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Revista técnica sobre movilidad sostenible

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Mayte Hernández Rodríguez<br />

Redactora independiente de Evovelo<br />

UNA NAVE ESPACIAL EN TU GARAJE<br />

El coche propio se ha convertido en uno de los medios de transporte principales para la sociedad española.<br />

¿Cuántas veces nos hemos sentido limitados por el hecho de no tener coche?<br />

Según datos recopilados por la fundación<br />

Carnegie Endowment for<br />

International Peace, en 2010 España<br />

era el cuarto país con más coches por cada<br />

1.000 habitantes. En 2013 se reflejaba la<br />

media nacional de casi dos vehículos por<br />

hogar (1,75), según un estudio elaborado<br />

por el comparador de seguros online<br />

Seguros.es. La DGT nos comunicó que el<br />

año pasado el parque de vehículos de tipo<br />

turismo era de 22.024.538, es decir, casi 3<br />

personas de cada 5 tienen un coche.<br />

En la mayoría de los casos las personas<br />

con coche propio viajan solas en sus trayectos.<br />

La media europea de pasajeros<br />

por vehículo propio es de 1,7, siendo<br />

ineficiente el uso que se está dando al coche.<br />

¿Nos hemos preguntado alguna vez<br />

si es un coche lo que realmente necesitamos<br />

para nuestros desplazamientos? Un<br />

vehículo convencional pesa aproximadamente<br />

1.000 kg., imaginemos el esfuerzo<br />

requerido para ponerlo en funcionamiento,<br />

solo para desplazar a una persona de<br />

80 kg.<br />

Gonzalo Chomón, director de I+D+i de<br />

la empresa Evovelo, nos explica por qué<br />

desplazar un coche para transportar una<br />

persona es completamente desmesurado<br />

y altamente ineficiente tanto energéticamente<br />

como en uso de materiales y<br />

otros recursos. Para poder entender esta<br />

desproporción, nos plantea la siguiente<br />

reflexión: «Cambiemos de escala. Imaginemos<br />

que necesitamos desplazar un<br />

contenedor de 10 toneladas unos 10-20<br />

km diariamente y diseñamos para tal efecto<br />

una nave espacial capaz de recorrer la<br />

distancia entre la tierra y la luna a una velocidad<br />

que supera varias veces al sonido<br />

y con un peso de unas 125Ton. (125.000<br />

kg.). Esto sería completamente inviable y<br />

a los ‘ingenieros’ que lo propusiesen se les<br />

llamaría locos e insensatos...»<br />

Lo que este ingeniero pretende explicarnos<br />

es que muchos de nosotros tenemos<br />

aparcados a la puerta de casa una, dos o<br />

incluso más de esas ‘naves espaciales’. La<br />

evolución que ha tenido la sociedad a lo<br />

largo de las últimas décadas nos ha llevado<br />

a considerar razonable y lógico emplear<br />

estas ‘naves espaciales’ a diario exigiendo<br />

un <strong>sobre</strong> esfuerzo a nuestros recursos y<br />

medio ambiente innecesario. «La industria<br />

automovilística actual no puede vender<br />

vehículos más ligeros y eficientes porque<br />

<br />

los beneficios no cubrirían los costes de<br />

diseño, ventas y comercialización de este<br />

tipo de vehículos. Si sumamos a eso la reducción<br />

de infraestructura y de servicios<br />

de venta cruzada posterior a la adquisición<br />

del vehículo tradicional (combustible, servicios,<br />

reparaciones, recambios, seguros,<br />

etc.), la iniciativa de ofrecer vehículos más<br />

eficientes no resulta atractiva para el sector<br />

automovilístico actual... ¿Ha llegado el momento<br />

de plantear un nuevo paradigma de<br />

industria, igualmente rentable pero basado<br />

en otros preceptos?»<br />

Durante las últimas décadas existía una<br />

creencia muy arraigada <strong>sobre</strong> lo ilimitado<br />

de nuestros recursos materiales y energéticos.<br />

Se pensaba que el impacto causado<br />

en nuestro entorno más cercano por los vehículos<br />

convencionales era irrelevante para<br />

el futuro. Publicaciones recientes como<br />

‘Apaguemos la estufa: por qué deberíamos<br />

evitar un planeta 4ºC más cálido’ del Banco<br />

Mundial nos demuestran que la realidad es<br />

otra. Actualmente entre un 20 a un 25% de<br />

los recursos energéticos globales se emplea<br />

en el transporte de personas, siendo la<br />

mayor parte para vehículos convencionales.<br />

El primer vehículo solar diseñado y<br />

fabricado en España<br />

Por ello Gonzalo nos explica cómo del desarrollo<br />

de nuevos vehículos y productos<br />

del sector transporte deben basarse en el<br />

eco-diseño. Evaluando los recursos disponibles,<br />

el impacto económico, social y<br />

medioambiental que supone, y las necesidades<br />

reales de sus usuarios. Gonzalo y su<br />

equipo pretenden con el primer vehículo<br />

solar diseñado y fabricado en España ayudar<br />

al desarrollo de nuevas tecnologías en<br />

el transporte, fomentando la sostenibilidad<br />

y la innovación entre los profesionales del<br />

sector, y crear conciencia social ante nuevas<br />

formas de transporte más eficiente

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