07.12.2020 Views

Libro Relatos de la Revuelta

Este libro recoge las vivencias de quienes formaron parte de este proceso histórico. Las historias recopiladas no están en un orden cronológico y se desarrollaron a lo largo del país y en el extranjero. Las emociones plasma- das en cada línea son el reflejo del sentimiento colectivo. Un sentimiento de cambio y justicia social.

Este libro recoge las vivencias de quienes formaron parte de este proceso histórico. Las historias recopiladas no están en un orden cronológico y se desarrollaron a lo largo del país y en el extranjero. Las emociones plasma- das en cada línea son el reflejo del sentimiento colectivo. Un sentimiento de cambio y justicia social.

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

19 de octubre, Estefanía Fontealba

Ese viernes 18, sábado 19 en Australia. Seguía el desarrollo de

los hechos en redes sociales mientras tomaba sol en una playa

de Sídney. Gracias a la generosidad de familiares en Australia,

después de haber crecido en Renca pasando frío, hambre y con

padres llenos de deudas, me encontraba viviendo en un país que

me dio lo que no pude recibir en Chile. Sin embrago, nada puede

llenar el vacío de no vivir donde uno creció. No imaginé que,

desde ese 19 de octubre, serían semanas interminables pegada

a una pantalla viendo y compartiendo videos de violencia militar

y policial que aparecerían incesablemente en mi Facebook o

serían enviados a mí por personas del colegio y vecinos de mi

barrio, con quienes no había hablado hace años. Los pijamas se

convertirían en mi vestimenta diaria. Dormiría poco y los platos

y ropa sucia se acumularían. Ese día, sentí más que nunca, que

mi país me llamaba. Quise estar allá para unirme a la catarsis

colectiva y liberar la rabia. Esa rabia de haber visto a mi papá

obrero levantarse a las 5am y llegar a la casa muy tarde todos los

días, todo por un sueldo miserable que no alcanzaba para mucho.

Esa rabia de haber visto morir a familiares por no haber recibido

atención médica de calidad. Esa rabia que viene de la guata

recordando la pobreza de mi barrio y su alcaldesa corrupta; la

violencia estatal, la discriminación, el hacinamiento, la injusticia,

la depresión de mi abuela que falleció con dolores profundos en

el alma y una pensión minúscula y la depresión de mi mamá que

lleva años tomando pastillas. Me dolió no poder estar allá en ese

momento histórico protestando en la calle con mi gente. Ese

día, no sabía que conocería otros chilenos en Sídney con quienes

marcharía, protestaría afuera del consulado y con quienes hasta

bailaría “Un Violador en tu Camino” en un parque.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!