D E R E e H o N A T U R A L Y DE R E e H o e A N o N 1 e O·
D E R E e H o N A T U R A L Y DE R E e H o e A N o N 1 e O·
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CHARLES MUNIER<br />
Si bien difieren entre sí sobre puntos importantes, tales como el<br />
contenido del Derecho natural, su extensión, sus relaciones con la<br />
moral y el derecho positivo, los juristas contemporáneos que permanecen<br />
ligados a esta noción testimonian la necesidad de una norma<br />
jurídica universal y de un fundamento inviolable del Derecho. Trágicas<br />
experiencias han contribuído a esta toma de conciencia. a<br />
estas reflexiones': es evidente que los excesos de los regímenes totalitarios,<br />
cometidos en nombre de un Derecho positivo erigido en regla<br />
absoluta, y las ruinas acumuladas por las últimas guerras mundiales,<br />
han revelado la insuficiencia del positivismo jurídico. Si el<br />
Estado y su ley constituyen la única norma ¿qué freno encontrará<br />
a su voluntad de poder, qué respeto deberá asegurar a los derechos<br />
inviolables de la persona humana, qué instancia se podría invocar<br />
parl:'o condenar aquello que la conciencia espontánea considera como<br />
una tiranía, cómo sería posible garantizar a la humanidad una paz<br />
duradera, en la búsqueda de un bien común y universal?<br />
Viniendo de direcciones tan diferentes como el idealismo neokantiano<br />
(R. Stammler, G. Radbruch), la fenomenOlogía husserliana<br />
(R. Welzel, G. Gurvitch), la filosofía de los valores (A. Bonnard, G.<br />
Ripert) o el existencialismo (M. Muller, R. Mercies), los filósofos contemporáneos<br />
no cesan de mostrar su interés por el Derecho natural.<br />
En un dominio más específicamente cristiano, el aliciente de un<br />
diálogo ecuménico y las duras experiencias del régimen nazi (problemas<br />
del eugenismo, del antisemitismo, de la educación y del matrimonio)<br />
han favorecido también las reflexiones sobre las relaciones<br />
del Derecho natural con la revelación cristiana. Teólogos y juristas<br />
protestantes buscan un fundamento teológico para el Derecho y 10<br />
encuentran en el Decálogo y la ley evangélica (J. Ellul, E. WOlf), o en<br />
la analogía cristológica (K. Barth). Otros se acercan más resueltamente<br />
a las posiciones católicas y revalorizan el orden de la creación<br />
(C. R. Dodd, G. Wingren, etc.). En fin, la resonancia de los trabajos<br />
del Vaticano II y la gravedad de los problemas planteados a la<br />
conciencia de nuestros contemporáneos estimulan los esfuerzos de<br />
los teólogos, de los filósofos y de los juristas, en orden a deducir los<br />
principios universales y las normas últimas del Derecho.<br />
¿Sería temerario afi--mar que la doctrina cristiana del Derecho<br />
natural proporciona una respuesta siempre válida. mostrando que<br />
las leyes de los hombres carecen de valor si no expresan y respetan<br />
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