Este artículo que introduce a la Carta Eucarística del P. Juan Pedro ...

desarrollarse “en amor puro”.
• El desasimiento en el sentido de la pobreza evangélica: no ser
esclavos de nada, ni de los valores espirituales, ni de otros, como la
salud, la vida, la honra (una especie de culto de la personalidad,
fuertemente experimentado en el ambiente social de la Santa), sino
tener una completa libertad de espíritu para gozar de una
“disponibilidad total” para con Dios: (“darnos todas al Todo”).
• La humildad, entendida en su sentido original y profundo, como una
actitud radical de búsqueda de la verdad: “andar en verdad”, tanto
ante Dios, como ante los demás y para con nosotros mismos.
Estas tres virtudes colocan la vida ascética en los tres planos de la
vida humana: relaciones con los demás (amor); con las cosas y los
valores del mundo, (desasimiento) y con nosotros mismos
(humildad).
Como complemento de este tríptico, Sta. Teresa habla con insistencia
de la virtud de la fortaleza, convencida de que la vida cristiana exige
magnanimidad y heroísmo, y que cada uno, por lo menos una vez en
la vida, tenemos que adoptar una decisión radical, (una “determinada
determinación”), capaz de afectar lo más profundo de la persona y de
dar paso a la “conversión”. (25)
La Venerable Ana de Jesús, (1545-1621), compañera de Sta. Teresa
de la primera hora, y fundadora del primer Carmelo Reformado de
Francia en 1604, es quien asegura la edición de las principales obras
de la Fundadora, las de la prosa mística del Siglo de Oro de la
literatura española, con el concurso inestimable del agustino Fray Luis
de León. (26)
b) San Juan de la Cruz.
San Juan de la Cruz, (1542-1591), se asocia a la obra reformadora
de Sta. Teresa, contribuyendo a la reforma en los conventos de
varones. En medio de las contradicciones, y hasta la prisión en
Toledo, vive en profunda intimidad su encuentro de amor con Cristo,
frutos místicos del cual son sus poesías “Cántico Espiritual”, “Noche
oscura del alma” y “Llama de amor viva”, entre las más conocidas, y
la obra en prosa, que sirve fundamentalmente de comentario a
aquéllas.
Algunos factores de base ayudan a entender su obra escrita, que es
relativamente breve, (en total, unas mil páginas):
• Expresa honda preparación doctrinal, bíblica, teológica, filosófica,
artística, conseguida en los años de Medina del Campo con los
jesuitas, y en la Universidad de Salamanca, y en el estudio y la
reflexión personales.