UJ #7 - Amazonía Peruana

BOSQUE TROPICAL PARA VIAJEROS
Conservación:
SON 10
millones
DE HECTÁREAS DE
SUPERFICIE EN
15 áreas
PROTEGIDAS
AMAZÓNICAS
Tucan Suites en la ciudad
de Tarapoto, refrescantes
servicios y atención
personalizada.
completamente inocua y otras de mordida letal; y felinos
indetectables como las panteras negras, virtualmente
invisibles, y por ello, rara vez vistas.
Cerca de la ciudad de Tarapoto, en la selva alta de
San Martín, podemos explorar un territorio que abarca
tres ecosistemas diferentes a lo largo del río Huallaga:
el bosque seco tropical, la selva de alta montaña y el
llano amazónico. Las rutas incluyen la navegación por
diferentes ríos, lagunas, cañones y cascadas, visitas a
la comunidad nativa de Chazuta y a plantaciones de
café y cacao, cultivos alternativos a la hoja de coca
que han permitido a los agricultores generar negocios
más amigables con el ambiente.
Si de pescar se trata, probablemente los ríos amazónicos
sean generosos. Si bien la experiencia de pesca
artesanal en el mar peruano es sumamente gratificante,
poco se ha hablado de la pesca deportiva en la
Amazonía. Esta región reúne cerca de 3 mil especies
y condiciones ideales para la pesca de dorados, payaras
y tucunarés, especies particulares de la selva
amazónica que en el marco del deporte son devueltas
al río. La travesía implica llegar a las cochas más apacibles,
y si de aventura se trata, de acampar en malocas
alejadas para lanzar los anzuelos al amanecer sin
advertir a las presas de su llegada.
Es en ese momento del día en que la selva está más
viva que nunca. El amanecer desencadena un desenfreno
animal. Los monos aúllan y chillan a la distancia.
Despiertan los venados, los ronsocos y los osos
perezosos, que se mueven con lentitud pero no con
menos gracia. Entre todas las expediciones que se
pueden hacer en la selva y cerca de los albergues instalados
se ofrece el recorrido de trochas establecidas
que permiten observar la fauna local. Al sur del Perú,
en la reserva de Tambopata, una pequeña caminata
los acercará a las collpas (depósitos naturales de arcilla)
que los guacamayos visitan, incontrolables, cada
mañana para alimentarse de ellas y conversar un rato.
Se sabe que comen arcilla para limpiar sus sistemas
digestivos, y su necesidad es tanta que se congregan
enormes bandadas conformadas por cientos de
ejemplares.
Sin embargo, los animales no son los grandes protagonistas
de este entorno. Sin duda, los grandes reyes
de la Amazonía son los árboles y la inmensa variedad
de flora que puebla la región. Las plantas son la base
de toda la cadena alimenticia, y todas sus variedades
luchan incansablemente por la luz. El árbol de la ceiba,
sin duda, gana la batalla al llegar a medir más de 40
metros de altura, tamaño que alcanzan solo después
de varias centurias de vida. Tanto la selva norteña
como la del departamento de Madre de Dios permiten
explorar este colchón verde que cubre el suelo amazónico
a través de redes de puentes colgantes instalados
entre los árboles más altos. El canopy nos acerca
a un mundo desconocido y poblado por monos, aves
y una gran variedad de especies que viven de la seguridad
de estar lejos del suelo, en una nube de hojas
considerada el gran pulmón del planeta Tierra.