09.03.2017 Views

Excodra XVII-XVIII: El capital de La infancia

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

III<br />

Mi vida en Marte<br />

Mi familia viene <strong>de</strong> Marte. Ahora estamos atrapados aquí porque la nave<br />

espacial en la que veníamos se <strong>de</strong>scompuso. Mi papá dice que no po<strong>de</strong>mos<br />

respirar el aire <strong>de</strong> afuera, porque somos chiquitos. Los gran<strong>de</strong>s sí, porque a los<br />

gran<strong>de</strong>s le crece una cosa en la nariz con la que pue<strong>de</strong>n respirar en cualquier<br />

parte.<br />

¿También don<strong>de</strong> hay gases lacrimógenos o Napalm?<br />

Nosotros, los niños, todavía no la tenemos. Eso le sale a uno cuando tiene<br />

como dieciséis.<br />

O cuando hay hijos y tienes que salir sí o sí.<br />

Pero nosotras todavía estamos chiquitas. Por eso nos quedamos todo el día<br />

jugando en la nave espacial que nos trajo a la Tierra. No sabemos en qué<br />

planeta estamos, pero <strong>de</strong>be ser un planeta muy malo, porque, así como lejos,<br />

se oyen ruidos bien raros.<br />

¿Son balazos? No lo sabemos con exactitud, sólo sabemos que así se oía la al<strong>de</strong>a,<br />

el día que tuvimos que escaparnos a la montaña.<br />

Mi papá dice que nuestra nave espacial es segura y que aquí no pue<strong>de</strong> entrar<br />

ninguno. Eso es bueno porque si no, sentiríamos mucho miedo cada vez que<br />

ellos nos <strong>de</strong>jan aquí solitas. Él nos prometió que vamos a volver a Marte, que<br />

vamos a po<strong>de</strong>r salir, y que vamos a po<strong>de</strong>r jugar afuera, cuando regresemos a<br />

casa.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!