes el P. Gonzalo de Esquivel,sevillano (3).Las redenciones hechas durante estos añosfueron las siguientes: En 1583 volvió a Marruecosel P. Maestro Arce, en compañía de FrayMartín de Percheta, para satisfacer el empeñoen que estaba el P. Matienzo desde 1579. Rescataronde paso unos ochenta y seis cautivos, y endiciembre estaban en Madrid los tres redentores,que rindieron cuentas detalladas (4).Antes de la elección del P. Salazar, en 1587,el Provincial de Castilla, Zumel, envió a Marrueeosa los Padres presentados Fr. Francisco deVera y Fr. Juan de Santofimia, Comendadoresde Málaga y de Granada, respectivamente, quevolvieron de Tetuán con ciento treinta cautivos.(1) Ibid, pág. 155.(2) Ob. cit., 186.(3) Ibid, 167.(4) Bib. NI. de Madrid. Ms. 3.588.

— 54 —Refiérelo el mismo Zumel y trae la lista el PadreVargas.En 1589 fueron a Argel los redentores deAragón, Fr. Nadal Silvestre y Fr. Mateo Benedicto,que llegaron a Valencia de vuelta en octubrecon ciento treinta y un redimidos. Veintidósde ellos fueron recibidos solemnemente en laSeo de Zaragoza el 18 de noviembre (1). Tresmil ducados para esta redención habían sidotornados de las limosnas de Castilla, lo que mástarde ocasionó disgustos al General (2).Tenemos también la lista de los ciento c uarentay dos redimidos en Marruecos en 1592 Porlos PP. Baltasar de Paz y Jerónimo Martel,por Castilla y Andalucía, respectivamente. Téngaseen cuenta que gran parte de la limosna empleadapor los redentores de estas provinciasera recogida en América y así se mandó repet i-das veces que estas redenciones se titularan deCastilla, Andalucía e Indias. Buena parte de loscautivos lo eran también de la carrera de Indias 7apresados al acercarse o salir de Gibraltar. Enla de 1583 se rescató el mercedario Fr. Diego deValdés, cautivado junto a Cádiz al volver deAmérica. Ayudóle su madre con una fuerte su1113'(1) A. C. A. Ms. 49, fol. 148.(2) Bib. Nl. Ms. 3.596.CAPITULO IIIGeneralatos de Zumel, Balaguer y Medina(1593-1602)SUMARIO: Elección de Zumel.—Confirmase la alternativa.—Colaciónde grados. — Colegio de Sevilla.—Lasprovincias de España.—Fundación en MAxico.—Expedicionesa América.—Actividad en Quito. —Idem en elPerú.—La provincia de Tucumán.— Su actividad.—Heroismo de los Mercedarios chilenos.— Capitulo generalde 1596.—Idem de 1599. —Muerte prematura delRvdmo. Balaguer. - Capitulo de 1600.—Elección nulade Medina. — El P. Juan Bernal.Próximo a terminarse el sexenio del P. Salazar,fué nombrado Presidente del Capítulo, quehabía de celebrarse en Calatayud, el Arzobispode Zaragoza, D. Alfonso Gregorio. Abierta laAsamblea el 5 de junio de 1593, se contarondieciséis vocales, todos europeos. Hubo algunavacilación, pues tenia bastantes partidarios elProvincial de Castilla, Maestro Fr. Pedro Machado,pero dos cartas del Rey al Presidente yal P. Salazar, decidieron la elección en favor delP. Zumel por unanimidad.El Rey y el Nuncio se congratularon de ella yescribieron a Roma cartas llenas de elogios parael electo, que fueron correspondidas por otras

— 56 —no menos halagüeñas del Secretario de Estado.Zumel, llamado por el Presidente, hizo el juramentoacostumbrado y tomó inmediatamente ladirección del Capítulo, entre cuyos decretos descuellael restablecimiento de la alternativa delas coronas de Aragón y Castilla en el generalatoy en el lugar de la elección, acordada en 1514y revocada después bajo la presión de los catalanes.Este y los demás acuerdos fueron confirmadosal año siguiente por la Santa Sede.Anuláronse todos los grados concedidos sinlas debidas condiciones, pero «por cuanto lasprovincias de Francia están asoladas y arruinadaspor la persecución de los herejes, y no haYcomodidad para poder leer lo que la constituciónmanda para ser Presentados y Maestros, determinaronunánimes y conformes que el que fueregraduado de bachiller formado por Universidadaprobada, sea habido y tenido por Presentado, Yel graduado de doctor sea tenido por Maestro»Conforme a esto quedaron en Francia seisMaestros: Fr. Pedro Masson, Vicario Provincial;Fray Juan Castet, Fr. Severino Dardignae, FraYDurando Papillón, Fr. Juan del Aubespin y FraYJuan Benedicto, y tres Presentados: Fr. Antoni°Fornerio, Fr. Juan Fillolet y Fr. Pedro Aussat'Los graduados de las demás provincias son másconocidos y pueden verse en Vargas.Suscitóse la cuestión de precedencia entreFrancia y Andalucía, pero el Capitulo unánim e-mente dió la razón a los franceses. El Maestro Onapidió que sus libros de Filosofía fueran señaladosEl uf. Oña, Obispo de Gaeta(Verdadero retrato conservado en la Asunción, de Sevilla)

-- 58 -como texto en la Orden, pero se dejó la resoluciónal General. Actuó de Secretario el MaestroFray Hernando de Santiago.La provincia de Andalucía, recién separada,sólo podía enviar pocos estudiantes a Salamancay Alcalá, y para que tuviera su colegio propio seofrecieron a fundarlo en Sevilla con bienes patrimonialesy limosnas de amigos, los hermanosFray Francisco de Veamonte y Fr. Alonso Enri"quez, a condición de que el patronato de la n uevacasa de San Laureano se diera a su otro hermanoseglar D. Juan de Castellanos. El defini torioaceptó el ofrecimiento y fué nombrado primerRector el P. Veamonte.Redoblóse todavía el esfuerzo en la formaciónde los jóvenes, enviando mayor número a lasuniversidades y estimulando los estudios domé s-ticos. El General en los Capítulos provinciale s yvisitas restringió cada vez más los gastos que sehacían a costa de la limosna de los cautivos ycreó ocho presentaturas de púlpito en cada Pr°vincia,a fin de que predicaran la redención porlos pueblos, como había propuesto el P. Olivaraños atrás.Así logró hacer dos copiosas redenciones, unaen Marruecos en 1595 por Castilla y Andalucía,de 208 cautivos, siendo redentores el MaestreFray Matías de Cuéllar y el Presentado Fr. JerónimoMartel; otra redención de 279 cautivos sehizo en 1597, pasando a Argel los PP. Mateo Be"nedicto, por Aragón; Fr. Juan Negrón, por Castilla,y Fr. Jerónimo Martel, por Andalucía.- 59 -Padre Alonso de Barahona redimió otros 100cautivos en Argel en 1596, con limosnas particulares.Al principio de su gobierno tuvo el P. Zumelalguna dificultad en concertar sus nuevas obligacionescon las de Catedrático de Salamanca,pero luego reaccionó enérgicamente, actuandoen ambas cosas con grande asiduidad, aunquepara ello tuvo que viajar durante los veranos portoda España, para celebrar Capítulos. A consecuenciade estos viajes estuvo enfermo en Segoviaen 1594, y en Cuenca en 1597, de mucha gravedad,según Téllez. La Universidad le habíahonrado antes con el importante cargo de Vicecanciller,que desempeñó en adelante casisiempre.En Castilla vió elegido Provincial en 1594 alMaestro Fr. Juan Negrón, famoso predicador yCatedrático de la Universidad de Valladolid, yen 1597 al Maestro 011a, Secretario General, Catedráticoantes de Santiago, autor de reputadasobras de Filosofía y de Ascética, luego Obispo deGaeta.La provincia de Andalucía eligió también Su-Perior en 1594 al santo Fr. Juan Bernal, famosoPredicador, uno de los religiosos que más honrana la Orden en estos años, y en 1597 al MaestroFray Francisco de Móstoles, que había sido Vicariogeneral en el Perú.El Capítulo de Aragón, en 1594, no lo presidióZumel, sino el Vicario Maestro Fr. MiguelPerlas, que salió Provincial por todos los votos,

— 60 —menos el suyo. Admitióse en este Capítulo lafundación del convento de Burriana santificadoen aquellos primeros años por el venerable legoFray Gabriel de Ripollés, cuya vida escribeTéllez largamente. Por primera vez el Comendadorde Nápoles, Presentado Benedicto, entrególa limosna recogida allá, contra el dicho prove r-bial de que en Italia no había redención, comoen el infierno.El Capítulo provincial de 1597 lo presidióZumel y salió reelegido el Maestro Fr. PedroBalaguer por todos los votos. Hiciéronse muchosdecretos detallados: que los días de carnestole n-das fueran de ayuno riguroso, que no se permitanmedias de punto; que hubiera rígida observanciaen los noviciados de Barcelona, Zarag o-za, Puig y Valencia, únicos subsistentes desde elCapítulo anterior. En adelante los Definidores noserían Comendadores. Si pide el hábito algúnjoven que sea capaz, no se le despida, aunquesea muy pobre, pues se han perdido excelentesvocaciones por falta de un hábito viejo. Era Catedráticode Huesca el Pdo. Fr. Nicolás Valer°.En 1594 logró Zumel hacer efectiva la licenciaque desde muchos años tenía la Orden parafundar en la ciudad de México un colegio adonde concurrieran los mercedarios del Virre i-nato. Para vencer la resistencia del Provis°robtuvo cartas muy enérgicas del Rey y del Nuncio(1). Envió para la fundación ocho religiosos(1) Pareja: Historia de la Provincia, II, apéndice.— 61 —y por Comisario al P. Francisco de Vera, de laprovincia de Andalucía, más tarde Obispo deElna.El último año de su gobierno gestionó el Generalotra expedición de doce religiosos a NuevaEspaña, a cargo del Maestro Fr. Juan NúñezMulatos de Esmeraldas bautizados por los mercedarios(Primer cuadro importante de pintor americano; en el Museo Arqueológicode Madrid)Franco, pero se malogró en parte. Aunque estosreligiosos procedían de Andalucía, habían sidola mayor parte de ellos discípulos de Zumel enSalamanca.También fracasó la fundación intentada enLisboa en 1597 por el citado Maestro NúñezFranco, a causa de la oposición del Ordinario.En cambio, la Santa Sede concedió autorizaciónPara fundar en Santarem, pero no fué utilizada(1).(1) Boletin de 1922, pág. 252.

— 62 —Envió también el General numerosas exp e-diciones a otras provincias de América. Así, en1597 pasaron ocho religiosos a Santo Domingo Yal frente de ellos el P. Hernando de Collantes (1).Al Perú fué en 1594 el Pdo. Fr. Martín de P erchetacon nueve religiosos más, y en 1597 FraYGabriel de Sotomayor (que años adelante habíade ser Provincial del Cuzco), llevó otros doce.Ese mismo año envió Zumel por Vicario generalal Pdo. Fr. Alonso de Monroy con seis más.En la Audiencia de Quito se distinguió por silacción misional el P. Juan de Salas, Comendadorde la capital y fundador de varias doctrinas enla provincia de Esmeraldas, elogiado en muchosinformes de la Audiencia. Consérvase en Madridel retrato de los caciques mulatos por él reducidosal servicio de Dios y de España (2).Principal colaborador del P. Salas en la evangelizaciónde Esmeraldas fué el P. Gaspar deTorres, criollo, hijo del convento de Quito (1 - en1612). Distinguióse también en la conversión delos mulatos el P. Juan de Burgos, andaluz, deLebrija.Al frente de la provincia de Lima estaba n uevamente,desde 1591, el Maestro Fr. Nicolás deOvalle, cuyo prestigio no había hecho sino creceren aquellos años en la cátedra de Prima de laUniversidad.La provincia del Cuzco mostró grande afici"— 63 —a las reelecciones y algunos Provinciales lo fueronhasta tres veces, como el P. Martín Blanco,de santa memoria. En el último trienio del siglofué Provincial por segunda vez el P. GonzaloBallesteros, y por su vejez nombró Vicario alcitado P. Sotomayor, que más tarde obtuvo elcargo en propiedad y lo ejerció con gloria.Era Procurador en Roma al ser elegido Zumelel Maestro Fr. Hernando Juárez, que había dejadopara ello la encomienda de Madrid. Murióen Roma en 1597 y después de una interinidadfué nombrado Procurador en 1599 el cronistaFr. Bernardo de Vargas, que aprovechó los ociospara bucear en el archivo Vaticano, entoncesreservado.Entre los religiosos venerables fallecidos poreste tiempo, debe señalarse el octogenario PadreAlonso de Zorita, Provincial de Guatemala, queen 1561 era ya Comendador de la capital (1). EnHuamanga falleció en 1599 el P. Juan Caballero,profesor de quichua en el Cuzco y autor de numerosascomposiciones religiosas para los indios,que lloraron su muerte (2).El P. Alonso Enríquez, separó del Cuzco en1593 la provincia de Tucumán, en virtud de losPoderes recibidos del Rmo. Salazar y confirmadospor Zumel. El acuerdo se tomó en la Asambleade Provinciales reunida en Lima en 1592 yfué primer Superior de la nueva provincia el(1) PArez: Religiosos... 68.(2) Monroy: Convento de Quito, I, 46.(1) Vargas, II, 289.(2) Ob. cit., 258.

_— 64 —P. Pedro Guerra, que había visitado en nombredel P. Enríquez los conventos del Sur, que eranseis: Santiago del Estero, Talavera de Esteco,San Miguel de Tucumán, Salta, San Juan deVera de las Siete Corrientes y la Asunción delParaguay.El clero de aquella región no sale bien paradodel archivo de la Inquisición de Lima, y tambiénlos mercedarios dan algunos tropezones, pero snactuación en conjunto es excelente y mereció losmayores elogios de los colonos. Juan Sánchez deTaboada, testigo en la información de Fr. AmbrosioMaldonado en la ciudad de la Plata ende diciembre de 1594, dice: «que el Fr. Ambrosiofué a visitar a las provincias de Tucumánsu Orden por mandado de sus Prelados, y estetestigo le vió hacer la visita y administrar losSantos Sacramentos a los españoles y naturalesde toda la tierí-a, andando por ella de un lugar aotro, y bautizó más de catorce mil indios, queestaban por bautizar en aquella tierra por faltade sacerdotes, y que a esto se animó Fr. Ambrosiode caridad y sin premio ni interés más quequerer servir a Dios Nuestro Señor y a su Maj estad,predicando a los indios la ley evangélica enla lengua de los propios indios, que con muchacuriosidad aprendió en poco tiempo, y que est°vió este testigo muy en particular, por ser cettl°era Secretario del Gobernador y escribano mayorde aquellas provincias» (1).— 65 —Del primer Provincial escribía en 1598 el Gobernadorde Tucumán D. Pedro Mercado de Pañalosa:«En esta Gobernación está el P. MaestroFr. Pedro Guerra, de la Orden de Nuestra Señorade las Mercedes, persona de muchas letras,de tanta virtud y buen ejemplo, que siendo Provincialdesta provincia, ha puesto en tanta religióny observancia toda su Orden, que está NuestroSeñor muy servido de ello. Hay ocasión enque V. M. se pueda servir de él en la vacantedel Obispado de Santiago de Chile; entiendo queDios Nuestro Señor y V. M. serán muy servidoshaciendo elección a su persona, porque certificode vista y de particular trato que, además desus letras, es muy esencial y ejemplar religioso»(1).Llevó del Perú el nuevo Provincial algunosreligiosos sacerdotes letrados y predicadores, querepartió en los conventos y fueron bien recibidosdel pueblo por su buena vida y predicación. Eran,sin embargo, muy escasos para atender a tantasn ecesidades, según declara en 1597 el Arcedianode Santiago del Estero, D. Pedro Farfán, queles ayudaba en sus apuros: «Desde el principiode la fundación siempre han tenido los Padresde la Merced doctrina en pueblos de indios naturalesde esta tierra y que este testigo les ha dadolas doctrinas, y que se han sustentado con hartotrabajo por tener muchos pueblos a que acudir,Por falta que habla de sacerdotes,'por ser tierra(1) Boletin de 1932, pág. 258.(1) P(vez, Religiosos... 311.5

— 66 —El M. Fr. Pedro Guerra, Provincial de Tucumánnueva, y que así lo ha visto de once años qu e hlque entró en esta tierra... y ha visto cómo FraYAntonio de Marchena, además del trabaj o quetenía en el Monasterio, estando a veces solo en— 67 —él, acudía a la doctrina que tenían a su cargolos religiosos, dejando personas que dijesen misaen la iglesia de dicha ciudad, y que este testigola dijo algunas veces en tiempo que era semaneroen la Catedral» (1).En carta de 16 de diciembre de 1597, el Cabildosecular de la ciudad de Santiago del Esterodecía al Rey: «los frailes de Nuestra Señora dela Merced fueron los primeros que entraron enesta tierra de Tucumán y que comenzaron a predicarel Santo Evangelio a los naturales de ellae imponerlos en toda doctrina cristiana; por locual, y por lo que cada día van continuando, lessomos en particular obligación, a cuya causa noPodemos dejar de suplicar a V. M., les haga todaNlerced» (Ibid.)Estas informaciones tenían por objeto manterierla provincia mercedaria, cuya independenciavió comprometida ahora por las quejas dealgunos religiosos del Perú. Para defenderla vinoa Europa el citado P. Marchena, segundo Provincialy primogénito de la provincia, pues fuéel primero que en ella vistió el hábito, en Santiagodel Estero. El Capítulo general de 1599 confirmóla erección de la provincia, y el Consejode Indias mandó, además, socorrer a cada unode sus conventos con un ornamento, un cáliz ytina campana y que se pagase de la real Haciendael pasaje a doce religiosos, que salieron deS evilla en 1600 y por Comisario de ellos el Padre(1) Boletín de 1932, pág. 258.

— 68 —Domingo de Andía, pues el P. Marchena se habíaadelantado unos meses por Lisboa (1).En Chile estalló en 1597 la insurrección generalde los indios del sur que destruyeron todaslas ciudades de españoles, pereciendo en ellasgran parte de nuestros religiosos y siete conve n-tos. Distinguióse en aquella catástrofe, por susvirtudes, no menos que por su pericia, el PadreAlonso de Tralla, que había entrado en la Ordendespués de ocupar altos cargos en el ejército,como el de Comisario de la Caballería y Visit a-dor General de todo Chile, con tan alto ejempleque decían ya entonces que sólo le faltaba elhábito para ser un perfecto religioso. En las criticascircunstancias en que se encontraba Chilellamóle a su lado el Gobernador García de Loy o-la para valerse de sus consejos. A él se debió latraza de varios fuertes, y murió en 1598 (2).Muerto por sorpresa el Gobernador García deLoyola en diciembre de 1597, la insurrecció n sepropagó como pavoroso incendio. En la Imperialera Comendador el P. Juan Juárez del Mercado,que merced al respeto que le profesaban losindios pudo salir de la ciudad sitiada y rescatara un Capitán, dando por él su propia ropa (3).En otra salida cautivaron al Padre, matan do asus compañeros. Padeció el mercedario grandestrabajos, pero al fin logró ablandar a los barb a-(1) Pérez: Religiosos... 313 y 473.(2) Gazulla: Primeros IVIercedarios... 357.(3) Ibid., 384.— 69 —ros y redimir a bastantes mujeres españolas queestaban en poder de ellos.Cuando la Imperial estaba en el último extremollegó el Gobernador Quiñones, a quienservía de capellán y de mucho más el mercedarioFr. Juan de Tovar, que penetró varias vecespor entre los indios para animar a los sitiados;al fin pudieron salir hacia el Norte después deun año largo de horroroso cerco (1).En Valdivia era Comendador el P. Luis de laPeña, chileno, hijo del convento de Santiago,que fué asesinado por los indios al tiempo quesumía el Santísimo Sacramento el 24 de noviembrede 1599. Llevaron cautivo los indios al PadreAndrés de las Heras, a quien mataron al díasiguiente. La memoria del P. Peña fué muy celebradaen la Orden (2).Un mes después, ignorando la desgracia,llegaba el P. Tovar con el Capitán Pedro deRecalde y gente de socorro por mar, encontrandola ciudad abrasada. Bajaron, no obstante, a ella,dando sepultura a más de cien cadáveres deespañoles, ya descompuestos y comidos de perros.Diöse maña también el mercedario para rescatarhasta cincuenta personas, la mayor partemujeres y niños, que estaban en poder de losaraucanos, dando por ellos cuantos objetos llevabany hasta su propia ropa, quedando losredentores desnudos de medio cuerpo arriba.(1) Ibid., 379. Declaración del mismo Quiñones.(2) Ibid., 388.

— 70 —Una mujer rescatada les advirtió el peligro quecorrían, pues los bárbaros trazaban asesinarlosa todos. Los cristianos emprendieron la retiradaEl V. P. Luis de la Peñaen sus lanchas en el preciso momento en que losindios arrojaban sobre ellos una nube de piedrasy saetas. Al P. Tovar le rompieron dos costillas,a pesar de haberse protegido con la coraza de— 71 —Recalde. El heroísmo de esta redención no desmerecede las realizadas en Africa (1).Poco después se trató de rescatar a otrosprisioneros de los araucanos, pero, aunque sereunieron limosnas, sólo se logró rescatar conellas a catorce cautivos, teniendo que ser redimidoslos demás a punta de lanza, pues los mensajerosenviados a los indios, no volvían (2).En Villarrica estuvo encerrado el P. Juan deLezcano veinticinco meses, hasta que reducidosa once los defensores fueron hechos prisioneros,y asesinados los demás, quedó solo el mercedariopara contar aquella heroica defensa, que Tirsocompara, no sin razón, a la de Numancia (3).También en la ciudad de Osorno se distinguióel P. Gonzalo Alvarado.En todas las informaciones se hace constarque los mercedarios sirvieron como capellanesal ejército en las más peligrosas acciones y permanecieronen las ciudades sitiadas sin estipendioalguno. Generalmente, no había tampocode donde pagárselo, aunque los Gobernadoresquisieran, pues las cajas reales estaban vacías.El Rmo. Zumel celebró su Capítulo intermedioen Valladolid en 1596, con mucha paz. Susactas andan impresas con las Constituciones editadaspor él, donde incluyó también el Capítulode 1593. Mándase que los Provinciales de Indias(1) Ibid., 398.(2) Ibid., 398.(3) Ibid., 406.

— 72 —duren cuatro años y que se moderen los vestuariosabonados por cada provincia a los Vicariosgenerales: en adelante, Lima darla 400 pesosanuales; Cuzco y Chile, 300 cada una.Ordénase también dejar a los conventos pobresde Indias los espolios de los religiosos españolesmuertos allá, que según las Constituciones,pertenecían a los conventos de origen.Si algo traen los que vuelven a España, seaplicará a los colegios de Alcalá y Salamanca.Confirmanse las aplicaciones hechas a los mencionadoscolegios de algunos espolios, entreellos el del Vicario general P. Francisco de Móstoles.Entre los expuestos para Maestros en Aragónfigura el P. Juan Suárez de Godoy. Al P. Isidrode Valcázar se le computan para Presentado lostres años que había enseñado en la Universidadde Valladolid. Se concede el grado por la provinciade Lima a los PP. Nicolás de Ovalle yAlonso Enríquez.No sólo por sus obras teológicas sino por suactuación eficaz en todos los aspectos de la vidade la Orden, Zumel ocupa un lugar distingu í-dísimo, quizá el primero entre nuestros Generales,después de San Pedro Nolasco. Corregíaenérgicamente los defectos y esto fué causa deque algunos religiosos tibios esperaran con ansiael término de su gobierno. Para el Capitulo g e-neral de1599 pidieron fuera nombrado Presidenteextraño a la Orden, y el Nuncio designóal Obispo de Valladolid D. Bartolomé de la Plaza,— 73 —pero éste alegó estar impedido y cometió susveces a Zumel.Reuniéronse dieciocho Vocales y fué elegidocon grande aplauso el Provincial de Aragón,Maestro Fr. Pedro Balaguer, que se había distinguidomucho aquellos años. Zumel se retiró despuésde la elección disgustado de que se hubterabuscado un Presidente fuera de la Orden. Al finconcurre a firmar las actas el Obispo.Confirmóse la elección de Fr. Juan Castet enProvincial de Francia, hecha en Tolosa el 8 demayo de 1599,, después de bastantes años en quela Provincia no había tenido más que Vicarios.El P. Castet había fundado en 1597 el convento deSalies-du-Salat, en la Diócesis de Comminges (1).Estaba completo el número de Maestros enCastilla, pues en el lugar del Rmo. Maldonado,fallecido recientemente, había entrado el ProvincialOfta y en el de Fr. Gabriel de León el PadreDiego Coronel.El Rmo. Balaguer falleció en Madrid el 8 dediciembre de 1599 y nombró Vicario general alP. Maestro Negrán, ex Provincial de Castilla yCatedrático de Valladolid, pero éste rehusó elcargo, que, según las Constituciones, pertenecíaal Prior de Barcelona. El General difunto eravalenciano, de Elche, y había sido Secretariodel Rmo. Salazar.Su muerte prematura fué una desdicha parala Orden. Celebráronse en la primavera de 1600(1) Vargas, II, 428.

— 74 —los Capítulos de Aragón y Castilla, saliendo Provincialde Aragón el Maestro Fr. Domingo Pérez,y de Castilla, por segunda vez, el anciano Mae s-tro Fr. Francisco de Medina.El P. Juan de TovarEstaba ya convocado el Capitulo general paraValencia el 20 de mayo, que presidió por c omisióndel Nuncio el Arzobispo y Patriarca de An"— 75 —tioquía Beato Juan de Ribera, saliendo elegidopor 12 votos de 18 el Maestro Medina. Cinco votostuvo el Maestro Fr. Luis de Heredia, Provincialde Andalucía,Prohibióse a los Provinciales de Castilla yAndalucía estar en Madrid o en Sevilla más dedos meses al año. Concediéronse cuatro Maestrosy seis Presentados a las provincias de Tucumány de Nueva España (o Guatemala) con tal quefuesen bachilleres por universidad y que paraobtener el grado de Maestro fueran doctores poruniversidad también.Admitióse por Presentado, entre otros, porAragón, a Fr. Juan Suárez de Godoy, por haberleido cuatro años Teología positiva en la Catedralde Barcelona y en la de Tortosa y porqueera Presentado de púlpito. Dáse el Magisterio deFr. Jerónimo Gómez en Castilla al P. Juan LópezSalmerón.Al Provincial de Francia, P. Castet, se leconcede «que puedan sus súbditos obtener algunosbeneficios (previa licencia apostólica) porrazón de las ruinas causadas por los herejes yenemigos de nuestra fe».Para Vicario general del Perú obtuvo oncevotos el citado P. Juan López Salmerón, y paraNueva España el P. Fr. Andrés de Portes. Asistieronel Provincial de Tucumán, P. Antonio deMarchena, y el P. Francisco de Escobar, Definidorde Guatemala.Contra la elección de Medina se levantarongrandes protestas en la misma provincia de Cas-

— 76 —tilla, y antes que llegara a Madrid, recibió ordende retirarse al convento de Huete y esperar allíla resolución del Nuncio. Esta fué suspenderledel cargo, alegando que la elección había sidosimoníaca. Las investigaciones realizadas en lasceldas de los electores en el convento de Zaragozaparecieron confirmar la acusación, y pararesponder de ella fueron a Madrid el ancianoMaestro Salazar, el Provincial Maestro Pérez Yel P. Monserrat Ausias.El P. Salazar fué privado de todos sus hon o-res y cargos, y aunque en 1604 el Nuncio Ginnasio,al pasar por Zaragoza para Roma, lo restituyóen ellos, murió tristemente allí a fines de1605 (1). Sin embargo, Antillón, que era comp a-ñero del Maestro Pérez, dice que éste fué elculpable de tan bochornosos sucesos, pues fuequien propuso la candidatura de Medina, porqueera ya muy anciano, y muriendo él, volvería elGeneralato a Aragón más pronto. Los electoresde Castilla y Andalucía votaron al Maestro H e-redia. Los Cardenales habían dado el mal ejenl-plo de cálculos semejantes a toda la Iglesia.El P. Medina fué víctima de las ambicionesajenas, y aunque el Papa lo declaró buen R eligioso,negóse terminantemente a confirmar laelección, no obstante las diligencias que paraello hizo el P. Isidro de Valcázar, nombrad o alefecto Procurador en Roma. Medina falleció en1602, pero el aragonés no logró lo que deseaba,(1) Vargas, II, 425. Antillön: Ms. 103 del A. C. A.— 77 —pues el Papa se reservó el nombramiento de Generalpor aquella vez.En 1. 0 de agosto de 1600, nombró VicarioVerdadero retrato del M. Bernal, por Pachecogeneral de la Orden al Maestro Fr. Luis de Heredia,que lo era de Andalucía y se pensó enhacer General al Santo P. Juan Bernal, aunquemuchos recelaban de su austeridad.

— 78 —En 1601 pasaron a Marruecos el P. JuanBernal y Fr. Lope de Ribas, logrando rescatar166 cautivos a costa de innumerables trabajos,que completaron la Corona del Santo P. Bernal,muerto en Sevilla el 18 de noviembre de aquelario en gran veneración, según escribió el Nuncioa Clemente VIII. A su prestigio se debió en1582 la fundación del convento de Gibraltar,muy importante para las Redenciones de Marruecos.Fundáronse también por estos años losconventos de Azuaga y de Moratalla en la mismaprovincia de Andalucía.El Maestro Vargas consiguió en 1601 se extendierala absolución general a los días de SanAntonio Abad y San Lorenzo mártir.El Maestro Oria fué nombrado en 1602 Obispode Venezuela; se consagró en Sevilla, y antes depasar a América fué promovido al Obispado deGaeta. Su predicación y sus libros le dieron granfama, sobre todo el titulado «Las Postrimeríasdel Hombre». Estuvo en Roma varios años comoPrelado de Curia y fundó en su Diócesis los conventosTraetto y Francoforte por 1611. Murió enGaeta en 1626.CAPITULO IVGeneralatos de Monroy y de Guimerán(1602-1615)SUMARIO: Nombramiento de Monroy. — Fundación denuestros descalzos.—Primeros conventos.—División dela provincia de Aragón.—Creación y supresión de laprovincia de Italia.—La de Santo Domingo.—Vicariosdel Perú. —El P. Ribera en México.—El P. MelchorHernández. —E1 P. Pedro Romero.—Estadistica de losmercedarios en Amèrica. —Actividad literaria.—Pleitoen Alcalá.—Obispos.—Capítulo intermedio de 1606.—Socorro al convento de Roma.—Capitulo de 1609 enGuadalajara.—Elección de Guimerán.—Exceso de frailes.—Capitulode 1612.—Religiosos venerables. —Redenciones.—Estadisticade redimidos en cuatrocientosarios.Después de dos arios largos de investigacionesy negociaciones el Nuncio, Domingo Ginnasio,con facultad apostólica, el 23 de septiembrede 1602 nombró General por seis arios al PresentadoFr. Alonso de Monroy, ex Vicario del Perú,que había sido elegido Provincial de Andalucíaen mayo de aquel ario.El encargo más apremiante dado por la SantaSede al nuevo General fué el de hacer una seriareforma en la Orden, restableciendo la paz ysosiego que tanto necesitaba. Desgraciadamente

— 80 —el ambiente general del mundo era de luchas ypequeñeces, siendo contadas las personas quesabían despreciarlas. Huyendo de esa atmósferaalgunos de nuestros religiosos solicitaban pasarsea otras órdenes austeras, sobre todo a la Cartuja,como había hecho el P. Guimerán (1).Para satisfacer el deseo de estos religiososhabía procurado ya el P. Zumel establecer casasde recolección, pero duraron poco, por haberlasconvertido en penitenciarías de gente rebelde,con la cual era imposible tener paz ni sosiego.Ahora el P. Juan Bautista González, naturalde Huete, hermano del Comendador de MadridFr. Cristóbal González, aleccionado con la experienciapasada, ansiaba restablecer la recoleccióndentro de la Orden, para que no tuvieranque ir a buscarla fuera los que aspiraban a mayorrecogimiento y austeridad.Obtenida la aprobación del General, se des-.calzó en la capilla de los Remedios del conventode Madrid el 8 de mayo de 1603 en compañía delos PP. Luis de Escobar, que tomó el apellido deJesús María; Fr. Miguel de Arribas (de las Llagas)y Fr. Juan Maroto (de San José) con otrosdos más, que pronto abandonaron lo comenzado.La recolección fué luego causa de mayordesasosiego y de muchas recriminaciones contrael General, pues se advirtió pronto en ella elanhelo de independencia. El cronista Vargasdecía que no podían ser nuestros descalzos cosa(1) Boletin de 1922, págs. 249 y siguientes.— 81 —diferente de lo que habían sido los de otras Ordenes.Cabe pensar, sin embargo, que de haberseconservado unidos a los calzados hubieran ido ala recolección los religiosos más fervorosos y lahubieran abandonado libremente los cansados,con gran ventaja de ambas partes. Así debenser las casas de recolección que se funden enadelante.Así entendía las cosas Clemente VIII que senegó a confirmar las Constituciones de los descalzoscon régimen y hábito diferente de loscalzados, aunque luego el Maestro Santiago obtuvoen 1606 la aprobación de Paulo V. Una delas cosas que más necesitaban arrancarse era laambición, causa de mil inquietudes, pero de esohubo pocos ejemplos.Entre los religiosos que pasaron a la descalcezy en ella permanecieron, además de los indicados,debe mencionarse Fr. Diego de Sotomayor(de San Pablo), uno de los mayores predicadoresque tenía la Orden, 1- en Salamanca en 1609, yFr. Pedro Izcarra, o de la Madre de Dios, Comisariode Sicilia, confesor del Virrey, Conde deLemos cuando el P. Esteban de Muniera se separóde él.Las fundaciones de descalzos fueron muchasy fáciles, pues dada la abnegación de que estabanposeídos, todo les venía ancho. Cuanto rehusabanlos calzados o abandonaban otros religiosos,era para ellos. Así se establecieron en eldesierto de la Almoraima, cerca de Gibraltar,término de Castellar, cuya Marquesa D. Beatriz6

Los PP. Juan Bautista (a la izquierda) yMiguel de las Llagas, fiinda dores de nuestrosdescalzos— 83 —de Mendoza se constituyó patrona de la nuevafamilia. A ésta siguieron las fundaciones de Visodel Alcor, no lejos de Sevilla; Ribas, cerca deMadrid; Nuestra Señora del Val, en la afuerasde Valladolid, etc.Sólo después de largos años y de infinitasprivaciones lograron tener conventos medianamenteacondicionados, conservando siempre mayorausteridad que los calzados. En 1617 hablasiete conventos reformados en Castilla, diez enAndalucía y ocho en Sicilia.Otra de las reformas emprendidas inmediatamentepor el General fué la división de la provinciade Aragón en tres, aunque no como estabaantiguamente, pues Cataluña no tenía elementossuficientes para vivir sola. Consultados los Padresmás graves de ella, optaron por agregarsea Aragón antes que a Valencia (1) y esta provinciarecibió los conventos de Tarragona y Tortosa,con los de Teruel y Sarrión, que estabancerca de sus límites, y el de Orán, incorporadoya a ella anteriormente.La división se llevó a cabo en el Capítulo delOlivar, en mayo de 1603, siendo elegido Provincialde Aragón el Maestro Fr. Antonio Simón, yde Valencia el Maestro Fr. Felipe Guimerán. Envista de que los americanos no asistían a losCapítulos generales, a fin de evitar cábalascomo la pasada, se acordó que por cada provinciafueran nombrados dos electores además(1) Archivo de Navarra, 416.

— 84 —del Provincial y dos definidores, o sean en totalcinco votos. El mismo acuerdo se había tomadoen el Capítulo provincial de Castilla, en abril deaquel año 1603, en que fué elegido el MaestroFr. Matías de Cuéllar.Insiste el Capitulo en que se formen bien losnovicios y que durante el noviciado no cursenestudios. Todavía no se habían puesto camasseparadas a todos los religiosos y se ordena terminarde una vez con ese descuido. En Castillaparece haberlo extirpado el Maestro Carrillodesde 1570.Quedaban pocos graduados en cada provircia y se dispensaron algunas circunstancias alos más capaces. Uno de los admitidos com oMaestros en Aragón fué Fr. Juan Suárez de G(doy, «público lector en las catedrales de Barc(lona y Tortosa, con mucho concurso y auditorio'Era sevillano, según Vargas, y en Sevilla profesóen 1570. Establecióse la alternativa de catalanesy aragoneses en el Provincialato de Aragón.Para Vicario general de Italia nombró el GEneral por comisión del Capítulo al Maestro FraYSebastián Orell, mientras gestionaba la erecciónde nueva provincia. Con siguióla en 1606, celebrändose entonces Capítulo en Roma, bajo lapresidencia del Protector, Cardenal Zapata, enel que salió Provincial el famoso predicador FraYHernando de Santiago, y definidores cuatro españoles, lo que disgustó mucho a los italianos y fuecausa de la ruina de la provincia. Existían conventos en Roma, Cagliari, Rocca di Papa, Na— 85 —poles (Santa Ursula), Palermo, Messina, Agrigentoy Mineo.Los italianos dieron tales quejas al Papa y alRey que estuvieron a punto de mandar salir deItalia a todos los españoles, pero ya que estofracasó, concentraron sus tiros sobre el Provincial,que hubo de volver a España y la provinciafué suprimida en 1607. El convento de Cagliarihabía conseguido ya su reincorporación a la provinciade Aragón, en la que permaneció hasta1750 con las demás casas fundadas en Cerdeña.Logró también el P. Monroy la erección deprovincia independiente en la isla de Santo Domingo,aunque los conventos eran pocos e insignificantes,excepto el de la capital. Los otroseran los de Puerto Príncipe, Concepción de laVega, Cruz de la Vega y Toza. El primer Capítuloelectivo se celebró en Santiago de los Caballerosen 1608, saliendo Provincial el Comendadorde Puerto Príncipe Fr. Pedro de Torres, quehubo de luchar con grandes dificultades (1).No menos atendió el P. Monroy a las provinciasde Indias. Al Perú habla partido en abril de160.2 el Maestro Fr. Juan López Salmerón, VicarioGeneral, que mereció grandes elogios de lasautoridades. Tuvo, sin embargo, un tropiezo enla provincia del Cuzco, pues habiendo el Capítuloelegido al P. Gabriel de Sotomayor, el Vicarioanuló la elección por ser el electo hijo del conventode Santo Domingo y no estar debidamente(1) Pérez: Religiosos... 320.

— 86 —prohijado en el Cuzco, pero el General dió porbuena la elección en atención a los muchos ariosque el P. Sotomayor llevaba en el Perú. Todoello dió lugar a un largo pleito, pues las ideasreinantes no permitían que ninguno cediera desu derecho, aunque fuera un santo canonizable.Menos fortuna tuvo el P. Francisco de Batreselegido Provincial del Cuzco en 1603 y confirmadopor el Vicario. El P. 1VIonroy lo depuso, y despuésde varias incidencias, Paulo V encomendóel pleito al Nuncio de España en 1608 (1). Sucedieronal P. López Salmerón, en el Perú, losPadres Hernando de Cuadros y Antonio de Pesquera,hijo de la provincia de Lima, de la quefué luego Provincial, aunque era burgalés de nacimiento.No envió el P. Monroy grandes expedicionesde Misioneros al Perú. A México habíaido Fr. Juan de Torrubia con otros once religiosos,pocos meses antes del nombramiento delPadre Monroy. Este envió por Vicario en 1605 alPadre Melchor Franquis, y al ario siguiente elCapítulo de Madrid eligió al P. Francisco de Ribera,uno de los mejores Vicarios que fueron aAmérica.Hablanse fundado en 1599 los conventos dePuebla de los Angeles y de Oajaca, y el P. Riverafundó los de Colima, Valladolid y Tacuba. El,por su persona, trabajó en las misiones de Honduras, donde el P. Juan de Alburquerque fundóvarias reducciones (1).En Panamá comenzó también por 1606 la re-— 87 —El M. Fr. Melchor Hernández(1) A. H. N. Pergaminos de la Merced de Madrid, leg a917. -jo(1) Boletin de 1917.ducción de los indios de Chiriquí el P. MelchorHernández, hijo de la provincia de Lima, queempleó allí treinta arios con gran fruto. Es autor

— 88 —de trabajos muy estimados sobre lengua quechua(1).En el Ecuador proseguían también su laborentre los .cayapas y málabas en las provinciasnorteñas los PP. Pedro Romero y Fernando deHincapié, de los que hablan con grande elogiotodos los contemporáneos. Los málabas sublevadosen 1611 mataron a cinco soldados e hirierongravemente al P. Romero, que pudo aún declararen la información que se hizo, muriendo pocodespués (2).Todas las provincias conservaban y desarrollabansus doctrinas, extendiendo cada día suradio de acción. En las de Chile y Tucumán sefundaron ahora conventos tan importantes comolos de Chimbarongo, San Felipe, Córdoba y BuenosAires.No era grande, sin embargo, el número dereligiosos. En un pleito famoso que se ventilabaen 1612 entre los regulares y los ordinarios sobreel pago de diezmos, consta que la Merced teníaen las cuatro provincias del Virreinato del Perú,50 conventos y 541 religiosos, con 72 doctrinas y49.600 pesos de renta, sin los sínodos (asignacionesparroquiales) ni los aprovechamientos de haciendasy frutos (3).En el virreinato de Nueva España existía laprovincia de Guatemala con muchas doctrinas(1) La Merced de 1929, pág. 256.(2) Monroy: Convento de Quito, I, 94.(3) Academia de la H.': Colección Muñoz, tomo 91.— 89 —y algunos conventos en México. Pueden calculárselehasta 25 casas y unos 200 religiosos, segúnla información hecha en 1619 (1). Sumados estoselementos a las cinco casas y cincuenta religiososde las Antillas, obtendríamos un total deochenta casas y alrededor de 800 religiosos entoda América, a los que corresponde un promediode actividad muy apreciable.En el campo de las ciencias el trabajo eratambién considerable, sobre todo en España. ElP. Zumel escribía sus opúsculos contra los venecianosy en defensa de la autoridad del Papa,que le mereció un breve muy afectuoso de ClementeVIII. Preparaba también sus tres tomosde «Varias Controversias», cuya impresión terminóel General después de muerto el autoren 1607.Hiciéronsele en todas partes magníficos funeralescon oraciones fúnebres en que se manifiestasu grande influencia en las disputas de su tiempo.El futuro Obispo de Rosse, Fr. Melchor Rodríguezde Torres, publicaba también en Burgos su«Agricultura del Alma» y otras obras y el Comendadorde Madrid, Fr. Cristóbal González, sus« Consideraciones sobre el Génesis». El MaestroMachado (t en 1609) sacó por entonces a luz untomo de comentarios a los Evangelios que sereimprimió en 1608 en Maguncia. Repetiansetambién las ediciones de Fr. Hernando de Santiago,cuya fama llenaba España e Italia. Ape-(1) Loc. cit., t. 89.

— 91 —nas le era inferior el P. Hernando de Ribera,Secretario general y luego Provincial de Andalucía.Serialóse el convento de Madrid por su campariaen favor de la oración mental y comuniónfrecuente y aun diaria. Escribió en favor de ellael P. Machado, cuyos argumentos desarrolló elP. Falconi (1).El P. Santiago tuvo grandes disgustos con elGeneral, que llegó a quitarle el hábito, pero elfamoso orador hizo valer su justicia ante el Nuncio,y al poco tiempo ocupaba de nuevo importantescargos. El Rmo. Monroy era duro en castigara los que no cumplían fielmente sus órdenesy parece que el Maestro Santiago no puso lamayor diligencia en los asuntos a que le habíaenviado a Roma. Sin embargo, sacó la confirmaciónde los descalzos y de todos nuestros privilegios.En Salamanca obtuvo una cátedra de Artesen 1604 el P. Juan García, que en 1608 ganó lade propiedad de Súmulas. En este ario entró enel profesorado el P. Pedro Merino, y adelanteocupó la cátedra de Filosofía Moral, que habíatenido Zumel y vivió con gran prestigio hasta1649.En la Universidad de Alcalá quisieron losenvidiosos privar a la Merced del lugar preeminenteque daba a sus rectores el cargo de juezEl M. Fr. Pedro Machado, por Zurbarán(1) Ferreres, Juan B.: «La Comunión frecuente y diaria»,pág. 63.

- 92 -conservador, convertido por el prestigio de losPP. Juan de Riaño y Agustín Revenga en juezordinario del claustro. La prescripción era enrealidad el mejor título de tan extraordinariajurisdicción, cuyo mantenimiento se obtuvo enRoma, a pesar de la Universidad y de los estudiantes.Estos acabaron al fin por imponersearios adelante a gritos y pedradas.Para contentar al claustro universitario se leofrecían en los Capítulos provinciales de Castillados rectores en que pudiera escoger, haciendo elpreferido información de limpieza de sangre atoda satisfacción.Fueron elevados al episcopado el MaestroFr. Francisco de Vera, ex Vicario general delPerú, nombrado auxiliar de Burgos y de Santiagoy más tarde de Elna, donde tuvo que sufrirmucho de sus canónigos, incluso atentados personales.Logró, sin embargo, someterlos y murióen Madrid en 1616. También fué Obispo auxiliarde Burgos el P. Alonso Enríquez de Armendáriz,trasladado luego a Cuba y más tarde a Mechoacán,donde hubo de sufrir no poco. El GeneralP. Monroy estuvo propuesto para la mitra dePuerto Rico, pero la rehusó, falleciendo en Sev i-lla en 1614.En 1606 celebró en Madrid el Capítulo intermedio,que presidió el Nuncio Monseñor Millinicon breve apostólico. Los capitulares se resistierona que el Capítulo próximo fuera en Roma,como deseaba el Presidente. Otro breve ordenabaque socorrieran al convento de Roma con ella"- 93 -tro mil escudos. Serialáronse mil a la provinciade Lima, mil doscientos a la del Cuzco, quinientosa la de Nueva España y trescientos a las deTucumán y Chile; a Castilla cuatro mil reales yotros tantos a Andalucía. El resto debería arbitrarloel General, pues las provincias de Aragón,Valencia e Italia eran pobres y sólo podrían deciralgunas misas.Había pocos religiosos en San Adrián y seimpone a cada provincia la obligación de tenera su costa dos padres, uno en Roma y otro en laprovincia de Italia que este ario se erige. Pídensecuentas al Maestro Vargas, que es Procuradorhace muchos arios y no las ha dado. Cada provinciade España enviará 25 ducados para losgastos del Procurador; lo demás lo arbitrará elGeneral. Adóptase definitivamente el aumentode dos electores generales por cada provincia,por la razón arriba alegada, y que el Procuradorgeneral sea uno de esos electores .por su provincia.Encárgase activar la canonización de SanRamón Nonato, nombrando comisarios para elloal P. Cristóbal González, Vicario provincial deCastilla y al P. Jerónimo de Bustamante, Comendadorde Madrid.1VIonroy era sólo presentado y ahora lo hacenMaestro. Dáse voto decisivo en los Capítulos ydefinitorios a los Generales y Provinciales salientes.«Item porque en las guerras y alborotosde Francia han apostatado muchos frailes: quesi vuelven, se les reciba con caridad; y si des-

— 94 —El Obispo de Rosse Fr. Melchor de Torres-pués se hallare haber cometido graves delitos,se les expolie del hábito».La provincia de Nueva Espaia (Guatemala)pague al General 100 ducados, rebajándole 20,de los que solía pagar para el vestuario. El— 95 —Maestro López Salmerón había enviado del Perú2.500 ducados y se los embargó el General. Quese le dé la mitad y la otra mitad al convento deque es hijo.Se conceden muchos grados, entre ellos el dePresentado al P. Francisco León, Comendadorde Olmedo, por sus muchas prendas y virtud,aunque le faltaban algunos requisitos. No setrató de la confirmación del General, por ser denombramiento pontificio.Fué él quien presidió el Capitulo de 1609 enGuadalajara, donde se había de elegir sucesor.Reuniéronse 30 votos y el Provincial de Valenciapretendió que lo fueran también los Comendadoresde Valencia, Gerona y Tarragona, a loque se opuso Monroy, pues dividida ya la provinciade Aragón, tenía representación suficiente.Comparecieron nuevos definidores por Francia,donde se habían celebrado dos Capítulos,por culpa en gran parte del Visitador Fr. PedroBallester, a quien se castiga severamente.Salió General el Maestro Fr. Felipe Guimerán,por todos los votos menos el suyo. Merecenotarse el siguiente acuerdo: «Item por cuanto hahabido grande exceso en dar hábitos a personasindignas, inhábiles e insuficientes, de baja suertese ordena y manda, como otras veces se hamandado y ordenado que no den hábitos ningunossino conforme al rigor de la Constitución... yso pena de privación a los comendadores que locontrario hicieren.»El número de frailes había más que doblado

- 96 -desde 1550 y siguió creciendo desmesuradamentehasta fines del siglo. El convento de Madrid pasabade 70 religiosos y había varios de cincuenta.Era la manía de todas las órdenes, que considerabanmala vergüenza el ser pocos. Las familiasse empeñaban también en que fueran admitidossus hijos, aunque tuvieran que asignarlesuna pensión, pues la Orden no podía sostenertanto personal.Así los conventos venían a convertirse en asilosde gente semi-inválida, no según han notadosus enemigos, sin perjuicio de acusarlos a renglónseguido de arrojar de si despiadadamente a losque no trajeran honra ni provecho. Lo cierto esque nuestros capitulares de 1609 tenían muyarraigado el prejuicio nobiliario contra la gentede baja suerte, que hoy nos parece poco cristiano.No pensaba así Zumel, cuando lamentabaque por falta de un hábito viejo se perdiera unavocación excelente. El prejuicio aristocrático fuédefendido violentamente por nuestro Fr. Alonsode Rojas en su Gobernador Eclesiástico, obranotable por otros conceptos.El Maestro Fr. Hernando de Paredes, VicarioProvincial de Lima, pidió al Capitulo se dejasea las casas de América la cuarta parte del p e-culio de los frailes españoles fallecidos allá hastaentonces, pues en adelante deberían traerse a losconventos de que eran hijos. Fué éste uno de lospuntos más discutidos adelante, pues los españoles,trabajadores y económicos, reunían fondosconsiderables.- 97 -Limitáronse los poderes a los Vicarios de Indiasy prohibióse admitir en la provincia de Tucumána los fugitivos de otras que allí acudían.El Provincial de Santo Domingo dure cuatroaños, como los demás de América, por estar muydistantes los conventos.Dánse normas a los lectores. Las clases durenhora y media y la enseñanza de la Teología seaajustada a Santo Tomás y al P. Maestro Zumel,de buena memoria.Los descalzos gastaban mucho en jerga, quese destrozaba pronto; se les concede vestir sayal.El Provincial de Guatemala tenía un Vicarioen México, y el de Lima otro en Quito. Que nomuden sin motivo los religiosos de la provinciaa la vicaria, por ser tan lejos.Se dan exenciones de Maestro al P. GasparNúñez y de Presentado a Fr. Alonso Ruiz, por serpredicadores insignes, con tal que saquen brevepontificio.El Capitulo intermedio del P. Guimerán secelebró en Murcia en 1612 y es notable por muchosconceptos. Asiste el Provincial de Francia,Maestro Fr. Vidal Dubuc, gran predicador, muyvenerado por sus virtudes.Guimerán pretende irse al coro hasta que elCapítulo determine libremente si lo confirma ono por el segundo trienio, pero le retienen aclamándolo,confirmado. Es la última vez que esosucede, pues el Capítulo acordó pedir la supresiónde los intermedios.Encárgase al Maestro Fr. Ambrosio Machín,7

— 98 —sardo, promover la canonización de San Ramón,y hácese independiente el convento de Portell,que hasta entonces era priorato de Barcelona.Arbítrainse nuevos recursos para San Adrián.El General propuso la restauración de la provinciaitaliana, pero sólo tuvo a su favor el voto deFray Melchor Rodríguez, Definidor por Castilla.El Capítulo deja al General el nombramiento dePresentados y Maestros, pero Guimerán rehusa.tan enojosa facultad. La ambición por los gradosparece la preocupación máxima de gran parte delos religiosos. ¡Cuánto trabajo y dinero se gastó'en ello!Quitase a los Vicarios Generales la facultadde prohijar religiosos de Tucumán, Chile y SantoDomingo en Lima ni en el Cuzco, que eran másricas, pero no al contrario.Redactóse un modo de proceder contra los religiososculpables en América, aprobado y reimpresodespués varias veces, para e-vitar arbitrariedades.Era natural que Guimerán, que tenía,breve para irse a la Cartuja desde 1593, insistiesemucho sobre la observancia de la oraciónmental y así lo hizo.Para evitar favoritismos y abusos mándaseproveer las lecturas por oposición, como se venía'haciendo en Castilla con excelente resultado.Había muchos fugitivos, más que en los siglospasados, y se castigan severamente. Elógiasemucho el gobierno del Maestro Ribera en la Nu e-va España.Apruébanse las Constituciones que para los— 99 —noviciados de Castilla había hecho el ProvincialMaestro Aguayo, y que más tarde se mandaronobservar en toda la Orden. Son una anticipaciónde la disciplina hoy general en toda la Iglesia (1).El Maestro Fr. Alonso Remón pide ayuda paraEi limo. Fr. Alonso Enríquezimprimir la «Historia de la Merced», y se encargade ello al Provincial de Castilla.Concédense exenciones de Maestro de númeroen Andalucía a Fr. Hernando de Santiago, comolas había tenido en Italia.(1) A. H. N1.: Papeles del Clero, Madrid leg. 439. Librode visitas del convento de Madrid.

-- 100 —Fr. Luis de Jesús María (o de Escobar), ennombre de los recoletos pide que uno de losDefinidores de Castilla y Andalucía sea escogidoentre ellos y que un descalzo pueda acudir alCapítulo general. Accedióse a lo segundo y acordóseque en lo primero proveyesen los respectivosCapítulos.A petición del Maestro Dubuc, Provincial deFrancia, se designa para recolección la casa deBurdeos, bastante mejorada por el Mariscal Alfonsode Ornan° que allí había mandado enterrarseen 1610. Fué a hacerse cargo de ella elP. Miguel de las Llagas, pero tropezó con tantasdificultades que hubo de desistir, pasando a establecerla reforma en Sicilia.Fué extraordinario el número de religiosos degran virtud que florecieron en este tiempo. FrayGabriel Téllez que conoció a muchos de ellos noacaba de enumerarlos, aunque tenía los ojos muyabiertos para ver los defectos, sobre todo la ambición,de los que estaban tocados de esa peste.En 1605 falleció en Zaragoza un santo legode Trento, llamado Fr. Pedro Nolasco, que en sumezcla de italiano y de español edificó a toda laciudad y corrigió muchos defectos y pecadosmientras acompañaba a la Universidad al PadreGabriel Romeo, famoso teólogo.Más influencia tuvo en el confesonario otroFr. Pedro Nolasco, sardo, que vivió y murió enValencia, cuya vida con su retrato publicó elP. Guimerán en 1610.En Madrid se fundó en 1609 el convento de— 101 —recoletas de Don Juan de Alarcón, donde florecierondesde el principio almas escogidas, distinguiéndoselas tres fundadoras Sor Antonia deJesús, Sor Francisca de San Antonio y Sor Jacobelade la Cruz.Téllez elogia particularmente al joven coristaFr. Gonzalo de Ulloa, modelo de pureza y caridad,fallecido en Olmedo. Había profesado enMadrid el 27 de octubre de 1610. Como sacristánde la capilla de los Remedios del convento deMadrid se santificó un caballero francés llamadoFr. Ramón de Ruiperós, que profesó el 18 dediciembre de 1610 y murió en 1614.El mencionado cronista inserta igualmenteuna larga biografía de Sor Isabel Juana Catalány Villalba, valenciana, escrita por el P. AntonioGralla, su confesor durante más de veinte años,santo varón, catedrático de Filosofía en la Universidadde Valencia, autor de sermones estimables.En 1606 murió el P. Martín de Salvatierra,Maestro de novicios en Valladolid, modelo deoración y recogimiento (1).En 1603 murió en Valladolid también el MaestroFr. Juan Negrón, ex Provincial y Catedráticode la Universidad, predicador de espíritu apostólicoy varón de grande humildad, que se gloriabade su modestísimo origen.El General Monroy reedificó casi enteramenteel convento de Sevilla, como hoy subsiste con-(1) Vargas, II, 458.

7-..11.11K— 102 —-vertido en museo, dotando su iglesia de ropas Yalhajas.Fundóse en 1604 el convento de Sollana, ce/ca de Valencia, por diligencia del P. Juan MarchEl Vicario general de Sicilia, Fr. Esteban d eMuniera, dió a los descalzos los conventos d eMessina, Agrigento y algún otro que con grand eabnegación restauraron.En 1611 la Comunidad de Madrid dió el patranato de su convento y capilla mayor a D. Mencía de la Cerda, Marquesa del Valle, viuda deD. Fernando Cortés, nieto del conquistador deMéxico. Dió al convento dos mil ducados anualey mil para la redención, aunque, como todas lacosas humanas, esta renta tuvo grandes quiebras.El Maestro Guimerán, terminado su Gobierno, fué promovido al Obispado de Jaca, al queno llegó corporalmente, pues murió en Valenciadespués de consagrado, el 24 de enero de 1617,siendo depositados sus restos con veneración enhermoso sepulcro en nuestra iglesia, que habíamejorado mucho. Sus libros son tan útiles parala Historia como para la piedad. Era gran predicador, y, como otros mercedarios, había sidolectoral en Tortosa.Hiciéronse durante estos años copiosas redenciones:La primera en 1604 por Aragón y Valenciasiendo redentores los PP. Domingo de Usabiagay Juan Bautista Guerau, que padecieron grandestrabajos en Argel y lograron sacar 104 cautivos— 103 —El limo. Guimerdn. (Cuadro existente en el palacio de Jaca)El P. Usabiaga fué Provincial de Aragón en1606, hombre de grandes virtudes que el Señoracrisoló con no menores trabajos. Era guipuzcoano.La segunda redención por Castilla y Anda-

— 104 —lucia, de 196 cautivos, la hicieron en Marruecoslos Padres Matías de Cuéllar, ex Provincialde Castilla y Juan Gutiérrez del Tejo en1607 (1).La tercera, también de Castilla y Andalucíae Indias, la hicieron en 1609 los PP. Pedro deMedina y Fi:. Gaspar Núñez, que sacaron deTetuán 132 cautivos.La cuarta por los mismos Padres en 1612,también en Marruecos, de 141 cautivos.Finalmente, la quinta al terminar el gobiernode Guimerán en 1615 por las cuatro provinciasen Marruecos, de 258 cautivos, siendo redentoreslos PP. Juan Cavero, por Aragón; Isidro de Valcázar,por Castilla; Ginés de Arrieta, por Andalucía,y Tomás Sanz, por Valencia. Hubo cautivosmuy costosos, como un Padre agustino deBarcelona, por cuyo rescate se pagaron 55.000reales, y un caballero de Malta, francés, quecostó 38.000 reales.En el Capítulo general de 1612 se exhibieronlistas completas de las redenciones hechas enlos últimos cincuenta arios, o sea desde la famosade 1562. Habianse rescatado 2.710 cautivos, osea un promedio de 54 por año (2).En el Capítulo de 1615, según el P. LatomY,que era uno de los Vocales, se calcularon en21.632 los cautivos rescatados desde el principiode la Orden, y agregando las dos últimas reden-— 105 —ciones hasta 1618, se obtiene un total de 22.043cautivos en cuatrocientos años (1).Claro es que ya entonces había algunos que,no contentos con esas modestas realidades, calculabanen sesenta u ochenta mil el número deredimidos.(1) Bib. Nl. Ms. 2791.(2) A. C. A. Monacales, t. 2.681, fol. 211.(1) Latomy: «Histoire de la Fondation... de la Merey»,página 89. Paris, 1618.

CAPITULO VLos Generales Ribera, Machin y Prieto(1615-1627)SUMARIO: Elección del Maestro Ribera.—Acuerdos importantes.—Misiones en América. Erección de la provinciade Quito. — Idem de México.— Separación de losdescalzos.—Provincia de Italia.—Conventos de Cerderia.—RiberaObispo.—Machin, Vicario y General electo.—Campariacontra los Vicarios generales.—Religiososvenerables en el Perú. — Monjas esi España.—Prestigiode Machin.—Elección de Prieto.—Capitulos enAragón. —Junta de 1625.—Mexicanos ilustres.--Heroismode los mercedarios sicilianos.—Prieto Obispo.—Redenciones.El Capitulo de 1615 se reunió en Calatayudel 6 de junio, bajo la presidencia del General saliente,y fué elegido para sucederle por 33 votosde 35 el P. Francisco de Ribera, Provincial deCastilla y antes Comendador de Madrid y Vicariode Nueva España. Era natural de Alcalá e hijodel convento de Madrid. Asistieron muchos vocalesamericanos, cosa desusada.Recibiéronse dos cartas de los CardenalesZapata y Borghese, muy honrosas para el Generalsaliente. Los capitulares dejaron al nuevo laelección de Vicarios para América. El P. Alonso

— 108 — — 109 —Enríquez, ahora Obispo de Cuba, envió cinco milpesos para la canonización de San Ramón.Aceptáronse las fundaciones del convento deParís y de Chenoise, la primera debida a la ReinaMaria de Médicis y la segunda al caballero Felipede Castilla, a los cuales se dieron las gracias.Aprobóse también la fundación de descalzos enSan Lúcar.Encomendóse al General que enviase lectoresa la isla de Santo Domingo, como lo hizo, luego,yendo al frente de ellos el P. Fr. Juan Gómez yformando parte de la expedición Fr. GabrielTéllez.Suprímense las exenciones de gracia. Mándaseque los Provinciales premien a los que enAmérica trabajan con fruto. De Guatemala asistiócomo Definidor Fr. Juan de Alburquerque,famoso misionero que, apoyado por el General,obtuvo del Rey el pasaje de veinte misioneros aaquella provincia, haciendo para ello una informaciónmuy interesante (1).Fué ésta una de las últimas expediciones considerablesde nuestra Orden. También las demásaflojaron sus entusiasmos, en vista de la pocaaptitud de los indios para la civilización. En lamayor parte de las provincias los misioneros selimitaron a conservar lo adquirido. Para los frailesespañoles fué éste un grave contratiempo,pues cerrada esa puerta les faltaba el estímulode las grandes empresas, limitándose su horizon-(1) Boletín de 1917, pág. 92.te a la redención, un poco de enseñanza, algunapredicación y mucho tiempo perdido.El limo P. Francisco de Ribera. (Auténtico, de Pacheco)Y a todo esto las comunidades continuabancreciendo sin tino ni medida. Menos mal que ladisciplina era fuerte y se mantenía con rigor la

— 110 —clausura. Es de alabar también la solemnidaddel culto en nuestras iglesias, que según Remóny otros cronistas, competía con el de las catedrales,distribuyendo como en ellas el oficio por lasdiferentes horas del día y cantando siempre lamisa solemne de comunidad. No era mala manerade entretener el tiempo.El Provincial de Guatemala, Fr. Francisco deOrea, hizo un esfuerzo para venir con sus cuatrocompañeros a este Capitulo. En 1605, siendo Definidor,había intentado obtener de la Santa Sedepermiso para que las provincias de América cometieransus votos a religiosos europeos. Opúsoseel Maestro Vargas, entonces Procurador, porquede ese modo las elecciones estarían supeditadasa Castilla y Andalucía, corno antes lo habíanestado a Cataluña (1).Mandóse enviar al General cada afío unarelación de los religiosos notables fallecidosen cada provincia. Que en los conventos nose representen comedias ni vayan los frailesa verlas, pena de privación de voz activa y pasiva.Acordóse la división de Lima y Quito, señalandoa esta provincia el territorio de su Audiencia,con los conventos de Quito, Portoviejo, Ríobamba,Ibarra, Cali, Pasto y unas veinte doctrinas.Suplicóse a Su Santidad que los espolios delos religiosos españoles muertos en Indias, se(1) Vargas, II, 429.— 111 —aplicasen a los conventos de Roma, Madrid, Barcelonay Alcalá de Henares.Aprobáronse las nuevas Constituciones de losDescalzos. El Dr. Fr. Serafín de Freitas, Catedráticode Cánones en la Universidad de Valladolidy escritor famoso de Derecho internacional,pide ser nombrado Maestro en Teología, yacuérdase pedirlo a S. S.Prohíbese embarcar a Fr. Francisco de Oviedomientras se averigua a qué vino por orden dela Audiencia de Panamá. Era el primer ensayoque hacía de las negociaciones que tanto molestarona los Generales posteriores. El de ahora dasu librería al convento de Madrid.Acuérdase erigir la provincia de México separándolade Guatemala. El Rmo. Ribera, siendoComendador de Madrid, había alcanzado en1612, permiso para las fundaciones de Veracruzy Atlixco, de modo que la nueva provincia tendríasiete conventos, con los de México, Puebla,Tacuba y Oaxaca.Murió santamente el 5 de octubre de 1616en el convento de Santa Bárbara, de Madrid,el Padre Juan Bautista del Santísimo Sacramento,y desde el año siguiente comenzaron losDescalzos a procurar su independencia con variospretextos. En el Capítulo de Castilla de1617 protestaron los Vocales descalzos que ellosninguna parte tenían en esas gestiones, antesse opondrían a ellas en cuanto pudieran. Suscribieronal efecto un documento que uno de ellospresentó en Roma, pero al cabo de tres años

— 112 —de negociaciones la separación estaba ya consumada.Obtúvola en 1620 el P. Diego de San Pablo,firmando con el P. Antillón, Procurador en Romay el P. Pedro de Guzmán, agente de la provinciade Castilla, una concordia por la que se erigíanlas provincias descalzas de Castilla y Andalucía.La Santa Sede nombraría un Comisario generalpara los Descalzos y en efecto nombró en 1621al P. Juan de San José (Maroto) hasta el próximoCapítulo.En Italia consiguieron también los Descalzosla restauración de la provincia por breve del mesde mayo de 1619. Celebróse Capítulo en Nápolesbajo la presidencia del Procurador general MaestroFr. Juan de Manaria, y salió elegido el PadreFr. Juan Hurtado. Asisten seis ComendadoresDescalzos, a saber, los de Messina, Agrigento,Mineo, Francofonte, Bizzini y Cattolica, con losCalzados de Roma, Nápoles, Palermo y Messina(1). En 1622 salió Provincial el M. Fr. Alonsode Molina.El Maestro Fr. Antioco Brondo fué variostrienios Comendador de Cagliari y Comisario enla Isla del Provincial de Aragón. Hizo todo loposible por dar a la Orden el mayor esplendor enlos estudios, redención, enseñanza, predicación,etcétera. Fundó los conventos de Sassari, Muravera, Villacidro y Sarrabus. Este duró poco. Losotros, aunque pobres, se mantuvieron dos siglos.(1) Vargas, II, 398.— 113 - -Los libros del P. Brondo dieron gloria a la Ordeny excitaron a otros mercedarios sardos a escribir,dando a la Merced un carácter intelectualque no tuvo ninguna otra Orden en la Isla, comohace pocos años notaba un Arzobispo de Cagliari(1).El Procurador general, Fr. Francisco Manuelde Muniera (hermano del Obispo Fr. Esteban),obtuvo en 1616 lecciones propias para la fiestade la Merced en el domingo más próximo al primerode agosto. El Procurador de los descalzos,Fr. Diego de San Ramón, acreditó su habilidadobteniendo el decreto de ampliación del culto deSan Ramón Nonato en 1625, y contribuyó grandementea la extensión del de San Pedro Nolascoen 1628. Gestionó también en 1626 la fundaciónde una residencia en Argel, que hubierasido utilísima, pero no llegó a realizarse (2). Losdescalzos tenían en Roma la iglesia de los SantosPedro y Marcelino.El Rmo. Ribera fué propuesto en 1617 parael Obispado de Guadalajara, en México, y loaceptó, aunque la Santa Sede había abolido yael Capítulo general intermedio, que era un buenpretexto para dejar el gobierno de la Orden. Pasóa su diócesis en junio de 1618 y se consagró en laMerced, de México, gobernando luego su iglesiade Guadalajara con el mismo acierto que había(1) A. C. A. Monacales 2.659. Actas originales de Capitulos.(2) Boletin de 1925, pág. 381.

— 114 — — 115 —tenido en los cargos inferiores y mostrando siempregrande amor a la Orden (1).El P. Ribera tenía grande afecto al Provincialde Aragón, Fr. Ambrosio Machín (o Magí),y vió sin disgusto cómo éste renunciaba el cargopara hacerse elegir Prior de Barcelona, mientrasel Maestro Papiol, que era Prior, pasaba a Vicarioprovincial. Hecho esto, Ribera renunció elgeneralato en manos del Nuncio, entrando elPrior de Barcelona de Vicario general de la Ordeny asegurándose de tal modo la presidenciadel Capítulo, que debía celebrarse en Guadalajarala víspera de Pentecostés.Alguien que vió el juego aconsejó al Papa elnombramiento del Maestro Fr. Esteban Manuelde Muniera para Vicario general, pero Machínse dió arte para conservar el puesto, y el díaseñalado abrió el Capitulo en Guadalajara, dondefué proclamado General en medio de una deshechaborrasca. Indignóse el Nuncio y le exigió ladimisión, que presentó efectivamente, pero al finconsiguió ser confirmado.El P. Muniera, que padeció mucho en estaspendencias, fué nombrado Obispo de Cefalú enSicilia, donde murió en 1629 en reputación desanto. El año 1618, cuarto centenario de nuestrafundación, fué de poquísima tranquilidad para laOrden. Celebróse, sin embargo, solemnementeFelipe III , que miraba con especial afecto anuestra Orden, la honró con su asistencia.(1) Pareja: Crónica, I.Al citado Capítulo de 1618 asistió como Definidorde Santo Domingo el P. Gabriel Téllez,El V. Gonzalo Díaz, por Fr. Melchor Prietoque pidió el grado de Presentado, pues habíaleído allá tres cursos y no había graduado algunoen aquella provincia. Premióse al P. Melchor

-- 116 —Hernández, misionero de la provincia de Lima,por sus trabajos en Chiriquí, donde había fundadovarios pueblos.El Rmo. Ribera nombró Vicario general delPerú en 1615 al Maestro Fr. Melchor Prieto, quedesempeñó el cargo con entera satisfacción ygran fortaleza. Su secretario el Presentado FraySebastián de Irastorza, fué Provincial de Limaen 1617 y no se mostró deferente con el PadreMachín durante su vicariato.Desde 1621 los americanos arreciaron en sucampaña contra los Vicarios generales, cuyasupresión pedían al Rey. Desgraciadamente,ellos mismos con sus denuncias contra los Provincialesdemostraban la necesidad de los Vicariosy aun algunos de éstos fueron acusados deremisos, como el P. Juan García, Catedrático deSalamanca, Visitador del Perú de 1623 a 1630,de quien se dijo que había sido excesivamentebenigno con el Provincial de Lima Fr. JuanVallejo, sobrino del otro Vicario P. Pesquera (1)-El resultado fué que el Rey mismo ordenara alGeneral enviar un Vicario enérgico.En el Cuzco fueron provinciales con grandeacierto los PP. Diego de Velasco y Mateo deVillarroel, ambos de gran espíritu, que volvieronmás tarde a su provincia de Castilla.Murió santamente en el Callao en 1618 elhermano lego portugués Fr. Gonzalo Díaz, queedificó a aquella ciudad y a la de Lima con sil— 117 —extraordinaria caridad, humildad y penitencia.El Vicario general Fr. Melchor Prieto trajo elproceso de canonización hecho por el ArzobispoLobo Guerrero, que poco después levantó de tierrael cuerpo del Venerable Gonzalo, hallándoloincorrupto.Dejó también fama de Santidad el P. BernardoBohorquez, natural de Pasto, que profesó enQuito en 1579 y se dedicó a las misiones. Sorprendidopor la peste en Castrovirreina y poniendopor obra lo que había enseñado de palabra,se dedicó a cuidar los enfermos, hasta que contagiadoa su vez, coronó una santa vida congloriosa muerte. Era entonces conventual deHuánuco.Pero la figura más gloriosa de aquellas provinciasen estos arios es el P. Presentado FrayAlonso Gómez de Encinas, natural de Cuéllar,hijo del convento de Valladolid, alumno de Salamanca,doctrinero en la isla de la Puná, frente aGuayaquil. Los piratas holandeses rechazadosen la ciudad, desahogaron su ira con el Misioneroa quien abrieron el pecho en busca de la Eucaristíael 13 de junio de 1624.Fundóse en 1613 un convento de Recoletoscalzados en Lima, al que honró con sus virtudesel lego portugués Fr. Jerónimo de los Santos (1).En 1621, el P. Melchor Rodríguez, Obispo deRosse, fué a Vizcaya para recibir el voto de clausurade nuestras religiosas de Bilbao, Marquina(1) Roma: Arch. del Procurador, t. 1 de Indias.(1) Boletín de 1931, pág. 105.

— 118 —y Escoriaza, realizando el deseo largo tiempoacariciado por la Orden de convertir en conventosformales aquellos beaterios (1). Para hacerlas obras indispensables en los conventos de Bilbaoy Escoriaza dió la provincia de Castilla ayudaconsiderable (2).El Maestro Fr. Fernando de Ono dió tambiénen 1625 el velo negro a las beatas de Ibárruri,que poco antes se habían trasladado a Guernica-Aj angui zEn Andalucía se fundaron por estos años conventosde mercedarias descalzas en Lora, Fuentesy Sevilla, todos con personal salido de laAsunción, de esta ciudad, que comunicó a lasnuevas comunidades gran espíritu de penitenciay pobreza. En Lora del Río murió en 1617la Madre María de la Antigua, autora de estimadoslibros de Ascética y Mística, reimpresosvarias veces. Había sido antes religiosa clarisa.Pero la joya femenina que más honra a laMerced en España en estos años, es la BeataMariana de Jesús, madrileña, a quien dió la profesiónel Rvdmo. Guimerän en 1613. Era confesadadel P. Juan Bautista del Santísimo Sacramentoy vivió al lado del convento de SantaBárbara en admirable fervor eucarístico hastael 24 de abril de 1624. Su cuerpo incorrupto fué(1) Boletín de 1920, pág. 344.(2) Bib. NI. Ms. 2.684: Extracto de Capítulos provinciales.— 119 —levantado de tierra pocos arios después y Pío VIla beatificó en 1783.Téllez habla con gran veneración del PresentadoFr. Juan de Calatrava, fallecido durante laVerdadero retrato de la Beata Mariana de Jesúsvacante del generalato de 1618 en el conventode Madrid, que había santificado con su recogimiento,estudio y fervorosa predicación. Tuvo,entre otras, la encomienda de Orän, donde hizo

— 120 —mucho bien y convirtió algunos moros con suadmirable ejemplo de fidelidad.En las provincias de Nueva España fué Vicarioen 1609 el P. Presentado Fr. Antonio de Mendoza,que llevó de secretario al mencionadoP. Gómez de Encinas. En 1617 le sucedió elP. Francisco Jiménez, que era Provincial deGuatemala, y en 1619 el P. Juan Gómez, que lohabía sido de Santo Domingo, donde reorganizóla enseñanza y dió vida a la predicación, segúnrefiere su compañero Fr. Gabriel Téllez. Erabuen matemático y hebraísta, pero medianogobernante, por lo que muchos de sus mandatoshubieron de ser revocados. Al Maestro Gómezsucedió en 1625 el Maestro Fr. Alonso Redondo.El Maestro 1VIachín se conquistó las simpatíasde Felipe III y de sus ministros, que «oían sussermones con especial recreo.., y tanta fué lafamiliaridad con que en Palacio se introdujo,que se dignó nuestro católico Philippo con sushijos y familia regia, a instancias y súplicas denuestro Fr. Ambrosio, admitir de merendar unatarde en nuestro Monasterio, fineza que no alcanzaronotras Comunidades más ruidosas», segúnTéllez (1).La Orden y el General se prometían de esteafecto muchos favores, pero la muerte del Reydesvaneció tales esperanzas, viéndose el PadreMachín obligado a aceptar el modesto Obispado(1) Historia general, II, 299.— 121 —de Alghero, su patria, del que fué luego ascendidoa la metropolitana de Caller.El Capítulo general, para darle sucesor, sereunió en Zaragoza en mayo de 1622, bajo la presidenciadel Prior de Barcelona, Maestro Pinell.Dos electores de Italia se ahogaron y los otrostres llegaron tarde; uno de éstos era el MaestroAntillón, gran coleccionador de documentospara la historia de la Orden y autor de variasobras estimables, entre ellas el Epitome Cronológicode los Generales.Rechazáronse los electores de Francia, pueshabían hecho el Capítulo en discordia; en adelantese les exigió que trajeran certificado delNuncio donde constara su legitimidad. El Capítuloen pleno, salvo los indianos, suplicó de lareal cédula en que se suprimían los Vicariosgenerales, permitiendo sólo el envío de visitadores,cuando fueran necesarios.Velase con malos ojos que los Generales yanombrados Obispos continuaran influyendo en laOrden y se acordó que a los ocho días de aceptarla mitra renunciaran el gobierno y, pasadosellos, nadie los obedeciese. Con tan rigurosa medidase quería proteger la libertad de elección,pero esta acta no fué aprobada por la SantaSede.Más eficaz fué otra en que se mandó ponercátedra de Sagrada Escritura en el conventoprincipal de cada provincia, dando así mejordirección a los estudios y apartándolos de vanassutilezas.

— 122 —Salió General por veinticinco votos de veintiséis,el Maestro Fr. Gaspar Prieto, Provincial deCastilla, que gozaba de universales simpatías,dentro y fuera de la Orden. Ántes de ser confirmadopresidió en la misma Zaragoza el Capítuloprovincial de Aragón, saliendo elegido por unanimidadel Maestro Pinell. Prohibióse confesarantes de los treinta y cuatro años, excepto a losMaestros y demás graduados. En el Capítulo de1625, que presidió también el General en Barcelona,salió Provincial el Maestro Fr. Juan Cebriánpor todos los votos. La dureza de los castigosimpuestos a bastantes religiosos, indica lomucho que había que limar todavía en las costumbresgenerales. Los conventos de Cerdeñase dejan a la disposición del Obispo Machín, aquien se dan las gracias por el amor con que losatiende.Los electores del Maestro Prieto echaron demenos los Capítulos intermedios y en su lugarse acordó celebrar una junta en Sevilla en 1625,a donde concurrieron bastantes vocales y setomaron acuerdos importantes. Entre ellos semandó que las beatas y monjas observasen lasConstituciones hechas por el Maestro Fr. MelchorPrieto, exceptuando los conventos de Alarcóny Sevilla, que las tenían propias.«Item atendiendo al excesivo número de religiososque al presente tiene la religión, con quesus conventos se hallan tan cargados que apenaspueden sustentarlos, ordena y manda este santodefinitorio...» que no se den hábitos sin licencia— 123 —del General o Provincial y a personas hábilesque sepan Gramática (1).El Rmo. Prieto hizo grandes obras en el conventode Madrid, cuyo claustro adornó con azulejosy cuadros, y favoreció también mucho a losconventos de Toledo, Burgos y Barcelona. Trajopara ello del Puig al pintor Mercedario aragonésFr. Agustín Leonardo de Argensola, que ejecutéobras de bastante mérito, sobre todo la multiplicaciónde los panes en Toledo, muy elogiada por.Tirso.Entre los asistentes a la Junta de Sevilla secuenta el Maestro Fr. Cristóbal de Cervantes,Provincial de México, Catedrático de Vísperasde Teología de su Universidad, venido en quejacontra el Vicario general Fr. Juan Gómez, quele habla depuesto, quitándole el hábito. El Generaly la Junta le repusieron con todos los honoresy nombraron Vicario general al P. AlonsoRedondo.Estuvo en España también por entonces elP. Maestro Fr. Juan de Herrera, que desempeñóluego papel muy importante en México, dondefué dos veces Provincial. Obtuvo ahora la rehabilitaciónde su hermano el Maestro Fr. Andrésde Herrera, perseguido también por el Vicario(1) A. H. Nl. Códices, 843. Además de este códice seencuentran actas de capítulos generales, impresas o manuscritasen el Ms. 7230 de la Bib. Nl. y en el A. C. A.Monacales tomo 2683 y en un tomo impreso de la Bibliotecade dicho Archivo. Sirva esta indicación para evitar lacontinua repetición de citas.

— 124 —El limo. P. Gaspar Prietogeneral (1). El P. Juan tenía ahora «más detreinta y tres arios, y era de buen cuerpo, jibado»,según detalla su , pasaporte de 1625. Fuécatedrático de Vísperas y de Prima de Teologíay Rector de la Universidad. Su provincia le debióla construcción de sus dos mejores iglesias,(1) Pareja: Crónica, I, 439.— 125 —las de México y Puebla. Falleció en México el 5de noviembre de 1670.La isla de Sicilia padeció una horrible pesteen 1625, quedando poco menos que desiertala ciudad de Palermo. Nuestros religiosos acudíanal socorro espiritual y corporal de los atacadosde carbunco, pereciendo siete de los mercedariosen tan noble empresa, a saber: Fr. JuanBautista de Zurita, espariol; Fr. Vicente Calderón,nacido en Palermo de padres esparioles,Fray Nicolás de Noara, palermitano; Fr. AntonioBraco; Fr. Buenaventura Palmieri; Fr. José Latonay Fr. Pedro Martínez.Otros varios religiosos atacados de la comúnenfermedad convalecieron casi milagrosamente,volviendo a ofrecerse a los demás apestados. ElMaestro Vargas imprimió una relación de estossucesos extractada por Téllez. El 17 de octubrede 1626 falleció santamente en el mismo conventode Palermo el P. Vicente Salanitro, muy penitentey contemplativo, venerado de toda laciudad.El General sirvió al Rey en las Cortes deMonzón, obteniendo que la corona aragonesa prepararala guerra, ya inevitable con Francia, y seopuso con buenas razones a la redención preservativa,ideada por algunos arbitristas, según loscuales debían abandonarse a su suerte los cautivos,pues la redención enriquecía a los moros.En cambio proponían se organizara una poderosaescuadra que vigilara los mares, cosa muy razonabley compatible con la redención.

- 126 -Aunque en otras cosas se opuso terminantementea los deseos del Rey, éste le presentó parael obispado de Alghero, que dejaba Machín. EnCerdeña desempeñó Prieto, junto con el obispado,el cargo de capitán general, y presidió lasCortes allí celebradas, donde se juró defender laInmaculada Concepción.Trasladáronle más tarde a Perpiñán, dondehubo de experimentar los males de la guerra previstaarios antes, y murió de pena en 1637, enreputación de prelado santo caritativo. Tirsodice que fué el General más amable de cuantosconoció.Fray Melchor Prieto, hermano mayor del General,a su vuelta del Perú, fué Provincial deCastilla en 1623. Terminado su gobierno, nombráronleObispo del Paraguay en 1627, dignidadque renunció después de preconizado. Quedóseen Madrid, donde imprimió libros muy curiosos,como la Salmodia Eucarística, con dibujos hechospor él mismo, de gusto barroco. Dejó tambiénimportantes manuscritos, y murió en 1648.En 1627 fué creado Obispo de Ugento, en Nápoles,el P. Luis Jiménez, natural de Cuenca,hijo del convento de Moratalla, a donde se trasladósiendo carmelita.El Ilmo. Machín de Aquena, publicó obrasvaliosas de Teología, y falleció en 1640 en Caller,donde tiene un hermoso mausoleo en la Catedral.Hiciéronse buenas redenciones durante estosarios.- 127 -La primera en 1617 en Marruecos, por losPadres Fr. Pedro Ortiz de Luyando, castellano,y Fr. Juan de Santiago, andaluz, que rescataron152 cautivos.La segunda también en Marruecos el año 1618,de 140 cautivos, por los mismos Padres. El MaestroOrtiz de Luyando, que es autor de libros muyinteresantes y jugosos, escribió sendas relaciones,breves pero muy hermosas, de estos viajes.La tercera, de 121 cautivos, en Argel en 1621,por el P. Vicente Serrano, que padeció mucho yestuvo a punto de ser quemado vivo.La cuarta, de 115 cautivos, en 1624 y en Marruecos,por los PP. Francisco de Benavides yGaspar Núñez, de Castilla y Andalucía, respectivamente.Entre los redimidos figuran dos religiosos,uno franciscano y otro dominico, a quieneslos redentores hallaron tirando de una carretauncidos como bestias.La quinta y más gloriosa fué la de 1627 enArgel por las tres provincias reunidas de Aragón,Castilla y Andalucía, representada por los PadresJuan Cavero, Francisco Galindo y Luis de Vilches.El P. Cavero había sido Provincial de Aragónen el trienio de 1619 a 22. Quedóse en rehenespor algunos cautivos próximos a la desesperación,volviendo sus compañeros con 250 rescatadosy llegando a Valencia el 22 de noviembre.Durante su estancia en Argel desvivióse elP. Cavero por hacer bien a los cautivos en loespiritual y temporal. Fuésele un poco la lenguauna vez hablando de Jesucristo, y un moro, cre-

— 128 —yendo que tantos elogios al Salvador disminuíanla gloria del Profeta, rompió los dientes con unapiedra al mercedario.Sepulcro del P. J'achín en la Catedral de CagliariFué a rescatarle en 1628 el P. Juan de Iraizos,Comendador de Calatayud, a quien sucedió algomás grave, pues viendo cómo llevaban a quemarEl V. P. Alonso Gómez de Encinas, mártir. (Cuadro existenteen Cuéllar, su patria)9

— 130 —a un cristiano, le habló con gran fervor de sudicha. Irritados los moros le quisieron quemartambién a él, y cuando estaba ya ardiendo, acudióel P. Cavero, que pudo librarlo a duras penas.Curólo de sus quemaduras algunos días, regresandoambos a España, donde el P. Iraizos murióen 1630.No dejó tan buena fama el Redentor por Castilla,P. Galindo, que estuvo mucho tiempo en lacárcel por no aparecer claras sus cuentas. LaSanta Sede le absolvió al fin, por no demostrarsesu culpa. Téllez dice que su único pecado fué laambición, pues había procurado el cargo que erasuperior a sus fuerzas.En 1622 suscitaron los Trinitarios nuevamenteel pleito en Aragón contra la exclusiva de losnuestros en redimir cautivos, siendo rechazadasu pretensión.CAPITULO VIGeneralatos de Cebrián y Serrano (1627-1636)SUMARIO: Elección del P. Cebrián. —Acuerdos importantesdel Capitulo de Toledo.—Rezo de San Pedro Nolasco.— Proyecto de misiones en China. —Religiososheroicos en Tucumán.—Grandes literatos mercedarios.Venerables.—Los Vicarios generales.—Elección del PadreSerrano.—E1 P. Ponce de León.—Otros misionerosen Chile.—E1 P. Sola.—Vicarios en el Per-1.1.—El PadreOviedo y sus memoriales.—Persona,1 en América. —ElP. Vázquez de Miranda.—Redenciones.Presidió el Capítulo de elección en Toledo, lavíspera de Pentecostés de 1627, el Prior de Barcelona,Fr. Onofre Gralla. El General saliente,Prieto, ya Obispo electo, se presentó a dar cuentade su administración, y la dió tan cumplida quesus censores no pudieron menos de alabarla.Alcanzaba la data al cargo en 58,644 reales, quePrieto perdonó a la Orden, por lo cual el definitoriole da las gracias. Tenemos la cuenta autógrafa(1).También ahora se presentaron votos dobladospor Francia, donde habían celebrado dos Capítulos,uno en Tolosa y otro en Burdeos. Fueron re-(1) A. C. A. Monacales, 2.831, fol. 34.

— 132 --chazados todos, según informes de los PP. Gasparde los Reyes, Catedrático de Salamanca, yPablo Costa, Catedrático de Zaragoza, que habíansido Comisarios en Francia por el General Prietoy presenciado parte de los hechos.Salió elegido el Provincial de Aragón, MaestroEl limo. P. Juan CebriánFr. Juan Cebrián, de la familia de los Condes dePerales, alumno de Alcalá y de Salamanca.Aplicäronse al convento de Barcelona porcinco años los espolios de los frailes españolesque muriesen en Indias, logrando así restauraraquella primera casa de la Orden, que mucho lonecesitaba.Confirmóse el patronato de los conventos deTudela, Estella y Sangüesa al Marqués de Cacle-— 133 —reita, D. Lope Díaz de Aux, que obtuvo luegobula en su favor.Encargóse al General resolver el conflictopendiente en Tucumán, donde era electo provincialel M. Fr. Bernardo de Zárate, que habíaestado expulso de la Orden. Dänse en cambio lasgracias al M. Fr. Alonso de Castro, Comendadorde Tucumán, por lo mucho que ha servido a lareligión.Tribútanse merecidos elogios al P. Mateo deVillarroel, Vicario provincial del Cuzco, dondehabía hecho gran bien a los conventos. Asistetambién el P. Diego de Velasco, ahora definidorde aquella provincia, a la que no volvieron ya.Prohíbese a los Generales pretender Obispados,sino que gobiernen los seis años completos,«bien que de la doctrina de los Rmos. no se creehayan pretendido...» No se les prohibe sin embargoaceptar esa dignidad.Las actas de 1627 son muy interesantes, puescontienen el elogio de todos los religiosos distinguidosque habían fallecido en los últimos años.Desgraciadamente no se repitió ese trabajo enlos Capítulos siguientes.Para obtener la confirmación del culto de SanPedro Nolasco fué nombrado Procurador en laCuria Romana el M. Fr. Luis de Aparicio, naturalde Cuenca y Catedrático de Toledo, hombrede gran reputación y muy arriesgado. Urbano VIIIconcedió en 11 de octubre de 1628 a la Ordenoficio y misa de Nuestro Santo Padre, de comúnde confesor no pontífice, noticia que llenó de

— 134 —alegría a todos los mercedarios, y en particularal Rmo. Cebrián.En Madrid, Toledo, Salamanca y en todos losconventos de la Orden hubo grandes festejos ycertámenes literarios, representándose en la Cortela comedia de Lope de Vega, «Vida de SanPedro Nolasco», a la que asistió Felipe IV contoda la familia real.Los religiosos de Guatemala, muchos de ellosespaholes, de los que habían pasado allí en 1617,no contentos con el vasto campo misional confiadoa su celo, que les colocaba a la cabeza dela Orden por ese concepto, dieron memorial alCapítulo de Toledo, solicitando pasar al Japón ya la China, donde entonces corría en abundanciala sangre cristiana.El General nombró para dirigir esta misión alM. Fr. Juan de Salazar, de la provincia de Castilla,hijo del convento de Segovia, que había dehacer las gestiones necesarias en Madrid y enRoma, donde Salazar había sido elector en 1610.La persecución que casi aniquiló el cristianismoen los imperios del Extremo Oriente impidió llevara cabo esa buena idea que hubiera dado vidaexterior e interior a la Orden. Los que habíantenido aquel generoso impulso contin,uaron trabajandoen las montafias de Centroamérica (1).En el territorio de la República Argentinamurió a manos de los indios en 1628, no lejos dela Rioja, el P. Antonio Torino, que trabajaba en— 135 —El M. Renión en 1612. (Retrato que figura en una obra suya)evangelizar el Chaco. Era hijo único del capitánGaspar Torino, portugués, bienhechor de la Orden,que nombró heredero en 1617 a su hijo (1).En la misma región su contemporáneo el mer-(1) Boletín de 1920, pág. 370.(1) Toledo: Estudios, I, 453; II, 275.

— 136 —cedario Fr. Pablo, Capellán del ejército español,se metió entre los indios esperando traerlos depaz, pero le colgaron de un sauce. Parecido fintuvo en 1627 el P. Juan Lozano (1).Fué promovido al obispado de Cuba en 1629el Maestro Fr. Jerónimo Manrique de Lara, Definidorde Castilla, que honró a la Orden con suactuación y dejó bienes para fundar convento dela Habana, con un importante legado al conventode Toro, donde había sido Comendador. (t1644).Daban singular realce a la Merced por estosaños los Maestros Fr. Alonso Remón y Fr. Serafínde Freitas, con el presentado Fr. Gabriel Téllez,escritores de los más célebres que ha tenidoEspaña, conocidos y estimados en toda Europa.Téllez es la tercera figura literaria de España,inferior sólo a Cervantes y Lope, de quien fuégrande amigo y admirador. Falleció en 1648.También Remón fué insigne dramaturgo y elmás fecundo después de Lope, según atestiguaQuevedo. Recientemente se ha comprobado quees de Remón alguna comedia en que MenéndezPelayo había reconocido todas las característicasdel genio de Lope; ¡tan semejantes eran los doscolosos!No es pequeña gloria de la Merced que talentoscomo los de Téllez y Remón cupieran en susreducidos claustros y que ambos hayan consagradosus plumas excepcionales a narrar su his-(1) Ob. cit. II, 278 y 280.1— 137 —toria; ¿quién osará desdeñarla con tales precedentes?Escribía también por estos años su EpítomeCronológico de los Maestros Generales el MaestroFray Juan de Antillón, con gran copia de documentosy mayor crítica que los mencionados cronistascastellanos. Sin embargo, la investigaciónrealizada por nosotros en estos últimos años haduplicado y triplicado el caudal de hechos y depersonajes conocidos por nuestros antecesores.La obra del P. Antillón acaba de aparecer enla Biblioteca Provincial de Cádiz, y sus Vidas deSan Pedro Nolasco y de San Ramón (en que secondensan los primeros tiempos de la Orden)están en la Universidad de Valencia.El Maestro Serafín (como llamaban en casaal Dr. Freitas), era portugués y tomó nuestro hábitoen Valladolid, donde obtuvo cátedra de DerechoCanónico en 1605. Sus libros le dierongrande fama y entre ellos descuella el De JustoImperio Lusitano, en que contiende victoriosamentecon Grocio sobre Derecho Marítimo y aungeneralmente sobre cuestiones internacionales.Esta obra ha sido modernamente traducida alfrancés y al español y su autor es consideradocomo uno de los fundadores del Derecho Internacional.Fué también admirador de Lope, al que dedicóuna composición en dísticos latinos, elegantescomo el lenguaje de todas sus obras. Remóny Freitas fallecieron en 1632 y 33 dejando incompletala impresión del Bulario de la Orden,

— 138 —en que ambos colaboraban, y que hubo de terminarel P. Salmerón.En Salamanca mantenían el prestigio de laMerced los Maestros Fr. Pedro Merino y Fr. Gasparde los Reyes, el primero en la cátedra de FilosofíaMoral, que había ocupado Zumel, y el segundoen la Lógica, de la que pasó más tarde aBiblia y a Prima de Teología.Había catedráticos mercedarios en casi todaslas Universidades de España y América, distinguiéndoseen Valladolid el Maestro Fr. JerónimoCiruelo; en Huesca el mencionado Fr. PabloCosta; en Zaragoza el Maestro Fr. Juan Pérez deMunébrega y en Compostela el Maestro Fr. Martínde Acevedo.El 6 de diciembre de 1630 falleció en Guadalajara,donde había profesado en 1571, el P. JuanBautista de la Perla, varón apostólico, nombradoprocurador de la redención por Zumel en 1594con Fr. Juan de Calatrava. Había sido Comendadorde Raíces y fué elegido en 1597 para Burceñay en 1611 para Almazán. El Maestro FrayGabriel Adarzo compuso un elegante resumen desu vida que se puso en la sepultura del venerable(1).El Rmo. Cebrián profesó grande amor al conventodel Olivar, donde había tomado el hábito,y lo reedificó casi de planta. Censuráronle algunospor este despilfarro, diciendo que era dinero— 139 —perdido el que se empleaba en aquel desierto,pero Téllez dice y con razón que aquella soledadsabrosa era para la Orden harto más provechosaque las grandes ciudades.En América fundäronse por estos años losconventos de San Luis de Potosí, con permisodel diocesano de Mechoacán Fr. Alonso Enríquez,y el de Guadalajara con la ayuda del Rmo. Ribera,ex general. El P. Enríquez confió también ala provincia mexicana el colegio de San Ramón,de la capital, para canonistas seglares.Los registros de los Rmos. Cebrián y Serranoson los únicos que se salvaron del naufragio dela desamortización, o por lo menos los únicosdescubiertos hasta el día; son poco interesantescomo suele serlo casi siempre la verdad oficial.Más bien nos consuelan de la pérdida de los otrosregistros (1).El P. Cebrián fué presentado en 1632 para elobispado de Albarracín, y aunque tenía brevepara continuar gobernando hasta concluir elsexenio, dejó el puesto al Prior de Barcelona PadreFrancisco Llac, que lo había pretendido desdeel momento en que el General aceptó el obispado.La Congregación de Obispos y regularesdecretó que la vacante comenzarla cuandohubiera noticia segura de la preconización. Representóal Prior en estas pretensiones FrayJosé Soler, que en adelante dió mucho en qué(1) Bib. Nl. Ms. 2684: Extracto del libro de profesionesde Madrid.(1) A. H. Nl. de Madrid. Papeles de la Merced de Madrid,leg. 438.

— 140 —entender a los procuradores en la Curia Romana.El Capitulo de elección se abrió en Barcelonaen septiembre de 1632, presidiendo con autoridaddel Nuncio el Obispo de Urgel Fr. Antonio Pérez.Leyóse en él la resolución mencionada de la Congregación,que fué aceptada y quedó como leyen adelante.Por influencia de Cebrián, según Téllez, salióelegido el Provincial de Andalucía, Maestro FrayDiego Serrano, hombre muy prudente y virtuoso.Era hijo del convento de Granada, donde profesóen 1598. Falta hacía un temperamento suave,después de las asperezas del P. Cebrián.Entre los Vocales del Capítulo se cuenta elP. Francisco Ponce de León, Provincial entoncesde Chile, cuyas hazañas llenan aquellos años. Elnuevo General le mandó por obediencia imprimieseel Memorial presentado al Consejo de Indias,para acreditar los servicios de la Orden.Había nacido Fr. Francisco en Sevilla en 1576,de nobilísima familia, emparentada con los Duquesde Arcos. Dedicóse en l juventud a lasarmas, pasando a América en 1602. Allá tomó elhábito de la Merced, y en 1618 entró a descubrirtierras en la cuenca del Marañón, donde organizómuchos pueblos y la ciudad de San Francisco deBorja, bautizando más de dos mil indios en elterritorio de los Maynas.Regresó al Perú con objeto de recaudar fondosy llevar más gente, y el Obispo de Trujillo lenombró su Provisor y Vicario general en 1622.— 141 —El nuevo Virrey, Marqués de Guadalcázar, anteel peligro de los piratas holandeses, le nombróCapellán mayor del Ejército y Armada del PerúEl H. Ponce de Leóny como tal animó a los marinos en los trancesmás peligrosos. Con el mismo cargo pasó al reinode Chile con el ejército que luchaba contra losaraucanos, donde trabajó más de cinco años.

— 142 —Los soldados le rogaron que viniera a Españacomo su Procurador, y por consolarlos emprendióel viaje, estando elegido Provincial deChile. El Capítulo general alabó su celo y leprorrogó por 23 meses el gobierno, a causa deltiempo que había empleado en venir a España.En 1635 fué prohijado en la provincia deLima, y poco después regresó a España, siendoincorporado a la provincia de Castilla el 15 deenero de 1639 (1). Vivía en Madrid en 1661. EnChile fué también Provisor del Obispado de laImperial y Visitador de la Merced. Publicó unaDescripción del reino de Chile, en Madrid, 1644,muy interesante.Mientras vino a Europa en 1631 el P. Poncede León, dejó por Vicario en Chile al P. PedroMigueles, hombre de grandes alientos, apóstolde los indios del Sur, comparable al P. AntonioRendón en sentir de sus contemporáneos.Distinguióse también en la evangelización delos chonos de Chiloé el P. Agustín de Guevara,que después de formar nuevas doctrinas las entregóal Clero secular, retirándose a morir en elconvento de Concepción (2).A esta labor de sus hermanos alude el PadrePonce de León, diciendo que en la isla de Guapo«hay poblaciones de indios, y es tierra que hasta(1) Bib. NI. Ms. 2.684; Extracto de Capitulos provinciales.(2) Séptimo Centenario de la Merced en Chile, página142.— 143 —agora los españoles y los religiosos de mi sagradareligión doctrinaban, y la habitaban, absolutamenteinfructífera; y esta mísera nación vivedesnuda, sin casas y con solo sustento de pecesy mariscos, sin género de semillas ni raíces queles sirvan de pan; y habiendo yo procurado traeralgunos entre nosotros, viven pocos días» (1).Grande actividad desarrolló también el PadreAndrés de Sola en la provincia de Quito, dela que fué Superior en 1623, 1632, 1640 y 1646.Era murciano, hijo del convento de Moratalla,donde profesó en 1602; estudió luego Teología enSalamanca, pasando al Perú en 1610. Fué el verdaderoPadre de la provincia de Quito, a la queorganizó en lo espiritual y temporal. La Audienciay los Obispos le elogian sin medida, proponiéndolocomo acreedor a cualquier dignidad.Fué él quien formó la famosa hacienda de Pesillo,base económica de aquella provincia y tormentode los envidiosos hasta nuestros días. Murió enQuito el 25 de julio de 1652, dejando una rentade mil pesos al colegio de Salamanca para costeargrados e imprimir libros (2).Al Perú fué enviado como Vicario general en1628 el P. Alonso Redondo, que había desempeñadoel mismo cargo en México. Para que leayudase con su ejemplo a renovar el fervor, hizovolver el General al P. Pedro Urraca, hijo delconvento de Quito, destinado a Lima, hombre de(1) Ibid.(2) Monroy: Convento de Quito, II, 41.

— 144 —grande espíritu y admirable paciencia, que habíavenido a España, su patria,.dos arios antes. Dirigiómuchas almas por el camino de la perfección.En 1633 nombró el P. Serrano Vicario delPerú al P. Gonzalo Aponte Maldonado, hombrerecto y enérgico, según pedía el Rey atendiendoa las quejas de los peruanos, que tachaban deblandos a los Visitadores últimos. Cumplió elPadre Maldonado como de él se esperaba, dandoejemplo de rectitud y de pobreza hasta que lamuerte le arrebató en Huánuco en febrero de1635. Era hijo del convento de Segovia, dondeprofesó en 31 de julio de 1595, y poco después lohizo allí también otro hermano suyo, Fr. Diego,natural de Ginzo de Limia, donde su padre eraJuez. Murió Fr. Diego Aponte joven aún, en granreputación de virtud. El Virrey Conde de Chinchónse avenía mal con el rigor del P. Gonzalo,pero todo era necesario, como luego se demostró(1).Vino a Europa con las quejas de los descontentosel P. Francisco de Oviedo, que presentólargos memoriales al Rey y al Papa, a fin deque suprimieran los Vicarios generales. En Españala contestación era fácil, con los documentosque obraban en el Consejo de Indias. EnRoma contestó el Procurador Fr. Juan Pérez deMunébrega, y su respuesta contiene datos muyinteresantes, que sólo veladamente se consignanen otros documentos. Los Vicarios son indispen-(1) Pérez: Religiosos de la Merced... 431.