Redalyc.Música y ciudad: definiciones, procesos y prospectivas
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<strong>Música</strong> y <strong>ciudad</strong>: <strong>definiciones</strong>, <strong>procesos</strong> y <strong>prospectivas</strong><br />
menos, el cantante que más discos había vendido en España en todos los<br />
tiempos era Julio Iglesias (Jones 1992: 75). Actualmente, su hijo Enrique está<br />
siguiendo un camino parecido entre un público joven y no tan joven. Por<br />
supuesto, la pregunta es qué tan "local" resulta un cantante español que vive<br />
en Miami, graba con la Fonovisa mexicana, canta en Spanglish y cobra en<br />
dólares. Una pregunta similar suscita comprobar quiénes son los músicos de<br />
la Sociedad General de Autores de España que más vendieron en 1999:<br />
Oreja de Van Gogh, Luis Miguel, Chayanne, Miliki, Sabina, Bosé y Maná, por<br />
este orden (SGAE 2000: 4).<br />
Aunque algunos productos glocales desdicen, por tanto, la ecuación rock =<br />
urbano = juventud, algunos otros la confirman; es por ello que el seguimiento<br />
de los gustos juveniles se muestra como una estrategia factible para entender<br />
musicalmente la <strong>ciudad</strong>. La lógica de este enfoque tiende a construir su<br />
objeto a partir de algún género para, a continuación, seguir al grupo social de<br />
sus incondicionales (etiquetados como heavies, skins, punkos, bakaletas,<br />
siniestros). El supuesto subyacente es la productividad contrahegemónica de<br />
la música para dar expresión a formas emergentes de vida juvenil, basadas<br />
en su vida cotidiana y sus formas de sociabilidad, diferenciadas entre sí y con<br />
respecto al mundo adulto dominante. El problema que suscita, sin embargo,<br />
esta forma de proceder arranca, ya desde el inicio, con la definición<br />
apriorística del género y el recorte correspondiente de un grupo social las<br />
más de las veces ficticio. Nada es tan escurridizo como una audiencia.<br />
El trabajo más completo con que contamos en esta línea es el de Silvia<br />
Martínez sobre el heavy metalen Barcelona (1997;1999). Cabe también<br />
señalar los estudios comparativos de Feixa sobre punks en Lleida y Ciudad<br />
de México (1998), los de H. Fouce sobre la movidita madrileña(1998), el de A.<br />
Méndez Rubio sobre hip-hop valenciano, el de J. Contreras sobre círculos<br />
celtas en Madrid (1999). Sobre música máquina o fenómenos tan<br />
interesantes como la ruta del bacalao y sus variantes (de Toro a Asturias<br />
existe, por ejemplo, una ruta del torrezno) apenas tenemos reflexiones<br />
incidentales, como las del semiólogo G. Abril (1995: 96).<br />
Un planteamiento diferente es el de sociólogos de la juventud, como E. Gil<br />
Calvo, que buscan construir el cuadro de conjunto de los consumos y las<br />
prácticas entre los jóvenes, calificados en bloque como "depredadores<br />
audiovisuales" (sic). Aunque los trabajos de este autor no atienden<br />
propiamente a la producción musical de diferencia entre ellos (1985) , sí lo<br />
hacen otras investigaciones sociológicas como las de J. Levices, mediante el<br />
análisis de redes urbanas y el análisis factorial de cuestionarios a lectores de<br />
revistas musicales (1987, 1993).