12.07.2016 Views

La piel del lagarto

La-piel-del-lagarto

La-piel-del-lagarto

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

su presa desde la alcantarilla. Un policía comía una<br />

arepa, la mayonesa, gris, chorreaba por los dedos.<br />

Su tío se acercaba al túnel: Barrio los Chaguaramos,<br />

fundado en 1959.<br />

Yo quisiera que estuvieras aquí, a mi lado, que la<br />

palabra siempre fuera una certeza, que la nuestra<br />

sea una historia feliz y no historia a secas. Quisiera<br />

que aún gozaras con mis chistes y no los detuvieras<br />

con esa mueca de hastío, que los cuentos de hadas<br />

existieran al menos por esta vez. Quisiera despertar<br />

en las mañanas sin sentir a la cama de enemiga, registrar<br />

los distintos tonos de tus pezones cuando la<br />

luz se tiende oblicua y derrotada sobre ellos, beberme<br />

el sabor marino de tu vulva, reivindicar la risa<br />

con que explotas sobre mí o explotabas, da igual. Yo<br />

quisiera ganar una, ganar ésta, abandonar el templo<br />

tal como las serpientes desechan la <strong>piel</strong>, pedir<br />

perdón, mirarme perdonado en tus ojos, saberme<br />

aún amansador de tus hombros, dueño y protector<br />

de tus muslos dorados. Magda, Magda, cabra, nube,<br />

Magda, no me dejes solo en este grito.<br />

Ya es tarde, yaestarde, yaes tarde.<br />

Sintió que un rumor de piedras chocando recorría<br />

su abdomen. Abrió la guantera. Sacó la pistola,<br />

una Glock negra, diecisiete tiros nueve milímetros.<br />

Apuntó hacia un hombre que estaba a punto de ser<br />

tragado por el hueco negro.<br />

—Adiós, tío. <strong>La</strong>s lágrimas cambiaban el tamaño<br />

90

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!