¿PADECE USTED DE INSOMNIO?
¿PADECE USTED DE INSOMNIO?
¿PADECE USTED DE INSOMNIO?
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mayores de 40 años tienden a acostarse más<br />
temprano, a dormir menos y a tener un dormir más<br />
fragmentado, con una alteración de la arquitectura<br />
del sueño, caracterizada por disminución del<br />
sueño delta. Además, los investigadores, en<br />
general, destacan que algunos de estos cambios<br />
relativos, aparecidos a partir de determinada edad,<br />
pueden ser atribuidos a condiciones físicas tales<br />
como la necesidad más frecuente de orinar,<br />
artritis, trastornos respiratorios del dormir,<br />
mioclonus nocturno, entre otros. Así, otros afirman<br />
que el ritmo circadiano cambia también<br />
reduciéndose la amplitud del mismo.<br />
De esta forma tenemos que desde un tiempo<br />
total de 16 a 18 horas diarias que duerme un<br />
recién nacido estas van disminuyendo,<br />
paulatinamente, hasta 5 o 6 horas en las edades<br />
más avanzadas, tal y como puede apreciarse en la<br />
Tabla 1 que insertamos a continuación:<br />
II. Prevalencia del insomnio.<br />
La prevalencia del insomnio es muy diferente en<br />
distintas regiones y su fluctuación varía, no sólo<br />
de una región a otra (zonas rurales, zonas<br />
citadinas) sino también, a partir del criterio que se<br />
42<br />
adopte como definición de insomnio. Así,<br />
encontramos, en la literatura, definiciones donde se<br />
contemplan parámetros más rigurosos que en otras<br />
y, en general, muchas investigaciones adolecen de<br />
una definición explícita, al menos, en el momento de<br />
ser publicadas.<br />
Más abajo relacionamos algunos resultados de<br />
investigaciones efectuadas en diversas ciudades.<br />
Como podrá apreciarse, en los resultados<br />
mostrados, son muy significativas ciertas<br />
disparidades lo que corrobora la necesidad de la<br />
implementación de un acuerdo dirigido hacia una<br />
metodología más homogénea y hacia la elaboración<br />
de definiciones de un grupo de categorías y<br />
conceptos que sean más aceptables por todos con<br />
el objetivo de hacer más comparables y<br />
beneficiosas las conclusiones de los trabajos que en<br />
el área se realizan. ¿Es que acaso las grandes<br />
clasificaciones (DSM, ICD, ICSD) no satisfacen<br />
todos los requerimientos o al menos los más<br />
importantes?. Creemos que sería harto beneficioso,<br />
para todos, continuar trabajando en una dirección<br />
más colegiada al respecto para que nos represente<br />
mejor y nuestros resultados adquieran, en la<br />
práctica clínica cotidiana, una mayor difusión y más<br />
amplia utilización.<br />
Ahora bien, ¿Pudieran ser los altos por cientos<br />
encontrados, en ni pocas ni muchas regiones en<br />
comparación con otras, el resultado de la<br />
apreciación y del valor que se les confiere,<br />
culturalmente, a las dificultades en el dormir? Hay<br />
estudios epidemiológicos sobre trastornos<br />
subjetivos del sueño (Billard et al. 1986 referido por<br />
Laporte y Capella, 1990) donde se ha mostrado que<br />
los que se quejaban de insomnio dormían,<br />
prácticamente, idéntico<br />
tiempo que los que no<br />
referían el problema y<br />
añaden (Laporte y Capella,<br />
1990) el 10% de los<br />
encuestados dormía como<br />
mínimo 9 horas diarias.<br />
En el trabajo que<br />
presentamos en esta<br />
ocasión, sobre el<br />
insomnio, como podrá<br />
apreciarse en las Tablas<br />
6,10 y 14 es elevado pues<br />
con respecto a la pregunta