18.04.2013 Views

Unidad III Oszlak-O´Donnell - Mabel Thwaites Rey

Unidad III Oszlak-O´Donnell - Mabel Thwaites Rey

Unidad III Oszlak-O´Donnell - Mabel Thwaites Rey

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Retomando el debate de ayer para fortalecer el actual<br />

pequeños éxitos y los muchos fracasos de las actividades de asistencia técnica durante decenios<br />

ponen de relieve la necesidad de cambiar los incentivos que determinan el comportamiento, requisito<br />

tan importante como la capacitación y los recursos. La clave está en dar con reglas y normas<br />

que ofrezcan incentivos para que los organismos estatales y los funcionarios públicos busquen el<br />

bien común, y que al mismo tiempo desalienten las medidas arbitrarias” (Banco Mundial, 1997: 31).<br />

Pero los sistemas de incentivos que acaban determinando la capacidad de una organización<br />

pública para cumplir efectivamente sus funciones no siempre dependen de variables internas<br />

situadas bajo la autoridad organizativa correspondiente. Tanto más cuanto que lo que pretendamos<br />

con el rediseño de incentivos sea un verdadero cambio de la naturaleza funcional de la<br />

organización. Por ejemplo, si queremos que la Aduana haga más con menos, pero de lo mismo,<br />

nos bastará una simple reforma de eficiencia. Pero si pretendemos que controle efectivamente<br />

el tráfico de mercancías, que desaparezcan las eventuales aduanas paralelas y el fraude,<br />

dando así seguridad, por ejemplo, a los compromisos comerciales internacionales del Estado o<br />

a los empresarios que no tienen ni quieren tener acceso al contrabando..., en este caso, la<br />

reforma de la Aduana es bastante más complicada. Dicho en nuestro lenguaje, en el primer<br />

caso nos planteamos una reforma meramente organizativa, en el segundo nos estamos planteando<br />

una verdadera reforma institucional de la Aduana. La vieja asistencia técnica internacional<br />

hizo mucho de lo primero y casi nada de lo segundo 15 .<br />

Si adoptamos la aproximación del Banco Mundial y consideramos que la Reforma del Estado<br />

es, ante todo, la reforma de las normas y reglas que determinan los sistemas de incentivos del<br />

comportamiento político-administrativo, será muy importante que comprendamos debidamente<br />

las clases y naturaleza de dichas normas y reglas. Para distinguir entre tipos de normas y<br />

reglas y entre los sistemas de incentivos correspondientes, proponemos distinguir conceptualmente<br />

entre instituciones y organizaciones. Esta distinción nos permitirá comprender la existente<br />

entre el Estado como sistema institucional y el Estado como sistema de organizaciones.<br />

Se trata de dos realidades diferentes, de dos sistemas de incentivos distintos, cuya reforma plantea<br />

exigencias y alcances asimismo diferentes 16 .<br />

Las instituciones son realidades abstractas, no son cosas que podamos tocar. Las instituciones<br />

son normas y reglas que estructuran la acción social. Son el sistema de constricciones y de<br />

incentivos del comportamiento de los individuos y de las organizaciones. Si utilizamos la metáfora<br />

del juego, las instituciones son las reglas del juego social: ellas determinan no sólo los procedimientos<br />

del juego, sino quiénes juegan y quiénes no, con qué equidad o ventaja se practica<br />

el juego, quién gana o puede ganar qué, quién paga los costes del juego, etc. Las instituciones<br />

son, pues, importantísimas: al articular la interacción entre actores, expresan las relaciones<br />

de poder y de interés de una determinada sociedad y se corresponden con el fondo de<br />

competencias exigidas para practicar exitosamente el juego que estructuran así como con los<br />

modelos mentales y valorativos que lo legitiman. Las instituciones no coinciden con la legislación<br />

o derecho positivo, porque existe institucionalidad formal e informal. Además del juego<br />

y de los actores formales pueden existir actores informales y normas informales, también constitutivas<br />

de la institucionalidad, es decir, del verdadero sistema de incentivos de los actores 17 .<br />

Las instituciones nunca son el producto de un acto de voluntad, sino el resultado de un<br />

proceso de aprendizaje social expresado en las leyes. Por ello, las instituciones no pueden ser<br />

591

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!