Genocidios en África y silencio internacional - korima claretianas sur

c) Fuerza militar internacional.
06.06.genocidios en Africa y silencio internacional Pepe
Durante demasiado tiempo una de las principales quejas del pueblo
congoleño ha sido que la misión de cascos azules que ha ido al Congo
(MONUC) parece haber ido allí para quedarse quieta cuando se
producían masacres, y acudir al lugar al día siguiente para contar los
muertos y hacer luego un informe. También nos han llegado frecuentes
denuncias de la sociedad civil congoleña de complicidad de los cascos
azules con los agresores (especialmente con los ruandeses y los tutsi
banyamulenges). Por ejemplo: negándose a ir a ciertos lugares en donde
alguna gente había descubierto arsenales de armas escondidas en
propiedades de banyamulenges; o desapareciendo casualmente de una
zona en momentos en que por ese sitio se iba a producir una incursión
de tropas ruandesas. El sentimiento del pueblo congoleño de que los
cascos azules de la MONUC no estaban ahí para defenderlos, llegó al
extremo de que en junio de 2004 se produjeron múltiples
manifestaciones en diferentes ciudades con una población que se
manifestaba encolerizada contra ellos. Se produjeron altercados,
numerosos vehículos de la MONUC fueron quemados. Y los cascos
azules, que hasta entonces no habían disparado contra las tropas que
habían causado tantas matanzas entre la población civil, dispararon
entonces contra el pueblo al que habían ido a proteger produciendo
varios muertos. Se dan estas circunstancias en momentos en que al
mando de los cascos azules está el señor William Lacy Swing, de
nacionalidad norteamericana y que también es el Representante Especial
del Secretario General para la R.D. del Congo. Se vuelve a repetir la
historia de Ruanda de 1994 con los cascos azules.
Así pues, la fuerza militar actual de los cascos azules tiene muy limitada
su eficacia por no poder actuar en contra de los intereses de cualquiera
de los 5 miembros permanentes, pues en caso contrario la misión podrá
ser vetada. El cambio ha de producirse, pues, en el seno del Consejo de
Seguridad cambiando ese derecho a veto.
No estoy en contra de una fuerza militar internacional como los cascos
azules, de hecho creo que bien usada puede ser una herramienta válida
para la desmilitarización del planeta. Pero para que esto sea así, primero
han de dejar de estar al servicio de quienes tienen un papel hegemónico
en la ONU.
d) Reformas necesarias en Naciones Unidas.
A lo largo de este documento he pretendido mostrar cómo los grandes
dirigentes de la política internacional, con los 5 miembros permanentes
del Consejo de Seguridad a la cabeza, no pretenden un mundo más justo
y más fraternal. Es la obtención del poder y los beneficios económicos
lo que les mueve a ellos y a los grupos corporativos que están a sus
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