Desenredando prejuicios - Corporación Caribe Afirmativo

La subordinación de la sexualidad al orden heterosexual y a la dominación masculina como lo denomina
Bordieu (2000), es una característica de la sociedad occidental en la que “el principio masculino
aparece como medida de todo” (Bordieu, 2000; 28). Dicho principio, en palabras del autor, es
el orden donde se centra el poder, donde se construye la virilidad, el cual a su vez es un precepto
sustentado discursivamente en oposición a lo femenino; en esa medida, existe un temor de ser “feminizado”,
pues en la perspectiva de la masculinidad esta condición es sinónimo de debilidad, flaqueza
o es motivo de burla. La masculinidad entonces se construye y se sustenta sobre negaciones,
temores, odios y miedos que son el campo para el rechazo, el prejuicio y la discriminación.
Definiendo conceptos
L.G.B.T.I.
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