You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
Mal trabado<br />
B¡en trabado<br />
Fig.32<br />
Un error común cometido por muchos afiladores es el<br />
de hacer llegar el trabado demasiado abajo del diente para las<br />
sierras partidoras, dándole demasiado bisel a la punta de modo<br />
que dos dientes quedan como si fueran compuestos de un<br />
par de clavos divergeQtes. Esas puntas no cortan la madera<br />
sino que la desgarran y ocasionan vibraciones, frotamiento, y<br />
como consecuencia, en muchas oportunidades trizacluras en la<br />
sierra. Cuando se traba una sierra partidora debe hacerse en<br />
la punta y afilarse en tal forma que la cara del diente quede a<br />
escuadra con el cuerpo de la sierra. El diente no debe quedar<br />
trabado a tal punto que deje una parte sin cortar, en el fondo<br />
de la ranura de corte. Fig. 32.<br />
Para trabar debidamente una sierra partidora, deben doblarse<br />
fuertemente los dientes en el vértice de un yunque o con<br />
un trabador de vástago cerca de la punta.<br />
Puede obtenerse un corte liso y bien hecho, con avance<br />
rápido, empleando una sierra partidora con dientes recalcados,<br />
siempre que éstos estén cuidadosamente recalcados,<br />
igualados y afilados. Las demás condiciones deben también,<br />
desde luego, atenderse al igual que para las sierras de grandes<br />
diámetros; el eje de la sierra no debe tener juego radial ni longitudinal,<br />
la sierra debe estar bien nivelada y centrada, con la<br />
tensión adecuada para la velocidad a que gira. Los. collarines<br />
también deben tener sus caras en la forma que indicamos para<br />
56