PALABRA DE DIOS ACTUAL - Regreso

Dios:
Sobre el valor económico de las palabras de
Debo hacer una distinción entre los profetas, que lo
han sido durante toda la existencia de la humanidad, y
aquellos que se autoproclaman profetas, en beneficio
personal. Les pido que distingan entre estos dos tipos. Los
primeros hablan en verdad, amor y justicia, y jamás reciben
ningún beneficio, ni económico, ni de ninguna índole y son
anónimos. Los segundos lucran con su actuar.
Las palabras de Dios no tienen valor económico, no
hay moneda para pagarlas, es solamente mediante la
devoción, la fe y el amor incondicional como se llega a su
presencia. Los bendigo, les doy mi paz y continúen
trabajando.
Sobre los que hacen justicia con su propia
mano:
No es mediante el crimen como el hombre puede
proclamar su libertad, sino como se vuelve esclavo del rencor
y de la maldad; la sangre que se derrama siempre es la de un
hermano, que te recuerda que su sangre es la misma que
corre por tus venas, las de tus hijos, y las de tus padres.
Es momento de proclamar la libertad desde la justicia
compasiva, en amor y consideración a la humanidad.
Tiempos difíciles:
Empieza a sentirse la fuerza que sujetará a la
humanidad: inundaciones y catástrofes naturales comienzan
un nuevo ciclo; se agravarán las carencias de alimentos y
aumentará la violencia. El crimen organizado se activa en
mayor medida y permea en cualquier nivel económico, en
cualquier sociedad; hasta llegar a un punto, en que todas las
personas tendrán contacto con él, siendo víctimas o
victimarios, es por eso que el llamado urgente a la Protección
Divina nuevamente se hace hoy. Hoy 24 de agosto
nuevamente les digo:
Cobíjense en el amor a Dios,
En tiempos difíciles es la única morada segura, Yo
como Padre Protector los recibo y protejo.
Lo importante hoy es que se están cumpliendo mis
Palabras. Ya lo dije antes, pero nuevamente lo digo a las
personas, como he venido haciéndolo en los últimos meses.
La señal fue el cambio de clima: de sequía (en época
de lluvias) y luego las lluvias torrenciales. Yo no envío la
maldad ni la catástrofe al mundo,
(Agosto de 2011).
Tiempos difíciles, mensaje urgente:
¡Cada día pidamos protección! anúncialo en la
página.
¡Unamos nuestros corazones en amor a Dios!
Estas son las palabras y Yo podré intervenir para
salvar a muchas personas. Este es mensaje urgente, y lo
demás es secundario.
Pero si unen sus corazones, en amor a Dios, pueden
detenerlo.
39