09.01.2015 Views

Nº 4, Junio 1996 - Facultad de Ciencias Sociales - Universidad de ...

Nº 4, Junio 1996 - Facultad de Ciencias Sociales - Universidad de ...

Nº 4, Junio 1996 - Facultad de Ciencias Sociales - Universidad de ...

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

murieron, refiriendo las palabras que <strong>de</strong>cían. Hízoles muy <strong>de</strong> nuevo ver en indios y más en infieles tan cordial <strong>de</strong>voción” (88).<br />

Aquí nos encontramos con uno <strong>de</strong> los temas más centrales <strong>de</strong> la evangelización: la relevancia total que tiene la salvación <strong>de</strong> las almas por sobre la<br />

salvación <strong>de</strong> los cuerpos, don<strong>de</strong> lo que importa no es la muerte (física), sino bajo qué condición se muere (el estado <strong>de</strong>l espíritu). Ésta será una <strong>de</strong><br />

las materias que abordaremos más a<strong>de</strong>lante en un capítulo especial.<br />

El balance que hizo el historiador Pedro Lozano <strong>de</strong> esta primera visita a las tierras <strong>de</strong> la Araucanía es el siguiente:<br />

"Era increíble el concurso <strong>de</strong> los Españoles a oír sus pláticas y doctrina, y no menor el <strong>de</strong> los indios al catecismo, atraídos <strong>de</strong> la suavidad<br />

elocuente con que la explicaban en su idioma nativo, y se juntaban comúnmente a la doctrina cuando menos 1.500, y las más veces pasaban <strong>de</strong><br />

dos mil: cosa hasta entonces jamás vista en el país; y para que el ministerio fuera permanente, mandó, por auto, el venerable prelado Don<br />

Agustín Cisneros, Obispo <strong>de</strong> la Imperial, que se practicasen todos los párrocos <strong>de</strong> su diócesis este ejercicio <strong>de</strong> catecismo en aquella lengua, con<br />

utilidad notoria <strong>de</strong> los indios que habían vivido ajenos al conocimiento <strong>de</strong> Dios, y conociéndole por este medio, le empezaron a servir con<br />

fervor" (89).<br />

Enrich nos dice, por su parte, que a los mapuches les administraron el bautismo en especial a los párvulos, a los ancianos y a los enfermos, y que<br />

por el manejo <strong>de</strong> la lengua aborigen:<br />

"...corrió veloz la fama <strong>de</strong> su elocuencia... y fue tal la emoción, que asistían a los sermones mil doscientos, mil quinientos y a veces dos mil<br />

personas, a pesar <strong>de</strong> vivir repartidos por los valles y la costa, sin formar un solo grupo <strong>de</strong> doce ranchos o chozas” (90).<br />

Esta primera incursión <strong>de</strong> los misioneros jesuitas en tierra mapuche ha sido calificada <strong>de</strong> más política que misionera. El gobernador quería<br />

aprovecharse <strong>de</strong>l prestigio ganado por los jesuitas en los territorios <strong>de</strong>l norte en su trato con los indígenas y así "<strong>de</strong>terminaron servirse <strong>de</strong> ellos,<br />

para aquietar a los alzados y afianzar la paz en el país. Cuarenta años <strong>de</strong> guerra sangrienta, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la muerte <strong>de</strong> Valdivla, habían<br />

<strong>de</strong>mostrado la ineficacia <strong>de</strong> las armas, para rendir una nación valiente y resuelta como la araucana; por lo cual la corte <strong>de</strong> Madrid resolvió<br />

tentar otros arbitrios en or<strong>de</strong>n a conseguir el mismo fin" (91). A <strong>de</strong>cir verdad, esta última afirmación <strong>de</strong> Enrich tendrá más sentido en los años<br />

posteriores.<br />

A fines <strong>de</strong> 1597 la obra misionera en la Araucanía fue apoyada por el padre Luis <strong>de</strong> Valdivia -recor<strong>de</strong>mos que había asumido como Rector en<br />

1594- y el hermano Miguel <strong>de</strong> Teleña (92); en tanto el padre Vega volvió a Santiago. El objetivo era<br />

" ... ver si había comodidad para asentar alguna resi<strong>de</strong>ncia o en Santa Cruz don<strong>de</strong> pedía el gobernador, o en Osorno, o no habiendo comodidad,<br />

si se proseguiría con la misión que prometía más fruto aún <strong>de</strong>l que se había cogido... Anduvo el Padre Rector todas las ciuda<strong>de</strong>s que nosotros,<br />

excepto Arauco y Valdivia... y aunque el Padre Rector iba <strong>de</strong> paso por las ciuda<strong>de</strong>s por llevar el blanco puesto en Osorno, más en poco hacía<br />

mucho, porque la brevedad <strong>de</strong>l tiempo suplía con el fervor, celo y <strong>de</strong>voción, que todo es en perfecto grado" (93).<br />

Los misioneros se aplicaron con tal celo a su quehacer que, según Enrich:<br />

"Setenta mil indios, entre párvulos y adultos... recibieron el santo bautismo en los siete meses que... emplearon en evangelizar aquellos infieles. A

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!