Metodología de calificación soberana - Moody's

Metodología de Calificación
Metodología de calificación soberana:
Implicaciones de los sistemas bancarios altamente
dolarizados para el riesgo crediticio soberano
Resumen
Contacto Teléfono
Marzo 2003
Nueva York
Vincent J. Truglia 1.212.553.3685
David Levey 1.212.553.1953
Moody's ha iniciado un nuevo acercamiento al análisis de los sistemas bancarios "dolarizados" que puede resultar en
menores calificaciones para países con mercados emergentes y sistemas altamente dolarizados. Un estudio preliminar
acerca de las crisis bancarias recientes apunta hacia los riesgos adicionales que vienen con las deudas bancarias
nacionales denominadas en divisass. El estudio se centra en las experiencias de Rusia, Argentina, Ecuador y Uruguay.
El riesgo de enfrentar una congelación de depósitos en sistemas bancarios altamente dolarizados parece coincidir,
preceder o algunas veces presagiar, un incumplimiento de pago sobre los bonos en moneda extranjera. Como tal, una
fuga de depósitos en moneda extranjera puede ser un indicador importante de una situación crediticia soberana y, sin
la amortiguación de una amplia reserva en moneda extranjera, los países con sistemas dolarizados pueden enfrentar una
escasez de recursos al tener depósitos en una divisa que ellos no pueden emitir. En algunos casos incluso se ha visto que
las líneas de crédito contingente han sido insuficientes.
Para captar el riesgo, Moody's volverá a examinar las calificaciones de los países con mercados emergentes con una
calificación Baa1 o menor y con un gran número de depósitos bancarios denominados en moneda extranjera.
UN ACERCAMIENTO MAYOR REVELA LOS RIESGOS DE LA DOLARIZACIÓN
Al analizar de cerca los incumplimientos de pagos que han ocurrido en los países con mercados emergentes desde
1995, Moody's ha encontrado que los países parecen enfrentar riesgos adicionales si sus sistemas bancarios están
denominados en gran medida en moneda extranjera. Debido a que la moneda extranjera generalmente es el dólar
estadounidense, dichos países se conocen como "dolarizados". Sin embargo, la denominación en cualquier otra divisa
produciría el mismo resultado analítico.
En tres casos recientes en América Latina, la fuga de depósitos en moneda extranjera fue un importante indicador
de una situación crediticia soberana adversa. Como resultado, Moody's volverá a examinar los límites soberanos en
moneda extranjera de los países con mercados emergentes y sistemas bancarios altamente dolarizados.

El análisis de los sistemas bancarios dolarizados, con vistas a un posible cambio de calificación, se centrará en
países con mercados emergentes con calificación Baa1 o menor. El riesgo de que se presente una crisis de este tipo en
países con mejores calificaciones y con sistemas bancarios dolarizados es menor. Aunque tal vez tengan un riesgo de
incumplimiento de pago marginalmente mayor que los sistemas no dolarizados, la capacidad de los países con mejor
calificación para hacer frente a tales presiones sobre sus sistemas bancarios parece ser absorbida adecuadamente por su
calificación actual.
LOS DEPÓSITOS EN MONEDA EXTRANJERA PUEDEN AUMENTAR EL RIESGO DE UNA CRISIS DE
SUSPENSIÓN DE PAGOS
Los casos que Moody's revisó recientemente incluyen a Rusia, donde un colapso del sistema bancario se tradujo en un
incumplimiento extenso tanto en los depósitos en moneda extranjera como en los denominados en moneda local. Aún
más interesante, desde la perspectiva de los límites soberanos, en los tres casos de América Latina (Argentina, Ecuador
y Uruguay), los incumplimientos no sólo involucraron los depósitos bancarios en moneda extranjera sino que fueron el
resultado directo de un mandato gubernamental de recalendarización, lo que nuestros límites para depósitos bancarios
en moneda extranjera buscarían abordar.
Antes de sus crisis, cada uno de estos tres países tenía sistemas bancarios altamente dolarizados. Esto parece
indicar que, en ciertas circunstancias, una gran proporción de depósitos bancarios, denominados en moneda extranjera
puede aumentar el riesgo de que un país sea susceptible de enfrentar una crisis de pagos.
EL RIESGO APARECE EN AMBOS LADOS DE LA CONTABILIDAD DE LOS SISTEMAS BANCARIOS
En los casos de América Latina, el mecanismo mediante el cual el riesgo aumentó no sólo estaba centrado en el lado de
los activos en el balance del sistema bancario. Más bien, el riesgo apareció tanto en el lado de los activos como en el de
los pasivos de la hoja de balance. Lo anterior tiene importantes implicaciones de riesgo para los gobiernos, porque si un
problema se limita al lado de los activos de la contabilidad -incluso si la causa del problema relacionado con la calidad
de los activos son las grandes pérdidas en moneda extranjera- los gobiernos pueden absorber con facilidad tales
pérdidas traduciéndolas en deuda del gobierno en moneda local. La carga del gobierno, a corto plazo, es el costo
incremental de financiamiento causado por el aumento de la deuda debido al rescate de los bancos.
ANTE LA INCAPACIDAD PARA EMITIR MONEDA EXTRANJERA, SE CONGELAN LOS DEPÓSITOS
La solución de una crisis en un sistema bancario dolarizado es más difícil si el problema involucra el lado de los pasivos:
una fuga de depósitos en moneda extranjera. A menos que el gobierno tenga suficiente moneda extranjera, para cubrir
no sólo el total de los depósitos en moneda extranjera sino también para cubrir el pago total del servicio de la deuda en
moneda extranjera que vence, podría ser incapaz de detener la fuga de capital. Con ello, el problema sistémico podría
deteriorarse hasta el punto en el que el gobierno se vea forzado a congelar todos o algunos de los depósitos bancarios
(posiblemente incluyendo también los depósitos en moneda nacional). Sin una reserva amplia en moneda extranjera, el
gobierno no tendrá los recursos suficientes, ya que los depósitos están denominados en una divisa que no puede emitir.
En Argentina, Ecuador y Uruguay, (todos países altamente dolarizados) las inquietudes acerca de los problemas
con la calidad de los activos bancarios plantearon preocupaciones entre los depositantes sobre la solvencia bancaria.
Esto, a su vez, provocó la disminución de los depósitos en dólares, presionando al tipo de cambio. En Argentina, la
presión fue en la viabilidad del régimen de tipo de cambio fijo con el dólar.
UN TIPO DE CAMBIO DÉBIL AGRAVA LOS PROBLEMAS DE SOLVENCIA BANCARIA
En Ecuador y Uruguay, la devaluación del tipo de cambio aumentó las inquietudes acerca de la calidad de los activos
bancarios debido a que los bancos locales habían prestado importantes cantidades de dólares a los residentes locales. El
descenso del tipo de cambio implicó el deterioro en la calidad crediticia de muchos deudores, incluyendo al gobierno.
Estos temores entonces llevaron a un mayor retiro de los depósitos creando así un círculo vicioso. A diferencia de las
fugas de depósitos puramente locales, las autoridades no tenían la moneda extranjera para detener dichas fugas.
El incumplimiento del pago de la deuda del gobierno Argentino generó un problema de calidad de los activos,
que, además, se complicó por el colapso inevitable del régimen de convertibilidad de la divisa argentina. Para las
autoridades argentinas, la única forma de evitar un colapso mayor fue mediante la congelación de todos los depósitos
bancarios tanto en moneda nacional como extranjera.
2 Metodología de Calificación de Moody’s

En Ecuador, conforme se desplomaba el tipo de cambio, el gobierno se vio forzado a congelar una porción tanto
de los depósitos bancarios en moneda nacional como en moneda extranjera para poder detener la fuga de depósitos. La
fuga afectó principalmente a los depósitos denominados en dólares. Al empeorar la crisis, el gobierno terminó por
incumplir en las obligaciones que él mismo emitió.
La fuga de depósitos en Uruguay agravó el problema de tipo de cambio hasta el punto en que se vio amenazada la
solvencia de todo el sistema. Debido a que el gobierno uruguayo no podía emitir dólares, decidió congelar los
depósitos a plazo en moneda extranjera. Cabe apuntar que, hasta la fecha, el gobierno uruguayo no ha incumplido en el
pago de su propia deuda.
El riesgo de congelar los depósitos en economías de este tipo parece coincidir (Argentina), preceder (Ecuador) y
posiblemente presagiar (Uruguay) un incumplimiento en el pago de las obligaciones de los gobiernos en moneda
extranjera y por lo tanto, justifican nuestra política de tratar los depósitos en moneda extranjera como más riesgosos
que los bonos. En el caso de Argentina, la calificación de Moody's tanto para los bonos como para los depósitos fue la
misma, debido a que Moody's consideraba que cualquier situación en el ámbito crediticio afectaría a ambos de igual
forma. En el caso de Ecuador y Uruguay, los límites para depósitos eran inferiores a los de los bonos. En retrospectiva,
el enfoque para cada uno de estos casos parece haber sido el apropiado.
LA DISTANCIA ENTRE EL COLAPSO DEL TIPO DE CAMBIO Y LA FUGA DE DEPÓSITOS HA DISMINUIDO
Conforme la curva de aprendizaje ha perdido pendiente, parece posible que aumenten los riesgos de los países con
mercados emergentes y sistemas bancarios altamente dolarizados. Esto es verdad especialmente en América Latina,
donde dichas crisis han sido muy bien difundidas. En países con sistemas bancarios altamente dolarizados,
sospechamos que el horizonte temporal entre un colapso del tipo de cambio y una fuga de depósitos se ha acortado.
Una parte importante del análisis futuro de Moody's se centrará en el nivel de las reservas internacionales que
mantiene la autoridad monetaria y el nivel de depósitos en moneda extranjera que tiene el sistema bancario en bancos
afiliados al BIS (Banco Internacional de Pagos). Además, será muy importante la flexibilidad del régimen de tipo de
cambio al igual que el tamaño y la denominación de la deuda del gobierno. Cabe apuntar que un historial de tipos de
cambio verdaderamente flexibles puede reducir el riesgo en parte, debido a que el sistema bancario es más apto para
valorar el riesgo de crédito en un ambiente de tipo de cambio potencialmente volátil. El nivel total de riesgo parecería
mitigarse si la suma de las reservas internacionales y los depósitos bancarios en moneda extranjera de bancos locales en
el BIS fuera más alta que la combinación total de los depósitos bancarios denominados en moneda extranjera de
residentes o no residentes y el pago del servicio de la deuda del gobierno en moneda extranjera que vence en el corto
plazo. Si las reservas son adecuadas, aumenta la probabilidad de que los gobiernos puedan hacer frente a la fuga de
depósitos. Si no, se cumple una condición- necesaria pero no suficiente para la aparición de la fuga de depósitos en
moneda extranjera. Como se ha observado en estos tres casos recientes, una fuga de depósitos en moneda extranjera
parece ser un indicador importante de un acontecimiento de crédito soberano.
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Reporte Número: 81054
Report Number (English version): 77718
Autor Editor Asociado de producción en jefe
Vincent J. Truglia Joe Cullen Cassina Brooks
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