Negópolis Edición N° 31

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Los pequeños
ahora buscan
vivencias como ir
al cine, comer en
establecimientos,
hasta incluso
acompañar a la
madre al spa
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(champús 26%, jabones 20% y pastas dentales 17%).
Las mujeres: el principal canal entre el producto y los
niños
El tiempo ajetreado que tienen la mayoría de
mujeres en el trabajo crean un mea culpa en ellas.
Pasar menos tiempo con sus hijos, es el principal
remordimiento, por eso ponen más atención a los
pequeños de la casa. El 52% de las amas de casa
limeñas son las que complacen a sus hijos con
productos o servicios. A diferencia de las madres
que se encuentran laborando donde el índice de
compra a sus menores es del 71%. ‘’La mayoría de
personas que asisten a nuestra empresa son madres,
ellas después de cumplir con sus quehaceres diarios,
llevan a sus hijos para ver qué es lo que quieren o
necesitan. “A través de nuestras publicidades los
niños quedan con las ganas de llevarse un producto.
Hay que saber manejar cada estrategia para marcar
la diferencia’’, comenta Antonio Basilio, especialista
en Ecommerce Marketing Manager en Tai Loy.
La experiencia de compra es muy particular, antes los
padres inducían a los juguetes clásicos, los pequeños
ahora buscan vivencias como ir al cine, comer en
establecimientos, hasta incluso acompañar a la
madre al spa. Según la consultora CCR, el 28% de las
madres limeñas aseguran que sus hijas entre los 8 y
11 años, acceden al servicio de laceado, manicure o
pedicure. Los datos ascienden a un 56% en el caso
de las madres que cuenta con hijas adolescentes
entre los 12 y 15 años.
Ubica tu producto al alcance de los
niños
Las estrategias de marketing enfocado en los niños
no solo se pueden ver en las pautas publicitarias
que crean las compañías. Otras habilidades de la
mercadotecnia es la forma en la que se presentan
los productos en las estanterías o en los puntos de
ventas del negocio. Y es que se está volviendo común
ver en la parte baja de las góndolas, los productos,
con la intención de que los infantes puedan estar
cerca y familiarizarse.
Para que los menores puedan tener una buena
experiencia de compra, se requiere pragmatismo
y creatividad. La minuciosidad del producto y el
diseño del escaparate, la astucia del vendedor
hacia el infante y los padres, así como la ubicación
estratégica del producto son, finalmente, las
habilidades que seducen a la compra.
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El índice de
compra hacia sus
pequeños, de
las madres que
trabajan, es de
71%
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