Edición 68

"Producir conservando y conservar produciendo”, esa es la
frase que el presidente Iván Duque ha repetido desde que
era candidato cuando le preguntaban por temas sensibles
como minería, energías limpias o explotación a través de
yacimientos no convencionales (fracking). Hoy que ya es presidente
y que completa 10 meses en el poder, sigue aduciendo a
la frase. Duque ha repetido que puede haber un equilibrio entre
desarrollo económico y sostenibilidad.
EMPIEZAN A MASIFICARSE EN COLOMBIA
Deforestación
De acuerdo con Parques Nacionales Naturales de Colombia, de
2010 a la fecha se deforestaron más de un millón de hectáreas,
una gran parte para la siembra de cultivos ilícitos, y sólo en el
último año la cifra ya superó las 200 mil hectáreas. De seguir
ese ritmo, en 20 años se habrá destruido la totalidad de esos
parques. La cifra más actual consolidada a nivel nacional es la
de 2017 cuando se deforestaron cerca de 219.000 hectáreas.
Después de un muy turbulento paso por el Congreso de la República,
el Gobierno logró que fuera aprobado su Plan Nacional
de Desarrollo 2018 – 2022 “Pacto por Colombia, pacto por la
equidad”. El texto resultó ‘pupitreado’ a última hora en el Senado
y sus integrantes no pudieron darle debate porque, por tiempo,
tuvieron que acoger el texto de la Cámara, para evitarse el largo
trámite de la conciliación. En resumidas cuentas, el Senado aprobó
el Plan sin siquiera leerlo.
El Departamento Nacional de Planeación, que es la entidad encargada
de establecer los lineamientos del plan, definió que el
documento tiene 20 objetivos principales y que los 349 artículos
aprobados permitirán que el Gobierno los alcance o, por lo menos,
los deje andando. De esos 20 puntos generales, se habla de 2
que tienen relación directa con el desarrollo ambiental: la deforestación
y la migración hacia energía renovables no convencionales.
Pero más allá, cada artículo del Plan puede convertirse en una
mini-reforma que se ocupe de temas muy importantes pero con
poco o nulo debate. En esta oportunidad se modificaron aranceles
para textiles (lo cual es potestad del Gobierno), se modificaron
temas relacionados con las pensiones (lo cual debería hacerse en
una reforma exclusiva del tema) y hasta se aprobaron modificaciones
en impuestos (lo cual debió hacerse en la reforma tributaria).
Por eso, es tan importante mirar con cuidado cada modificación
que va a impactar el sector ambiental.
En cuanto a recursos, se hace una proyección que queda escrita
en el Plan Nacional de Inversiones Públicas que entre 2019 y 2022
estima un valor de 1.096 billones de pesos. De esa cifra, se destinarán
12.4 billones al medio ambiente, es decir, algo más del 1%.
El pacto por los recursos minero-energéticos, por ejemplo, tiene
una asignación de 97.8 billones y el pacto por el transporte y la
logística llega a 45.8 billones.
Angélica Lozano, vicepresidenta del Senado, no solo criticó que
sus colegas hayan aprobado un proyecto sin siquiera debatirlo,
sino que además dijo que de 115 propuestas legislativas en materia
ambiental, solo se terminaron incluyendo 8. “La mayor esterilidad
en el Congreso es el tema ambiental”, dijo Lozano en el foro
‘Medio ambiente en el Plan Nacional de Desarrollo’,
Para entender a profundidad la hoja de ruta de los próximos 4
años, Catorce6 analizó los artículos ambientales más importantes
y cómo quedaron dentro del Plan de Desarrollo, consultando
la opinión de diferentes expertos y contrastándola con la versión
oficial del Gobierno.
La meta de deforestación para este Gobierno ha sido blanco
de todo tipo de críticas. En el primer texto radicado en el Congreso,
se proponía que al final del cuatrienio frenarían el crecimiento
de la deforestación, dejando una meta de 220.000
hectáreas deforestadas anualmente, es decir, 880.000 hectáreas
durante el cuatrienio. En pocas palabras la propuesta
era dejar la deforestación en niveles iguales a los actuales, lo
cual constituye un avance desde la óptica del Gobierno porque
se frena la tendencia que es de un acelerado crecimiento.
Esa cifra fue cambiada y resultó ser peor. Ahora, lo que avaló
el Gobierno es reducir en un 30% la deforestación con base
en las proyecciones del IDEAM. Esas proyecciones indicaban
que si nada cambiaba, en 2022 se estarían deforestando
360.000 hectáreas al año; cifra que, con la reducción del 30%
que ahora propone el gobierno, resultaría en 252.000 hectáreas
al año.
“Con estas cifras, el Gobierno de Iván Duque está desconociendo
la Sentencia 4360 de 2018, con la que la Corte Suprema
de Justicia declaró la Amazonía como sujeto de derechos
y ordenó su protección inmediata. Además, va en contravía
de compromisos internacionales como el Acuerdo de París y la
Declaración Conjunta entre Alemania, Noruega y Reino Unido
para reducir a cero la deforestación en la Amazonía para
2020”, advierte la organización Dejusticia, que fue la autora
de la demanda contra la deforestación en el Amazonas.
“Inaceptable (para decir lo menos): que el gobierno nacional
se ufane de que tolerará una deforestación de 900.000
hectáreas en los próximos cuatro años. ¿O es que, acaso, se
están burlando de miles de colombianos que solicitamos que
se corrigiera tan absurda meta?”, dijo el exministro de Ambiente,
Manuel Rodríguez, reaccionando a una publicación de
la ANLA donde se hablaba de la meta.
Por el contrario, Edersson Cabrera, coordinador del grupo de
monitoreo de bosques del Instituto de Hidrología, Meteorología
y Estudios Ambientales (Ideam), explicó en El Tiempo
que “eso equivale a reducir unas 85.000 hectáreas en el cuatrienio,
o sea que debe haber una reducción sostenida de la
deforestación de al menos 20.000 - 25.000 hectáreas cada
año durante este periodo. Mejor dicho, nuestros cálculos son
que en 2022 se deforesten menos de 200.000 hectáreas, eso
es por debajo de lo que tuvimos en 2017. Luego de quebrar
la tendencia exponencial, y si todo nos funciona bien, incluso
podría ser menor”.
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Abril - junio 2019