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Colaboradores invitados
México y la banda de 700 MHz
El pasado 19 de septiembre el
Pleno de la Comisión Federal de
Telecomunicaciones (Cofetel) acordó,
por unanimidad, recomendar la
adopción en México del esquema de segmentación
A5, también conocido como
Plan APT (Asia-Pacific Telecomunity),
para la banda de frecuencias de 698
MHz a 806 MHz (Banda 700 MHz), en
los actos futuros que sean llevados a
cabo por la Comisión y la Secretaría de
Comunicaciones y Transportes (SCT) para
su uso, aprovechamiento y explotación.
¿Por qué es esto importante para las
empresas y consumidores mexicanos? La
respuesta está íntimamente ligada al desarrollo
de la banda ancha y la penetración
del internet en nuestro país. Los beneficios
de la banda ancha se expanden más
allá del sector de las TIC, generando una
palanca de desarrollo en la economía y sirviendo
como insumo esencial a otros sectores
tales como salud, trasporte, energía
y finanzas. Los gobiernos juegan un papel
crucial para implementar políticas públicas
efectivas, claras y transparentes que
promuevan el despliegue de redes de banda
ancha por el sector privado al mismo
tiempo que deben apoyar y fomentar la
adopción de servicios de banda ancha en
todos los sectores de la economía.
El despliegue y adopción de la banda
ancha contribuye directamente al
crecimiento y desarrollo de la economía
de un país. De acuerdo con un estudio
reciente del Banco Interamericano de
gaceta cofetel
Por Santiago Gutiérrez Fernández
Presidente de la CANIETI
Desarrollo, 10% de incremento en la penetración
de banda ancha en la región
de América Latina y el Caribe aumenta
3.2% el PIB y 2.6% la productividad. En
esta misma región, según el análisis realizado
por la GSMA, la contribución total
del ecosistema móvil al PIB agregado
fue de 124 mil millones de dólares en
2010 (2.6% del PIB), empleando a más de
1.5 millones de latinoamericanos.
Pero ¿qué tiene que ver la banda de
700 MHz con todo esto? El futuro de la masificación
de la banda ancha recae en los
servicios móviles. A nivel mundial, a partir
del año 2008 el número de subscriptores
de banda ancha móvil sobrepasó a los de
banda ancha fija. En el caso de América
Latina a fines de 2011, numerosos países de
la región (Argentina, Brasil, Chile, México,
Panamá, Venezuela, etc.) han mostrado
una penetración de banda ancha móvil
superior a la de banda ancha fija. Esta tendencia
es resultado del enorme esfuerzo
inversor que las compañías de telecomunicaciones
están llevando a cabo en los últimos
años en redes 3G y ahora en 4G.
Lo anterior responde a que las expectativas
de servicio de los usuarios
móviles son cada vez más exigentes, en
cuanto a cobertura, latencia y velocidades
de conexión, así como también, en
cuanto al volumen de tráfico de datos
intercambiado a través de las redes móviles.
El uso de terminales inteligentes,
tales como smartphones, tabletas y dispositivos
similares están permitiendo el
acceso a aplicaciones intensivas en el uso
del ancho de banda de manera ubicua,
tales como video, lo cual está ocasionando
una explosión del tráfico de datos sin
precedentes. Por ejemplo, el tráfico de
datos en algunas redes se ha duplicado
trimestralmente y de manera consecutiva
durante los últimos años.
En la actualidad, los usuarios de las redes
3G (HSPA) experimentan velocidades
típicas promedio de 1 Mbps tanto en bajada
de información como en la subida. La
primera fase de HSPA+ en Release 7 ofrece
ya velocidades típicas entre 1.9 Mbps
y 8.8 Mbps. En un reporte que emitió la
Cofetel, el pasado 10 de septiembre, sobre
las mediciones de calidad del servicio
local móvil en la ciudad de México aparece
que la velocidad promedio de descarga
de un archivo FTP está entre el 1.4 y
los 2.6 Mbps siendo Movistar el operador
con la mejor muestra.
En el caso de las redes con tecnología
LTE (en servicio desde 2010 en Estados
Unidos), los usuarios pueden beneficiarse
de velocidades típicas entre 5 Mbps
y 12 Mbps. Es decir que una película HD
que hoy me tardo en bajar algunas horas
la podría bajar en algunos minutos utilizando
las nuevas tecnologías. Estos desarrollos
han creado una serie de expectativas
en el crecimiento del tráfico para
los siguientes años:
• Globalmente el tráfico de datos en
redes móviles se multiplicará por 18 entre
2011 y 2016 con un crecimiento agregado
anual de 78% hasta alcanzar 10.8 Exabytes
al mes en 2016, 10% del total del tráfico IP.
• El tráfico de video comprenderá
en 2016 54% del tráfico IP mundial.
• El número de terminales conectados
a internet triplicará la población global
en 2016: 1 de cada 7 personas comprará
un nuevo smartphone en 2016
• Estos smartphones serán cada vez
más inteligentes (dual-core processor,
memoria, pantallas de alta resolución,
reconocimiento de voz, cloud, etc.)
• El número de aplicaciones crecerá
enormemente.
Para satisfacer las mayores expectativas
de servicio de los usuarios móviles
y los importantes cambios en los patrones
de consumo, los operadores estarán
obligados a continuar desplegando una
mayor cantidad de infraestructura que
permita conexiones de banda ancha móvil
en forma masiva.
En un estudio reciente de GSMA y
la AHCIET en varios países de América
Latina se demostró que atribuir la banda
de 700 MHz a servicios móviles trae los
siguientes beneficios (en contraposición
a lo que generaría la radiodifusión):
• Contribución al ecosistema de TIC
(adquisición de espectro y de equipamiento
y servicios) que excede en más de
10,986 millones de dólares a la contribución
generada por la radiodifusión.
• Contribución directa (ingresos adicionales
de la industria) e indirecta (externalidades
positivas) al PIB que excede en
más de 3,069 millones de dólares a la contribución
generada por la radiodifusión.
• Creación de más de 4,300 empleos
directos e indirectos adicionales a los generados
por la radiodifusión.
• Contribución impositiva adicional
superior a 2,602 millones de dólares.
• Excedente del consumidor adicional
superior a 3,800 millones de dólares.
Los operadores necesitan contar con
el espectro suficiente que les permita dar
respuesta a las exigencias del mercado,
de sus clientes y de la mejora tecnológica
de sus redes, además si esta asignación
se produce de forma armonizada en la región,
permitirá la adopción de economías
de escala, con el consiguiente abaratamiento
de los servicios a los usuarios.
El dividendo digital (que resulta de la
liberación de espectro al producirse el
cambio de TV analógica a la TV digital),
debe ser aprovechado para el despliegue
de la banda ancha móvil tal y como lo
afirman los doctores Raúl Katz y Ernesto
Flores-Roux en el estudio “Los beneficios
económico-sociales del Dividendo Digital
para América Latina”. Dicho estudio concluye
que “…la banda ancha móvil podría
contribuir hasta US$14.800 millones a la
economía latinoamericana, a la vez que
permitiría ampliar la cobertura de este
servicio a 93% de la población”.
Por su parte, la Conferencia Mundial
de Radiocomunicaciones (CMR) de la
UIT R, en 2007 identificó para la Región 2
(América, Groenlandia y algunas de las islas
orientales del Pacífico) el bloqueo de
la banda de 698-806MHz dividendo digital,
consecuencia del paso de televisión
analógica a digital (es decir, 108MHz en
total) para servicios móviles, no obstante
la industria móvil considera lo identificado
por la UIT como la mínima cantidad
de espectro requerida en cada región y
cree que debería asignarse una cantidad
mayor –al menos 100MHz en todas las
regiones. Eso sería suficiente para permitir
que se concesionen canales de frecuencia
más anchos, lo cual permitiría un
alto tráfico de datos soportando a varios
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operadores en cada mercado asegurando
así que haya competencia.
En una carta de CANIETI a la SCT de
marzo pasado se reconoció la importancia
de la banda de frecuencias de
698-806 MHz, conocida como la banda
de 700 MHz, como un instrumento para
el desarrollo de la banda ancha móvil,
tal y como lo ha señalado la Unión
Internacional de Telecomunicaciones
(UIT). 1 En aquella misiva se recordaron
las palabras del Secretario General de la
UIT, en el sentido de que “…es necesario
que los gobiernos adopten medidas urgentes
en apoyo al crecimiento de la banda
ancha móvil como instrumento clave para
el desarrollo, e impulsen con mayor dinamismo
el despliegue de las redes de banda
ancha”, en consistencia con ello, se solicitó
en aquella fecha que México destinara
la banda de 700 MHz al aprovechamiento
por parte de las redes públicas de telecomunicaciones,
para prestar servicios
de banda ancha, siguiendo el ejemplo de
otros países y contribuyendo así a satisfacer
las necesidades crecientes de la población
en materia de comunicaciones.
De la misma manera, se sugirió que
México considerara como viable, la opción
A5 de la Recomendación M.1036-4 de
la UIT-R, 2 también conocida como la pro-
1 http://www.itu.int/net/pressoffice/press_
releases/2011/01-es.aspx
2 http://www.itu.int/rec/R-REC-M.1036/en, frequency
arrangements for implementation of the terrestrial
component of International Mobile Telecommunications
(IMT) in the bands identified for IMT in the Radio
Regulations (RR).
gaceta cofetel
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