noviembre definitivo

2-.En el ámbito educativo: el impulso de programas que fomentan el acceso de las niñas a carreras
técnicas; es un hecho que el interés por materias técnicas, decrece en las niñas a partir de los 6 años
fundamentalmente por los estereotipos sociales, si bien, la demanda de profesionales en actividades
relacionadas con estas carreras crece anualmente y sólo el 31% de los matriculados en carreras STEM,
son mujeres. Preparemos a las niñas para las carreras del futuro.
3-.En el ámbito social: la promoción de planes para facilitar la continuidad del desarrollo profesional tras la
maternidad; actualmente el 16% de las mujeres abandonan el mundo laboral tras ser madres; movimientos
para hacer entender el “no es no” y el derecho a demostrar la injusticia de los abusos porque “mi nivel de
poder lo vale”, generando movimientos tan relevantes como el #MeToo. Una ola de concienciación que ha de
dirigirnos al respeto y entendimiento de la inferioridad de la que partimos.
Una tormenta que hace imparable el cambio en el que nos encontramos y en el que las mujeres somos
protagonistas y también motores; los momentos en los que se han producido avances sociales en la
situación de la mujer (acceso a la universidad, derecho al voto, derecho a divorciarse, derecho a administrar
sus propios bienes…), han tenido como protagonistas a las mujeres. Ahora, más que nunca, nuestro
papel es clave.
Para ello nuestra mentalidad ha de cambiar, pensar en qué invertimos nuestro tiempo, superar barreras
que en ocasiones nos ponemos nosotras y nos impiden avanzar y acostumbrarnos a asumir los errores
como parte del progreso. Tengo dos hijos uno de ellos varón de 9 años, hace poco, viendo en el telediario
una noticia sobre Theresa May me preguntó quién era y al contestarle que la Primera Ministra de Inglaterra,
su siguiente pregunta fue: “Vale pero, ¿quién es el señor que manda en ese país?”…., mientras
la presencia de la mujer en determinadas posiciones no cambie, lo tendremos muy difícil para que la
La Revista de Carabanchel
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