Escuela

El banco de
la escuela católica
El Banco Popular fue el principal
patrocinador del Congreso de
Escuelas Católicas. La entidad
lleva 90 años comprometido con la
enseñanza religiosa y cuenta con
una serie de ofertas y productos
ventajosos para los afiliados de
centros católicos de FERE-CECA,
así como para sus trabajadores.
Además, la libertad de enseñanza es un
principio reconocido en la Constitución
española, que es la que permite
mantener este tipo de escuelas, dotadas
de un proyecto educativo propio. “Se
trata de colegios que saben educar y
están comprometidos con la educación
de muchas generaciones”, añadió.
Un pacto educativo
Después de tres días repletos de
ponencias e intervenciones de expertos
y más de 1.800 participantes, las
conclusiones se centraron en reforzar
la importancia de llegar a un
pacto educativo que aborde la mejora
de la calidad del sistema y garantice
los derechos y las libertades educativas
de toda la sociedad española.
El beneficio de los centros concertados
y católicos es, según el secretario
general de Escuelas Católicas, “para
toda la ciudad, no solo para quienes
los escogen”, por lo que, para alcanzar
el pacto educativo, “estamos dispuestos
a dialogar con todo el mundo, pero
sin renunciar a nuestros principios”.
Alvira explica que “los conciertos son
lo que nos permiten que la libertad de
educación sea efectiva y real, que los
padres puedan elegir sin condicionamientos
económicos”.
Escuela concertada no
es solo escuela católica
Este pacto educativo debe basarse en
la libertad de enseñanza, que, según
José María Alvira, nunca debe excluir
otras opciones educativas. “Queremos
que, además de los colegios públicos,
haya también escuelas con un ideario
(religioso o no) mantenidas por el
Estado para que los padres puedan elegir
sin restricciones económicas y para
que así la enseñanza sea gratuita tanto
para unos como para otros; esa es la
verdadera libertad. La escuela pública
no puede ser la única porque no es lo
propio en un país democrático”, afirma
Alvira a Misión.
El secretario general también
señaló que “a veces equivocadamente
“La escuela
concertada católica
beneficia a toda la
ciudad, no solo a
quien la escoge”
o con mala voluntad, se identifican
las escuelas concertadas con las católicas
y el concierto educativo, con privilegios
para la Iglesia. Sin embargo,
no se le conceden privilegios ni estamos
hablando de acuerdos entre la
Santa Sede y el Estado español. Los
conciertos educativos de los colegios
forman parte de los derechos civiles,
y grupos de cualquier confesión religiosa
o laicos, pueden tener acceso
a ellos”.
Durante el congreso, se abordó
la libertad de enseñanza desde una
visión jurídica, económica y legal. En
algunas ponencias también se revisó
el modelo educativo de Francia, que
en opinión de Alvira, “hace de la laicidad
un valor” , pero “la educación concertada
está aún más asentada que en
España, donde gran parte de los centros
concertados son católicos, pero
otra parte no lo son. La sociedad francesa
reconoce como un bien el hecho
de que haya diferentes opciones para
los padres”.
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