La Gestión de Residuos de la Construcción y Demolición: un sector ...
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Un repaso a <strong>la</strong> economía<br />
Octubre 2008<br />
y hacerlo <strong>un</strong>o mismo. ¿De verdad po<strong>de</strong>mos consi<strong>de</strong>rar que lo ocurrido<br />
es fruto <strong>de</strong> que <strong>un</strong>os cuantos americanos no pue<strong>de</strong>n afrontar<br />
sus hipotecas? Eso escapa a todo sentido común, sino miremos<br />
<strong>la</strong> tasa <strong>de</strong> paro estado<strong>un</strong>i<strong>de</strong>nse. ¿No será más bien fruto <strong>de</strong> <strong>un</strong>a<br />
comercialización exponencial tanto en cantidad como en calidad <strong>de</strong><br />
productos fi nancieros <strong>de</strong> <strong>un</strong>a forma exagerada y masiva cuyo bien<br />
original y subyacente era <strong>un</strong>a casa <strong>de</strong> ma<strong>de</strong>ra? Ya <strong>de</strong>cía <strong>un</strong> señor<br />
banquero algo inteligente l<strong>la</strong>mado Botín, tanto que vendió activos<br />
inmobiliarios antes <strong>de</strong> que cayeran, que eso no era hacer banca.<br />
Es en este p<strong>un</strong>to don<strong>de</strong> ha faltado regu<strong>la</strong>ción, pero no caigamos<br />
en <strong>la</strong> tentación <strong>de</strong> solicitar ahora <strong>un</strong> intervencionismo feroz que<br />
<strong>la</strong> historia nos <strong>de</strong>muestra que no genera progreso.<br />
Sea como fuere, hemos <strong>de</strong> calmarnos <strong>un</strong> poco todos y confi ar<br />
en nuestro sistema fi nanciero, como <strong>un</strong> sistema que siempre<br />
hemos criticado como rácano (sólo daba dinero a quien lo<br />
tenía y n<strong>un</strong>ca arriesgaba), pero ahora se <strong>de</strong>muestra sólido. Y<br />
es que hace poco <strong>un</strong> amigo me comentó preocupado que no<br />
sabía dón<strong>de</strong> colocar su dinero (legal) para que estuviera a<br />
salvo. No comparto tu preocupación, le dije, (tal vez porque<br />
objetivamente no <strong>la</strong> tengo) y consi<strong>de</strong>ro que tenemos entida<strong>de</strong>s<br />
lo sufi cientemente solventes como para que no suframos.<br />
Tal vez si antes no te lo cuestionabas <strong>de</strong>bes pensarlo, pero no<br />
temer. Y es que <strong>la</strong> alternativa es impensable: ¿dinero <strong>de</strong>bajo <strong>de</strong><br />
<strong>la</strong> baldosa? Me niego, me habría equivocado <strong>de</strong> país ya que no<br />
es forma <strong>de</strong> vivir.<br />
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