Boletín Salesiano - Salesianos Venezuela

“Ayer, 28 de Octubre de 2007, en la plaza de San Pedro,
en el Vaticano, han atestiguado aproximadamente 40.000 personas,
la solemne inscripción en el libro de los beatos
de 498 mártires del siglo xx en España, entre los cuales
63 miembros de la Familia Salesiana…”
Eliseo Bezze, sdb
Algunos de los nuevos
mártires
Esta es la noticia escueta
que los medios de comunicación
han divulgado como
un acontecimiento único en la historia
de Iglesia y de la Congregación
Salesiana.
Son 63 mártires: 22 sacerdotes, 16
seminaristas, 18 coadjutores, 4 salesianos
cooperadores y 3 aspirantes.
Son apenas las 10 de la mañana en
una Celebración Eucarística. A la lectura
del decreto de Beatificación hace
eco un caluroso y emotivo aplauso:
No era un signo de protesta, era el
grito de júbilo por la victoria sobre la
muerte: “¡Cristo vence, Cristo reina,
Cristo impera!”
¡Bien lejano quedaba
el recuerdo de aquellos
días trágicos de la guerra
civil española; días de
odio, días de martirio!
Ahora en un abrazo fraterno
en la Plaza de San
Pedro se congregaban
los 4500 familiares de los
religiosos mártires, los
71 obispos españoles, la
España Salesiana, autoridades
políticas y civiles,
los miles y miles de peregrinos.
No podía faltar nuestro Rector
Mayor, P. Pascual Chávez, quien escribirá
para la circunstancia: “Morir
mártir es una gracia que el Señor
otorga a quienes quiere
de modo muy especial.
Como la pasión de Cristo
fue y sigue siendo la
mejor noticia para la humanidad
(su salvación);
así también la Beatificación
de los mártires
es la proclamación
de una buena noticia:
Dios sigue empeñado
en salvar y sigue precisando
de hombres que entregados
totalmente a El, puedan entregarse a
sus hermanos totalmente”. Para nosotros,
los Salesianos, es un llamado
“a renovar nuestra pasión apostólica
a favor de los jóvenes. ¿Y qué mayor
demostración de pasión que entregar
la propia vida?”
¿Cómo olvidar en efecto la súplica
de Don Enrique Sáiz a los verdugos,
para que aceptaran su propia sangre
en resguardo de los jóvenes que la
Providencia le había confiado?
Ni se puede olvidar el grito de la
única venganza cristiana, el grito de:
“Perdón, Perdón, Perdón”, del cooperador
Bartolomé Blanco. Parece
resonar en nuestros oídos la suplica
de Jesús agonizante: “Padre, perdónalos…”
Son las 12 del día. El Santo Padre,
Bendito XVI, saluda a los peregrinos y
eleva una fervorosa petición: “Su sangre
derramada sea semilla de santas y
Biografías de los mártires
numerosas vocaciones sacerdotales,
religiosas, misioneras”
Cuando Don Bosco, en 1886
(50 años antes del martirio), visitó a
sus hijos en España, soñó con una
floración abundante del carisma salesiano
y hoy él también está de fiesta
(en el cielo también hacen fiestas,
dice Jesús) y María Auxiliadora, la
Reina de los Mártires, cubre con su
manto a sus hijos, fruto maduro de
heroicidad.
“… ¿Éstos quienes son?... De
pie, delante del trono del Cordero,
con vestidura blanca y con palmas
en las manos, son los que han lavado
sus vestiduras y las han blanqueado
con la Sangre de Cordero”. (Apocalipsis
7). El día no ha terminado aún:
el martirio seguirá siendo el sello de
autenticidad para la Iglesia, mientras
peregrina en este mundo.
Noviembre - Diciembre
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