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Como El oportunismo viene la mano de Fabián en la Yannantuoni Clase 3 en y el la 2007 efectividad de su Astra lo proyectaron a un
Triunfo clave
A
sí deberá catalogarse el segundo
grito de año para Fabián Yannantuoni,
que saltó decididamente a la
segunda posición de la tabla anual.
En San Jorge, el Astra del patito
de Capitán Bermudez emergió victorioso de la
marea de Focus que se anotaban para festejar
y le puso un condimento mas de suspenso
al ya de por si atractivo desarrollo del certamen.
Ese en el que el Clío de Bosio respira
efectividad, hasta ahora el arma mas confiable
para el equipo asentado en Venado Tuerto.
En este round santafesino, las penurias le
tocaron a Emanuel Moriatis, que tras disputarle
supremacías a Yannantuoni durante la
serie dominical, derritió el motor de su Focus
obligándose a largar desde el fondo…la falta
de un 2.0 de repuesto condicionó definitivamente
al piloto de Lanús, que cedió importante
terreno en la batalla por el campeonato
cuando restan cuatro fechas, el margen es
cada vez mas estrecho y las caídas duelen
cada vez mas. Gabriel Massei fue otra de las
caídas claves, porque el de Marcos Juárez,
sin ser contundente, abrigaba esperanzas de
sumar en el marco de una carrera enredada
en su lote. Pero esta vez la caja lo dejó afuera
con gusto a frustración.
La otra cara de la moneda para la marca del
ovalo vino de la mano de Esteban Tuero y de
Leo Larrauri. Puntualmente el ex F1 continúa
su embestida hacia los primeros lugares
del torneo a fuerza de rendimiento, ganas y
espectáculo. Esteban disfruta de su medio
mecánico y hace uso irrestricto del mismo
con una cuota de arrojo y talento que deleita,
aunque sin perder ni efectividad ni contundencia.
Estamos obligados a pelear todas las
carreras si queremos acercarnos adelante
justifica el piloto de Caballito, paliando con una
segunda parte de campeonato las penurias
vividas a principio del ejercicio 2007. Perdimos
muchas carreras y el resto ha sido mas
regular, advierte. Por lo pronto, de su actitud
se desprende que esta inercia positiva se
mantendrá y a pesar de los casi 50 puntos que
lo separan del liderato, nadie podrá darse el
lujo de descuidarse.
La otra variable vino por el lado de Leo Larrauri,
otro que cosechó en forma, aunque finalizó
la jornada con cierto regusto amargo. En su
primer protagonico de realce con el Focus by
Pozzi-Pou, Leo quebró sin dramas a Tuero
en su serie y se encaramó decidido a repetir
en la final. Con astucia y oficio, eligió el ritmo
que mas le convenía para apilarlos a su zaga,
arrastrando cierto problema de frenos que no
le permitía respirar con alivio. La relativa tranquilidad
a daba la respuesta en aceleración
que le daba cierto aire, pero...
Un lujo
La presión se hizo insostenible por parte
de Yannantuoni, durante numerosos giros
y posteriormente de Tuero, que lo buscó en
cada frenaje, intuyendo que el desarrollo de la
segunda mitad de carrera sería mas complicado
aún. Pero de esa puja sacó provecho
Yannantuoni, muy atento a la jugada y con un
plus de equilibrio en su chasis que le permitió
dibujar todo tipo de maniobras. Y en una de
ellas liquidó el pleito, superando a ambos
cuando Tuero ya había ganado la posición
del irreductible Leo. Maniobras al límite pero
dentro de la ley, acción a voluntad, un lujo de
manejo y emoción que cada vez escasea mas
en nuestro automovilismo.
Y la cuestión se realza cuando se trata de
pilotos que tambièn batallan por el actual