Historia oral, trauma y tabú
Historia oral, trauma y tabú
Historia oral, trauma y tabú
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
1<br />
i<br />
~<br />
Wendy Rickard<br />
de la modificación de la respuesta social frente al <strong>trauma</strong> en la historia. Desde finales<br />
del siglo XIX,el <strong>trauma</strong> se ha considerado en gran parte como un problema médico<br />
o religioso. Era algo que se debía tratar y frente a lo cual se debía reaccionar en el<br />
marco de intimidad y confidencialidad de la vida familiar o quizá con el sacerdote<br />
local, por un lado, y por el otro, en el contexto de la atención médica o de salud mental<br />
profesional. Más recientemente, hemos asistido a una "desmedicalización" de las<br />
preocupaciones traumáticas en ciertos ámbitos, pero se ha mantenido el concepto<br />
de profesionalización en el ámbito terapéutico. En palabras de Nigel Hunt e Jan<br />
Robbins: "En el siglo pasado, al menos en la sociedad occidental, pasó a ser tarea de<br />
los psicólogos narrar las historias de los <strong>trauma</strong>s, a menudo en nombre de la víctima.<br />
Si bien el tratamiento del <strong>trauma</strong> ha ofrecido recursos para reducir los síntomas<br />
en las víctimas, también ha tenido efectos negativos al arrebatarles la responsabilidad<br />
de los problemas, medicalizándolos y patologizándolos". Esta tendencia ha ido<br />
unida a una segmentación y a una especialización, pero algunos comentaristas apuntan<br />
que éstas ahora se están erosionando, y ponen en peligro los límites que antes<br />
garantizaban una estabilidad y seguridad.<br />
Algunas historiadoras <strong>oral</strong>es feministas afirman que "la historia <strong>oral</strong> se ha convertido<br />
en una extensión casi natural de la práctica de la autoconciencia [conciousness<br />
raising]". Las reacciones de las personas que he transcrito parecen indicar que la historia<br />
<strong>oral</strong> permite devolver en cierto sentido el <strong>trauma</strong> al ámbito público. A continuación<br />
voy a exponer una de las muchas manifestaciones de este proceso que ha sido<br />
posible observar a ]0 largo de la década de los noventa. La crisis del SIDA y los progresos<br />
del movimiento en favor de los derechos en relación con la prostitución son<br />
ejemplos claros de plataformas para una reelaboración de las ideas sobre las posibles<br />
maneras de enfocar los <strong>trauma</strong>s y los tabúes. En el Reino Unido, como en muchos otros<br />
países de todo el mundo, las personas con VIH y SIDAhan explorado diferentes experiencias<br />
de reafirmación, desde los primeros enfoques basados en la autoayuda hasta<br />
organismos innovadores como la Fundación Terence Higgins y Body Positive, el montaje<br />
fotográfico "Positive Lives", el proyecto de la colcha de retales y de los nombres<br />
(Aids Quilt and Names project), y trabajos autobiográficos individuales. Elproyecto de<br />
la colcha de retales conmemordtiva, "Aids Memorial Quilt", ha llegado a ser el proyecto<br />
continuado de arte comunitario más amplio del mundo, a partir de una idea surgida<br />
en el verano de 1987 en San Francisco. Su objetivo es ofrecer un medio de expresión<br />
positivo y creativo a las personas cuya vida se ha visto afectada por la epidemia,<br />
recordando los nombres y las vidas que se esconden detrás de las estadísticas. También<br />
se propone servir como instrumento pedagógico dirigido a la opinión pública en general:<br />
una conmemoración personal y finalmente pública, potente y digna.<br />
Elmovimiento internacional en favor de los derechos de las prostitutas está empezando<br />
a considerar empresas análogas; existe el plan de realizar una cuerda de tender<br />
ropa conmemorativa con una hilera de fundas de cojín bordadas para recordar<br />
a las trabajadoras sexuales muertas víctimas de la violencia, que, inevitablemente,<br />
invoca una existencia estigmatizada dentro de la sociedad. Por lo tanto, existe una<br />
i t<br />
!<br />
<strong>Historia</strong> <strong>oral</strong>, <strong>trauma</strong> y tabú<br />
perspectiva desde la cual cuando el fenómeno del <strong>trauma</strong> comienza a perder la categoría<br />
de angustia privada y a atraer una actividad creativa propia, la reducción psi-<br />
i¡<br />
¡<br />
!<br />
,<br />
¡ ¡<br />
coanalítica pierde parte de su impronta. Asimismo, en contra de la abundante bibliografía<br />
antes citada que se propone sanear las experiencias traumáticas asociadas a la<br />
entrevista para las personas entrevistadas y mitigar su impacto, también se ha observado<br />
que una parte esencial del proceso es, por el contrario, que el entrevistador<br />
mismo sea testigo del <strong>trauma</strong> de los recuerdos dolorosos. DavidJones declaró a propósito<br />
de sus entrevistas con problemas de salud mental: "Es posible que el malestar<br />
experimentado por el entrevistador sea una parte terriblemente importante de la<br />
comunicación. Evitar ese sufrimiento a los entrevistadores podría equivaler tal vez<br />
sencillamente a su distanciamiento de la conversación y la comunicación".<br />
Los hechos citados por las personas entrevistadas sugieren que el contexto de<br />
la entrevista está experimentando claramente un cambio en lo que respecta a los<br />
tabúes sexuales para todos los historiadores <strong>oral</strong>es. Otros autores lo corroboran. Por<br />
ejemplo, JO Stanley comentÓ a propósito de sus entrevistas con personas con una<br />
participación activa en el Partido Comunista: "Hay una camarada anciana y rica que<br />
ha entregado su fortuna y su vida al partido. Su sobrina feminista quería escribir su<br />
biografía. La familia se negó a cooperar y uno de los motivos fue al parecer su actitud<br />
con respecto al lesbianismo. En cambio, este verano pude ver la colcha conmemorativa<br />
del SIDA. En uno de los múltiples recuadros bordados que recuerdan a las<br />
personas muertas figuraban los símbolos de un hombre cuyos intereses estaban representados<br />
por una hoz y un martillo con las palabras "Joven Liga Comunista" debajo<br />
y un par de tacones de aguja rojos. Su esquela funeraria ocupÓ un lugar destacado<br />
en la prensa del partido. Este nuevo clima, en el que los camaradas mezclan abiel1amente<br />
su vida política con el travestismo permite pensar que en el futuro empezarán<br />
a aparecer biografías muy distintas".<br />
EXPRESIÓN<br />
PÚBLICA DE TEMAS TABÚ<br />
Las personas entrevistadas dejaron entrever que también existen una serie de<br />
riesgos potenciales asociados al hecho de permitir ]a consulta pública de sus cintas<br />
en un archivo nacional, aunque se impongan condiciones en materia de derechos<br />
de autor y restricciones de acceso. Su principal preocupación era su posible impacto<br />
sobre sus amistades y familiares. Ladecisión de permitir que las amistades y familiares<br />
escuchen las cintas y las implicaciones de revelar que uno se ha prestado a ser<br />
entrevistado se describieron como difíciles en ambos casos. Anna inició la siguiente<br />
discusión<br />
en el grupo:<br />
Me siento rara cuando le hablo de ello a la gente. Lo he hecho [lo ba comentado<br />
con personas amigas] tres o cuatro veces. Luego pensé, cállate, estás hablando<br />
demasiado, porque la gente se vuelve muy curiosa... a veces no estás demasiado segura<br />
de a qué viene tanto interés. De alguna manera, en el caso de algunas personas,<br />
te dices que ni hablar.<br />
129