dic. 1973 - Publicaciones Periódicas del Uruguay

la obra que acababa de publicarse: Jlotivos ele Proteo. Fue necesario,
parecería, esperar varios años para que el "Pequeño libro
azul" que tantos ecos había levantado en A.mérica Latina, fuera propuesto
a la lectura de nuestros compatriotas en su propia lengua. Sin
embargo ya había antecedentes; el primero, en 1912, dos años antes
que el mismo fenómeno se produjera en San José de Costa Rica (22),
la publicación en lengua española se produjo en París en una revista
titulada A.riel, dirigida por Alejandro Sux y se definía como "revista
de arte libre". En 1918, Francis de :riIiomandre, traductor de
talento, publicaba en la capital francesa, Páginas escogidas del escritor
uruguayo (d. Rodríguez lVlonegal, op., cit., p. 1;326). Un fragmente-
del Ariel de Rodó, traducido al francés 1)01' .J. F. J uge, ya
había aparecido en el Boletín ele la Biblioteca americana, París, noviembre
de 1913, cuando el 20 de junio de 1914 Jules Supervielle
anunció a Rodó la próxima publicación de una traducción completa
de A.riel, editada bajo los l\.uspicios de la "A.grupación de Universidades
y Escuelas Superiores Francesas". Supervielle se excusaba de]
retraso de esta publicación debido a la enfermedad del traductor. La
"Agrupación" que durante largos años jugó un rol extremadamente
importante para tejer los lazos entre la Universidad Francesa y América
Latina, comenzó de cierta forma a realizar el trabajo de propaganda
"latina" que había efectuado para los estudiantes de Méjico
la "Escuela Nacional Preparatoria en 1908"(23). La traducción
hecha bajo los auspicios de la "Agrupación" no es mencionada por
Emir Rodríguez lVlonegal en su lista de traducciones francesas de
Rodó (24), pero parecería qne no se puede dudar de su existencia
si nos atenemos a los términos de la carta de Jules Supervielle(25).
Es probable que el traductor fuera J. F. Juge, porque una carta de
Hugo D. Barbagelata fechada el 19 ele julio de 1914, escrita no ya
en París, sino en lVlontevideo, donde el joven estudiante IUl;..bía vuelto
por algunos meses, nos incita a ello.
Hugo D. Barbagelata, al mismo tiempo que retrasmite a Rodó
los saludos que le han enviado por carta Alcides l\.rguedes y Francisco
García Calderón, expresa su alegría al enterarse que en un
diario se hacía referencia a la traducción de Ariel hecha por J uge (26) .
Si no se tratara de la traducción del fragmento de An:el aparecida
en noviembre de 1913. -la fecha en la cual escribe HuQ.'o D. Barbagelata
nos hace duda~'- aparentemente se trata de Ul~á traducción
g'lobal del libro. Pero ..:-iriel no fue solamente traducido en Francia
~n 1914. En París, en este mismo año, un editor que no era üllendorff
se preparaba a publicar el texto español junto con los ensayos
(22) En junio de 1914, Rodó escribió un prólogo titulado "El nuevo Ariel"
para la Revista Ariel de San José. eL Obras completas, Ed. Aguilar,
p. 1597.
(23) Porfirio Parra, director de "La Escuela 1\ol'lual Preparatoria" de
l\Iéjico, hizo imprimir Ariel y organizó su difusión pedagógica. CL
Archiyo Rodó, Cartas del 29 de setiembre de 1908 y 13 de enero de
1909.
(24) Ob, Cit.. ]J. 1525.
(25) CL ArchiYo Rodó. D. l\. Montevideo, Ser: n. Un: 43. En la misma
carta Jules Supervieile anuncia también como próxima la publicación¡](c'
la traducción de Motivos de Proteo.
(26) Archivo Rodó, B. 1\. Montevideo.
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