Primeras Páginas de Templado - Alfaguara

mientras mis patas se besuqueaban y casidestrozaban las butacas. Sin querer vi cómo elChino le metía la mano a… Obligado tenía quesentirme perdidazo, como Adán en el día de lamadre. Es que no me entra en la cabeza cómopueden compartir lo más íntimo.Claro que besé a Sofi. La verdad me atreví porqueempezó a sonarme escandalosamente el estómago yno se me ocurrió otra que barajarla. Además nopodía librarme. Aunque hay algo que me avergüenzaconfesar: mientras la besaba, imaginaba aotras chicas para saber si alguien me gustaba más.¿Será que no la quiero? Encima la película parecíauna burla, porque mientras yo me angustiaba llenode dudas, el protagonista se acostaba con todas.La competencia la ganó Tavo. Tenía que ser: “elmaestro en lenguas vivas”, según él. Para fanfarronearsomos lo máximo. Esa noche hablamos delenguazos y agarradas bravas, pero nadie mencionóuna sola palabra sentimental. Creo que por esodormí mal y fui deprimido al cole. Cuando vi a Sofi,ella estaba como si nada. Es demasiado fresca. Mepidió que le invitara mi gaseosa y después de tomarun trago (en realidad, de lamer el pico de la botella)me preguntó toda coqueta: “¿te acuerdas?”.5