Semana Santa - mengibar

ésta magnífica escultura guardan semejanza con los portados por
Nuestro Padre Jesús “El Abuelo”, obra anónima de finales del siglo
XVI, las características de la talla mengibareña son más propias del
nazareno sevillano que avanza hacia su calvario, y que al moverse
sobre las andas parece caminar, gracias a ese paso racheado tan
típico de la ciudad. El rostro decaído y consumido por el cansancio,
pero a la vez resignado, recuerda más a obras tan importantes
como Nuestro Padre Jesús del Gran Poder, obra del cordobés Juan
de Mesa, aunque presente, eso sí, un menor grado de patetismo
de lo que acostumbró a mostrar el discípulo de Martínez Montañés.
Del mismo autor cabe destacar la talla de San Juan Evangelista, de
la cofradía que lleva el mismo nombre, existente ya en el siglo XVII, y refundada
en 1855. Su serena belleza, rasgos juveniles y posición firme,
hacen de esta representación del discípulo amado uno de los grandes
ejemplos de escultura de la primera mitad del siglo XX de nuestra localidad.
A pesar estar realizado en estuco sobre madera, dando lugar a
una robustez mucho más pesada, lo cierto es que la talla queda resuelta
de manera esbelta, consiguiendo un canon elegante y proporcionado.
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Mengíbar 2013
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