Revista iCruceros n 34
Nuestra portada, el actor Édgar Vittorino con el que mantuvimos una charla animada y distendida. Nos vamos al teatro, más concretamente al Teatro Maravillas que está a punto de reabrir sus puertas con Jamming, y para ello hemos hablado con Lolo Diego, uno de sus fundadores. La cantante Tracy de Sá os sorprenderá no sólo por su música. Hemos hablado, en exclusiva, con Kevin Bubolz y Sonia López acerca de los nuevos protocolos y medidas de seguridad de Norwegian Cruise Line. Y con Alfredo Serrano, director de CLIA España, que nos detalla lo último en cuanto a la situación que están viviendo los cruceros. Recorremos Londres, Marruecos y Buenos Aires. La diseñadora Mónica Berlanas, desde su sección, nos trae los imperdibles de este otoño/invierno. Y la actriz, directora y productora Cecilia Gessa nos abre la puerta, como siempre, al conocimiento. Porque debemos seguir consumiendo cultura y debemos volver a acudir sin miedo a cines y a teatros. Todo esto y más en un número cargado de energía positiva, y desde el cual queremos mantener el ánimo de que volveremos a viajar, volveremos a navegar, llenaremos de nuevo los teatros, y sobre todo volveremos a seguir viviendo la vida
Nuestra portada, el actor Édgar Vittorino con el que mantuvimos una charla animada y distendida.
Nos vamos al teatro, más concretamente al Teatro Maravillas que está a punto de reabrir sus puertas con Jamming, y para ello hemos hablado con Lolo Diego, uno de sus fundadores.
La cantante Tracy de Sá os sorprenderá no sólo por su música.
Hemos hablado, en exclusiva, con Kevin Bubolz y Sonia López acerca de los nuevos protocolos y medidas de seguridad de Norwegian Cruise Line.
Y con Alfredo Serrano, director de CLIA España, que nos detalla lo último en cuanto a la situación que están viviendo los cruceros.
Recorremos Londres, Marruecos y Buenos Aires.
La diseñadora Mónica Berlanas, desde su sección, nos trae los imperdibles de este otoño/invierno.
Y la actriz, directora y productora Cecilia Gessa nos abre la puerta, como siempre, al conocimiento. Porque debemos seguir consumiendo cultura y debemos volver a acudir sin miedo a cines y a teatros.
Todo esto y más en un número cargado de energía positiva, y desde el cual queremos mantener el ánimo de que volveremos a viajar, volveremos a navegar, llenaremos de nuevo los teatros, y sobre todo volveremos a seguir viviendo la vida
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Una aventura en<br />
furgoneta de<br />
Madrid a Marruecos<br />
El viaje de<br />
Marina<br />
Texto y Fotos: Marina Mantolan<br />
Fue en noviembre de 2019 -aún se podía viajar<br />
libremente- cuando decidí tachar de mi lista de destinos<br />
y experiencias que vivir, recorrer la costa de Marruecos<br />
en furgoneta para llegar a Banana Village, un pueblecito<br />
surfero cerca de Agadir, en el suroeste del país. Os<br />
puedo asegurar que fue toda una aventura en la que se<br />
necesita mucha paciencia, y prepararse mentalmente<br />
de que la comodidad de un baño y una ducha brillarán<br />
por su ausencia.<br />
salimos desde Madrid en<br />
una Volkswagen T5 de 12<br />
años, lo suficientemente<br />
grande para guardar las<br />
tablas, algo de ropa, utensilios<br />
de camping y un colchón<br />
sobre el que caerse<br />
muerto después de muchas horas de<br />
conducción. Nos esperaban 1555km<br />
desde Madrid, así que nos lo quisimos<br />
tomar con calma y disfrutar de<br />
un viaje algo improvisado de cuatro<br />
días. Para todos aquellos que quieran<br />
conocer un Marruecos diferente, lejos<br />
del cliché turístico de las compras del<br />
zoco en Marrakesh, aconsejo recorrer<br />
los pueblos costeros de este país<br />
en furgoneta, aunque no sea lo más<br />
cómodo.<br />
ASSILAH, UNA CIUDAD EN LA<br />
QUE SE RESPIRA ARTE<br />
Después de haber pasado la primera<br />
noche en El Palmar (Cádiz), cogimos<br />
el ferry en Algeciras hasta Tánger<br />
Med, el puerto de mercancías. Si algo<br />
teníamos claro en este primer trayecto,<br />
era evitar Tánger y cualquier<br />
ciudad grande como Casablanca o<br />
Rabat. De esta forma, descubrimos<br />
lugares menos conocidos y, por consiguiente,<br />
más exóticos. Así, después<br />
de una hora de viaje, llegamos<br />
a Assilah, un pueblo costero<br />
muy pintoresco, con sus casas<br />
blancas y azules rodeadas por<br />
una gran muralla.<br />
Assilah fue una de las paradas<br />
que más me gusto por la tranquilidad<br />
que desprendía este<br />
pueblo pescador. Es una ciudad<br />
que bien te recuerda al sur<br />
de España, pero con el encanto<br />
marroquí, llena de artesanía y<br />
arte local.<br />
Aquí dormimos es un “camping”<br />
cerca de la playa. Lo<br />
pongo entrecomillado porque<br />
más que un camping era una<br />
parcela de césped con unos<br />
baños y duchas que preferirías<br />
no utilizar. En este artículo, no<br />
voy a escribir sobre ningún<br />
camping porque, a los que fui,<br />
no los recomiendo para nada.<br />
AL YADIDA, LA FORTALEZA<br />
PORTUGUESA<br />
Esta ciudad pasa totalmente<br />
desapercibida para los turistas,<br />
pero es uno de los desti-<br />
<strong>34</strong> icruceros 2020