venid a mi
venid a mi
venid a mi
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
La compasión<br />
pequeños para conversar con ellos de asuntos de adultos. Sonia<br />
pensaba que nadie sabía lo que ella sentía y que nadie se<br />
interesaba por ella.<br />
Un día, Beatriz pasó a verla. Sonia no la había visto desde hacía<br />
más de un año. Con todos los problemas que había tenido antes<br />
del divorcio, no había tenido tiempo para cultivar a<strong>mi</strong>stades.<br />
Beatriz le dijo:<br />
—He sabido que has estado pasando momentos muy difíciles y<br />
he deseado pasar a saludarte.<br />
Las dos rieron mucho y también lloraron un poco. Beatriz no<br />
hizo a Sonia ninguna pregunta dolorosa ni e<strong>mi</strong>tió ningún juicio.<br />
Cuando se levantó para irse, las dos se sorprendieron al ver que<br />
había pasado una hora. Ya en la puerta, Beatriz dio a Sonia un<br />
abrazo y le dijo:<br />
— Quiero que sepas que te quiero y que siempre estoy a tu<br />
disposición si me necesitas. Me mantendré en contacto contigo.<br />
Después que su a<strong>mi</strong>ga se hubo ido, Sonia cerró la puerta,<br />
sintiéndose aliviada, más segura de sí <strong>mi</strong>sma y no tan<br />
terriblemente sola.<br />
4. Jesús bendijo a los del pueblo. Uno de los grandes <strong>mi</strong>lagros que<br />
nuestro Salvador efectuó entre los nefitas fue la bendición de los<br />
niños. Antes de orar, había reunido a los pequeñitos a Su<br />
alrededor y, cuando ter<strong>mi</strong>nó de orar, los tomó "uno por uno, y<br />
les bendijo, y rogó al Padre por ellos" (3 Nefi 17:21). En seguida,<br />
Jesús hizo descender ángeles del cielo para <strong>mi</strong>nistrar a los niños<br />
(véase 3 Nefi 17:24).<br />
El Señor no envía con frecuencia ángeles del cielo para<br />
<strong>mi</strong>nistrar a habitantes de la tierra. Por lo general, El inspira a<br />
personas buenas por medio del Espíritu Santo para que actúen<br />
como Sus ángeles y atiendan a las necesidades de los demás.<br />
El eider Marión D. Hanks explicó: "El Señor dijo, hablando de<br />
Sus siervos, 'Su brazo será <strong>mi</strong> brazo' [D. y C. 35:14]. ¿Habéis<br />
pensado en eso? Para mí ése es uno de los encargos más<br />
sagrados, más importantes y más personales que se pueda leer<br />
en libro alguno, sagrado o de otra clase. El Señor dice que este<br />
brazo mío es el de El. Esta mente, esta lengua, estas manos,<br />
estos pies... son los únicos instrumentos que tiene para trabajar<br />
en lo que a mí respecta" (Service, "Brigham Young University<br />
Speeches of the Year", Provo, 15 de octubre de 1958, pág. 3).<br />
Conclusión<br />
"Si bien algunas personas han sido bendecidas desde que nacieron<br />
con un corazón compasivo, la mayoría debemos esforzarnos<br />
conscientemente por cultivar la compasión. Si estamos ansiosos<br />
216<br />
bibliotecasud.blogspot.com